Procesos Afectivos - Tesis

Revista Electrnica de Psicologa Iztacala.
15, (2), 2012 756

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Vol. 15 No. 2 Junio de 2012

LOS PROCESOS AFECTIVOS Y LA ZONA
DE DESARROLLO PRXIMO: UNA NUEVA
VISIN DESDE UNA PERSPECTIVA
HISTRICO CULTURAL
Flix Jorge Robinson Samuells
1

Universidad Oscar Lucero Moya
Holgun-Cuba

RESUMEN
El siguiente artculo es el resultado de un anlisis de la zona de
desarrollo prximo como constructo terico importante en la
comprensin de la subjetividad. El objetivo, por tanto, es
reflexionar sobre algunas cuestiones que puedan contribuir
hacia nuevas lecturas en su interpretacin, al tomar como
punto de partida que ningn conocimiento o explicacin acerca
de la validez de un concepto en el contexto cientfico, es
absoluto, acabado o nico. De este modo se introducen nuevos
conceptos para estudiar, explicar y comprender la formacin de
la subjetividad desde una perspectiva Histrico Cultural. En
este contexto se asume una visin integrativa a partir de la
introduccin de la transferencia y contratransferencia como
aporte relevante del psicoanlisis a la construccin del
conocimiento cientfico en el campo de la psicologa. Aqu su
utilizacin supone la presencia de una lectura diferente, al ser
considerado como una produccin subjetiva y su manifestacin
en los diferentes espacios de relacin cotidianos. Adems son
analizadas las categoras vivencia y sentido subjetivo teniendo
en cuenta la unidad de lo cognitivo y lo afectivo, lo consciente e

1
Profesor Instructor. Licenciado Psicologa. Representante de Investigaciones y Postgrados
Carrera de Psicologa del Centro Universitario Martha Ramos Mojarrieta perteneciente a la
Universidad Oscar Lucero Moya, de Holgun-Cuba. Correo electrnico:
ydieguezc@vru.uho.edu.cu
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inconsciente y su expresin en la configuracin subjetiva de los
sujetos en el proceso de interaccin. Desde esta perspectiva se
exponen los cuestionamientos del autor al centrar sus
reflexiones en los procesos afectivos, ante la necesidad de
proponer nuevas elaboraciones en el panorama
contemporneo actual.
Palabras clave: subjetividad, vivencia, sentido subjetivo,
transferencia, contratransferencia.

THE AFFECTIVE PROCESSES AND THE
PROXIMAL DEVELOPMENT ZONE: A NEW
VISION FROM THE HISTORIC-CULTURAL
PERSPECTIVE

ABSTRACT
The article is the result to analysis of one Proximal
Development Zone as a concept theoretical important
understanding subjectivity. The objective hence is reflect about
some topics that can contribute toward news lectures in their
interpretation take as point of any knowledge or explanation
about the validity as one concept in the scientific context is
absolute finished or unique. In this way are introduced new
concepts for study explains and understand the subjectivity
formation from the cultural Historic perspective. In this context it
assumes an integrative vision from introduction transference
and countertransference as a relevant apport of the
psychoanalysis to the scientific construction in the field of the
psychology. Here its utilization suppose a different lecture as to
be considered as the subjective and its manifestation in its
different spaces of relation daily. Therefor there are analyzed
categories experience sense subjective takes in to account the
unit of affective and cognitive conscious and unconscious and
its expression in the subjective configuration of the subjects in
the interaction process. From this perspective it shows the
discussing in the affective process before the necessity to
purpose new elaborations in the actual contemporary view.
Key words: subjectivity, experience, subjectivity sense,
transference, countertransference.

INTRODUCCIN
En el siguiente trabajo se abordan uno de los conceptos ms reconocidos de
la obra vigotskyana, la Zona de Desarrollo Prximo; como expresin del discurso
de su poca y la necesidad de desarrollar un diagnstico que superara el mtodo
tradicional de abordar las principales problemticas existentes en un momento de
desarrollo de la ciencia psicolgica. Estos trabajos centraron su atencin en los
supuestos acerca de la naturaleza de determinadas funciones mentales superiores
asociados al desarrollo intelectual, donde es difcil percibir lo emocional como
aspecto inseparable de los procesos cognitivos. De lo anterior se deriva una de las
cuestiones a sealar que se orienta a la bsqueda de nuevas alternativas en su
comprensin.
Este concepto propuesto por Vigotsky, hace referencia a la distancia entre el
nivel real de desarrollo, determinado por la capacidad de resolver
independientemente una tarea y el nivel de desarrollo potencial, determinado a
partir de la solucin de una tarea bajo la gua de un adulto o en colaboracin con
otro compaero ms capaz.
No obstante al pretender, abordar su significacin en la comprensin de la
subjetividad resulta necesario tener en cuenta como Vigotsky al proponer esta
categora centra sus anlisis en su utilidad para la instruccin y el desarrollo
intelectual, al postular el papel rector de la enseanza en relacin con el
desarrollo. En este sentido expresa al abordar su validez como procedimiento
metodolgico en su obra Pensamiento y Lenguaje:
La investigacin pone de manifiesto que la zona de desarrollo prximo tiene
un valor ms directo para la dinmica de la evolucin intelectual y para el xito de
la instruccin que el nivel actual de su desarrollo () el aspecto central para toda
la psicologa de la instruccin estriba en la posibilidad de elevarse mediante la
colaboracin a un grado intelectualmente superior () (1934, pp.329-332)
En la cita anterior se puede apreciar como el autor pondera el aspecto
intelectual y el papel de la instruccin como elementos centrales en sus
reflexiones acerca de la utilidad de esta categora. Aspectos reconocidos por los
continuadores que han contribuido al desarrollo de concepciones novedosas en
las ciencias pedaggicas. Sin embargo, en mi opinin ha sido insuficientemente
abordada al rectificar el papel de lo cognitivo como referente de la obra
vygotskiana asociado a los espacios pedaggicos en la aplicacin de este
concepto. Es precisamente en este sentido que sin pretender exponer una
interpretacin acabada sobre el tema en cuestin, resulta necesario valorar la
importancia de la esfera afectiva en la construccin de la subjetividad.
De esta forma no se propone un anlisis exhaustivo en cuanto al valor
incuestionable de su significacin en el discurso psicolgico actual, ni tampoco
abordar las diferentes interpretaciones e investigaciones concretas llevadas a
cabo por sus continuadores. En esta nueva aproximacin se parte de considerar la
propuesta de sentido subjetivo de Gonzlez Rey los cuales define como: la
unidad inseparable de los procesos simblicos y emocionales en el curso de una
experiencia, donde la emergencia de uno de esos procesos evoca al otro sin
convertirse en su causa. (Gonzlez Rey, 2000).
De igual manera al abordar la categora vivencia propuesta por Vigotsky en
El problema del Entorno como la relacin que existe entre el nio y su entorno,
la experiencia emocional (parezhivaniya); en otras palabras cmo un nio se
entera de, interpreta, y se relaciona emocionalmente con cierto acontecimiento.
(1935, p.7); es concebida desde una nueva ptica que rompe con los elementos
racionalistas y cognitivos asociados a esta categora, para ser comprendida a
partir de la complejidad de los procesos que tienen lugar en la subjetividad, pues
no es vista como reflejo o reproduccin sino como unidad de sentido productora
de emociones que integra lo consciente e inconsciente en las configuraciones
subjetivas del sujeto.

LA ZONA DE DESARROLLO PRXIMO Y LOS ESPACIOS DE RELACIN
COMO EXPRESIN DE LO AFECTIVO.
En relacin con esta categora se refieren diversas lecturas que ponderan su
valor terico y metodolgico, orientado hacia su aplicacin en diferentes contextos
de la actuacin profesional. Esta concepcin se aplic primero en el contexto
educativo y de las pruebas psicolgicas con un predominio en el estudio de los
aspectos cognitivos y este ha constituido el campo predominante de su uso. Sin
embargo, una de las cuestiones que a mi modo de ver resulta vlido al intentar
reflexionar sobre la importancia de este concepto en la prctica psicolgica, lo
constituye la relacin del sujeto con un otro ms capaz. Es precisamente en este
contexto en el cual emergen nuevos sentidos a partir del conjunto de acciones
compartidas entre sujetos dentro de una dinmica relacional y espontnea la cual
no se limita a los contenidos de carcter acadmico o instructivo como muestra de
la visin tradicional.
En este proceso emergen vivencias de satisfaccin e insatisfaccin,
generadoras de tensin que los sujetos vivencian y se convierten en dominio
personal, a partir de los diferentes elementos que se encuentran presentes en una
relacin. Aqu los estados emocionales conscientes e inconscientes se manifiestan
a partir de las formas de relacin establecidas durante una determinada actividad.
En este sentido, el componente afectivo de cualquier relacin no puede ser
valorado de una manera superficial, pues las necesidades de los sujetos son
productoras de emociones que de manera constante se encuentran presentes
como elementos dinmicos del comportamiento en los diferentes espacios de
interaccin.
En esta relacin la posicin de asimetra no siempre resulta un elemento
desarrollador, puesto que puede conducir a un retardo o anulacin de los
elementos que emergen como potencialidad. De este modo al abordar este
aspecto resulta necesario tener en cuenta las diversas formas de subjetivacin y la
multiplicidad de situaciones que pueden ser vivenciadas como estados de tensin,
entre el dominio cultural y la demanda de recursos psicolgicos para su ejecucin
personal.
En estos contextos los sistemas de significados compartidos por los sujetos
implican su emocionalidad, sin olvidar que las interacciones se sitan en un
determinado espacio donde emerge un posicionamiento mutuo de los
participantes que expresan relaciones de poder. Los componentes de un espacio
relacional constituyen un sistema complejo: materiales, tareas, adultos, nios, en
los cuales pasado, presente y futuro, se fusionan de modo conjunto para hacer
posible el desarrollo.
Las funciones compartidas y las diferencias cualitativas en los contextos de
la relacin se integran en las configuraciones subjetivas como momentos del
desarrollo de la subjetividad, donde existen dominios de los sistemas simblicos
que implican propsitos que el sujeto vivencia como propios y que pueden actuar
como facilitadores o obstculos de nuevas adquisiciones. Esto requiere la
interaccin con el otro, y exige la creacin de espacios de coherencia que
transitan por la configuracin de estados dinmicos de elevada complejidad.
La existencia de una diferencia en cada momento del desarrollo implica una
realizacin individual y futura que tiene lugar en la interactividad de los sujetos.
Esta es interpretada como diferencia cualitativa, donde las experiencias no
aceptadas por los discursos explcitos forman parte del proceso vivencial que no
constituye una dimensin temporal irreductible al aqu y ahora, sino, que sintetiza
el carcter activo, histrico y procesual del sujeto en los diferentes espacios de
relacin donde lo social y lo individual se integran de forma permanente como
momentos de integracin, contradiccin y ruptura en el proceso de interactividad.
El hecho de considerar que la condicin humana de existencia es ser agente
de su propio desarrollo, lleva implcito el reconocimiento de la singularidad de los
procesos psicolgicos y su construccin de manera individual, nica e irrepetible;
a partir de la produccin de sentidos subjetivos como construcciones simblicas y
emocionales que protagonizan los participantes en un determinado espacio de
relacin.
Un componente a tener presente, en mi opinin, es la multiplicidad de
emociones que resultan contradictorias en un espacio de relacin. Es necesario
reconocer que al valor de las relaciones afectivas que establece un sujeto en un
contexto determinado se suman otras formas de relacin, configuradas como
resultado de su historia personal en otros espacios de interaccin social.

LA COMUNICACIN COMO PROCESO Y LA AFECTIVIDAD
La comunicacin es otro elemento importante, se comparten signos o
smbolos elaborados por la cultura en su devenir histrico, estos regulan nuestra
conducta, en una doble condicin social e individual, por tanto, no solo puede ser
comprendida a partir del dominio compartido de los procesos simblicos y su
dominio personal sin tener en cuenta la complejidad de los procesos afectivos que
emergen en su realizacin. Esto constituye la configuracin de un espacio de
relaciones, tanto verbal como no verbal, consciente e inconsciente que integra una
diversidad de interpretaciones por parte de los sujetos ante una misma situacin.
En cuanto supone la intersubjetividad y la emergencia de experiencias vividas en
las cuales se articulan las emociones, fantasa e imaginacin con el desarrollo
intelectual en la produccin de ideas que requieren ser relacionadas con una
determinada actividad.
La constitucin de este proceso, presupone el desarrollo de un dilogo que
no se restringe a contenidos especficos determinados de manera apriorstica, sino
que permite la expresin de necesidades, sentimientos, estados de nimo y
emociones que emergen como producciones subjetivas de los sujetos durante la
actividad. En este sentido, el desarrollo social e individual se interrelacionan de
forma permanente mediatizados por las vivencias subjetivas que integran los
deseos, motivaciones, aspiraciones como expresin del tejido de relaciones vitales
que caracterizan la manera de interactuar de los sujetos implicados en los
espacios de ejecucin cotidianos.
Por otro parte, el contacto personal es una condicin subjetiva en el
desarrollo de las emociones que estimula un adecuado acercamiento entre las
personas; sin embargo los estados emocionales de un sujeto son variables y
dependen tanto de la situacin, como de los estados dinmicos presentes en los
diferentes momentos de interaccin y elaboracin de una nueva experiencia.
En este proceso lo consciente e inconsciente se integra en la configuracin
de la subjetividad de los sujetos como formas de expresin de la afectividad. De
este modo se transmiten sentimientos, emociones como constituyentes de las
vivencias y estados subjetivos que propician el intercambio y la participacin
conjunta como elementos condicionantes de la satisfaccin de necesidades de
aceptacin, valoracin, comprensin, apoyo, confianza e intimidad psicolgica
pero pueden tambin propiciar un ejercicio asimtrico de poder. Se trata aqu de la
articulacin compleja de diversas formas de comunicar y su congruencia en un
espacio interactivo donde no puede ser excluido su acento emocional.

LAS IMPLICACIONES DE LA AFECTIVIDAD EN UN ESPACIO
RELACIONAL
Abordar las posibilidades tericos metodolgicos de este concepto para la
intervencin no solamente en el mbito educativo, sino en las diferentes esferas
de aplicacin de la psicologa, implica reconocer la complejidad de los procesos
subjetivos que emergen en un determinado contexto de relacin.
El carcter contradictorio de las relaciones humanas es un proceso
mediatizado por estados afectivos caracterizados por contenidos con un valor
emocional que se expresan en las vivencias del sujeto. Estos procesos ocurren en
muchas ocasiones, en un plano de difcil conceptualizacin, al condicionar la
forma de establecer sus vnculos y la posicin asumida por los sujetos en su
autorregulacin personal. De esta manera en los espacios de relacin, se
expresan necesidades, de diversa procedencia que intervienen en la regulacin
comportamental, las cuales no son siempre vivenciadas de manera consciente por
los sujetos en interaccin.

En relacin con lo anterior las relaciones que se constituyen en la zona de
desarrollo prximo frecuentemente ponderan la formacin, cooperacin y
apropiacin de sistemas simblicos que tienen un sentido cultural. Desde este
punto de vista la subjetividad en ocasiones ha sido interpretada de un modo lineal,
al intentar encontrar una correspondencia entre un modo de actuar, pensar y sentir
en congruencia con intereses de orden social.
La especificidad de esta aproximacin se asocia a los conceptos de
interiorizacin e internalizacin como forma de explicar la relacin de lo interno y lo
externo. Conceptos derivados de la ley gentica del desarrollo cultural propuesta
por Vygotski en la cual plantea toda funcin en el desarrollo cultural del nio
aparece en escena dos veces, en dos planos; primero en el plano social y
despus en el psicolgico, al principio entre los hombres como categora
interpsquica y luego en el interior del nio como categora intrapsquica. Lo dicho
se refiere por igual a la atencin voluntaria, a la memoria lgica, en la formacin
de conceptos y al desarrollo de la voluntad. Todas las funciones psicolgicas
superiores se originan como relaciones entre los seres humanos. (1987, p. 196).
Aspectos que a mi juicio, contribuyeron a acentuar un nfasis en el papel de
lo social, al no conseguir trascender esta dicotoma en la psicologa tradicional. En
este caso se subvaloran las relaciones del sujeto consigo mismo al restar
importancia a los complejos procesos de autoorganizacin que tienen lugar en la
subjetividad individual. Estos procesos a nivel individual como resultado de los
espacios interactivos, en los que se implica el sujeto adquieren una particular
relevancia, en ellos los componentes afectivos y cognitivos se encuentran en una
unidad inseparable que se expresa en el plano vivencial.
Por tanto deben ser valorados como contenidos relevantes en la
autorregulacin, a partir de la produccin de sentidos subjetivos en las diversas
formas de expresin de la subjetividad. Es precisamente, en la configuracin de
estos espacios de relacin donde de hecho emergen resistencias, ya incorporadas
al dominio personal de los sujetos asociadas a vivencias emocionales de diversas
procedencias, que se actualizan como elementos que pueden favorecer o
entorpecer la ejecucin personal.
La distancia o el espacio que menciona Vygotski al formular este concepto
implica a mi modo de ver ms all de las diferentes interpretaciones, un
reconocimiento a la diversidad de procesos que acontecen en la construccin de
la subjetividad individual, a partir de las formas de relacin y la posicin que
ocupan los sujetos que intervienen en ella.
La esfera afectiva y los complejos procesos que en ella tienen lugar, se
expresan a travs de elaboraciones subjetivas complejas que no se encuentran
determinados nicamente por una intencionalidad de carcter instructivo, pues en
los diferentes sistemas de relacin que interacta el sujeto, tambin intervienen
componentes relacionados con patrones culturales propios de un determinado
contexto social que forman parte del dominio de la subjetividad individual. Es aqu
donde podra hablarse de vivencias emocionales asociadas a la estimacin del yo
y su expresin en la regulacin comportamental.
De esta manera la vivencia como unidad cognitivo afectiva presente en las
configuraciones subjetivas se desarrolla en el proceso de comunicacin y se
encuentra estrechamente relacionada con la produccin de sentidos subjetivos.
Esta situacin demanda recursos al sujeto que se expresan de manera consciente
e inconsciente en los diferentes contextos de actuacin a partir de su experiencia
singular y nica. Al hablar de estados afectivos hay que hablar de vivencias
emocionales que pueden ser prolongadas y profundas, relacionadas con las
necesidades y aspiraciones, que se configuran en el sujeto en su experiencia vital.
La motivacin y su organizacin a nivel subjetivo expresa la forma en que las
diversas necesidades se configuran en la subjetividad. En este proceso resulta
inseparable la unidad de lo cognitivo y lo afectivo, como momentos de permanente
elaboracin y construccin de la individualidad. Sin embargo, los estados afectivos
expresan las relaciones que establece el sujeto con su realidad, una realidad que
es cambiante como cambiantes son los procesos de organizacin de la
subjetividad individual.
Son precisamente estados complejos en los que la satisfaccin y la
insatisfaccin coexisten de manera simultnea, los cuales tienen para cada sujeto
especfico, un valor determinado, un significado que puede ser compartido o no en
los diferentes espacios de interaccin, a partir de las mltiples producciones de
sentidos subjetivos presentes en la accin.
En estas relaciones las configuraciones subjetivas como forma de
organizacin de los procesos de sentido que tienen lugar en los sujetos matizan el
conjunto de acciones de una determinada actividad a partir de estados
emocionales implcitos que manifiestan esperanzas y temores, sufrimientos y
placeres, as como las creencias generadas por estados carenciales que se
vivencian de mltiples maneras, como elementos conscientes e inconscientes,
presentes en la motivacin y no slo poseen capacidad de contener formas de
relacin asociadas a otros espacios de interaccin que emergen en una relacin
actual como dominio personal, sino que tambin, pueden influir en la realizacin
futura.
Al analizar este concepto el reconocimiento de una distancia, lo cual implica
una posicin; resulta otro aspecto a tener en cuenta al caracterizar los estados
afectivos es su carcter ambivalente y cmo intervienen en la dinmica de las
relaciones con el otro. En este sentido, la polaridad presente en los estados
emocionales que se vivencian a nivel individual, deben ser tenidos en cuenta en
los espacios de relacin. Es aqu donde la posicin que ocupan los sujetos como
elemento condicionado y condicionante ejerce influencia sobre las expectativas de
xito y fracaso en la ejecucin y los dominios necesarios para la realizacin
personal de una determinada actividad.
En estos casos los cdigos emocionales, lmites y roles que predominan en
la relacin constituyen aspectos dinmicos en el cual emergen nuevos sentidos
subjetivos como formas de experiencia vivida que condicionan la posibilidad de
que cada uno de los participantes pueda expresarse libremente a travs de
medios materiales e ideales. Aqu lo social en su dimensin subjetiva se expresa
en los discursos y sistemas simblicos sobre los que se organizan las
experiencias compartidas al interior a travs de los aspectos subjetivos
diferenciados y contradictorios de los diferentes espacios de ese funcionamiento
social, y de los sujetos que transitan en ellos.

LA ZONA DE DESARROLLO PRXIMO COMO DIMENSIN SIMBLICA
EN EL CONTEXTO DE LA RELACIN
Otro elemento de incuestionable valor es en mi criterio la inclusin de la
transferencia y contratransferencia como fenmenos abordados por el
psicoanlisis. En esta propuesta parto de considerar la dimensin cultural y social
de estas categoras al reconocer su valor heurstico fuera de los lmites
tradicionales en que fueron desarrollados asociado a determinadas prcticas en el
campo de la psicologa.
Desde mi punto de vista estos conceptos constituyen producciones de la
subjetividad presentes en los espacios simblicos que se configuran en la cultura y
denotan su importancia para valorar la significacin de las relaciones con los otros
y los procesos emocionales que se manifiestan en la produccin de sentidos
subjetivos asociados a la dinmica compleja que caracterizan un espacio de
relacin.
Desde esta perspectiva asumo los planteamientos de Gonzlez Rey al
referirse al concepto de zona de sentido desarrollado por l cuando plantea El
concepto de zona de sentido desarrollado por m est orientado a una lectura
deconstructiva del saber, pues separa las posibilidades de inteligibilidad de un
saber, de las categoras concretas por las cuales esa inteligibilidad fue posible en
determinado contexto histrico y cultural. Las categoras representan momentos
histricos de representaciones ms abarcadoras, que facilitan nuevas opciones de
desarrollo para marcos tericos diferentes. (2009, p. 180). Desde esta posicin se
orientan las reflexiones en el presente trabajo al abordar la valides de ambos
conceptos y la bsqueda de una opcin Histrica-Cultural en su comprensin
como producciones subjetivas.
En este sentido, el carcter procesal de la relacin es generador de una
multiplicidad de formas de subjetivacin al reconocer la emergencia del sujeto con
capacidad generadora. Aqu las configuraciones subjetivas se expresan como
experiencias vividas a travs de su implicacin emocional y la integracin de
diferentes sentidos subjetivos. Estos se expresan como procesos conscientes y no
conscientes en los diversos momentos de la experiencia vital donde lo social y lo
individual convergen en el desarrollo histrico de las representaciones que
emergen en los diferentes contextos de relacin.
De este modo estos procesos se constituyen como expresin de lo
consciente e inconsciente y se encuentran presentes en los sistemas simblicos
compartidos en una relacin interpersonal como elemento importante en su
comprensin. Aqu el sujeto vivencia momentos de tensin entre lo individual y
social que se expresan a partir de los desdoblamientos y formas de organizacin
de la subjetividad.
Se trata en este caso de una experiencia emocional y relacional como forma
constitutiva de la subjetividad a partir de los diversos elementos que configuran el
vnculo. Por tanto los sentidos subjetivos se expresan de manera permanente en
el conjunto de acciones asociada a la realizacin de una determinada actividad en
la cual las elaboraciones subjetivas evocan sentimientos, deseos, pensamientos
sobre si mismo y los dems, expectativas e ideales como construcciones
simblicas que integran la imaginacin, fantasa y los estados emocionales que
emergen y son vivenciados desde lo relacional a travs de mltiples evidencias
directas o indirectas de la historia vital de los sujetos.
En estos procesos subjetivos lo consciente e inconsciente se actualiza en los
diferentes espacios de relacin en que interacta el sujeto derivado de su
experiencia vivida donde converge lo emocional y relacional, con lo cognitivo como
elementos constituyentes y constitutivos de la subjetividad. La historia personal de
los sujetos interactuantes presenta un conjunto de peculiaridades psicolgicas
configuradas de un modo peculiar que integra diferentes aspectos asociados a la
cultura, los hbitos, costumbres, grupos de referencia o pertenencia y cmo esto
influye desde la individualidad de los participantes. De cualquier modo, en este
contexto las experiencias anteriores personales y familiares con su matiz
emocional constituyen una realidad que no puede ser excluida, pues tambin se
manifiestan como modelos relacionales en el desarrollo de la subjetividad.

CONCLUSIONES
En sentido general existen diferentes propuestas e interpretaciones sobre la
importancia de esta categora de incuestionable valor en relacin con su aplicacin
y utilidad. Sin embargo, la misma no agota su valor tanto terico como
metodolgico en el marco referencial en el cual muchos estudiosos la han
comprendido. En mi opinin resulta una herramienta para comprender los
procesos complejos que tienen lugar en el sujeto concreto y el conjunto de
relaciones que establece con la realidad.
De esta manera su aplicacin nos remite a considerar que los sujetos se
encuentran inmersos en diversos sistemas de relaciones que no se reducen al
espacio educativo formal. Ante la necesidad de ampliar su significado en la
construccin del conocimiento psicolgico y la de profundizar en su definicin
hacia nuevas maneras de hacer y pensar la construccin del conocimiento
psicolgico que el propio Vygotski no alcanz a percibir.
Estas reflexiones, si bien no son el resultado de un conocimiento acabado
sobre el tema en cuestin, me han permitido expresar mi visin sobre su
comprensin, ms all del espacio educativo formal. Es por ello que considero
como muestra de las posibilidades de este concepto, su valor como referente en el
estudio y funcionamiento de los contenidos conscientes e inconscientes en los
diferentes momentos de configuracin de la subjetividad.
Abordar la importancia de esta categora conlleva a reconocer la integracin
de los sentidos subjetivos como aspecto inseparable de los procesos vivenciales
que tienen lugar en las configuraciones de la subjetividad a nivel individual. Estos
constituyen expresin de lo consciente e inconsciente estrechamente relacionado
con las formas de subjetivacin que caracterizan la accin del sujeto en los
diferentes espacios de interaccin.
La afectividad juega un papel fundamental en el desarrollo de la vida humana
al generar nuevos recursos psicolgicos como parte de los complejos procesos y
las formas de relacin que establece el sujeto con los otros, la realidad, y consigo
mismo. En tanto la elaboracin subjetiva de la realidad, no se reduce a su aspecto
cognitivo, se da en unidad con las vivencias afectivas y emocionales y este es un
proceso de formacin de la experiencia vital como aspecto presente en el proceso
de aprendizaje.
El error consiste en intelectualizar y racionalizar fenmenos que si bien
tienen componentes intelectuales, no se reducen a ellos, por lo que su educacin
supone la integracin de lo afectivo a partir de elementos de diversa procedencia
que se vivencian al rebasar los lmites del aprendizaje formal y que requieren de
escenarios escolares y extraescolares.
Desde esta perspectiva un espacio de relacin es concebido a partir de la
produccin de sentidos subjetivos, en los cuales emergen nuevas necesidades y
realidades personales en los contextos de actuacin del sujeto. Sin negar el valor
esencial de los conocimientos y de la actividad cognoscitiva en la formacin de la
subjetividad, que igualmente resultan esenciales en los escenarios de interaccin
con lo motivacional afectivo, pero no de modo indirecto a travs de lo cognitivo,
sino directamente, desde el comportamiento de los sujetos interactuantes y las
diferentes formas de expresin en la comunicacin, emociones y vivencias
afectivas.

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