Casos Clinicos Anato
Casos Clinicos Anato
Casos Clinicos Anato
CUSCO – PERU
2019
CASOS CLINICOS
ESCAPULA ALADA
• Trapecio alado
La escápula alada es una lesión rara causada por la alteración del balance neuromuscular
de la cintura escapular.
Su etiología es variada. La causa primaria más frecuente es la parálisis del serrato
anterior por lesión del nervio torácico largo (por neurapraxia), y la causa secundaria, la
patología glenohumeral.
Los pacientes compensan la falta de movimiento escapulo humeral a expensas de la
articulación escapulo torácica, que acaba claudicando y produciendo la deformidad.
La escápula se encuentra estabilizada en la pared torácica mediante el músculo serrato
mayor, inervado por el nervio torácico largo; si éste resulta lesionado, se producen
debilidad de la musculatura proximal del miembro superior, dolor y protrusión de la
escápula con los movimientos.
Lesión por: trauma, contuso, penetrante, tracción
El pronóstico es favorable. En los casos cuya causa es la neurapraxia del nervio, se suele
producir la recuperación completa tras 6-9 meses de tratamiento conservador.
El tratamiento quirúrgico está indicado cuando, tras un manejo con rehabilitación
adecuado, el cuadro no se resuelve o cuando ha habido un traumatismo penetrante.
Las técnicas quirúrgicas utilizadas consisten en neurólisis, injertos o trasposiciones
musculares (la más frecuente es la del pectoral mayor).
Anamnesis
Pruebas complementarias
• RM: normal.
• EMG: patrón neurógeno subagudo dependiente de C5-C6-C7 con neuralgia amiotrófica
del hombro derecho (síndrome de Parsonage-Turner).
Diagnostico
Escápula alada por parálisis del nervio torácico largo derecho.
Tratamiento
El paciente es tratado de forma conservadora con ejercicios de rehabilitación.
Evolución
La evolución a los 6 meses es favorable. A los 9 meses, se observa la total recuperación
motora, sin que el paciente presente ninguna secuela que limite sus actividades de la vida
diaria.
LUXACIÓN ACROMIOCLAVICULAR
CASO CLÍNICO
Varón de 26 años de edad, sin antecedentes personales de interés, que acude al Servicio
de Urgencias tras sufrir un traumatismo directo sobre el hombro derecho mientras
practicaba deporte.
EXAMEN FÍSICO
DIAGNOSTICO
EVOLUCION
Mujer de 70 años de edad que hace 5 años fue diagnosticada de una artropatía por rotura
del manguito de los rotadores del hombro derecho y que hace 3 años sufrió un episodio
de luxación glenohumeral anteroinferior en el mismo lado. Acude al Servicio de
Urgencias tras haber sufrido un nuevo traumatismo en el hombro derecho. Refiere dolor
e impotencia funcional en ese nivel, además de disestesias y dolor insidioso en toda la
extremidad superior.
EXAMEN FÍSICO:
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS:
Angio-TC (fig. 1), tras proceder a la reducción: trombosis en el tercio distal de la arteria
axilar derecha con un seudoaneurisma de 1 cm de diámetro y un importante hematoma
de partes blandas con varios puntos de sangrado activo.
DIAGNOSTICO:
TRATAMIENTO:
Al día siguiente de la cirugía, la paciente presenta una paresia del plexo braquial debido
a una neuroapraxia en relación con una compresión del hematoma. Dos meses más tarde,
la recuperación de la movilidad y de la fuerza de la extremidad superior derecha es
completa y la paciente presenta pulsos distales normales. En una angio-TC de control se
observa el buen estado de la reparación de la arteria axilar.
Anamnesis
Examen Físico
Pruebas Complementarias
Diagnóstico
Necrosis de la cabeza humeral derecha secundaria a fractura del tercio proximal humeral
osteosintetizada.
Tratamiento
El caso es sometido a sesión clínica y se decide, de acuerdo con el paciente, realizar una
cirugía de revisión (extracción del material de osteosíntesis y colocación de artroplastia
inversa de hombro).
Evolución
A los tres meses, presenta una fuerza de 3 sobre 5, con una abducción de 70º y elevación
de 95º y ausencia del dolor a la movilización.
Discusión
La prótesis invertida tiene como indicación mas frecuente, la artropatia glenohumeral por
deficit o rotura del manguito de los rotadores. Varias publicaciones presentan series de
artroplastia de revisión (artroplastia anatómica aflojada, hemiartroplastia inestable, etc,)
tratadas con prótesis invertida. Otros autores han confirmado la utilidad de esta prótesis
en pseudoartrosis de cabeza, tumores y segundo tiempo de infecciones.
En este caso, el déficit funcional crónico del manguito de los rotadores que presentaba el
paciente tras la cirugía de osteosíntesis, el defecto de la glena y la mala calidad ósea del
paciente para a su edad, fueron los determinantes en la elección de la artroplastia
implantada.
FLOATING SHOULDER
INTRODUCCIÓN
El hombro flotante es una lesión poco frecuente, que representa el 0,1% de las lesiones
del hombro. El mecanismo causal suele incluir traumatismos de alta energía por lo que
se debería considerar esta patología en deportes de velocidad, tales como el ciclismo, el
motociclismo o los deportes extremos.
Consiste en una doble lesión del complejo suspensorio superior del hombro. En el caso
que se presenta se produjo una fractura del cuello quirúrgico de la escápula y una
fractura de la clavícula ipsilateral. Existe controversia sobre el tratamiento adecuado de
esta combinación de fracturas por sus posibles complicaciones asociadas como la lesión
del plexo braquial o el retraso o falta de consolidación.
CASO CLÍNICO
Presentamos un caso de un paciente varón de 28 años que acude a urgencias con dolor e
impotencia funcional del hombro izquierdo tras contusión directa lateral en contexto de
caída en bicicleta de montaña durante un descenso.
El paciente acude consciente y orientado, sujetándose el hombro por el codo con la otra
mano.
EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
Se realizó una radiografía anteroposterior de hombro izquierdo que mostró: fractura del
tercio medio de la clavícula y fractura del cuello quirúrgico de la escápula tipo B con un
ángulo glenopolar de 47º(Figura 1). La tomografía axial computerizada (TAC) presentó:
fractura del tercio medio de la clavícula de trazo oblicuo con un tercer fragmento y
fractura desplazada del cuello de la escápula medial a la coracoides (tipo B) sin
compromiso de la superficie articular de la glena.
DIAGNSTICO
TRATAMIENTO
EVOLUCION
La rotura aguda del tendón distal del bíceps braquial es una entidad poco frecuente a
diferencia de la rotura del tendón proximal que supone el 96% de los casos. Provoca una
pérdida de la supinación, flexión y fuerza del codo en el caso de optar por un tratamiento
conservador. La finalidad del tratamiento quirúrgico es el reanclaje anatómico a la
tuberosidad bicipital radial, para ello es imprescindible realizar una correcta exploración
y un diagnóstico precoz para evitar posibles complicaciones como las retracciones
tendinosas o una limitación del balance articular
CASO CLÍNICO
Paciente de 49 años que acude al servicio de urgencias por impotencia funcional a nivel
de miembro superior izquierdo tras realizar un cuadro de hiperextensión forzada mientras
estaba trabajando. Sin antecedentes patológicos ni quirúrgicos de interés. A la
exploración física presenta limitación del balance articular del codo izquierdo, dificultad
para la extensión completa, flexión conservada, pronosupinación limitada. Dolor a la
palpación del tendón distal del bíceps braquial, leve tumefacción y equimosis en fosa ante
cubital, palpándose depresión a nivel de la unión miotendinosa.
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
Radiografia simple de codo, sin hallazgos de fracturas óseas agudas. Ecografia de parte
blandas: No se identifica la imagen normal del tendón bicipital distal, apareciendo un área
de aumento de ecogenicidad con límites mal definidos compatible con edema y/o
hematoma de partes blandas en un área de alrededor 3cm de longitud compatible con
lesión musculotendinosa distal. Ante la sospecha clínica de rotura miotendinosa bíceps
distal versus rotura tendón bíceps distal se solicita resonancia magnética nuclear
preferente que muestra rotura completa del tendón distal bíceps braquial a nivel de la
tuberosidad bicipital radial con retracción de 5 centímetros
TRATAMIENTO
Las roturas tendinosas bíceps braquial distal representa el 3% mientras que las proximales
el 97%. A diferencia de la rotura de la porción proximal, la distal conlleva una
considerable pérdida de la función del codo y antebrazo. Se ha descrito una pérdida del
60% de la fuerza para la flexión y la supinación. Este déficit funcional se puede evitar
con tratamiento quirúrgico. Una detallada historia clínica y una completa exploración son
la clave para el diagnóstico de las roturas tendinosas del bíceps braquial. En la exploración
física el paciente presenta dolor, tumefacción y hematoma a nivel de la fosa antecubital.
El mecanismo de producción es pronosupinación forzada. Existen numerosos factores
que dificultan el diagnóstico: pacientes obesos, con escaso desarrollo muscular o volumen
incrementado del antebrazo. El signo del gancho9 consiste en la exploración del codo
lesionado en flexión de 90º, se realiza una supinación activa mientras el examinador tiene
enganchado con el dedo la porción distal del bíceps braquial en la fosa antecubital desde
la cara lateral del codo. En condiciones normales el tendón está tenso al estirar de él en
flexión y supinación activa. En caso de rotura presenta ausencia de tensión. Tiene una
sensibilidad del 100% y especificidad del 92%. Una segunda maniobra útil que nos puede
ayudar en la exploración física sería: se sienta al paciente, se le colocan ambos codos en
flexión de 90º pegados a ambos costados y se realiza pronosupinación activa. En caso de
lesión aguda se observa como el vientre muscular del bíceps se desplaza hacia arriba y
abajo con los movimientos de rotación del antebrazo en el lado sano.
FRACTURA DE ANTEBRAZO
Anamnesis
Mujer de 24 años de edad, sin antecedentes de interés, que acude al Servicio de Urgencias
tras sufrir una caída casual de su bicicleta mientras paseaba; al caer apoya su miembro
superior derecho sobre el suelo
Examen físico.
La actitud del miembro superior afecto es en flexión del codo y pronación del antebrazo,
y está sujeto por el miembro superior contralateral.
Pruebas complementarias
Rx: Anteroposterior (AP) y lateral del antebrazo derecho, del codo y de la muñeca-mano
(realizadas en Urgencias): luxación posterior del codo, fractura bifocal del radio
(transversa en la unión del tercio medio con el distal y fractura conminuta metafisaria
distal), fractura transversa del cúbito en la unión del tercio medio con el distal y fractura
del cuello del quinto metacarpiano.
Diagnóstico
Traumatismo múltiple del antebrazo: fractura bifocal del radio (diafisaria y conminuta de
la extremidad distal), fractura diafisaria del cúbito y luxación posterior del codo
Tratamiento
Se inmoviliza con férula braquiopalmar con flexión del codo a 90-100º, dada la tendencia
de éste a luxarse en extensión.
Evolución
Discusión
Las fracturas diafisarias de ambos huesos del antebrazo requieren una reducción
anatómica estricta, especialmente en el plano rotacional, si se quiere obtener un buen
rango de movilidad en pronación y supinación. Además, existen fuerzas deformantes por
las inserciones musculares en estos huesos, las cuales hacen que el mantenimiento de la
reducción cerrada sea difícil, por lo que, generalmente, hacen necesario realizar
tratamiento quirúrgico en el paciente adulto. Los implantes clásicamente aceptados son
las placas DCP de la AO de 3,5 mm1, que permiten, además, una movilización precoz.
Actualmente, existen variantes mejoradas de estas placas con bajo contacto limitado (LC-
DCP).
Las fracturas bifocales de uno o ambos huesos del antebrazo no son frecuentes y, cuando
se dan, suelen presentarse en ambos trazos diafisarios, lo cual permite su reconstrucción
con placa larga a compresión3 como técnica de elección. En el caso presentado, la fractura
bifocal del radio añadía la dificultad técnica de que el trazo distal era metafisario
conminuto y articular, no diafisario, lo cual dificultaba realizar la reconstrucción con una
placa única larga. Por eso, optamos por hacerlo como si se tratara de dos fracturas
independientes (primero abordamos la más proximal), con una placa DCP y, una vez
restaurada la anatomía del radio, procedimos a la reconstrucción de la fractura metafisaria
conminuta, como haríamos con cualquier fractura de la extremidad distal del radio, con
placa volar anatómica.
La luxación del codo asociada supone que probablemente la caída sobre la mano se
produjera con el codo parcialmente extendido.
Se trata de una luxación simple, ya que no asocia fracturas y, en éstas, el pronóstico suele
ser favorable, especialmente cuando la movilización del codo se realiza de la forma más
temprana posible.
SINDROME DE WARTENBERG
ANAMNESIS:
Varón de 66 años de edad que consulta en julio de 2010 por presentar hiperalgesia en la
cara dorsorradial del antebrazo y del pulgar izquierdos. Entre sus antecedentes personales,
destaca que el paciente fue intervenido en 2007 para la realización de una derivaciaón
(bypass) coronaria, para lo que se utilizó la arteria radial. En el postoperatorio inmediato
presentó una paresia radial con recuperación posterior completa.
EXAMEN FÍSICO:
A la exploración, se evidencia una cicatriz en la cara volar radial del antebrazo izquierdo
de 15 cm. El signo de Tinel es positivo en la cara volar proximal a la apófisis estiloides
radial. El paciente presenta disestesias en la cara radial del antebrazo y del pulgar, sin que
exista déficit motor. La maniobra de Finkelstein es negativa. La repleción capilar distal
es correcta y el pulso cubital está presente.
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS:
DIAGNOSTICO:
TRATAMIENTO:
Se programa la cirugía para la primera semana de marzo de 2011. Al realizar una incisión
sobre la cicatriz previa, se evidencia una importante fibrosis en el lecho quirúrgico. Se
diseca sin dificultad la porción proximal de la rama sensitiva superficial del nervio radial.
Se objetiva el atrapamiento de la porción distal por la fibrosis posquirúrgica entre el
tendón del músculo brachioradialis y el del extensor carpi radialis longus (fig. 1). Se
procede a la liberación del nervio sin incidencias
EVOLUCION:
DISCUSION:
en la zona inervada por este nervio (cara dorsal de la primera comisura). El test dinámico
de sensibilización de Dellon (empeoramiento de la clínica con la pronación forzada) es
positivo en el 80% de los pacientes1.
Anamnesis
Varón de 27 años de edad, politraumatizado, que ingresa en Urgencias de nuestro hospital
traído por los Servicios de Emergencias tras sufrir un accidente de tráfico: la motocicleta
que conducía colisionó frontalmente con un coche
Examen Fisico
Pruebas complementarias
Diagnostico
Tratamiento
Discusión
El codo flotante se define como la fractura del húmero y del antebrazo ipsolaterales,
suponiendo que existe una lesión extraordinariamente grave. Se clasifica en tres grados
en función de la gravedad de la lesión: 1) grado I, codo flotante sin lesión articular; 2)
grado II, con luxación radio cubital distal, y 3) grado III, con fractura articular del húmero
distal (caso descrito).
SÍNTOMAS
Dolor intenso en el momento de la lesión.
Dolor e hinchazón alrededor del primer nudillo del cuarto o quinto dedo.
Hematoma (contusión) en la zona dentro de las 48 horas de la lesión.
Deformidad visible como la pérdida de la prominencia normal del nudillo, si la
fractura es completa y los fragmentos de hueso se separan lo suficiente para
distorsionar el contorno normal.
Adormecimiento o parálisis por la hinchazón de la mano, que causa presión en
los vasos sanguíneos o en los nervios (no es frecuente).
CAUSAS
POSIBLES COMPLICACIONES:
ANAMNESIS:
Mujer de 87 años de edad, independiente para las actividades básicas de la vida diaria y
con antecedentes personales de asma bronquial en tratamiento con corticoides inhalados,
que en marzo de 2011 acude al Servicio de Urgencias de Traumatología tras sufrir una
caída casual desde su altura. Presenta un traumatismo sobre el codo derecho, tumefacción,
deformidad e impotencia funcional.
EXAMEN FÍSICO:
PRUEBAS COMPLEMENTARIAS:
DIAGNOSTICO:
TRATAMIENTO:
DISCUSION:
Las fracturas del húmero distal tienen una incidencia relativamente baja en adultos (0,5%
de todas la fracturas), aunque actualmente se encuentran en aumento. Pueden deberse a
traumatismos de alta energía en el adulto joven o de baja energía en el anciano con hueso
osteoporótico.
BIBLIOGRAFIA
1. Frankel MA, Hersocovici D Jr. A comparison of open reduction and internal fixation
and primary total elbow arthroplasty in the treatment of intraarticular distal humerus
fractures in women older than age 65. J Orthop Trauma. 2003; 17: 473-80.
7. Dang AC, Rodner CM. Unusual compression neuropathies of the forearm, Part I:
Radial Nerve. J Hand Surg. 2009; 34A: 1906-14.
9. Duparc F, Duparc J. Shoulder prosthesis: generalities and main desings. Sugical techniques in
orthopaedics and traumatology. París; Elsevier Masson; 2000.
10. Mora Guix JM, González AS, Brugalla JV, Carril EC, Baños FG. Proposed protocol for reading
images of humeral head fractures. Clin Orthop Relat Res. 2006; 448: 225-33.