Pautas Terapia Familiar Breve DeShazer
Pautas Terapia Familiar Breve DeShazer
Pautas Terapia Familiar Breve DeShazer
Milton Erickson y la teora del cambio de Gregory Bateson poniendo de manifiesto el importante papel que desempea la' perspectiva ecolgica en la labor de ambos. A partir del anlisis de
pautas de conducta, describe un tipo de intervencin que cuestiona supuestos bsicos de la terapia
familiar y redefine la relacin entre el terapeuta
y sus clientes. De Shazer sostiene que los conceptos de "resistencia" y "homeostasis" estn enraizados en una modalidad de pensamiento transmitida culturalmente, esto es, en una epistemologia. Segn eso, la familia y el terapeuta son
sistemas distintos y necesariamente conflictivos:
la primera se opone al cambio y el segundo lo
promueve. Vistas as las cosas, al terapeuta no le
queda sino planear "estrategias" que le permitan
"controlar" a la familia. El autor desarrolla un
mtodo que convierte la "resistencia" en "cooperacin". Con excelentes resultados, este enfoque
pone a los clientes en comunicacin directa, no
slo con el terapeuta que dirige la sesin, sino
tambin con los miembros del equipo que observan detrs de la pantalla. Y, al convertir a estos
observadores en participantes, da cabida en su
esquema a las relaciones recprocas que se establecen en el sistema teraputico total.
La obra analiza las bases tericas y el mtodo de
De Shazer y, a travs de extensas ilustraciones
de casos clnicos, explica la pertinencia de conceptos tales como sistema, ecologa, ciberntica
y epistemologa, que constituyen la piedra angular de la terapia de la familia.
Steve de Shazer es director del Centro de Terapia
Familiar Breve en el Instituto de Estudios Familiares de Wisconsin, en Milwaukee, y autor de
Claves para la solucin en terapia breve, tambin
publicado por Paids.
Steve de Shazer
Pautas
de terapia
familiar breve
Un enfoque
ecosistmico
Terapia Familiar
ltimos ttulos publicados:
22. B. P. Keeney y O. Silverstein - La voz teraputica de Olga Silverstein
23. M. Andolfi - Tiempo y mito en la psicoterapia familiar
25. W. H. O'Hanlon - Races profundas
27. H. C. Fishman - Tratamiento de adolescentes con problemas
28. M. Selvini Palazzoli y otros - Los juegos psicticos en la familia
29. T. Goodrich y otras - Terapia familiar feminista
30. L. Onnis - Terapia familiar de los trastornos psicosomticos
3 1 . A. Ackermans y M. Andolfi - La creacin del sistema teraputico
32. S. de Shazer - Claves para la solucin en terapia breve
33. A. M. Sorrentino - Handicap y rehabilitacin
34. L. Cancrini - La psicoterapia: gramtica y sintaxis
35. W. H. O'Hanlon y M. Weiner-Davis - En busca de soluciones
36. C. A. Whitaker y W. M. Bumberry - Danzando con la familia
37. F. S. Pittman III - Momentos decisivos
38. S. Grillo y P. Di Blasio - Nios maltratados
39. J. Haley - Las tcticas de poder de Jesucristo
40. M. Bowen - De la familia al individuo
4 1 . C. Whitaker - Meditaciones nocturnas de un terapeuta familiar
42. M. M. Berger - Ms all del doble vinculo
43. M. Walters, B. Carter, P. Papp y O. Silverstein - La red invisible
45. Matteo Selvini - Crnica de una investigacin
46. C. Rausch Herscovici y L. Bay - Anorexia nerviosa y bulimia
48. S. Rosen - Mi voz ir contigo
49. A. Campaniri y F. Luppi - Servicio social y modelo sistmico
50. B. P. Keeney - La improvisacin en psicoterapia
5 1 . P. Caill - Uno ms uno son tres
52. J. Carpenter y A. Treacher - Problemas y soluciones
en terapia familiar y de pareja
53. M. Zappella - No veo, no oigo, no hablo. El autismo infantil
54. J. Navarro Gngora - Tcnicas y programas en terapia familiar
55. C. Madanes - Sexo, amor y violencia
56. M. W h i t e y D. Epston - Medios narrativos para fines teraputicos
57. W. Robert Beavers y R. B. Hampson - Familias exitosas
58. L. Segal - Soar la realidad
59. S. Cirillo - El cambio en los contextos no teraputicos
60. S. Minuchin - La recuperacin de la familia
6 1 . D. A. Bagarozzi y S. A. Anderson - Mitos personales, matrimoniales y familiares
62. J. Navarro Gngora y M. Beyebach - Avances en terapia familiar sistmica
63. B. Cade y W. H. O'Hanlon - Gua breve de terapia breve
64. B, Camdessus y otros - Crisis familiares y ancianidad
66. L. Boscolo y P. Bertrando - Los tiempos del tiempo
68. M. Elkaim (comp.) - La terapia familiar en transformacin
69. J. L. Framo - Familia de origen y psicoterapia
Steve de Shazer
Pautas de terapia
familiar breve
Un enfoque ecosistmico
NDICE
Reconocimientos
Palabras preliminares, por John H. Weakland
Palabras preliminares, por Bradford P. Keeney
Prefacio
Evolucin
Introduccin
Epistemologa ecosistmica
El embrollo de la homeostasis
Cambio
Capitulo 1.
2 reimpresin, 1996
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Cooperancia
Paradoja
Capitulo 2.
El contexto clnico
Una cosmovisin
Encuadres
Reencuadre
Milton H. Erickson
El Instituto de Investigaciones Mentales
El Grupo de Miln
Capitulo 3.
Procedimientos
"Planificacin previa a la sesin
El preludio
Recoleccin de los datos
La pausa para la consulta: el diseo de la intervencin
Transmisin del mensaje
Estudio posterior
RECONOCIMIENTOS
cio Familiar de Dundee, Estado de Illinois). He sido asesor del programa de capacitacin de dicha Agencia, y ello me permiti corroborar la utilidad de este modelo, y de su formato particular, como herramienta de aprendizaje y formacin. Al ver a otros terapeutas, ajenos al grupo nuclear del CTFB, emplear el modelo, llegamos a esta
importante conclusin: su validez es independiente de los terapeutas que lo apliquen.
Diversos fragmentos del manuscrito, en sus distintas etapas, fueron ledos por otras personas adems de los miembros del CTFB.
Algunas de sus sugerencias fueron muy provechosas, y todas resultaron esclarecedoras; sus aportes estn a la vista en el texto definitivo.
Debo particular gratitud por ello a Bradford Keeney, Lyman Wynne,
Elliot Lipchik, Robert Peterson y Chungja Kim.
El problema con que me enfrent al estudiar la terapia es que en
esto el investigador se halla en una situacin muy semejante a la de
este sapo famoso:
Caminaba el ciempis lo ms contento
hasta que un sapo bromeando le inquiri:
"Por favor, dime, cul de tus patas
adelantas antes que la otra?"
Tan intrigado qued por este asunto
que, distrado, cay dentro de un foso
mientras pensaba cul pata adelantar.
Claro que yo slo soy un ciempis que simula ser un sapo.
PALABRAS PRELIMINARES
John H. Weakland
Hace unos veinticinco aos, Don D. Jackson inform a sus colegas del grupo de investigacin dirigido por Gregory Bateson que haba hecho el siguiente descubrimiento: no era el nico que, en su
prctica psiquitrica, vea a veces a los miembros de la familia de un
paciente; varios de sus antiguos amigos, en los corrillos que formaban en los encuentros profesionales, haban empezado a confesarle
que de vez en cuando tambin ellos lo hacan, por ms que a la sazn esto se consideraba una hereja, tanto en la teora como en la
prctica. En los aos que siguieron, la terapia familiar, aunque continu siendo controvertible, sali a la palestra abandonando los recintos privados. Sus conceptos, tcnicas y aplicaciones se desarrollaron con mucha rapidez desde el momento en que las ideas y observaciones sobre esta manera de tratar los problemas de la gente pudieron ser compartidas y discutidas amplia y francamente.
La historia de la terapia breve guarda un paralelismo significativo
con esto. Sin lugar a dudas, ocasionalmente muchos terapeutas recurrieron a tratamientos breves, incluso los psicoanalistas, desde
Freud en adelante; pero por lo general lo hicieron en forma privada y en silencio. Cualquier resultado rpido obtenido se consideraba un suceso aislado y fortuito cuando no se lo denigraba como
"mejora sintomtica" o "fuga hacia la salud", en vez de estudiarlo y tomarlo como base de nuevos desarrollos. Aun cuando la terapia breve fue sometida expresamente a un examen positivo un hito en este sentido fue la obra de Alexander y French de 1946,
hasta hace poco casi todos estos exmenes le "adjudicaban un papel
limitado o secundario. Se le conceda escasa aplicabilidad (posiblemente til para abordar ciertos problemas menores) o limitados al-
10
cances (posiblemente til como expediente provisional en momentos de crisis o en diversas situaciones en que las circunstancias impedan practicar el tratamiento cabal apropiado). Desde luego, "tratamiento cabal apropiado" significaba un trabajo prolongado y objetivos que implicaban reedificar desde sus cimientos al individuo o la
familia.
Frente a este papel y jerarqua limitados que se asignaban, en general, a los tratamientos breves, su concepcin terica y tcnica
adoleca de las correspondientes limitaciones, cuyas consecuencias
eran ms serias aun. Vale decir, hasta hace poco el tratamiento breve consista, principalmente, en ofrecer "menos de lo mismo" las
antiguas ideas y mtodos, recortados de manera bastante arbitraria,
sin preocuparse demasiado por explorar y desarrollar nuevas visiones y enfoques.
Sin embargo, en los ltimos aos un pequeo pero creciente nmero de terapeutas vienen proponiendo que toda suerte de problemas son potencialmente resolubles mediante el tratamiento breve, y
han examinado y descripto los conceptos y tcnicas que consideran
pertinentes a tal efecto. El libro de Steve de Shazer constituye un
aporte significativo en esta importante corriente. Si bien ningn documento escrito sobre la terapia puede sustituir plenamente la observacin directa (y esto es vlido para la transmisin y el aprendizaje de cualquier oficio), la combinacin de anlisis tericos, analogas
y ejemplos de sus ideas y prcticas que nos ofrece de Shazer y sus colegas resulta ms clara y concreta que la que nos brindan la mayora
de las obras existentes sobre terapia. Su libro se apoya en muchos
empeos anteriores, en particular los de Milton Erickson, pero tambin aporta varias novedades, como su particular mtodo de trabajo
en equipo y su supresin de la "resistencia" redefinindola como
una manera peculiar de cooperar. Incluso cuestiones ya consideradas por otros autores son presentadas aqu con una visin que es caracterstica de este grupo, como lo es su lenguaje.
Todo esto me parece positivo. Creo que compartimos con Steve
de Shazer la creencia de que en los asuntos humanos el cambio es
permanente y no existe ninguna verdad absoluta. En consecuencia,
jams se escribir una obra sobre terapia que sea completa y definitiva. Entretanto, seguiremos necesitando contribuciones meditadas
y bien informadas, fruto de diversas perspectivas. Creo que este libro es una de ellas, y que en el estado actual de nuestros conocimientos y de nuestra prctica resultar interesante y provechoso para muchos terapeutas.
PALABRAS PRELIMINARES
Bradford P. Keeney
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PREFACIO
Desde los comienzos mismos del CTFB, muchas de estas ideas cobraron forma y se nutrieron de las conversaciones informales que
mantuve con Insoo Kim Berg y James F. Derks; sin ellos, este libro
y las ideas que en l se expresan no se habran podido materializar.
Ambos son excelentes terapeutas y maestros de terapia, y he aprendido muchsimo vindolos trabajar con familias a lo largo de los aos.
La evolucin de mi trabajo debe mucho a Insoo Kim Berg, mi esposa y colega, quien me brind todo su apoyo, a veces con grandes
renuncias de su parte, para que yo pudiera pensar y escribir. Nunca
podr expresarle suficientemente mi gratitud.
Tambin a raz de la influencia de Insoo, rnis lecturas me hicieron
transitar por el pensamiento asitico. La gravitacin de las ideas budistas y taostas en esta epistemologa y en este modelo ha sido decisiva. Al igual que Capra (13), encuentro notables similitudes entre
el pensamiento asitico y la nueva epistemologa ecosistmica.
Trabajando con Insoo y vindola trabajar aprend una enormidad
acerca del modo en que se debe obrar para que las familias nos revelen su sistema. Ella tiene una maravillosa manera de conseguir que
las personas dialoguen entre s sin necesidad de pedirles que lo hagan. Sus mtodos han sido perfeccionados y ampliados por el grupo
del CTFB, en lo que ahora denominamos nuestro "enfoque acrtico".
Insoo y yo pasamos interminables horas conversando acerca de la
teora y de su relacin con la prctica y la investigacin, y es probable que ella tenga tanto derecho como yo a considerarse duea de
estas ideas, que yo simplemente he volcado sobre el papel.
Una terapia de familia llevada a cabo en 1979, en la que Jim Derks
fue el conductor (vale decir, el miembro del equipo teraputico reunido con la familia en el mismo cuarto), me hizo advertir que habamos creado una nueva manera de relacionar cada tarea encargada a
la familia con la respuesta de sta a la tarea anterior. Mientras Jim y
su equipo trabajaban con la familia, yo me dediqu a repasar las videocintas. Recuerdo que le dije que "algo haba cambiado" en esa
terapia, y que convena conservar esas Cintas. Haca varios aos que
yo vena observando la labor de Jim, pero algo me impact en su
particular manera de enfocar el problema de esta familia. Jim, por
el contrario, entenda que su mtodo gradual no haca sino amoldarse a ese tipo de familia y al problema especial que presentaban.
Slo estudios posteriores nos permitieron averiguar en qu consista la ndole germinal de esta nueva manera de contemplar a una familia, y se nos aclararon entonces los mtodos que habamos estado
empleando para relacionar una tarea con otra.
Este es slo un ejemplo, pero seala la naturaleza de la evolucin
PREFACIO
15
EVOLUCIN
Nuestro modelo no naci maduro, sino que se desarroll gradualmente a lo largo de un cierto perodo, con la ayuda de otras personas aparte de las que integraban el grupo nuclear del CTFB.
En los ltimos tiempos se ha vuelto comn, entre algunos terapeutas de familia y entre muchos de los que se dedican a la terapia breve, emplear una pantalla de visin unidireccional tras la cual se sita
un observador o grupo de observadores. En muchas oportunidades
esto se hace con fines de formacin (50), y mientras el educando
trabaja con la familia, del otro lado de la pantalla el instructor1 observa. En el curso de la sesin, el instructor presta atencin tanto a
las necesidades de la familia como a las del educando, y en general
el contacto entre ambos se limita a llamadas telefnicas: cada vez
que el instructor quiere darle un consejo, hacerle una sugerencia o
un comentario, simplemente lo llama por telfono. La misin del
instructor consiste en corregir en el momento los errores que el educando comete, en lugar de esperar a una sesin de supervisin post
mortem, cuando ya sera demasiado tarde para corregir el error.
Charles Fulweiler, en un comentario efectuado a Haley y Hoffman (36), describi otro modo de usar la pantalla trabajando a solas
A lo largo del libro designamos con el gnero masculino a instructores, educandos, terapeutas, conductores, investigadores, etc.; se sobreentiende que
pueden ser de cualquiera de los dos sexos.
PREFACIO
con una familia, le daba a sta alguna tarea que deba cumplir dentro de la sesin y se retiraba del otro lado de la pantalla para observarla; as poda reducir al mnimo la interferencia directa del terapeuta mientras se realizaba la tarea. Pero el encuadre mismo era una
forma de interferencia, ya que no era lo mismo que la tcnica de la
"cmara de filmacin ingenua" que registra a la familia sin que sta
se d cuenta. No obstante, permita al terapeuta poner mayor distancia y alcanzar una visin ms "objetiva" de la familia, semejante
a la que tiene un observador ubicado detrs de la pantalla. Por aadidura, le daba tiempo al terapeuta para reflexionar acerca de la manera ms til de ayudar a la familia.
Algunos grupos teraputicos, como los del IIM (64, 67) y los del
CTFB antes del desarrollo del nuevo modelo, recurrieron a un grupo
de colegas situados detrs de la pantalla como consultantes inmediatos; pero tambin en estos casos, la mayora de los contactos durante la sesin se producan a travs del telfono. El grupo haca sus sugerencias cada vez que adverta que el terapeuta se encontraba en
dificultades. Muy de vez en cuando, uno de los consultantes ingresaba en el cuarto en que se efectuaba la terapia para ayudarlo. En general, la pantalla de visin unidireccional era considerada parte del
muro, y el grupo actuaba tan separado del terapeuta como si fuera
una pared y no una pantalla; antes de la sesin se reunan para planear la estrategia o la tctica, y concluida aqulla, para repasar lo
que haba sucedido.
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EL ELOGIO
18
nester tachar con una cruz esa antigua palabra, "observador", y reemplazarla
por otra nueva, "participante". En algn sentido inhabitual, el universo es un
universo participatorio (Wheeler, en 13, pg. 127).
El hecho de "romper el vidrio" que separaba la terapia del grupo
situado detrs de la pantalla se convirti pronto en un "nuevo encuadre
teraputico"; a la postre, dio lugar a un nuevo modelo, que a su vez
exigi una nueva epistemologa ecosistmica (70) y una nueva teora
del cambio.
Los participantes situados detrs de la pantalla comenzaron a trabajar de consuno con el terapeuta (que ahora pas a denominarse el
"conductor") durante las pausas para la consulta, a fin de elaborar la
intervencin principal que l luego propondra a la familia en nombre
del equipo. Estas proposiciones, en general, comenzaban con una
formulacin positiva, denominada "elogio", que el conductor llevaba
consigo al volver al cuarto en que se desarrollaba la terapia. Los
fundamentos para que el terapeuta retornara con un elogio eran simples.
Originalmente, estos mensajes estuvieron destinados a fortalecer la
posicin del equipo, como un coro del cual el terapeuta era el vocero al
regresar al cuarto. Las proposiciones se formulaban en trminos
positivos a fin de aminorar el impacto de la presencia del equipo, en la
hiptesis de que la familia presuntamente supona que esos especialistas
le haran pasar un mal rato con sus crticas. El equipo dedic algn
tiempo cada semana a perfeccionar este enfoque participatorio de la
terapia breve, ignorando que tanto en Miln (56) como en Nueva York
(5) otros dos grupos haban empezado a trabajar de una manera muy
semejante.
Los participantes detrs de la pantalla comenzaron a meterse ms y
ms en la sesin a medida que se les hizo cada vez ms claro el efecto
que tena el coro. Empezaron a trabajar en el CTFB con dedicacin
exclusiva, y el enfoque fue elaborado y perfeccionado; los roles del
conductor y de los participantes fueron definidos de modo tal que el
equipo debi injerirse cada vez ms en la sesin. A esta altura, ya el
conductor y los participantes se vean a s mismos como integrantes de
una unidad, un equipo teraputico, y a la familia como un subsistema de
un suprasistema ms amplio que inclua al equipo: ya haban adoptado
una perspectiva ecosistmica. Vale decir, haba surgido un punto de
vista o un estilo de descripcin que inclua las conexiones ecolgicas
del sistema.
Detrs de la pantalla, la tarea consista en planear intervenciones
teraputicas y observar los resultados; del otro lado, consista en establecer una relacin viable con la familia y reunir los datos indis-
PREFACIO
19
pensables para que el resto del equipo hiciera su labor. Durante la pausa
para la consulta confluan los resultados de ambas tareas, y cuando el
conductor retornaba a la sesin era vocero del equipo en su conjunto,
aplicando con la familia una serie de intervenciones cuidadosamente
orquestadas y diseadas por aqul.
A raz de este nuevo encuadre y del cambio de percepcin sobre el
papel del equipo, ciertos conceptos y teoras que este modelo tom de
otros anteriores comenzaron a perder vigencia. Los modelos conceptuales
son como cualquier otro sistema: si se cambia uno de sus elementos, este
cambio afecta de alguna manera a todos los dems y a las relaciones entre
ellos. El presente libro versa sobre estos cambios.
21
INTRODUCCIN
EPISTEMOLOGA ECOSISTEMICA
Todo modelo clnico que pretenda ensearse, as como toda teora coherente (ya sea que verse sobre terapia familiar o sobre fsica
debe tener un fundamento epistemolgico; y es natural que el proceso de pensar, conocer y decidir acerca de la terapia familiar refleja
las ideas de Gregory Bateson (8,9). Desde sus primeros trabajos en
este campo con Ruesch (4) y los posteriores sobre la teora de la doble ligadura (5),* las lucubraciones de Bateson han tenido gran repercusin en la esfera de la terapia familiar; y esta influencia ha sido
tanto implcita como explcita. Lo mismo ha ocurrido en el caso de
este libro.
Como el contexto en que surgieron esta teora y modelo es el d
la "terapia familiar", y dado que suele concebirse a la familia como
un "sistema", la epistemologa correspondiente debe ser por fuerza
sistmica. Wildon y otros autores han puntualizado que "segn la
concepcin de von Bertalanffy, el 'medio ambiente' es en esencia
una suerte de 'fondo' pasivo sobre el cual se desplaza el 'organismo
(la figura)" ( 7 1 , pg. 39). Esta era la concepcin predominante cuando surgieron muchos de los modelos sistmicos de la terapia familia:
y por ende se hizo extensiva a tales modelos y conceptualizaciones.
Si se toma como fundamento esta concepcin, es fcil incurrir en
el error de trazar una frontera entre el sistema familiar y el terapeuta. La conducta que se desenvuelve entre ambos es totalmente interactiva y comunicativa; sin embargo, desde esa perspectiva suele con
22
siderarse al terapeuta separado del sistema familiar, del mismo modo que el qumico tradicional est Separado, en su laboratorio, de
las sustancias con las que opera. As es como muchos modelos de terapia del sistema familiar caen en la epistemologa prevaleciente, la cual,
en las palabras de Bateson, es una epistemologa de causacin lineal, o de "fuerzas" o"poderes actuantes". Para el experto en la teora general de los sistemas,
ella implica imponer ideas pertinentes para un sistema cerrado a aquellos aspectos de la realidad que son sistemas abiertos; se niega as la relacin entre la energa y la informacin; dividiendo las totalidades (ecosistemas) en "cosas" presuntamente independientes (71, pg. 210).
Este error de cosificar las diferencias entre los componentes de
una totalidad convirtindolos en "opuestos imaginarios" (71, pg.
219), puede llevar a aplicar los mtodos cientficos tradicionales de
investigacin (segn los cuales a cada causa le corresponde un efecto) en un sistema que tiene cadenas de determinacin circulares o
ms complejas aun.
Desde luego, se presume que existe cierta regularidad en la relacin entre la causa y el efecto, ya que de lo contrario nadie podra
conjeturar la diferencia entre una y otro dentro de una cadena de
causacin compleja. "La diferencia existente entre el efecto y la
causa cuando ambos son incorporados a un sistema adecuadamente
flexible es la premisa primordial de lo que puede denominarse transformacin o codificacin" (9, pg. 110). Pero el mtodo cientfico
tradicional, consistente en aislar la causa que corresponde a cada
efecto, es harto simplista para ser aplicado a un marco ecosistmico
complejo. Dado que el sistema, o ecosistema, "es circular, los efectos de sucesos que acontecen en cualquier punto del circuito pueden
transmitirse a todo l y producir cambios en el punto de origen"
(9, pg. 104).
El mismo error en cuanto a la fijacin de lmites prevaleca, a todas luces, en los modelos de terapia del sistema familiar que incluan
a un observador o grupo de observadores detrs de una pantalla de
visin unidireccional. En general, no se consideraba al grupo de observacin como parte del "sistema teraputico"; no lo hacan ni
siquiera quienes incorporaban al terapeuta junto con la familia dentro de la misma descripcin sistmica. Aplicando una diferente puntuacin ecosistmica, que concibe al sistema teraputico como un
sistema abierto, deben incluirse las necesidades de este sistema en la
descripcin que se haga del sistema familiar. Adems, tanto el terapeuta como los observadores formaran parte en tal caso del ambiente del sistema familiar, que es aquello a lo que se refiere Wheeler
INTRODUCCIN
23
EL EMBROLLO DE LA HOMEOSTASIS
Como el tema de la terapia familiar es el cambio, una epistemologa ecosistmica debe contener los fundamentos de una teora del
cambio.1 El modelo del sistema familiar se bas en el concepto de
"homeostasis", que inclua los mecanismos homeostticos, descriptos como aquellos que restauraban el sistema a su statu quo y de ese
modo mantenan enfermo al paciente (45). Esta interpretacin del
concepto de homeostasis, en lugar de constituir una nocin sistmi1
24
INTRODUCCIN
25
26
INTRODUCCIN
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CAPITULO 1
ISOMORFISMO
Una vez que los integrantes del equipo teraputico irrumpieron a
travs de la pantalla y dejaron de ser observadores para convertirse
en participantes, se les hizo evidente que era indispensable una epistemologa ecosistmica (47, 70), como vimos en la "Introduccin".
A partir de ese momento, los elementos bsicos de la situacin teraputica se concibieron como pautas que envolvan a las familias y a
los terapeutas (o, dicho con ms precisin, al equipo teraputico),
as como a la interaccin o intercambio de informacin entre estos
dos componentes del sistema teraputico. Puede considerarse que
los dos subsistemas (el de la familia y el del equipo teraputico) interactan de modo tal de crear una nueva pauta o pautas, y por ende un suprasistema: "Esta concepcin de los campos relacionales
entrelazados del terapeuta y de las personas identificadas como pacientes es comparable a las pautas del moar, en las que dos figuras
independientes interactan creando una nueva figura emergente"
(47, pg. 126). Este cambio radical en nuestras descripciones y mtodos de observacin implica alterar la estructura general del trabajo
teraputico y de la teora que le sirve de base, y exige una nueva
teora o modelo del cambio, que reconozca "la imposibilidad de separar al observador cientfico de los fenmenos observados" (13,
pg. 266).
Si los dos subconjuntos de pautas (el subconjunto de la familia y
el del equipo teraputico) se interconectan, la teora del cambio que
orienta las intervenciones de los terapeutas debe basarse en la nueva
pauta emergente. Dicha teora tiene que guiar la descripcin de esta
Agradezco a Bradford P. Keeney haber ledo una versin anterior de este
material y sugerido el nombre de esta teora.
30
31
homologadas entre s de modo tal que para cada parte de una de ellas hay una
parte correspondiente en la otra;y aqu "correspondiente" significa que las dos
partes cumplen funciones similares en sus respectivas estructuras. Este uso de la
palabra "isomorfo" deriva de una nocin matemtica ms precisa (43, pg. 49).
Hofstadter insiste en que "son estas percepciones del isomorfismo las que crean significados en la mente de las personas" (43, pg.
50). Y en la situacin teraputica, este significado puede llamarse
"cambio". En general, el proceso de cambio se inicia con una "idea"
o noticia de una diferencia que es el "resultado" de reencuadrar o
cambiar los significados contextuales de un conjunto de "hechos"
concretos (64). Sin embargo, el reencuadre no es un acto sino un
proceso (21) que modifica la percepcin que la familia tiene de su
propia situacin y da lugar a nuevos comportamientos (lo cual prueba que han cambiado las percepciones), que a su vez crean nuevas
experiencias subjetivas. El concepto de isomorfismo sugiere que si la
descripcin del equipo teraputico y su pauta de intervencin B es
ms semejante a una pauta A1 (versin reencuadrada de la misma
pauta A), la familia percibir en el hbrido formado por A y A1, un
significado que probablemente promueva el cambio.
Una metfora acerca del "adicional" de la percepcin de la profundidad, que recibimos por el hecho de que los dos ojos estn viendo las mismas cosas desde ngulos diferentes, nos ayudar a esclarecer ese "algo" sobre la descripcin y el proceso de intervencin del
equipo teraputico. Entre la visin del ojo derecho y la del ojo izquierdo hay una homologacin isomorfa, y el significado de esto es
el "adicional de la percepcin de la profundidad"; Puede decirse
que el cerebro recibe dos mensajes: 1) la visin de una misma cosa
por parte de cada uno de los ojos: isomorfismo; y 2) la "noticia de
la diferencia" entre las visiones de cada ojo: esta relacin es la que
crea la percepcin de la profundidad. Esta noticia de la diferencia es
una parte importante de la epistemologa en que se apoya la teora
binocular del cambio, y tambin una parte importante del proceso
por el cual conocemos.
As pues, es dable aplicar a la terapia el concepto de isomorfismo
entendindolo como la capacidad del equipo para describir de tal
modo la pauta expuesta por la familia (A), que su descripcin reencuadrada (A1) sirva de gua para planear una intervencin homloga
a aqulla. Es menester que los elementos que componen la descripcin del equipo guarden correspondencia con los elementos que
componen la descripcin de la familia y con las pautas que sta ha
exhibido en la sesin o sesiones teraputicas. Adems, el equipo de-
32
COOPERANCIA
34
35
36
Cada parte de un sistema est relacionada con las dems, de modo tal que un
cambio en una de ellas causar un cambio en todas las restantes y en el sistema,
total. O sea, un sistema no se comporta como un compuesto simple de elementos independientes, sino que se comporta de manera coherente como una totalidad inseparable (62, pg. 123).
La teora binocular del cambio, con sus conceptos concurrente
de isomorfismo y cooperancia, nos sugiere un modelo de terapia en
el que sta no es concebida como un combate, ya que excluye el
concepto de resistencia. 2 En su conjunto, ambos conceptos puede
servir para orientar al equipo teraputico en su descripcin de la
3
38
pautas ecosistmicas y en las intervenciones basadas en dicha descripcin. Mediante el concepto de isomorfismo, el equipo puede
planear mensajes reencuadrantes desde un ngulo distinto, capaces
de promover el "adicional de profundidad" que origina el cambio.
Mediante el concepto de cooperancia, puede disear tareas que promuevan un cambio de conducta isomorfo con las pautas del subsistema, pero desplazado un cierto ngulo l o cual, a su vez, contribuye al adicional de profundidad. Vale decir, el reencuadre apunta
directamente a los significados o aspectos cognitivos del sistema familiar, allanando el camino para el cambio de conducta (ya que significado y conducta pertenecen al mismo sistema). Las tareas o prescripciones apuntan directamente a la parte conductual del sistema,
allanando el camino para el cambio en los aspectos cognitivos (la tarea debe ser tambin isomorfa, pero desplazada en un cierto ngulo).
Esto quiere decir que el elogio y el indicio (o sea, el encuadre y la
tarea) tienen que ser isomorfos, lo cual confiere a la intervencin
mayor "profundidad" por la relacin que se entabla entre ambos
conceptos al instrumentrselos.
Empleando los conceptos concurrentes de cooperancia e isomorfismo, el terapeuta puede generar intervenciones que acepten plenamente la situacin familiar, aunque desde un ngulo distinto, pues
ya Erickson nos ha enseado que cualquier respuesta de la familia a
cualquier tarea puede describirse de modo tal que defina la modalidad singular que tiene esa familia de cooperar. El informe que da la
familia sobre la tarea prescripta forma parte de su mostracin, ante el terapeuta, de esta modalidad de cooperar. Tanto una respuesta
positiva como una negativa o una ausencia de respuesta se definen
como conductas "responsivas":
Cualquiera de las posibilidades constituye una conducta responsiva, Se crea
as una situacin en que el sujeto puede expresar su resistencia de modo constructivo y cooperante; la mejor manera de utilizar la manifestacin de la resistencia de un sujeto es crear una situacin en que dicha resistencia cumpla una
finalidad (35, pg. 20).
Aunque en este fragmento Erickson utiliza el trmino "resistencia", puede sustiturselo por "cooperancia", y entonces las corresLa obra de Haley y la del I IM forman parte de los antecedentes histricos y
contextuales de nuestro modelo de terapia familiar breve. Segn ste, no es imprescindible ver la terapia como una contienda, y la concepcin ecosistmica
(incluido el concepto de "cooperancia") acaba con la necesidad de emplear metforas de un combate.
39
PARADOJA
Soper y L'Abate (58), as como Dell (17), han sugerido que es
parte la dificultad que tienen los terapeutas para comprender la naturaleza de las intervenciones paradjicas deriva de la falta de una
teora abarcadora. La teora binocular del cambio (con los conceptos concurrentes de isomorfismo y cooperancia) permite conceptualizar las intervenciones paradjicas como parte de una teora ms
amplia e inclusiva que la que tenamos hasta la fecha. Dentro de e s ta reformulacin ocupa un lugar central el hecho de que las intervenciones paradjicas se conciban como "miembros" de una clase
de "intervenciones isomorfas", en vez de considerrselas una clase
por s mismas. Esto vuelve a poner de relieve que esta tcnica tiene
la naturaleza de una "doble ligadura contraria", y proporciona a las
intervenciones paradjicas una base ecosistmica con un marco terico. Merced a esta construccin, el terapeuta puede decidir, basndose en informacin suprasistmica, en qu casos resulta apropiada
una intervencin paradjica.
El empleo deliberado de "intervenciones paradjicas" o de la prescripcin del sntoma parece remontarse a la "prctica negativa" de
Dunlap (25), aunque l no denomin paradjico a su mtodo. El
primero en utilizar este adjetivo parece haber sido Frankl (29, 30);
Haley (32) describi el uso de tcnicas paradjicas en la induccin
del trance, y Jackson (46) se refiri ai uso de la paradoja con pacientes paranoides. Ms adelante, muchos otros terapeutas describieron.
su empleo de intervenciones paradjicas, basado principalmente en
40
el modelo del IIM (62, 64). Las intervenciones denominadas paradjicas se difundieron veloz y extensamente. Han sido catalogadas y
clasificadas en tipos (58, 68, 69), y por lo tanto aqu no nos explayaremos ms acerca de esto.
El modelo del IIM se funda en la Teora de los Tipos, de Russell:
"Si algo abarca a todos los miembros de un conjunto, no puede ser
uno de los miembros del conjunto" (62, pg. 192). El modelo parte
de la hiptesis de una relacin ntima, como la que se da en la familia, e incluye un mensaje descripto de modo tal que:
a) afirma algo; b) afirma algo acerca de su propia afirmacin y c) estas dos afirmaciones son mutuamente excluyentes. As, si el mensaje es un mandato, para
ser obedecido debe ser desobedecido; si es una definicin de uno misino o del
otro, la persona as definida slo es esa clase de persona si no lo es, y no lo es
si lo es. Como vemos, es imposible decidir el significado del mensaje (62, pg.
212).
Por lo dems, el "receptor" del mensaje no puede efectuar ningn comentario acerca de l, ni tampoco retirarse de la relacin.
La Teora de los Tipos desempe un papel central en el desarrollo de la terapia familiar y de la terapia breve desde que se formul
la teora de la doble ligadura en "Hacia una teora de la esquizofrenia" (5).3 Este artculo (y otros posteriores de los integrantes del
mismo grupo) no slo influy en la manera de ver y describir a las
familias por parte de los terapeutas, sino tambin en su manera de
tratarlas. "Hacia una teora..." propuso "un nuevo modo de conceptualizar y observar antiguos problemas", ofreciendo para ello, ms
que una teora especfica, "un lenguaje... el cual, como cualquier
otro lenguaje, sirve para orientar tanto el pensamiento como la observacin" (66, pgs. 275-76).
Este lenguaje permite describir la situacin familiar en la cual la comunicacin... se vuelve cada vez ms crptica, en la tentativa mutua de evitar todo
contacto. Ellos [los participantes] aprenden a eludir hbilmente toda contraLa Teora de los Tipos, de Bertrand Russell, fue una tentativa de suprimir de
la lgica y la matemtica las paradojas autorreferenciales o proposiciones autorreflexivas. Spencer-Brovyn (60) resolvi el problema "demostrndole [a Russell]
que esa teora era innecesaria. Comprob con alivio que a l le encant esta demostracin. Dijo que ms que una teora era un simple expediente, el recurso
ms arbitrario al que l y Whitehead haban debido apelar, y que le alegraba
haber vivido lo suficiente como para ver resuelta la cuestin" (60, pg. xiv).
La teora de los tipos es til, empero, como herrramienta descriptiva.
42
un terapeuta puede planear y administrar a una familia. Importa advertir que la intervencin paradjica es una doble ligadura contraria,
una imagen especular, congruente con la estructura de la doble ligadura patgena de la familia. Si la descripcin que hace el terapeuta
de la pauta familiar no incluye una doble ligadura, su intervencin
tendr que amoldarse a las pautas de la familia de algn otro modo,
isomorfo con stas. Tendr que adecuarse isomorfamente a las pautas observadas, que es precisamente lo que hace la pauta de la doble
ligadura contraria cuando espeja la doble ligadura patgena de la familia.
La intervencin teraputica, sea o no paradjica, debe ser isomorfa con las pautas de la familia, y serle presentada a sta desde un ngulo diferente para que pueda obtener el adicional deseado.
. La fascinacin con las "paradojas" y las "intervenciones paradjicas" procede tambin del uso por los terapeutas de lo que habitualmente se denomina "psicologa inversa"; o sea, aquellos casos en
que el terapeuta le dice a su cliente que haga algo deliberadamente,
para que deje de hacerlo. A este procedimiento suele denominrselo,
errneamente, "uso de la paradoja":
Pero, puede acaso un suceso ser paradjico si es previsto? Esta pregunta es
cardinal con respecto al concepto de paradoja en la terapia. Recordemos nuevamente que si se opera a partir de premisas congruentes pero invlidas, suele
obtenerse un resultado imprevisto y paradjico (17, pg. 41).
El terapeuta que opera con una concepcin ecosistmica o interaccional tiene la cabal expectativa de que el mtodo de la "psicologa inversa" pondr fin al sntoma. Para el cliente que ha acudido a
la consulta, o para un observador cualquiera, este desenlace puede
ser sorprendente; sin embargo, puede decirse que ellos lo estn contemplando desde otra perspectiva, fundada en premisas aristotlicas, y dado ese marco, el individuo se sorprende porque tales premisas resultan sistemticamente invalidadas (17). As, el resultado le
parece absurdo e incluso mgico. La conclusin obtenida suena absurda, y la psicologa inversa es la nica explicacin racional que
puede sustentarla; por ello, la intervencin es errneamente llamada
"paradjica".
La construccin de la teora binocular puede ayudarnos a aclarar
algunos equvocos acerca de las intervenciones paradjicas, de modo
de eludir ciertos embrollos conceptuales. Se han elaborado muchsimas estrategias de investigacin destinadas a poner a prueba los efectos de las paradojas y de las intervenciones paradjicas, no obstante
43
lo cual en su mayora estas investigaciones han resultado inconducentes. Parecera que lo que ocurre con mayor frecuencia es que los
investigadores cosifican la doble ligadura o la paradoja. Vale decir,
aparentemente emplean uno de los elementos de un concepto sistmico o interaccional en forma lineal, sacando as de su contexto a
la paradoja y a la intervencin paradjica. Por falta de una teora
clara y abarcadora, no advierten que las intervenciones paradjicas
integran una pauta de equiparacin isomorfa de la intervencin (paradjica) con la pauta (paradjica) de la familia. Estos investigadores y terapeutas utilizan la paradoja cosificada de manera lineal (causa-efecto) para estudiar y promover el cambio. Parecen creer que esa
cosa denominada "paradoja" es el agente del cambio, y entonces,
"paradojizan" a sus clientes, en vez de advertir que lo fundamental
para promover el cambio es la adecuacin entre la pauta de intervencin y la pauta de la familia. Esta ltima concepcin, implcita en
"Hacia una teora de la esquizofrenia" (5), se ha vuelto desde entonces cada vez ms explcita (6, 56), hasta llegar al desarrollo de la teora binocular, que incorpora las intervenciones paradjicas a modo
de contraparadojas dentro de la clase ms amplia de las intervenciones isomorfas.
La Teora de los Tipos y la percepcin de las intervenciones paradjicas como una clase circunscribieron nuestros razonamientos y
limitaron nuestra apreciacin de un enfoque teraputico til. La te-,
ora binocular del cambio sugiere que el reencuadre isomorfo de los
mensajes puede ser til con independencia del "tipo" de pautas familiares observadas y codificadas. Las intervenciones paradjicas
son uno de los tipos de intervenciones isomorfas a que el terapeuta
puede recurrir si las pautas que observa se describen como paradjicas; pero si estas pautas no se describen como paradjicas, la intervencin isomorfa debe atenerse a un diagrama o mapa diferente, porque el territorio es diferente. Esta manera de pensar puede ampliar
nuestras concepciones dentro del campo de la terapia familiar, y
contribuir al desarrollo de conceptos ecosistmicos cada vez ms tiles, que nos permitan resolver algunos de los problemas generados
en la conceptualizacin y la metodologa de la investigacin.
EL CONTENIDO CLNICO
CAPITULO 2
EL CONTEXTO CLNICO
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EL CONTENIDO CLNICO
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48
EL CONTENIDO CLNICO
ENCUADRES
No es difcil concordar con Lord Peter Wimsey, ese personaje de
Dorothy Sayers, cuando dice que "la vida no es ms que una sucesin
de calamidades". Ahora bien: lo que la gente hace con esas calamidades parece variar mucho. Algunas de las cosas que hacen funcionan bastante bien en apariencia, y la vida sigue adelante con altibajos razonables. Nosotros, los terapeutas, no nos enteramos demasiado de las cosas positivas que hace la gente, pero s nos enteramos
de una enorme cantidad de cosas negativas: todo lo que no funciona
dentro de una familia y un contexto particulares. Nos enteramos de
esto cuando la familia nos describe sus ftiles intentos por resolver los
motivos que la traen a la consulta.
Si uno aceptara la definicin de Lord Peter, la vida seguira su curso con sus pequeos vaivenes. Lord Peter piensa y acta en trminos
de esta definicin, y ella lo ayuda a definir las situaciones de su vida.
Por supuesto, dicha definicin no es ms que una parte de un conjunto
de reglas, que podemos inferir de la lectura de los libros de Dorothy
Sayers, utilizadas para encuadrar situaciones (o sea, para definir lo
que est aconteciendo). De manera anloga, la idea ericksoniana
segn la cual la gente se adapta si se le da la oportunidad para ello
forma parte de un conjunto de reglas que l utilizaba para definir lo
que acontece en la situacin teraputica.
Tanto Bateson (7) como Goffman (31) definieron los "encuadres"
en forma til para comprender los motivos de consulta de las personas. Segn Goffman, "establecemos las definiciones de una situacin
de acuerdo con los principios de organizacin que gobiernan los
sucesos al menos, los sociales y con nuestra participacin subjetiva en ellos" (31, pg. 10). Un encuadre puede compararse con las
reglas de un juego o con "un 'cdigo', artificio que da forma y fija la
pauta a todos los sucesos que caen dentro de su dominio de aplicacin" (31, pg. 7). En sntesis, los encuadres actan como si fueran
las reglas que definen las situaciones.
La familia piensa y acta como si dispusiera de un conjunto de
reglas (o de conjuntos superpuestos de las reglas individuales ms
49
Esto significa, recordmoslo, que las personas se conducen "como si" existiesen
reglas. La creencia de que tales "reglas" existen forma parte de los empeos del
observador por definir lo que sucede ante sus ojos.
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perfectamente aceptable, razonable y "normal". Verbigracia, la gama de conductas incluidas en "el modo de demostrar amor" puede
ser muy estrecha, y en consecuencia, la gama de conductas incluida
en "el modo de no demostrar amor" ser correspondientemente
muy amplia. Lo corriente es que las personas no se den cuenta de
que la conducta de los dems forma parte de su encuadre propio o
"interno": la ven ms bien como parte de un encuadre ajeno o "externo".
lista caracterstica de las definiciones y encuadres -la de ser "internos" por oposicin a "externos", "propios" por oposicin a "ajenos", "actuantes" por oposicin a "no actuantes" los asemeja al
modo de funcionamiento de un termostato, con la salvedad de que
los sistemas humanos operan sin que ningn "extrao" establezca
dispositivo de funcionamiento. En la mayora de las situaciones,
cuando se grada un termostato a 65 grados, el horno comienza a
actuar al principio de un cierto intervalo de temperaturas y deja de
actuar al final de ese intervalo. En general, la temperatura puede oscilar en torno de la marca fijada (65 grados) sin grandes variaciones.
Sin embargo, si el intervalo de temperaturas aceptables es demasiado estrecho, el horno se apagar-se encender-se apagar, y as sucesivamente, siguiendo una pauta confusa y desordenada, y el termostato ser incapaz de determinar cul es el mecanismo actuante.
Jackson (44) observ que las familias presentaban pautas de conductas redundantes o recurrentes, y sostuvo que era posible concebir estas pautas como determinadas por reglas. En un comienzo, sostuvo que dichas regias daban cuenta de la redundancia de las pautas
observadas; eran "mecanismos homeostticos" que regulaban lo que
suceda entre los miembros de la familia (44). Posteriormente, Jackson aclar esto, estableciendo que estas reglas eran una descripcin
"como si", que efectuaba el observador a fin de conceptualizar lo
que aconteca.
Dado que las familias operan como si existiesen ciertos conjuntos
de reglas (62), y que estas reglas definen el modo en que perciben
una situacin, abundan las posibilidades para la confusin y el conflicto. A esta "sucesin de calamidades" que componen las dificultades cotidianas (64) deben enfrentarse las personas. Si aceptan esta
parte del encuadre de Lord Peter, los sucesos discurrirn segn pautas irregulares; pero, con frecuencia, esta regla no ha sido incorporada a los encuadres de la gente: la mayora tiende a ver estas dificultades como "algo que debe ser corregido", y el "problema" (64)
surge cuando falla el intento de solucin.
Por ejemplo, los nios a veces se hacen pis en la cama, los hom-
EL
CONTENIDO
CLNICO
51
bres a veces eyaculan prematuramente y las mujeres a veces no tienen orgasmo. Cada uno de estos sucesos puede calificarse como "una
de esas calamidades"; si la persona intenta "resolverlo" como si
constituyese un problema, el intento de solucin tal vez no funcione (en la mayora de los casos no lo hace), y se requerir un nuevo
intento. En estas circunstancias, hay dos problemas: el suceso original y la solucin que fracas. El problema se ha agigantado, puesto
que la medida adoptada para corregirlo (el intento de solucin) pareca la nica cosa lgica que se poda hacer. Y segn la lgica occidental, el fracaso exige emprender una nueva tentativa, mejor y de
mayor envergadura; pero lo cierto es que sta, por lo comn, tampoco funciona. La persona queda as atrapada en pretender hacer
"ms de lo mismo" (64) de algo que ya en el pasado no haba funcionado.
REENCUADRE
Hay ciertas similitudes entre los encuadres de la gente y las reglas
que sirven para definir la naturaleza de un juego y que prescriben
ciertos comportamientos y proscriben otros. Por ejemplo, si dos j u gadores de canasta juegan juntos por primera vez, cada uno supondr que el otro sabe las reglas, y el juego seguir adelante sin tropiez o s : uno ganar, el otro perder, y ambas cosas forman parte del
juego. No obstante, como sabemos, existen variaciones lugareas en
las reglas de la canasta, que han sido determinadas de manera informal. As pues, si en medio de la partida uno de los jugadores sigue
una costumbre local que viola las reglas formales del juego, ambos
dejarn de jugar y se pondrn a discutir acerca de esta aparente
transgresin; tal vez resuelvan entonces a qu reglas se atendrn en
lo sucesivo, y la partida podr proseguir.
Ahora bien: en las relaciones humanas, cada individuo considera
que el encuadre que l utiliza (su costumbre local) constituye las reglas formales del juego, y si algn otro individuo transgrede ese encuadre o esa parte de su encuadre, ser para l una persona equivocada, malvola o loca. Por supuesto, el transgresor piensa que su
propia conducta sigue las reglas formales del juego, y en consecuencia entiende que el otro es el equivocado (en el mejor de los casos).
Pero lo cierto es que en "el juego de la relacin humana" no hay reglas formales, y estn dadas las condiciones para convertir una dificultad en un problema.
Segn Bateson, "luego de una terapia exitosa, [el individuo] acta
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EL CONTENIDO CLNICO
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MILTON H. ERICKSON
Suele reconocerse que Milton H. Erickson, doctor en medicina, es la figura
mundial ms destacada en hipnosis mdica Sus escritos sobre la hipnosis constituyen la palabra ms autorizada acerca de las tcnicas para inducir el trance,
sus trabajos experimentales exploraron las posibilidades y lmites de esta induccin, y sus investigaciones establecieron la ndole de la relacin entre el hipnotizador y el sujeto (35, pg. 1).
La terapia familiar breve tiene una gran deuda con los mtodos
teraputicos de Milton Erickson y la cosmovisin que ellos implica:
Sus procedimientos conforman un "proceso de suscitar y utilizar el
propio proceso psquico del paciente de maneras que escapan a su
gama habitual de control intencional o voluntario" (28, pg. 19)
Erickson parte de lo que las personas ya han aprendido, y las ayuda
a aplicar eso de otra forma. Vale decir, acepta la cosmovisin de una
persona y las pautas de conducta en que se ve envuelta, y luego
ayuda a que use esas pautas de nuevos modos. Erickson est en ?
cierto al "proceder con cautela en cuanto a sugerir o aadir algo
nuevo al paciente: ms bien lo que hace es facilitar su capacidad de
utilizar en forma creativa lo que ya posee y desarrollarlo" (28, pg.
5). Esto llev a Erickson a crear una vasta variedad de mtodos para
abordar los problemas humanos, ya que su enfoque se funda en las
cosmovisiones y pautas de conducta singulares de cada paciente.
As, para dar un ejemplo extremo, Erickson puede dirigirse bruscamente a un hombre sentado en su silla, impotente, dicindole;
"Usted es un ejemplo tpico de un maldito nazi!", en la esperanza.
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El terapeuta que desea ayudar a su paciente no debe jams desdear, condenar o rechazar ningn aspecto de su conducta, por el simple hecho de considerarla obstructiva, ilgica o hasta irracional... El terapeuta no debe limitarse a
evaluar lo que es bueno y razonable, pensando que se es el nico fundamento
posible de sus mtodos teraputicos. A veces (en realidad, muchas ms veces de
lo que se advierte), una terapia puede asentarse sobre bases slidas mediante la
sola utilizacin de manifestaciones tontas, absurdas, irracionales y contradictorias (35, pg. 500).
Si bien la figura carismtica de Erickson est bien presente en el trasfondo, sus mtodos pueden ser eficaces aunque se
carezca de su carisma. Nuestro enfoque se desarroll gracias a los
empeos del CTFB para aplicar los mtodos y procedimientos ericksonianos, y la teora binocular del cambio debe mucho a ese proceso.
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EL CONTENIDO CLNICO
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de la cura" familiar contribuir a que el deprimido se deprima menos, o aun llevar a que deje por completo de deprimirse.
Solemos decir que el cambio se logra mucho ms fcilmente si su objetivo es
enunciado de manera bien clara y concisa Una vez que el paciente ha experimentado un cambio definido, aunque sea pequeo, en el problema aparentemente monoltico que mayor realidad tena para l, esta experiencia lo conduce a nuevos cambios autoinducidos en esa rea de su vida, y a menudo tambin
en otras reas (67, pg. 150).
No obstante, la mayor virtud del modelo de terapia breve del IIM,
su carcter pragmtico y orientado hacia metas, es tambin su principal debilidad. En ningn lugar (15, 64, 65, 67) el grupo se ocupa
expresamente del enfoque utilizado con personas cuyas metas son
mutuamente excluyentes, o con aquellas que tienen metas vagas e
imprecisas, que ni siquiera son capaces de enunciar. Esta limitacin
en los alcances del modelo llev a de Shazer a tratar de ampliarlo de
modo de abarcar esas metas mutuamente excluyentes. En sus orgenes, esta expansin de los alcances del modelo del IIM no tena otro
propsito; pero en los prximos captulos veremos a qu modelo de
terapia familiar breve dio lugar ese empeo inicial.
EL GRUPO DE MILN
Con las mismas races, (5, 62), surgi en Miln otro modelo de
terapia breve (55, 56). Si bien este grupo estuvo influido por los especialistas del IIM (y en particular por Watzlawick, quien visit al
grupo durante varios aos), su obra deriva principalmente de los trabajos primitivos de Watzlawick (62) y del modelo de Haley sobre la
familia esquizofrnica (33):
Estos trabajos nos ofrecieron los instrumentos apropiados para el anlisis de
la comunicacin: el concepto del contexto como matriz de significado; la nocin de la coexistencia de dos lenguajes, el analgico y el digital; el concepto de
puntuacin en la interaccin; la necesidad que tienen las personas de definir su
relacin y los diversos niveles, verbales y no verbales, que pueden utilizar para
ello; la idea de las posiciones simtricas y complementarias en las relaciones humanas y la nocin fundamental de paradoja sintomtica y teraputica
(56, pg. 8).
Un aporte importante de este grupo es el concepto de "connotacin positiva" (56). Surgi como una necesidad del terapeuta: ste
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EL CONTENIDO CLNICO
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PROCEDIMIENTOS
CAPITULO 3
PROCEDIMIENTOS
"Jams podra hacer eso. Por ms que estos mtodos parecen eficaces, suenan a magia Aunque a m se me ocurriera una intervencin de esta ndole, no
podra nunca convencer a mis clientes para que efectuaran esas tareas".
Cualquier terapeuta especializado en terapia breve (familiar o no)
o en terapia estratgica que haya querido explicar o demostrar sus
mtodos a otros terapeutas ms tradicionales se encontr con alguna rplica de esta ndole. Los procedimientos utilizados en el CTFB
fueron creados, al menos en parte, como un mtodo didctico que
pudiera dar respuesta precisamente a este tipo de observaciones. En
la medida en que el terapeuta aplica el concepto de resistencia y las
premisas de la lgica aristotlica, le resulta difcil explicar cmo disea sus intervenciones; las premisas ecosistmicas y la teora binocular del cambio facilitan el diseo de las intervenciones y tambin
su enseanza.
Un aspecto destacable de los procedimientos del CTFB es su gran
inters por la adecuacin de teora y prctica, que lleva a planear,
muy minuciosamente las intervenciones y a que los efectos que sesin a sesin se ejercen sobre el sistema familiar sean estudiados por
el equipo ubicado tras la pantalla. En cada sesin, el equipo procura
predecir la respuesta de la familia frente a cada intervencin teraputica, de la que el grupo familiar informar en la sesin siguiente.
Otro aspecto del estudio permanente y del carcter experimental
del enfoque del CTFB es su modo de describir y utilizar la cooperancia de la familia. Cuando, tras la patosa para la consulta, el conductor transmite a la familia el elogio del equipo (antes de darle un "indicio" acerca de la manera de resolver su problema), el equipo toma
cuidadosa nota de las respuestas de la familia a sus formulaciones. A
61
62
EL PRELUDIO
(En msica, parte preliminar de una composicin, que sirve de introduccin
a sta; seccin o movimiento que introduce los temas principales de la obra y
que forma parte integral de ella).
En esta fase de la sesin, que habitualmente dura alrededor de diez
minutos, e! conductor evita en lo posible todo examen de los motivos que llevaron a la familia a solicitar la terapia, centrndose en
cambio en su contexto social. Sus preguntas giran en torno del lugar de residencia de la familia, su vecindario, sus costumbres en materia religiosa, el trabajo que desempea cada integrante y las escuelas adonde asisten los nios, si los hay. Toda esfera de la vida que no
parezca conectada con el motivo de la consulta es explorada muy
someramente. En general, el conductor recoge toda esta informacin
de manera espontnea, en tono coloquial y con espritu socializador,
Su propsito es crear una relacin asistencial, no amenazadora, con
la familia en su totalidad, y averiguar de qu manera ve sta el mundo.
PROCEDIMIENTOS
63
Detrs de la pantalla, el equipo est alerta frente a las pautas que exhibe la
familia. Se atienen al plan de accin que fija el conductor y hablan acerca de
esas cuestiones no problemticas, o por el contrario se empean en abordar directamente los motivos que la llevaron a la consulta? Por ejemplo, el equipo
apreciar cul es la persona que ms habla en la familia y a quin se dirige cuando lo hace: si hay alguno que tome la palabra en lugar de otro, quin permanece ms tiempo callado, as como las frases y locuciones favoritas que cada cual
emplea para describir algo que no constituye un problema. Para el equipo es
importante notar estas diferencias de vocabulario y reparar en las ocupaciones
de los miembros, ya que todo ello le indicar, siquiera en parte, el modo en que
la familia ve el mundo, y por ende le permitir ofrecer una descripcin ms isomorfa. (Una cosa es que haya un nio que se orina en la cama en una familia
cuyo jefe trabaja en una fbrica en el turno de noche, otra cosa es que el mismo
motivo de consulta se presente en una familia en que el padre es ministro, y
una cosa distinta tambin es que en la familia no haya padre).
En menor medida, el equipo debe apreciar si el tipo de predicados que utiliza cada miembro de la familia es: 1) visual, auditivo, kinestsico, o 2) cognitivo.
Aunque esto parece menos importante que la fraseologa de cada individuo,
puede ser til si l equipo nota que el conductor tiene dificultades para entablar conversacin con algn miembro en particular. La reunin de las frases y
palabras favoritas de cada cual y de la familia en su conjunto incrementa la capacidad del equipo para comunicarse con ella, y le ayuda a planear intervenciones isomorfas. No obstante, ms importante que los predicados y la terminologa de la familia es equiparar el vocabulario empleado por el equipo con la cosmovisin y las pautas de aqulla.
Algunas familias o individuos modifican su vocabulario y sus predicados habituales cuando hablan acerca de un problema (o sea, utilizan distintas palabras
para describir otros aspectos de su situacin total). Cuando esto ocurra, el equipo lo apuntar y recurrir a las palabras no problemticas (advertidas en la fase
del preludio) para el diseo y transmisin del mensaje teraputico. Esto se hace
con el fin de qu la familia perciba la noticia de una diferencia, y as pueda promoverse el cambio en ella.
64
PAUTAS DE TERAPIA FAMILIAR BREVE
PROCEDIMIENTOS
65
Debe recordarse que, en general, las familias son muy aristotlicas. Por consiguiente, mientras est con ella el conductor aborda las secuencias "como si"
operasen reglas simples de causa-efecto. A las familias no les interesa perfeccionar el pensamiento circular, por correcto que esto sea desde el punto de vista
epistemolgico.
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PROCEDIMIENTOS
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PROCEDIMIENTOS
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BEHAVIOR SEQUENCE
equipo aadir una tercera columna, que indica las posibles maneras de reencuadrar la situacin, o sea, los otros significados que podra tener la misma secuencia de conductas. Estos nuevos significados potenciales son formulados de manera positiva, a fin de ofrecer un punto de vista desde otro ngulo.2 Por ejemplo, el silencio de la esposa podra entenderse como una manera de proteger a
su marido, ya que si ella le expresara realmente sus sentimientos profundos, lo
abrumara; o bien las preguntas del esposo podran entenderse como una manera de proteger a su esposa frente a las dudas que sta podra abrigar acerca de
3
Una de las finalidades de que haya un equipo tras la pantalla consiste, precisamente, en llevar registro de las tres columnas. Para una sola persona (un terapeuta sin equipo) es difcil registrar a la vez 1) la secuencia, 2) los encuadres, y
3) los reencuadres posibles. Como mtodo didctico, estas tres reas se ejecutan por separado. En primer lugar se le solicita al educando tomar nota de lo
que sucede, formulndolo slo en trminos positivos; esto brinda al conductor
el material que usar para el reencuadre. La segunda tarea asignada al profesional en formacin es registrar la secuencia de conductas. En general, el conductor se ocupa explcitamente de la secuencia y de los encuadres de la familia, y
por ende esta informacin est documentada en la grabacin o videocinta. Como la intervencin teraputica en la primera sesin suele ser amplia y general,
el material empleado para el reencuadre tiene primordial importancia; las otras
dos columnas del diagrama pueden tomarse de la cinta. Desde luego, el objetivo
que se persigue es capacitar especialistas en terapia familiar breve que sepan desempearse aunque trabajen sin un equipo. Esta tcnica de diagramacin es fcilmente transferible a las notas que toma personalmente el terapeuta, una vez
que ste cuenta con suficiente experiencia.
70
P A U T A S D E TERAPIA FAMILIAR B R E V E
PROCEDIMIENTOS
71
Esta diagramacin de la secuencia interaccional puede ser muy til para que
el terapeuta o el equipo planee intervenciones o reencuadre mensajes. Los elementos del mapa o diagrama (I, II) representan los datos concretos de la situacin. Las flechas cumplen una doble finalidad: 1) significan "conduce a" (u
"origina"), y 2) establecen el "contexto" de la secuencia conductal. La columna de "encuadres" suministra las designaciones del contexto manifestadas por
la familia, o que el equipo pudo inferir de la descripcin. La columna de "reencuadres (o significados) posibles" brinda al equipo otras designaciones del contexto, que pueden emplearse con fines de reencuadre. Al planear un mensaje
encuadrado, lo que se somete a transformacin son las flechas, el isomorfismo se mantiene, ya que los elementos (/,//, etc.) siguen siendo los mismos, pe-,
ro los significados que el equipo les atribuye ofrecen el "ngulo diferente" del
mensaje teraputico, que permite a la familia recibir el adicional, la noticia de
una diferencia capaz de conducirla al cambio.
Adems, este tipo de diagramacin describe la secuencia misma. Si el modo
de cooperancia de la familia incluye la ejecucin de tareas, este mapa suministra datos sobre la secuencia que el equipo puede emplear para planearlas. (En
el captulo 4 daremos algunas pautas orientadoras para el desarrollo de estas tareas)
sus reales sentimientos, debido a que l est tan frecuentemente fuera de casa.
(Decimos esto slo a modo de sugerencia; el reencuadre que practica el equipo
siempre depende del contexto, y por lo general no se lo puede transferir de una
familia a otra). El equipo podra incluir adems en esta seccin del diagrama el
sistema representacional preferido por cada individuo (en cada situacin particular). Por la descripcin mencionada, puede inferirse que en este caso el marido prefiere el sistema auditivo (quiere que su esposa le diga algo), en tanto que
su esposa prefiere el sistema visual (quiere que l le muestre algo) (figura 3.3).
Figura 3.3
La tcnica de diagramacin puede emplearse no slo con parejas sino con familias de mayor nmero de miembros. Por ejemplo, la familia podra describir
SECUENCIA DE C O N D U C T A S
Figura 3.4
72
PROCEDIMIENTOS
la siguiente secuencia: /) el hijo se porta mal;//) el padre le grita;///) el hijo llora e interviene la madre;/V) la madre y el padre discuten mientras el hijo abandona la escena; V) el padre impone al hijo una medida disciplinaria y VI) la
madre se retira a su cuarto. Transcurrido cierto perodo, esta secuencia se repite (figura 3.4).
Quiz para la familia la gama de significados de esta secuencia sea ms amplia. Por ejemplo, el padre podr decir que le grita a su hijo porque cree que necesita aprender la manera correcta de hacer las cosas, y adems piensa que la
madre no es lo suficientemente estricta con l. La madre, por su parte, tal vez
no le haya impuesto un castigo en esa oportunidad porque no le pareci "que
valiese la pena", pero luego intervino por considerar que el padre era demasiado
riguroso con la criatura. As es como se produce la discusin entre el padre y la
madre acerca de esta discrepancia, y el nio llora, 1) porque su padre fue demasiado duro con l, o bien, 2) por la reyerta de los padres. El padre, quien cree
adems que la madre es harto indulgente con su hijo, resuelve imponerle a ste
una medida disciplinaria, en tanto que la madre, enojada con su marido, decide
apartarse de l.
Entre los diversos significados alternativos que el equipo podra suscribir,
uno adecuado y til sera el siguiente: el padre, al imponer al nio un castigo y
presentarse as como "el malo", podra estar protegiendo a la madre (que seguira siendo "la buena") y, por ende, la relacin entre la madre y el hijo. La madre, con su intervencin, quizs estuviera protegiendo la relacin entre el padre
y el hijo, ya que su proceder contribuye a que aqul no parezca tan malo. La
reyerta entre ambos tal vez proteja al nio de sentir toda la furia contenida en
los gritos de su padre, y la inconducta del nio tal vez proteja al matrimonio, al
obligarlos a unirse por este motivo -como una reaccin intuitiva del chico frente a la percepcin de que sus padres estn muy distanciados. El hecho de que
el padre imponga la medida disciplinaria luego de la reyerta puede proteger a la
madre, evitndole representar el papel de "la mala", y por ende sera un indicio
de autosacrificio de su parte, ya que se muestra dispuesto a ser l mismo "el
malo". A su vez, el retiro de la madre de la escena podra estar protegiendo al
padre y su derecho de mantener una relacin franca y directa con su hijo, y no
una relacin intermediada por la madre, como sucede con tanta frecuencia en
muchas familias (figura.3.5).
En la primera sesin, este procedimiento de diagramacin slo puede iniciarse en forma bastante esquemtica, agregando ms y ms informacin a medida
que el conductor sea capaz de suscitarla desde la familia. Independientemente
de los pormenores de lo que acontezca en la primera sesin, esta tcnica de diagramacin puede ayudar al equipo a encontrar intervenciones isomorfas e inferir algo respecto de la probable modalidad de cooperancia de la familia. En parte, esta ltima informacin procede de la propia entrevista, ya que la interaccin
entre el conductor y la familia indica (en grado suficiente como para qu el
equipo pueda formular una buena conjetura) el modo de cooperancia de esta
ltima. Si ella permite que el conductor obtenga numerosos detalles, el equipo
podr inferir que ser til recurrir a determinadas tareas; si, por el contrario, la
familia presenta una cooperancia comparativamente vaga, que deja pocos detalles claros en el mapa, el equipo puede presumir que las tareas no tendrn mucha utilidad.
Esta tcnica impone algn orden en los datos, permitiendo al equipo entender hasta cierto punto las pautas, aunque a medida que la terapia prosiga deban
aclararse o enmendarse los detalles. De todos modos, esta aproximacin conserva un carcter circular t para el diseo de la intervencin del equipo. Las netas ventajas de este procedimiento derivan de que el mapa contiene tanto "los
hechos concretos" descriptos por la familia como "el contexto". Por aadidura,
el procedimiento de diagramacin comienza a definir el diferente ngulo desde
el cual debe enfocar las cosas el equipo para promover el cambio.
71
Una vez que el equipo ha formulado la pauta o pautas de la familia tanto con referencia a su secuencia como a sus significados, ya
est en condiciones de establecer una intervencin que d los primeros pasos en direccin a una "disposicin afirmativa" [yes set] (21,
28). Vale decir, recurrir a algunas enunciaciones positivas, con las
cuales la familia puede concordar, con el objeto de facilitar su aceptacin de los indicios (sugerencias o tareas) que siguen al elogio. Esta "disposicin afirmativa" se inicia al conseguir que la familia centre su atencin en el conductor cuando ste vuelve a la habitacin,
mientras ellos esperaban sus observaciones. En la primera parte de
su enunciacin, el conductor reconoce y admite las experiencias actuales de la familia (tanto en el lugar en que se desarrolla la terapia
como fuera de l, cuando enfrenta su situacin), y pasa a asociarla
con el indicio que ofrecer sobre el modo de resolver el problema
familiar. Esta disposicin afirmativa tiene como principal propsito
aumentar la probabilidad de que la familia encuentre la forma de
cooperar con la sugerencia o tarea teraputica, probabilidad que es
mayor si la intervencin del equipo ha sido diseada de modo isomorfo.
Cuando el conductor vuelve a la habitacin luego de la pausa para
la consulta, lo ms probable es que la familia espere que habr de
endilgarle una serie de aclaraciones e interpretaciones acerca de su
conformacin psicolgica. (Como seal uno de nuestros consultantes en cierta oportunidad: "Y cundo vamos a escuchar toda la
porquera?"). Incluso la familia puede estar preparada para librar batalla (como un contrincante) contra este tipo de "enunciaciones negativas". En lugar de esto, se encuentra con que el equipo le hace
una serie de alabanzas, basadas en la parte de reencuadre del mapa
y en los detalles de la descripcin que ha dado la misma familia. Generalmente, en la primera sesin estos cumplidos son de tipo bastante general, y se vuelven ms concretos a medida que avanza la tera-
Por ejemplo, si una familia hubiese suministrado al equipo suficientes detalles como para llenar el mapa de la figura 3.5, el elogio
del equipo rezara ms o menos as:
Ante todo, debo decirles que estamos impresionados por los minuciosos detalles que nos han proporcionado acerca de su situacin; en su mayora, las familias que atendemos nunca son tan observadoras de estos detalles. Las descripciones que nos hicieron nos han sido muy tiles. [Dirigindose a los padres:]
Nos resulta bien claro que ustedes son amantes y diligentes, y que poseen muchsimos recursos para encontrar el modo de resolver el problema. Y hay algo
inusual, que nos llama la atencin: cada uno de ustedes parece preocuparse mucho sobre el modo en que el otro trata al chico. Muchos otros padres slo se
interesaran por las dificultades del chico.
Este elogio incluye en s la segunda etapa de construccin de una
"disposicin afirmativa", que consiste en fijar la atencin de la familia en sus experiencias actuales. La tercera etapa consiste en relacionar indirectamente dichas experiencias con el indicio.
EL INDICIO
ESTUDIO POSTERIOR
Una vez que la familia ha partido, el equipo se rene a fin de evaluar sus respuestas inmediatas al mensaje y predecir el tipo de respuestas frente a la tarea que referir en la prxima sesin.
.En primer lugar, el equipo indicar qu ha observado en lo tocan-
PROCEDIMIENTOS
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MAS PROCEDIMIENTOS
CAPITULO 4
MAS PROCEDIMIENTOS
INTERCONEXIONES
En el captulo 3 pasamos revista a los procedimientos utilizados
en la primera sesin. En las siguientes, el formato sigue siendo el
mismo y se recurre a muchos procedimientos semejantes. Si la familia vuelve para una segunda sesin, el equipo dispondr de mayor informacin acerca de su modalidad de cooperancia y estar en mejores, condiciones de cooperar con ella en sus empeos por cambiar,
Cada una de sus subsiguientes intervenciones se basa en el informe
sobre los resultados del mensaje previo, y en consecuencia la descripcin del equipo se ajusta cada vez ms a las pautas familiares.
Dado que no nos es posible seguir a la familia con un equipo de
filmacin "ingenuo" a lo largo de todo el intervalo entre las sesiones,
tampoco podemos conocer en sus detalles el mecanismo de las reacciones de la familia frente a la intervencin del equipo. Pero aun
cuando dispusiramos de la cmara ingenua, tampoco tendramos la
seguridad de estar ante una relacin simple "causa-efecto" entre intervencin y cambio idea sta que con harta facilidad se vuelve lineal, lo cual no es til en una situacin ecosistmica. Dentro de la
situacin teraputica, lo nico que podemos controlar -en la medida en que estemos capacitados para ello- son las intervenciones teraputicas.
Tal vez no deberamos preocuparnos por las causas y efectos
tanto como podra creerse. Segn ha sugerido Capra, "las estructuras y fenmenos que observamos en la naturaleza no son sino creaciones de nuestra mente medidora y categorizadora" (13, pg. 266).
Los expertos en fsica subatmica slo pueden observar los resultados de sus experimentos de choques de partculas a alta velocidad
estudiando los registros fotogrficos de lo ya sucedido. Los expertos
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multicausal podra
entenderse del siguiente modo: 1) la familia describe su situacin
al equipo teraputico; 2) el equipo establece un
modelo para describir dicha descripcin, basndose en esa descripcin
(de la descripcin de la familia); 3) el equipo planea una intervencin (isomorfa y acorde con la modalidad de cooperancia prevista
de la familia); 4) la familia acoge la intervencin; 5) en el intervalo
entre las sesiones, la familia reacciona frente a la intervencin y frente a las situaciones de su vida cotidiana; 6) la familia vuelve a la terapia, y describe sus reacciones frente a la intervencin y frente a las
situaciones de su vida cotidiana, y 7) el equino describe la descripcin de la familia, y as sucesivamente.
Podemos as entender las pautas de los subsistemas constituidos
por la familia y el equipo teraputico, y las interacciones dentro del
suprasistema, como un proceso o serie de sucesos observados, que
tiene presente la relacin entre el observador y lo observado. De este modo, la segunda sesin (punto 6) se asemeja a los registros fotogrficos de los sucesos estudiados por los fsicos (figura 4.1). Ni el
fsico ni el especialista en terapia familiar breve pueden conocer en
todos sus detalles los complejos mecanismos que acontecieron entre
el suceso 1 y el suceso 2. La matriz S slo puede indicar al fsico la
probabilidad de que acontezcan cada uno de los desenlaces posibles;
asimismo, el especialista en terapia familiar breve slo puede establecer la probabilidad de cada desenlace familiar (figura 4.2).
MAS PROCEDIMIENTOS
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Figura 4.2. Diagrama de matriz S que representa simblicamente la sesin teraputica. El sistema familiar y el equipo teraputico entran en colisin con el fin
de cambiar a la familia. En el diagrama no aparecen detallados los mecanismos
de la sesin teraputica, sino que slo figuran los estados inicial y final tanto de
la familia como del equipo.
TAREAS
Figura 4.1. Diagrama de matriz S, segn Capra: "Los procesos de los hadrones...
se representan simblicamente mediante diagramas como ste, que describe una
de las reacciones ms simples y generales entre las partculas: A y B entran en
colisin, y como resultado del choque surgen dos partculas diferentes, C y D.
En estos diagramas no aparecen detallados... los mecanismos de la reaccin, siglo que slo figuran las partculas iniciales y finales" (13, pgs. 250-51).
Numerosos modelos de terapia familiar y de terapia breve incluyen el uso de tareas, directivas o consignas como parte de su mtodo de intervencin; por ello, resulta bastante raro que haya tan po-_
co material disponible para orientar a los terapeutas en la elaboracin de intervenciones especficas, que incluyan las tareas que la familia habr de ejecutar entre las sesiones.
*
Varios autores, entre ellos Haley (38), Minuchin (49), Watzlawick
y otros (64) y de Shazer (20, 2 1 , 24), han examinado el empleo y
el valor de las tareas en la terapia. Parecera que "la costumbre de
dar instrucciones a los pacientes es un tipo de conducta no menos
antiguo que el propio concepto de curacin" ( 1 , pg. 96). Las tareas
suelen ser "una forma de intervencin estratgica que cumple diversas finalidades. En general, la tarea se asigna para promover el cambio, vale decir, para activar nuevas pautas de transaccin" ( 1 , pg.
99).
Haley enuncia algunas finalidades ms:
MAS PROCEDIMIENTOS
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relacin que los liga. Adems, el informe de la familia sobre su respuesta es un mensaje que revela al equipo su modalidad caracterstica de cooperancia. Por consiguiente, toda respuesta de la cual informa la familia puede clasificarse en una de cinco categoras (tarea
cumplida en forma literal, modificada, opuesta, vaga o nula) y forma parte de la pauta de la familia y de la pauta del suprasistema.
Desde esta perspectiva, no hay tarea que no tenga xito, ya que todas ellas suministran al terapeuta mayor informacin sobre las diferencias entre sus diagramas y el modo de cooperancia que la familia
le est mostrando.
Hasta qu punto cumplen la tarea la familia o sus integrantes?
Requiere la familia algn cambio? Observa el equipo algn cambio? En qu consisten estos cambios? Los cambios observados
por el equipo o referidos por la familia concuerdan con las predicciones efectuadas? Todos estos interrogantes y sus respuestas constituyen una informacin indispensable para el equipo antes de planear
la prxima intervencin, y, reunirla es la preocupacin primordial
del conductor en la fase de "recoleccin de los datos". Los informes
que dan las familias sobre sus respuestas vale decir, el hecho de haber cumplido la tarea en forma: 1) literal, 2) modificada, 3) opuesta,
4) vaga 5) nula- le indica al terapeuta qu tipo de respuesta tiene
que dar para cooperar con una familia determinada.
INFORMES DE LA FAMILIA SOBRE SUS RESPUESTAS E INTERVENCIONES
SUBSIGUIENTES DEL EQUIPO
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MAS PROCEDIMIENTOS
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3. Si la familia informa haber hecho una tarea opuesta a la indicada, el modelo sugiere que la mejor manera que tiene el equipo de
continuar cooperando con la modalidad de cooperancia de aqulla
consiste en encomendarle otra tarea que incluya la posibilidad de
respuestas "opuestas".
Por ejemplo: la Sra. Ribbon se pas toda la primera sesin haciendo un minucioso recuento de las quejas que tena contra su marido;
en los ltimos tiempos la relacin entre ellos se haba tornado intolerable, pero la Sra. Ribbon se mostraba renuente a separarse. El
equipo le encomend como tarea "pensar lo que usted no quiere
que cambie en su marido y en su relacin con l, y escribirlo". La
Sra. Ribbon pareci desconcertada en un primer momento, pero
acept la tarea.
Cuando volvi en la segunda sesin, dijo que nicamente haba
podido pensar acerca de las fallas del marido, y por lo tanto haba
decidido irse de la casa. A la sazn estaba muy entusiasmada y vea
todas las cosas color de rosa; pero declar que no iba a permitir que
esto le impidiera pensar sobre las medidas prcticas que deba tomar.
Como haba dado cuenta de una "respuesta opuesta" a la primera
tarea, el equipo le encomend otra basndose en esta informacin.
Le sugiri que la mayora de las personas que se divorcian, muy
pronto se deprimen, y empiezan a pensar en volver a juntarse con su
ex cnyuge. Por lo tanto, el equipo le solicitaba a la Sra. Ribbon
que estuviera atenta a las seales de su depresin, y las anotara.
En la tercera sesin, dijo que no haba habido sino sucesos positivos, y que por ende todo lo que haba anotado eran cosas buenas.
Ella no vislumbraba ningn signo de depresin incipiente, y crea
que el equipo se haba equivocado al evaluar su situacin.
MAS PROCEDIMIENTOS
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Veamos un caso. El Sr. y la Sra. Glass no eran capaces de establecer ninguna meta especfica para la terapia, ms all del logro de
una "mejor comunicacin" entre ellos. Entendan que esa mejor
comunicacin se daba cuando ambos "se sentan mejor". En ningn momento de la primera sesin pudieron describir algn cambio
en sus comportamientos que indicara qu queran decir con una
"mejor comunicacin" o con "sentirse mejor". Ms aun, las preguntas que se les dirigieron acerca de estos cambios en su conduc-a no hicieron sino suscitar la descripcin de vagas sensaciones de
incomodidad. El equipo pidi entonces a ambos que observaran qu
suceda cuando experimentaban estas sensaciones de incomodidad con
un bloqueo en su comunicacin mutua.
En la segunda sesin, el Sr. y la Sra. Glass informaron cmo haban vivenciatlo sus reacciones frertte al bloqueo en la comunicacin,
y dijeron que al reflexionar sobre sus sentimientos de incomodidad
haban tomado conciencia de "hasta qu punto se sentan mal".
Ninguno de ellos pudo describir qu cosa suceda entre ambos para
desencadenar estos sentimientos. El equipo les pidi "apuntar en
qu momento comenzaban a sentirse incmodos, y entonces hacer
algo diferente". Adems, les pidieron "informar de qu manera hacer algo diferente los haca sentir mejor".
En la tercera sesin, tanto el Sr. como la Sra. Glass dijeron sentirse mejor. La Sra. Glass atribuy esto al equipo, por haberle sugerido
que escogiera entre "buenos o malos sentimientos". El equipo los
felicit a ambos por este descubrimiento, y les indic que probablemente los sentimientos de incomodidad volvieran, o nuevamente
predominaran en su experiencia mutua. Les sealaron que esta recaida "les dara mayor experiencia para escoger los buenos sentimientos y no los malos".
En la sesin siguiente la pareja inform que ambos se haban sentido mejor que en los ltimos aos. Se dio por terminada la terapia.
Comentario. En ningn momento de la terapia se fijaron metas
conductales o seales de progreso. En este tipo de situaciones, siempre resulta difcil para el equipo saber que la terapia ha tenido xito,
salvo que se lo digan los consultantes. No obstante, puede desarrollar intervenciones o mensajes isomorfos, tan vagos como la informacin que presenta la familia. Teniendo en cuenta que estos mensajes son presentados a la familia "desde un ngulo distinto", ella
obtendr el adicional de cambio que se persigue. Naturalmente, como las pautas son vagas y las intervenciones tambin lo son, el resultado ser no menos vago.
... la familia
informa que no ha efectuado una tarea directa
.... fuere el motivo), esto puede significar dos cosas: a) que el
no efectuar tareas forme parte de la modalidad de cooperancia de la
familia, segn la muestra ante el equipo, o b) que el mapa o diagrama que traz el equipo de la pauta de cooperancia de la familia, tal
como le fue expuesta en la primera sesin, no haya sido lo suficientemente isomorfo. En ambos casos el equipo debe redefinir su comprensin de las pautas familiares. Puede entonces encomendar una.
tarea directa como "experimento" para poner a prueba su nueva
descripcin. Si con posterioridad a esto la familia informa haber
cumplido la tarea "experimental", cabe inferir que la nueva descripcin del equipo es ms isomorfa que la anterior; pero si informa no
haber ejecutado la tarea experimental, esto le est diciendo al equipo que la ejecucin de tareas no forma parte de la modalidad de
cooperancia de esa familia. En uno y otro caso, la respuesta de la
que da cuenta la familia suministra al equipo mayor informacin
sobre cmo ser isomorfo y continuar cooperando con esta familia
en grado ptimo. Aun sin encomendar tareas directas, puede promoverse el cambio mediante mensajes lo bastante isomorfos como
para suministrar a la familia el adicional deseado. Por supuesto, el
equipo tambin puede continuar cooperando sin encomendar a la
familia ninguna tarea, o bien recurriendo a los relatos (vase supra,
punto 2). La familia no necesita hacer algo para cooperar, ya que no
se le ha pedido directamente que haga nada.
(Este mtodo es eficaz con familias renuentes o incluso con personas que acuden a la consulta en forma involuntaria).
Por ejemplo: el Sr. y la Sra. King acudieron a la consulta con su
hija Janet, de 14 aos, y contaron que el problema era lo que ocurra cuando Janet no consegua salirse con la suya. Aparte de sus
frecuentes berrinches, en ocasiones Janet se iba de la casa y permaneca afuera hasta una hora demasiado avanzada. Se le encomend a la
familia que en el intervalo hasta la prxima sesin, tomaran nota de
los lugares y momentos en que se producan esos altercados as como de las personas que participaban en ellos.
En la segunda sesin, ninguno de los tres pudo dar cuenta alguna
de estos detalles. Cierto es que muy poco despus de la sesin anterior Janet haba tenido una "gran pataleta", que perturb a todos; y
tambin haba habido otros berrinches a lo largo de la semana, pero
nadie poda recordar qu cosa haba sucedido o quines haban participado. El Sr. y la Sra. King siguieron quejndose del comportamiento de la hija, y a medida que avanzaba la sesin se volva claro
MAS PROCEDIMIENTOS
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embargo, sus quejas haban disminuido al mismo tiempo que la frecuencia de las rabietas de la hija.
Comentario. Esta quinta categora de pautas de respuesta familiar
es probablemente la que ms dificultades plantea al equipo para responder con mensajes isomorfos. Al principio, por lo general no resulta claro si el "incumplimiento" de la familia es un mensaje que le
dirige al equipo, en el sentido de que no se ha formado una idea clara de su probable modalidad de cooperancia, o si el incumplimiento
es en verdad la modalidad de cooperancia que la familia muestra. La
tarea experimental suele ser eficaz para aclarar esto.
Esta quinta categora puede exigir poner en prctica intervenciones paradjicas. Las pautas de la familia King pueden describirse
como incluyendo el mensaje siguiente: "Aydennos a cambiar/No
haremos nada para ayudarlos a que nos ayuden a cambiar". Esta
enunciacin, inferida por el equipo, es a todas luces autorreflexiva:
su segunda parte -colegida del incumplimiento de las tareas por la
familia- puede describirse como una "meta enunciacin" de la primera: la comenta en un nivel diferente. La correspondiente intervencin puede considerarse contraparadjica, ya que el mensaje del
equipo no hace ms que "explicar" el comportamiento problemtico y luego sugerir que nada puede hacerse hasta que el problema
quede resuelto. El equipo indica que la nica manera de resolver el
problema es que los padres demuestren que siguen involucrados con
su hija cuando el problema ha sido resuelto. Vale decir, le est diciendo a la familia que no cambie hasta que haya cambiado: imagen
especular de la descripcin que el equipo ha hecho del mensaje de la
familia King.
No obstante, estas acrobacias conceptuales no son necesarias. Los
conceptos de cooperancia y de isomorfismo sugieren una explicacin distinta. La familia King mostr al equipo que la ejecucin de
tareas no formaba parte de su modalidad de cooperancia, y en consecuencia lo mejor que poda hacer el equipo para cooperar con ella
era no encomendarle tarea alguna. La intervencin isomorfa puede
coincidir, desde un ngulo distinto, con las pautas familiares, a fin
de que la familia obtenga el adicional del cambio. Los cambios de
conducta posteriores muestran que, en efecto, haba alguna interconexin entre el mensaje y dichos cambios.
CURSOGRAMA O "RBOL DE DECISIONES"
Estas vietas clnicas ilustran las pautas de los informes que presentan las familias sobre sus respuestas y las intervenciones terapu-
MAS PROCEDIMIENTOS
MAS PROCEDIMIENTOS
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Varios terapeutas parecen coincidir en que el planeamiento de tajeas eficaces en terapia familiar es difcil, pues el plan no slo debe
abarcar la conducta perturbada de un individuo (el sntoma tradicional), sino tambin toda la pauta de interacciones familiares que
circunda. Adems, este modelo sugiere que deben tomarse en
cuenta las pautas del suprasistema.
El grupo de Miln (54) propuso un "ritual familiar", una tarea tnica que deba ejecutarse en un solo momento y que pareca destinada a socavar en forma espectacular la necesidad que tena la familia
de un sntoma. Sealaba el grupo que esta clase de tarea se amolda
idiosincrsicamente a un sistema familiar determinado, y debe ser
isomorfa en varios niveles. Estos rituales familiares son de difcil invencin y no puede aplicrselos a otras familias -por semejantes
que sean las descripciones efectuadas por los terapeutas. En poca
ms reciente, el grupo de Miln propuso una "prescripcin ritual"
(57) utilizable por mltiples familias que incluyen uno o ms nios
con problemas; salvo en algunos detalles secundarios, la prescripcin
no se modifica de una familia a otra. Un hecho importante es que
este grupo se ocupa de la utilidad que reviste para el equipo el desacato de la familia. Por su parte, Papp (51) postul la "prescripcin
del sistema", una "intervencin paradjica" por la cual se le pide a
la familia que contine haciendo lo que ya est haciendo, pero que
lo haga en bien de la familia y no porque no tiene ms remedio. Tanto Haley (38) como Minuchin (49), Andolfi (1), Watzlawick y otros
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(64) y de Shazer (19, 20, 22, 24), describen el empleo de tareas para promover el cambio.
Las tareas que resultan eficaces parecen seguir ciertas metapautas
o pautas de pautas). Goffman (31) ha estudiado el proceso de trocar una actividad "seria" en una actividad "ldica". A partir de su
estudio de los encuadres y el modo de modificarlos, estableci ciertos lineamientos para esta transformacin, que pueden emplearse
como metapautas. Es posible utilizarlos en su totalidad (24) o slo
en parte a fin de ayudar al terapeuta a planear tareas eficaces. Su
propsito es que el terapeuta siga basando sus planes en las pautas
familiares cuando stas se presentan modificadas o en un contexto
distinto.
LINEAMIENTOS
1. Los actos ldicos son ejecutados de modo tal que sus funciones "serias" ordinarias no se cumplen. Adems, se procura igualar
las capacidades de los "jugadores".
2. Ciertos actos normales son exagerados.
3. La secuencia normal acta como una pauta que no es seguida
total ni rigurosamente, sino que est sujeta a inicios y detenciones
arbitrarios.
4. Las actividades requeridas son repetitivas.
5. Cualquier jugador tiene la facultad de poner fin al juego una
vez iniciado.
6. Durante el juego, el orden de predominio puede mezclarse o
invertirse.
7. El juego parece independiente de todas las necesidades externas de los participantes, y dura ms que las interacciones efectivas
sobre las cuales ha sido pautado.
8. El juego es social, en la medida en que envuelve a ms de un
participante; por lo tanto, es ms fcil conservar su carcter ldico.
9. Ciertos signos sealan el comienzo y el fin del juego. (Adaptado de Goffman, 31, pgs. 41-43).
Una vez expuesta ante el terapeuta la modalidad de cooperancia
de la familia, estos lineamientos le servirn para planear mejor la tarea. La pauta familiar, su secuencia de conductas tal como ha sido
diagramada, deben constituir la base de esta clase de intervencin.
Hay que recurrir a los "hechos concretos" de la pauta que rodea el
motivo de la consulta, y estos lineamientos pueden ayudar al terapeuta a que decida cmo modificar la secuencia y el contexto en
que se lleva a cabo la pauta. En otras palabras, pueden permitirle
MAS PROCEDIMIENTOS
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saber de inmediato que hay algo diferente. Tanto ms para el compositor, desde el momento en que l "conoce" que algo anda "descaminado" cuando elabora la secuencia. A modo de experimento,
imaginemos que Juan Sebastin Bach hubiera compuesto la secuencia que presenta la figura 4.4.
Estas notas siguen una secuencia especfica: fa-la-si-do-la-re-do-sila. Si la ejecutamos en el piano, advertiremos que slo nos exige tocar teclas blancas. La meloda puede complacernos o no; como cualquier otra secuencia de obras humanas, esta msica puede ser percibida como eficaz o ineficaz por nosotros. En caso de que percibamos que "no es del todo correcta", y suponiendo que furamos
compositores que estamos experimentando, estamos facultados para
modificarla.
Imaginemos que Bach realmente compuso esta secuencia meldica tal como est y luego se dio cuenta de que algo le faltaba; poda
introducir diversos cambios. En primer lugar, poda modificar las diversas notas (o conductas) que componen la secuencia (p. ej., sustituir el "re" por un "do"); tambin poda modificar la tonalidad (designacin del contexto), sin duda la forma ms rpida y simple de
modificar la meloda. En verdad, Bach compuso una secuencia meldica como sta, pero con un pequeo cambio al comienzo, segn
muestra la figura 4.5.
MAS PROCEDIMIENTOS
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..rapia familiar breve poner en prctica este cambio de tonalidad -como probablemente tampoco lo sea para un compositor.
Totalismo. La msica es como cualquier otro sistema: una vez
efectuado un cambio, le seguirn naturalmente otros. El pasaje del
"si" al "si bemol" hizo algo ms que disminuir en un semitono la
nota correspondiente a la tercera lnea del pentagrama. Dentro del.
sistema musical, ese cambio de tonalidad tambin "modifica las relaciones" existentes entre todas las notas de la composicin. Por
ejemplo, entre el "re" y el "si" hay slo tres semitonos, mientras
que entre el "re" y el "si bemol" hay cuatro. Y esta diferencia de
un semitono persistir entre las notas de las dos secuencias en todos
los casos: en la escala que desciende hacia el "si bemol", las notas
siempre estarn separadas de ste por un semitono ms, en la escala
que asciende hacia el "si bemol", por un semitono menos.
En el sistema musical, el resultado de este pasaje del "si" al "si
bemol" entraa siempre los mismos resultados predecibles. Un "re"
es siempre un "re". Al menos en el lenguaje musical de Bach, no
hay posibilidad alguna de que al pasar del "si" al "si bemol", la nota siguiente quede situada en un punto intermedio entre dos teclas
contiguas del piano, y resulte "algo no exactamente igual al re". Ninguna nota puede estar a tres semitonos y medio de otra.
Cuando los especialistas en terapia familiar breve promueven un
cambio modificando la tonalidad, ayudan a la familia a aadir cierto
fragmento de conducta de una nueva clase al comienzo de la pauta
que motiv la consulta. Pero los cambios en la secuencia siguiente
no son siempre predecibles. Lo nico seguro es que la secuencia no
seguir siendo la misma. Habitualmente se dice que las secuencias
interaccionales son redundantes -por su propia naturaleza, quizs,
o al menos por la naturaleza de nuestras descripciones. Estas secuencias parecen rgidas, en razn de que slo conductas de una
misma clase pueden reemplazarse "espontneamente". Si se introduce un cambio de tonalidad, la nueva conducta acta como si abriera las puertas para cualquier fragmento aleatorio de comportamiento de una clase distinta. El cambio de tonalidad "destruye" la secuencia e introduce el azar en la interaccin. La nueva conducta puede obtener como respuesta una nota situada a tres semitonos y medio de la nota original, o sea, en los intersticios entre dos teclas del
piano. Por supuesto, la nueva conducta que el cambio de tonalidad
provoca est limitada por la gama de conductas posibles que el individuo aporta a la situacin. Dos familias pueden iniciar ambas una
"nueva secuencia" lanzando un chorro de agua con una pistola de
juguete, pero las secuencias resultantes en cada caso pueden ser muy
MAS
PROCEDIMIENTOS
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distintas. Aunque los mapas de las pautas familiares que confeccione el equipo sean muy semejantes, y decida utilizar un cambio de
tonalidad como parte de su intervencin, los resultados insistimospueden ser sumamente diferentes.
EJEMPLO CLNICO
La tcnica del cambio de tonalidad puede ser un instrumento eficaz para ser utilizado con parejas (o familias ms amplias) si la secuencia de conducta es clara, y el equipo ha comprobado que la
modalidad de cooperancia de la pareja incluye, segn sus informes,
el responder en forma literal a las tareas directas que se le han encomendado.
El Sr. y la Sra. Harper se han mudado recientemente a la ciudad
desde la aldea rural en que vivan. Una de las razones fundamentales
de este traslado fue que el Sr. Harper comenz a tener fama de violento, y a la Sra. Harper le molestaba que los vecinos pensasen que
la responsabilidad era de ella. Como el Sr. Harper haba vivido en
ese lugar toda su vida, se deca que sus repentinos estallidos de violencia en el hogar eran consecuencia de una falla de la Sra. Harper
Fuera de su casa, el Sr. Harper era un hombre manso y apacible, "incapaz de matar una mosca".
SESIN 1
Durante la sesin, el Sr. Harper hizo un alegato en su favor, mientras su esposa lo regaaba, instndolo a que aceptara la culpa que
tena por haber quebrado, una vez ms, sus promesas de no recurren
a la violencia. Desde la perspectiva del Sr. Harper, esa violencia no
se presentara si tan slo su esposa fuera un poco menos impredecible. El lo lamentaba -dijo-, pero era imposible vivir con los mtodos azarosos que empleaba su mujer para dirigir el hogar: un da l
volva a cenar y se encontraba con la mesa puesta; otro da, la comida tardaba horas en llegar a la mesa. Desde el punto de vista de la
Sra. Harper, el impredecible era su marido, ya que un da se quejaba
de que la comida era servida demasiado tarde, por lo cual al da siguente ella la tena lista cuando l llegaba a casa, y entonces l se
quejaba de que estuviera lista porque eso no le daba tiempo para relajarse y leer el peridico antes de cenar. El Sr. Harper se disculp
por causar estas molestias a su mujer, pero sostuvo que le era imposible prever la cantidad de trabajo que iba a tener cada da en su empleo.
100
MAS PROCEDIMIENTOS
101
a sus violentas disputas: la mudanza a la ciudad, el cambio del horario de la cena, sus respectivas promesas, el autocontrol de cada uno,
y ahora la terapia. Sin duda alguna dijeron, todo esto debi de
haberlos frustrado, y estaran anhelando poner pronto fin a los hechos de violencia; pero el equipo se preguntaba si se daran por satisfechos con un mtodo que simplemente hiciera cesar la violencia,
sin permitirles descubrir jams "por qu sucedan estos hechos de
violencia" o bien "quin era el culpable". Los esposos Harper coincidieron en que para ellos lo fundamental era detener los hechos de
violencia. El conductor les indic entonces que, una vez detenidos
stos, podra quizs responderse a tales interrogantes.
A continuacin les entreg unas notas preparadas de antemano,
que cada cual deba mantener en secreto respecto del otro; pronto
se enteraran de su contenido. Las notas decan lo siguiente:
102
1. Sr. Harper: cada vez que vuelva a su casa con un cierto enojo,
aunque ste sea mnimo, debe entrar por la puerta de atrs o, si entra por la de adelante, debe hacerlo de espaldas.
2.- Sra. Harper: escoja una hora cualquiera para cenar, sin importar cul podra ser, a su juicio, la hora deseada por su marido. Adems, en caso de estar mnimamente enojada, o en caso de suponer
que l puede estarlo, esprelo en la cocina o en el bao, y no en la
sala de recibo.
Los cnyuges leyeron las notas y concordaron en poner a prueba
estas ideas.
Se planearon estos indicios basndose en la prediccin de que los esposos
seran capaces de encontrar un modo de cooperar con las tareas directas, y que
hallaran graciosos los resultados de estas bromas. Con que uno solo de ellos siguiera los indicios (y ms aun si lo hacan ambos), la "secuencia de la llegada a
casa del marido" seria bastante distinta y el encuentro tendra una tonalidad
diversa. Le era imposible predecir al equipo exactamente qu conductas sobrevendran; por otra parte, no eran tan ingenuos como para pensar que este cambio de tonalidad necesariamente pondra fin a los hechos de violencia, ya que
era muy probable que en la secuencia de sucesos y en los encuadres que los circundaban hubiera muchas otras cosas que ellos ignoraban. Pero este enfoque
poda impedir dichos hechos de violencia entre la primera y la segunda sesin,
que es el alcance de las intervenciones y predicciones efectuadas en la primera
sesin.
SESIN 2
Tanto el Sr. como la Sra. Harper procuraron poner en prctica las
sugerencias contenidas en las notas. El da en que el Sr. Harper entr
de espaldas por la puerta de adelante, un poco antes de lo que su
esposa haba previsto, ella estall en una carcajada y l muy pronto
se sum a la risa. Otro da, ella estaba esperndolo en el bao cuando l ingres por la puerta trasera, y se sorprendi de encontrarlo
ms tarde en la cocina aguardndola. La Sra. Harper decidi fijar
para la cena una hora que era 45 minutos ms tarde del momento
habitual en que su marido llegaba al hogar.
En el pasado, cuando sucedieron entre ellos hechos de violencia,
jams haban acontecido en la cocina, ni en el bao, ni en el stano,
ni fuera de la casa. Por otra parte, estos hechos solan producirse
dos o tres veces en un perodo de dos semanas, y luego pasaban varios meses sin que se presentasen. En el curso de estos meses, podan
tener discusiones pero no desembocaban en hechos de violencia; y
ninguno de los dos tena bien en claro cules de sus discusiones ori-
MAS PROCEDIMIENTOS
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MAS PROCEDIMIENTOS
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REGLAS
SEGUIMIENTO
106
CAPITULO 5
LA CINTA DE MOEBIUS
CONFUSIN SISTEMICA
Antes de que se formulara la teora binocular del cambio, el concepto de isomorfismo fue desarrollado como una herramienta descriptiva para explicar, a posteriori, el diseo de las intervenciones
Luego, el concepto se ampli, utilizndoselo como una herramienta
prescriptiva que orientara los empeos del terapeuta para promover
el cambio interviniendo desde un ngulo distinto, sobre la base de la
descripcin de las pautas familiares. Esta evolucin llev a las tcnicas de diagramacin que hemos expuesto en el captulo 3.
El rbol de las decisiones presentado en el captulo 4 se postul
en primer lugar, para organizar las observaciones del equipo sobre
las pautas de cooperancia que exhiban las familias, y en segundo lugar, para ayudarlo a decidir qu intervencin podra impulsar ms
probablemente sus empeos hacia la cooperancia. En este captulo
nos ocuparemos del uso de la columna 4 del rbol de decisiones, r e ferente a los informes sobre respuestas vagas o confusas.
En muchos aspectos, la columna 4 del rbol de decisiones es producto de la tentativa de insertar una anomala en un esquema conceptual preexistente. El modelo de terapia breve del IIM (65, 67) no
ofrece al terapeuta lineamientos claros para el tratamiento de p a r e jas o familias que se muestran incapaces de describir una meta concreta y especfica en la terapia, ni tampoco para tratar a aquellas
familias en las que cada miembro tiene una meta especfica que excluye las metas de los dems.
La "tcnica de la confusin" de Erickson (35) es una tcnica de
induccin del trance que se basa en crear una confusin tras otra en
el sujeto, hasta que ste se muestre dispuesto a aceptar una formulacin clara del hipnotizador. Erickson se apoya en el principio bsco
de aceptar lo que el cliente trae (su confusin, en este caso), y til
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LA
CINTA
DE
MOEBIUS
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EL PROTOTIPO
Cuando la creacin del modelo de terapia familiar breve estaba en
sus comienzos, poco despus de haber inventado la pausa para la
consulta y de haber advertido la necesidad de una perspectiva ecosistmica, pero antes de que se crease la teora binocular del cambio
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LA CINTA DE MOEBIUS
111
nara menos confusa y procurara que se le esclarecieran algunas cosas. Esto se basaba en una versin generalizada de la tcnica de la
confusin (18, 20), pero en esta situacin era un procedimiento experimental, ya que el tipo de confusin sistmica que presentaba esta pareja era de una ndole diferente.
Antes de que el equipo lograra este avance, pas muchas horas
con otros miembros del CTFB tratando de averiguar entre todos cmo poda ayudarse a la pareja a ser ms concreta y especfica; y ninguna de las ideas que surgieron en estas reuniones result til. Tanto
el equipo como los otros miembros del CTFB eran vctimas de su
propio encuadre, segn el cual la terapia breve, para ser eficaz, necesita contar con una meta concreta y especfica nocin heredada
del IIM-. Slo cuando este particular conjunto de pautas se descri~ como "confuso", el equipo pudo lanzarse a utilizar la tcnica de
la confusin. El tratamiento de esta pareja fue anterior al desarrollo
del rbol de decisiones, y en verdad fue uno de los factores que llevaron al diseo de ese rbol y a la inclusin de la columna 4 en l.
una pareja acudi al CTFB para solicitar ayuda. Su llamada telefnica inicial fue sucinta y en ella transmiti informacin principalmente demogrfica.
En muchos aspectos, la terapia de esta pareja cumpli un papel
germinal en la creacin del nuevo modelo y de la teora binocular
del cambio. A partir de sus numerosos repasos de las videocintas, el
equipo aprendi a ver, a la postre, que los empeos de esta pareja
eran tentativas de cooperancia, y no formas de "resistencia al cambio". Durante las tres primeras sesiones, el equipo (de Shazer actuaba como su conductor, y Marilyn LaCourt estaba tras la pantalla)
dise tareas a fin de ayudar a la pareja a ser ms concreta y especfica en lo tocante a su situacin y lo que quera modificar. La pareja
responda en una forma que, a juicio de ella, era razonable: desde su
punto de vista, su respuesta era exactamente lo que se le haba demandado con la tarea. No obstante, esas respuestas confundan al
equipo, quien se reuni varias veces en el intervalo entre sesiones a
fin de repasar las cintas; y poco antes de la cuarta sesin, elabor
una intervencin isomorfa con las pautas de esta pareja y acorde
con su modalidad de cooperancia.
Cuando se plane esta intervencin, el equipo procuraba establecer una correspondencia con el particular uso que haca del lenguaje
esta pareja y, adems, con la ndole interaccional de su motivo de
consulta. Bsicamente, la idea fue que si era posible agregar aun ms
comisin a las pautas de la pareja, sta invertira su campo, se tor-
SESIN 1
1 1 2
quisiera
salir de esto para poder escuchar mejor, particularmente a Peter. Creo que eso es algo que lo abarca todo.
De Shazer:
Ah. sa es una muy buena descripcin. Y en cunto
Peter?
Peter: Bueno, en cuanto a m, se trata de aumentar mi nivel de
confianza de manera de, algo as como desarrollar o intensificar mi
capacidad para hacerme responsable de m mismo y de mis comportamientos. Yo tiendo a pasarle el fardo a los dems, o a culparlos
de ciertas situaciones que se producen por mi inactividad o mi falta
de respuesta. Creo que sta es una de las grandes y verdaderas trabas.
Creo... lo que dijo Brbara, expresin sexual... liberarme para permitirme el placer, o estar en el aqu y ahora, en lugar de andar imaginando situaciones antes de que sucedan, o estableciendo las cosas
con un rgido pensamiento analtico. Algo as como dejar de lado
mi ego y aceptarme a m mismo.
De Shazer: Muy bien.
Brbara (superponindose): Terminaste? Para m una cosa importante es aceptar la responsabilidad por m misma.
De Shazer: Bien. Qu la impuls a llamarnos la semana pasada?
Por qu nos llam en esa oportunidad y no, digamos, hace seis semanas?
Brbara: Bueno, esto ha sido postergado. Dilacin. Sigo pensando... cada uno de nosotros sigue pensando... bueno, que si tan slo
trabajsemos en esto, aplicando nuestras habilidades para la comunicacin, seramos capaces de manejarlo. No s qu ocurri la semana
pasada. Realmente yo estaba otra vez en el fondo del pozo.
Peter: Creo que, en cuanto a m, fue un aumento de irritabilidad.
Algo as como una intensificacin hasta el punto de hartarme de las
cosas tal como venan sucediendo. Nuestras conversaciones eran irritantes para ambos. Yo perda la paciencia y tena ganas de largarme.
Y Brbara se quedaba deprimida, en el fondo del pozo. En cuanto a
m, era algo as como haber llegado al tope, y me dije: "Tal vez deberamos intentarlo".
Brbara: Yo es como que me asust bastante y... este... qu cmo me siento? Eso se siente como muy desconsolador. (Llora).
De Shazer (rascndose la cabeza): Qu es lo desconsolador?
Brbara: Yo misma, y me pregunto si soy estimable como ser humano.
Peter: Cuando Brbara est as, yo me aparto de la relacin.
De Shazer (con expresin desconcertada): Y despus que se aparta, cmo vuelve a acercarse?
Peter: A veces me controlo, me doy cuenta de lo que hago. Otras
LA CINTA DE MOEBIUS
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Cuando el conductor volvi a la sesin, le pidi a la pareja quepensase cmo tendra que desarrollarse la terapia para que ellos se
sintiesen seguros de que haba tenido xito. Ambos dijeron que sta
era una buena idea, y as termin la sesin. El equipo predijo que:
Brbara y Peter retornaran para la sesin siguiente.
SESIN 2
La respuesta de la pareja ante esta tarea se centr en torno de varias cuestiones: 1) la necesidad de amor incondicional; 2) el interrogante acerca de cmo poda saberse qu es lo "verdaderamente real";
y 3) su sensacin de estar atrapada en sus mutuos intentos de complacerse. Una vez resueltas estas cuestiones, afirmaron, ellos diran
que la terapia tuvo xito. Sin embargo, el conductor no logr que le
dijeran cmo habran de saber que estas tres cuestiones haban sido
resueltas, o qu cosas habran cambiado en sus comportamientos o
en su vida en general cuando eso sucediera. Le contestaron que ellos
"simplemente lo sabran, y se sentiran mejor".
El equipo procur entonces desarrollar una tarea ms prxima al
lenguaje y a la visin del mundo de esta pareja. El conductor les pidio que pensaran cmo poda estar seguro, cada uno de ellos, de
que el otro realmente lo amaba. "Qu comportamientos manifiestos les permitiran saber a ustedes que esta cuestin est en vas de
resolverse?" En el momento de despedirse, fue telefoneada esta pregunta: "Cmo anda el proyecto de la reliquia?" Peter no haba trabajado en absoluto en ella.
SESIN 3
Peter anunci al equipo (situado tras la pantalla) que haba trabajado durante diez horas en la reliquia mientras Brbara se encontraba fuera de la ciudad. No necesit que ella se lo recordase ni lo
regaase al respecto: lo hizo por propia iniciativa. Ambos coincidieron en que cuando Brbara estaba en casa las cosas andaban menos
tensas que antes. Ella no se haba sentido triste ni deprimida, ni l
haba experimentado la necesidad de "apartarse". Tambin se puso
de manifiesto que haban mantenido relaciones sexuales por primera vez en cinco meses tema al que aludieron en la primera sesin,
pero que evitaron desde entonces. Haban reflexionado acerca de
la tarea encomendada, pero ninguno era capaz de proponer alguna
seal de conducta especfica: repitieron que cada uno de ellos "simplemente sabra con certeza" que el otro lo amaba realmente.
LA CINTA DE MOEBIUS
115
Durante la pausa para consulta, el equipo decidi que tampoco la tarea anterior haba "dado en el blanco". Si bien la pareja la cumpli de manera literal, el equipo segua cegado por su bsqueda de conductas concretas y espes. Resolvi proponerles una tarea que incluyera la necesidad de alguna
accin tena conciencia de que "algo era diferente" y de que Brbara y Peter haban efectuado algunos cambios: haba menos tristeza en Brbara, me
nos apartamientos en Peter, y ms actividad sexual en ambos. No obstante,
el equipo no estaba tan seguro de que estos cambios fueran "diferencias que
establecen una diferencia". Vale decir, no saba si esos cambios pertenecan
al
antiguo encuadre de la pareja o eran pasos para salir de l. Como toda
la sesin pareca ms clara que la anterior, supuso que los cambios tenan alguna conexin con la terapia; y aun cuando esta premisa resultara falsa, decidi actuar "como s" las diferencias obedecieran a la terapia, ya que Br
bara y Peter haban hecho ciertas modificaciones desde el inicio de sta, y
deba aprovechrselas.
116
a Peter, pues entenda que ella haba comenzado algo nuevo. (De esta manera, puede verse que Brbara haba cumplido con la tarea sin
darse cuenta). Peter haba propuesto jugar al bowling (al que haca
muchos aos que ambos no se dedicaban), en tanto que Brbara haba sugerido jugar al "Monopolio" (un juego de saln que nunca haban jugado juntos).
El tema principal de la sesin gir en torno de esta pregunta esencial: "Cmo puedo saber que algo es verdaderamente real?" Cuando las cosas iban mal, Cada uno "de ellos dudaba de que el otro lo
amase de veras, incondicionalmente. Y el cumplimiento o incumplimiento de la tarea por parte de Brbara arrojaba ms dudas aun sobre esta pregunta: cmo pudo Peter haber percibido que ella cumpli con la tarea, si ella misma pensaba que no lo haba hecho? (Esta cuestin del cumplimiento o no de la tarea es otro ejemplo de la
confusin sistmica).
Al final de la sesin, el conductor les present una intervencin
programada por el equipo entre ambas sesiones, que se atena estrechamente al estilo interaccional y comunicacional de la pareja.
De Shazer: Sabe una cosa, Brbara? Su tristeza cumple otra finalidad. No es nicamente para autoprotegerse: con ella tambin
protege a Peter.
Brbara (hace una seal de asentimiento con la cabeza): No se
me haba ocurrido.
De Shazer: Lo protege de diversos modos. En primer lugar, hace
que l trate de animarla. As, lo protege de... si eso no ocurriera, l
se vera forzado a creer que usted lo ama en serio.
Brbara. No haba visto las cosas de ese modo.
De Shazer: Y lo mismo con su actitud ldica, Peter. Con eso la
protege a Brbara por lo que podemos saber- de tener que enfrentarse con el hecho de que usted la ama realmente y, por lo tanto, de
verse obligada a creer en la realidad de su amor. As pues, la actitud
ldica de Peter y la tristeza de Brbara funcionan muy bien. Y nada
tiene de malo jugar o ponerse triste. Nosotros creemos que ustedes
deben continuar jugando o ponindose tristes, segn las necesidades.
(A lo largo de todo este mensaje, se observ que tanto Brbara
como Peter hacan seales de asentimiento con la cabeza).
Comentario. En las cuatro primeras sesiones, Brbara haba dicho
que su tristeza era una medida de autoproteccin: cuando ella estaba triste, no se abalanzaba en pos de Peter, y en consecuencia, no
corra el riesgo de ser rechazada por l. A su vez, ella vea la actitud
LA CINTA DE MOEBIUS
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cambios de Brbara y Peter con el conductor. (El equipo haba pedido a varios otros miembros del CTFB que se les sumaran en esta
sesin, por las dudas de que recrudeciese la confusin original). Durante esta sesin Brbara y Peter se expresaron de manera mucho
ms concisa. La reliquia ya estaba terminada y lista para la venta.
Haban fijado una fecha para la mudanza, y Peter hizo un viaje por
motivos de trabajo, consiguiendo un cargo que le pareca conveniente . Adems, haban resuelto que, una vez terminada la mudanza,
Brbara quedara embarazada. Antes de esta sesin, todas estas resoluciones eran "algo para pensar en el futuro", una decisin que tomaran "algn da". De comn acuerdo, la sesin no dur ms que
media hora, y se dio por concluida la terapia.
Sin duda, en las interacciones observadas de Brbara y Peter, y de
ambos con el conductor, exista una "diferencia que establece una
diferencia". Los miembros del CTFB que asistieron a esta sesin final haban visto previamente las videocintas, y tambin ellos comprobaron la enorme diferencia entre la primera sesin y la ltima.
Ms tarde, los miembros del CTFB volvieron a repasar las cintas
en la esperanza de aclarar las razones de la eficacia de esta intervencin. El equipo no estaba del todo satisfecho; no crea que se tratase simplemente de devolver a la pareja su confusin en primer lugar,
para luego verla rebelarse y, en tercer trmino, lograr su mayor claridad. Se busc una explicacin ms rigurosa: en el pasado la tcnica
de la confusin haba producido a menudo resultados similares, y
por lo tanto se haba dado por buena la explicacin simple. Este caso ofreca una singular oportunidad para comprender mejor la aplicacin de la tcnica y la elaboracin particular de esta intervencin.
A medida que el equipo repasaba las cintas, se les volvi cada vez
ms clara -si as puede decirse- la confusin de la pareja: vale decir,
sta resultaba cada vez ms confusa para el equipo. El lenguaje empleado por Brbara y Peter estaba lleno de incongruencias, ambigedades e indefiniciones; y a menudo sus enunciaciones eran gramaticalmente torpes y carecan de un ndice referencial (2,3). Suele
considerarse que estos fenmenos lingsticos son de naturaleza "individual" y no "sistmica"; sin embargo, la observacin de las cintas
permiti al equipo comprobar la ndole sistmica de estas dificultades lingsticas. Poda sostenerse que Peter y Brbara compartan
una gramtica singular, y que cada uno de ellos crea entender esa
gramtica y que el otro la entenda. A medida que los miembros del
CTFB prestaron atencin a sus conversaciones, vieron cmo se acumulaban, una tras otra, frases que carecan de ndices referenciales.
LA CINTA DE MOEBIUS
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cia de la pareja, sta recibi el adicional del cambio perceptual, como lo pusieron de manifiesto los cambios en su conducta.
Repasando la intervencin de la cuarta sesin se puso de relieve
nuiles aspectos propendieron a que esta intervencin, bastante contusa, fuese tan eficaz. La intervencin fue isomorfa, pero desde un
ngulo distinto, que reencuadr las lamentaciones individuales convirtindolas en lamentaciones interaccionales o mutuas. La secuencia
cia "tristeza-conducta ldica", as puntuada, ofreci al equipo una
descripcin que le sirvi de base interaccional para su intervencin,
tal como lo ilustra la figura 5.3.
El encuadre de Brbara haca que sta viera su tristeza como una
medida de autoproteccin, y la conducta ldica de Peter como una
medida de autoproteccin tambin, que agravaba su propia situacin (la de Brbara). Por otro lado, para Peter la tristeza de Brbara
era una medida de autoproteccin que agravaba su propia situacin,
y, a su juicio, su apartamiento agravaba adems la situacin de ella
La intervencin reencuadr toda la idea de la proteccin (que en
la figura 5.3 estara dada por las flechas entre III y II, y entre IV y
III), a fin de poner de relieve que la circularidad era mutua. De este
modo (desde este nuevo ngulo), toda proteccin pasaba a ser "proteccin del otro" en lugar de autoproteccin. Vale decir, esta intervencin "tipo cinta de Moebius" estableca que los motivos que llevaban a Brbara a quejarse de Peter en realidad la protegan, mientras que los motivos que llevaban a Peter a quejarse de Brbara lo
protegan a l.
La intervencin tipo cinta de Moebius estableca que la secuencia
cumpla en esta relacin un propsito definido. La proteccin mutua haca que ninguno de ellos pudiese saber que el otro en verdad
lo amaba incondicionalmente. Este reaseguramiento respecto de la
"realidad" del amor del otro era algo que ambos deseaban, y un tema muy debatido entre ellos. As pues, la intervencin tipo cinta de
Moebius se volvi sobre s misma, y describi la queja de cada uno
(rotulada ahora como "medida de proteccin del otro") diciendo
que tenda a proteger al otro para que no alcanzase una meta muy
deseada.
El estudio de esta intervencin prototpica permiti al CTFB
aprender muchsimo acerca del modo en que las familias muestran
sus afanes por cooperar segn su propio y singular estilo. Adems,
se aprendi cmo promover la cooperancia entre la familia y el equipo. La intervencin tipo cinta de Moebius destac la utilidad de las
intervenciones isomorfas. A partir del diagrama homlogo de esta
intervencin (figura 5.4), el equipo poda desarrollar otras interven-
LA CINTA DE MOEBIUS
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LA CINTA DE MOEBIUS
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necia en silencio (por algn motivo); 2) Tony interpretaba esto como que "ella estaba de mal talante", lo cual lo instaba a tratar de
averiguar "por qu"; entonces, 3) ella le responda "por nada"; 4)
esto no satisfaca a Tony, quien segua hacindole preguntas; 5) ella
le peda que la dejara tranquila, y 6) si l no lo haca, tenan una
pelea Vale decir, los silencios de Meg eran considerados "la causa"
de que l le formulara preguntas, en tanto que las preguntas de Tony eran consideradas "la causa" de que ella permaneciera en silencio.
Como respuesta a la tarea encomendada en la sesin anterior,
Meg dijo que no quera que Tony perdiese su sentido del humor ni
su manera frontal de abordar los desafos que le planteaba la vida;
tampoco quera que dejara de ser amable y comprensivo con la gente. A juicio de ella, Tony era una persona paciente y sociable, y no
quera que esto cambiase.
Tony, por su parte, no quera perderse los buenos momentos que
pasaban cuando estaban lejos de los chicos. Adems, consideraba a
Meg una persona sincera, prudente y fiel, le gustaba su tenacidad, y
no quera que cambiase nada de esto. (Haba aqu una leve modificacin de la tarea solicitada, que tena que ver con su relacin mutua y no con la personalidad del otro. En consecuencia, cualquier
tarea posterior deba dar cabida a cierta modificacin).
La descripcin que hicieron de la secuencia tpica de conductas
que originaba sus peleas guardaba notable semejanza con la "secuencia de reacciones mutuas" del ejemplo clnico anterior; fue as
como se elabor un mapa similar (figura 5.5). Este diagrama de las
pautas de Meg y Tony llev al terapeuta a contemplar la posibilidad de recurrir, en alguna sesin posterior, a una intervencin tipo
cinta de Moebius, que deba ser lo suficientemente isomorfa como
para promover cambios significativos en la pareja.
Puesto que Meg y Tony haban vuelto a convivir, la primera parte
de su meta se haba cumplido. Sin embargo, esto no pareca sacarlos
de su encuadre anterior: slo era un desplazamiento dentro del mismo encuadre. Al no modificarse el encuadre, subsista la posibilidad
de que volvieran a separarse. Encontrar maneras de discutir que no
los dejaran furiosos al ir a la cama pareca una seal razonable para
aadir a la segunda parte de su meta: la de permanecer juntos en
forma duradera. El terapeuta no tena bien claro cul era la seal
que Meg y Tony empleaban para poner fin a sus discusiones, en particular aquellas que concluan sin un fundamento racional claro.
De Shazer: Estoy impresionado por todos los cambios que uste-,
des han logrado en las ltimas tres semanas. Creo que han trabajado
126
LA CINTA DE MOEB1US
duro para conseguir convivir, y que han podido ser amables uno con
el otro. S que evitar las discusiones no ha sido fcil para usted
pero lo han logrado. Una sola pelea en el curso de una semana es
buen resultado, en particular dado que ninguno de los dos se fue
nunca furioso a la cama.
Sin embargo, me inquieta lo rpido que van avanzando las cosas.
Me da la sensacin de que bastara con que una sola discusin en
ustedes terminase de modo tal que uno de los dos se fuera furioso a
la cama, para que ambos creyeran que "todo volvi a ser como antes" y volvieran a separarse.
Por mucho que quieran poner fin a las peleas, no es probable que
esto suceda en el futuro inmediato. Todas las personas que conviven
tienen discrepancias de vez en cuando. As pues, quisiera que antes
de nuestro prximo encuentro, presten atencin al modo en que cesan estas discusiones o altercados entre ustedes: cmo hacen para
ponerle fin, o por lo menos para poner fin a una "vuelta" particular
Antenlo y luego me lo dan por escrito.
Tony: Lo que quiere saber es qu sucede luego de las peleas?
De Shazer: Correcto. Quiero saber qu es lo que hace cada uno
de ustedes para no irse furioso a la cama.
Meg: Ya me doy cuenta; y quiere que lo escribamos.
Dos semanas despus, Meg telefone para pedir que se suspendiera la sesin pues Tony haba tenido que viajar por motivos de trabajo. Cont que las cosas entre ellos iban estupendamente bien: Otras
entrevistas posteriores fueron tambin canceladas, y en todos los cacosas seguan "estupendas". Finalmente, la tercera sesin tuvo lugar doce semanas despus de la segunda.
Meg y Tony llegaron en medio de una disputa. Ninguno de los
dos trabajaba ese da, y la reyerta haba comenzado diez horas antes.
Informaron que en el curso de las doce semanas anteriores slo haban tenido un par de pequeas peleas, aunque ninguno recordaba
cmo haban cesado.
Meg: Nada de eso importara, con slo que l me aceptase como soy
Tony: Pero t te pasas todo el tiempo saltando de un estado de
nimo al otro. Yo nunca s dnde estoy parado con respecto a ti;
cuando guardas silencio, no hago otra cosa que preguntarme: "Qu
es lo que le habr hecho?"
Meg: Y yo te digo una y otra vez que no me hiciste nada, que solamente necesito tiempo para estar sola y tranquila.
Tony: Pero yo siempre pienso que t ests furiosa y...
Meg (superponindose): Pero lo que ocurre es que simplemente
estoy cansada.
Tony dijo que necesitaba reasegurarse permanentemente de que
Meg lo quera y no estaba enojada con l, y que se pona "celoso"
LA CINTA DE MOEBIUS
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1) la discrepancia se convertira en una pelea y la pareja se separara, o bien 2) por alguna razn ari inexplicable, las cosas mejoraran sbitamente, como sucedi luego de las dos primeras sesiones. En caso
de que resultara acertada la primera prediccin, el terapeuta pencaba que su separacin sera breve.
Luego de la sesin, el terapeuta plane una intervencin basada
en el diagrama tipo cinta de Moebius. Las quejas de Meg sobre Tony
eran consecuencia directa de las quejas de Tony sobre Meg. Los silencios de ella eran definidos como la causa de sus indagatorias, en
tanto que sus indagatorias eran ia causa (le que ella insistiese en guardar silencio. El isomorfismo entre las pautas de lamentaciones mutuas de Meg y Tony, y las de Brbara y Peter en el caso clnico que
antes presentamos, sumado a la forma vaga, errtil y confusa en que
se fijaban los horarios de sesiones -l o cual a su vez confunda la eficacia de las tareas y los informes acerca de sus respuestas, todo
ello llevaba a pensar en la posible utilidad de una intervencin basada en un diagrama tipo cinta de Moebius. Cuando el terapeuta repas el caso y comenz a planear la intervencin, se le puso en evidencia que la secuencia de reacciones mutuas de Meg y Tony se corresponda con la del caso clnico previo. En ambos casos el desencadenante inicial de la secuencia era "desconocido", y en ambos era seguido por las quejas de los cnyuges, que se iban alternando una
tras otra.
De Shazer: Realmente me impresiona la capacidad que han demostrado para estar pendientes de esto y empearse en resolver este
problema. Por rns que a m tambin me parece conveniente que
cada uno de ustedes acepte al otro tal como es, no pienso que esto
sea fcil ni rpido. Sospecho que ustedes dos, Meg y Tony, continuarn evitando las peleas... en la medida de sus posibilidades.
Tony: Pero qu debemos hacer?
Meg: Las cosas no pueden seguir de este modo.
De Shazer: Bueno, no lo s. Es ms complicado de lo que pens
en un principio. Tengo que reflexionar sobre esto. Supongo que ustedes necesitan continuar pendientes del asunto.
Tony: Pero... qu pasa con los vaivenes de sus estados de nimo?
Meg: Y qu pasa con sus celos?
De Shazer: Por ahora, esto me confunde. Necesito conversar con
mi grupo acerca del tema.
SESIN 4
130
estos perodos pacficos, por lo cual el terapeuta decidi que convena ayudarlos a que abandonaran su antiguo encuadre, que si bien
pareca resquebrajado, todava no estaba roto del todo. Tal vez intervenir en la secuencia de reacciones mutuas durante un perodo
pacfico fuera ms eficaz; si el desenlace era el pronosticado, las cosas podran cambiar lo suficiente como para que abandonaran su
viejo encuadre.
Tras la pausa, el terapeuta les ley el siguiente mensaje:
De Shazer: He hablado con el psiquiatra que nos asesora y con el
resto del grupo acerca de la situacin de ustedes, y hemos arribado a
varias conclusiones. Se las comentar, aunque no estoy seguro de
coincidir con todas ellas.
Cuando ustedes cancelaron telefnicamente la entrevista, dos semanas atrs, me comentaron que yo pareca estar dejando de lado el
tema de los celos y de los vaivenes en los estados de nimo de Meg
Me alegra que lo hayan sealado. A veces ocurren estas cosas. Tal
vez incurr en negligencia. Mi nica excusa es que creo que estos
otros temas son fundamentales.
Pensamos que Meg se queda en silencio cuando lo que oye es demasiado para ella. Sospechamos que es una persona muy sensible a
los ruidos, y por eso, cuando se siente abrumada por demasiadas palabras, cierra las orejas. No importa cul sea el ruido: lo mismo da
que sean palabras, melodas, bocinas de automvil, etctera.
Por su parte, a Tony lo trastorna ver las cosas fuera de lugar. Sospechamos que es muy sensible en el aspecto visual, y ve seales "ro-
jas" cuando hay demasiado desorden y confusin. Si tiene ante s
muchas cosas fuera de lugar, se cansa de trabajar y se perturba.
Creemos tambin, Tony, que en algn momento, tal vez en su
infancia, usted aprendi que "guardar silencio equivale a montar en
clera". Tal vez su madre se enfureca con usted y lo obligaba a
mantenerse quieto y callado; y desde luego, tambin usted se enfurecia con ella. Fue as que para usted permanecer en silencio pas a
significar estar furioso.
Pero ah no acaba la cosa; no es tan simple el asunto. Pensamos
que los celos y los cambios de estado de nimo son una parte muy
importante en la relacin de ustedes. Yo tena la esperanza de ayudarlos a que se llevaran mejor, a que mantuvieran su convivencia
matrimonial sin estropear las cosas. Porque para m los silencios y
los celos son fundamentales. Sospechamos que para ustedes esto va
a ser algo problemtico. Lo es tambin para m. Por lo tanto, les pi-
LA CINTA DE MOEBIUS
131
132
que jams los haba visto disfrutando tanto como ahora. "Cuesta
i m a g i n a r que s e a la misma pareja. Ya no se pelean m s " . Otra llamada de Meg, varios meses despus, ratific este informe.
ISOMORFISMO
Las secuencias de conducta correspondientes a los dos casos analizados pueden presentarse juntas en un mismo esquema (figura 5 . 6 )
El isomorfismo entre las dos pautas de lamentaciones suministra un
adicional al terapeuta y al equipo, ya que estos dos estudios de casos diferentes ofrecen perspectivas tambin diferentes, generador
de ideas novedosas acerca de los sistemas.
Lo llamativo es que el diagrama de las intervenciones tipo
de Moebius permite describir las intervenciones efectuadas en ambos casos, y los dos diagramas pueden combinarse, como se hizo en
la figura 5.7.
Desde luego, el primer caso sirvi de modelo al segundo, as como a varios otros; pero lo llamativo es el isomorfismo que prevalece
entre los dos diagramas y la similitud de los informes de las parejas
SECUENCIA DE CONDUCTAS
134
CAPITULO 6
Una versin diferente del contenido de este captulo apareci en "On transforming symptoms: An approach to an Erickson procedure", American Journal of Clinical Hypnosis, 22: 17-28, 1979.
LA
TEORA
DEL
EQUILIBRIO
137
tanto o como x (grfico 5). El grfico 5 ilustra un caso especial, denominado "equilibrio en el vaco" (14), en el que todas las relaciones descriptas son negativas; esta configuracin tiende a perdurar, y
se considera que mantiene un equilibrio en el vaco.
Cartwright y Harary (14) generalizaron la teora de Heider a fin
de aplicarla a grupos o a unidades de cualquier cantidad de miembros, y ms tarde incluyeron en ella tanto las relaciones recprocas
(simtricas) como las no recprocas (complementarias). En esencia,
se utilizan siempre las mismas medidas del equilibrio: se entiende
que existe un estado de equilibrio si para el observador 1) todas las
relaciones descriptas son positivas, o 2) hay un nmero par de relaciones negativas. Existe un equilibrio en el vaco si todas las relaciones son rotuladas como "negativas por el observador".
Tomando como herramienta descriptiva la teora del equilibrio,
mediante la explicitacin de uno de los mtodos de Erickson ilustraremos de qu modo su enfoque est orientado hacia una meta. Trazaremos un diagrama del procedimiento de Erickson basndonos en
la teora del equilibrio, y luego, ampliando el diagrama, mostraremos el carcter de orientacin -hacia una meta que posee la terapia
familiar breve.
Figura 6.1
Pero lo ms importante es que, al parecer no consista exclusivamente en la supresin de los sntomas. En los casos en que desembarazar al sujeto de un sntoma formaba parte del plan de Erickson,
como ocurra la mayora de las veces, esto era en cierta forma secundario con respecto al resultado de que l daba cuenta. Por ejemplo, una mujer fue a verlo porque padeca una lcera de estmago,
y Erickson la ayud a que pusiera fin a las visitas de sus parientes
polticos, que a ella le resultaban desagradables (una autntica intervencin sistmica). Una vez lograda esa "sea!" o submeta, la lcera
desapareci, como producto colateral del cambio en la relacin entre esta mujer y sus parientes (37).
Luego de examinar los casos que Haley clasific en cada una de
las fases del ciclo de la vida familiar, se ponen de relieve ciertas regularidades en los planes que segua Erickson. Una de estas constantes
es que su enfoque estaba determinado en mayor medida por la situacin o contexto en que se hallaba la persona, que por la naturaleza
de su sntoma o la fase del ciclo en la cual dicha persona se encontraba. Vale decir, las mismas pautas de intervencin teraputica eran
aplicadas en casos que presentaban sntomas diferentes y que correspondan a distintas fases del ciclo familiar.
Aunque Erickson no manifest nunca que todos sus mtodos se
atuvieran a un mismo esquema, esta metapauta puede inferirse de la
forma particular en que abord seis casos distintos, descriptos en la
literatura. Los correspondientes sntomas abarcaban una amplia gama, todos los problemas parecan idiosincrsicos, y las personas
atendidas con estos mtodos (o metapautas, descriptas mediante el
uso de la teora del equilibrio) se hallaban en diversas etapas del ciclo de vida familiar: un muchacho de 16 aos que se chupaba el pulgar (35, pg. 428), dos casos de "parlisis histrica" (35, pg. 390),
un adolescente con un "diente gigante" (35, pg. 414), una mujer
con lcera de estmago (37, pg. 153) y una muchacha de 21 aos
con una abertura o separacin entre sus incisivos superiores (35, pg.
414).
Es. conveniente que prestemos particular atencin a varias caractersticas del mtodo aplicado por Erickson en tales casos si queremos entender este enfoque y el de la terapia familiar breve. En cada
uno de estos casos, puede decirse que Erickson determin una "meta primaria" (llammosla M), basndose en lo que la persona le manifestaba. En las descripciones correspondientes, la meta est a veces ms implcita que explcita, pero siempre puede describrsela en
forma muy especfica, y parece de tal modo construida que forma
parte de la cosmovisin del sujeto. A la manera sistmica, M no con-
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141
Figura 6.2
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Reencuadre
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147
E (equipo)
Reencuadre
a travs de la aceptacin del problema como normal en esas circunstancias, y la ausencia de una directiva imperiosa para modificarlo.
En cada caso, el equipo procura determinar una meta primaria (M)
basndose en lo que le presenta la familia. Esta meta primaria no
consiste en la supresin de la pauta que motiv la consulta (x), sino
ms bien en lo que acontecera si dicha queja ya no perturbase a la
familia. Como apuntamos antes, es necesario interpretar una meta
como el comienzo de algo y no como el fin de algo. Siguiendo el
ejemplo de Erickson, el equipo ayudar a la familia a focalizarse en
una meta especfica, pues la meta que la propia familia ha enunciado puede ser demasiado vasta. La pregunta que el equipo se formu
la a s mismo es la siguiente: "Qu puede acontecer en esta situa
cin familiar para que el motivo de la consulta desaparezca sin impedimentos?" La respuesta que d a esta pregunta le ayudar a definir la meta.
Cada motivo de consulta, con la respectiva pauta de interaccin
que lo rodea, se describe como relacionado con M de algn modo.
El motivo de consulta (x) impide a la familia (p) alcanzar la meta;
los miembros del equipo se preguntan: "Cmo puede reencuadrar
se esta pauta para obtener algo (x) que inicie un proceso que permi
ta a la familia alcanzar la meta?"
El proceso que lleva del reencuadre inicial (que conduce a x) al
desarrollo de las seales (M) puede abarcar una serie de mensajes
del equipo, que apuntan a la submeta. Esta puede consistir en un
acontecimiento modesto que permita o promueva el logro de la me
ta (M), o bien en lo que especficamente denominamos seales (M)
(vase la figura 6.7).
x'(motivo de la
consulta redefinido)
(seales)
Figura 6.7
LINEAMIENTOS
148
Durante las dos primeras sesiones, el Sr. y la Sra. Quill se lamentaron del comportamiento de sus hijas en diversas situaciones. Mientras ellos contaban esto, Mary (ocho aos) y Debbie (seis aos) corran por el cuarto explorando con sus rostros y manos la superficie
de la pantalla de visin unidireccional y riiendo entre s. Muy de
tanto en tanto, la madre o el padre increpaban a las nias pidindoles que se quedaran quietas, pero ellas hacan caso omiso o los obedecan slo por un momento. Mientras el Sr. Quill describa la situacin, Debbie se trep a l por todos lados; el padre mantuvo estoicamente la calma y continu hablando. A ratos interrumpa su relato
para pedirle a Debbie que dejase de subrsele encima, pero de nada
servan sus ruegos. En ningn momento de la primera sesin logr
alguno de los padres sofrenar efectivamente a las nias ms que por
breves instantes.
El equipo elogi a los padres por estar centrados en una tarea especfica, y a las nias por su espritu indagador y su iniciativa para
explorar las cosas por su cuenta. Una vez que ellos aceptaron los
cumplidos, se les pidi que "pensasen qu cosa no queran cambiar,
sin ninguna duda, en las relaciones entre padres e hijos (expresin
empleada por los propios padres) dentro de la familia".
A veces esta tarea tiene interesantes resultados. Es muy difcil reflexionar acerca de lo que no se quiere cambiar, sin reflexionar al
mismo tiempo acerca de lo que s se quiere cambiar. Como las quejas de la familia Quill estaban expresadas en trminos globales (deseaban que las nias se portaran mejor), el equipo intent ayudarlos a
ser rns concretos. Si la pareja poda responder a la tarea describien-
149
do lo que realmente no queran modificar (o sea, si su informe corresponda a una respuesta literal), el equipo contara con ms y
mejor informacin sobre el encuadre de la familia y su modalidad
de cooperancia. A la vez, una respuesta contraria de los esposos Quill
proporcionara al equipo una versin ms focalizada de sus quejas,
ofrecindole asimismo informacin sobre su modalidad de cooperancia. Por aadidura, en este indicio est implcito que ni los padres,
ni las hijas, ni la interaccin entre padres e hijas eran totalmente malos a juicio del equipo.
Si aplicamos los diagramas de la teora del equilibrio, la situacin
de la familia Quill durante la primera sesin puede describirse as: la
familia (p) tena una meta (M) enunciada como "conseguir que las
nias se porten mejor". La pauta que motiv su consulta (x) se centraba en torno de la mala conducta de las nias y de las tentativas
de los padres por hacer frente a esto, que mostraban ser ineficaces.
El equipo revel su aceptacin de la situacin de la familia Quill
mantenindose acrtico a lo largo de la sesin, y por intermedio del
elogio; tambin revel su aceptacin de ciertos aspectos de la pauta
que motiv la consulta al focalizar el aspecto "positivo" de las pautas de interaccin observadas. El indicio inici el reencuadre, al sugerir que haba algo "bueno" precisamente en aquello de lo cual los
padres se quejaban: las relaciones entre padres e hijas (vase la figura 6.8).
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Se cit solamente a los padres, quienes informaron que en el lapso transcurrido desde la primera sesin haban podido cumplir con
lo pedido en dos ocasiones. Segn qued demostrado durante la
segunda sesin, informaron que el Sr. Quill haba sido incapaz de
vrselas con Mary. En una oportunidad, la Sra. Quill tuvo que acudir en su auxilio, pues Mary se negaba a tratar el asunto con su padre. Esto fue un choque para ambos. Tambin en este caso, sus observaciones giraron en torno del comportamiento de las nias. Ni el
Sr. ni la Sra. Quill eran capaces de imaginar qu podan hacer para
modificar sus respectivas situaciones, y ambos se sentan desesperanzados.
El problema de los Quill estaba encuadrado en torno del buen
comportamiento de las hijas, principalmente de Mary. Todos sus intentos terminaban en el fracaso. Muy rara vez recurran a una paliza, porque no queran que las chicas se enojaran. En tales circunstancias, la misin del equipo consiste en reencuadrar este problema
de modo que sea soluble. Los padres seguan fijados en el comportamiento de sus hijas, y no vean la otra punta del ovillo: su propio
comportamiento. Slo advertan el final de la secuencia, cuando
procuraban imponer disciplina. Por el contrario, el equipo puntu la
secuencia de modo tal que su "inicio" fuera el momento en que los
padres pedan a las chicas que se comportasen mejor. Si, verbigracia,
los padres pudieran "iniciar" la secuencia de un modo diferente - u n
cambio de tonalidad-, tal vez conseguiran alguna modificacin en
el comportamiento de sus hijas. El equipo decidi seguir reencuadrando la situacin hasta lograr que los padres captaran la atencin.
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Por cierto que los Quill adquirieron las pistolas de agua mientras
se dirigan a su hogar, y no pas mucho tiempo antes de que ensayasen la treta para captar la atencin de las hijas, con todo xito (vase la figura 6.9). Segn ocurre con frecuencia, los Quill consideraron
el relato sobre las pistolas de agua como si fuese una tarea directa;
vale decir, convirtieron la sugerencia indirecta en un pedido directo.
El conductor neg que les hubiera encomendado una tarea directa,
y manifest su sorpresa de que ellos hubiesen tomado tan en serio
esos relatos: l slo los haba contado para hacerles ver que no estaban solos en el mundo, y para mostrarles la forma sorprendente en
que otra gente haba hecho frente a una situacin semejante. Dos
sesiones llevadas a cabo en los dos meses siguientes confirmaron que
los esposos Quill haban iniciado una nueva pauta en el proceder
con sus hijas, cuya atencin haban aprendido a captar de diversas
maneras, sin tener que recurrir a los malos tratos para disciplinarlas.
Tanto los padres como la escuela dieron cuenta de que las nias se
estaban portando mejor.
La Sra. Quill manifest tambin que se haba sentido "inspirada"
por la treta de golpear la olla, pero esto escapaba a sus conductas
habituales: "Jams podra hacer eso", dijo. En cambio, compr un
silbato para utilizarlo con igual propsito (otro modo de modificar
la tarea)
Comentario. El equipo reencuadr el motivo de la consulta, considerando que el problema consista en captar la atencin de las hijas (x), con lo cual al menos pudo mostrarse imparcial frente a los
mtodos adoptados por los padres. El problema de captar la atencin de las hijas (x') poda abordarse mediante la treta de la pistola
de agua y del silbato (M), y en consecuencia se estableci una nueva pauta, que permiti a la familia alcanzar su meta primaria (M): el
buen comportamiento de las nias.
El tipo de tarea indirecta utilizada como indicio en este caso es
semejante a las sugestiones indirectas que a menudo empleaba Erickson en la hipnoterapia, aprovechando "la estructura asociativa y la
capacidad mental del paciente, de un modo que escapa al mbito
habitual del control de su yo consciente, a fin de alcanzar metas teraputicas" (28, pg. 311). Por aadidura, la nocin que tena Erickson sobre el trance sugiere que "el hecho de fijar y focalizar la atencin [del sujeto] mediante un dilogo de esa ndole pone al oyente
156
en trance, sin necesidad de apelar a otros procesos formales de induccin" (28, pg. 311).
Todo indicio indirecto necesita ser elaborado de modo tal que el
"rehilo" se vincule con las pautas familiares de manera isomoffa,
pero desde un ngulo distinto. O sea, las pautas de "la familia del relato" deben ser similares en sus pormenores a las que motivaron la
consulta de la familia actual. Debbie y Mary eran capaces de "aterrozar" a los esposos Quill haciendo de ellos lo que quisieran, igual
que el nio del primer relato; anlogamente, en l los padres no que
ran "pegarle al chico en la cola", as como los Quill no queran
"maltratar" a sus hijas. Tambin Mary y Debbie se trababan en frecuentes altercados, gritando y haciendo "un lo de los mil demonios";
y tambin la Sra. Quill les gritaba y les peda que "acabasen". Todos estos elementos pasaron a integrar el relato.
El ngulo diferente lo suministraron las singulares soluciones descubiertas por "las familias del relato". De este modo, en caso de que
volviera a surgir la pauta familiar en el hogar de los Quill, es probable que los esposos fueran estimulados por esta noticia de una diferencia y asociaran "automticamente" sus propias pautas con los indicios encubiertos en los relatos lo cual podra llevarlos a percibir
la situacin de un modo distinto o a hacer algo distinto. As, el
indicio indirecto se asemeja a una sugestin posthipntica, como las
que Erickson sola asociar a sucesos cotidianos de una manera igualmente informal. Esta conexin entre la pauta y el indicio aumenta
las probabilidades de que el sujeto ejecute el acto sugerido. Si no
hay conexin o sta es escasa, lo ms probable es que la persona no
ejecute la sugestin posthipntica; similarmente, en tal caso lo ms
probable es que la familia no ejecute la tarea sugerida.
CAPITULO 7
LA FAMILIA JAY
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LA FAMILIA JAY
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quitrica. El equipo se enter de que era casado y haba sido encargado de una casa de departamentos situada enfrente del hogar de la
familia Jay.
RECOLECCIN DE LOS DATOS
PRELUDIO DE LA SESIN 1
1 60
Derks le pregunt a Joan cmo haba sido para ella dejar su casa.
Fue la Sra. Jay quien respondi: eso haba sucedido despus de una
''discusin". Pero Joan dio una versin diferente: no fue una discusin sino una gran pelea. El Sr. Jay no recordaba que hubiese pasado ni una cosa ni la otra. En esa poca Joan no andaba bien en sus
estudios, y se fue a vivir durante nueve meses con un to; en ese lapso, ninguno de sus familiares inmediatos le dirigi la palabra.
Sra. Jay: As que t no tenas la idea de irte.
Sr. Jay: Y nosotros no te echamos.
T o d o el m u n d o coincidi c o n esto. (Otra defensa contra la culpa, secuencia redundante).
Ms tarde Joan volvi a vivir con los padres durante un breve perodo, antes de mudarse a la casa en la que ahora resida, en la misma
LA FAMILIA JAY
161
cuadra. Fue en ese momento cuando el Sr. Jay introdujo su "meloda favorita":
Sr. Jay: Siempre he sostenido que cuando un hijo llega a cierta
edad, debe bastarse por s mismo. Por su propio bien, y no slo para
que mam y pap descansen que bien se lo merecen. Uno de estos das le pediremos a Jane que se vaya. Esto ser mucho ms duro
para la madre que para el padre.
Jane: Es probable que me vaya uno de estos das.
Joan: Pero aqu hay un doble mensaje. A veces t quieres que
Jane se vaya, pero acabas de construir para ella una nueva cama permanente. Una cama muy linda, que no puede sacarse de ese lugar.
Jane: Mejora la casa.
Joan: Me refiero a lo que significa.
Jane: Para m, no significa que vaya a quedarme.
Se neg que la cama empotrada tuviera cualquier otra intencin
que la de arreglar la casa: no era ms que una mejora para el caso en
que decidieran venderla.
Al equipo le impresion la repeticin del tema de la responsabilidad. Si bien
el padre deca que los hijos deban bastarse a s mismos, no hacia nada al respecto. Ms aun, se contradeca en los hechos al convertir la cama de su hija en
una parte inseparable de la casa, "una simple mejora". Entonces la madre poda
temer activamente lo que habra de acontecer si Jane se mudase. Cabe afirmar
que el padre estaba protegiendo a la madre frente a la posible mudanza de Jane,
al par que protega a sta para que no se mudase. Y que Jane se quedara con
sus padres poda considerarse una medida de proteccin hacia stos. La madre
manifest que ella cargaba "con el fardo de todo", lo que puede equivaler a
que protega al padre de algo, a la vez que colaboraba para que Jane se quedase
en la casa y as la protega de su eventual fracaso en bastarse a s misma. Joan
pareca lo suficientemente desligada del asunto como para hacer valer sus comentarios, pero stos eran rechazados o descalificados por la madre, el padre y
Jane.
162
Metas. Los cuatro coincidieron en que la meta principal de la terapia deba consistir en ayudar a la madre a que superara su depresin. Cuando Derks les pregunt cmo sabran que la Sra. Jay estaba menos deprimida, los familiares enunciaron diversas seales. Si
Martha no estaba deprimida, 1) evidenciara mayor inters por las
cosas, 2) pondra ms cuidado en la atencin de la casa. Jane dijo
que estara segura de que su madre habra superado la depresin si,
3) hiciera algn viaje con su padre o se fueran juntos de excursin
en canoa. Por su parte, Joan estara segura si, 4) cuando fuera de visita, se encontrase con algn dilogo agradable y no con permanentes discusiones sobre los problemas; tambin crea que una buena
seal sera, 5) una disminucin de la presin arterial de la madre. El
Sr. Jay coincidi con todo esto, pero aadi que tambin sera una
buena seal, 6) que tanto l como su esposa se sintieran con suficiente energa y voluntad como para bajar algunos kilos. La Sra. Jay dijo
que ella estara segura de haber superado la depresin si, 7) empezaba a trabajar mayor cantidad de horas diarias o reiniciaba sus estudios.
Antes de la pausa para la consulta, la Sra. Jay declar que se senta
"como si estuviese sentada encima de un globo a punto de reventar"
o "como si estuviese esperando que cayera la prxima bomba".
PAUSA PARA LA CONSULTA
Al equipo le sorprendi que no se mencionara siquiera, como seal o meta, la partida de Jane del hogar; tambin le sorprendi que
ninguna de las metas incluyese al hijo, Mike. Todo giraba en torno
de la Sra. Jay.
Las seales y metas sugeran que la modalidad de cooperancia de
la familia Jay poda tener como foco la depresin y las afecciones
somticas de la madre. Cualquiera fuese la pauta suprasistmica,
para ser isomorfa deba centrarse inicialmente en estas quejas y en
el apoyo que brindaban los dems a la Sra. Jay. La intervencin deba incluir algo relativo a la manera de auxiliar a sta para hacer frente a su situacin, y en cambio no deba incluir nada que sugiriese
modificar el apoyo de los dems integrantes.
La meta de la familia era muy clara: ayudar a la madre a superar
su depresin. Sus integrantes haban enunciado siete seales que, a
su entender, indicaran que la madre empezaba a superarla. La intervencin del equipo tena que auxiliar a la familia para que diera un
pequeo paso en esa direccin.
Como tambin se haban puesto de manifiesto dificultades para
que los hijos dejaran el hogar, el equipo infiri que la familia adjudi-
LA
FAMILIA
JAY
163
en
gran
medida.
ESTUDIO POSTERIOR
Cuando los Jay llegaron, era evidente que la Sra. Jay estaba trastornada y aparentemente ms deprimida. Jane pareca haber estado
bebiendo; se sent en un rincn y se qued callada durante toda la
primera parte de la sesin. Joan no asisti por motivos de trabajo.
Sra. Jay: No estamos movindonos en un espacio muy adecuado.
Parece que al resto de la familia no le interesa la terapia familiar, as
que creo que tendremos que volver a la individual. Joan quera venir,
pero su trabajo se lo impidi; de todas maneras, ella no es parte realmente del problema.
165
Derks: Esuna buena seal que Joan sea lo bastante independiente como para tomar esa decisin por s misma.
Sr. Jay: No s si esto podr ayudarnos. Yo acept en bien de Martha.
Sra. Jay: De todas maneras, estamos aqu por mis angustias.
Una vez ms, Martha pone de manifiesto que es la persona destinada a sacrificarse, y los otros miembros de la familia la apoyan en esto, aunque a regaadientes.
166
McBrde: Cuando las cosas andan mal, todo el mundo parece cerrar filas.
Sr. Jay: Me gustara desembarazarme de ellos, pero si lo intentamos... Jane amenaza con suicidarse.
Derks: Jane tiene un alfiler entre sus dedos y lo ha apoyado sobre
el globo. Tal vez sea ms fcil vivir as que echarlos del nido.
McBride: Como hacen las aves con sus pichones.
Sra. Jay: Me gustara poder hacer lo mismo.
La familia inform haber cumplido en forma literal la tarea, que era bastante metafrica: sin duda alguna, haban observado las seales La crisis pronosticada pareca haberse desatado ya. Poda decirse que tanto la Sra. Jay como Jane seguan sacrificndose para mantener unida a la familia. El hecho de que Jane se diese a la bebida era la "causa" de que sus padres siguieran ligados a ella,
puesto que en el pasado sus amenazas de suicidio haban estado asociadas a menudo con borracheras. Martha sigui llorando intermitentemente durante la sesin, y su esposo le tom la mano en varias oportunidades una diferencia notoria con lo acontecido en la primera sesin. Al equipo le preocupaba que Mike pudiera abandonar la terapia, lo cual sera una manera de proteger a la familia, pues as seguira en pie la pauta de dejar que Martha cargase con lo ms pesado del fardo. As pues, cualquier intervencin planeada por el equipo deba
ser lo ms circular posible, y al mismo tiempo seguir describiendo la experiencia que tena esta familia de la realidad. Por otra parte, para que el mensaje fuese
isomorfo, deba atenerse a la pauta familiar de absolver de culpa a todo el mundo y contener algn comentario acerca de la independencia de los hijos.
Antes de la pausa para la consulta, los esposos dijeron que estaban pensando en adquirir una nueva vivienda. Queran tener una casa ms chica, pues una vez que sus hijos se fuesen no iban a necesitar tantos cuartos.
PAUSA PARA LA CONSULTA
(Durante la pausa, los Jay juntaron sus sillas, y Mike tom en sus
brazos a su esposa, que continuaba llorando. Con su silencio, el equipo los alent tcitamente a ello.)
El equipo concentr sus esfuerzos en que el Sr. Jay no abandonase la terapia. Resolvi fundar su intervencin en un diagrama simplificado de la pauta de interaccin de la pareja (vase la figura 7.1).
Segn este diagrama, la depresin de Martha protega a su esposo de
todo padecimiento notorio, en tanto que el "gran temple" de l la
protega a ella de ser avasallada por la profunda preocupacin de l;
p r e o c u p a c i n que, segn pensaba Mike, en caso de ser conocida por
Martha, slo servira para aumentar su depresin. Este diagrama de-
LA FAMILIA JAY
168
LA FAMILIA JAY
SESIN 3
169
.
Concurrieron el Sr. y la Sra. Jay, que parecan ms ajegres y relajados. Despus de un parloteo social, describieron lo que haba sucedido la noche anterior. A las dos de la madrugada les telefone Jane,
que se hallaba en una fiesta en los suburbios de la ciudad y no tena
cmo llegar a su casa. El Sr. Jay acept hacer el viaje, de quince kilmetros, para ir a buscarla; su esposa lo acompa. Result un paseo placentero para ambos, aunque Jane no se encontraba all cuando llegaron. Martha dijo que haba sido un hermoso paseo y que ha
ban mantenido una linda conversacin. El episodio les confirm a
ambos que Jane necesitaba abandonar el nido de los Jay.
Derks: As que fue como un encuentro de novios?
Sra. Jay: Oh, tambin tuvimos algo de eso!
McBride: Ah, dicho sea de paso, Steve opina que tal vez ustedes
haran bien en mudarse de nido.
Se rieron, y dijeron que lo pensaran.
Cuando los conductores volvieron al cuarto luego de la pausa, Martha segua
alicada y llorosa; pero mientras se transmita el mensaje, el equipo pudo observar que su estado de nimo cambiaba, y cuando se sugiri que su esposo tal vez
estuviera protegindola, se puso contenta. Al manifestarles que eso poda ser
"una maldita racha de mala suerte", ambos mostraron un visible alivio. Y al dejar el consultorio estaban bromeando.
En la semana transcurrida desde la ltima sesin, los esposos haban ido a jugar al bowling y luego a cenar; ambos gozaron del "en
cuentro de novios", y su charla no gir en torno de ningn problema.
Desde la noche anterior, haban venido hablando de Jane; coincidan en su enojo frente a ella y en la necesidad de que se fuera a vi
vir a otro lado lo antes posible. El resto de la sesin vers sobre el
modo en que habran de decirle que haba llegado la hora de mudar
se. Martha estaba persuadida de que Jane tena que irse ms lejos,
dado que la ltima vez que se fue de la casa, volvi y rob objetos;
posteriormente, su esposo haba cambiado todas las cerraduras de la
vivienda. Ambos eran bien conscientes de que probablemente Jane
provocara problemas cuando le comunicaran eso, y en consecuencia
el Sr. Jay decidi decrselo mientras Martha estaba en su trabajo;
pero su esposa objet este plan: "Mike le dijo-, no me protejas".
ESTUDIO POSTERIOR
A esta altura el equipo confiaba en que su descripcin de las pautas era correcta, y el diferente ngulo del mensaje pareca haber tenido un efecto inmediato. Como los Jay respondieron en forma literal
a la primera tarea, predijeron que tambin su respuesta a la segunda
sera literal, y que, adems, en la sesin siguiente informaran sobre
algunos cambios rotundos ocurridos en el intervalo -era imposible
predecir concretamente cules seran esos cambios. La intervencin pareca lo bastante isomorfa, y efectuada desde un ngulo lo
bastante diferente, como para promover una diferencia que estable
ciera una diferencia.
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'
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El hijo varn, Mike, estaba por ser dado de alta en el hospital psi
quitrico, y pidi permiso a sus, padres para venir, junto con su esposa, a vivir con ellos hasta que pudieran arreglrselas solos. El Sr. y
la Sra. Jay rechazaron este pedido.
Es casi previsible que, frente a los cambios manifestados por la pareja paren
tal, alguno de los hijos reaccione tratando de actuar coma si procurase mante
nerlos unidos. Quizs el hijo perciba las cosas de modo tal que crea necesario
"hacer locuras" nuevamente, si entiende que sus padres demandan de l esa cla
se de sacrificio.
LA FAMILIA JAY
175
Martha, se dieron cuenta de que la razn primordial era una situacin en su trabajo. Una de las dificultades principales que all enfren
taba Mike era un compaero de tareas, ex alcohlico en proceso de
recuperacin, mucho ms joven que l, y al cual Mike apoyaba mucho para que dejara la bebida; se esforzaba escrupulosamente para
ayudarlo a rehacer su vida. En la charla con su mujer le qued bien
en claro que an tena posibilidad de cambiar de empleo, y sentirse
as menos atrapado.
El equipo tena plena conciencia de que ya haca tres sesiones seguidas que
Martha no mostraba depresin ni se quejaba de sntomas somticos. Las metas
fijadas en la primera sesin se haban logrado en lo esencial.
Los Jay manejaban sus cosas en forma directa y hacan frente juntos a algunas de esas "calamidades" que constituyen la vida, sin permitir que los pro
blemas de sus hijos los afectaran.
PAUSA PARA LA CONSULTA
SESIN 5
ESTUDIO POSTERIOR
Sra. Jay: Las cosas estn yendo bastante bien, en lo que a los chicos respecta. Y a m me est yendo muy bien!
Derks: Meti el camello la nariz en la tienda?
Sra. Jay: No. El camello est viviendo en su casa con su esposa.
El nuevo plazo fijado a Jane para su mudanza no haba vencido.
Jane no tena trabajo ni haba conseguido tampoco el subsidio de
desempleo; pero estaba bebiendo menos, y por primera vez en varios meses el muchacho con el que sala consigui un empleo que estabiliz la situacin de ambos.
El Sr. Jay dijo que poco despus de la sesin anterior, haba comenzado a sentirse deprimido. En un principio no saba bien por
que segun l, existan tres razones posibles. Cuando lo charl con
Mientras se transmita el mensaje, Martha y Mike sonrean y asentan con la cabeza. La misin del equipo consisti en mantener a los
Jay fuera de su encuadre original y en ayudarlos para que siguiesen
trabajando unidos: cambio de conducta que indicaba un cambio
perceptual por ambas partes. Es notable que Martha no se deprimiera ni desarrollara sntomas somticos cuando su esposo comenz a
sentirse deprimido: ella no carg con el fardo cuando su marido
"perdi el temple" lo suficiente como para hablarle de su situacin
laboral.
El equipo predijo que Martha no experimentara depresin ni sntomas somticos, y que desaparecera la depresin de su esposo;
adems, la pareja desarrollara mayor cantidad de actividades comunes, aun cuando sus hijos tuvieran nuevas dificultades. La mudanza
de Jane sera la seal de que haba llegado el momento de poner trmino a la terapia.
SESIN 6
Esta sesin se centr en torno de una "pequea reyerta" que Martha y Mike haban tenido das atrs. En su transcurso, Martha consigui manifestar su ira emprendindola a puetazos contra un armario de la cocina, y despus se fue a dar una rpida caminata en torno
de la manzana. Ambos se alegraron de que esto sucediera, porque
los nuevos elementos contribuyeron a convencerlos de que "las cosas estaban yendo realmente de una manera diferente". Cuando
Martha volvi de su caminata, discutieron el incidente. Mike haba
temido todo el tiempo que Martha tuviera una crisis de hiperpnea,
pero no ocurri as; le haba preocupado que subiera su presin arterial, y tampoco esto aconteci. Estos signos fueron considerados
positivos por ambos. Adems, ninguno de los dos se haba deprimido. Por ltimo, como no haban tenido muchas discusiones vinculadas con la problemtica de sus hijos, se sentan complacidos de po-
177
Quiero advertirles que en las prximas dos semanas, una vez que Jano se haya ido, puede haber algn perodo de crisis, e incluso alguna
especie de recada. .
CAPITULO 8
LA FAMILIA JONES
ESTUDIO POSTERIOR
En opinin del equipo, los Jay estaban trabajando suficientemente bien como una unidad, y los cambios en su percepcin y en su
conducta eran "lo bastante estables" como para que pudiera ponerse trmino a la terapia. Predijo que ni las actuaciones de Jane ni las
"locuras" del hijo haran retornar a los padres a su antiguo encuadre.
Aunque el equipo habra preferido terminar la terapia slo despus
que Jane hubiese concretado su mudanza, ese traslado no formaba
parte de las metas-seales originales.
SEGUIMIENTO
180
LA FAMILIA JONES
1&
equipo not que, al pedirle a la Sra. Jones que resumiera en dos oraciones la descripcin del problema, ella haba hablado durante 2
minutos seguidos; y sospechaba que esta "abrumadora cantidad de
palabras" utilizada por la Sra. Jones poda estar protegiendo al marido para que ste no tuviera que ocuparse de los problemas del muchacho; y quiz su andanada de palabras protega de algn otro
modo al padre frente al muchacho. Este segundo diagrama le pare
ci preferible al equipo por ser ms positivo y til.
El equipo se pregunt, adems, cules seran los "secretos" que le
preocupaban a la Sra. Jones, y si los problemas que mencionaba se
haban puesto en evidencia antes de que Robert ingresara a la escue
la secundaria, donde fue asignado a una clase para "alumnos con
problemas de aprendizaje".
PRELUDIO DE LA SESIN 1
182
lar esto? Dijo: "Si alguna vez Bobby lo desea". Cuando l iba [a su
escuela], vea al seor... este...
Robert. Thorton.
Sra. Jones: Al Sr. Thorton, dos veces por semana, y ella dijo que
no poda atenderlo a Bobby con la misma frecuencia. Bobby tiene
una tendencia, es verdad, a crear, bueno, ms problemas de los que
realmente tiene. Pero l deba saber que si realmente tena un problema, ella estaba all para ayudarlo. Fuimos a ver durante un tiempo a la Dra. Zarkov, y fui a la escuela - t a l vez en casa las cosas andaban un poco mejor, nada terrible-, pero la Dra. Zarkov me dijo
que estbamos mejorando. Ella dijo que estbamos mejorando, pero
como lo vea as. (Dirigindose al Sr. Jones:) Y t?
Sr. Jones:
Este... no.
Sra. Jones:
(superponindose con el "no" de su marido): Enton
ces fu a la escuela - y o poda haber alquilado un cuarto en esa escuela-, donde l tuvo una misma maestra durante doce meses. No
puedo recordar... (dirigindose a su esposo:) Di su nombre.
Robert: La Sra. Bello?
Sra. Jones: No, la de anteojos. La maestra de idioma. Di su nombre.
'
.
Robert: La Sra. White.
Sra. Jones: Esa. Fui a verla y le dije: "Cmo anda Bobby?" Ella
contest: "Pues..." (La Sra. Jones se mesa los cabellos.) Le dije: " Oh
pobre!"
El monlogo de la madre continu de este modo durante quince
minutos ms. El conductor trat de interrumpirla en diversas oportunidades, sin xito. Las palabras no bastaban. Por ltimo, pudo detener la marea levantando la mano en "seal de detencin". Trat de
que la familia se centrara en los motivos actuales de consulta, pero
todo lo que logr fue que la Sra. Jones le ofreciera ms y ms detalles acerca de la historia del problema y de los esfuerzos que haba
hecho para tomar contacto con psiclogos, asistentes sociales y terapeutas que realmente pudieran ayudarla. En varias ocasiones la Sra.
Jones qued atascada, por faltarle una palabra o un detalle, y su
marido o su hijo acudieron en su ayuda casi al instante. De inmedia
to, la Sra. Jones retomaba el relato.
Una vez que el conductor pudo centrar a la familia en sus moti
vos de queja actuales, surgieron un montn de cuestiones. Los padres se lamentaron de que Bobby se la pasase maldiciendo y refun
fuando en voz baja, y de que no tuviera un buen rendimiento en la
escuela, donde obtena notas bajas o aplazos. Sin embargo, el Sr.
LA FAMILIA JONES
183
Jones record una importante excepcin: dos aos atrs, en la clase de taller, Bobby haba sacado un sobresaliente. Tanto ellos como las
autoridades de la escuela crean que el chico se estaba desempeando por debajo de sus posibilidades. Adems, la madre se quej de
que Bobby no ordenaba su ropa, ni haca la cama, ni mantena su
cuarto lo bastante limpio; por aadidura, ignoraba el valor del dine
ro, y en consecuencia siempre quera que le comprasen ms cosas,
ms caras, de las que ellos podan. Y cuando tena esas cosas en su
poder, slo las usaba durante un breve perodo.
Metas. La familia Jones quera que Bobby cambiase de actitud
sus padres pensaban que Bobby no los respetaba como tales. La Sra.
Jones continu luego con su retahila: que mejorase en la escuela,
que dejase de maldecir, que controlase mejor sus estados de nimo,
que no refunfuara en voz baja, que ordenara su ropa, etc., etc. Bobby quera que su madre le gritara menos. El conductor se empe
en que se focalizaran en algn cambio significativo, pero ellos fueron incapaces de decidir cul era el ms importante: cada cosa que
mencionaban los llevaba a nuevas cosas y a entrar en mayores pormenores.
El equipo observ que la Sra. Jones estaba realmente preocupada por su hijo y que se afanaba por conseguir ayuda profesional. Sin duda, para Bobby la
actitud de su madre era "positiva". Por otra parte, el Sr. Jones era un hombre
muy trabajador, paciente, tolerante y tranquilo. No pareca en absoluto "dis
trado"; ms bien, participaba a su manera, calladamente, ya que no entenda
lo que estaba sucediendo en la familia, pero no obstante cada vez que su esposa
se lo requera l suministraba detalles. Y cuando se le formulaba una pregunta
directamente, responda con ms claridad que la Sra. Jones.
184
... iendola:
no la sacaban de sintona en su monlogo, a diferencia de lo que hubieran tendido a hacer los miembros del equipo.
En el abordaje de sus problemas, la familia pareca centrada en
los empeos de la madre; y los informes de sta acerca de tales empeos resultan algo desconcertantes, ya que los "datos" estaban dispersos en medio de una gran cantidad de comentarios y detalles. Las
metas no estaban claramente establecidas ni se haban desarrollado
seales.
El equipo resolvi elogiar a la familia por su manera de conducirse en la primera parte de la sesin; vale decir, trat de reencuadrar
su modalidad de cooperancia, tal como haba sido expuesta hasta
ese momento. Dado que la familia careca de focalizacin (por decir
poco) y haba trazado un amplio cuadro de la situacin, el equipo
decidi transmitirle un mensaje que fuera no menos vago y general.
Quera que la familia tuviese xito en la tarea, y confiaba en que en
la prxima sesin la encontrara ms focalizada.
Poda decirse que la Sra. Jones haba utilizado una "tcnica de
intercalacin"; el equipo emple la misma tcnica en el mensaje que
transmiti al Sr. Jones.
TRANSMISIN DEL MENSAJE
185
ESTUDIO POSTERIOR
El equipo pronostic que la familia acudira al prximo encuentro. Como ocurre con frecuencia en las intervenciones de la primera
sesin, el nico propsito del indicio fue "ver qu hacen con l'
Dado que las metas eran tan amplias y de tan vastos alcances que se
volvan vagas, el indicio fue, como convena, amplio y vago. Si bien
el equipo confiaba en que ayudara a la familia a centrarse ms, ya
sea estableciendo la lista de cosas que no queran que cambiasen,
concentrndose en alguna cosa que en particular deseaban ver modi
ficada, el propsito primordial que persegua el indicio no era ste.
El propsito primordial del indicio, sobre todo en las primeras sesio
nes, es pura y simplemente descubrir de qu manera mostrar la familia su singular modalidad de cooperancia.
El subconjunto del elogio que integraba la intervencin era iso
morfo, en lneas generales, con las pautas que la familia haba ex
puesto en la mayor parte de la sesin. La Sra. Jones suministr al
equipo descripciones cabales y pormenorizadas; Robert se haba
mostrado franco y claro; y el Sr. Jones era un hombre tranquilo y
paciente. La sugestin inserta (que el silencio del Sr. Jones era un
esfuerzo para no estallar, aun cuando pudiera creerlo necesario) era
adems un experimento para poner a prueba ese estilo de comunica
cin con la familia. El equipo haba descripto al Sr. Jones como el
oyente atento, y a la Sra. Jones como una persona que utilizaba una
tcnica de intercalacin; as pues, dise su mensaje de modo de ser
isomorfo con ese aspecto de la pauta familiar. Predijo tambin que
el Sr. Jones podra quiz tener un papel algo ms activo en relacin
con sus motivos de queja.
SESIN 2
LA FAMILIA JONES
188
Tanto el Sr. Jones como Robert declararon que no les haba sido
posible imaginar nada distinto para hacer antes de la hora de la cena
o en el transcurso de sta. La Sra. Jones, inmediatamente despus
de la sesin anterior, haba resuelto que slo llamara a Robert una
vez por da para cenar, y durante toda la semana se mantuvo firme
en esa resolucin. El Sr. Jones, pese a su declaracin de que no haba imaginado nada nuevo para hacer, no llam a cenar a Robert en
toda la semana; y ste, tambin a pesar de su desmentida, acudi a
la cena a despecho de haber sido llamado slo una vez por da, y no
lleg tarde a cenar ningn da de la semana.
Durante la sesin el Sr. Jones se quej de que, al regresar a su casa, se encontraba "siempre con la misma cosa, todos los das": no
haca ms que escuchar lamentaciones acerca de Robert y hallar
nuevos motivos de queja.
Un da en que lleg tarde al colegio, Robert tuvo un incidente
con la polica. Logr controlar su temperamento y, con la ayuda de
las autoridades del colegio, resolvi la situacin sin necesidad de que
interviniera su madre.
Como de costumbre, la informacin concreta vena inserta en un
cmulo de otros datos, y el conductor debi recurrir a minuciosas
preguntas para averiguar de qu manera haba respondido la familia
a la tarea encomendada.
PAUSA PARA LA CONSULTA
LA
FAMILIA
JONES
189
190
Y sabemos que a veces a usted le gustara (pausa) Sr. Jones, convertirse en un Al Capone (pausa), pero pensamos que si hiciera eso,
podra trastornar el equilibrio de su familia: ni a su esposa ni a su
hijo les gustara el asunto. Creemos que usted necesita seguir actuando como un "tipo fuerte pero callado", porque ni Bob ni su esposa
querran que usted se la pasase gritando la mayor parte del tiempo
ni que usted pretendiera (pausa) Sr. Jones, convertirse a menudo
en un Al Capone.
Nos damos cuenta de que t estaras en mejor situacin si consiguieras (pausa) Bob, adoptar una mejor actitud (pausa), dejar de
maldecir y (pausa), dejar de refunfuar en voz baja. Pero los adolescentes como t necesitan rebelarse de algn modo, por ejemplo
negndose a levantarse de inmediato a la maana. La vida sera ms
fcil para ti si pudieras (pausa) Bob, levantarte de la cama cuando te
llamen (pausa) y si lograras nuevamente (pausa) acudir a cenar
cuando te llamen, pero en ese caso es muy probable que tus padres
se desconcierten y se pregunten con qu habrs de salirles ms adelante. Creemos que ya les causas bastantes dolores de cabeza ahora,
sin necesidad de agregar a esto el (pausa) levantarse rpido a la maana y el (pausa) ir a la mesa no bien lo llaman a uno.
As que, a esta altura, creo que debemos ser muy, pero muy precavidos en lo que respecta a cambiar las cosas; hay que avanzar muy
pero muy lentamente. Nos gustara que se llevasen estas copias, las
leyeran una o dos veces antes de la prxima sesin y reflexionasen
sobre esto.
ESTUDIO POSTERIOR
LA
FAMILIA
JONES
191
SESIN 4
En esas dos semanas, slo debieron llamar a Robert por la ..na en una sola oportunidad, y en tres ocasiones ya estaba despierto
cuando lo fueron a llamar. Todos los das se hizo la cama. Salvo
una ocasin, el resto de los das no fue menester llamarlo a comer
ms que una vez. La madre manifest sentirse menos malhumorado.
Una noche, Bob pidi un permiso especial para salir con sus amigos despus del horario de clase y quedarse mucho ms tarde de lo
que sus padres habitualmente le permitan. En el pasado, con frecuencia suceda alguna de estas dos cosas: o bien Robert consegua
persuadir a sus padres de que lo dejaran salir, o lograba dividirlos y
se iba sin su permiso. Esta vez, sus padres "hicieron causa comn y
no se dejaron convencer ni dividir: Robert se qued en casa, por
ms que refunfu y maldijo largo rato.
Un da, el padre se quej de que Bob haba estado ejecutando
msica a demasiado volumen, y de que ya lo haba soportado durante dos horas y no estaba dispuesto a aguantarlo ms. Bob s..
a disminuir el volumen o a dejar de tocar. Sam lo golpe por ..
ra vez en varios aos, y al poco rato Bob dej de tocar msica ....
los padres, esto haba sido una falla, porque Bob no haba acatado
de inmediato la orden que le imparti su padre; por su parte
no vinculaba para nada el hecho de haberle pegado a Bob con el
De Shazer: Bueno, estamos todos realmente sorprendidos y complacidos de su determinacin (dirigindose al Sr. Jones) de proteger
........ el domingo [da en que haba acontecido el incidente con la
...),
y de que no tratase realmente de convertirse en un Al Capone aunque en su fuero ntimo, una parte suya lo quisiera.
tambin estamos sorprendidos de que usted, Sra. Jones, haya
sido mantenerse al margen, tan bien como lo hizo; esto es realmente
positivo.
Ha sido un gran gusto para nosotros enterarnos de que t (dirigindose a Robert) limpiaste tu bicicleta y la de tu padre sin que nadie
te lo pidiera.
Ahora bien, tenemos algunas tareas para el hogar. Con respecto a
ustedes, Bob y pap, queremos que en algn momento antes de
nuestro prximo encuentro, Bob pase una hora y media tratando de
convencerlo a pap sobre ese asunto de la escopeta. En todo ese perodo, mientras ellos estn empeados en esto, sugerimos que usted
(dirigindose a la Sra. Jones) salga a dar un paseo o algo por el estilo; deje que ellos manejen este asunto.
Hemos hecho algunas apuestas al respecto, pero no todos opina-
LA FAMILIA JONES
193
(La Sra. Jones telefone antes de la sesin para comentar que estaba enferma, y preguntar si podran asistir solamente Bob y su padre.)
El Sr. Jones no haba cedido en la cuestin de la escopeta, y ahora Robert ni siquiera estaba seguro de que quisiera tener una. Por lo
194
LA
FAMLIA
JONES
195
El equipo pronostic que los padres haran ms "trabajo en equipo", que Bob maldecira y refunfuara menos en voz baja, y que
continuaran los cambios ya iniciados.
El equipo resolvi retomar la tcnica vaga de la intercalacin,
puesto que el informe de la familia sobre la tarea anterior haba sido
poco claro. Si bien el Sr. Jones todava no se haba dejado convencer en lo tocante a la escopeta, lo cierto es que. Bobby tampoco se
esforz realmente por lograrlo. Ahora bien, como por el comportamiento de Bobby podra inferirse que, segn l, el padre no se quera convencer para comprarle la escopeta, el equipo poda conside
rar que su intervencin haba sido exitosa. Predijo que Bob renovara sus empeos para persuadir al padre a que le comprase la escopeta. La intervencin anterior haba tenido tanto xito como pudiera
tenerlo cualquier intervencin proyectada para surtir efecto durante
el intervalo entre dos sesiones: en ese intervalo, lo cierto es que el
padre no haba sido convencido por Bob.
SESIN 6
De Shazer: Creemos que actuaron con sensatez al tratar de avanzar lentamente en la cuestin de la escopeta, en lugar de convertirla
en un gran problema, porque eso habra trastornado el equilibrio en
la direccin errnea.
Algo que nos impact fue que ustedes (los padres) prosiguiesen
con su gran proyecto de modificar el equilibrio de la familia. Continuaron pensando mucho acerca de esto, segn colijo. Adems, debemos seguir advirtindoles que no deben apresurarse.
Por cierto nos ha impresionado, Robert, que t fueras lo bastante
astuto para ocultar tu inteligencia hasta ahora, y adems nos impresion que no hayas tenido hasta el momento buenas calificaciones
en conducta, ya que habra sido realmente difcil responder a tan altas expectativas.
Ahora bien, sabemos que ustedes dos (los padres) estn interesados en modificar este equilibrio en un sentido favorable. Creemos
197
El equipo predijo que los padres continuaran trabajando de consuno y que en algn momento del intervalo hasta la prxima sesin
(un mes) Bob hara algn uso equivocado del arma. Tambin predijo que los esposos se mantendran firmes en la cuestin del arma
cuando Bob la usase mal, y que seguiran adhiriendo a los cambios efectuados.
SESIN 7
198
equipo eran significativos. Era necesario que transcurriese ms tiempo para ver si, a la larga, los esposos Jones llegaban a percibir esos
cambios como significativos.
CAPITULO
199
De Shazer: Bueno, hemos estado pensando en todo esto y recordando que cuando ustedes vinieron aqu, los tres declararon que no
queran que nada siguiese igual. Lo cual es una especie de "misin
imposible". Y, por supuesto, Bob va a seguir maldiciendo y refunfuando, ya que as lo hacen la mayora de los muchachos de su edad,
y nosotros creemos que esto evita que pierda los estribos ms a menudo. En tanto y en cuanto l siga maldiciendo y refunfuando, no
hay peligro de que ustedes dos tengan que aprender a convivir con
un santo.
Estn en lo cierto al pensar que me sent realmente conrnociona
do por las calificaciones de Bob; todos nosotros nos conmociona
mos. Temamos que esto pudiera trastornar las cosas en el hogar. Y
tal vez no sea as. Lo que podra ocurrir es que trastornase las cosas
en el colegio, pero todava no lo sabemos. As que, a esta altura, nos
gustara sugerirles que nos detengamos aqu y veamos cmo siguen
las cosas. Hganme saber si en el hogar el equilibrio se trastorna en
un sentido desfavorable. Quiz hemos contribuido a que ustedes
cambien demasiadas cosas; simplemente tenemos que esperar y ver
qu ocurre. Tal vez debamos esperar para ver cmo andan, la prxima vez, las calificaciones.
SEGUIMIENTO
COMPLEJIDAD
200
COMPLEJIDAD
201
202
203
204
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