Resumen Tratado de Los Delitos y de Las
Resumen Tratado de Los Delitos y de Las
Resumen Tratado de Los Delitos y de Las
Las leyes son las condiciones por las que los hombres se unieron en sociedad cansados
de un estado de guerra, donde el soberano pasa a ser su administrador y dado que la
experiencia han demostrado que no toda la multitud adopta las leyes, es necesario evitar
que las leyes de la sociedad se sumerjan en el caos y ello se logra a través de motivos
sensibles que son las penas contra los infractores.
DERECHO DE CASTIGAR
CONSECUENCIAS
Primera: Solo las leyes pueden decretar las penas de los delitos y esta autoridad
únicamente corresponde al LEGISLADOR que es el que representa a toda la sociedad,
ningún magistrado puede decretar su voluntad ni aumentar las penas establecidas.
Segunda: Todo miembro particular está ligado a la sociedad y ésta, está ligada con cada
miembro particular, esto significa que el interés de todos se basa en la observación de los
pactos, y la violación de cualquiera de ellos autoriza la anarquía por ende el soberano
no puede juzgar cuando alguno haya violado el contrato social, de ahí la necesidad de que
un tercero juzgue “MAGISTRADO:, cuyas sentencias sean inapelables.
Tercera: Cuando se probase que la atrocidad de las penas son puestas al fin de impedir
los delitos, éstas serían contrarias a la justicia y a la naturaleza del contrato social.
Cuarta Consecuencia: Los jueces criminales no pueden interpretar las leyes penales
porque ellos no son legisladores. Los jueces han recibido las leyes de la sociedad, del
soberano, resultado de un juramento de la voluntad actual de todos. En todo delito el juez
debe hacer un silogismo perfecto donde la premisa mayor es igual a “LA LEY
GENERAL”, la menor “LA ACCIÓN CONFORME O NO A LA LEY”, la consecuencia
“LA LIBERTAD O LA PENA”.
Hay peligro en el principio que nos propone consultar el espíritu de la ley, éste es el
resultado de la buena o mala lógica del juez, de su buena o mala digestión, por lo que la
1
MONTESQUIEU
suerte del ciudadano cambia con frecuencia al pasar por distintos tribunales, es víctima
de los falsos raciocinios o del actual fermento de los humores del juez. Pero un código
fijo de leyes no deja más facultad al juez de examinar y juzgar si las acciones de los
ciudadanos son o no conformes a la ley escrita.
Hay oscuridad en las leyes cuando están escritas en una lengua extraña para el pueblo,
pudiendo entenderlas solo unos pocos, pero debería ser lo contrario ya mientras más
personas entiendan y tengan a su alcance el código de las leyes menos frecuentes serán
los delitos, sin leyes escritas una sociedad no tendrá jamás una forma estable de gobierno
donde la fuerza sea un efecto del todo y no solo de las partes.
DE LOS TESTIGOS
En toda legislación es bueno determinar la credibilidad los testigos y las pruebas del
delito. Cualquier hombre racional puede ser testigo y siempre es necesario más de un
testigo. La graduación de la credibilidad está en el interés que tenga en decir o no la
verdad y puede disminuirse por lo siguiente:
Cuando las pruebas del hecho son dependientes la una de la otra, es decir los
indicios se prueban entre sí mismos, y traen mayores pruebas es menor la
probabilidad del hecho.
Cuando las pruebas del hecho dependen todas de una sola, su número no aumenta
ni disminuye la probabilidad del hecho.
·Cuando las pruebas son independientes la una de la otra, cuanto mayores pruebas
traen aumenta la probabilidad del hecho.
Pueden distinguirse las pruebas de un delito en: Perfectas: las excluyen la posibilidad
de que X hombre no sea reo, una sola prueba es suficiente para la condenación.
Imperfectas: las que no excluyen de que X no sea reo, son necesarias varias pruebas.
ACUSACIONES SECRETAS
DE LA TORTURA
Una crueldad consagrada por la mayor parte de las naciones es la “tortura” mientras se
forma el proceso o para obligarlo a confesar un delito. Un hombre no puede ser llamado
reo antes de la sentencia del juez ni la sociedad puede quitarle la protección (uno es
inocente mientras no se demuestre lo contrario). Es querer confundir al pretender que un
hombre sea al mismo tiempo acusador y acusado.
Otro motivo de la tortura es “la purgación de la infamia”, es decir un hombre juzgado
infame por las leyes para librarse debe confirmar la verdad de su declaración con la
dislocación de sus huesos (uso tomado de las ideas religiosas y espirituales).
El tercer motivo de la tortura es cuando “el reo en su examen caen contradicciones”, con
ello se da entender que el temor a la pena no debe hacer caer en contradicciones al
inocente y al reo que pretende cubrirse.
No vale la confesión dictada durante la tortura si no se confirmó con juramento después
y si el reo no confirma lo que dijo es atormentado de nuevo. Una consecuencia que se
deriva del uso de la tortura es que el inocente se hace peor que el reo (porque sufre una
pena que no debía).
La tortura se da a un acusado para descubrir los cómplices de su delito pero es demostrado
que no es un medio oportuno para descubrir la verdad, los cómplices por lo común huyen
después de la prisión del compañero y la incertidumbre de su suerte los condena por sí
solos al destierro y libra a la nación de nuevas ofensas.
PROCESOS Y PRESCRIPCIONES
Conocidas las pruebas y calculada la certidumbre del delito es necesario conceder al reo
el tiempo y medios oportunos para justificarse pero dicho tiempo debe ser breve para que
no afecte a la prontitud de la pena. Pero las leyes deben fijar un tiempo tanto para la
defensa como para las pruebas de los delitos y el juez vendría a ser legislador al
determinar el tiempo necesario para probar un delito. Se distinguen dos clases de delitos:
El interés no es solo que no se cometan delitos sino también que sean cada vez menos
frecuentes en proporción al mal que causan en la sociedad, por ello más fuertes deben ser
las razones que aparten a los hombres de los delitos a medida que son contrarios al bien
público. Es imposible prevenir todos los desórdenes ya que crecen en razón de la sociedad
y de los intereses particulares, a la media que estos crecen aumenta el impulso hacia los
delitos conforme al interés de cada uno, por ello hay la necesidad de agravar las penas.
Tenemos una escala de desórdenes, en primer grado: DESTRUYEN
INMEDIATAMENTE LA SOCIEDAD, en último grado: LA MÁS PEQUEÑA
INJUSTICIA POSIBLE, entre estos extremos están todas las acciones opuestas al bien
público que tienen el nombre de delitos y cualquier acción no comprendida entre los dos
límites no puede ser llamado delito. Si se destina una pena igual a dos delitos que ofenden
desigualmente la sociedad los hombres no encontrarán un estorbo muy fuerte para
cometer el mayor, por ello como no todos los delitos dañan de la misma forma a la
sociedad por ende a mayor delito mayor será la pena que le corresponda.
La verdadero medida de los delitos es el daño hecho a nación, es decir mientras mayor
sea el daño hecho a la nación mayor será la pena se ha tenido conceptos errados sobre
cuál es la medida de los delitos como:
DEL HONOR
El honor es una idea compleja que corresponde a un agregado de ideas simples, para
encontrar un común divisor en dichas ideas es necesario mirar sobre la formación de las
sociedades. Las primeras leyes y los primeros magistrados nacieron de la necesidad de
reparar los desórdenes del despotismo físico, este fue el fin principal de la sociedad y se
ha conservado siempre, A partir de esta época comenzó el despotismo de la opinión, ésta
es la que atormenta al sabio y al ignorante, de esta manera la consideración de los hombres
se hizo no solo útil sino necesaria para no quedar por debajo del nivel común. El honor
es una condición que incluyen en la existencia propia, nacido después de la formación de
la sociedad. El honor es uno de los principios fundamentales de aquellas monarquías que
son un despotismo disminuido.
DE LOS DUELOS
Los duelos tienen su origen en la anarquía de las leyes y nacieron de la necesidad del
favor de los otros. En vano los decretos de muerte contra la persona que aceptaba el duelo
han procurado extirpar dicha costumbre que tiene su fundamento en aquello que algunos
hombres temen más que la muerte. El mejor método de precaver este delito es castigar al
agresor (El que ha ocasionado el duelo), declarando inocente al que sin querer se vio
precisado a defender lo que las leyes actuales no aseguran, que es la opinión.
DE LA TRANQUILIDAD PÚBLICA
Entre los delitos de tercera especie tenemos a los que alteran la tranquilidad pública como
por ejemplo las huelgas. Existen medios eficaces para prevenir la fermentación de las
pasiones populares, medios tales como: la noche iluminada a expensas públicas, los
informes destinados a sostener los interés públicos o privados, entre otros. Se debe
realizar una vigilancia del magistrado lo que los francés llaman policía, pero si éste
magistrado obras con leyes arbitrarias y no establecida en un código se abre una puerta
a la tiranía.
El fin de las penas es impedir al reo causar nuevos daños a sus ciudadanos y retraer a los
demás de cometer otros iguales, posteriormente deberá ser escogida la pena, el método
de imponerlas
DEL FISCO
el objeto de las penas era un pleito entre el fisco 2 y el reo, era un negocio civil,
contencioso, privado quedaba al fisco otros derechos fuera de los suyos y al reo otras
vejaciones aparte de las que había incurrido. El juez era un abogado del fisco y no el
investigador de la verdad; la confesión del delito debía favorecer y no perjudicar las
2
Encargado de recaudar los impuesto del Estado.
razones fiscales. Probada la existencia del delito la confesión sirve de prueba convincente,
para hacer la prueba menos sospechosa se la hace por medio del tormento y los dolores.
El juez se hace enemigo del reo, no busca la verdad sino busca solo el delito en el
encarcelado (los indicios para capturar están al arbitrio del juez).
Para que un hombre pueda probar su inocencia debe antes ser declarado reo (proceso
ofensivo).
DE LOS JURAMENTOS
En los juramentos se pide al reo que diga la verdad cuando tiene mayor interés en
encubrirla. La ley que ordena el juramento no deja en tal caso al reo más que la elección
de ser mártir o mal cristiano, viene a ser el juramento una simple formalidad
destruyéndose por este medio los principios religiosos. La experiencia no ha hecho ver
que los juramentos son inútiles los jueces pueden ser testigos de ello ya que no se ha
logrado por dicho medio que los reos digan la verdad.
PRONTITUD DE LA PENA
Más justa: Porque evita al reo los tormentos de la incertidumbre y porque siendo
una especie de pena la privación de la libertad, no puede preceder a la sentencia
sino cuando la necesidad obliga. El menos tiempo debe medirse por la necesaria
duración del proceso y debe acabarse en el más breve tiempo posible.
Más útil: Porque cuando es menor la distancia del tiempo entre la pena y el delito
es más fuerte y durable del tal modo que se consideran el uno como causa y el
otro como efecto. La retardación no produce más efecto que desunir cada vez
más estas dos ideas.
Otro principio para estrechar más la conexión entre el delito y la pena es que se halle
conforme a la naturaleza del mismo delito ello facilita al choque entre los estímulos que
impulsan el delito y la repercusión de la pena.
VIOLENCIAS
No hay libertad cuando algunas veces las leyes permiten que en ciertos acontecimientos
el hombre deje de ser persona y se repute como cosa.
PENAS DE LOS NOBLES
Las penas deben ser las mismas tanto para el primer y cómo para el último ciudadano,
toda distinción sea en honores, riqueza para que se tenga por legítima supone una igualdad
fundada sobre las leyes.
La sensibilidad del reo es el daño público, por tanto mayor cuando es causado por quien
está más favorecido, la igualdad de las penas es extrínseca.
HURTOS
Los hurtos que han sido realizados sin violencia deberían ser castigados con pena
pecuniaria (dinero), fundándose ello en que, aquel que quiere enriquecer con lo ajeno
debe ser empobrecido con lo propio, pero como ordinariamente este delito proviene de la
miseria la pena más oportuna sería la esclavitud por un cierto tiempo donde la sociedad
se hace señora absoluta de la persona y trabajo del reo. Pero cuando el hurto sea con
violencia la pena debe ser una mezcla de corporal y servil.
INFAMIA
OCIOSOS
El que turba la tranquilidad pública, el que no obedece a las leyes debe ser excluido de la
sociedad es decir debe ser desterrado. Razón por la que los gobiernos no consienten en el
seno del trabajo y de la industria aquel género de ocio político.
Se llama ocio político al que no contribuye a la sociedad ni con el trabajo ni con las
riquezas que adquiere. No es ocioso políticamente quien goza el fruto de los vicios o de
las virtudes de sus mayores y vende por placeres actuales el pan y la existencia a la
industriosa pobreza, por eso deben las leyes definir cual ocio es digno de castigo.
DESTIERROS Y CONFISCACIONES
Las injusticias fueron aprobadas por los hombres por haberla considerado no como unión
de hombres sino como unión de familias.
DE LA PENA DE LA MUERTE
¿La pena es verdaderamente útil y justa en un gobierno bien organizado? Por dos motivos
puede creerse necesaria la pena de muerte:
3
Verdadero, cierto, seguro
No es el freno para los delitos el espectáculo momentáneo de la muerte de una persona
sino que ese hombre sea privado de su libertad y con su servicio compensa a la sociedad
que ha ofendido. Para que una pena sea justa debe tener solo los grados de intensidad
que es suficiente para separar al hombre de los delitos. Parece absurdo que las leyes
que son la expresión de la voluntad pública que detestan y castigan el homicidio lo
cometan.
DE LA PRISIÓN
La prisión es una pena que por necesidad debe preceder declaración del delito, sólo la
ley puede determinar los casos en se es digno de una pena, la ley señalará cuales son los
indicios para que un delito merezca la prisión de un reo que lo sujeten al examen y a la
pena. Son pruebas suficientes para encarcelar a un ciudadano: la fuga, la confesión
extrajudicial, entre otros. Las penas deben establecerse por la ley y no por los jueces.
Algunos creen que una acción contraria a las leyes cometida puede ser castigada en
cualquier parte como si se pudiera ser súbdito de un dominio y habitar en otro (el lugar
de la pena es el lugar del delito). Las penas no deben solamente ser proporcionadas a los
delitos entre sí en la fuerza sino también en el modo de ejecutarlas, el derecho de hacer
castigar no es de uno solo sino de todos los ciudadanos poder soberano ya sigue el
ofendido podrá renunciar a su porción de derecho pero pero no anular la de los otros.
Hay algunos delitos que son difíciles de probar y al mismo tiempo son frecuentes en la
sociedad, la dificultad se haya en la probabilidad de la inocencia siendo el daño la
impunidad tanto el tiempo del examen y de la prescripción deben disminuirse. El adúltero,
el deleite griego son DELITOS DIFÍCILES DE PROBAR, el adulterio es un delito que
su fuerza y dirección están en dos causas:
SUICIDIO
El suicidio es un delito pero no admite una pena ya que no se puede hacer recaer ella en
un cuerpo muerto ni tampoco en inocentes. Cualquiera que se mate hace menos daños
que aquella persona que sale de sus confines.
CONTRABANDOS
El contrabando es un delito que ofende tanto al soberano como a la nación, pero su pena
no debe ser infamante ya que el hecho no produce infamia en la opinión pública, ya que
si da una pena de esta índole se está disminuyendo el dictamen de la infamia para aquellos
delitos que realmente lo son. Es delito nace de la ley misma ya que creciendo la gabela
crece la utilidad y con ella la tentación de hacer contrabando y la facilidad de cometerlo.
Hay contrabandos que interesan por su naturaleza de tal manera que merecen una pena
considerable (prisión, servidumbre).
DE LOS DEUDORES
Legislación asegura a los acreedores para que que sus deudores les paguen, es importante
distinguir:
Dentro de los confines de un país no debe haber lugar independiente de las leyes, su
poder debe seguir a todo ciudadano. Todas las historias muestran que los asilos salieron
de revoluciones en los estados y en las opiniones de los hombres.
DE LA TALLA
Una cuestión importante es saber si es útil poner precio al que entrega la cabeza de un
hombre declarado reo. Si el reo está fuera de los confines de la nación, el soberano
estimula a los ciudadanos a cometer un delito y autoriza a las otras naciones para que
hagan lo mismo con el y si el el reo está fuera de los confines, muestra la flaqueza de la
nación.
ATENTADOS, CÓMPLICES, IMPUNIDAD
Las leyes no castigan la intención pero ello no quiere decir que cuando un delito empieza
por una acción que manifiesta voluntad de cometerlo no merezca algún castigo, el hecho
de estorbar un atentado ya autoriza la pena.
Algunos tribunales ofrecen impunidad al cómplice de un grave delito que delatase a los
otros, recurso que tiene ventajas: que es evitar los delitos importantes y que siendo ocultos
los autores atemorizan al pueblo; y también tiene inconvenientes, que vendría a ser que
la nación autoriza la traición.
Este capítulo habla sobre un género de delitos que ha cubierto a Europa de sangre, el autor
nos menciona que el siglo y la materia no le permiten examinar la naturaleza de dicho
delito, pero nos habla de los delitos que provienen de la naturaleza humana y del pacto
social.
FALSAS IDEAS DE UTILIDAD
Son errores e injurias las falsas ideas de utilidad que podemos mencionar sobre ellas lo
siguiente:
DE LAS CIENCIAS
La ciencia debe acompañar la libertad, nos dice el autor que los males que brotan de los
conocimientos son en razón contraria a su extensión y los bienes son en la directa.
No es verdad que las ciencias sean dañosas siempre a la humanidad y si lo fuera es un
mal inevitable de los hombres.
MAGISTRADOS
Para evitar los delitos tenemos el medio de hacer que se interese el magistrado más en la
observancia de la ley que en su corrupción, y cuanto mayor fuera en número de ejecutores
de la ley menos peligroso sería la usurpación ya que son menos interesados en acrecentar
la autoridad propia cuando es menor la porción que tocaría a cada uno.
RECOMPENSAS
Para evitar los delitos tenemos el medio de: “recompensar la virtud”, en las leyes de las
naciones se observa un silencio sobre ello, pero es claro que si el soberano recompensará
las acciones virtuosas se multiplicarán.
EDUCACIÓN
Perfeccionar la educación es el más seguro medio para evitar los delitos, para lograr
separar el mal por la necesidad e inconveniente y no hacerlo por el camino del mando y
de la fuerza por donde se obtiene una disimulada y momentánea obediencia.
DEL PERDÓN
A medida que las penas son más dulces, la clemencia y el perdón es menos necesario, la
clemencia debería ser suprimida de aquellas legislaciones donde las penas son muy
suaves, ya que los perdones y las gracias son necesarias a proporción de lo absurdo de las
leyes y de la atrocidad de las sentencias. La clemencia es virtud del legislador y no del
ejecutor de las leyes, es decir debe estar establecida en los códigos. Debe ser inexorables
las leyes e inexorables sus ejecutores en los casos particulares pero suave, indulgente y
humano el legislador.
CONCLUSIÓN
La gravedad de las penas debe ser relativa al estado de la nación, a medida que los ánimos
se suavizan en el estado crece la sensibilidad y al mismo tiempo debe disminuirse la
fuerza de la pena. Para que toda pena no sea violencia contra un particular debe ser
pública, pronta, necesaria, la más pequeña de las posibles, proporcionada y dictada por
las leyes.
Bibliografía
Beccaria, C. Tratado de los delitos y de las penas .
Talleres Once (Ed.). (s.f.). Recuperado el 2015, de http://e-
archivo.uc3m.es/bitstream/handle/10016/20199/tratado_beccaria_hd32_2015.pdf?seque
nce=1
(s.f.).