Mensajes Yo
Mensajes Yo
Mensajes Yo
nuestros propios sentimientos, opiniones o necesidades. No se trata de que el otro haya hecho algo mal, si no de la
forma en que yo vivo su conducta (o las consecuencias de ésta); y eso es lo que le transmito, desde la honestidad y el
respeto.
La clave está en usar “Yo” en lugar de “Tú”, y mantenerse siempre centrado en el problema que queremos tratar; sin
acusar ni culpar a la otra persona, se trata de favorecer la escucha del receptor del mensaje y evitar la escalada del
conflicto.
Para usar de forma adecuada los mensajes Yo, se sigue un esquema sencillo, que consta de cuatro pasos:
1. Describe la conducta de la otra persona de forma objetiva. Recuerda que tienes que hablar de hechos y no de
juicios subjetivos, y sé lo más específico posible.
2. Explica cómo te hace sentir ese comportamiento. Habla desde ti y de tus sentimientos, e intenta mantenerte lo más
calmado posible.
3. Describe las consecuencias de que la otra persona siga manteniendo esa conducta; también puedes hablar de los
sentimientos que crees que experimentarás, o de cómo crees que afectará ese comportamiento a otras personas o
situaciones.
4. Explica concretamente los cambios que quieres o deseas que se produzcan en el comportamiento de la otra
persona. De esta forma le ofreces una alternativa, y le das la oportunidad de que responda de forma proactiva
Mensajes TÚ Mensajes YO
Son aquellos en los que culpamos al otro, lo Son mensajes en los que asumimos que lo que pensamos, sentimos y necesitamos es sólo
etiquetamos o le hacemos juicios de valor. («Me responsabilidad nuestra; en vez de querer achacar la responsabilidad a los demás y reprochárselo.
Me centro en lo que hace el otro. Lo acuso, lo juzgo. Me centro en mí, en las consecuencias del comportamiento del otro. Describo sin descalificar, expreso
(«Siempre estás igual, no vas a cambiar nunca») lo que siento y lo que me gustaría. («Cuando actúas así…, me siento…, me gustaría que...»)
nuestro interlocutor.
Generan respuestas defensivas, más enfado, Minimiza la actitud defensiva, amortigua la tensión generada y facilita la expresión de las diferencias y