Puntos Destacados

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• Los enfoques de reducción de daños ayudan a reducir ciertos problemas de salud y seguridad asociados al consumo de drogas.¹ Como el modelo de atención al consumo de sustancias distinto del tratamiento o el apoyo a la recuperación,² la reducción de daños fue creada por y para las personas que consumen drogas³ para mejorar la salud y el bienestar, incluso durante el consumo activo de drogas. Entre las estrategias de reducción de daños bien estudiadas se encuentran los servicios de jeringas y los programas de distribución de naloxona.
• Décadas de investigación han demostrado que algunas estrategias de reducción de daños proporcionan importantes beneficios para la salud individual y la salud pública,^4,5,6 incluyendo la prevención de muertes por sobredosis y la prevención de la transmisión de enfermedades infecciosas entre las personas que consumen drogas y el resto de la comunidad. Algunas estrategias reducen las visitas a los servicios de urgencias y los servicios sanitarios de alto coste,^7,8 a la vez que, en algunos casos, ofrecen a las personas que consumen drogas la oportunidad de acceder a un tratamiento para el consumo de sustancias^9,10 y a otros servicios sanitarios¹⁰ en ambientes que están relativamente libres de cualquier estigma.
• El NIDA apoya la investigación(en inglés) sobre cómo aplicar mejor las estrategias de reducción de daños comprobadas y sobre cómo explorar la eficacia de los enfoques nuevos y emergentes, especialmente en los escenarios con problemas de recursos.