Psicoanálisis Revision
Psicoanálisis Revision
Psicoanálisis Revision
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
Índice
[ocultar]
1Concepto
2Definiciones derivadas de los tres aspectos
o 2.1El psicoanálisis como teoría explicativa
o 2.2El psicoanálisis como método de investigación
o 2.3El psicoanálisis como terapia
3Historia del psicoanálisis
4Técnica psicoanalítica
5Las tópicas
o 5.1Primera tópica: consciente, preconsciente e inconsciente
o 5.2Segunda tópica: el Ello, el Yo y el Superyó
6Otros conceptos del psicoanálisis
o 6.1Mecanismos de defensa
o 6.2El desarrollo libidinal
o 6.3Desarrollo sexual infantil
7Alternativas y escuelas del psicoanálisis
o 7.1El psicoanálisis en la universidad
o 7.2El psicoanálisis en la literatura o semanálisis
8Eficacia en el tratamiento de trastornos psicológicos
9Críticas al psicoanálisis
o 9.1Explicaciones fallidas
10Psicoanálisis y neurociencia
11Cine y psicoanálisis
12Véase también
13Notas
14Referencias
15Bibliografía
16Enlaces externos
Concepto[editar]
El concepto de «psicoanálisis» designa, por una parte, aquel modelo teórico descriptivo y
explicativo de los mecanismos, procesos y fenómenos implicados en la vida anímica humana.
Este modelo se basó inicialmente en la experiencia de Sigmund Freud en el tratamiento clínico
de pacientes que presentan histerias, fobias y diversos padecimientos psíquicos y ha tenido
un amplio desarrollo teórico posterior con el aporte de muchos teóricos del psicoanálisis. Por
otra parte, «psicoanálisis» se refiere también a la terapia psicoanalítica misma, es decir, a un
conjunto de procedimientos y técnicas terapéuticas que se desarrollan a partir de esta teoría
para el tratamiento de patologías mentales. Finalmente, «psicoanálisis» puede referirse
además al método psicoanalítico: un método de investigación que ha sido aplicado, más allá
de la psicología clínica individual, al análisis de fenómenos culturales, por ejemplo
en etnología y antropología (entre otras disciplinas).5 El desarrollo del psicoanálisis es
permanente en estos tres aspectos por parte de investigadores y clínicos, si bien cabe
remarcar que tal segmentación del campo psicoanalítico no puede ser otra cosa que una
esquematización descriptiva, y que en ningún caso da cuenta de la estructura propia del
psicoanálisis donde teoría y práctica se encuentran ligadas sin que pueda darse la una sin la
otra. Freud sostuvo que una de las glorias del psicoanálisis era la coincidencia de
investigación y tratamiento,6 si bien aclara que la técnica de ambas difiere. El psicoanálisis
moderno se caracteriza por el pluralismo teórico, metódico y terapéutico. Si el psicoanálisis
puede ser considerado una teoría científica es un asunto que en círculos académicos y
profesionales continúa siendo controvertido.
La definición clásica de Freud nota 1incluye, según resumen Jean Laplanche y Jean-Bertrand
Pontalis, los siguientes tres aspectos:
A) Un método de investigación que consiste esencialmente en evidenciar la significación
inconsciente de las palabras, actos, producciones imaginarias (sueños, fantasías, delirios) de
un individuo. Este método se basa principalmente en las asociaciones libres del sujeto, que
garantizan la validez de la interpretación. La interpretación psicoanalítica puede extenderse
también a producciones humanas para las que no se dispone de asociaciones libres.
B) Un método psicoterapéutico basado en esta investigación y caracterizado por la
interpretación controlada de la resistencia, de la transferencia y del deseo. En este sentido se
utiliza la palabra psicoanálisis como sinónimo de cura psicoanalítica; ejemplo, emprender un
psicoanálisis (o un análisis).
C) Un conjunto de teorías psicológicas y psicopatológicas en las que se sistematizan los
datos aportados por el método psicoanalítico de investigación y de tratamiento. 5
En efecto, los psicoanalistas de las generaciones que siguieron a Freud desarrollaron la teoría
en diversas direcciones, en parte reforzando y complementando sus ideas, en parte
distanciándose de ellas o criticando algunos puntos más o menos centrales. Estos
movimientos de diferenciación e integración, han dado lugar a la existencia de varias
escuelas, con diversas concepciones u orientaciones. Por ejemplo, la Psicología del yo, la
teoría de las relaciones objetales (de Melanie Klein, Donald Winnicott), el psicoanálisis
relacional, el psicoanálisis lacaniano. Asimismo, escisiones tempranas y divergencias en
aspectos decisivos dieron lugar a escuelas completamente independientes, como la psicología
analítica de Carl Gustav Jung.
El psicoanálisis como método de investigación [editar]
Sigmund Freud.
Sala de espera del consultorio en la casa de Freud, donde tenían lugar las reuniones de la
"Sociedad Psicológica de los Miércoles".
Técnica psicoanalítica[editar]
Según el psicoanálisis, los síntomas histéricos y neuróticos tienen un origen ligado a conflictos
inconscientes, aspectos de los cuales, pese a ser ajenos por completo al consciente del
analizado, pugnan por emerger a la conciencia. El retorno de lo reprimido, resultado de
una represión fallida ante la fuerza emergente del material reprimido, es una formación de
compromiso, ejemplo de lo cual constituye el síntoma histérico y, en general, el neurótico. El
objetivo de la terapia es vencer las resistencias para que el analizado acceda a las
determinaciones inconscientes de sus sentimientos, actitud o conducta. Freud, en una de las
oportunidades en las que describe la operación que lleva a cabo la terapia analítica, lo hace
en estos términos: "la rectificación con posterioridad del proceso represivo originario". 25
La «regla fundamental» de la técnica psicoanalítica es la asociación libre.26 El analista
introduce al paciente en la técnica solicitándole que le comunique todos los pensamientos,
ocurrencias, ideas o imágenes que se le pasen por la mente, independientemente de que
estos le parezcan absurdos, irrelevantes o comprometedores, «sin criticarlos o
seleccionarlos».27 Al comunicar estos contenidos, el analizado no debe tener en cuenta cuan
insignificante, trivial o desagradable le resulten, ya que esto solo expresaría la acción de
las resistencias.
El analista por su parte, también debe respetar reglas, particularmente las tres siguientes:
Escuchar al analizado con una atención parejamente flotante, es decir, sin privilegiar
ningún elemento de su discurso, lo que implica que el analista «deje funcionar lo más
libremente posible su propia actividad inconsciente y suspenda las motivaciones que
habitualmente dirigen la atención». 28 En palabras de Freud, «el analista debe escuchar y
no hacer caso de si se fija en algo».29
Mantener una actitud neutral, en cuanto a los valores, es decir, no dirigir la cura en función
de un ideal religioso, moral o social, no juzgar, no aconsejar. 30 La posición debe ser
igualmente neutral frente a las manifestaciones transferenciales y frente al discurso del
paciente, es decir, «no conceder a priori una importancia preferente, en virtud de
prejuicios teóricos, a un determinado fragmento o a un determinado tipo de
significaciones».31
Observar una actitud de estricta abstinencia, lo que implica que el analista «no satisface
las demandas del paciente ni desempeña los papeles que este tiende a imponerle». 32 El
sentido de este principio es que la cura debe transcurrir de tal forma que el analizado no
se sirva de ella para obtener satisfacciones sustitutivas de sus síntomas.
En cuanto a la interpretación, su función no es propuesta como un enunciado que refiera el
material que ofrece el caso a una teoría (como el Complejo de Edipo,
la nosología psicoanalítica, las tópicas que representan el aparato psíquico, etc.),
sistematizada o no, que incluya la experiencia propia del analista y el consenso de la
comunidad analítica, sino algo que se acercaría mucho más a un desciframiento. En este
sentido, el psicoanalista Donald Winnicott comenta la importancia de «que el
analista no conozca las respuestas, excepto en la medida en que el paciente dé las claves. El
analista recoge las claves y hace las interpretaciones».33
Los lapsus son actos erróneos para la conciencia, en los que se manifiesta una descarga del
inconsciente. Para Freud, expresa un motivo personal relevante, desconocido para la
personalidad consciente. A menudo el lapsus no es obvio y se revela solo después de una
larga cadena de asociaciones.
Una segunda área explotada por la asociación libre es la de los sueños, considerada la «vía
regia al inconsciente». Para el psicoanálisis los sueños son siempre (al menos esto es lo
postulado en La interpretación de los sueños) realizaciones de deseos,34 los cuales
generalmente se disfrazan por ser inaceptables para la organización consciente del individuo.
Freud distingue en la estructura del sueño: el contenido manifiesto, que generalmente parece
incoherente y sin sentido pero que presenta algún tipo de historia narrativa; y el contenido
latente, que se refiere a las asociaciones que se despliegan a partir del sueño manifiesto. El
sueño (la ilación de sus contenidos manifiestos) es una formación producida por el trabajo del
sueño que transforma el material latente mediante la condensación, el desplazamiento, el
trastorno en su contrario y diversos tratamientos que las representaciones inconscientes
reciben, en virtud de su estructura, y que Freud designó como desfiguración onírica.35 La
dirección del trabajo del análisis es precisamente en sentido contrario al del trabajo del sueño
ya que obtiene el contenido latente donde era lo manifiesto. Los sueños son figuraciones
capaces de acceder a la conciencia, ya que en esta situación de reposo (el dormir) es cuando
la censura se encuentra más relajada y la resistencia se encuentra debilitada. Los anhelos y
deseos que tienen prohibido el acceso en los estados conscientes tienen una oportunidad de
escaparse tras el velo de la desfiguración onírica.
También en el chiste (Witz en alemán) encuentra el psicoanálisis una de las manifestaciones
paradigmáticas del inconsciente.
Freud afirmó que el individuo neurótico, cuyas necesidades eróticas infantiles permanecieron
insatisfechas, podrá orientar sus requerimientos libidinosos hacia una nueva persona que
surja en su horizonte, siendo muy probable que las dos porciones de su libido (la consciente y
la inconsciente) participen en este proceso. Es por lo tanto perfectamente normal y
comprensible que una carga de libido se oriente también hacia el psicoanalista. Este proceso
da lugar a lo que en psicoanálisis se denomina transferencia.
Cuando se habla de «transferencia» en la terapia, se considera que el paciente transfiere o
reedita sobre la figura del analista demandas libidinales experimentadas en la infancia en
relación a personas que entonces fueron importantes o significativas. La transferencia ofrece
la oportunidad para poner en acto los conflictos infantiles y estructuras cognoscitivas que
condujeron a las represiones y a las distintas formaciones de sus neurosis; y asimismo
proporciona al sujeto las condiciones para rectificar esos hechos que tuvieron lugar en la
infancia y que, por permanecer inconscientes, se habían mantenido refractarios a sus intentos
previos de influir en ellos.nota 2
La contratransferencia será aquel conjunto de reacciones inconscientes del analista frente a la
persona del analizado y frente a la transferencia. Se le considera un elemento muy importante
en el trabajo analítico porque cada uno posee en su propio inconsciente un instrumento con el
cual puede interpretar las expresiones del inconsciente en los demás.
Las tópicas[editar]
Tal y como aclaran Jean Laplanche y Jean-Bertrand Pontalis en su "Diccionario de
Psicoanálisis" Tópica hace referencia a una "Teoría o punto de vista que supone una
diferenciación del aparato psíquico en cierto número de sistemas dotados de características o
funciones diferentes y dispuestos en un determinado orden entre sí, lo que permite
considerarlos metafóricamente como lugares psíquicos de los que es posible dar una
representación espacial figurada. Corrientemente se habla de dos tópicas freudianas, la
primera en que se establece una distinción fundamental entre inconsciente, preconsciente y
consciente, y la segunda que distingue tres instancias: el ello, el yo, el superyó. 36
Primera tópica: consciente, preconsciente e inconsciente[editar]
Artículos principales: Inconsciente y Represión.
La conciencia es la cualidad momentánea que caracteriza las percepciones externas e
internas dentro del conjunto de los fenómenos psíquicos. El término inconsciente se utiliza
para connotar el conjunto de los contenidos no presentes en el campo actual de la conciencia.
Está constituido por contenidos reprimidos que buscan regresar a la conciencia o bien que
nunca fueron conscientes y su cualidad es incompatible con la conciencia.
El preconsciente designa una cualidad de la psique que califica los contenidos que no están
presentes en el campo de la conciencia pero pueden devenir en conscientes. Los estados
reprimidos son aquellos que no se les puede acceder sin una hipnosis, generalmente son
revelaciones a través de imágenes retenidas durante el tiempo de vida de cada individuo.
Segunda tópica: el Ello, el Yo y el Superyó [editar]
Artículo principal: Ello, Yo y Superyó
Diagrama del modelo estructural de tres instancias (Ello, Yo y Superyó) y de su superposición
con el modelo espacial de la psique en la primera tópica de S. Freud (consciente,
preconsciente, inconsciente).
El Ello es la instancia más antigua y original de la personalidad y la base de las otras dos.
Comprende todo lo que se hereda o está presente al nacer, se presenta de forma pura en
nuestro inconsciente. Representa nuestros impulsos o pulsiones más primitivos. Constituye,
según Freud, el motor del pensamiento y el comportamiento humano. Opera de acuerdo con
el principio del placer y desconoce las demandas de la realidad.
El Superyó es la parte que contrarresta al ello, representa los pensamientos morales y éticos
recibidos de la cultura. Consta de dos subsistemas: la "conciencia moral" y el ideal del yo. La
"conciencia moral" se refiere a la capacidad para la autoevaluación, la crítica y el reproche. El
ideal del yo es una autoimagen ideal que consta de conductas aprobadas y recompensadas.
El Yo es una parte del ello modificada por su proximidad con la realidad y surge a fin de
cumplir de manera realista los deseos y demandas del ello de acuerdo con el mundo exterior,
a la vez que trata de conciliarse con las exigencias del superyó. El yo evoluciona a partir del
ello y actúa como un intermediario entre este y el mundo externo. El yo sigue al principio de
realidad, satisfaciendo los impulsos del ello de una manera apropiada en el mundo externo.
Utiliza el pensamiento realista característico de los procesos secundarios. Como ejecutor de la
personalidad, el yo tiene que medir entre las tres fuerzas que le exigen: las del mundo de la
realidad, las del ello y las del superyó, el yo tiene que conservar su propia autonomía por el
mantenimiento de su organización integrada.
Los papeles específicos desempeñados de las entidades ello, yo y superyó no siempre son
claros, se mezclan en demasiados niveles. La personalidad consta según este modelo de
muchas fuerzas diversas en conflicto inevitable.
1. La fuente que tiene su origen en lo somático y que se traduce por una tensión, una
suerte de impulso (en alemán: Drang).
2. El Drang mismo, es decir la tensión interior que se traduciría en Trieb (pulsión).
3. La meta que se puede encontrar en un estado pasivo o activo.
4. El "objeto" de la pulsión, que en lo real es un medio, un medio bastante accesorio ya
que solo sirve para disminuir temporalmente la tensión inherente a la pulsión.
Desarrollo sexual infantil[editar]
Artículos principales: Desarrollo psicosexual, Libido y Zona erógena.
La teoría plantea que conforme crecen los niños su deseo se enfoca en diferentes áreas
del cuerpo, en los que se busca la satisfacción libidinal. Siguiendo una secuencia de etapas
psicosexuales en las que son importantes diferentes zonas erógenas, los niños pasan
del autoerotismo a la sexualidad reproductora y desarrollan sus personalidades adultas:
Carta de Sigmund Freud a una madre en relación a la homosexualidadde su hijo. La carta fue
más tarde enviada anónimamente "De una madre agradecida" a Alfred Charles Kinsey. Página
1. 9 de abril de 1935.
1. Fase oral (desde el nacimiento hasta los 12 o 18 meses): la boca es la zona erógena
preeminente y procura al bebé no solo la satisfacción de alimentarse, sino, sobre todo,
el placer de chupar. Es decir, de poner en movimiento los labios, la lengua y
el paladar en una alternancia rítmica.
2. Fase anal (12-18 meses hasta 3 años): en esta época la fuente principal de placer y
conflicto potencial son las actividades en las que interviene el ano. Con frecuencia
representa el primer intento del niño por convertir una actividad involuntaria en
voluntaria. Los niños pueden experimentar dolor o placer ya sea al retener o al
expulsar sus desechos fisiológicos. Debemos separar aquí el placer orgánico de
defecar, aliviando una necesidad corporal, del placer sexual consistente en retener las
heces y los gases para después expulsarlos bruscamente.
3. Fase fálica (3 a 6 años): el órgano sexual masculino desempeña un papel dominante.
En esta fase, las caricias masturbatorias y los tocamientos ritmados de las partes
genitales proveen al niño un placer autoerótico. Freud considera que el clítoris es
considerado por la niña como una forma de falo inferior. Al comienzo de la fase fálica,
los niños/as creen que todas las personas poseen falo y la diferencia entre tener o no
falo se percibe como una oposición por castración. Cada uno toma rumbo diferente al
entrar en lo que Freud denomina Edipo, o complejo de Edipo, en el cual primero se da
una identificación con la madre en ambos casos. El niño siente deseos sexuales hacia
su madre, y al percibir a las niñas como castradas abandona sus deseos por temor a
que le ocurra lo mismo, creándose en el varón la angustia de castración que lo lleva a
renunciar a sus deseos incestuosos e identificarse con su padre. La niña abandona a
la madre porque la cree culpable de su castración y surge la envidia del pene. Sin
embargo, se da cuenta de que si es como su madre puede acceder a un pene (véase
el concepto psicoanalítico de falo), a lo cual reacciona identificándose con ella y
aparece el deseo de engendrar un hijo de su padre.
La homosexualidad es definida como una perversión causada por una interrupción del
desarrollo libidinal en esta etapa. Para Freud se produce por una fijación en una etapa
temprana del desarrollo psicosexual o una resolución incorrecta del complejo de
Edipo. Esta interrupción no permite alcanzar la madurez sexual (heterosexualidad).
Un conflicto de homosexualidad inconsciente puede ser un núcleo constituyente
de esquizofrenia o paranoia. Más adelante, Freud describe el narcisismo como un
componente común a la homosexualidad, la esquizofrenia y las perversiones. Sin
embargo, Freud llegaría a reconsiderar su posición con el tiempo, hasta el punto de
que en su conocida Carta a una madre americana, Freud no dudó en afirmar que la
homosexualidad «no es un vicio ni un signo de degeneración, y no puede clasificarse
como una enfermedad».39 Señaló que perseguir la homosexualidad era una «gran
injusticia y una crueldad», y que el análisis, a lo sumo, serviría para devolver la
armonía a una persona si se sentía infeliz o neurótica, independientemente de si era
homosexual o no.
4. Período de latencia (desde los seis años hasta la pubertad): en este período se
desarrollan fuerzas psíquicas que inhiben el impulso sexual y reducen su dirección.
Los impulsos sexuales inaceptables son canalizados a niveles de actividad más
aceptados por la cultura. Freud lo llamaba «período de calma sexual». No lo
consideraba una etapa, ya que no surgía nada dramáticamente nuevo.
5. Fase genital (desde la pubertad hasta la adultez): surge en la adolescencia cuando
maduran los órganos genitales. Hay un surgimiento de los deseos sexualesy
agresivos. El impulso sexual, el cual antes era autoerótico, se busca satisfacer a partir
de una interacción genuina con los demás. Freud creía que los individuos maduros
buscan satisfacer sus impulsos sexuales sobre todo por la actividad genital
reproductora con miembros del sexo opuesto.
Comparación del tamaño del efecto de la terapia psicodinámica. Smith, Glass and Miller. 1980.
Críticas al psicoanálisis[editar]
Artículo principal: Críticas al psicoanálisis
Psicoanálisis y neurociencia[editar]
El psicoanálisis se ha ido integrando con el desarrollo actual de las neurociencias, en lo que
se ha venido a denominar neuropsicoanálisis.81
Científicos como Eric Kandel, Premio Nobel de Medicina y Fisiología (2000), o António
Damásio, Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica(2005), reclaman
un diálogo entre las neurociencias y el psicoanálisis. Damásio cita: "Creo que podemos decir
que los discernimientos de Freud sobre la naturaleza de la conciencia concuerdan con los
puntos de vista más avanzados de la neurociencia contemporánea".82 A su vez, Kandel:
"Acerca de la mente, no hay todavía concepción más coherente e intelectualmente
satisfactoria que el psicoanálisis".83 Aunque también Kandel afirma que las bases del
"inconsciente neuronal" no tienen similitud con el "inconsciente freudiano" y no está
relacionado a fuerzas instintivas o conflictos sexuales ya que la información nunca entra en la
"conciencia".84
El neurólogo y neurocientífico argentino Facundo Manes,85 incluye a Freud en su historia de
las neurociencias. Manes sostiene, en su libro "Usar el cerebro", que "durante las décadas de
1880 y 1890 el trabajo de Sigmund Freud evolucionó del método anátomo-clínico (después de
los estudios histológicos experimentales) a la neurología teórica (histeria y modelos de afasia)
y a la psicología, proceso que dio origen al nacimiento del psicoanálisis".86
Cine y psicoanálisis[editar]
La relación entre el cine y el psicoanálisis ha sido en las últimas décadas cada vez más
estrecha. Una muestra de ello es el hecho de que prácticamente todos los congresos y
conferencias internacionales de psicoanálisis cuentan con participaciones de destacados
psicoanalistas especializados en el análisis del cine. Por otra parte, la apreciable cantidad de
largometrajes de calidad cuyo tema central es el psicoanálisis, sus principales autores o hasta
sus pacientes famosos da cuenta de una relación recíproca. [cita requerida]
Aunque el cine y el psicoanálisis nacen juntos (Sigmund Freud publicó junto a Josef
Breuer los Estudios sobre la histeria en el mismo año en que los hermanos
Lumière presentaron su primera película), Freud se mostró muy escéptico respecto de las
posibilidades, significación y alcance de este nuevo medio para el psicoanálisis. Según consta
en su correspondencia con Sándor Ferenczi, sabía, sin embargo, que nada podría evitar que
se filmara sobre la técnica y la teoría psicoanalítica, pero mantuvo su posición crítica y llegó a
negarse a ser vinculado personalmente con alguna representación fílmica. Pensaba que no
existía una posibilidad seria y respetable de mostrar de manera plástica las abstracciones a
las que había arribado la teoría psicoanalítica. En 1925, a pesar de ello y en medio de una
polémica al respecto con Freud, Karl Abraham y Hanns Sachs entregaron su apoyo técnico y
asesoría científica para la primera película psicoanalítica Misterios de un alma (Geheimnisse
einer Seele), del director Georg Wilhelm Pabst.8788
En las décadas que siguen y hasta la fecha, el psicoanálisis, la vida de Freud o el contexto
histórico de sus desarrollos han sido temas que han aparecido con cierta frecuencia en el
cine:89
Véase también[editar]
Conceptos psicoanalíticos
Psicoanalistas
Concepción de salud en psicoanálisis
Notas[editar]
1. Volver arriba↑ Freud definió el psicoanálisis de diferentes maneras en muy distintos
contextos a lo largo de su obra. Laplanche y Pontalis se refieren aquí a la definición
enciclopédica de 1922(publicada en 1923) y que es la más ampliamente citada en
toda la literatura secundaria sobre el psicoanálisis: «Dos artículos de enciclopedia:
'Psicoanálisis' y 'Teoría de la libido'».78
2. Volver arriba↑ "El psicoanalista francés Jacques Lacan, quien retomó los conceptos
de Freud, definió la transferencia como «la puesta en acto de la realidad sexual del
inconsciente»" (Cf. Lacan, J., El Seminario, Libro 11, Caps. 11 y 12, Paidós, Bs.
As. ISBN 950-12-3981-0)
Referencias[editar]
1. Volver arriba↑ Santamaría Ambriz, Rocío (2002). «Acerca del método psicoanalítico
de investigación». Revista Universidades [en línea]. ISSN 0041-8935. Consultado el 26 de
abril de 2016.
2. Volver arriba↑ Poscheschnik, Gerald (2009). «Empirische Forschung in der
Psychoanalyse – Vorbehalte und Vorteile». En Werner Bohleber. Pshyche (Stuttgart:
Klett-Cotta) (4): 333-366. Consultado el 26 de abril de 2016.
3. Volver arriba↑ Real Academia Española y Asociación de Academias de la Lengua
Española(2014). «psicoanálisis». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
Madrid: Espasa. ISBN 978-84-670-4189-7. Consultado el 31 de diciembre de 2015.
4. Volver arriba↑ Palomero Pescador, José Emilio (2006). «¿Sigue vigente, hoy, el
psicoanálisis?. La polémica continúa». Disponible en formato PDF. Revista
Interuniversitaria de Formación del Profesorado (Zaragoza, España: Universidad de
Zaragoza) 20 (2): 233-266. ISSN 0213-8646. Consultado el 26 de agosto de 2017.
5. ↑ Saltar a:a b Laplanche y Pontalis, 1996, pp. 316-319.
6. Volver arriba↑ Freud, S. Consejos al médico.
7. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, p. 316.
8. ↑ Saltar a:a b c Freud, Sigmund (1923). Dos artículos de enciclopedia: 'Psicoanálisis' y
'Teoría de la libido' (1923/1922). Obras completas de Sigmund Freud. Volumen XVIII
(1920-1922). Traducción José Luis Etcheverry. Buenos Aires & Madrid: Amorrortu
editores. pp. 231 (a), 242 (b), 234-235 (c). ISBN 978-950-518-594-8.
9. Volver arriba↑ Roudinesco y Plon, 2008, p. 845.
10. Volver arriba↑ Devereux, Georges. Etnopsicoanálisis complementarista Amorrortu,
Buenos Aires, 1975
11. Volver arriba↑ Bonte, Pierre y Michel Izard (1997), Diccionario de etnología y
antropología, AKAL, pp. 269-270, ISBN 9788446004516
12. Volver arriba↑ Sigmund Freud, Escritos sobre la Histeria. Biblioteca Freud. Alianza
Editorial. ISBN 84-206-7208-4 p. 143.
13. Volver arriba↑ Ibid. p. 157.
14. Volver arriba↑ Jean-Michel Quidonoz, Reading Freud. A Chronological Exploration of
Freud's Writings. The New Library of Psychoanalysis. Routledge. ISBN 1-58391-746-
2hbk. p. 10.
15. Volver arriba↑ Ibid., p. 141.
16. Volver arriba↑ Sigmund Freud, Tres Ensayos sobre Teoría Sexual. Biblioteca Freud.
Alianza Editorial. ISBN 84-206-3699-1 p. 49.
17. Volver arriba↑ Ibid., p. 123.
18. Volver arriba↑ Freud, S., Recordar, repetir, reelaborar. En. O.C., A.E., T.XII, Bs.
As. ISBN 950-518-588-8
19. ↑ Saltar a:a b Ibíd.
20. Volver arriba↑ Peter Gay (1998). A Life for our Time. Ed. W. W. Norton, London, New
York. p. 96.
21. Volver arriba↑ Peter Gay (1998). A Life for our Time. Ed. W. W. Norton, London, New
York. p. 173.
22. Volver arriba↑ Idem. p. 174.
23. Volver arriba↑ MONTEJO ALONSO, F.J. (2003): «Budapest 1918: Psicoterapia para
después de una guerra», Frenia, vol. III, 2, 17-33.
24. Volver arriba↑ MONTEJO ALONSO, F. J. (2009): El psicoanálisis 1919-1933:
consolidación, expansión e institucionalización. Tesis Doctoral UCM, 28/05/2009.
Filosofía IV. Madrid. http://eprints.ucm.es/9764/
25. Volver arriba↑ Freud, S., Conferencias de introducción al psicoanálisis. En O.C., A.E.
T. XVI, ISBN 978-950-518-592-4
26. Volver arriba↑ Sigmund Freud. On Beginning the Treatment. (1913c), Standard
Edition, vol. 12, p. 134.
27. Volver arriba↑ Sigmund Freud. Recommendations to Physicians Practising Psycho-
Analysis.(1912e), Standard Edition, vol. 12, p. 112.
28. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, p. 37.
29. Volver arriba↑ Freud, Sigmund, Consejos al médico sobre el tratamiento
psicoanalítico en Obras Completas, Vol. XII, Amorrotu, B.Aires 9.ª. Edición 1996, p.
112, ISBN 950-518-588-X (Título original: Ratschläge für den Arzt bei der
psychoanalytischen Behandlung, 1937).
30. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, pp. 3 y 256.
31. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, p. 256.
32. Volver arriba↑ Ibid.
33. Volver arriba↑ Cf. Winnicott, La teoría de la relación entre progenitores-infante, En Los
procesos de maduración y el ambiente facilitador, Ed. Paidós. ISBN 950-12-4174-2
34. Volver arriba↑ Freud, Sigmund: La interpretación de los sueños en: Obras Completas,
Vol. IV, Amorrotu, B.Aires 9.ª. Edición 1996, Cap. III: El sueño es un cumplimiento de
deseo, pág. 142, ISBN 950-518-575-4 (Traducción del alemán por José Luis
Etcheverry, título original: Die Traumdeutung, 1912).
35. Volver arriba↑ Ibid. Cap. IV: La desfiguración onírica, pág. 153.
36. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, pp. 430-435.
37. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, pp. 375-379.
38. Volver arriba↑ Laplanche y Pontalis, 1996, p. 98.
39. Volver arriba↑ De la Torre, Javier (2008). Sexo, Sexualidad y Bioética. Univ Pontifica
de Comillas. p. 72. ISBN 9788484682462. Consultado el 26 de julio de 2012.
40. Volver arriba↑ Anna Freud: El yo y los mecanismos de defensa (1936)
41. Volver arriba↑ Freud, 1919, pp. 169-171.
42. Volver arriba↑ León, Sebastián. «El lugar del psicoanálisis en la
universidad». Documentación del Centro de Atención Psicológica (CAPS) de la
Universidad de Chile (Santiago de Chile). Consultado el 13 de marzo de 2016.
43. Volver arriba↑ Bohórquez Rincón, Douglas (2006). «Julia Kristeva: teoría, proceso e
interpretación del sentido /». Signa. Revista de la Asociación Española de Semiótica,
1997 (6). Consultado el 18 de noviembre de 2016.
44. Volver arriba↑ Guía de tratamientos psicológicos eficaces. Ed. Pirámide.
45. Volver arriba↑ Haans Eysneck (1961). The effects of psychotherapy.
46. Volver arriba↑ Smith, Glass, and Miller (1980). The benefits of psychotherapy.
Baltimore: The Johns Hopkins University Press. Metaanálisis de estudios sobre 47
psicoterapias en 25 mil casos.
47. Volver arriba↑ Smith & Glass, (1977). Meta-analysis of psychotherapy outcome
studies. American Psychologist, Vol 32(9). Metaanálisis de estudios sobre
psicoterapias.
48. Volver arriba↑ «Psychodynamic Therapy» (en inglés). Consultado el 2 de septiembre
de 2013.
49. Volver arriba↑ Shedler, Jonathan (2010)The Efficacy of Psychodynamic
Psychotherapy.University of Colorado Denver School of Medicine.
URL:https://web.archive.org/web/20121202042319/http://www.apsa.org/portals/1/docs/
news/JonathanShedlerStudy20100202.pdf
50. Volver arriba↑ Abbass, Kisley y Kroenke (2009) Short-Term Psychodynamic
Psychotherapy for Somatic Disorders: Systematic Review and Meta-Analysis of
Clinical Trials. URL: http://www.istdp.ca/docs/stppsomaticreview.pdf
51. Volver arriba↑ Town, Abbass y Hardy (2011.)Short-term PSychodynamic
PsychotheraPy for Personality disorders: a critical review of randomized controlled
trials. Journal of Personality Disorders: Guilford Press.
URL: http://www.vvpt.be/download/publicaties/wo/town-abbass-and-hardy-2011.pdf
52. Volver arriba↑ Abbass, Town y Driessen (2011). The efficacy of short term
psychodynamic psychotherapy for depressive disorders with comorbid personality
disorders. Guilford publications. URL: http://www.istdp.ca/docs/DEPN-PD-2011.pdf
53. Volver arriba↑ Leichsenring, salzer, jaeger, Kachele, Kreische, Leweke, Ruger,
Winkelbach y Leibing (2009). Short-Term Psychodynamic Psychotherapy and
Cognitive-Behavioral Therapy in Generalized Anxiety Disorder: A Randomized,
Controlled Trial. American Journal of Psychiatry: 166:875–881.
URL: http://ajp.psychiatryonline.org/data/Journals/AJP/3897/09aj0875.PDF
54. Volver arriba↑ Leichsenring, Rabung Y Leibing (2004). The efficacy of short term
psychodynamic psychotherapy in specific psychiatric disorders, a meta
analysis. Archives of General Psychiatry.
URL: http://www.istdp.com/download/STDP%20Meta%20Analysis.pdf
55. Volver arriba↑ Maat, Jongue, Schoevers y Dekker.The Effectiveness of Long-Term
Psychoanalytic Therapy: A Systematic Review of Empirical Studies. Harvard Review
of psychiatry.
URL: http://dare2.ubvu.vu.nl/bitstream/handle/1871/17141/Maat,%20de_Harvard%20R
eview%20of%20Psychiatry_17(1)_2009_u.pdf?sequence=2
56. Volver arriba↑ Wilzceck, Barber, Gustavsson, Asberg y Weinryb. change after long-
term psychoanalytic psychotherapy. Department of Psychiatry, University of
Pennsylvania. URL: http://www.apsa.org/portals/1/docs/japa/524/wilczek-p.1163-
1184.pdf
57. Volver arriba↑ Bouter, L. A cohort study into the effectiveness of long-term
psychoanalytic treatment for patients with personality disorders and/or chronic
depression. Vrije universiteit.
URL: http://dare.ubvu.vu.nl/bitstream/handle/1871/15871/dissertation.pdf;jsessionid=3
568F80CB2D011D063C95C56615BE6D4?sequence=1
58. Volver arriba↑ Bond y Perry (2004)Long-Term Changes in Defense Styles With
Psychodynamic Psychotherapy for Depressive, Anxiety, and Personality
Disorders. The American Journal of Psychiatry.
URL:http://ajp.psychiatryonline.org/data/Journals/AJP/3764/1665.pdf
59. Volver arriba↑ Fonagy y Moran (1990). Studies on the efficacy of child
psychoanalysis. Anna Freud Centre, London, England.
URL: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/2292618
60. Volver arriba↑ Target y Fonagy (1994). Efficacy of psychoanalysis for children with
emotional disorders. Anna Freud Centre, London, UK.
URL: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/8169181
61. Volver arriba↑ Foa (2009)Psychodynamic therapy for child trauma.Effective treatments
for PTSD.
URL: http://www.istss.org/AM/Template.cfm?Section=PTSDTreatmentGuidelines&Te
mplate=/CM/ContentDisplay.cfm&ContentID=2332
62. Volver arriba↑ Midgley y Kennedy (2011). Psychodynamic psychotherapy for children
and adolescents: a critical review of the evidence base. Anna Freud Centre/University
College London, UK. URL: http://www.vvpt.be/download/publicaties/wo/midgley-2011-
child-psychotherapy-evidence-base.pdf
63. Volver arriba↑ Peter Fonagy (1999), An Open Door Review of Outcome Studies in
Psychoanalysis. IPA.
64. Volver arriba↑ Robert Galatzer-Levy (2000), Does Psychoanalysis Work?
65. Volver arriba↑ Luyten, Blatt y corveleyn (2006). Minding the gap between positivism
and hermeneutics in psychoanalytic research.
URL: http://apa.sagepub.com/content/54/2/571.abstract?ijkey=b62832d3bb81c612062
d492a3b88ec01fc5c8830&keytype2=tf_ipsecshaJournal of the American
Psychoanalytic Association.
66. Volver arriba↑ McKinley, (2011). Avoiding a collapse in thinking: Commentary on
Jonathan Shedler’s “The Efficacy of Psychodynamic Psychotherapy” American
Psychological association. URL: http://www.apadivisions.org/division-
39/publications/review/2011/01/psychodynamic-psychotherapy.aspx
67. Volver arriba↑ Clavel, Fernanda (2004). «Las críticas de Popper al
Psicoanálisis». Signos Filosóficos, 6 (11). Archivado desde el original el 20 de agosto
de 2011.
68. Volver arriba↑ Scott Acton, G. (1997). «Psychoanalysis» (en inglés). Consultado el 12
de abril de 2011. «Adolf Grünbaum disagrees with Popper. Grünbaum believes that
Freud meant his theory to be scientific, that he made falsifiable predictions, and that
those predictions proved false.»
69. Volver arriba↑ Bunge, Mario (2011). 100 ideas. El libro para pensar y discutir en el
café(Edición en formato digital edición). Buenos Aires:
Sudamericana. ISBN 9789875666498. Consultado el 26 de agosto de 2017.
70. Volver arriba↑ Cavallo, Tomasso (1981). «Bronislaw Malinowski». En Remo Bodei. La
cultura del novecientos, Volumen 3. México: Siglo XXI. p. 202-203. Consultado el 21
de diciembre de 2015.
71. Volver arriba↑ Van Rillaer, Jacques p.289 p. 315. «Las ilusiones del psicoanálisis».
Archivado desde el original el 5 de marzo de 2014.
72. Volver arriba↑ Eysenck, Hans (2004). «Decadencia y caída del imperio freudiano». La
Editorial Virtual. Archivado desde el original el 1 de marzo de 2014. Consultado el 21
de diciembre de 2015.
73. Volver arriba↑ Karin Obholzer. Conversaciones con el hombre de los lobos: un
psicoanálisis y las consecuencias (1980). Trad. P. Arias. Buenos Aires: Nueva Visión,
1996. ISBN 978-950-602-349-2
74. ↑ Saltar a:a b Rivière, Ángel (2001). Autismo. Editorial Trotta. pp. 21 y
ss. ISBN 848164451X.
75. ↑ Saltar a:a b c d Artigas-Pallarés y Paula: "El autismo 70 años después de Leo Kanner
y Hans Asperger", en Rev. Asoc. Esp. Neuropsiquiatría, 2012; 32 (115), 567-587.
76. Volver arriba↑ Kanner, L. (1943): Autistic disturbances of affective contact. Nervous
Child, 2 (217250) (Trad. al castellano por Teresa Sanz Vicario: Trastornos autistas del
contacto afectivo. Revista Española de Discapacidad Intelectual Siglo Cero.
77. Volver arriba↑ El caso de Bruno Bettelheim
78. Volver arriba↑ Guía de buena práctica para el tratamiento de los trastornos del
espectro autista
Archivado el 5 de marzo de 2016 en la Wayback Machine.
79. Volver arriba↑ Guía de buena práctica para el diagnóstico de los trastornos del
espectro autista
80. Volver arriba↑ Informe: Estado actual de las políticas sobre autismo en España.
81. Volver arriba↑ Karen Kaplan-Solms, Mark Solms (2005). Estudios clínicos en
neuropsicoanalisis. Introducción a la neuropsicologia profunda. Fondo de Cultura
Económica. ISBN 9789583801150.
82. Volver arriba↑ «El cerebro y el mundo interior». Consultado el 20 de marzo de 2013.
83. Volver arriba↑ «¿Sigue vigente, hoy, el psicoanálisis?. La polémica continúa».
Consultado el 20 de marzo de 2013.
84. Volver arriba↑ Kandel, Eric. «A New Intellectual Framework for Psychiatry».
85. Volver arriba↑ Manes es el presidente de la World Federation of Neurology Research
Group of on Aphasia, Dementia and Cognitive Disorders, es el presidente de la
División Latinoamericana de la Sociedad de Neurociencia Social, es investigador
del CONICET, es investigador del Australian Research Council, es rector de
la Universidad Favaloro y es el creador del Instituto de Neurociencias de la Fundación
Favaloro y del Instituto de Neurología Cognitiva (INECO)
86. Volver arriba↑ Manes, Facundo; Mateo Niro (2004). «Una brevísima historia de las
Neurociencias Cognitivas». Usar el cerebro. Buenos Aires: Planeta. p. 46. ISBN 978-950-
49-3692-3.
87. Volver arriba↑ Zeul, 2007, pp. 7-13.
88. Volver arriba↑ Roudinesco, 2008, p. 975.
89. Volver arriba↑ Xavier Pérez. «El psicoanalista a través de sus traumas». Consultado el
1 de febrero de 2012.
90. Volver arriba↑ IMDb. «Freud, pasión secreta (1962)». Consultado el 26 de agosto de
2010.
91. Volver arriba↑ «'Freud, pasión secreta', fascinante mirada al abismo de la mente».
Consultado el 26 de agosto de 2010.
92. Volver arriba↑ Freud, Sigmund. «VI. El trabajo del sueño (continuación). D. El
miramiento por la figurabilidad». Obras completas. Volumen V - La interpretación de
los sueños (II) y Sobre el sueño (1900-1901). Buenos Aires: Amorrortu Editores.
pp. 352-354. ISBN 978-950-518-581-8.
93. Volver arriba↑ «Princesse Marie (2004) (TV) Imdb». Consultado el 22 de enero de
2010.
94. Volver arriba↑ «Gustav Mahler en el diván de Freud». Consultado el 13 de julio de
2010.
95. Volver arriba↑ «A Dangerous Method, trailer oficial en castellano». Consultado el 26
de noviembre de 2011.
96. Volver arriba↑ Revista Medicinacine: El cine como terapia. El psicoanálisis en la obra
de Woody Allen.
Bibliografía[editar]
Adler, Alfred (1984). El carácter neurótico. Barcelona: Planeta-De Agostini. ISBN 84-395-0032-7.
Bleichmar, Norberto M.; Leiberman de Bleichmar, Celia (1997 (reedición 1999)). El
Psicoanálisis después de Freud. Teoría y clínica. Con la colaboración de Silvia Wikinski.
México: Paidós. ISBN 978-968-853-351-2.
Bolognini, Stefano (2004). La empatía psicoanalítica. Buenos Aires: Lumen.
Bulevich, John; Roeidger, Henry; Balota, David (2003). Can episodic memories be
suppressed?. Vancouver, Canada: Psychonomic Society.
Chemama, Roland; Vandermersch, Bernard (2004). Diccionario del psicoanálisis.
Revisada y ampliada (2ª edición). Buenos Aires & Madrid: Amorrortu. ISBN 950-518-105-1.
Ellenberger, Henri F (1976). El descubrimiento del inconsciente. Historia y evolución de la
psiquiatría dinámica. Madrid: Gredos. ISBN 978-84-249-2450-8.
Etchegoyen, Ricardo Horacio (2010). Los Fundamentos de la Técnica Psicoanalítica (3ª
edición). Buenos Aires & Madrid: Amorrortu Editores. ISBN 978-950-518-147-6.
Eysenck, Hans (1961). The Effects of Psychotherapy.
Freud, Sigmund (1919). «¿Debe enseñarse el psicoanálisis en la universidad?». Obras
Completas 17. Traducción de José L. Echeverry (1994, 4ª edición). Amorrortu. ISBN 950-518-
593-6.
Garry, Maryanne; Loftus, Elizabeth (2004). I am Freud's brain. Committee for the Scientific
Investigation of Claims of the Paranormal.
Gay, Peter (2010). Freud. Barcelona: Paidós. ISBN 978-84-493-2427-7.
Grünbaum, Adolf (1986). Precis of The Foundations of Psychoanalysis: A Philosophical
Critique. Behavioral and Brain Sciences 9.
Jung, Carl Gustav (2000 [2ª edición 2011]). Obra completa. Volumen 4. Freud y el
psicoanálisis. 9. Ensayo de exposición de la teoría psicoanalítica (1913/1955). Traducción
Ángel Reparaz. Madrid: Editorial Trotta. ISBN 978-84-8164-394-7/ ISBN 978-84-8164-395-4.
Kerr, John (1995). La historia secreta del psicoanálisis. Barcelona: Editorial Crítica. ISBN
978-84-7423-687-3.
Laplanche, Jean; Pontalis, Jean-Bertrand (1996). Diccionario de psicoanálisis. Título
original Vocabulaire de la Psychanalyse (1967).Traducción Fernando Gimeno Cervantes.
Buenos Aires: Paidós. ISBN 978-950-12-7321-2.
Meyer, Catherine (2005). Le Livre Noir de la Psychanalyse.
Molino, Anthony (2004). El árbol y el diván. Diálogo entre psicoanálisis y budismo. D. T.
Suzuki, A. Watts, E. Fromm, D. Lama, C. G. Jung, M. Abe, J. Kornfield, K. Horney y otros.
Barcelona: Editorial Kairós. ISBN 978-84-7245-565-8.
Montejo Alonso, F. Javier (2009). El psicoanálisis 1919-1933: consolidación, expansión e
institucionalización. Madrid: Editorial Universidad Complutense. E-Prints. ISBN 978-84-692-8580-
0.
Obholzer, Karin (1982). The Wolf-Man: Conversations with Freud's Patient Sixty Years
Later.
Portuondo, Juan A. (1988). Teoría y técnica psicoanalíticas. Barcelona: Editorial
Psique. ISBN 84-87133-00-2.
Roudinesco, Élisabeth; Plon, Michel (2008). Diccionario de Psicoanálisis. Título
original,Dictionnaire de la Psychanalyse, 1997, traducción de Jorge Piatigorsky y Gabriela
Villalba. Buenos Aires: Paidós. ISBN 978-950-12-7399-1.
Schacter, Daniel (2001). Suppression of Unwanted Memories: Repression Revisited?. The
Lancet 357.
Smith & Glass (1977). Meta-analysis of Psychotherapy Outcome Studies. American
Psychologist 32 (9).
Smith, Glass, y Miller (1980). The Benefits of Psychotherapy. Baltimore: The Johns
Hopkins University Press.
Spitz, René (1969). El primer año de la vida del niño. México: Fondo de Cultura
Económica. ISBN 84-375-0181-4.
Suzuki, Daisetz Teitaro y Fromm, Erich (1960/2003 [15ª reimpresión]). Budismo zen y
psicoanálisis. México: Fondo de Cultura Económica. ISBN 968-16-0624-8.
VV.AA. Guía de tratamientos psicológicos eficaces. Editorial Pirámide.
Zeul, Mechthild (2007). Das Höhlenhaus der Träume. Filme, Kino & Psychoanalyse (en
alemán). Fráncfort del Meno: Brandes & Apsel. ISBN 978-3-86099-738-3.
Enlaces externos[editar]
Entrevista a Mario Bunge sobre el psicoanálisis, El Ojo Escéptico, 12 de abril de 1995 [1]
Página/12. Psicoanálisis y legislación de la práctica profesional
International Network of Freud Critics (en inglés)
Freud: El Psicoanálisis como sistema de cura; La promesa terapéutica del Psicoanálisis
Psicoanálisis y cristianismo como métodos rivales de cura
Cine y psicoanálisis
Geheimnisse einer Seele (Misterios de un alma), película dirigida por Georg Wilhelm
Pabst y con guion, entre otros, de los psicoanalistas Karl Abraham y Hanns Sachs
A Dangerous Method (Un método peligroso), película de David Cronenberg acerca de las
relaciones entre Freud, Jung y Sabina Spielrein