Estrés Calórico en Aves Memorias
Estrés Calórico en Aves Memorias
Estrés Calórico en Aves Memorias
Las aves de hoy poseen un grado de desarrollo genético impensable hace unos años, lo que
las hace más sensibles, a un manejo no adecuado, a instalaciones pobres y a las
variaciones del medio ambiente.
Una gallina hoy en día, no es un ave que esporádicamente pone un huevo como antes, sino
un ave bien compleja que está seleccionada genéticamente después de varios años para
producir casi 1 huevo diario.
Es normal encontrar hoy lotes de gallinas que ponen hasta 360 huevos anualmente.
Observamos como día tras día hay un incremento los huevos ave alojada HAA, con aves de
menor peso corporal, con un menor consumo de alimento, con una mejor conversión
alimenticia, un mayor número de huevos comercialmente útiles, menor rotura de huevos y
mayor precocidad.
En cuanto a los broilers, cada día se observan mejores resultados zootécnicos, lo que hace
que sean más susceptibles a todas las variables externas independientes de la genética,
pero dependientes del hombre, como son las construcciones, el alimento, el manejo, el
medio ambiente y la bioseguridad.
En condiciones medio ambientales normales las aves mantienen su equilibrio con el medio
ambiente, sin embargo, al variar la temperatura las aves tendrán que compensar dichas
variaciones por arriba o por debajo de su zona de confort térmico.
En la tabla 1 se expresan los diferentes sucesos fisiológicos en las aves a medida que la
temperatura ambiental va variando
Como puede observarse el rango ideal de temperatura ambiental para las aves oscila entre
18 y 24 °C y el rango neutral oscila entre 13 y 24°C; temperaturas arriba o abajo de este
rango implican para el ave encender su mecanismo de termoregulación con los
consiguientes cambios metabólicos para compensar dichas variaciones.
2
El consum o de alim ento se reduce aún m ás. Las ganancias de peso son
m enores. El tam año del huevo y la calidad de la cáscara se deterioran. La
29°C – 32°C producción de huevo usualm ente sufre. Procedim ientos para el enfriam iento
deben iniciarse antes de llegar a este rango de tem peraturas.
Anderson, K 1997
Las aves son muy sensibles a los brotes de calor, y no pueden soportar las temperaturas
extremas por mucho tiempo; esto se debe a que las gallinas no pueden sudar y no tienen las
glándulas para sudar. Adicionalmente a esto, las aves están cubiertas con plumas, lo que les
dificulta disipar el calor que se genera dentro de su cuerpo y el que viene de afuera.
Entre todas las actividades avícolas las gallinas pueden sufrir más, ya que la mayoría de las
instalaciones en las granjas de hoy, son muy automáticas o por lo menos éstas tienden a ser
alojadas en jaulas.
Las gallinas en las jaulas dependen totalmente del funcionamiento correcto de los equipos
automáticos de ventilación para disipar el calor de su cuerpo.
Con los cambios genéticos, y tipos de instalaciones y jaulas, las gallinas han perdido su
resistencia al calor extremo.
A medida que la temperatura corporal del ave aumenta, el consumo del alimento,
crecimiento, eficacia alimenticia, viabilidad, calidad de la cáscara del huevo y del mismo
pollito tienden a disminuir.
El anterior problema es particularmente severo cuando la temperatura ambiental sube, ya
que la posibilidad de perder calor por medios no evaporativos (la perdida de calor a través de
la piel) se reduce notablemente.
La temperatura interna de una ave adulta es alrededor de 104°F - 107ºF equivalente a 40°C
- 41,66°C, si dicha temperatura interna llega a 110°F -114 ºF equivalente a 43,3°C - 45,6°C,
el ave está en peligro de muerte.
Las aves adultas resisten mucho mejor al frío que al calor, ya que la temperatura interna de
las gallinas puede bajar a 75 ºF (23,9 °C) y seguir vivas.
3
Debido a lo anterior es muy importante saber como manejar estos dos factores, es
decir cuando hay mucha humedad en las áreas tropicales como a media noche no
utilizar las paredes húmedas, ni los foggers humidificantes o aspersores y dar más
ventilación, y en el medio del día cuando hay mucho menos humedad y más calor,
utilizar al máximo la ventilación y utilizar los aspersores, foggers y paredes húmedas.
4
Cuando las aves están expuestas a altas temperaturas ambientales, el calor corporal se
incrementa debido a la combinación de las altas temperaturas externas y de la energía
asociada con la activación del proceso metabólico requerido para la disipación del calor
corporal; esta disipación del calor se ve incrementada por la posición que debe adoptar el
ave para aumentar el área de la superficie vascular por vasodilatación, causando un
incremento en el consumo de agua y una aceleración en el ritmo respiratorio.
Esta aceleración respiratoria en las aves es particularmente importante ya que la
evaporación de agua se vuelve un medio importante de disipación de calor;
desafortunadamente, este enfriamiento evaporativo sólo logra reducir el calor corporal en
una pequeña proporción.
Wiernusz 1999
La zona de comodidad de las aves disminuye a medida que avanzan en edad y crecen.
Las razas más pesadas tienden a tener más problemas con el estrés calórico ya que tienen
menos área superficial para disipar calor por unidad de peso. Otra variable que ejerce
influencia sobre la susceptibilidad al estrés calórico es la exposición previa de las aves a
este estrés.
Está demostrado que la capacidad de las aves para sobrevivir a los cambios bruscos de
temperatura y humedad relativa, que desembocan en un estrés calórico se incrementa
cuando son expuestas previamente a esta situación; esta aclimatación, es comparable
cuando la temperatura corporal de un ave aclimatada es más baja que la de las aves no
aclimatadas durante estrés calórico.
Parte de la respuesta de aclimatarse se atribuye a la reducción del consumo de alimento. Al
aclimatar las aves, éstas logran repartir su producción calórica diaria hacia los momentos
más frescos del día.
M é to d o s d e P e rd id a d e C a lo r S e n s ib le
F lu jo d e e n e rg ía té rm ic a a L a d ire c c ió n d e la tra n s fe re n c ia d e e n e rg ía d e p e n d e d e l
tra v é s d e u n m e d io o e n tre g ra d ie n te d e te m p e ra tu ra ; e l c a lo r s e m u e v e d e la s
C o n d u c c ió n dos o b je to s en c o n ta c to á r e a s d e te m p e r a tu r a a lta h a c ía la s d e te m p e r a tu r a
fís ic o , b a ja .
F lu jo d e c a lo r a tra v é s d e u n
m e d io flu id o c o m o e l a ire . L a L a tra n s fe re n c ia d e e n e rg ía h a c ía e l a ire d e p e n d e d e la
e n e rg ía té rm ic a s e m u e v e te m p e ra tu ra y d e l m o v im ie n to d e a ire a tra v é s d e la
p o r c o n d u c c ió n e n tre u n a s u p e rfic ie d e la p ie l; e l c a lo r s e tr a n s fie r e a l a ir e
C o n v e c c ió n s u p e rfic ie s ó lid a y la c a p a d e m o v ié n d o s e a tr a v é s d e la s u p e r fic ie d e la p ie l s i e l
a ire p ró x im a a la s u p e rfic ie y a ir e e s ta a u n a te m p e r a tu r a m á s b a ja q u e la d e la
e s re m o v id a p o r e l flu jo d e p ie l.
a ire s o b re la s u p e rfic ie .
M é to d o d e P e rd id a d e C a lo r L a te n te
E s la tra n s fe re n c ia d e c a lo r L a tra n s fe re n c ia d e e n e rg ía e s in flu e n c ia d a p o r la
e n d o n d e u n liq u id o e s h u m e d a d re la tiv a , la te m p e ra tu ra y e l m o v im ie n to d e l
E v a p o ra c ió n c o n v e rtid o e n u n g a s . Se a ire ; e l c a lo r e s tr a n s fe r id o d e l c u e r p o d e l a n im a l a l
u tiliz a c a lo r. a g u a , c o n v ir tié n d o lo e n v a p o r d e a g u a .
Anderson, K 1997
Una vez que la temperatura ambiente sube a aproximadamente 25°C, el método de perdida
de calor empieza a cambiar de sensible a evaporación o latente como se muestra en la
Figura 3.
La disipación del calor corporal por un proceso de evaporación requiere un gasto de energía
por jadeo (hiperventilación) por parte del ave, el cual empieza a ocurrir a una temperatura
aproximada de 26.5°C.
100
80
Perdida de Calor (%)
60
25°C
40
20
0
4 38.00
Temperatura °C
Anderson, K 1997
6
Jadear entonces, es respirar con la boca abierta para refrescarse a través de la evaporación.
Esta es una reacción normal de las aves que quieren sobrevivir el brote de calor. Las
gallinas cuando están en su zona normal y en un ambiente termoneutral, respiran 25 veces
por minuto, sin embargo, cuando la temperatura pasa su límite, sienten mucho calor,
respiran mucho más y esto puede llegar a 250 veces por minuto y matarlas.
Normalmente las aves más pesadas y grandes y con mejor conformación son las que
mueren, ya que tienen un ritmo excelente de producción, más peso que causa más estrés y
aumenta el calor del cuerpo. Es interesante comentar que la mayoría de las aves que sufren
por los brotes de calor mueren en las noches. Es decir que las aves sufren en el día, no
pueden disipar el calor y como una esponja absorben todo el calor y mueren en la noche.
Los efectos del Golpe de Calor ó Estrés Calórico pueden ser disminuidos aplicando un plan
integral en la granja, que involucre todos lo aspectos en podrían influir en mejorar las
condiciones de las aves para afrontar dicho suceso. La estrategia debe incluir en primer
lugar, un plan completo de Bioseguridad, buscando mantener a las aves en muy buen
estado de salud, para poder enfrentar mejor el problema; en segundo lugar un plan de
manejo de Ventilación y Construcciones; en tercer lugar definir estrategias para el manejo
del Agua y por último un plan de Alimentación y de nutrición adecuados.
Pintar techos de blanco: Es muy útil pintar el techo con una pintura blanca para evitar la
radiación del sol.
Techos altos: Construir los galpones con techos altos de 4.27-4.88 metros en el centro, para
que la sensación de calor no llegue a las gallinas especialmente las que están en los pisos
más altos y cerca del techo. Mientras más distancia podemos permitir mejor.
Techo con Aislante: para bajar la intensidad de la radiación directa a las aves. La
temperatura debajo del techo sin aislante fácilmente puede llegar a más de 66 ºC en medio
del día cuando el sol es más caliente.
Galpones con Aleros largos: Para evitar los rayos directos del sol y la entrada de las lluvias
fuertes adentro del galpón, dejar por lo menos de 80 a 100 cm. de alero. Galpones más altas
deben tener aleros más largos.
7
Sembrar árboles de hojas verdes y grandes: Los árboles pueden brindar mucha sombra en
los techos, y crear un ambiente más fresco para las aves, pero deben sembrase de manera
que no interrumpan la ventilación.
Podar y limpiar: Podar las ramas de los árboles para que no obstruyan la ventilación por la
brisa.
No dejar objetos de metal alrededor de la casa para evitar la reflección adentro de esta.
Cortar la hierba siempre, ya que puede aumentar la humedad.
Ventilación Natural:
Los galpones con cortinas laterales dependen extensivamente del movimiento natural del
aire. Estos galpones funcionan mejor cuado están ubicados apartados de obstáculos como
otros edificios o árboles que puedan bloquear las corrientes de aire naturales. Para reducir
la dependencia del movimiento de aire natural la mayoría de los productores han instalado
ventiladores de de circulación para incrementar el movimiento de aire y promover la perdida
de calor de de las aves. Estos ventiladores deben ser espaciados y posicionados para
mantener el movimiento de aire entre ventiladores y para dirigir el flujo de una manera que
incremente el movimiento turbulento de aire alrededor de las aves.
Los ventiladores deben ser controlados por termostatos a una temperatura de 29°C (o mas
bajo en clima caliente). Para ahorrar energía los ventiladores se deben apagar por debajo
de esta temperatura ambiente excepto en periodos prolongados de calor cuando es
recomendable dejar los ventiladores operando durante la noche y apagándolos cuando la
temperatura llegue a 24°C. Esta práctica reducirá la temperatura interna más rápido y
generando un ambiente más fresco para que las aves pueda disipar el calor acumulado en
sus cuerpos.
Los aspersores reducen la temperatura del galpón en días calientes (32°C a 35°C) cuando la
humedad es baja, especialmente al medio día cuando los niveles de humedad relativa son
muy bajos y la temperatura muy alta. Los aspersores inyectan partículas muy finas de agua
dentro del aire caliente. A medida que el agua se evapora, el calor es extraído del aire
reduciendo su temperatura efectiva. Cuando se utilicen aspersores, estos se deben operar
intermitentemente o se deben diseñar para evitar un flujo excesivo de agua en el ambiente.
Si fluye mucha agua a través de los aspersores los niveles de humedad se pueden
incrementar hasta el punto de que las aves ya no se pueden refrescar por evaporación. En
adición, la gallinaza que se humedece demasiado por la aspersión pude ocasionar
problemas de desempeño y de salud. El flujo apropiado de agua a través de aspersores
varia dependiendo del método de ventilación, rata de ventilación, tamaño de las aves y
condiciones exteriores. Los sistemas de aspersión en galpones ventilados naturalmente
están diseñados típicamente para un flujo de 200 a 400 litros de agua por hora.
8
Los ventiladores deben instalarse cada 8 metros a lo largo del galpón, si van en media
espina de pescado para cubrir un ancho de galpón de 12 metros y cada 12 metros en doble
línea para cubrir el mismo ancho.
Entre todas las hileras de jaulas hay que instalar ventiladores para mover el aire entre los
pasillos.
Ventilación Forzada
En sistemas de ventilación forzada todo el movimiento de aire es producido por ventiladores
ubicados en las paredes de los galpones. Los galpones que utilizan este tipo de ventilación
también son referidos como sistemas de ambiente controlado. Estos galpones pueden
proveer flujos de aire buenos y uniformes durante condiciones de clima caliente si se
mantiene la presión estática adecuada y se evitan los obstáculos para la circulación del aire.
Es importante determinar la cantidad de aire que debe ser movido dentro del galpón. Esto
se puede lograr de dos maneras.
Los sistemas de presión negativos usan ventiladores de extracción para generar movimiento
de aire. El aire quieto es expulsado del galpón a una rata un poco más alta que aquella en
que el aire se permite entrar a través de los tubos de ventilación. Esto genera un vacío
parcial, causando que el aire entre al galpón a una velocidad alta. El incremento en
velocidad generan mas movimiento turbulento. Los sistemas de presión negativa están
diseñados para trabajar mejor con reducciones en presiones estáticas de 0.03 a 0.08
pulgadas de agua. Esta diferencia de presión induce el aire a viajar desde un lado del techo
hasta que se encuentre con aire del otro lado del techo, cuando las dos corrientes se
encuentran en el centro del galpón el aire baja creando turbulencia. El aire viaja entonces
hacia los ventiladores de extracción. Si la diferencia de presión es muy baja la velocidad del
aire se reduce cuando entra al galpón, en este caso el aire resultante baja al nivel del suelo y
viaja directamente hacia los ventiladores de extracción. De manera opuesta si la diferencia
de presión es mayor a 0.08 pulgadas de agua, la velocidad del aire que entra se aumenta,
pero el volumen de aire se restringe y la eficiencia es reducida por presión negativa en las
aspas de los ventiladores. Esta situación puede resultar en la formación bolsas de aire
quieto donde hay poco a ningún movimiento de aire, lo cual es perjudicial en condiciones de
verano. Las zonas de aire muerto se deben evitar ubicando apropiadamente el ingreso de
aire y manejado adecuadamente el sistema. La ubicación y orientación de los tubos de
entrada de aire son el factor más importante que influencia el patrón de flujo de aire dentro
del galpón.
Los sistemas de presión positiva utilizan ventiladores para inyectar aire fresco dentro del
galpón generando una presión levemente superior dentro del galpón. El aire contaminado
se deja escapar a través de tubos de exosto ubicados estratégicamente. El movimiento de
aire es controlado por mecanismos automáticos de control ambiental.
Ventilación de Túnel
Un nuevo concepto en la ventilación de galpones para avicultura es la ventilación por túnel.
Simplemente, este método consiste en mover aire a través del los ejes del galpón desde los
tubos de ingreso de aire hasta los ventiladores de extracción, generado altas velocidades de
flujo de aire. Este movimiento rápido de aire incrementa la perdida conectiva de calor
reduciendo la temperatura efectiva sentida por las aves. La Figura 2 muestra la temperatura
efectiva (sensación de frió) que el ave siente a una temperatura y velocidad del aire dada.
La mayoría de los beneficios de la ventilación por túnel ocurre a una velocidad de 1.8 m por
segundo.
9
15.0
0 0.508 1.016 1.524 2.032
Velocidad del Aire (m/s)
Anderson, K 1997
Esta velocidad debe ser considerada la mínima para la mayoría de galpones. Los sistemas
de ventilación por túnel no operan basados en diferencias de presión estática, en realidad
ellos trabajan mejor cuado no existe diferencia de presión entre los tubos de ingreso de aire
y los ventiladores de extracción.
Las cortinas de enfriamiento operan con el mismo principio de los aspersores excepto que el
aire pasa a través de cortinas húmedas cuando entra al galpón. Este método evita el
problema de camas húmedas que se encuentra a veces con los aspersores, permitiendo que
estas cortinas se utilicen de manera continua. Fibra de Aspen o celulosa corrugada son los
dos materiales mas utilizados en la elaboración de estas cortinas. Se requiere
mantenimiento continuo para mantener estas cortinas por un tiempo prolongado. Las
cortinas se deben permitir secar completamente una vez por día, se pueden secar
quitándoles el suministro de agua pero manteniendo los ventiladores encendidos. La mejor
hora para secar las cortinas es en las primeras horas de la mañana cuando la temperatura
es relativamente baja. El secamiento permite a la cortina mantener su integridad y previene
la formación de algas; se puede igualmente agregar un alguicida en el agua que humedece
las cortinas. Igualmente se puede agregar hipoclorito de calcio o clorato de amonio una vez
por semana. Se debe lavar las cortinas mensualmente para evitar la formación de
sedimento y remover el polvo. El sistema entero debe ser juagado una vez al mes para
evitar la formación de sales que se acumulan en los tanques y tuberías.
Sistemas de aspersión han sido igualmente utilizados con éxito en galpones con ambiente
controlado. Sistemas de aspersión que producen un roció muy fino y controlado y que tienen
10
La temperatura del agua de bebida no debe exceder los 24 ºC. El agua debe ser de calidad y
clorinada siempre a punta de niple entre 1-3 ppm de cloro.
La presión de los niples debe estar bien calculada para la edad, estado de tiempo y
producción. Hay que estar pendiente de como esta la presión de los niples y ajustarla
cuando sea necesario.
Para las pollas normalmente debe usarse menos presión en los niples para que el
agua salga más fácilmente. A medida que avanza la edad de las aves, hay que
incrementar para evitar el goteo de los bebederos por presión.
Se deben evitar presiones bajas para los bebederos de las gallinas adultas ya que el
exceso de agua cae en las gallinas trayendo moscas.
Mucho consumo de agua hace las heces más liquidas.
Todas las jaulas deben tener acceso a dos niples ya que si acaso uno se daña, las
gallinas en este sector no se deshidratan.
Asegurese que todos los niples están funcionando bien y las gallinas no tienen
dificultad para tomar agua.
Mantener un programa continuo para la limpieza de los bebedores para destapar los
niples. Es muy importante también hacer un flushing de los tubos en las horas más
calientes del día, para mover agua caliente en los tubos y reemplazarlos con agua
fresca.
Evite instalar los tubos debajo del techo, y arriba de la tierra expuestos al sol. Los
tubos deben estar bien enterrados para asegurar su temperatura.
Cada Galpón debe tener su propio medidor para medir el consumo diario de agua.
Estos datos deben registrarse y verse todos los días sin excepción.
Ayuno temporal: Comer en las horas más calientes del día puede ser mortal, ya que
digerir este alimento genera calor en las aves, agravando más la situación. Es
aconsejable que las gallinas no tengan alimento en los intestinos y no coman durante
el estrés de calor.
11
Esto significa que los comedores deben estar vacíos 1-2 horas antes del calor y 1
hora después. En algunos lugares donde hay varias horas de calor, las aves no
tienen acceso al alimento entre 6-8 horas. Con este método, las aves pueden comer
toda la tarde, la noche y la madrugada cumpliendo con los 16-17 horas de luz. Con
estas restricciones debemos asegurarnos de que los galpones tengan suficiente
espacio de comedores y luz.
Alimentar a media noche: Este sistema se usa en muchos lugares y puede ayudar a
mantener la producción a cualquier edad de las gallinas y no interfiere con su
madurez sexual. Este sistema también mejora la calidad del huevo y el color de la
cáscara. Esto es muy importante para mantener la calidad de la cáscara del huevo,
por estarse calcificando durante la noche y sabemos que el calor disminuye la
calidad de la cáscara. Podemos incluir 1½ a 2 horas de luz, 3 horas después que se
apagaron las luces.
Suplementación con Electrolitos y Vitaminas: Como las gallinas excretan más tomando más
agua, pierden algunas de las vitaminas, especialmente las solubles. Es aconsejable subir
10% más vitaminas en el alimento y agregarlas en el agua de beber y estas comienzan a
jadear, se cambia el pH de la sangre, y se cambia a alcalino. Por lo anterior, se recomienda
agregar sales como bicarbonatos de sodio o potasio, soluciones tipo titter etc.
Se ha utilizado la Suplementación en agua de bebida de multivitamínicos, electrolitos e
individualmente soluciones de titter y vitamina C; encontrando siempre en todos los casos
una mejora en el desempeño de las aves y en el manejo del estrés por calor. Los mejores
resultados los ha presentado el uso de una mezcla de solución de titter y vitamina C
Menos densidad: En los meses cuando hay mucho calor, si hay espacio disponible de jaulas
en los galpones por mortalidad o venta de algunas gallinas debajo del mismo techo, se
pueden mover algunas a otras filas aumentando el espacio de más de 400 cm2 x ave.
Más grasas: Las grasas cuando son digeridas, generan menos calorías, por esto en los
meses más calientes menos calorías pueden originarse de las grasas en vez de los cereales
Más aminoácidos: También los aminos ácidos sintéticos como lisina, o metionina pueden
reemplazar las proteínas, que cuestan más en digerirse y generan más calorías.
Cualquier práctica de manejo que incremente el consumo de nutrientes durante el estrés por
calor minimizará la caída en eficiencia productiva. Tres maneras fáciles de incrementar el
consumo de nutrientes son incrementar la densidad de nutrientes, aprovechar los
incrementos naturales de alimento durante algunas horas del día y ajustar los ventiladores
para que enfríen más durante la noche.
Una segunda alternativa es el alimentar las aves a las horas cuando el consumo de alimento
es el más alto. El ciclo luz-oscuridad resulta en una curva de consumo de alimento en forma
de “U”. Brevemente después de que aparece la luz el consumo de alimento es alto,
gradualmente se reduce durante el día y se incrementa alrededor de 1 hora antes de apagar
las luces. Si las aves se alimentan durante las horas frescas del día el consumo se
incrementa. Las aves no deben ser alimentadas en las tardes durante periodos de clima
caliente pues esto incrementa la cantidad de calor corporal que deben disipar,
12
incrementándose el potencial de postración por calor. Los cambios abruptos en las horas de
alimentación deben ser evitados.
Una tercera técnica es el enfriar las aves lo más posible durante la noche. Las gallinas o
pollos de engorde tienden a acumular calor corporal durante los periodos largos de clima
caliente. Si su temperatura se puede reducir durante la noche, las aves van a ser capaces
de más alimento en las primeras horas de la mañana. El galpón puede enfriarse durante la
noche poniendo los termostatos para que los ventiladores funcionen hasta que la
temperatura interna del galpón llegue a los 24°C (18°C para aves maduras).
Bibliografía.
• Amandeep , S. (2000). Effect of dietary Potassium chloride and Sodium Bicarbonate in combating heat
stress in Broilers chickens. Punjab Agriculture University. India.
• Anderson, K .1997. Hot Weather Management in Poultry. Technical Bulletin. North Carolina State
University. Extensión Departrment.
• Angulo, Ivan. Manejo Nutricional de Aves bajo condiciones de estrés térmicos. Fonaiap-Ceniap.
Maracay. Venezuela.1991
• Aparecido S. , Maiorka A. y Silva, A.V.; Fisiología del estrés calórico y utilización de electrolitos en pollos
de engorde. Universidad federal de Paraná. Brasil. 2001.
• Breeders, Ross (1997). Manejo de las reproductoras en climas calientes. Rev. Industria Avícola. 44(6)
• Boushy y Van Marlen (1981). Efecto del clima sobre la población de las aves, los trópicos y su
mejoramiento 38:19.
• Cokshott, Ian. Manejo del Pollo de carne y de los reproductores en zonas de clima cálido. Aviagen-
Ross. 2004
• Donald, J. 1999. Operating a tunnel-ventilated broiler house in different weather conditions. World
Poultry, Vol. 15, No 11, p. 34.
• Donald, J. Poultry Ventilation Pointer. Alabama Cooperative Extensión System. Auburn University.
USA. 2000
• Estrada, M. y Márquez, S.; Interacción de los factores ambientales con la respuesta del comportamiento
productivo en pollos de engorde. Universidad de Antioquia, Facultad de Ciencias Agrarias. Medellín.(En
proceso de publicación)
• Guía de Ventilación Avícola. Airetecnica S.A. boletín técnico. Cali. Colombia.
• Grieve, D. Estrés por calor en las aves reproductoras y ponedoras comerciales. Boletín técnico Hy Line
INTERNACIONAL. USA. 2003
• Lecha, L. B.; Paz, L. R. y Lapinel, B. 1994. El Clima de Cuba. Instituto de Meteorología. Editorial
Academia, La Habana, Cuba.
• Lahoz, David. Control ambiental en galpones de pollos. Universidad de la Almunia. Zaragoza. España.
2005
• Nilipour, A. H. 1996. Tropical heat and how to minimize its detrimental effects. World Poultry, Vol. 12, No
5, p. 41.
• Nilipour, A. H. Manejo en crianza y postura comerciales en estrés calóricos Notas personales 2002.
• Rosete, A. 1998. Ventilación forzada y nebulizadores de agua para el refrescamiento ambiental de pollos
de engorde. XI Forum de Ciencia y Técnica, IIA, Cuba.
• Rosete, A.; Reyes, T. y Bazail, A. 2000. El efecto de los ventiladores ante un golpe de calor en pollos de
engorde. III Congreso Nacional de Avicultura, Cuba, Memorias, p. 58.
• Rosete, A.; Lezcano A. y Arcia, F. 2000. Recubrimiento de techos con pinturas reflecto-aislantes en
naves para pollos de engorde. Rev. Cubana de Ciencia Avícola, 24 (1): 41-46.
• Rosete, A., Sardá, R. Croas, A. y Ramos, R. 2002. Efectos de la ventilación forzada en pollos de
engorde criados en una nave con y sin aislamiento térmico en la cubierta. Memorias, XVII Congreso
Centroamericano y del Caribe de Avicultura, La Habana, Cuba.
• Rosete, A. 2004. Condiciones climáticas para la crianza de aves en Cuba. Instituto de investigaciones
avícolas. Cuba.
• Yahav, S., Goldfeld, S., Plavnik, I. and Hurwitz, S. 1995. Physiological responses of chicken and turkeys
to relative humidity during exposure to high ambient temperature. Journal Thermal Biology, 20 : 245.
• Wiernusz, Chet. Terapias nutricionales para optimizar la producción avícola durante periodos de altas
temperaturas y humedades. Boletín Técnico Cobb Vantres 1999.
• Zumbado, M. E. 2002. Nutrición y manejo de ponedoras comerciales bajo estrés calórico