Sociedades Mercantiles
Sociedades Mercantiles
Sociedades Mercantiles
1. Concepto y clasificación
2. Constitución, administración y vigilancia
3. Sociedades mercantiles de hecho, irregulares y de objeto ilícito
4. Reservas legales
5. Utilidades repartibles
6. Disolución y liquidación de las sociedades mercantiles
7. Fusión y transformación de las sociedades mercantiles
8. Consolidación y escisión de las sociedades mercantiles
9. Sociedad anónima
10. Sociedad de responsabilidad limitada
11. Sociedades cooperativas
12. Franquicias, mediación o corretaje
1.- CONCEPTO
La sociedad mercantil es una asociación de personas, de acuerdo con nuestro
derecho la Sociedad Mercantil nace o surge ala vida jurídica como consecuencia de un
contrato. Es un contrato sui generis en virtud del cual dos personas o más combinan
sus recursos y sus esfuerzos para la realización de un fin común preponderantemente
económico y de especulación mercantil.
Se distinguen en las siguientes: Voluntarias, Estatutarias y Legales en las voluntarias los socios fijan al momento
de constituirse la sociedad cada término del ejercicio social determinando el porcentaje que se vaya a dicho
fondo, y nunca serán menores del 5%.
Se les denomina Estatutarias a aquellas reservas que los socios han convenido también al momento de
constituir la sociedad, pero que se plasman en los estatutos que rigen la vida de éstas y desde luego, no deban
ser inferiores al 5%
Las legales son aquellas que la ley fija cuando no hay convenio por parte de los socios, estableciendo el 5% de
la utilidad para integrarse a dicho fondo.
Clasificación de las causas de disolución.- Teniendo en cuenta la fuente de que se derivan, podemos dividir las
causas de disolución en legales y voluntarias. Llamamos causas legales a las establecidas por la Ley General
de Sociedades mercantiles; son causas voluntarias las que derivan de supuestos no previstos por la ley pero
considerados por los socios en el contrato constitutivo.
Liquidación.- Las operaciones necesarias para concluir los negocios pendientes a cargo de la sociedad, para
cobrar lo que a la misma se adeuda, para pagar lo que ella deba, para vender todo el activo y transformarlo en
dinero constante y para dividir entre los socios el patrimonio que así resulte.
En consecuencia puede decirse que la liquidación de las sociedades mercantiles se practicará, ante todo, de
acuerdo con lo dispuesto en los estatutos; en segundo lugar, conforme a lo convenido por los socios en el
momento de acordar la disolución y liquidación, y tercero, por las normas supletorias de la ley, bien entendido
que los derechos de los acreedores, el interés público, así como los preceptos imperativos que la propia ley
señala están por encima de las normas que resultan indicadas en el orden anterior.
La fusión acordada no producirá efecto sino tres meses después de haber sido inscrita en el Régimen de
comercio. Durante tal plazo, los acreedores de las sociedades fusionadas podrán oponerse judicialmente a la
fusión, cuyos efectos se suspenderán hasta que cause ejecutoria la sentencia que declare que la oposición es
infundada.
El número de socios mínimo en las cooperativas es de diez. No hay número máximo de socios. Las
cooperativos son sociedades mercantiles por su forma. Esto es, son comerciantes y están sometidas a la
legislación mercantil en todo lo que no está previsto expresamente por las deposiciones especiales sobre
cooperativas. No podrán tener propósitos de lucro, no debe confundirse el ánimo de lucro con la persecución de
una finalidad económica.
Por otro lado, debe distinguirse entre el propósito de los socios y las finalidades de la sociedad. Los socios, al
ingresar en la cooperativa, persiguen una finalidad netamente económica; la sociedad, por disposición de la ley,
no ha de tender a la obtención de beneficios, sino a la satisfacción directa de las necesidades económicas de
los socios.
La denominación deberá ser distinta de la de cualquiera otra y se formará con referencia objetiva a la actividad
cooperativa.