Proyecto Aislante
Proyecto Aislante
Proyecto Aislante
OBJETIVOS:
Objetivos generales.
Determinar mediante una simulación, con el uso de materiales como el
ladrillo pandereta, la madera (aserrín), la aplicación óptima de
aislamiento térmico para evaluar si en el hogar, existe rentabilidad
económica al utilizar un tipo de aislamiento, así como, el impacto
energético y medioambiental.
Determinar la decisión económica más rentable entre el uso del
aislamiento óptimo y el uso de equipos de alta eficiencia.
Objetivos específicos.
Determinar cuál debe ser la ubicación óptima del material aislante en
las paredes de la estructura de un nuevo hogar.
Establecer una metodología que nos permita analizar diferentes
situaciones para determinar el valor en tamaño de partícula del aserrín
óptimo de material aislante y la forma de ubicar el ladrillo en las
paredes.
INTRODUCCIÓN
ANTECEDENTES
La aislación térmica es un término que ha sido aplicado desde hace muchos
años. El hombre prehistórico en sus orígenes utilizaba materiales orgánicos
tales como la piel de los osos, las plumas de las aves, el algodón, la lana, paja
e incluso el mismo cabello humano. Todos estos materiales el hombre de la
antigüedad los usaba para recubrir las cavernas o cuevas donde se alojaba con
el simple hecho de sentirse cómodo, y del mismo modo eran usados como
vestimenta. Así también a medida fueron evolucionando, las construcciones
eran hechas de piedra, tierra y otros materiales para la protección contra el
frio durante la temporada de invierno y del mismo, contra el calor durante
temporadas cálidas.
Durante miles de años, las estructuras de las casas fueron diseñadas para
adaptarse mejor al clima de su ubicación. Por ejemplo, aprovechando la masa
térmica de la tierra, los egipcios se apartaban de la superficie a la frescura
subterránea, siendo ellos los primeros en construir cámaras bajo la tierra y así
mejorar el confort en los días calurosos. Los historiadores creen que los
antiguos griegos y romanos descubrieron el asbesto como material con una
gran resistencia al calor y al fuego. Plinio, en el primer siglo, se refirió a la
utilización del corcho como un material aislante para techos. Los primeros
habitantes de España diseñaron sus construcciones de piedra con corcho, y los
nativos del norte de África utilizaban corcho mezclado con barro para
construir las paredes de sus viviendas con el único fin de evitar el paso del
calor.
“La eficiencia energética” y la reducción de las emisiones de CO2. Este
concepto de la eficiencia energética es lo que está moviendo a muchas de las
entidades que se encargan de construir en el mundo con el objeto de suavizar
y disminuir el consumo de la energía eléctrica.
La ganancia por radiación solar es la fuente más importante a controlar, lo cual
se logra con un diseño adecuado de los muros en los edificios, por lo que es
siempre recomendable aislar muy bien el techo, así como también fachadas.
IMPORTANCIA Y JUSTIFICACIÓN DEL PROYECTO.
El análisis para la obtención de un aislamiento térmico manteniendo constante
la temperatura, está dirigido hacia la población en general se trata de un
sistema válido para aislamiento térmico por clima frío o por calor, el ahorro
energético que provee representa para el medio ambiente hasta un 40%
menos de emisiones de CO2, contribuyendo a la reducción del efecto
invernadero. Por tanto un estudio de esta categoría puede ayudar a la
existencia de nuevas normativas de construcción en nuestro país, y así tener
una mayor responsabilidad con el uso de la energía eléctrica y el cuidado del
ambiente.
CONSIDERACIONES GENERALES
Ámbito de aplicación.
El presente trabajo es aplicable a los hogares en los que la energía se emplea
para calentar y posiblemente también para enfriar el ambiente y conseguir así
una temperatura interior apropiada.
DEFINICIONES
Espacio calefactado.
Es un lugar cuya temperatura establecida durante la calefacción es, por
razones de confort u otras, de 17º C o superior.
Cerramiento del edificio.
Se refiere a los elementos que separan los espacios calefactados, parcialmente
calefactados, particularmente cálidos, el terreno o de los espacios no
climatizados. El cerramiento del edificio no incluye los elementos internos en
edificios que separen los diferentes espacios entre sí.
Valor comparativo.
Es el valor del coeficiente de transferencia térmica de los elementos
estructurales o el área total de ventanas en un edificio y que se utiliza para
calcular la pérdida de calor comparativa de un edificio.