ttv-1 - Intro Teoria Trafico PDF
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Generan a
corto plazo
A T
Cambios a Cambios a
largo plazo F mediano plazo
Donde:
Generan a
corto plazo
A T
Cambios a Cambios a
largo plazo F mediano plazo
Manifestación
TRÁFICO
Calidad
Donde:
1
Según el Diccionario de la RAE, ambos términos son sinónimos. En lo que sigue, se usarán indistintamente.
Ruido: emisión de vibraciones sonoras y físicas.
Segregación: aumento del tiempo y distancia de cruce de cauces vehiculares.
Intimidación: disminución del uso del espacio público para otros fines.
Intrusión visual: reducción del campo visual por vehículos o infraestructuras.
Hay que hacer notar, sin embargo, que la “congestión” es un concepto vago. Pero tiene una
manifestación física: demoras, colas y detenciones. Estas son susceptibles de medirse en
la calle o predecirse con modelos matemáticos. Por lo tanto, decir que “hay congestión” en
una calle o que cierta intersección de calles está “congestionada” sólo tiene sentido si las
demoras, colas y detenciones que allí se producen exceden un cierto umbral. Más adelante
veremos cómo definir este umbral.
Dependiendo a la forma y razón por la cual se producen los conflictos de tráfico, se pueden
clasificar en tres tipos:
a) Conflictos concurrenciales.
b) Conflictos direccionales
c) Conflictos funcionales.
La solución a los conflictos requiere una buena regulación. Es decir, bajo qué reglas
operará un determinado dispositivo vial. Por ejemplo, qué movimiento tendrá prioridad en
una intersección o cuánto tiempo de verde se le asignará a cada movimiento. El diseño de
esta regulación debe ser eficiente y seguro. Para ello es necesario, en primer lugar, estudiar
el desarrollo de los conflictos.
a) Conflictos concurrenciales
b) Conflictos direccionales
c) Conflictos funcionales
Para “ver” la circulación (movimiento) se requiere, además, del eje temporal. Entonces, el
tráfico se verificará en una “ventana” espacio-temporal. La Figura 1.4 muestra cómo
observar el tráfico de un conjunto de vehículos circulando a distintas velocidades en un
tramo de longitud L y durante un período T.
s Observación Observación en
espacial movimiento
A
L
B
s0 Observación
temporal
T
t
t0
Figura 1.4. Representación del tráfico en el espacio (s) y el tiempo (t)
Como se muestra en la figura, el tráfico puede ser observado desde tres puntos de vista:
Flujo (q). También se suele referir como volumen. Es la cantidad n de vehículos que
pasan por el punto s0 durante el período T. Usualmente, se expresa en vehículos por
hora [veh/h], lo que no implica necesariamente medir durante una hora.
n
q (1.1)
T
1
vt vi
n i
(1.2)
1 T 1
h
n i
hi
n q
(1.3)
Por consiguiente, el intervalo medio equivale al inverso del flujo que pasa por un punto
de la vía en un período T.
n'
k (1.4)
L
Velocidad media espacial (vs). Se calcula a partir del promedio de los tiempos ti de viaje
que le toma a cada vehículo recorrer un tramo L, en [km/h].
L L 1 1
vs (1.5)
1 1 ti 1 1
t
n' i
ti
n' i L n'
i vi
1 L 1
s
n' i
si
n' k
(1.6)
Tiempo
hnhn hi h2 h1
sn’ si s2 s1
Espacio
Figura 5. Intervalos y espaciamientos en una corriente de tráfico
En la Figura 1.5 las dimensiones espaciales (L, si) y temporales (T, hi) no son coincidentes.
Se ha forzado el dibujo para resumir ambas en una sola figura. La Figura 1.6 esquematiza
otras definiciones.
Intervalo o headway: h
Velocidad: v
Espaciamiento: s
Figura 1.6: Definiciones de variables entre vehículos
Resulta obvio que en una corriente de tráfico no todos los vehículos circulen a una misma
velocidad. Existirán, por lo tanto, distribuciones de velocidades (Figura 1.7).
q(v)
q(vj)
v
vj
k(v)
k(vj)
v
vj
Figura 1.7. Distribuciones de velocidades
En la figura, k(vj) es el número de vehículos avistados a lo largo de un tramo que tienen
velocidad vj. Del mismo modo, q(vj) es la cantidad de vehículos observados en un período
que llevan velocidad vj. Luego:
q (v j )
q q (v j ) 1
j j q
(1.7)
k k v j
k (v j )
j
j k
1
q (v j )
p t (v j )
q
p (v
j
t j ) 1 ; p t (v j ) 0 , j
(1.8)
k (v j )
p s (v j )
k
p (v
j
s j ) 1 ; p s (v j ) 0 , j
v t v j p t (v j )
j
(1.9)
v s v j p s (v j )
j
distancia s j
vj (1.10)
tiempo hj
q (v j ) q (v j )
vj k (v j ) (1.11)
k (v j ) vj
k (v j ) 1 q (v j ) 1 q
v s v j p s (v j ) v j vj q (v j ) (1.12)
j j k k j vj k j k
Se obtiene así la denominada Ecuación Fundamental del Tráfico, que se expresa como:
q kvs (1.13)
Existe cierta tentación a usar la ecuación fundamental – y sus derivaciones – para describir
el tráfico urbano. Lo anterior no es aconsejable, ya que la presencia de intersecciones
cercanas genera pelotones de vehículos que se desplazan por las vías urbanas. Estos
pelotones pueden dispersarse en alguna medida a lo largo de las vías, pero no llegan a
configurar un fenómeno de tráfico continuo, que es el supuesto subyacente a este modelo.
q (v j )
k (v j ) q (v j ) v j k (v j )
vj
q (v j ) k
p t (v j ) q(v j ) q pt (v j ) q pt (v j ) v j k p s (v j ) pt (v j ) v j p s (v j ) (1.14)
q q
k (v j )
p s (v j ) k (v j ) k p s (v j )
k
1
p t (v j ) v j p s (v j ) (1.15)
vs
1 1
v t v j p t (v j ) v 2
j p s (v j ) E s (v 2 ) (1.16)
j vs j vs
Es decir, en general, la velocidad media temporal será mayor que la espacial. Para que sean
iguales, la varianza de las velocidades espaciales debería tender a cero. De allí la
importancia de saber cómo se midió la velocidad para calcular el valor promedio de la
forma apropiada. No da lo mismo medir velocidades con radar y promediarlas
aritméticamente, que medir tiempos de viaje en un tramo, promediarlos y de allí obtener la
una velocidad media (¿Qué se obtiene en cada caso?).
La ecuación q = kvs establece una relación entre tres de variables de estado del tráfico.
Como tal, definirá un plano que describe su comportamiento. Sin embargo, es posible
reducir esta descripción tridimensional estableciendo relaciones entre pares de estas
variables.
Relación velocidad-concentración
v1
k1
v2
k2
k1 < k2 v1 > v2
El valor mínimo que puede tomar k es que no haya ningún vehículo en el tramo; es decir,
kmin = 0. La máxima cantidad serán los vehículos que caben en el tramo haciendo cola uno
en pos del otro con una separación mínima entre ellos. A esta cantidad se le llama
concentración de embotellamiento (ke). Luego:
L
ke (1.18)
Donde L es la longitud del tramo y es la longitud promedio que ocupa un vehículo. Por
ejemplo, si = 6 m, en un kilómetro de vía cabrán 167 vehículos. O sea, ke = 1000/6 = 167
[veh/km].
k
v s vl 1 (1.19)
ke
vs
Curva real
vl
Supuesto
k
0 ke
Relación flujo-concentración
Habiendo establecido una relación vs(k) se usa la ecuación fundamental para obtener esta
otra relación. En efecto, como q = kvs y vs = vs(k), entonces, q = q(k). Luego, usando la
relación lineal para vs:
vl 2
q vl k k (1.20)
ke
Es decir, la función q(k) es una parábola invertida que corta el eje de las abscisas en k = 0 y
k = ke. Es fácil ver que el vértice de la parábola se encuentra en k = ke/2 (Figura 1.10).
k
0 ke/2 ke
Una propiedad importante de la circulación que se deriva de la relación q(k) es que existe
un valor máximo para el flujo. Este máximo es la capacidad (Q), definida como el máximo
número de vehículos por unidad de tiempo que puede pasar por una sección de una vía,
bajo las condiciones prevalecientes del tráfico. Por esta razón el diagrama q(k) se
denomina el diagrama fundamental.
vl k e
Q (1.21)
4
Obsérvese que Q depende de los parámetros vl y ke definidos en la relación vs(k). Por ende,
la capacidad dependerá de las siguientes condiciones (¿Cuáles se asocian a vl y cuáles a
ke?):
q vq
v s vl 1 vl l (1.22)
vs k e vs k e
vl q
Multiplicando ambos miembros por vs y reordenando se llega a: v s2 vl v s 0
ke
v q
vl vl2 4 l
k e vl 1 2 4 vl q
vs vl 1 q 1 1 (1.23)
Q
2 2 2 vl k e 2
A B
vl C
vl/2 E
F
q
0 Q
La relación v(q) suele usarse en el Highway Capacity Manual (TRB, 2000) para definir
niveles de servicio en tramos de vía, como se muestra en la Figura. Estos niveles se
identifican por sectores de la curva v(q) en los cuales el tráfico presenta ciertas
características. El nivel A corresponde a un tráfico fluido, el E (un punto de la curva, no un
tramo) representa la capacidad, y el F una condición de tráfico forzado e inestable.
Ha habido varios intentos para establecer una relación v(q) empírica (ver TRB, 1992). Una
de ellas es la propuesta por el Traffic Appraisal Manual, Department of Transport, UK
(Ortúzar and Willumsen, 1990).
vl ; si q q1
v v1
v s vl l q q1 ; si q1 q Q (1.24)
Q q1
v1
; si q Q
1 v1 q 1
8d Q
Donde:
La forma de esta relación v(q) no es parabólica, sino por tramos, como muestra la figura.
vs
vl
v1
q
q1 Q
De la relación v(q) se puede derivar la relación flujo-demora, t(q) (Figura 1.13), que es
utilizada para estimar tiempos de viaje y para la asignación de tráfico a redes. Su derivación
es directa:
3600
t (1.25)
vs
Al igual que para la relación flujo-velocidad, se han propuesto varias forma para la función
t(q). Una de ellas es la del Bureau of Public Roads (BPR, 1964), donde t0 es el tiempo de
viaje a flujo libre y , son parámetros.
q
t t 0 1 (1.26)
Q
Una curva BPR calibrada en Santiago de Chile en Av. Costanera Andrés Bello en la hora
punta de la mañana arrojó los siguientes valores de parámetros (Martínez, 1984)
Notar que el valor de t0 implica una velocidad de flujo libe de 84,3 km/h en esa vía.
Otros autores (Horowitz, 1991) proveen los siguientes datos del Highway Capacity Manual
(TRB, 2000) para los parámetros y , en función del tipo de vía y velocidad de diseño.
t0
q
Q
La teoría del seguimiento vehicular (car following theory) tiene varios precursores en la
década de 1950, pero su formalización se consolida con el trabajo de Herman et al (1958)
en los laboratorios de General Motors. Consiste en una descripción microscópica de cómo
se comporta un vehículo al ir tras de otro. El objetivo es que mediante esta descripción se
pueda extrapolar el comportamiento macroscópico de toda una corriente de vehículos por
una pista. Al igual que los modelos fluidodinámicos, estudia una corriente de tráfico
continua y confinada a una pista (sin adelantamiento). Posteriores desarrollos (Gipps, 1981
y Gipps, 1986) levantan esta restricción y permiten describir el adelantamiento entre
vehículos. En la figura siguiente se muestra el sistema bajo análisis encerrado por una línea
punteada.
n+1 n 2 1
x
xn+1(t) xn(t) x2(t) x1(t)
La teoría del seguimiento vehicular describe el comportamiento del vehículo n+1 (sucesor)
en función de lo que haga el vehículo n (predecesor). Asume que existe correlación entre
los comportamientos del vehículo predecesor y sucesor cuando el espaciamiento entre
ambos es menor a los 100-125 metros
Se asumirá que el conductor del vehículo sucesor variará su conducta (respuesta) en forma
proporcional al estímulo que recibe, ponderado por su sensibilidad. Es decir:
Donde:
Percibir el estímulo
Interpretar el estímulo
Evaluar la mejor respuesta
Ejecutar la respuesta decidida
Transmisión mecánica de la respuesta
Volviendo al modelo de comportamiento del vehículo sucesor, este puede escribirse como
una ecuación diferencial de la forma:
dvn 1 ds
n 1 (1.28)
dt dt
Donde:
s n 1 x n t xn 1 t
(1.29)
v n 1 x n 1 t
Se han hecho varios supuestos respecto al valor de la sensibilidad . Entre ellos, es útil
mencionar los siguientes.
a) Modelo de Herman
Conocido como el modelo de Herman, fue primero expuesto por Chandler et al (1958). Al
estudiar el comportamiento del tráfico congestionado en autopistas, postularon que la
sensibilidad de todos los conductores es la misma y que tiene un valor constante 1. Es
decir:
1 (1.30)
dvn 1 ds
1 n 1 (1.31)
dt dt
Por los modelos fluidodinámicos, sabemos que cuando el valor de la concentración es igual
a la concentración de embotellamiento ke, la velocidad de los vehículos en nula. Como el
espaciamiento es el inverso de la concentración, entonces:
1
s n 1 v n 1 0 (1.33)
ke
1
c1 (1.34)
ke
Por lo tanto, si aceptamos que sn+1 = 1/kn+1 (ver TRB, 1992 para una discusión) la solución
de la ecuación diferencial es:
1 1
v n 1 1 (1.35)
k n 1 k e
Si esta ecuación es válida para todo par de vehículos n+1 y n, en promedio para toda la
corriente de tráfico se cumplirá que:
1 1
v s 1 (1.36)
k ke
vs
Curva real
vl
Modelo de
Herman
k
0 ke
Figura 1.16. Forma funcional del modelo de Herman
b) Modelo de Greenshields
La hipótesis para derivar este modelo es que un conductor es más sensible a lo que haga el
vehículo predecesor si la distancia con respecto a éste es pequeña y menos sensible si es
más grande. La variable que describe la distancia entre vehículos es el espaciamiento. Se
postula, entonces, que la sensibilidad es inversamente proporcional al cuadrado del
espaciamiento. Luego:
2
(1.37)
s n21
dv n 1 ds n 1
22 (1.38)
dt s n 1 dt
2
v n 1 c2 (1.39)
s n 1
c 2 vl (1.41)
2
v n 1 vl
s n 1 (1.42)
v n 1 vl 2 k n 1
Se puede calcular el valor de 2, sabiendo que si kn+1 = ke, entonces vn+1 = 0. De donde:
vl
2 (1.43)
ke
k
v n 1 vl 1 n 1 (1.44)
ke
Por lo tanto, en promedio para toda la corriente se tendrá la relación v(k) lineal propuesta
para derivar el modelo fluidodinámico:
k
v s vl 1 (1.45)
ke
May & Keller (1967) encontraron sus valores de los parámetros mediante observación en
autopistas y viaductos. Nótese que la cota inferior de ellos se aproxima bastante a la
hipótesis de Greenshields. Esto proporciona un sustento empírico al supuesto de linealidad
de la relación v(k).
s0 t
3-4
1-2
(a) Estabilidad
sn+1
5-6
3-4
1-2
s0 t
(b) Inestabilidad
Figura 1.17 Ejemplo de estabilidad e inestabilidad asintótica
1
T (1.47)
2
2 1
2
T
s 2
1
2 k 2
2T (1.48)
vl 2 1
k
ke 2T
ke
k kc (1.49)
2Tvl
Donde kc es la concentración crítica, es decir, aquella para la cual la inestabilidad asintótica
comienza a manifestarse. Nótese que kc < ke/2; o sea, se producirá inestabilidad antes de
alcanzar la concentración a capacidad, como se muestra en la figura siguiente. Esto
significa que para un flujo qc = xpQ (con 0<xp<1), menor que la capacidad, llamado flujo
crítico, el tráfico se volverá inestable.
qc = xpQ
k
0 kc ke/2 ke
Ejemplo 1.1. Supóngase los siguientes valores de los parámetros: ke = 1,5 [s]; vl = 60
[km/h]; ke = 160 [veh/km-pista]. Con estos datos se puede calcular la concentración crítica
kc, el flujo crítico qc y la capacidad Q.
56 veh / km pista
ke
kc
2Tvl
q c qk c 2200 veh / h pista
Para xp = 0,9, en otras palabras, cuando el flujo alcanza al 90% de la capacidad de una pista
de circulación continua, la inestabilidad de tráfico comienza a manifestarse. Aunque los
datos del ejemplo son ficticios, la conclusión tiene carácter general. Al valor de xp se le
denomina grado de saturación práctico o grado de saturación de diseño. Del valor del
grado de saturación (razón entre el flujo y la capacidad) depende la magnitud de demoras y
colas que se producen en el tráfico. Para conocer en grado de saturación es necesario
estimar la capacidad de distintos dispositivos viales. Estos temas – capacidad de
dispositivos viales, colas y demoras – serán estudiados en otros capítulos.
Referencias
Chandler, F. E., R. Herman, and E. W. Montroll, (1958). Traffic Dynamics: Studies in Car
Following, Operations Research, 6, 165-184.
Gipps, P.G. (1986) A model for the structure of lane-changing decisions. Transportation
Research 20B(5), 403-414.
Horowitz, A.J. (1991). Delay-volume relation for travel forecasting based on the 1985
Highway Capacity Manual. Federal Highway Administration, U.S. Department of
Transportation.
May, A. D. and H.E.M. Keller (1967). Non-Integer Car Following Models. Highway
Research Record 199, 19-32.
Ortúzar and Willumsen (1990). Modelling transport. John Wiley & Sons, Chichester,
England.
TRB (2000). Highway Capacity Manual 2000. Transportation Research Board, Special
Report 209, National Research Council, Washington D.C.