Diccionario
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Cuando leemos textos no es conveniente detener la lectura cada vez que se encuentra una
palabra cuyo significado desconocemos. En este sentido, consideramos conveniente
abordar la lectura de textos de la siguiente manera:
Leer todo el texto corrido subrayando aquellas palabras que te resultan desconocidas.
Evaluar si comprendes la idea central de cada párrafo y de todo el texto a pesar de la
presencia de palabras de significado desconocido e ir realizando las actividades
correspondientes.
Para aumentar tu conocimiento del léxico puedes después centrarte en cada una de las
palabras desconocidas e intentar inferir su significado de acuerdo al
contexto. Posteriormente busca las palabras en el diccionario bilingüe inglés – español y
anota en un cuaderno o libreta su(s) significado(s). Ve construyendo un glosario personal de
palabras desconocidas para cada lectura que trabajes. Esto puede ser en orden alfabético
o por categorías gramaticales o unidades lexicales (sustantivos, adjetivos, verbos, adverbios,
pronombres, preposiciones etc.,). Escoge la forma que más se adecúe a tu estilo de
aprendizaje.
Elementos de la comunicación
La comunicación es un proceso que exige responsabilidad por parte de las personas que
participan en ella. Los principales elementos de la comunicación son: emisor, mensaje y re-
ceptor. El emisor debe producir un mensaje claro y acorde con sus motivaciones. El receptor,
por su parte, está en la obligación de recibir con la debida atención los mensajes y asumir
una posición crítica frente a ellos. Solo de esta manera podrá saber si está o no de acuerdo
con ellos y emitir una respuesta.
Género dramático: abarca las obras de teatro. El autor narra los hechos a través de
diálogos con miras a que los actores lo representen. Es el género de la acción. Los anti-guos
griegos, inventores de este género, representaban en el teatro la lucha del ser humano
contra el destino.
Género narrativo: incluye las novelas y los cuentos. En él se relatan los sucesos por medio
de diálogos y descripciones. Se cuentan aventuras, se crean espacios, se refiere el paso del
tiempo y se caracterizan personajes, en sus aspectos físicos y sicológicos. Los sucesos, si
bien tienen su fuente en la realidad son transformados por la imaginación del autor.
Género lírico: abarca los poemas. Expresa la nostalgia, el amor, la percepción de la muerte
o de la naturaleza. En las sociedades primitivas al poema se le asigna poderes mágicos,
pues se creía que surgía de la inspiración de los dioses.
EL TEXTO NARRATIVO
Es un tipo de texto que narra o cuenta una serie de hechos reales o producto de la
imaginación. Se caracteriza por recrear la forma de pensar y sentir de los personajes,
describir lugares o espacios donde ocurren las acciones centrales del relato, y construir una
trama o argumento que enlaza los hechos que van ocurriendo. En los textos narrativos se
puede reconocer una organización de los acontecimientos a partir de un inicio o
planteamiento, un nudo o conflicto y un final o desenlace de la historia.
.
Estructura de la acción narrativa: Este término se refiere a la organización de los
elementos de la narración, los cuales están interrelacionados formando un todo. De manera
general, distinguiremos tres partes en una narración:
Planteamiento: Es la parte inicial del relato donde se proporciona la información necesaria
para que se desencadene la acción posterior.
Nudo: Es el momento de mayor complejidad de la historia y donde se continúa lo iniciado
en el planteamiento.
ELEMENTOS DE LA NARRACIÒN
1- El narrador: Es el sujeto que, desde un punto de vista concreto, cuenta los hechos
de la historia, presenta a los personajes, los sitúa en un espacio y tiempo
determinados, observa los hechos que le rodean y muestra su forma de pensar y su
forma de comportarse. La manera de contarlo todo es importante para la comprensión
de la historia.
Tipos de Narrador
El texto narrativo puede presentar varias modalidades básicas de narrador:
Narrador protagonista: En este caso narrador y personaje están fundidos. El narrador
protagonista también puede ser un personaje de la historia. Puede hablar en primera
persona singular o –en los casos en que dos personajes compartan una misma visión en
primera persona plural.
Narrador omnisciente: Generalmente se vale de la tercera persona. Emplea la segunda
cuando actúa a modo de conciencia que lo coloca ante sus hechos. El narrador omnisciente
lo sabe todo, a veces también conoce los pensamientos y motivaciones de los personajes.
Narrador testigo: Puede usar la primera o la tercera persona. No sabe nada acerca de los
personajes; tan solo observa sus movimientos y los cuenta.
Tipos de personajes:
El protagonista es el personaje en el que recae la acción narrativa, por ende, el interés del
narrador se centra en lo que hace y lo que le sucede. En la mayoría de las narraciones el
protagonista pretende resolver problemas que se le presentan. En esos casos aparece el
papel de antagonista, es decir, el personaje que se opone al protagonista y a sus acciones,
e intenta que no resuelva dicho problema. Los personajes restantes que intervienen en la
historia son los denominados personajes secundarios. Los personajes secundarios, en
cambio, desempeñan un papel más discreto. Ellos aparecen en la narración porque prestan
un servicio al personaje principal, le ayudan a superar una dificultad o le ponen algún
obstáculo.
El cuento
El cuento es una de las principales muestras del género narrativo. El cuento presenta tres
momentos principales: el inicio, el desarrollo y el final.
Todo cuento tiene los siguientes elementos: los personajes, el ambiente, que está
determinado por el espacio y el tiempo, y unas acciones que realizan los personajes, las
cuales se relatan a partir de descripciones y diálogos.
El mito
Los seres humanos de todas las épocas han sentido la necesidad de explicar el mundo que
los rodea. Para las personas de la antigüedad el mundo era un enorme y terrible signo de
interrogación y la única manera que tenían para explicarlo era a través de la imaginación.
Los protagonistas de las leyendas tienen una dimensión heroica y encarnan las virtudes de
todo un pueblo o de una región. Existen elementos fantásticos, como personajes, objetos y
situaciones, que simbolizan las fuerzas de la naturaleza y que cumplen, precisamente, la
función de resaltar el carácter heroico del protagonista. Así pues, si el mito es la base de las
creencias y los ritos de una religión, las leyendas son la base de la identidad regional o
nacional.
Los temas de las leyendas son variados. Pueden tratar de reyes, gobernantes o fundadores,
cuando tienen un carácter nacional. Tal es el caso de la leyenda El rey Arturo, cuya historia
formó las bases de la futura Inglaterra. Pueden, así mismo, hablar de espantos o personajes
pintorescos, como en las leyendas locales. Ejemplos de estas últimas son las leyendas de
La Patasola y El Mohán.
La novela
La novela también pertenece al género narrativo y tiene los mismos momentos y elementos
del cuento. La novela tiene una acción principal, pero alrededor suyo los elementos son
extensos y variados. Los personajes de la novela, por ejemplo, tienden a ser más
numerosos. Incluso, si los personajes son muy pocos, cada uno tiene diversos puntos de
vista sobre un hecho en especial. Además, presenta amplias y numerosas descripciones de
tiempos y lugares.
Hasta la acción principal a menudo se deja a un lado, para dar cabida a otras acciones
menores. Se dice que la novela es más extensa en comparación con el cuento, que es más
rápido y breve.
La fábula y la personificación
El ser humano necesita representar sus defectos de alguna manera. Por esta razón, algunos
escritores crean historias fantásticas con nuestros defectos más comunes. Estas narraciones
reciben el nombre de fábulas. Ellas hablan de los defectos y de las conductas de las
personas, pero no lo hacen directamente. En cambio, ocultan sus enseñanzas
representándolas con personajes y situaciones imaginarias.
Las fábulas emplean todo tipo de personajes, desde seres humanos hasta dioses. En las
más conocidas, los personajes son animales u objetos, a los cuales se les otorga
características humanas.
Las fábulas, además, suelen iniciarse o finalizar con una moraleja, es decir, con una frase o
un refrán popular donde está consignada una enseñanza.
La crónica
La crónica como género literario, la crónica puede servir a ciertos autores con una estructura
clara para contar una historia ficticia que roza la realidad. Existen muchos escritores que han
cultivado el género, algunos de forma asombrosa y que han permitido que se asienten las
bases de este tipo de texto literario. Un ejemplo es la obra de Gabriel García Márquez
(importante referente del realismo mágico latinoamericano) “Crónica de una muerte
anunciada”.
La anécdota
Una anécdota es un cuento corto que narra un incidente interesante o entretenido, una
narración breve de un suceso curioso, triste o divertido, algo que se supone que le haya
pasado a alguien o a uno mismo.
Siempre está escrita como si se trataran de hechos reales, por ejemplo un accidente con
personas reales como personajes, en lugares reales. No obstante y con el correr del tiempo,
las pequeñas modificaciones realizadas por cada persona que la cuenta pueden derivar en
algo con mucho de ficción, que sigue siendo contada pero en general que tiende a ser más
exagerada.
IMPORTANCIA
Ejemplo de anécdota
Creo que el momento que pase más vergüenza en mi vida fue un día que fui al cine con
unas amigas, era un estreno del momento no recuerdo cual, lo que si se quedó gravado en
mi mente fue a la hora de entrar, íbamos todos en tropel y echando unas risas cuando me
caí al no ver el escalón que tenía delante, me quede de rodillas en medio de la entrada del
cine, la gente pasaba a mi alrededor mirándome extrañada, y yo no me podía levantar de la
risa que tenía, mis amigas se retorcían de verme allí de rodillas y con unos lagrimones.
Los diálogos en los que participamos reflejan nuestros gustos, educación, cultura, forma de
ser. Por los diálogos un buen interlocutor puede descubrir nuestra personalidad.
El diálogo en una narración debe ser natural, es decir, debe estar acorde con el carácter, el
ánimo, la cultura, el medio y las circunstancias del personaje. Una narración en la que todos
los personajes hablan de forma correcta y elegante, sin serlo, es difícil de creer. Los
campesinos, los citadinos, los obreros, los ejecutivos, cada grupo tiene su propia manera de
pensar y de hablar.
Los diálogos, igualmente, deben ser significativos. Es decir, deben expresar aspectos
esenciales del carácter del personaje y, al mismo tiempo, importantes para la acción. Si una
narración se empeña en transcribir todos los comentarios distraídos de los personajes se
tornará lenta y aburrida.
En los diálogos se emplean guiones largos para marcar las intervenciones de los personajes.
Una vez definido su papel, debes precisar sus rasgos físicos y psicológicos. Para crear los
rasgos físicos, debes tener en cuenta su estatura, su peso, las facciones de su rostro, alguna
señal particular, y le agregas la forma como se viste y se mueve y el timbre de su voz. Los
rasgos psicológicos incluyen su carácter, sus costumbres, sus gustos, sus opiniones y su
manera de comportarse.
El texto descriptivo
El texto descriptivo, oral o escrito, es aquel que describe algún tema, y consiste en
representar con palabras el aspecto o apariencia de una persona, animal, objeto, paisaje,
lugar, cosa, etc...
Los textos descriptivos se dividen en dos grandes grupos: los descriptivos objetivos y
descriptivos subjetivos. Ejemplos de textos descriptivos objetivos están los textos científicos,
técnicos, sociales y manuales. Ejemplos de textos descriptivos subjetivos son los textos de
opinión, de publicidad, poemas, novelas, canciones y crónicas.
Estructura
Introducción: aquí es donde se identifica el objeto que será descrito, ya sea una persona,
situación, etc. El lector u oyente ya tiene una parte de la información a la que ha de prestar
atención.
Desarrollo: también conocido como nudo, aquí se comienza a describir con gran
profundidad el objeto descrito. Se presentan aspectos más generales y otros más
detallados, pudiendo caracterizarlo de forma más o menos objetiva o subjetiva.
Conclusión: se realiza una especie de resumen de la descripción para cerrar la
caracterización del objeto, ser, animal, etc.
Algunos ejemplos de los tipos de textos literarios descriptivos que existen son:
- Observar bien el objeto a describir, intentar descubrir que es aquello que queremos
describir y que características tiene
- Ordenar las ideas teniendo en cuenta como queremos presentar aquello que
queremos describir. De lo más general a lo más específico o de lo más importante a
lo menos importante
- Presentar aquello que hemos descrito en las dos primeras frases
Las cactáceas son plantas de la familia de las suculentas. Son originarias de América pero
también se encuentran en África y Madagascar. Son de tamaño mediano, grande o pequeño.
En su interior contienen gran caudal de sábila como reserva de líquido dado que son plantas
que se encuentran en climas desérticos (secos).
El perro de Ana es un perro grande, de color negro. Raza mestiza. Tiene todas las vacunas
al día. Se llama “Puppy” y tiene 14 años. Es muy obediente aunque ya está un poco sordo.
Como es muy mayor de edad, él duerme todo el día.
Las nubes nos dan una sensación de inestabilidad y de eternidad. Las nubes son —como el
mar— siempre varias y siempre las mismas. Sentimos mirándolas cómo nuestro ser y todas
las cosas corren hacia la nada, en tanto que ellas —tan fugitivas— permanecen eternas. A
estas nubes que ahora miramos las miraron hace doscientos, quinientos, mil, tres mil años,
otros hombres con las mismas pasiones y las mismas ansias que nosotros. Cuando
queremos tener aprisionado el tiempo —en un momento de ventura— vemos que van
pasado ya semanas, meses, años. Las nubes, sin embargo, que son siempre distintas en
todo momento, todas los días van caminando por el cielo. Hay nubes redondas, henchidas
de un blanco brillante, que destacan en las mañanas de primavera sobre los cielos
traslúcidos. Las hay como cendales tenues, que se perfilan en un fondo lechoso. Las hay
grises sobre una lejanía gris. Las hay de carmín y de oro en los ocasos inacabables,
profundamente melancólicos, de las llanuras. Las hay como velloncitas iguales o
innumerables que dejan ver por entre algún claro un pedazo de cielo azul. Unas marchan
lentas, pausadas; otras pasan rápidamente. Algunas, de color de ceniza, cuando cubren
todo el firmamento, dejan caer sobre la tierra una luz opaca, tamizada, gris, que presta su
encanto a los paisajes otoñales.
GRAMÁTICA
El complemento indirecto indica la persona, animal o cosa sobre la que la acción recae
indirectamente. Para reconocer un complemento indirecto, podemos hacernos las
preguntas: ¿a quién...? o ¿para quién...? Observa el ejemplo: Carolina le lanzó la pelota a
la capitana del equipo. ¿A quién le lanzó la pelota Carolina? A la capitana del equipo
Complemento indirecto
Las personas creían en los unicornios en otra época. ¿Cuándo las personas
Creían en los unicornios? En otra época.
El sustantivo y el adjetivo
Los sustantivos nombran personas, animales, cosas o ideas. Los sustantivos se dividen en:
concretos, que nombran todo aquello que se puede ver y tocar, como: escritorio, silla;
abstractos, que nombran ideas, fenómenos o cualidades, por ejemplo: solidaridad; comunes
que nombran cosas sin distinguirlas unas de otras, y propios, que nombran animales y
personas distinguiéndolas por su nombre, por ejemplo: Daniel.
Las palabras que clasifican y acompañan a un sustantivo se llaman adjetivos. Los adjetivos
se dividen, según su grado, en: superlativos, que expresan una característica llevada al
máximo, como: pequeñísimo, buenísimo o hermosísimo; comparativos, que sirven para decir
si un sustantivo es igual, mayor o menor que otro sustantivo. Por lo general, se forman
poniendo el adjetivo entre las expresiones tan y como, y positivos que expresan una
cualidad, por ejemplo: Superman es fuerte, veloz y bueno.
Los verbos en modo subjuntivo expresan creencias, deseos, dudas, en fin, todas las
acciones posibles sobre las cuales no se tiene certeza. Siempre van precedidos de que, por
ejemplo: espero que hayas hecho la tarea. Los verbos pueden expresarse también en
modo indicativo cuando se nombran acciones reales, sin importar si se realizan en el
presente, en el pasado o en el futuro. Por ejemplo: has hecho la tarea. Por último, existe el
modo imperativo, con él expresamos órdenes, por ejemplo: ¡haz la tarea!
El tiempo, expresa cuándo se realizan las acciones: presente, pasado o futuro. Por ejemplo:
hago la tarea, hice la tarea, haré la tarea.
La persona, indica quién realiza la acción. Para ello se utiliza la primera, segunda o tercera
persona. Por ejemplo: Yo hago la tarea, tú hiciste la tarea, él hará la tarea.
En una oración, el punto y la coma se utiliza para separar ideas o frases diferentes o partes
de una numeración, cuando al menos una de ellas tiene comas en su interior.
El punto se usa para hacer una pausa larga al final de una oración o un párrafo, y además
aclaran el sentido de todo el texto.
Existen dos clases de puntos: el punto seguido, que sirve para separar oraciones, y el
punto aparte, que se utiliza para separar párrafos.
Las preposiciones
Las preposiciones sirven para relacionar las palabras, sin importar cuáles sean. Pueden, por
ejemplo, relacionar un verbo con un sustantivo, como cuando alguien dice: "vivo en la luna";
un adjetivo con un sustantivo: “radiante de luz”, o hacer cualquiera otra combinación.
Las preposiciones nunca cambian de forma. No importa cuál sea el accidente de los verbos,
o el género y el número de los sustantivos y adjetivos; ellas siempre se escribirán igual. Por
eso se dice que las preposiciones son invariables.
Las preposiciones son: a, ante, bajo, con, contra, de, desde, en, entre, hacia, hasta, para,
por, según, sin, so, sobre y tras.
Para construir un párrafo no basta con poner juntas su oración principal y sus oraciones
secundarias. Hay que enlazar las ideas de alguna forma para que su lectura nos resulte
fluida y natural. Los conectores son palabras o expresiones que cumplen la función de
conectar oraciones e incluso párrafos enteros de una forma coherente y lógica.
Algunos conectores son: por último, no obstante, de igual forma, por con-siguiente, en
conclusión, posteriormente, a continuación, mientras tanto, en seguida, por ejemplo,
a pesar de, en efecto, aunque, sin embargo, de esta manera.
Tipos de párrafos
Narrativo, descriptivos, Argumentativos, Expositivos, Relativos, Enumeración, Comparación
o contraste, Dialogado y explicativo.
Narrativos:
Llamado también cronológico, está formado por una secuencia de afirmaciones que no
requieren garantía o demostración de sus habilidades. Es típico de una noticia, una crónica
o un cuento en el que se expongan hechos en orden cronológico. Pueden aparecer
conectores de tipo temporal como: después, luego, hace un mes, para comenzar, a
continuación, finalmente, pero la exposición de la secuencia de hechos depende más a
menudo de su posición en el texto.
Descriptivos:
Un párrafo descriptivo potencia el uso de la palabra y presenta una imagen sensorial ante
los lectores-receptores. A través de un párrafo descriptivo, un autor utiliza todos sus sentidos
para delinear los atributos de los objetos y sucesos percibidos. Mientras más detalle aporta
el autor en su delineamiento de lo percibido, mejor será la imagen del lector-receptor sobre
lo descrito.
Ortografía
Usos de la v y b
Se escribe con v las palabras terminadas ava, ave y avo. Por ejemplo: nave.
También se escribe v después de n. Por ejemplo: enviar.
Se escribe con b las palabras que empiezan con bu, bur y bus. Por ejemplo:
buñuelo.
También se escribe con b las terminaciones aba, abas, ábamos y aban.
Por ejemplo: sacaban.
Usos de la s, la c y la z
Se escriben con z las palabras terminadas en eza, excepto: sorpresa, mesa, pesa,
traviesa y Vanesa. Por ejemplo: cabeza, reza, rareza, pereza, nobleza.
Se escribe con c los diminutivos terminados en cito y cita. Por ejemplo:
vie-jecita, pulgarcito.
Por su parte, las exclamaciones directas van entre signos de exclamación, mientras que
las exclamaciones indirectas van introducidas por los verbos mencionados anteriormente
(“querer saber, preguntar…”) y van sin signos de exclamación.
Ejemplos:
Tanto en las oraciones directas como en las indirectas estas palabras van
acentuadas.
¿Adónde vas a ir este sábado? / Me puedes informar adónde vas a ir este sábado
¡Cómo me gusta esta comida! / Él afirma que cómo le gusta esa comida
Ejercicio
Uso de mayúsculas
Nota:
- Al inicio de una oración.
- Al inicio de nombres propios
Por lo general, se emplean como inicial de nombres propios, después de un punto y en las
siglas.
Después de un punto
Como norma general, después de un punto (ya sea aparte o seguido) o cualquier otro
signo que sirva de conclusión de la frase u oración; por ejemplo:
Vete cuando quieras..., querido. [Lleva una coma porque la hubiera llevado también si
no hubieran estado los puntos suspensivos: «Vete cuando quieras, querido»].
Saldré... luego.
En aquel momento me sentí... feliz. [No lleva una coma porque si no hubieran estado
los puntos suspensivos tampoco la hubiera llevado: «En aquel momento me sentí
feliz»].
Un mundo feliz
Cien años de soledad
Las cuitas del joven Werther.
El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha.
Pedro de Mendoza
De Mendoza
Luis d’Elía
el Sr. D’Elía
Si no aparece el nombre sino solo el apellido, la preposición debe escribirse con
mayúscula:
- El presidente De la Rúa
Fernando de la Rúa
De la Rúa, Fernando
- El código Da Vinci
Leonardo da Vinci
Da Vinci, Leonardo