Guia Derecho Laboral
Guia Derecho Laboral
Guia Derecho Laboral
El derecho laboral se inspira en este principio esencialmente porque se trata de, compensar
la desigualdad económica de los trabajadores, otorgándoles una protección jurídica
preferente, según el cuarto considerando del Código de Trabajo. Este principio, según la
doctrina, se encuentra inmerso dentro del principio protector, porque: El principio
protector se refiere al criterio fundamental que orienta el derecho del trabajo, ya que éste
en lugar de inspirarse en un propósito de igualdad, responde al objetivo de establecer un
amparo preferente a una de las partes: el trabajador. 4to. Considerando literal a) Código
de Trabajo; art. 103 CPRG.
Esta postura establece que la relación de trabajo inicia mediante un contrato, que como
todos los contratos, se origina de un acto espontáneo y voluntario de las partes.
Sin la voluntad de las partes, a través del contrato el Derecho Laboral con su imperatividad,
no podría actuar. Esta concepción argumenta que el trabajo se basa en un contrato, que
debe personalizarse como los demás, por la espontaneidad y voluntariedad de las partes,
en las normas jurídicas civiles o en las equiparables a ella, son un conjunto de normas que
regulan relaciones de tipo privado que la relación de los sujetos es de coordinación y que
sus normas tienen carácter dispositivo.
Fuente: Todas las circunstancias que sirven de base o sustento para crear la norma.
a) Fuentes históricas: todos aquellos documentos que sirven de base o sustento para la
creación de la norma, como grabados, periódicos, etc. Esta se puede definir como
cualquier testimonio, documento (libro, papiro, inscripciones, etc), resto u objeto
utilizado por el hombre, que nos puede aportar información significativa, parcial o total,
sobre los hechos que han tenido lugar, especialmente en el pasado.
b) Fuentes reales o materiales: Son todos aquellos acontecimientos de la vida del hombre
en sociedad, que sirven de base o sustento para la creación de la norma, como los
movimientos ideológicos y la necesidad de justicia. Conjunto de factores históricos,
políticos, sociales, económicos, culturales, éticos o religiosos que influyen en la creación
de la norma jurídica.
c) Fuentes formales: Hacen referencia a la forma en que el Estado hace saber a sus
habitantes el contenido de sus normas.
a. Doctrina
b. La ley
c. Jurisprudencia
d. Costumbre
3.2. Fuentes específicas del derecho del trabajo
a) Pacto Colectivo de Condiciones de Trabajo. Art. 49 C.T.
b) Contrato colectivo de Condiciones de Trabajo. Art. 38 C.T.
c) Reglamento interior de trabajo. Art. 57 C.T.
d) Convenio colectivo de Condiciones de Trabajo. Art. 386 C.T.
e) Laudo arbitral. Art. 396 C.T.
f) Convenios y tratados de la OIT
g) Costumbre o uso local.
h) Constitución Política
i) Código de Trabajo
j) Demás leyes y reglamentos de trabajo y previsión social.
3.3. Jerarquía de aplicación supletoria de las fuentes del Derecho de Trabajo. Art. 15 C.T.
4.2. La regla de interpretación del indubio pro operario. Art. 106 CPRG y 17 C.T.
Establece que en caso de duda entre dos normas, debe aplicarse la norma más favorable al
trabajador; si existe duda en la interpretación de una norma, esta debe entenderse en el
sentido más favorable al trabajador.
Es toda persona individual que presta a un patrono sus servicios materiales o intelectuales
o de ambos géneros, en virtud de un contrato o relación de trabajo.
Es toda persona individual o jurídica que utiliza los servicios de uno o más trabajadores, en
virtud de un contrato o relación de trabajo. Puede ser: persona jurídica colectiva o persona
jurídica individual.
Por subordinación se entiende, de una manera general, la relación jurídica que se crea entre
el trabajador y el patrono, en virtud de la cual está obligado el primero, en la prestación de
sus servicios, a cumplir sus obligaciones y las instrucciones dadas por el segundo para el
mejor desarrollo de las actividades de la empresa... Con el objeto de penetrar ahora en el
problema de la relación de subordinación, diremos que es una naturaleza jurídica que se
descompone en dos elementos: una facultad jurídica del patrono en virtud de la cual puede
dictar los lineamentos, instrucciones u órdenes que juzgue conveniente para la obtención
de los fines de la empresa; y una obligación igualmente jurídica del trabajador de cumplir
esas disposiciones en la prestación de su trabajo."
No se trata de una subordinación y dependencia por la cual el trabajador quede a merced
del arbitrio de cualquier actitud patronal, sino únicamente a aquellas que se deriven de la
ley y la técnica para la mejor consecución de los resultados productivos, por cuanto el
trabajador en todo caso está protegido por una serie de garantías que se configuran en la
legislación laboral.
Artículo 31 C.T. Tienen también capacidad para contratar su trabajo, para percibir y disponer
de la retribución convenida y, en general, para ejercer los derechos y acciones que se
deriven del presente Código, de sus reglamentos y de las leyes de previsión social, los
menores de edad, de uno u otro sexo, que tengan catorce años o más y los insolventes y
fallidos.
Las capacidades específicas a que alude el párrafo anterior, lo son sólo para los efectos de
trabajo, y en consecuencia, no afectan en lo demás el estado de minoridad o, en su caso, el
de incapacidad por insolvencia o quiebra.
La interdicción judicial declarada del patrono no invalida los actos o contratos que haya
celebrado el ejecutado con sus trabajadores anteriormente a dicha declaratoria.
Artículo 32 C.T. Los contratos relativos al trabajo de los jóvenes que tengan menos de
catorce años, deben celebrarse con los representantes legales de éstos y, en su defecto, se
necesita la autorización de la Inspección General de Trabajo.
El producto del trabajo de los menores a que se refiere el párrafo anterior lo deben percibir
sus representantes legales o la persona que tenga a su cargo el cuidado de ellos, según la
determinación que debe hacer la Inspección General de Trabajo, en las autorizaciones a que
alude este artículo.
12.5. Causas que permiten terminar el contrato de trabajo sin responsabilidad de las
partes.
Reguladas en el artículo 86 del Código de Trabajo:
- Por advenimiento del plazo en los contratos a plazo fijo y por la conclusión de la obra
en los contratos para obra determinada.
- Por las causas legales expresamente estipuladas en él
- Por mutuo consentimiento.
12.6. La terminación ilegal del contrato individual de trabajo. La terminación ilegal del
contrato de trabajo se da por todas aquella causas que no estén contempladas en el
artículo 77 del Código de Trabajo como causas justas.
12.7. Obligaciones que derivan de la terminación ilegal del contrato individual de trabajo.
15. Prescripción.
15.1. Definición. Según el artículo 258 del Código de Trabajo: prescripción es un medio de
librarse de una obligación impuesta por el presente Código o que sea consecuencia de
la aplicación del mismo, mediante el transcurso de cierto tiempo y en las condiciones
determinadas en este capítulo.
15.2. Derechos que tienen plazo de prescripción en el Código de Trabajo.
- Derechos de los patronos para despedir justificadamente a los trabajadores o para
disciplinar sus faltas prescriben en 20 días hábiles. Art. 259.
- Derechos de los trabajadores para reclamar contra su patrono en los casos de despido
o contra las correcciones disciplinarias que se les apliquen prescriben en el plazo de 30
días hábiles. Art. 260.
- Derechos de los trabajadores para dar por terminado efectivamente y con justa causa
su contrato de trabajo prescribe en el término de 20 días hábiles. Art. 261.
- Derechos de los patronos para reclamar contra los trabajadores que se retiren
injustificadamente de su puesto prescriben en el término de 30 días hábiles. Art. 262.
15.3. Plazo genérico de prescripción.
- Los derechos que provengan directamente de contratos de trabajo, de pactos colectivos
de condiciones de trabajo, de convenios de aplicación general o del reglamento interior
de trabajo prescriben en el término de 4 meses desde la fecha de terminación. Art. 263.
- Los derechos que provengan directamente del Código de Trabajo, reglamentos y demás
leyes de trabajo y previsión social prescriben en el término de 2 años desde el
acaecimiento del hecho u omisión respectivos.
15.4. Plazo de prescripción en las relaciones de trabajo de la Administración Pública. Todas
las acciones o derechos provenientes de la presente ley o de sus reglamentos
prescriben en el término máximo de tres meses, con las excepciones o reglamentos
reglamento especial que al efecto se emita. Art. 87 Ley del Servicio Civil.
16. Regímenes Especiales de Trabajo. (En el Código)
17. Derecho disciplinario del trabajo.
17.1. Definición y finalidades. conjunto de normas jurídicas que regulan lo referente a las
infracciones, violación por acción u omisión contra las disposiciones del código de
trabajo y demás leyes laborales que estén penados con multa. El Derecho
Disciplinario del Trabajo, es la facultad que confieren las normas de castigar las faltas,
pero sin un relieve penal, con lo cual se persigue asegurar el buen servicio y la debida
jerarquía en los empleos y las relaciones laborales.
Es el poder de dirección que conlleva necesariamente una facultad disciplinaria por
parte del director del trabajo. Es poco lo que nuestra legislación regula al respecto y
su defecto se redacta el Reglamento Interior de Trabajo, que es un conjunto de
normas que regulan la forma y condiciones de la prestación de servicios en
determinada empresa, región o industria.
Este reglamento no debe contener disposiciones de coacción que vayan más allá de
las que la ley o convención colectiva permitan al patrono. En todo caso, dicho
reglamento necesita para su implementación, de la previa autorización de la
Inspección General de Trabajo.
Es importante hacer mención que este reglamento también contiene las
disposiciones disciplinarias y procedimientos para aplicarlas. (Art. 60 del C. de T.).
17.2. Faltas de trabajo. Según el artículo 269, son faltas de trabajo y previsión social las
infracciones o violaciones por acción u omisión que se cometan contra las
disposiciones de este Código o de las demás leyes de trabajo o de previsión social, si
están sancionadas con multa.
17.3. Sanciones de trabajo. El artículo 270 C.T. nos habla de las correcciones disciplinarias
aunque estén penadas por multa, las que las autoridades judiciales de trabajo
impongan a las partes, a los abogados o asesores de éstas, a los miembros de los
Tribunales de Trabajo y Previsión Social, a los trabajadores al servicio de estos
últimos, y en general a las personas que desobedezcan sus mandatos con motivo de
la tramitación de un juicio o de una conciliación. Asimismo el artículo 272 enumera la
forma en que deben sancionarse las faltas. En general, lo relativo al derecho
disciplinario se encuentra regulado en el título octavo del Código de Trabajo, a partir
del artículo 258.
Los conflictos individuales son siempre pleitos de tipo jurídico, mientras que los
conflictos colectivos pueden ser de carácter jurídico o bien de carácter económico o
de interés.
En los conflictos colectivos por el contrario, los intereses son más abstractos o
indeterminados; se encaminan a la obtención de nuevas conquistas o a mejorar los
derechos; en consecuencia, las controversias son de naturaleza económica y social, y
obligan eventualmente a personas individuales y jurídicas ajenas a la controversia.
18.5. Naturaleza. En Guatemala la naturaleza jurídica del Derecho del Trabajo, está
determinada en la propia legislación, tanto en el considerando cuarto literal e) del
Código de Trabajo, como en su artículo 14. Por ejemplo, en el referido considerando
dice que El Derecho del Trabajo es una rama del Derecho Público, por lo que al ocurrir
su aplicación, el interés privado debe ceder ante el interés social o colectivo. Y en el
artículo 14 indica: El presente Código y sus reglamentos son normas legales de orden
público y a sus disposiciones deben sujetarse todas.
Ahora bien cabe anotar que en la doctrina domina la idea de que el Derecho de
Trabajo es una nueva disciplina jurídica autónoma que no debe asimilarse al Derecho
Privado ni al Público, ni tiene carácter mixto, aunque se componga de elementos de
uno y de otro, toda vez que esta división está en crisis y sólo por tradición se acepta,
pues no responde a una realidad científica y menos sirve para fijar la naturaleza de la
nueva disciplina cultural de tendencia socializadora.
18.6. Relaciones con otras ciencias y disciplinas jurídicas. El Derecho Procesal del Trabajo
tiene relación con diversas disciplinas que conforman el universo del Derecho; pero
conviene anotar que se da una relación más acentuada con los siguientes:
- Relación con el Derecho Constitucional: tal relación la encontramos
particularmente en los artículos 12, 28, 29, 103, 104, 106, 203, 204 y 211. Porque
la justicia sea del ramo que sea se imparte de conformidad con la Constitución.
Son los jueces quienes con independencia tienen la facultad de juzgar y ejecutar
lo juzgado. Porque según la Constitución: Las leyes que regulan las relaciones entre
empleadores y el trabajo son CONCILIATORIAS y TUTELARES para los trabajadores
y atenderán los factores económicos y sociales pertinentes. Todos los conflictos
relativos al trabajo están sometidos a la JURISDICCION PRIVATIVA. Se reconoce el
derecho de huelga y para ejercidos de conformidad con la ley. Y porque los
derechos consignados en la Constitución son IRRENUNCIABLES para los
trabajadores, susceptibles de ser superados a través de la contratación individual
o colectiva y en la forma que fija la ley, para este fin el Estado fomentará y
protegerá la negociación colectiva. En caso de duda sobre la interpretación o
alcance de las disposiciones legales, reglamentarias o contractuales en materia
laboral, se interpretarán en el sentido más favorable para los trabajadores.
- Relación con el Derecho de Trabajo Sustantivo: Porque el derecho procesal es el
encargado de hacer realidad las normas plasmadas en el derecho sustantivo
cuando las mismas son incumplidas o se quieren llevar a la práctica.
- Relación con el Derecho Procesal Civil: Esta no siempre bien concebida relación,
se da a partir de lo que establece el artículo 326 del Código de Trabajo: "En cuanto
no contraríen el texto y los principios procesales que contiene este Código, se
aplicarán supletoriamente las disposiciones del Código de Enjuiciamiento Civil y
Mercantil y de la Ley Constitutiva del Organismo Judicial. Si hubiere omisión de
procedimientos, los tribunales de trabajo y previsión social están autorizados para
aplicar las normas de las referidas leyes por analogía, a fin de que pueda dictarse
con prontitud la resolución que decida imparcialmente las pretensiones de las
partes".
- Relación con el Derecho Procesal Penal: Por la similitud de procedimientos para
el juzgamiento de faltas y porque en ambos campos los jueces no deben
contraerse a establecer la verdad histórica, esto es, la que las partes tratan de
demostrar, sino que a través de la investigación deben procurar establecer la
verdad real.
- Relación con el Derecho Administrativo: Es en este ámbito en que se legalizan las
organizaciones de trabajadores, se soluciona conciliatoriamente muchos de los
conflictos individuales y colectivos que surgen entre patronos y trabajadores y
tiene participación activa, preventiva y definitiva en una serie de situaciones de
carácter laboral, previamente a ser puestas en conocimiento ante los jueces de
trabajo.
19. Jurisdicción privativa del trabajo.
19.1. Naturaleza y caracteres. La naturaleza formal y material jurisdiccional de la judicatura
privativa de trabajo, tiene su base en normas constitucionales y, se desarrolla y
determina con mayor precisión en el Código de Trabajo. En la Constitución lo
establece en el artículo 103; en el artículo 283 del Código de Trabajo que dice: "Los
conflictos relativos a trabajo y previsión social, están sometidos a la jurisdicción
privativa de los tribunales de trabajo y previsión social, a quienes compete juzgar y
ejecutar lo juzgado". De manera que la judicatura de trabajo y previsión social de
manera formal tiene plena categoría jurisdiccional, con todas las potestades
inherentes a esa calidad. Pero existe una excepción para los tribunales de conciliación
y arbitraje, cuyas facultades son más limitadas. Este tipo de judicaturas depende del
Organismo Judicial, pero requiere de personal especializado en la materia y están
integrados por jueces de derecho y de conciencia, con preponderancia de los jueces
de derecho sobre los legos (jueces de primera instancia y los representantes obrero-
patronales en los tribunales de conciliación y arbitraje).
19.2. Organización de los órganos jurisdiccionales que recoge el Código de Trabajo
guatemalteco. Esta organización se conforma a partir de los jueces que conocen de
los distintos procesos laborales, a saber:
- Unipersonales: Juzgado de Trabajo y Previsión Social, con jueces de derecho
unipersonales que conocen de los conflictos individuales y colectivos de carácter
jurídico, generalmente a través del procedimiento ordinario;
- Colegiados: Salas de las Corte de Apelaciones de Trabajo y Previsión Social, las que
conocen en segunda instancia de los mismos conflictos indicados con anterioridad,
integrada por tres jueces de derecho;
- Tribunales Mixtos: A) De conciliación; y B) De arbitraje, presididos por un juez de
derecho, quien conoce cuestiones de derecho; dos delegados: uno obrero y un
patronal, que conocen conflictos colectivos de carácter económico - social, según
su leal saber y entender.
19.3. Las reglas de la competencia.
- Regla general: El juez que es competente y preferido a cualquier otro juez de
trabajo y previsión social, aquel de la zona jurisdiccional a que corresponda el lugar
de ejecución13: del trabajo. Por regla general la demanda deberá instaurarse
indistintamente del objeto del juicio, ante el juez del lugar en donde el trabajador
ejecutaba los servicios.
- Reglas especiales:
o La regla de los distintos lugares de ejecución del trabajo. En este caso, se regula
que cuando la ejecución de la prestación de los servicios tenga lugar en diversos
lugares el tribunal de trabajo y previsión social competente será el de la zona
jurisdiccional a la que corresponda la residencia habitual del actor o
demandante. Esta regla resulta trascendente ya que el actor puede demandar
en el lugar de su domicilio.
o Los conflictos entre trabajadores o entre patronos. En este caso la regla
especial de la competencia regula que cuando se trate de demandas
instauradas para dirimir un conflicto surgido entre dos trabadores o entre dos
empleadores será competente el tribunal de trabajo que corresponda al de la
zona jurisdiccional de la residencia habitual del demandado.
o El reclamo por incumplimiento de contrato de trabajo celebrado en
Guatemala para prestar servicios en el extranjero. Esta regla se refiere al caso
de los contratos de trabajo que hayan sido celebrados en territorio
guatemalteco con trabajadores nacionales, para prestación de servicios en el
extranjero a menos que exista en el país del que es nacional el patrono cláusula
más favorables para el trabajador.
o Cuando las organizaciones sindicales fungen como empleadores o bien,
cuando se quiere obtener judicialmente la disolución de éstas. Esta regla prevé
el caso de cuando los organismos sindicales por un lado, funjan como
empleadores y se instaure contra ellos el reclamo el pago de prestaciones; y por
otro lado, funjan como empleadores y se instaure contra ellos el reclamo de
pago de prestaciones, será competente entonces para conocer el tribunal de
trabajo del lugar en donde estas organizaciones tengan su domicilio.
19.4. Los conflictos de jurisdicción. Según lo regula el Código de Trabajo, en los artículos
309 y siguientes, el que sea demandado o requerido para la práctica de una diligencia
judicial ante un Juez que estime incompetente por razón de la materia o el territorio,
podrá ocurrir ante éste pidiéndole que se inhiba de conocer en el asunto y remita lo
actuado al Juez que corresponda, planteando la cuestión dentro de los tres días de
notificada la demanda ante el juzgado de trabajo correspondiente, éste eleva las
actuaciones al tribunal de conflictos de jurisdicción quien después del respectivo
análisis remite las actuaciones al órgano competente. Las excepciones de
incompetencia que sean frívolas a juicio del tribunal, se le interpondrá al litigante que
la interpuso una multa de diez a cien quetzales, según el artículo 312 del Código de
Trabajo.
20. El procedimiento ordinario laboral y los medios de impugnación.
20.1. Naturaleza y caracteres.
- Naturaleza. El juicio ordinario de trabajo es un típico proceso de cognición, ya que
tiende a declarar el derecho previa fase de conocimiento; en él se dan
preferentemente los procesos de condena y los meramente declarativos. Se
diferencia del civil, en las modalidades que le imprimen los principios informativos
y su propia normatividad.
- Caracteres. Es un proceso en el que el principio dispositivo se encuentra atenuado,
pues el Juez tiene amplias facultades en la dirección y marcha del mismo,
impulsándolo de oficio, produciendo pruebas por sí o bien completando las
aportadas por los litigantes, teniendo contacto directo con las partes y las pruebas,
y apreciando a las mismas con flexibilidad y realismo; es un juicio
predominantemente oral, concentrado en sus actos que lo componen, rápido,
sencillo, barato y antiformalista, aunque no por ello carente de técnica; limitado
en el número y clases de medios de impugnación y parco en la concesión de
incidentes que dispersan y complican los trámites, más celoso que cualquier otro
juicio en mantener la buena fe y lealtad de los litigantes y todo ello, saturado de
una tutela preferente a la parte económica y culturalmente débil. En el mismo no
se contempla término de prueba porque esta se produce de una vez durante las
audiencias, así como también que en la primera instancia no existe vista del
proceso y por añadidura no se declara cerrado el procedimiento.
20.2. Materia del procedimiento ordinario en el campo laboral. Tramitación y solución
judicial de los Conflictos Individuales y Conflictos Colectivos de carácter Económico
Jurídico, que surjan entre trabajadores y patronos, así como también, los conflictos
contenciosos en materia de Previsión Social, derivados del Instituto Guatemalteco de
Seguridad Social; y todos aquellos asuntos de esta materia que carezcan de
procedimiento determinado, en el Código de Trabajo.
20.3. Las partes. Doctrinalmente no existe unidad de criterio en cuanto a la consideración
de quien o quienes se deben considerar como partes del proceso; unos prefieren
llamarlos accionantes y consideran también como partes no sólo al que promueve el
juicio y a quien contra el cual se promueve, sino también al juez, a los terceros
intervinientes. Sin embargo, para los efectos de nuestro estudio diremos que las
partes que intervienen en un proceso son dos, y tradicionalmente se las ha
denominado: PARTE ACTORA Y PARTE DEMANDADA.
Por lo que se pueden definir de la manera siguiente: "Las partes en el proceso laboral
son: los trabajadores, y los patronos en lo que a relaciones individuales se refiere, y
las coaliciones o sindicatos de trabajadores, o patronos o sindicatos de patronos, en
lo que a relaciones de carácter colectivo respecta y que, para que se les considere
como tales, deben actuar en nombre propio o representados, ya sea como parte
actora o como parte demandada, pidiendo la protección o la declaración de una
pretensión de carácter jurídico o de carácter económico y social, ante los órganos
jurisdiccionales de trabajo".
20.4. Capacidad procesal en materia de trabajo.
Como primera providencia debe anotarse que de la distinción entre partes del litigio
y partes del proceso, surge la clasificación de las partes en sentido material y partes
en sentido formal o procesal.
Se entiende por parte en sentido material, los sujetos del litigio o de la relación
jurídica sustancial sobre que versa, y por partes en sentido formal, los sujetos del
proceso.
El Artículo 31 del Código de Trabajo, indica que tienen también capacidad para
contratar su trabajo, para percibir y disponer de la retribución convenida y, en
general, para ejercer los derechos y acciones que se deriven del presente Código,
de sus reglamentos y de las leyes de previsión social, los menores de edad, de uno
u otro sexo, que tengan catorce años o más y los insolventes y fallidos.
Las capacidades específicas a que alude el artículo relacionado, lo son sólo para los
efectos del trabajo y más específicamente para las persona que actúa como
trabajador. El referido artículo 31 se complemente con lo que prescribe el 280 del
mismo instrumento legal:
"La Inspección General de Trabajo debe ser tenida como parte en todo conflicto
individual o colectivo de carácter jurídico en que figuren trabajadores menores de
edad o cuando se trate de acciones entabladas para proteger la maternidad de las
trabajadoras, salvo que, en cuanto a estas últimas se apersone el Instituto
Guatemalteco de Seguridad Social."
De manera general, toda persona natural con capacidad procesa, puede elegir entre
comparecer o estar en juicio personalmente o por medio de representante.
Toda persona jurídica, no obstante su capacidad procesal, sólo puede hacerlo por
medio de la persona o personas individuales que para ello están autorizadas por su
régimen constitutivo.
Toda persona sin capacidad procesal sólo puede ejercer sus derechos en juicio por
medio del representante que la ley dispone.
A este fenómeno de actuar una persona a nombre de otra sin perder ésta su calidad
de parte, se le llama REPRESENTACION.
- "Sólo los abogados, los dirigentes sindicales en la forma prevista en el inciso h) del
artículo 223 de este Código y los parientes dentro de los grados de ley,
circunstancia que acreditarán al tribunal, podrán actuar como mandatarios
judiciales."
- "Se exceptúan los casos de representación que se derive de una disposición legal
o de una resolución judicial, en que lo serán quienes corresponda conforme a las
leyes respectivas o la resolución judicial";
21. La demanda,
21.1. Concepto y modalidades.
La acción, procesalmente hablando, es una manifestación del derecho de petición y
constituye el antecedente y fundamento de la demanda. Así como la acción tiene
como objeto el que las personas puedan acudir a los tribunales de justicia para la
satisfacción de sus pretensiones, mediante un proceso legalmente instruido y justo;
la demanda laboral es el instrumento legal para el ejercicio de esa acción, que tiene
por objeto la iniciación del proceso jurisdiccional laboral, proceso que a su vez, tendrá
como objeto las pretensiones que dentro del mismo se formulen.
- Por la forma de entablarse pueden ser orales y escritas (Artículos 333 y 322 del C.
de T.);
- Por la pretensión en ellas ejercitada, pueden ser demandas con pretensión simples
y demandas con pretensiones acumuladas (Art. 330 del C. de T.);
- Por su origen puede ser demanda introductiva de la instancia y demanda
incidental (Art. 85-332 del C. de T.).
o Demanda introductiva de instancia: es aquella que en el proceso, las partes
pueden formular varias peticiones que tendrán mayor o menor importancia
según su objeto y que se van satisfaciendo el interés de la parte.
o Demanda incidental: configura los incidentes, que suponen un proceso
iniciado. La Ley del Organismo Judicial, en el Artículo 135, establece que:
“toda cuestión accesoria que sobrevenga y se promueve con ocasión de un
proceso que no tenga señalado por la ley procedimiento, deberá tramitarse
como incidente”. También señala el mismo Artículo que deben rechazarse de
oficio, los incidentes que se refieran a cuestiones que fueren completamente
ajenas al negocio principal.
21.2. Requisitos esenciales y secundarios.
Podemos describir como requisitos esenciales, los que están contenidos en el
encabezado y exposición del escrito y son los siguientes:
- Los que tengan relación con identificar al tribunal al que se dirige la solicitud.
- Los relativos a la identificación de la persona del actor y la persona del demandado.
- Los relativos al objeto del juicio.
- Los relacionados a señalar los lugares para recibir notificaciones por parte del actor
y para notificar al demandado.
- La proposición de la asesoría, si el demandante actúa con el auxilio de abogado.
Así también podemos decir que los requisitos secundarios son los que se encuentran
contenidos en la relación de hechos de la demanda y son los siguientes:
- Los dirigidos a identificar todas y cada una de las condiciones de contratación
individual del trabajo, especialmente en los casos de reclamo por despido o aquellos
hechos, que fundamenten el reclamo en otros casos.
- La individualización de las pretensiones que se persiguen con la instauración de la
demanda.
- La enumeración de los medios de prueba que se proponen, a excepción de los juicios
en los que se reclame despido injusto a menos que en estos se ofrezca prueba por
parte del trabajador.
- En los juicios en que se promueva el pago de prestaciones, debe individualizarse el
nombre de cada una de ellas, así como el período de tiempo a que correspondan y
el importe en dinero por el que se reclaman.
- Las peticiones formuladas en términos precisos, partiendo de las relacionadas con
el trámite del proceso, hasta concluir con las que se relacionen con el fondo de lo
juzgado en el mismo proceso.
- El lugar y la fecha.
- La firma del demandante o su impresión digital si no pudiere firmar, o bien firma de
la persona que lo haga a su ruego.
21.3. Las medidas cautelares. En el mismo artículo 332 del Código de Trabajo, se indica que
en la demanda pueden solicitarse las medidas precautorias, bastando para el efecto
acreditar la necesidad de la medida. El arraigo debe decretarse en todo caso con la
sola solicitud y éste no debe levantarse si no se acredita suficientemente a juicio del
tribunal, que el mandatario que ha de apersonarse se encuentre debidamente
expensado para responder de las resultas del juicio.
Como es sabido, las partes de conformidad con la ley tienen la facultad de acumular
sus pretensiones en una misma demanda; pero en ocasiones sucede que por olvido
se deja de formular alguna pretensión, de manera que se hace necesario ampliar o
modificar la demanda original. Sucede también que debido a las maniobras
patronales de ocultar su nombre verdadero o el de sus empresas, cuando los
trabajadores les demandan se consigne en forma equivocada el nombre del ex-
patrono o empresa, lo que obliga a que el demandante modifique su demanda.
22. Rebeldía. En realidad son variadas las opiniones y criterios existentes con respecto a la
denominación conceptual de esta institución.
Dice Cabanellas: "...es una situación procesal producida por la incomparecencia de una de las
partes ante la citación o llamamiento judicial, o ante la negativa de cumplir sus mandamientos
o intimaciones..."
La Rebeldía según de la Plaza, "...es aquella situación que se da cuando una de las partes no
comparece a juicio, o bien cuando habiendo comparecido se ausenta de él..."
Por su parte el ilustre tratadista Guasp nos dice: "...Rebeldía es, en efecto, la ausencia de alguna
de las partes del proceso en que normalmente habría de figurar como tal..."
Como ya se dijo, para algunos es una desobediencia por la que se deja de atender o
desembarazarse de una carga, no es el incumplimiento de un deber... En realidad
cualquiera que sea el criterio que pudiera aceptarse, lo cierto es que, la rebeldía debe
estimarse como una institución de carácter procesal, cuyo fin es que el proceso no se
paralice como consecuencia de la pasividad o inactividad de las partes de los sujetos
procesales del juicio.
Excepción es aquel medio de defensa que el demandado invoca ante el órgano jurisdiccional, al
ser llamado a juicio, a efecto de paralizar, modificar o destruir la acción intentada en su contra.
La manera más común de clasificar a las excepciones es en: DILATORIAS, PERENTORIAS Y
MIXTAS:
EXCEPCIONES PERENTORIAS O SUSTANCIALES: Son las defensas que atacan el fondo del
asunto, tratando de hacer ineficaz el derecho sustancial que se pretende en juicio. Por eso
se dice que atacan el derecho y no al proceso. Consisten en la alegación de cuanto medio
extintivo de obligaciones existe, por lo que no pueden enumerarse taxativamente; y,
EXCEPCIONES MIXTAS: Son las defensas que funcionando procesalmente como dilatorias,
provocan en caso de ser acogidas, los efectos de las perentorias. Es decir, que se resuelven
previamente como las dilatorias para evitar llegar a un juicio inútil, pero aunque no atacan
el fondo del asunto como las perentorias producen iguales efectos al hacer ineficaz la
pretensión.
25. La reconvención.
25.1. Concepto y modalidad de la reconvención.
Para explicar el fundamento de la reconvención se han sostenido dos posiciones, la
primera que considera que procede por razones de economía procesal, ya que si el
actor puede ejercitar todas las acciones que estima le asisten en contra del
demandado, éste también puede ejercitar sus acciones en la misma forma en contra
de su demandante; la segunda posición, se funda en la necesidad de evitar
complejidad de los litigios. El Lic. Mario López Larrave sostenía que su fundamento se
encontraba en el principio de economía procesal y que por ello no debía servir para
entorpecer el procedimiento o complicarlo con fines aviesos.
Para que tengan validez, es requisito indispensable el acto confirmatorio del Juez; por
cuanto que jurídicamente hablando, dentro del Proceso del Trabajo, no hay
conciliación que no tenga su origen en un proceso.
Ahora bien, para definir sus alcances, existen dos posiciones: 1) una que acepta que
en la conciliación los trabajadores pueden renunciar a sus derechos, una vez que la
relación laboral haya terminado, sobre la base de que son renunciables las
expectativas más no el derecho adquirido; y, 2) otra que no acepta la postura anterior,
indicando que teniendo en cuenta la norma de irrenunciabilidad de ciertos derechos
y de la nulidad de actos por los que se tergiverse, limite o disminuyan los derechos de
los trabajadores; el juez debe hacer la debida distinción entre los derechos del
trabajador reconocidos y establecidos, y las simples pretensiones de derecho cuya
existencia y determinación será materia del debate. "Claro está que las pretensiones
si pueden ser equitativamente modificadas y disminuidas de acuerdo con las
especiales circunstancias del caso concreto. Por ejemplo: un trabajador reclamando
indemnización por despido injusto, pago de un período de vacaciones no gozadas y
pago de jornada extraordinaria no pagada. El patrono acepto en la I.G.T. que no había
despido injustamente y tuvo conforme con el tiempo de servicios, pero no se
conformó con que el trabajador hubiera trabajado jornada extraordinaria y que en
consecuencia le retuviera salarios en este concepto. En este ejemplo, según el criterio
aquí sostenido el trabajador no podrá renunciar a la indemnización y a la
compensación de vacaciones porque sobre las mismas tiene derechos reconocidos,
pero si puede renunciar a disminuir su reclamación sobre el pago de jornada
extraordinaria, porque esta es todavía una pretensión o expectativa que no ha llegado
a ser derecho."
26.4. Clases de conciliación. La conciliación de acuerdo con el artículo 341 del Código de
Trabajo puede ser: TOTAL y PARCIAL.
27. La prueba. Probar es tratar de convencer al Juez de la existencia o inexistencia de los datos
procesales que han de servir de fundamento a su decisión. La primera actitud que el órgano
jurisdiccional asume al decidir, es la de verificar las proposiciones de las partes; esto es,
comprobar por los diversos medios de que dispone, la adecuación de lo dicho por las partes con
la verdad. Tomada en su sentido procesal la prueba es, en consecuencia, un medio de contralor
de las proposiciones que los litigantes formulen en el juicio.
27.1. Procedimiento probatorio en el juicio ordinario de trabajo. El procedimiento
probatorio en el proceso laboral (salvo casos de incidencias) está inspirado en los
principios de sencillez y celeridad, por cuanto que únicamente se da en dos fases: a)
El ofrecimiento de la prueba; b) el diligenciamiento.
El ofrecimiento consiste en el acto por medio del cual se anuncia la prueba que se va
a rendir para demostrar las pretensiones; esto lo hace el actor al plantear la demanda;
el demandado lo hace al contestarla; el que reconviene al formular la
contrademanda; y, según sea el caso, al actor de nuevo ofrecerá su prueba para
desvirtuar la reconvención, al contestar ésta, o al contradecir las excepciones del
demandado.
De lo anterior surge los dos sistemas básicos que rigen la apreciación de la prueba: a)
EL SISTEMA LEGAL O DE LA PRUEBA TASADA; y, b) EL SISTEMA DE LIBRE CONVICCION.
Sin embargo en el proceso histórico dichos sistemas han alcanzado distintos grados
de desarrollo que han dado lugar al nacimiento de otros sistemas como el Mixto o
Ecléctico, o se aquel en que participan los dos sistemas clásicos, tradicionales.
o En contra: "En realidad, el juez no aprecia la prueba, más bien lo que la ley
quiere es que el juez no la aprecie sino que simplemente de por probado el
hecho si en aquella concurren los requisitos previos a que está sometida.
No aplica el Juez su criterio a saber, sino que el criterio del legislador."
Isidoro Eisner, citado por Lic. Nájera Farfán);
De acuerdo con la norma ya citada, se puede concluir que en nuestro Código de Trabajo
tienen aplicación el SISTEMA LEGAL O DE LA PRUEBA TASADA, EL SISTEMA DE LA SANA
CRITICA y el de la APRECIACION DE LA PRUEBA EN CONCIENCIA.
De acuerdo con el artículo 361 del Código de Trabajo la valoración de la prueba podría
ser la siguiente:
El artículo 332 del Código de Trabajo, establece los requisitos que debe contener
la demanda y su correspondiente contestación, indicando en la literal e)
"enumeración de los medios de prueba con que acreditarán los hechos,
individualizándolos en forma clara y concreta, según su naturaleza, expresando
los nombres y apellidos de los testigos y su residencia si se supiere..." o sea que
es en la demanda o en su contestación la oportunidad procesal en la cual se debe
ofrecer la prueba, ofrecimiento que debe ser debidamente individualizado, para
no dar oportunidad al juzgador que la rechace. Hay autores y jueces que
sostienen que en el procedimiento laboral no es permitido hacer el ofrecimiento
como se hace en el campo procesal civil, en donde sólo se consigna: "OFREZCO
LA DECLARACION DE TESTIGOS", en razón de que el Código de Trabajo exige que
se enumere el medio de prueba, individualizándolo en forma clara y concreta y
específicando en relación a la prueba de testigos, se debe indicar los nombres y
apellidos, de los que se ofrece.
- Número de testigos que se pueden ofrecer: Las partes pueden ofrecer hasta
cuatro testigos sobre cada uno de los hechos que pretendan establecer.
- Diligenciamiento: De acuerdo con la ley, las partes están obligadas a comparecer
con sus respectivos medios de prueba a la primera audiencia. Cuando los testigos
no residan en la localidad en donde está situado el juzgado, la ley prevé (Art.439)
que cuando haya que recibirse declaraciones de testigos fuera del lugar donde
tenga asiento el tribunal, el juez después de contestada la demanda y con la
audiencia de la parte contraria, haciéndole saber el día y la hora de la diligencia
podrá comisionar a otro de igual o inferior categoría, aunque no sea de la
jurisdicción privativa de trabajo.
Las partes no tienen facultad o derecho para tachar a los peritos nombrados por
el Juez, pero el Juez está facultado para removerlos si en cualquier momento
tuviere motivo para dudar de su imparcialidad o de su falta de pericia, sea por
propia convicción o por gestiones de la parte que se estime perjudicada. Contra
esta resolución no cabe recurso alguno, en virtud de que la determinación de
remover peritos de conformidad con lo establecido en el artículo 352 del Código
de Trabajo, es facultad discrecional del juzgado.
Pero cabe hacer la observación en relación a este tipo de prueba, que sólo será
admisible si es compatible y no contraría los principios y texto del Código de Trabajo.
30.1. Forma y contenido de la sentencia. La sentencia laboral se halla sujeta a los requisitos,
comunes a todo acto procesal, de lugar, el tiempo y la forma. El lugar en donde está
asentado el tribunal que conoce del proceso. El tiempo, hay variantes, así por ejemplo
el artículo 358 del Código de Trabajo prescribe: "Cuando el demandado no
comparezca a la primera audiencia sin justificación y hubiera sido legalmente citado
para prestar confesión judicial en la misma, bajo los apercibimientos
correspondientes, el juez, sin más trámite, dictará sentencia dentro de cuarenta y
ocho horas de celebrada la audiencia respectiva. En la misma forma se procederá en
los supuestos del párrafo anterior, cuando se trate de demanda por despido injusto
aunque no hubiere sido ofrecida la prueba de confesión judicial del demandado; pero
si en el mismo juicio se ventilaren otras acciones, el juicio proseguirá en cuanto a estas
conforme lo previsto en este título...". Por su parte el Artículo 359 del mismo Código,
dice: "Recibidas las pruebas y dentro de un término no menor de cinco ni mayor de
diez días, el juez dictará la sentencia."
La forma de la sentencia está determinada por el artículo 364 del Código de Trabajo
que establece: "Las sentencias se dictarán en forma clara y precisa, haciéndose en
ellas las declaraciones que procedan y sean congruentes con la demanda,
condenando o absolviendo, total o parcialmente al demandado, y decidiendo todos
los puntos litigiosos que haya sido objeto de debate...".
Supletoriamente, y observando las particularidades que reviste el proceso ordinario
laboral, los juzgados observan lo dispuesto en el artículo 147 de la Ley del Organismo
Judicial, en cuando a la forma de redacción de las sentencias se refiere, lo que incluye:
- Nombre completo, razón social o denominación o domicilio de los litigantes; en
su caso, de las personas que los hubiesen representado; y el nombre de los
abogados de cada parte (en lo laboral cuando los hubiese);
- Clase y tipo de proceso, y el objeto sobre el que versó, en relación a los hechos;
- Se consignará en párrafos separados resúmenes sobre el memorial de demanda,
su contestación, la reconvención, las excepciones interpuestas (perentorias,
porque las dilatorias se resuelven a parte) y los hechos que se hubieren sujetado
a prueba;
- Las consideraciones de derecho que harán mérito del valor de las pruebas
rendidas y de cuales de los hechos sujetos a discusión se estiman probados; se
expondrán, asimismo, las doctrinas fundamentales de derecho y principios que
sean aplicables al caso y se analizarán las leyes en que se apoyen los
razonamientos en que descanse la sentencia;
- La parte resolutiva, que contendrá decisiones expresas y precisas, congruentes
con el objeto del proceso.
30.2. Clases de sentencia posibles en el procedimiento ordinario.
- Declarativas: como por ejemplo cuando se discute un caso que tiene por objeto
la determinación de si se trata de una relación de carácter civil (servicios
profesionales) o si se trata de una relación laboral (un trabajador), sentencia que
tiene por finalidad únicamente la declaración del carácter de tal relación.
- De Condena: ejemplo, cuando se reclama el pago de vacaciones no disfrutadas,
el juez únicamente se concreta a condenar al demandado al pago de la
prestación reclamada, si procediere;
- Desestimatorias: ejemplo, cuando se reclama el pago de indemnización por
despido injustificado y el demandado prueba la causa justa, se desestima la
demanda;
- En rebeldía: cuando habiendo sido citado el demandado, éste no comparece, se
dicta la sentencia en rebeldía.
31. Los recursos:
31.1. Revocatoria: El Recurso de Revocatoria es la facultad que tiene el juez para revocar a
solicitud de parte, sus propios decretos.
El Código de Trabajo en el Artículo 365, prescribe que: "Contra las resoluciones que
no sean definitivas procederá el recurso de revocatoria. Este deberá interponerse en
el momento de la resolución, si la misma hubiere sido dictada durante una audiencia
o diligencia y dentro de veinticuatro horas de notificada una resolución, cuando ésta
hubiere sido dictada por el tribunal sin la presencia de las partes.
La laguna de esta norma en cuanto al tiempo de resolver dicho recurso, se solventa
con la aplicación supletoria del artículo 146 de la Ley del Organismo Judicial que
establece: "Si el proceso fuere verbal, el pedimiento se hará en comparecencia, y el
tribunal resolverá dentro de veinticuatro horas." También los tribunales en la práctica
aplicas supletoriamente el último párrafo de la precitada norma que dice: "Contra las
resoluciones que se dicten en estos y en los casos del artículo anterior (reposición de
autos), no cabrá recurso alguno." De manera que puede decirse que conforma a dicha
práctica contra lo resuelto en un recurso de revocatoria no cabe recurso alguno.
31.4. Ampliación: Conforme al artículo 365 del Código de Trabajo, en los procedimientos
de trabajo procede el recurso de ampliación contra las sentencias o autos que
pongan fin al juicio.
La ampliación se pedirá dentro de las veinticuatro horas de notificado el fallo, si se
omitió resolver alguno o alguno de los puntos sometidos a juicio.
31.5. Apelación: Es el procedimiento por medio del cual, una de las partes o ambas,
solicitan al tribunal de segundo grado, un nuevo examen sobre una resolución
judicial laboral, dictada por un juzgador de primer grado, que le reporta perjuicio o
gravamen, pretendiendo que la confirme, revoque, enmiende o modifique, parcial
o totalmente y profiera la sustitutiva que en derecho corresponde.
- Resoluciones apelables: El Código de Trabajo en su artículo 365 establece dos
situaciones en relación al recurso de apelación:
o No procede el Recurso de Apelación en los juicios cuya cuantía no exceda
de cien quetzales;
o En los procedimientos de trabajo proceden contra las sentencias o autos
que pongan fin al juicio
- Término para su interposición:
o Si se trata de la interposición de un recurso de apelación contra un auto que
resuelva un Recurso de Nulidad, el término para interponer el Recurso de
Apelación es de veinticuatro horas, de notificado el auto;
o Si se trata de la interposición del recurso de apelación contra una sentencia,
debe interponerse dentro de tercero día de notificado el fallo
- Trámite:
o Interpuesto el Recurso de Apelación ante el tribunal que conoció en Primera
Instancia, éste concederá el trámite si fuere procedente y elevará los autos
a la Sala de Apelaciones de Trabajo y Previsión Social;
o Recibidos los autos en la Sala de Apelaciones de Trabajo y Previsión Social,
dará audiencia por cuarenta y ocho horas a la parte recurrente, a efecto de
que exprese los motivos de su inconformidad;
o Se dentro del término de 48 horas, concedido al recurrente, éste pidiere
que se practique laguna prueba denegada en primera instancia, en la cual
hubiere consignado su protesta, la Sala de Apelaciones si lo estima
procedente, con noticia a las partes, señalará audiencia para la recepción
de la prueba o pruebas solicitadas que deben practicarse en el término de
10 días;
o Vencidas las 48 horas de la audiencia para expresar agravios, o vencido el
término de los 10 días señalados para recibir las pruebas no diligenciadas
en primera instancia, se señalará día para la vista la que debe efectuarse
dentro de los cinco días (5) siguientes;
o Después del día de la vista y si el tribunal lo estima necesario, puede ordenar
por una sola vez, antes de dictar sentencia, de oficio o a instancia de parte
un Auto Para Mejor Proveer, con el objeto de:
Diligenciar cualquier prueba que estime pertinente, decretar que se
traiga a la vista cualquier documento o actuación que crean
conveniente u ordenar la práctica de cualquier reconocimiento o avalúo
que estimen indispensable; tales diligencias deberán practicarse dentro
de un término que no exceda de 10 días, dentro del cual se señalará la
audiencia o audiencias que sean necesarias, con citación de las partes.
La practica de estas diligencias únicamente tendrá por objeto aclarar
situaciones dudosas y en ningún caso deberán servir para aportar
prueba a las partes del juicio;
Para diligenciar las pruebas de las excepciones que se hayan
interpuesto en segunda instancia;
o La Sala jurisdiccional cinco días después del señalado para la vista, o de
vencido el término del auto para mejor proveer, debe dictar sentencia, la
que debe confirmar, revocar, enmendar o modificar, parcial o totalmente la
sentencia de primer grado.
- Responsabilidad: Este Recurso perdió prácticamente su objeto, al ser reformado
por el actual Código de Trabajo y por el Decreto 64-92 del Congreso de la
República. El artículo 366 del Código vigente prescribe que los recursos de
responsabilidad contra los titulares de los Tribunales de Trabajo y Previsión
Social y el recurso de rectificación, proceden en los casos previstos en este
Código. Y el Artículo 429 del mismo instrumento legal, indica que procede el
recurso de responsabilidad contra los jueces y magistrados de trabajo y previsión
social: a) Cuando retrasen sin motivo suficiente la administración de justicia; b)
Cuando no cumplan con los procedimientos establecidos; c) Cuando por
negligencia, ignorancia o mala fe, causaren daños a los litigantes; d) Cuando
estando obligados a razonar sus pronunciamientos no lo hicieren o lo hicieren
deficientemente; e) Cuando faltan a las obligaciones administrativas de su cargo;
y, f) Cuando observaren notoria mala conducta en sus relaciones públicas o
privadas. Todo ello sin perjuicio de las responsabilidades de otro orden en que
pudieren incurrir. El subsiguiente artículo 430 indica que, La Corte Suprema de
Justicia debe proceder por denuncia o acusación recibida a investigar y a
examinar, por medio de uno de sus miembros o por un magistrado comisionando
de la Corte de Apelaciones de Trabajo, el caso respectivo, oyendo al juez o
magistrado de que se trate y si encuentra fundada la acusación o denuncia debe
imponerle al funcionario responsable, algunas de las sanciones siguientes: a)
suprimido; b) Amonestación pública; c) Multa de un mil quinientos (Q.1,500.oo)
a dos mil quinientos (Q.2,500.00) quetzales a título de corrección disciplinaria;
d) Se suprimió. Contra la resolución cabe el recurso de reposición.
Según el Licenciado Raúl Antonio Chicas Hernández, de la lectura del artículo 366
no se puede deducir a que tipo de responsabilidad se hace referencia, por lo que
estima que cuando se trate de iniciar una acción de responsabilidad contra un
Magistrado o Juez, se tiene que acudir primero a lo que para el efecto establece
la Ley de Probidad y Responsabilidades en cuanto al trámite previo de antejuicio
y si éste prospera, tendría que acudirse a las leyes del orden común, en relación
a las acciones a ejercitarse: si es por daños y perjuicios se tendría que demandar
en el Juzgado del orden civil; si se trata de la comisión de un hecho constitutivo
de un delito, se tendría que acudir ante un Juzgado del orden penal y si
únicamente se trata de obtener una sanción disciplinaria, se tendría que acudir
ante la Corte Suprema de Justicia a efecto de imponer la medida disciplinaria
correspondiente con base en la Ley del Organismo Judicial y reglamento de
tribunales (sobre éste último aspecto, parece no haber congruencia con lo
establecido en los artículos 429 y 430 ya comentados).
34.2. Principios rectores del proceso: los principios procesales serían los siguientes:
- El principio protector o tutelar;
- el de economía procesal;
- de concentración;
- de impulso procesal de oficio;
- de publicidad;
- oralidad;
- de sencillez;
- de investigación o de averiguación de la verdad material o histórica;
- de flexibilidad en cuanto a la carga y valoración de las pruebas;
- de probidad o lealtad.
34.3. Caracteres y contenido: Una de las característica de este proceso es que a la hora de
conocer el Tribunal de Conciliación y Arbitraje se crean derechos nuevos que
anteriormente no estaban establecidos; la otra es de que crea ley profesional, similar
a la de un pacto, por cuanto que la normatividad que emerge finalmente de este
proceso, sea porque se aceptan las recomendaciones de un tribunal de conciliación o
porque se impone un laudo arbitral, obliga no solo a los que intervienen en el proceso
sino incluso a personas individuales y jurídicas que tienen relación laboral con la parte
patronal que es objeto del proceso, incluso con aquellos que aún no han ingresado al
centro de trabajo, esto es, operan al futuro. Otra característica es la sentencia
extrapetita, por cuanto que la sentencia resolverá por separado las peticiones de
derecho de las que importen reinvidicaciones económicas o sociales, que la ley
imponga o determine y que estén entregadas a la voluntad de las partes en conflicto.
En cuanto a esta últimas (he aquí lo extrapetito) puede el Tribunal de Arbitraje
resolver con entera libertad y en conciencia, negando o accediendo, total o
parcialmente, a lo pedido y aun concediendo cosas distintas de las solicitadas ( se
rompe el principio de resoluciones en congruencia, propias del derecho común y del
proceso individual de trabajo).
34.4. Organización de los tribunales de trabajo en materia procesal colectiva:
Los tribunales de trabajo en materia procesal colectiva, se organizan en dos niveles
jerárquicos, el primer nivel lo conforman los Juzgados de Trabajo y Previsión Social de
Primera Instancia que son los encargados de conocer en primer grado el trámite de
todos los asuntos de naturaleza colectiva. El segundo nivel de organización lo
conforman las Salas de la Cortes de Apelaciones de Trabajo y Previsión Social, las
cuales conocen en segunda instancia de todo lo resuelto por los juzgados de trabajo
y previsión social de primera instancia, salvo el caso de excepción relacionado con los
conflictos colectivos que promuevan los trabajadores sindicalizados del Organismo
Judicial , en donde estas Salas de Trabajo y Previsión Social, conocen en primera
instancia y la Corte Suprema de justicia conoce en segunda instancia, esto de acuerdo
a lo que norma el Artículo seis del Decreto 71-86 del Congreso de la República. Para
los efectos del conocimiento en materia procesal colectiva y de acuerdo a lo
establecido en los literales a) y b) del Artículo 292 del Código de trabajo, los juzgados
de trabajo y previsión social de primera instancia, deben albergar a un tribunal de
conciliación y a un tribunal de arbitraje permanentemente integrados, pues de lo
contrario no sería posible tramitar los conflictos colectivos de carácter económico
social, que ante ellos se promueva. Para este efecto el Artículo 294 del Código de
Trabajo, establece que los tribunales de conciliación y los tribunales de arbitraje
tienen carácter permanente y funcionaran en cada juzgado que por designación de la
Corte Suprema de Justicia conozca en materia laboral…” De lo dispuesto en aquella
norma, se deduce que en cada juzgado de trabajo y previsión social debe existir un
tribunal de conciliación y uno de arbitraje, pues todos los juzgados de trabajo y
previsión social de primera instancia, fueron designados para conocer en ese ámbito
por la Corte Suprema de justicia, lo que significa que todos éstos deben tener
competencia para conocer en materia procesal colectiva de trabajo.