Doctrina Tobar y Estrada
Doctrina Tobar y Estrada
Doctrina Tobar y Estrada
Las razones que han llevado a Mxico a enunciar esta doctrina son fciles de
explicar, aunque el texto muchas veces haya sido objeto de discusin. Mxico
considera que el hecho de que un pas otorgue o no el reconocimiento, implica
una intervencin en los asuntos internos del pas en cuestin, puesto que un
gobierno cualquiera al otorgar o negar el reconocimiento, est emitiendo un
juicio favorable o desfavorable sobre la legitimidad del gobierno al cual se
otorga o no se otorga este reconocimiento, y hacer un juicio sobre la
legitimidad de un gobierno extranjero significa intervenir en los asuntos
internos de ese pas; por consiguiente Mxico se abstiene de reconocer o no
reconocer. Sin embargo, no renuncia a los derechos que el derecho
internacional le concede, como son los de mantener o romper relaciones
diplomticas, sin manifestar que otorga o no el reconocimiento a gobiernos
extranjeros y sin que en el retiro o envo de agentes diplomticos, vaya
implcito ningn juicio de valor sobre la legitimidad o ilegitimidad del gobierno
de que se trata.
II. La doctrina Estrada y el caso Espaa. Uno de los casos ms tpicos de falsa
interpretacin de la doctrina Estrada por personas que no la conocen, es el que
se refiere a las relaciones hispano-mexicanas, ya que mientras Mxico no ha
establecido relaciones diplomticas con el rgimen del general Franco, sigue
reconociendo al gobierno de la Repblica Espaola en el exilio. Eso, dicen los
crticos de Mxico, significa una violacin de la doctrina Estrada, puesto que se
est emitiendo un juicio de valor sobre el rgimen interno de Espaa, lo que
significa inmiscuirse en los asuntos internos de Espaa, desconociendo los
principios de no intervencin y de autodeterminacin. Esta crtica revela
ignorancia total de las razones de la actitud de Mxico, que no se encuentran
en su antipata o simpata por uno u otro gobierno. El autntico fundamento de
la posicin de Mxico hay que buscarlo en la interpretacin del Pacto de la
Sociedad de Naciones. Mxico y Espaa, representada por el gobierno
republicano, eran miembros de la Sociedad de Naciones y estaban en
consecuencia sometidas a las obligaciones del Pacto, particularmente a las
contenidas en el artculo 10, que prescriba el respeto a la integridad territorial
y a la independencia poltica de los Estados, y a los del artculo 16, que
obligaba a los miembros de la organizacin a imponer sanciones a los pases
que violaban el Pacto.