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CORTOMETRAJE

LA COLMENA

Guion: Walter Villanueva Azaña

2012
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PRIMERA PARTE

INTERIOR, DORMITORIO DE ISABEL, MAÑANA

ISABEL, 18 años, delgada, está frente a un espejo

viejo y rajado de su dormitorio. El cuarto se nota
bastante pobrísimo: una cama vieja, una silla de
madera; las paredes, de triplay y cartón, están
empapelados con periódicos y revistas de deportes o
espectáculos.

Examina sus ojos ante el espejo, abriendo las pupilas

con sus dedos o acomodando sus pestañas. De pronto,
observa en el mismo espejo la figura gris de un
hombre, detrás de ella. Se asusta. Voltea y no
encuentra a nadie. Mira nuevamente el espejo pero la
figura ha desaparecido.

FLASH DE MEMORIA
ISABEL rueda por un pasaje oscuro: da vueltas y
vueltas como una rueda.

Al cabo de un tiempo se sienta en la cama y coge el

periódico que está sobre la silla. Al levantarlo,
deja al descubierto cientos de hormigas que se
espantan y huyen. ISABEL se limpia el brazo al sentir
un hormigueo. Luego, sopla a las hormigas como
buscando limpiar la silla y las aplasta con un papel.
Se echa a la cama, de bruces. Luego, lee el
periódico, la sección “clasificados”. En ese
contexto, oye una voz que la llama desde otro cuarto
vecino.

VOZ DE MAMÁ DE ISABEL

ISABEL, ¿estás allí? Tráeme un poco
de agua tibia.

ISABEL
Ya, mamá.

Se levanta incómoda, tirando el periódico al

piso.

ISABEL
Ta mare… ya me jode.
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VOZ DE MAMÁ DE ISABEL

Ven rápido (acceso de tos).

ISABEL sale del cuarto y cierra la puerta.

CORTE A NEGRO.

TÍTULO: LA COLMENA

INTERIOR, DORMITORIO DE LA MADRE DE ISABEL, MAÑANA.

ISABEL lleva el vaso a su mamá. Abre la puerta del

dormitorio. Su madre, 48 años, delgada, demacrada
está arrodillada en el suelo, arrojando coágulos de
sangre sobre una bacinica. Viste pijama y tiene el
cabello desgreñado. Está de perfil, frente a la
cortina. El cuarto es miserable: una cama de madera,
un mesita y sobre ella frascos de pastillas contra la
tuberculosis. Hay televisor antiguo y una luz tenue
cae sobre el cuarto.
Cuando la mamá de ISABEL voltea hacia la puerta se
observa en su rostro el signo de la enfermedad,
muestra los labios manchados de sangre: es un rostro
estremecedor.
ISABEL queda paralizada en la entrada por unos
segundos.

ISABEL
¡Mamá, tranquila!

Luego, corre a levantarla y limpia la sangre del

rostro.

ISABEL
No había mucha agua.

MAMÁ DE ISABEL
Pásame, por favor, mis pastillas (tose).

ISABEL
¿Cuál de ellas?
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MAMÁ DE ISABEL
Esas, las rojitas y las otras que son
azules.

ISABEL coge la pastilla roja de la mesita y se la

pasa. No encuentra las azules.

ISABEL
¿Dónde están las azules? ¿En este cajón?

MAMÁ DE ISABEL
Tú nunca sabes nada. Allí está, pues.
¡Rápido! (tose).

La MAMÁ DE ISABEL señala el cajón de la mesita.

ISABEL la abre. ISABEL, empieza a pisar a las
cucarachas; las aplasta con odio.

FLASH DE MEMORIA
Al abrir el cajón, observa carne podrida y gusanos en
su interior que se mueven.

ISABEL se asusta y deja caer el cajón al piso. La

mamá ya sentada en la cama la mira.

MAMÁ DE ISABEL
¿Qué pasa?

ISABEL
Nada, me pareció ver algo. Creo que eran
unas cucarachas.

MAMÁ DE ISABEL
Hace tiempo que no puedo limpiar ese cajón.
Tampoco la casa, por eso está sucia.

ISABEL (para sí)

Nuestra vida está siempre sucia,
cochina. ¿Qué mierda podría tener una
vida limpia? ¿Recién te das cuenta?

ISABEL alcanza las pastillas a la madre.

ISABEL
Estas son azules, tómalas.
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La madre de ISABEL toma las pastillas y luego se

acomoda en la cama. ISABEL la cubre con la frazada.

MAMÁ DE ISABEL
No olvides traer el desayuno (Tose).
Anda temprano porque luego se acaba.
Yo iría pero no tengo fuerzas. Vas
con cuidado, hay muchos enfermos en
la posta y podrían contagiarte… Más
tarde me ayudas a limpiar todo esta
mugre… (Tose).

ISABEL sale del dormitorio de la madre. Cierra la

puerta y se detiene junto a ella. Hace puño, caen
lágrimas por sus ojos. Corre a su cuarto y se
encierra.

EXTERIOR, MERCADO POBRE, MAÑANA

Unas diez personas (jóvenes y adultos) leen avisos de

empleos que están pegados en un tablero de triplay,
en la entrada del mercado.
Como fondo, hay música y gritos vociferantes; hay
diversas tiendas de abarrotes, vendedores ambulantes,
calles sin asfaltar.
Las personas que leen los avisos toman apuntes en
libretas de notas y, algunas, comentan entre sí de
tal o cual trabajo. Luego de anotar las direcciones
se van; otras personas siguen la misma rutina.
De todo el conjunto, destaca ISABEL que permanece
apartada tomando nota. Luego, también se va.
ISABEL camina ensimismada, con un papel en la mano.
Cruza por un kiosko de periódicos y se detiene un
rato. Lee un titular de interiores: “El desempleo
crece en Europa”. Atraviesa por una calle donde hay
un mendigo, un borracho durmiendo y se nota el
abandono del lugar
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INTERIOR, LOCUTORIO, MAÑANA

Llega a un locutorio telefónico y llama a un número

que ha anotado. Se la ve llamando.

VOZ DE HOMBRE
¿Tienes alguna experiencia en otros
trabajos?

ISABEL
No, pero aprendo rápido.

VOZ DE HOMBRE
Hmm, por ahora buscamos una chica con
experiencia laboral.

ISABEL cuelga el teléfono con fuerza. Sale del

locutorio, paga el servicio y se dirige a la
paradita.

EXTERIOR, PARADITA, MAÑANA

ISABEL recorre los puestos de venta: verdura, frutas,

hierbas; abarrotes, limpieza; pescados, pollos,
carne. En uno de los puestos de venta de pescados hay
un cartel: “Se necesita ayudante”. ISABEL se detiene
y pregunta al vendedor, un tipo gordo, trigueño, con
mandil y gorra. Habla con él.

VENDEDOR DE PESCADOS
Podrías empezar hoy…

ISABEL
Sí, sí, necesito trabajar.

VENDEDOR DE PESCADOS
Pero hoy día te dedicarás a
aprender. Pasa y ponte el
mandil.

ISABEL pasa al puesto y se pone el mandil. Al rato,

llegan los clientes y los atiende. Se la ve cortando
pescados, sacando vísceras y escamas; se observa la
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sangre, la suciedad, el mandil salpicado. En la

tarde, termina su jornada. El vendedor le obsequia
pescados sobrantes, ISABEL se va. El vendedor la mira
por largo rato.

INTERIOR, CASA DE ISABEL, TARDE

ISABEL regresa a casa y le cuenta a su madre sobre su

empleo.

ISABEL
Es un puesto de pescado…

MAMÁ DE ISABEL
¿Del señor Ramírez?

ISABEL
Creo que no, es de un señor gordito…

MAMÁ DE ISABEL
Bueno, ya era hora.

ISABEL
Y me ha regalado pescado. Voy a
freírlos para comerlos con arroz…

ISABEL baila con su perrita, contenta.

INTERIOR, DORMITORIO DE ISABEL, NOCHE

ISABEL está sentada en el piso, con la espalda sobre

el borde de la cama. Come pescado frito mientras
escucha una radio vieja. En ese contexto escucha una
discusión de una casa vecina, además, se oye el
llanto de un bebé.

VOZ MASCULINA
…de dónde quieres que saque dinero…

VOZ FEMENINA
¿Y qué va comer el bebé?, ¿Tú crees
que vive del aire?
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VOZ MASCULINA
Y qué chucha quieres que haga… porque
no trabajas, anda putea…

VOZ FEMENINA
Eres una mierda…

Se escuchan golpes, gritos, insultos. El bebé llora,

se escuchan ladridos de perros. De pronto suena el
celular antiguo de ISABEL. Por un largo rato, no lo
contesta, deja que el celular suene. Luego, responde.

ISABEL
¿Aló?

ANA
Hola, soy Ana. ¿Conseguiste chamba?

ISABEL
Sí, estoy ayudando a vender
pescado en el mercado. …

ANA
¿Y cuánto te pagarán?

ISABEL
No sé, mañana seguro me dicen…
¿Y tú, cómo vas?

ANA
Estoy en una fábrica de telas, pero,
hace tres meses que no nos pagan. A
mí me dan para el pasaje y luego se
hacen los “locos”.

ISABEL
¡Qué feo! Y, ¿no te dicen por
qué?

ANA
Dicen que no hay dinero pero cada año
el jefe cambia de carro. En verdad,
debería largarme pero no puedo perder
mi pago.
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ISABEL
¿Y qué vas a hacer?

ANA
No sé. Mañana, mis amigas harán un
paro, estoy pensando apoyarles. Me
llega que los jefes sean abusivos.
Ahora que lo pienso, estamos rodeados
de abusivos, ¿no?

ISABEL
Rodeados de abusivos… sí, es
cierto. Pero, mejor no te metas
en eso…

Se escucha la voz de la madre de ISABEL que

interrumpe la conversación. Aparece por la puerta.
ISABEL deja el celular a un lado.

MAMÁ DE ISABEL
¿Quién era?

ISABEL
Mi amiga Ana…

MAMÁ DE ISABEL
¿Ana? ¿Tu amiga del colegio? Pero, ¿no me
dijiste que había muerto hace tres meses?

ISABEL
Ana, no. Ana está trabajando.

MAMÁ DE ISABEL
Hmm, ¿y qué te dice? ¿por qué
no te visita?

ISABEL
Ana está trabajando.

MAMÁ DE ISABEL
¿Con su bebé?
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ISABEL
No.

MAMÁ DE ISABEL
Ahora sí me confundí más… La
enfermedad me tiene algo boba.
Voy a echarme.

ISABEL
Yo también quiero dormir.

Corte

EXTERIOR, PARADITA, MAÑANA TEMPRANO

ISABEL camina hacia el puesto de venta de pescados.

La gente ya empieza a caminar. Se nota que la ciudad
esta poniéndose en movimiento.

INTERIOR, PUESTO DE VENTA DE PESCADOS, MAÑANA

Llega al puesto de venta e ingresa. El vendedor de

pescados está tomando su desayuno. Apenas la ve, la
invita a tomar café con leche y panes.

VENDEDOR DE PESCADOS
Hoy has venido más bonita…
jejeje

ISABEL (azorada)
Gracias.

VENDEDOR DE PESCADOS
Ven, siéntate más cerca…

ISABEL
¿Yo?

VENDEDOR DE PESCADOS
Sí, trae tu banca, ven…
sírvete…

ISABEL se acerca, nerviosa. El vendedor de pescados

ríe con la boca llena. Luego, ambos toman el desayuno
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en silencio y más juntos. De pronto, el tipo gordo,

luego de mirar hacia fuera, le coge por la cintura y
la atrae hacía sí, con el cogerle los senos o la
blusa. Ella se sorprende inicialmente y luego, lo
rechaza.

ISABEL
¡Déjenme!

Ambos forcejean y, en esa situación, ISABEL hace caer

al piso las dos tazas, que se hacen añicos.

VENDEDOR DE PESCADOS
¿Qué has hecho, putita de
mierda?, lárgate de aquí…

ISABEL sale asustada, corre sin detenerse hasta su

casa. EL VENDEDOR DE PESCADOS mira los pedazos de
tazas, nervioso y molesto.

INTERIOR, DORMITORIO DE ISABEL, MAÑANA

Ingresa a su casa y se dirige a su dormitorio. Se

sienta al borde de su cama, mira a su perro y la
abraza. Llora, le da besos. Luego, lo mira por un
rato y le habla al oído.

ISABEL
Estamos rodeados de abusivos,
completamente rodeados. No
podemos salir; si salimos,
tenemos que regresar al mismo
lugar. Y ahí, empiezan nuevamente
a rodearnos los abusivos y solo
me quedas tú porque mamá no
existe.¿Y ahora qué debo hacer?
¿Qué harías tú?

Luego lo suelta y mira el techo. Al rato, busca el

periódico y encierra algunos avisos. Coge su celular
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y marca el número anotado. Se percata que no tiene

saldo. Decide salir al locutorio.

ISABEL mira la puerta del dormitorio de su mamá y

sale.

INTERIOR, LOCUTORIO, MAÑANA

Se ve a ISABEL ingresando a una cabina telefónica,

marca el número y empieza a llamar. Se la ve
conversando.

VOZ DE MUJER
Mira, niña, tendrías que venir
para verte. Muchas se creen
miss universo, mejor es ver
para creer.

ISABEL
Y cómo llego…

VOZ DE MUJER
Vas a la Plaza Dos de Mayo, llegas
ahí y nos vuelves a timbrar.

ISABEL
Ok.

VOZ DE MUJER
Nos vemos ahí.

ISABEL
¿Y por quién pregunto?

VOZ DE MUJER
Ahí te diremos el nombre.

ISABEL
Gracias.

ISABEL cuelga el teléfono.

Corte