La Actitud Del Educador - Por Carlos Sigvardt
La Actitud Del Educador - Por Carlos Sigvardt
La Actitud Del Educador - Por Carlos Sigvardt
En mi rol de vicedirector, cuando entraba a las aulas en la primera hora a saludar y ver
si estaba todo dispuesto para comenzar la jornada, seguía cierta rutina vincular. En esa
visita por costumbre les tocaba la cabeza con una caricia a los cuatro o cinco alumnos
que estaban en la primera fila. Como dije, era parte de una costumbre que me parecía
imperceptible para los demás alumnos, pero un día un niño que estaba en el último
banco me interpeló y me dijo: “Carlitos… a nosotros también nos gustaría que nos
toques la cabeza con una caricia”. Con esta simple anécdota me quedó claro que todos
los alumnos esperan de nosotros gestos y actos de afectividad. A partir de ese día,
cuando entraba al aula les tocaba la cabeza a todos, lo que generaba un clima de alegría.
Capítulo del libro cómo ayudar a los niños de hoy, Lucas Malaisi.
Para finalizar con el tema de nuestra actitud, siempre debemos tener presente que lo que
hacemos a veces no les permite a los demás escuchar lo que les decimos. ¿Cómo es
esto? Si yo quiero enseñar valores primero debo practicarlos. Si les digo a los chicos o a
mis docentes a cargo que estudien, a mí se me nota si no estudio. Si les digo a los chicos
que lean, a mí se me nota si no leo. Si yo digo “hay que llegar temprano”, a mí se me
nota si no soy puntual. ¿Qué quiero decir con esto? Enseñamos más con el ejemplo que
con las palabras, aunque nos parezca que nuestras acciones son imperceptibles para los
demás.
“Vivimos bulímicos de consumo y anoréxicos de afecto”