Grupo A - Seguridad Nuclear: Tercer Ejercicio
Grupo A - Seguridad Nuclear: Tercer Ejercicio
Grupo A - Seguridad Nuclear: Tercer Ejercicio
Resumen
Índice
1. Introducción 1
1.1. Definición y objetivos del análisis de fiabilidad humana . . . . . . . . . . 1
1.2. El error humano . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
3. Ejemplo 16
3.1. Definición de la acción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
3.2. Análisis cuantitativo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
3.3. Criterio de éxito . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 16
3.4. Factores de forma . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17
3.5. Cribado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17
3.6. Representación y cuantificación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
3.7. Documentación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20
4. Análisis de dependencias 20
1. Introducción
En los APS, se considera un Error Humano una acción humana realizada fuera de los
márgenes de tolerancia dados por los criterios de éxito de los sistemas de la planta.
Los errores humanos modelados en un APS incluyen errores que reducen la disponi-
bilidad de sistemas, que tienen como resultado un suceso iniciador, que no impiden la
progresión de un accidente o que empeoran la progresión de un accidente.
Se supone que los errores humanos pueden ocurrir antes de un suceso iniciador (pre-
iniciadores), pueden causar el suceso iniciador (iniciadores) o pueden ocurrir después
del suceso iniciador (post-iniciadores), mientras el personal de la planta está tratando
de mitigar las consecuencias de un accidente.
NO
YES
Durante la operación normal de una central nuclear tienen lugar varias intervenciones
humanas. El examen de las acciones que pueden causar o agravar incidentes propor-
ciona la siguiente clasificación útil para los APS, que es la que se encuentra en [1]. La
figura 2 muestra la relación entres las acciones y de éstas con el suceso iniciador.
Suceso iniciador
Recarga N+1
Recarga N
Tipos 1 y 2 Tipos
3, 4 y 5
Tipo 4 Acciones que se realizan después del suceso iniciador, en las que se siguen
procedimientos que no están basados en síntomas
Para ilustrar las fases de las acciones humanas después de un suceso iniciador, con-
sideremos la figura 3. En ella, el estímulo inicial y la detección y la ejecución final en
el tiempo disponible y las tareas manuales son características de las acciones de tipo
3, mientras que el diagnóstico y la selección de estrategia lo son de las de tipo 4.
EXITO
FALLO
FALLO
FALLO
FALLO
FALLO
Puede verse por tanto que los errores de las acciones de tipo 1 reducen la disponibi-
lidad de los sistemas importantes para la seguridad. Las acciones humanas de tipo 2
provocan un suceso iniciador o incrementan su frecuencia de ocurrencia. Un error del
operador durante la progresión de un accidente (tipos 3 a 5) implica que el operador
no impide la progresión del accidente o contribuye a que se agraven las condiciones
del mismo.
En lo que sigue se mirará más en detalle cada uno de los tipos de error.
Tema SN-29: La tarea de fiabilidad humana 5
Se definen los errores humanos de tipo 1 como aquellos que tienen lugar antes de la
ocurrencia de un suceso iniciador y que pueden reducir la disponibilidad de sistemas
por causa de un mal alineamiento tras un mantenimiento o una prueba, de una inco-
rrecta calibración de un canal de instrumentación, etc. Las acciones que se investigan
son aquellas que implican un cambio de estado, tales como
Se definen los errores de tipo 2 como aquellos que inducen la ocurrencia de un suceso
iniciador, o incrementan la frecuencia de ocurrencia de un suceso iniciador. Su deter-
minación está íntimamente relacionada con las tareas de identificación de sucesos
iniciadores y de cálculo de su frecuencia.
Los métodos principales para la identificación de las acciones de tipo 2 son
Los errores de tipo 2 también pueden dividirse en tres categorías según den lugar
directamente a un suceso iniciador (tipo 2 puro) o deban combinarse con otros fallos
humanos o de componentes para dar lugar al iniciador (tipo 2 compuesto).
Tipo 2A son fallos latentes producidos en la ejecución de tareas que inducen una
anomalía en el funcionamiento de la planta que permanece indetectada durante
algún tiempo. Estos son similares a los errores de tipo 1 en cuanto a la fuente
del error se refiere (una mala operación en una tarea habitual), pero contribuyen
también a la frecuencia del iniciador.
Tipo 2C también son sucesos compuestos en los que la planta no responde adecua-
damente a la anomalía, es decir, en una situación en la que la planta está en una
situación anormal; por esta razón se clasifican cono de tipo 2 y no como de tipo
3, 4 ó 5.
Error al cerrar una válvula del presionador abierta inadvertidamente (tipo 2C).
Los errores llamados de tipo 3 son aquellos que puede cometer el turno de operación
mientras se realizan las acciones contenidas en los Procedimientos de Operación en
Emergencia basados en síntomas durante la mitigación de un suceso iniciador. Inclu-
yen errores en los que el operador se salta una acción procedimentada, no la realiza
a tiempo o lo hace incorrectamente.
Son los miembros del turno de operación quienes básicamente pueden cometer este
tipo de errores. Una clasificación amplia de las actividades que pueden llevar a este
tipo de error es,
Para la identificación de las acciones de tipo 3, deben analizarse todas las actuaciones
de los operadores en respuesta a un iniciador. Por tanto deben analizarse los procedi-
mientos existentes en la planta para la mitigación de accidentes. Estas incluyen,
Procedimientos de Fallo
Identificación de las tareas críticas o tareas necesarias para que la acción tenga
éxito.
Fallo del operador en las acciones de apoyo al arranque automático del sistema
de agua de alimentación auxiliar.
Error humano en la maniobra de Purga y Aporte (Feed & Bleed) tras un disparo
con pérdida del sumidero de calor.
Árboles de Sucesos. Estos errores se refieren a acciones que alteran una función de
seguridad o varios sistemas simultáneamente.
Una vez se han identificado todos los errores de tipo 3, el analista de fiabilidad humana
los revisa y los incluye en los modelos. Los errores humanos de tipo 3 relacionados con
los sistemas se incluyen generalmente en sus árboles de fallos asociados, mientras
que los relacionados con secuencias o con más de un sistema se incluyen en los
Árboles Funcionales como cabeceros.
Este tipo de errores surge cuando el turno de operación trata de mitigar un suceso
iniciador, e incluyen
Este tipo de error humano se ha analizado en muy pocos APS, y es considerado poco
significativo desde que las centrales nucleares adoptaron procedimientos de operación
basados en síntomas, puesto que no hay necesidad de diagnosticar el iniciador y
los POE conducen al turno de operación a la estrategia correcta en cada caso. Un
diagnóstico erróneo es posible en plantas que no disponen de procedimientos basados
en síntomas.
diagnóstico incorrecto
restricciones de tiempo
El objetivo del cribado es seleccionar las acciones humanas más importantes relacio-
nadas con el riesgo de la planta con el objetivo de hacer un análisis detallado.
El cribado consiste en tres etapas:
PSF:
PSF:
El analista de fiabilidad humana intenta clarificar las relaciones entre las tareas que
componen una determinada acción por medio de una representación gráfica. Con este
paso se trata de reflejar posibles caminos de fallo como ayuda en la evaluación del
impacto y para facilitar el proceso de cuantificación.
En el análisis de fiabilidad humana de los APS se contemplan dos formas de repre-
sentación:
El Árbol de acciones del operador (Operator Action Tree, OAT) para distinguir la
parte cognitiva de la parte manual de la acción (ver la figura 4).
Tema SN-29: La tarea de fiabilidad humana 14
El modelo HCR
En TCR
3. Ejemplo
Como ilustración de la metodología, se analizará una acción de tipo 3.
Los síntomas que llevan a la realización de la acción pueden ser detectados por el
turno de operación 5 minutos después de la ocurrencia del suceso iniciador. Los ope-
radores deben completar la acción antes de lo 36 minutos desde la ocurrencia del
iniciador (los tiempos se han determinado a partir de cálculos termohidráulicos). Dado
que el tiempo que se necesita para realizar la acción es de tres minutos, el tiempo
disponible es de 28 minutos.
Tema SN-29: La tarea de fiabilidad humana 17
Procedimientos
Entrenamiento/Experiencia
Interfase hombre-máquina
Comunicaciones
Carga de trabajo
Estrés
3.5. Cribado
de donde
1−Pm
Exito
1−Pc
Pm Fallo
Manual
Pc Fallo
Cognitivo
Figura 4: Descomposición de la acción humana en parte cognitiva y parte manual
La probabilidad de error para la parte cognitiva está basada en SAIC-TRC [6], donde
se ha considerado duda, ya que la acción está condicionada a la efectividad de las
acciones de recuperación del sumidero de calor del secundario.
Para la parte manual, las manipulaciones están representadas por el árbol de la figura
5, donde el camino de la izquierda (verde) es el camino de éxito y el de la derecha
(rojo) es el de fallo.
La parte manual de esta acción se descompone en las siguientes sub-tareas:
REPRESENTACION
A
6E−3
F1
B
1E−3
C
1E−3
F2
D
E 2E−3
1E−3
F3
F
1E−3
EXITO
F4
Figura 5: Representación de la manual parte de la acción 1F0FDYBLH
F1 = 6E-3×0.05×2
F2 = 1E-3×1E-3×0.15×2
F3 = 1E-3×2E-3×0.15×2
F4 = 1E-3×1E-3×0.15×2
Pm = F1 + F2 + F3 + F4 = 6,02 · 10−4
3.7. Documentación
Toda la información necesaria para que el análisis se pueda seguir debe incluirse en
el informe final, conteniendo los métodos y resultados y con la descripción clara de las
hipótesis del análisis.
4. Análisis de dependencias
El objetivo del análisis de dependencias es la identificación de las dependencias entre
las acciones humanas. Estas dependencias pueden ser debidas a distintos mecanis-
mos (personal, procedimientos, herramientas o equipo usado, instrumentación, tiempo
compartido, etc.). La identificación de dependencias puede hacerse a priori, antes de
la cuantificación o a posteriori, después, analizando los conjuntos mínimos de fallo de
las secuencias. La cuantificación de las dependencias puede ser específica, si hay
suficiente información, o directamente por medio de las tablas de THERP. A menudo
se usa una combinación de ambos métodos.
para el análisis, lo que incluye generalmente el trabajo conjunto con los analistas de
fiabilidad humana. En la medida de lo posible, el análisis debe hacerse sobre datos
específicos de planta en cuanto al diseño y a los registros de experiencia operativa.
La generación de una documentación clara y detallada ayuda al proceso de garantía
de calidad del análisis.
Sin embargo, también hay factores que limitan la profundidad del análisis de fiabilidad
humana en el APS. Si bien es cierto que el uso de procedimientos para la gran mayoría
de las actividades de una central nuclear permite definir el análisis, no puede eliminar-
se la posibilidad de que aparezcan errores cometidos fuera de esos procedimientos.
Estos errores, llamados errores de comisión son difíciles de prever y de cuantificar. En
la actualidad no se cuantifica el efecto de las acciones de los niveles de gestión y de
la organización en la seguridad de la planta.
En muchos casos no pueden encontrarse datos específicos para el cálculo de las pro-
babilidades de error humano, debiendo recurrirse a datos genéricos, lo cual, aunque
admitido, puede introducir incertidumbres adicionales en las conclusiones. Es también
importante el papel de la simulación detallada de secuencias accidentales, dado que
la probabilidad de error depende del tiempo disponible calculado para cada acción.
Este tema guarda relación con los temas del primer ejercicio:
Referencias
[1] G.W. Hannaman, A.J. Spurgin, et al., Systematic Human Action Reliability Proce-
dure (SHARP). EPRI NP-3583, 1984.
[2] Human Reliability Analysis in Probabilistic Safety Analysis. Assessment for Nu-
clear Power Plants. IAEA Safety Series, No. 50-P-10.
[3] J. Rasmussen, Skills, Rules and Knowledge; Signals, Signs and Symbols, and
Other Distinctions in Human Performance Models, IEEE Transactions on Systems,
Man, and Cybernetics, Vol. SMC-13, No. 3, 1983, pp.257–266.
[4] A.D. Swain and H. E. Guttmann, Handbook of Human Reliability Analysis with
Emphasis on Nuclear Power Applications, NUREG/CR-1278, Sandia National La-
boratories, 1983 (THERP).
[5] G.W. Hannaman, A.J. Spurgin, et al. Human Cognitive Reliability Model for PRA
Analysis, NUS-4531, EPRI, 1984.
[7] J. Muñoz and M.G.K. Evans, Evaluation of the contribution of unrevealed human
errors to core damage following a transient.