Análisis Sobre Decreto 170
Análisis Sobre Decreto 170
Análisis Sobre Decreto 170
Después de analizar el texto del Decreto 170 que reglamentará la Ley 20.201, podemos señalar
que este cuerpo normativo impactará negativamente en la Educación Especial por los vacios
que deja y por las dificultades que generará en las relaciones laborales para este sector de la
educación. A continuación detallaremos algunas observaciones.
Antecedentes
El año 2003 se inicia, por parte del MINEDUC con diversas organizaciones entre ellas el
Colegio de Profesores, un trabajo para repensar la Educación Especial que Chile necesita.
Producto de este largo proceso democrático, surge en el año 2005 el documento sobre la nueva
Política Nacional de Educación Especial, el que definió un tiempo de puesta en marcha de estas
entre 2006 a 2010 donde se debía elaborar legislación y normativas que abordarán las
siguientes temáticas:
En este contexto se dio origen a la Ley 20.201 del año 2007, la que lejos de responder a los
desafíos de la Política Nacional de Educación Especial, se restringe a la subvención
fraccionada, lo que significa que se pierde la mirada integral de la discusión y que deja de lado
las temáticas abordadas el año 2005.
Lo anterior explica las falencias, temáticas mal resueltas y los impactos negativos que la norma
dictada arriesga. El siguiente análisis del decreto publicado en el Diario Oficial del 21 de abril,
expone lo que pensamos al respecto.
Elementos críticos
El texto señala que las NEE educativas se dividirán en Permanentes o Transitorias sin
considerar su origen. Se entenderá por NEE Transitorias a los Trastornos Específicos de
Aprendizaje o Dificultades de Aprendizaje, Trastornos específicos del Lenguaje, Trastorno de
Déficit Atencional o Trastorno Hipercinético y Personas con Rango Intelectual Límite. Dentro de
las NEE permanentes, Deficiencia Mental Severa, Discapacidad Visual, Multidéficit,
Discapacidad Auditiva, Disfasia Severa, Trastorno Autista o Trastorno del Espectro Autista.
Dejando fuera de esta decreto a las deficiencias mentales leves y moderados.
No existe claridad en qué pasará con todas la NEE que se atienden actualmente y que este
decreto no contempla. ¿Seguirán con la actual subvención o simplemente no tendrán
financiamiento?
Diagnóstico
Se plantea que los diagnósticos tendrán un formulario único, pero, ¿quién vaciará los diferentes
diagnósticos en este formulario? ¿O las familias tendrán que llevar el formulario especialista por
especialista? Es posible asumir que estas interrogantes están consideradas en reuniones del
equipo multiprofesional para discutir los diagnósticos, pero esto no lo señala en este decreto.
En nuestra opinión resulta necesario, por lo tanto, que se oriente por parte del MINEDUC el
considerar los tiempos necesarios para el efecto, tomando en cuenta que lo deseable es que los
diagnósticos sean integrales, para lo cual lo importantes es que se logre la transdisciplinariedad,
donde se cuente con tiempos para debatir de manera colectiva estas evaluaciones.
Nos preocupa que este registro también considere al profesorado de educación especial.
Siempre existió un registro de profesionales en educación especial, no obstante era solo para
aquellos especialistas que no pertenecían al área de la educación, sin embargo nunca se utilizó
este instrumento para profesionales de la misma área. Esto si no queda bien normado, será un
elemento de precarización del trabajo docente
En los cuadros de profesionales por área se considera a las psicopedagogas en las áreas TEA
y Trastorno de Déficit Atencional. Es evidente que esta norma valida el ingreso en propiedad de
estos profesionales para trabajar en las escuelas, contradiciendo la normativa que Reglamenta
el Ejercicio de la Función Docente establecida en el Decreto 352, el que pone a estos
profesionales en cuarto orden de prelación para ser habilitados para ejercer la función docente.
También se considera para el diagnóstico el respeto a las características culturales, pero no
señala quién formará a la docencia para cumplir con este requisito.
Otro elemento que nos preocupa es la aplicación de sanciones para quienes emitan
diagnósticos fraudulentos, los sean serán eliminados del Registro de Profesionales de la
Educación Especial. Sin embargo, no señala cuáles serán los mecanismos de protección que
tendrá el profesorado frente a la presión indebida que pueda enfrentar un profesional para
cambiar un diagnóstico.
A nivel de diagnósticos nos parece preocupante que se determine que los TEL, los TEA, los
déficit de atención y las personas de desarrollo intelectual límite sean NEE transitorias, sin
considerar el origen.
Del mismo modo, se plantea que en el ámbito pedagógico se podrá trabajar con pruebas
formales e informales, no obstante se exigirá la utilización de pruebas estandarizadas.
Entonces, se evidencia que primará el enfoque cuantitativo por sobre el cualitativo.
Surgen dudas respecto de dónde derivar para acceder al diagnóstico de especialista, cuando
sabemos de la escasez de profesionales en el área de salud pública y la falta de recursos
financieros para pagar una atención de especialista, postergando la atención oportuna de esa
NEE del alumno. Se señala, además, que las familias podrán apoyar el financiamiento de estas
instancias, lo que creará muchas dificultades para estas personas y será un elemento de
distorsión para garantizar su derecho a la educación.
La redacción del decreto deja la sensación que se quiere externalizar los diagnósticos, cuestión
que contradice el espíritu de esta instancia como parte de un proceso pedagógico. Sería
lamentable que una etapa tan significativa del proceso de integración educativa, se
transformara en otro gran negocio. Esto va en contra del constructivismo, donde todos los
profesionales pueden aportar en la construcción diagnóstica, porque esta etapa es un pilar para
el proceso de aprendizaje.
En esta área se presenta una dificultad conceptual porque el Decreto mezcla los dos conceptos:
Trastorno Específico de Aprendizaje y Dificultad de Aprendizaje, como si fuesen lo mismo.
Para diagnosticar esta área, obligan a utilizar pruebas formales, pues piden que los evaluados
tengan 2 desviaciones estándares inferiores, sin embargo, el mismo Decreto señala que se
pueden utilizar pruebas informales.
En está área se repite la dificultad que evidencia el Decreto 1300 al no considerar como TEL las
dislalias y los trastornos fonológicos, sin considerar su origen. Esto es complicado, porque es
sabido que un trastorno fonológico, cuyo origen no radica en la madurez del sujeto y que no es
tratado en tiempo y forma adecuada, lo más probable es que tenga a futuro dificultades de
aprendizajes.
Nos preocupa, entonces, que pasará con el alumnado que ha recibido financiamiento por TEL,
y ahora, necesita recibir por TEA, ¿Serán sujetos de financiamiento?
Se pide que se evalúe con la última versión de los test, pero nos resulta preocupante lo que
pasará cuando se hagan diagnósticos de fiscalización, si se realizarán con los mismos test o
podrán cambiar, porque el cambio de pruebas puede modificar los resultados y estos
especialistas pueden ser cuestionados por falsificación diagnóstica.
El diagnóstico de los TDA está enfocado principalmente en salud y no existe ningún énfasis en
lo pedagógico, si consideramos que es el primer espacio donde se realizará el despistaje.
Tampoco señala quién hará el tratamiento psicopedagógico, ni cómo se hará el tratamiento.
Para detectar a las personas con Rango Intelectual Límite se realizará el despistaje en la
escuela regular, pero es importante saber ¿Qué pasará con el alumnado que viene de la
escuela especial?
El alumnado que aparezca en el diagnóstico sicológico en el rango límite será considerado NEE
transitoria, por lo tanto tendrán dos años renovables por otros dos para recibir el financiamiento
del programa. Surge la pregunta ¿Qué pasará después? Consideremos que las personas
pueden cambiar su CI a condición de seguir siendo estimuladas. De lo contrario, de no ser así,
esta situación se puede revertir.
Las personas que tengan diagnóstico de Deficiencia Mental Severa podrán acceder a una
subvención incrementada a partir de los 6 años. Surge la pregunta: las personas con este
diagnóstico ¿no necesitan estimulación a edades inferiores?
También, tenemos la inquietud respecto de qué pasará con las personas con Deficiencia Mental
Moderada y Leves.
El decreto plantea, que los apoyos se realizarán por la profesora o profesor de aula con apoyo
de profesionales especialistas, pero no señala dónde ni cuándo o si se está pensando en
integración en educación regular. Si se trata de la última opción consideramos que las escuelas
regulares no están preparadas para dar una respuesta educativa que permita a estas
personas, una vez que egresen, se inserten social y laboralmente.
Discapacidad Visual
Se determina se debe hacer diagnóstico al ingresar a la escuela para todos los alumnos y se
debe determinar los tipos de ayuda que se requieren en esta discapacidad, pero no indica los
instrumentos para realizar el diagnóstico funcional con alumnos con baja visión. ¿Qué pasará
con estas personas?
Multidéficit
Discapacidad Auditiva
Disfasia Severa
Se diagnostica desde los 6 años, pero sus características aparecen desde los 3 años, entonces
surge la interrogante: ¿Por qué no se podría evaluar tempranamente y dar atención adecuada
al niño y orientar a la familia oportunamente?
El diagnóstico debe ser realizado por especialistas con experiencia en el área, pero ¿quién
determinara el grado de experiencia? ¿Dónde se realizará el diagnóstico?
Fraccionamiento
El valor de esta subvención de NEE transitoria considera los montos como su fraccionamiento
en el DFL 2 -1998 sólo si es impartida en programas de integración. Es decir que aunque se
llame Programa sigue la lógica de proyecto con fondos concursables y no un financiamiento
permanente. Además, el pagar solo por sesión realizada limita que los diagnósticos iniciales y
las evaluaciones permanentes sean realizados por los mismos especialistas, lo que va en
contra de considerar el diagnóstico parte del proceso educativo.
Se plantea que los Programas de Integración Escolar deben estar en el Plan Educativo
Institucional y en el PADEM, y que debe articularse con el Plan de Mejoras de las escuelas con
Ley SEP, pero no se señala quien fiscalizará su cumplimiento y en qué tiempos docentes se
realizarán estas coordinaciones.
Se explicita que los requisitos para aprobar el programa de integración son mediante la
contrataciones especialistas, pero no indica los tipos de contratos, los tiempos de traslados, ni
los horarios de trabajo colaborativo entre docentes aula y especialista. Se indica capacitación
anual y provisión recursos, pero no señala cómo se harán, ni en qué momento.
Nos preocupa que este Decreto no contemple las formas de contratación que debieran tener los
profesionales que serán contratados con estos financiamientos. En la actual experiencia de los
Proyectos de Integración Escolar, los empleadores dejan a los profesionales de estas instancias
con contratos precarios. Entre los elementos de precarización se destacan: la inestabilidad
laboral y el irrespeto por las horas no lectivas. Además, como la mayoría de los profesionales
docentes no pertenecen a la planta de ninguna escuela, no tienen acceso a bonificaciones
colectivas como Excelencia Académica o Desempeño en Condiciones Difíciles.
Por último, nos preocupa que no se mencione a las Escuelas Especiales. Pareciera que todo el
alumnado pasará a los programas de integración y en este aspecto no podemos estar de
acuerdo, porque la misma Política Nacional de Educación Especial reconoce que este tipo de
establecimiento sigue cumpliendo una labor relevante para dar respuesta educativa a las NEE
con discapacidad.