El Hombre de Las Ratas
El Hombre de Las Ratas
El Hombre de Las Ratas
Facultad de Psicología
Modulo: Psicoanálisis
Aula:214 Gpo:011
Síntomas:
El problema del onanismo se hace insoluble cuando se quiere considerar a este como una
clínica y se olvida que representa la derivación de los diversos componentes sexuales y
fantasiosas alimentadas por la misma.
El paciente posee temores de que le suceda algo a su padre y a una mujer. Da cuenta del
inicio del onanismo adolescente a los 16 años y de su primer coito a los 26 años de edad. El
hombre de las ratas consulta después de haber leído “Psicopatología de la vida cotidiana”,
publicado en 1901. Había intentado diversas curas y al decir del paciente, la única
provechosa, fue un tratamiento de aguas; debido a que en ese lugar había trabado relación
con una mujer con la cual sostuvo relaciones sexuales regulares.
Freud plantea que ya se figura una neurosis obsesiva completa y no falta ningún elemento
esencial: componente pulsional sexual-placer de ver-deseo de ver mujeres desnudas.
Sublevación -sentimiento penoso de mal agüero-idea supersticiosa de que algo malo va a
pasar. Temor obsesivo-muerte del padre “si yo deseo ver desnuda a una mujer mi padre tiene
que morir”. Sentimiento penoso-medidas protectoras-impulsos para sustraerse de la
desgracia. Delirio-los padres sabrían sus pensamientos. A partir de esto, Freud conjetura que
antes de los 6 años hubo traumas y vivencias, que, aunque cayeron en la amnesia, dejaron
residuos que se manifiestan a posterior en el temor obsesivo.
En el gran temor obsesivo habla de una vivencia ocurrida durante unas maniobras
militares en X, donde un capitán checo habría descrito una tortura practicada en Medio
Oriente que involucraba ratas (ratten). Con “horror y resistencia” explica que sobre el trasero
del torturado se pone un tarro con ratas que penetran en el ano. Tras esta explicación el
paciente dice que cuando le contaron la tortura, le vino a la mente que eso le sucede a una
persona amada. El paciente agrega que ha imaginado esto también en su padre.
comenta que se tiene por una persona ética, pero que durante su infancia ha hecho
cosas que partían de “la otra persona”. Cuenta que a los 12 años amaba a una niña, pero ella
no le correspondía; no era lo suficientemente tierna. Se le viene la idea de que ella le mostraría
amor si a él le ocurre una desgracia, muerte del padre, idea que rechaza rotundamente. Aún,
en la terapia se defiende ante la idea de que la muerte del padre pueda ser manifestación de
un deseo, pues su padre es la persona más amada para él. Freud da cuenta de que
efectivamente es un deseo reprimido, lo que armoniza con que el inconsciente es lo opuesto
contradictorio de lo consciente, el amor intenso es la condición del odio reprimido.
modelo del padre a la mujer rica. Frente a este conflicto amor-voluntad del padre, el
paciente se sustrae de la realidad objetiva enfermándose, aparece como consecuencia la
imposibilidad de terminar sus estudios, sin embargo, la consecuencia de la enfermedad es la
causa del devenir enfermo. Con la ayuda de una fantasía de transferencia y de un sueño en
análisis, se ratifica el conflicto de la elección de objeto. El Complejo Paterno y la solución
de la idea de las ratas. El conflicto de la enfermedad es una querella entre la voluntad del
padre y su inclinación amorosa. Este conflicto se remonta a la niñez de Paul, donde el padre
juega un papel de perturbador del erotismo del hijo, de esta manera, la satisfacción sexual
queda ligada a la muerte del padre. Varios años después de la muerte del padre, cuando el
paciente experimentó el placer de su primer coito se le vino la idea: “¡esto es grandioso!, a
cambio de ello uno podría matar a su padre”
absurdo e incumplible, donde piensa que, si su padre y su amada tienen hijos,
devolverá el dinero al teniente A. Es a partir de esa afirmación absurda que se cumple la
blasfemia contra las personas amada; es desde ahí que surge el castigo, una imposición de un
juramento incumplible: pagar los quevedos a A. La idea de que la tortura de las ratas se
cumpla en el padre y la amada, proviene de teorías sexuales infantiles, a saber, que los hijos
nacen por el ano y que los hombres pueden tener hijos al igual que las mujeres. Si bien la
solución de las ratas es compleja, es difícil pensar que esto no sea así para ideas obsesivas
tan graves. Con este esclarecimiento, Freud refiere que quedó eliminado el delirio de las ratas
Una posición erótica y una sublevación contra ella, un deseo, aún no obsesivo, y un
temor, Ya obsesivo, que lo contraria, un afecto penoso y acciones defensivas contra él, idea
delirante sobre la adivinación de su pensamiento.
La “regresión” del actuar al pensar, Freud la explica a partir de la represión que se ejerce en
la sexualidad infantil y sobre su temprana emergencia, la cual, trae como consecuencia que
el niño sexualice su pensamiento y obtenga placer a partir de éste. Por otra parte, los
pensamientos obsesivos al hacerse conscientes siempre aparecen desfigurados, lo cual
dificulta el acceso a la idea obsesiva que impera detrás. Esta dificultad se explica por dos
factores: primero, la situación patógena y la idea obsesiva no se presentan en el mismo
tiempo; y segundo, el contenido de la idea obsesiva tiende a generalizarse en el pensamiento
obsesivo. Finalmente, Freud, a partir de este caso refiere que lo característico de la neurosis
obsesiva ha de buscarse en las constelaciones psicológicas del paciente más que en la vida
pulsional, dado que lo que observó en Paul es que estaba fragmentado en tres personalidades:
una inconsciente, relacionada a las mociones sofocadas tempranamente y dos preconscientes:
entre las cuales oscilaba su consciencia sustentando diversas cosmovisiones.
Conclusión
El “El Hombre de las Ratas”, es un caso exitoso en la obra de Freud, en tanto que el paciente
logra restablecer su personalidad, pudiendo realizar su vida en forma normal. Junto con ello,
a partir de este caso, Freud logra también dilucidar variadas incógnitas sobre la neurosis
obsesiva, particularmente sobre su génesis, sus características y la formación de síntoma, no
obstante, plantea que sigue habiendo enigmas en torno a ella, quedando entonces la puerta
abierta a otros a la investigación, sin embargo, a nuestro parecer, el esclarecimiento que Freud
logra de la neurosis obsesiva a través de este caso tiene una vigencia asombrosa en la
actualidad.
Realmente el psicoanálisis es un n