Parques Naturales
Parques Naturales
Parques Naturales
Declarada área protegida número 59 del Sistema de Parques Nacionales Naturales de Colombia
en diciembre de 2014 por albergar ecosistemas importantes para la conservación como fondos
sedimentarios, praderas de pastos marinos, formaciones coralinas, manglares, playas y litoral
rocoso. Se constituye en una declaratoria estratégica para el país y para el Sistema Nacional de
Áreas Protegidas – SINAP, considerando la baja representatividad que tienen los ecosistemas
marinos y costeros no solamente al nivel nacional sino también global. Manglares, corales, aves,
langostas, camarones, almejas, ostras, peces como el mero, róbalo, pargo, lisa, lebranche, sierra y
sardina, además de reptiles, tortugas, erizos, armadillos, murciélagos y zorros son algunas de las
especies de la gran biodiversidad protegida en el Parque que está ubicado en el norte de la
península de la Guajira.
Por ser un área estratégica, Parques Nacionales Naturales impulsó el proceso de declaratoria del
parque, desde el año 2003. Además, las comunidades indígenas Wayuu que tradicionalmente
habitan la península de la Guajira, lideraron y contribuyeron con el proceso de declaratoria del
Parque. Así, Parques Nacionales y el resguardo Wayuu de la Media y Alta Guajira consolidaron
espacios de acuerdo frente al manejo y planeación del área protegida para la protección de los
ecosistemas marinos costeros que allí se encuentran.
UBICACION
FLORA
En la zona de influencia del área protegida, aunque se presenta escasa vegetación, se obtuvo un
registro de 19 especies, compuesto principalmente de cactáceas asociadas con árboles y arbustos
espinosos de tamaño reducido. Los elementos florísticos más comunes corresponden a los
géneros: Capparis, Libidibia, Lemaireocereus, Melocactus, Pereskia, Cereus y Castela.
FAUNA
En relación con los recursos hidrobiológicos, se han registrado para Bahía Portete 217 especies de
67 familias a partir de observaciones directas por buceo y muestreos y mediante revisión de
material conservado en museos. Se conocen pocas Bahías o lagunas costeras de América con una
fauna de peces tan variada. Entre las especies capturadas con redes las más frecuentes
fueron Eucinostomus gula. En cuanto a las especies demersales, se encuentran
principalmente: Lutjanus synagris (chino), Poliprion americanus (cherna o mero), Pagrus
pagrus (pargo), Mugil lisa (lebranche), Albula
culpes (macabí), Clupeidos (sardinas), Haemúlidos (roncos) y tiburones. . En cuanto a los peces
pelágicos-costeros, considerados recursos estacionales y fuente apreciable de biomasa e
importantes para la pesca artesanal, son comercialmente importantes tres especies
de Scombridae: sierra, caballa y carite. Entre los crustáceos está la langosta (Panulirus argus), y
cuatro especies de camarones: camarón tití (Xiphopenaeus kroyeri), camarón blanco (Penaeus (L)
schmitti), camarón rojo (Penaeus (F) notialis) y camarón pintado (Penaeus (F) brasiliensis). En esta
área protegida hay igualmente moluscos, gran variedad de almejas y caracoles.
Reptiles
Aves
En Bahía Portete la mayor parte de la avifauna marina encuentra sitio de anidación y áreas de
refugio en el manglar por lo que depende de él aunque busque su alimento en el mar. Existen las
siguientes especies: Fregata magnificens (tijereta de mar o fragata), Anhinga anhinga (pato
aguja), Platalea ajaja (pato cuchara), Euxenura maguari (cigüeña) y Phalacrocorax
brasilianus (pato cuervo). También existen especies exclusivas de los manglares
como Conirostrum bicolor (mielerito manglero) y Dendroica petechia chrysendeta (reinita
manglera). En el manglar también se avistan bandadas de Eudocimus ruber (ibis rojo), Eudocimus
albus (ibis blanco), Ardea cocoi (garza morena), Phalacrocorax olivaceus (pato cuervo o
yuyo), Charadrius wilsonia (chorlito) y Pelecanus occidentalis carolinensis (Pelicano). Se han
reportado avistamientos de Phoenicopterus ruber ruber (flamencos rosados) aunque son muy bajos
comparados con otras lugares y áreas protegidas del departamento.
Mamíferos
ECOSISTEMAS
Manglares, áreas coralinas, pastos marinos, fondos lodosos, y litoral rocoso y arenoso son
ecosistemas de importancia vital para la multiplicidad de especies que viven en el Área Protegida y
de los cuales la comunidad Wayuu de la zona devenga bienes y servicios ambientales
fundamentales para su pervivencia. Estos ecosistemas quedaron protegidos tras la declaratoria de
este Parque Nacional Natural.
El municipio de Acandí, antiguamente llamado “San Sebastián de Titumate”, municipio que posee
en su zona rural las estribaciones nororientales de la serranía del Darién, la cual se extiende por
todo el flanco occidental en la frontera con Panamá, por lo que se denomina la costa atlántica
chocoana con su cordón montañoso costero y la zona litoral.
Posee su mayor área marina con 13 kilómetros aprox. de playa. Es un sitio especifico de anidación
de tortugas, posee arenas finas derivadas de las peñas marinas y algunos bajos de este litoral,
igualmente en el lindero sur del SFA-PP se presenta el inicio del fragmento coralino que va desde
la punta de Goleta y continua hacia el corregimiento de San Francisco, área de influencia. También
identificamos que en el centro del Santuario (área marina) más rumbo nororiente, se presenta un
caladero de la especie de pez denominado Cherna.
Sus costas albergan gran variedad de aves playeras y algunas migratorias, que por la reciente
creación del área protegida se están apenas identificando y describiendo, para la priorización en
las labores de manejo y zonificación del Santuario.
UBICACION
El Santuario de Fauna Acandí, Playón y Playona, está ubicado en el Golfo del Darién, municipio de
Acandí departamento del Choco, se llega por vía secundaria, desde el casco urbano a la vereda
Caleta kilómetro 12, continua atravesando el centro poblado rumbo Playona y Chugandí hasta el
alto de la serranía de Caleta, bajando 800m se debía a la izquierda rumbo la playa ubicada a
200mt.
FLORA
No posee este recurso debido al ser un área protegida netamente marino costera (agua y playa), la
composición florística en el área de influencia consta de especies de las familias de las
bombacaceae, mimosaceae, fabaceae, solanaceae, myrtaceae, bignoniaceae, piperaceae, y otras
más en menor densidad. (ceibas, bomgas, carboneros, majagua, jagua, cedro, guayacan rosado o
roble, etc)
FAUNA
Al poseer un ecosistema marino costero es una zona de protección de los hábitats de anidación de
las tortugas Caná y Carey, igualmente la gran variedad de especies de peces que conviven en
estos acantilados marinos sierra, bonito, gato, pargo, ronco, isabelita, bacalao, jurel, raya, tiburón.
Actualmente se está evidenciando el estado de un pequeño parche coralino divulgado por los
habitantes de la zona.
En sus costas se presentan aves tales, como pelicanos, gaviotas, pájaro bobo, garzas, paletones,
Aguilas pescadoras, gavilanes, martin pescador y otros en proceso de identificación.
ECOSISTEMAS
La región del golfo del Darién es un mosaico de los ecosistemas marinos y costeros más
productivos y diversos del planeta, con sus arrecifes de coral, manglares y humedales costeros,
entrelazados con aquellos continentes, igualmente complejos e insondables como el bosque
húmedo tropical y los bosques de cordillera. Es tierra baja fértil, producto de los depósitos
sedimentarios de los ríos de más alto caudal del planeta en función de la extensión de sus
cuencas, y es zona de encuentro entre las provincias biogeográficas del Pacífico tropical oriental y
el Caribe suroccidental.
HIDROGRAFIA
El área protegida del Santuario se ubica en las estribaciones orientales de la serranía del Darien,
específicamente en la zona marino costera del litoral caribe (Golfo de Urabá), si habláramos de una
futura zona amortiguadora que actualmente es llamada zona de influencia, tendríamos al occidente
la cuenca del río Tolo, al occidente cercano el humedal de Playona, zona de gran importancia
ecosistémica para las especies migratorias y circundantes de la serranía de Caleta y el Darién. Yal
sur la desembocadura de la cuenca del río Rionegrito, el cual recoge las aguas del río Chugandí y
otros que vierten de la serranía de La Caleta.
Es una de tres localidades identificadas a la fecha en el Caribe colombiano con una abundancia
significativa de corales profundos y una alta diversidad de invertebrados asociados a ellos. Se ha
estimado que, junto con las formaciones coralinas profundas identificadas en aguas de Magdalena
y Guajira, la formación de corales de profundidad de San Bernardo posee aproximadamente el
40% de la biodiversidad del borde de la plataforma continental del Caribe Colombiano.
Adicionalmente, el área protegida incluye el 67% de las formaciones coralinas de profundidad del
Caribe colombiano.
UBICACIÓN
El Parque Nacional Natural Corales de Profundidad (PNNCPR) hace parte de la cuenca del Gran
Caribe y se encuentra ubicado en el Caribe Colombiano a una distancia aproximada de 12 km del
Parque Nacional Natural Corales del Rosario y San Bernardo y a 32 km aproximadamente del
punto más cercano en el continente (Península de Barú). El PNNCPR hace parte del sistema
costero Archipiélagos Coralinos (ARCO) y del sistema Caribe Oceánico (COC) y se extiende frente
a las costas de los departamentos de Bolívar, Sucre y Córdoba, siendo los municipios costeros de
estos departamentos su zona de influencia indirecta. El Parque, además, pertenece a la Unidad
Ambiental Costera Estuarina del Río Sinú y el Golfo de Morrosquillo, la cual es un mosaico de
ecosistemas continentales, costeros, insulares y marinos localizados dentro de la franja
intertropical, el cual se caracteriza por una baja influencia de aportes continentales y aguas
relativamente transparentes. Adicionalmente, más del 45% del PNNCPR se encuentra inmersa
dentro del Área Marina Protegida Archipiélago del Rosario y San Bernardo, favoreciendo procesos
biológicos y posibilitando la conectividad ecológica y la conservación de otros sistemas como el
Parque Nacional Natural Los Corales del Rosario y de San Bernardo y el Santuario de Fauna y
Flora El Corchal “Mono Hernández”.
FAUNA
La comunidad coralina de profundidad frente al Archipiélago de San Bernardo es una de tres
localidades identificadas a la fecha en el Caribe Colombiano con una abundancia significativa de
corales escleractíneos azooxantelados y una alta diversidad de invertebrados asociados a ellos.
En el borde de la plataforma continental entre 120 y 180 metros, se han registrado 19 especies de
corales escleractíneos, siendo Madracis myriaster la especie dominante y al parecer la principal
especie estructurante con un rango de distribución de 120 a 240 m de profundidad. Esta cualidad
hace de esta comunidad coralina un tipo de hábitat “raro” en la región Caribe y el mundo, lo cual le
confiere un mayor valor en términos de prioridad para la conservación.
Los mamíferos marinos (odontocetos) también son frecuentes en el área protegida y se presentan
en grupos de 3 a 15 individuos. Las especies más comunes son Stenella frontalis, S. attenuata,
y S. cf. Clymene y se destaca que los grupos están representados por individuos de diferentes
tallas (adultos y juveniles). Por otra parte, si bien el Parque no presenta tierra emergida, sí es
común observar aves migratorias. Hasta el momento se reportan nueve especies, de las cuales
destacan por una mayor frecuencia de ocurrencia, la reinita de pino (Dendroica pinus) y el piquero
pargo (Sula leucogaster).
Similar a otras áreas protegidas del Caribe, también se ha registrado la presencia de la especie
invasora pez león (Pterois volitans), cuya abundancia incrementa en la cima de montañas
submarinas del Parque. Hasta el momento, su rango de distribución en el área protegida, oscila
entre los 37 y 140 m de profundidad.
Finalmente, el PNN Corales de Profundidad presenta un hábitat afótico situado en la cima de una
montaña submarina entre los 300 y 330 m de profundidad. Allí se han observado más de 800
organismos bentónicos que comprenden 38 posibles especies, pertenecientes en su mayoría a
esponjas, moluscos, equinodermos y cnidarios
ECOSISTEMAS
El Valor Objeto de Conservación del Parque Nacional Natural Corales de Profundidad será definido
como el conjunto de tres hábitats importantes que abarcan las comunidades existentes en el área
protegida y de los cuales se posee actualmente información. Primero están los fondos blandos, los
cuales dan soporte a los otros hábitats y albergan gran cantidad de especies. Segundo se
encuentran los corales de aguas frías los cuales son catalogados como “hot-spot” de biodiversidad.
Por último, pero no menos importantes, los corales mesofóticos, los cuales actúan como refugio de
las especies de arrecifes someros, permitiendo la interacción de estos con los corales de aguas
frías.
Los fondos blandos son ecosistemas conformados por la acumulación de partículas sedimentarias
(arenas, arcillas, cienos, limos) en un sustrato inestable y de baja complejidad topográfica, los
cuales sin embargo ofrecen alimento y protección a una gran cantidad de organismos
denominados bentos. Estos organismos presentan diferentes formas de vida, ya sean sésiles, que
viven unidos al sustrato o móviles, que se desplazan manteniendo contacto directo con el fondo. La
fauna presente en los fondos blandos del mar profundo es similar a la de aguas someras en cuanto
a su composición taxonómica.
El PNNCPR cuenta con dos tipos de fondos blandos: sublitoral o plataforma continental que va
desde el nivel más bajo de la marea y los 200 m de profundidad, y batial o talud continental entre
los 200 y 2000 o 3000 m de profundidad. Para la zona del PNNCPR se tiene información sobre la
presencia de diferentes clases de moluscos como bivalvos y gasterópoda con altos valores de
riqueza y abundancia, y cephalopoda, scaphopoda, polyplacophora con una menor riqueza y
abundancia.
Corales profundos
Los corales profundos son estructuras tridimensionales las cuales modifican sustancialmente el
relieve del fondo, por lo que han sido catalogadas como “hot-spots” de biodiversidad en los
ambientes oceánicos profundos. Como las principales especies de corales que construyen el
hábitat no poseen simbiosis con algas zooxantelas, sus colonias pueden desarrollarse a grandes
profundidades marinas (hasta 4000 m), ya que no están restringidas a la zona fótica (zona con luz)
de la columna de agua. En las zonas templadas llegan a colonizar hábitats desde 50 hasta 1000 m
de profundidad, donde adicionalmente se presentan bajas temperaturas (4 a 12 °C), un régimen de
corrientes fuertes y alto contenido de materia orgánica, con el fin de cumplir con los requerimientos
nutricionales que estos corales necesitan para su crecimiento y desarrollo.
Los corales profundos proveen un hábitat esencial para muchas especies de invertebrados
(estrellas de mar, crinoideos, nudibranquios, caracoles, esponjas, pulpos, cangrejos, camarones,
anémonas, entre otros) y de peces, ofreciéndoles refugio, protección contra corrientes o
predadores, áreas de apareamiento o desove, áreas de descanso, sala-cuna para juveniles, oferta
de alimento o sustrato de asentamiento para organismos sésiles
Corales mesofóticos
Los corales mesofóticos son arrecifes de aguas cálidas, dependientes de la luz, los cuales se
encuentran a partir de 30 o 40 m de la parte inferior de la zona fótica, y se extienden a más de 150
m en algunas regiones. Los corales mesofóticos representan una extensión directa de los
ecosistemas de arrecifes de coral de aguas someras, soportando una amplia diversidad grupos de
especies incluyendo corales, esponjas y algas. Así mismo estos arrecifes pueden sobreponerse o
extenderse sobre formaciones coralinas de profundidad, por lo que actúan como un puente entre
estos dos ecosistemas.
En la región del PNN Corales de Profundidad entre los 35 y 40 m, está el bajo ‘El Frijol, el cual
presenta fondos de bajo relieve, cubiertos principalmente por rodolitos y cascajo con una alta
cobertura de algas. También se presentan comunes las grandes esponjas barril. Este ecosistema
difiere mucho de los arrecifes formalmente descritos en Colombia. Finalmente, aunque las
observaciones deben considerarse como preliminares, es claro que esta zona contiene una gran
biomasa de peces y son un refugio natural de especies que son muy escasas en el resto de la
costa Caribe colombiana (p.ej. el caracol de pala). Asimismo, al observarse grandes peces loro y
depredadores del tope, como chernas, delfines y tiburones, es un indicador de arrecifes coralinos
sanos y resilientes.
El Santuario tiene el nombre del cerro Los Colorados por la presencia de mono aullador colorado o
rojo (Alouatta seniculus). Contiene uno de los relictos de bosque seco mejor conservados de la
región y refugio importante para los organismos de dicho hábitat, como algunas poblaciones de
primates y mamíferos. Además, es estación de aprovisionamiento para las aves migratorias y es
considerado como Área de Importancia para la Conservación de las Aves (AICA).
FLORA
Es el único bosque que hay a 100 kilómetros a la redonda, con especies como el resbala
mono (Brusera simaruba), tamarindo de mico (Uribea tamarindiodes), ceiba de leche (Hura
crepitans), siete cueros (Machaerium capote), carreto (Aspidosperma polyneurom),
caracolí (Anacardium excelsum), Ébano (Caesalpinia ébano) Guayacan (Bulnesia arbórea) y Cedro
blanco (Gyrocarpus americanus), entre otras. El Santuario contiene alrededor de 105 especies
maderables, algunas de las cuales alcanzan los 50 metros de altura.
FAUNA
ECOSISTEMAS
Contiene una zona representativa del bosque seco tropical más grande de los Montes de María o
Serranía de San Jacinto, formación geológica aislada entre la planicie costera de Bolívar y las
sabanas de Corozal y Sincelejo.
HIDROGRAFIA
El Santuario está bañado por dos arroyos: Los Cacaos y Salvador, que lo circundan por los
costados sur y norte respectivamente y en su interior nace un sinnúmero de cañadas que
desembocan en dichos arroyos.
EL SANTUARIO EL CORCHAL “EL MONO HERNÁNDEZ”
Posee gran importancia a nivel biológico, ya que en su interior se protegen cerca de 1.961
hectáreas de bosques de manglar ubicados al Oeste y al Norte del Santuario, poblando la línea de
costa litoral y las zonas aledañas a los márgenes de los caños y las ciénagas mangláricas. Estos
manglares están dominados por las 5 especies de mangle registradas para el Caribe de Colombia,
y son importantes a nivel económico para los habitantes asentados en el área de influencia, ya que
la función ambiental de este tipo de ecosistema es contribuir con la producción de recursos
pesqueros e hidrobiológicos para la región.
Igualmente, el área conserva en buen estado las únicas muestras representativas de rodales puros
de bosques pantanosos de “corcho” en el Caribe de Colombiano, dominados por la especie
Pterocarpus officinalis y que sumados poseen una extensión aproximada de 401 hectáreas, los
cuales están ubicados en la parte central Sur, en inmediaciones de los caños Portobelo, Rico y
Correa.
UBICACIÓN
El área protegida se encuentra ubicada al noroeste de Colombia sobre la costa Caribe. Se localiza
en jurisdicción de los municipios de San Onofre (Sucre) y Arjona (Bolívar) en la parte final de la
planicie aluvial del brazo artificial del río Magdalena conocido como el “Canal del Dique”, sobre su
zona deltáica activa. Geográficamente se localiza a 10° 02´00″ de Latitud Norte y a 75°32´00″ de
Longitud Oeste.
FLORA
En el área es muy común observar los mangles rojo, negro, piñuelo, Zaragoza y bobo, el árbol de
corcho, grandes ceibas, cantagallos e higuerones y una gran variedad de vegetación acuática y
flotante a lo largo y ancho de los caños y ciénagas. Al interior del Santuario también se encuentran
1.094 hectáreas de vegetación herbácea inundada dominada por gramíneas altas, y áreas
homogéneas del helecho “matatigre” localizadas al sur y al oriente del área sobre las planicies de
inundación de los caños Correa, Rico, Burro y Portobelo.
FAUNA
Al interior del área se pueden observar gran variedad de aves (153 especies registradas hasta la
fecha), entre las cuales se destacan el chavarri, el águila pescadora, el bebehumo, garzas,
pelicanos, cormoranes, gran variedad de loros y aves de humedales. Asì mismo posee un buen
número de especies de mamíferos como la zorra manglera, el poncho o chigüiro, el mono aullador,
el mico tití y la guartinaja.
ECOSISTEMAS
HIDROGRAFIA
El sistema hídrico es el eje dinamizador de los ecosistemas presentes en el área protegida. Éste
funciona a la inversa de una cuenca hidrográfica convencional, ya que se encuentra ubicado sobre
u sistema deltáico en el cual los afluentes no llegan a uno mayor si no que se derivan del mismo,
originando una serie de caños que conforman una red de drenajes que ayudan a distribuir el agua
en la zona deltáica, la cual finalmente desemboca al mar.
Este sistema moldea dos paisajes geomorfológicos, uno denominado planicies fluviales o aluviales
que han sido formadas por el depósito de sedimentos en los diques y cubetas de inundación a lo
largo de los caños Correa, Rico, Burro y Portobelo; y las planicies fluviomarinas, las cuales se
originan gracias al intercambio de aguas salobres y dulces cargadas de sedimentos en las que se
localizan los bosques de manglar.
Además, el sistema hídrico está complementado por 312 hectáreas de lagunas costeras, ciénagas
mangláricas y fluviales distribuidas a lo largo y ancho del Santuario y 28 hectáreas de caños
mangláricos y de agua dulce que conforman el sistema hídrico de la zona deltáica
UBICACIÓN
FLORA
En los playones inundables y cuerpos de agua pueden encontrarse otras especies vegetales que
pueden estar asociadas al manglar, dependiendo de su conformación particular, estacionalidad de
inundaciones y variación de la pendiente. Destacan el Helecho de mangle (Acrostichum cf.
aereum) y la enea (Typha dominguensis), entre la vegetación herbácea y, entre la vegetación del
bosque denso ombrofilo pantanoso se relacionan especies como Pithecellobium lanceolatum, Ficus
dendrocida (suan), Lonchocarpus sp., Copernicia tectorum (palmiche), Elaeis oleífera (nolí),
Pterocarpus officinalis (tanico) y, Calathea lútea.
Bosque seco tropical: Existen chaparrales formados casi exclusivamente por un árbol pequeño, el
chaparro (curatella americana), asociado con el peralejo o noro (Byrsonima sp.). En general en el
paisaje de la llanura del Caribe se pueden observar enormes fustes del macondo (Cavanillesia
platanifolia) y las asociaciones de la palma de vino (Schellea magdalenica) y la palma amarga
(Sabal sp.). Las maderas de este tipo de formación son de las más apreciadas como la teca
(Tectona grandis), la caoba (Swetenia macrophylla), el tigrillo (Astronium graveolens), el carreto
(Aspidosperma dugandii), el trébol (Platymiscium pinnatum), el algarrobo (Hymenanea courbaril), el
iguá (Pseudosamanea guachapele), la ceiba tolua (Bombacopsis quinata), el guayacán (Tabebuia
spp.) y el cedro (Cedrela sp.).
Bosque ripario o de vega hasta unos 400 m de anchura, caracterizado por la presencia de suán,
pivijay y cantagallos. En sitios pantanosos aparecen asociaciones de ciperáceas y bijao (Talia
geniculata).
En los espejos de agua exentos de salinidad, o durante los meses lluviosos, se desarrollan
comunidades de taruya o batata de agua (Eichhornia spp.), hoja de raya (Nymphea ampla) y
lechuga de agua (Pistia striatiotes) que llegan a obstruir la navegación.
FAUNA
El grupo de las aves se halla bien representado en el Santuario. Entre ellas cabe mencionar: el
pato cuervo o longuillo (Phalacrocorax olivaceus olivaceus) el pato aguja (Anhinga anhinga),, la
chavarria (Chauna chavaria), el gallito de ciénaga (Jacana jacana), el gavilán indio viejo (Busarllus
nigricollis nigricollis), el gavilán caracolero (Rostrhamus sociabilis), la garza morena (Ardeacocoa),
la garza real (Egretta alba), la garza tina (Egretta thula), el alcaldito (Himantopus mexicanus), el
carrao (Aramus guarauna),el cabeza de cera ó coyongo o coscongo (Mycteria americana), el
garzón soldado (Jabiru mycteria) y el pato cucharo (Platalea ajaja); pisingo (Dendroyigna
autumnalis); pisisia (Dendrócygna bicolor).
El Santuario tiene gran importancia como refugio para aves migratorias procedentes de
Norteamérica, especialmente pato barraquete (Anas discors) que permanece en grandes grupos
de Noviembre a Abril. Además, existen varias especies de aves residentes entre las que tenemos:
viudita (Fluvicola pica), pato real (Cairina moschata) y pato malibú (Dendrocygna viduata).
Dentro de la fauna íctica del área se encuentran al menos 53 especies de las cuales 29 son
dulceacuícolas y 24 estuarinas, pero en las ciénagas y caños del sector norte del Santuario,
cuando avanza la cuña salina, las especies dulceacuícolas se repliegan hacia el sur. Muchas veces
pueden presentarse mortandades masivas cuando la salinidad se torna muy alta, esto ocurre por lo
general en los meses de febrero a marzo con la aparición de algas cianophitas. Entre las especies
dulceacuícolas primarias destacan el bagre tigre (Pseudoplatystoma magdaleniatum), la
agujeta (Ctenolucius hujetainsculptus), el bocachico (Prochilodus magdalenae), y el
nicuro (Pimelodus clarias), y moncholo (Hoplias malabaricus) entre otros. Como especie invasora
resalta en el complejo lagunar la presencia abundante de la mojara lora (Oreochromis cf. niloticus).
En las ciénagas de agua salobre las especies más representativas son, la lisa (Mugil incilis), el
sábalo (Tarpon atlanticus) el róbalo (Centropomus undecimalis) la mojara rayada (Eugerres
plumieri), el chivo cabezón (Ariopsis bonillai) mapalé (Cathorops spixi).
ECOSISTEMAS
HIDROGRAFIA
Se encuentra representada por diferentes cuerpos de agua, entre los más importantes se
encuentran:
Ciénagas: La Aguja, Tigrera, Soledad, Contrabando, Tamacá, Juncal, Mendegua, la Mata, las
Piedras y Don Miguel y San Juan.
Caños: Pancú. Mengajo, ají, El Jobo, el Salado, Refugio, Alfandoque, brazo Palenque El Cojo,
Condazo, Frayle, Santana, los Palos, la Lechuga, el Ratón, las Puercas y el Manguito.
Tiene una extensión de 504.014 hectáreas que conservan ecosistemas de selva húmeda tropical,
planos inundables, bosques andinos y subandinos, humedales y paramos que se distribuyen en
pisos altitudinales que oscilan entre los 125 M.S.N.M en su parte norte hasta los 3.960 M.S.N.M
en su parte sur.
UBICACIÓN
Según los límites del Parque a partir de la cartografía oficial del IGAC, se estima que el 74,14% de
Parque está localizado en jurisdicción de Córdoba, mientras que el 25,86% se encuentra en
territorio antioqueño. El Parque actualmente tiene jurisdicción en los municipios de Carepa,
Chigorodó, Dabeiba, Tarazá, Ituango, Mutatá y Peque (pertenecientes a Antioquia) y Montelíbano,
Tierralta, Puerto Libertador, San José de Uré en Córdoba.
FLORA
En el Parque Nacional Natural Paramillo se han registrado unas 648 especies de plantas, de las
cuales siete (7) se encuentran en algún grado de amenaza según las categorías de la UICN (Unión
Internacional para la Conservación de la Naturaleza) y de ellas se encuentran en peligro crítico el
Abarco (Cariniana Pyriformis) y el Coquito enano (Reinhardtia Koschnyana), entre otras.
Las familias de especies vegetales más representativas dentro del Parque son las Rubiaceae,
Arecaceae, Moraceae, Mimosaceae y Caesalpinacea, de las cuales al menos unas 140 especies
de plantas son aprovechadas por las comunidades campesinas.
Las palmas son otro de los grupos más representativos del área protegida, entre las que es posible
encontrar la de Mil Pesos (Oenocarpus Bataua), la Güerre (Astrocaryum Standleyanum) y la
Barrigona (Iriartera Deltoidea); y maderables como el Abarco (Cariniana Pyriformis). En el páramo
del parque se han reportado tres especies de la familia Orchidiaceae Epidendrum Macrostachyum,
Pleurothallis Cosmetron y Masdevallia Anisomorpha, esta última categorizada como en peligro
(EN). El área protegida también tiene las formaciones de bosque de Quercus Humboldtii
Bonpl ubicadas más al norte de su distribución normal para Colombia además de ser las más bajas
en rango altitudinal.
FAUNA
La fauna presente en el área protegida es diversa, siendo la región del Alto Sinú parte de un
antiguo refugio pleistocénico de selvas húmedas. Los ecosistemas del Parque muestran una
enorme diversidad en cuanto al origen de las especies que los integran, encontrándose elementos
de afinidad centroamericana, magdalenense, chocoana, andina y amazónica. Los inventarios
biológicos de vertebrados revelan que en el parque se encuentran unas 60 especies de peces, 65
especies de anfibios, 96 especies de reptiles, 386 especies de aves y unas 62 especies de
mamíferos.
En el área protegida se encuentran especies que tienen gran importancia para la conservación a
nivel local, regional y nacional, como es el caso de la Danta Amazónica ( Tapirus terrestris), el Oso
Andino (Tremarctos Ornatus), el Jaguar (Panthera Onca), el Puma (Puma Concolor), el Venado de
Cola Blanca (Mazama Sanctaemartae) y los Cerdos de Monte (Pecari Tajacu y Tayassu Pecari), la
Mica Prieta (Ateles Fusciceps) y el Titi (Saguinus Oedipus). Al menos 61 de las especies de fauna
silvestre presentes en el parque están bajo alguna categoría de amenaza.
También es posible encontrar aves terrestres de gran tamaño como el pavón de Pico Azul (Crax
Alberti) y el Pavón de Pico Amarillo (Crax Rubra) y grandes reptiles como el Caimán de Aguja
(Crocodylus Acutus). En esta área protegida se encuentra una gran riqueza de peces como la
Dorada (Brycon Sinuensis), el Bocachico (Prochilodus Magdalenae), el Bagre Pintado (Sorubim
cuspicaudus), el Rubio (Salminus Affinis), entre otras.
ECOSISTEMA
La selva húmeda se localiza por debajo de los 1.000 metros sobre el nivel del mar y sus
características principales son las abundantes precipitaciones durante la mayor parte del año y su
exuberante biodiversidad. Alrededor de unas 254.719 hectáreas del Parque pertenecen a este
ecosistema, abarcando el 47.83% del área protegida. El Paramillo contribuye al almacenamiento y
fijación de más de 50 millones de toneladas de carbono y a la regulación hídrica del departamento
de Córdoba con sus principales cuencas de los ríos Sinú y San Jorge.
El Bosque Húmedo Subandino se encuentra entre los 1.200 y 2.700 metros sobre el nivel del mar,
se caracteriza por presentar un estrato arbustivo poco desarrollado, herbáceo denso y forestal
dominante. Estos bosques funcionan como un ecosistema transicional entre la selva humedad y los
bosque altoandinos y páramo, aportando a la regulación hídrica, el almacenamiento y fijación de
carbono. En el área protegida, este ecosistema ocupa el 42,42% de su extensión, abarcando
aproximadamente unas 225.845 hectáreas. Entre las especies de flora más representativas de este
bioma se encentran las epífitas, las cuales están representadas en musgos, hepáticas, líquenes,
orquídeas y bromeliáceas.
El Bosque Húmedo Alto Andino, también conocido como bosque de niebla se ubica en la parte alta
de las montañas andinas por encima de los 2.700 metros sobre el nivel del mar. Dentro del área
protegida, su extensión abarca el 9,41% de su superficie extendiéndose aproximadamente por
unas 50.333 hectáreas. Este bioma se caracteriza por presentar árboles relativamente bajos, con
hojas en promedio pequeñas, y con el sotobosque muy denso, a veces impenetrable. Las ramas y
troncos suelen estar cubiertos por una gran cantidad de plantas epífitas, como musgos, bromelias y
orquídeas.
HIDROGRAFIA
Los ríos Sinú y San Jorge nacen dentro del Parque Nacional Natural Paramillo, conformando la
principal estrella fluvial del departamento de Córdoba y una de las más importantes de Colombia.
El área protegida se traslapa con siete sub-zonas hidrográficas (SZH), siendo las más
representativas las del Alto Sinú – Urrá con el 84,45% y el Alto San Jorge con el 27,37% de sus
áreas totales dentro del Parque. En otro sentido, la mayor parte del Parque corresponde a las SZH
Alto Sinú – Urra (72,82% del AP) y Alto San Jorge (20,34%).
La oferta hídrica relacionada con estas SZH es de gran importancia para la región, por proveer el
agua para consumo humano, domestico, agrícola, generación de energía, recreación, transporte,
entre otros; que son fundamentales para la competitividad del noroccidente colombiano. Por esta
razón, la economía bananera, agrícola y pecuaria de Córdoba y Sucre, así como extensas áreas
de humedales (ciénagas de Lorica, Betancí, manglar del antiguo delta del Río Sinú, Depresión
Momposina) dependen de lo que sucede con la fábrica de agua en el área del Parque.
Parques Nacionales Naturales de Colombia y los cuatro pueblos indígenas de la Sierra Nevada de
Santa Marta: Kogui, Arhuaco, Wiwa y Kakuamo, recuerdan que en las partes altas de la Sierra
Nevada de Santa Marta, incluyendo las lagunas, los páramos y los nevados, NO se permiten
actividades turísticas debido a la fragilidad de estos ecosistemas y la importancia cultural. El
ingreso a estos sectores se constituye como una infracción ambiental, de acuerdo con lo
establecido en el decreto 622 de 1977 – recogido en el decreto 1076 de 2015.
UBICACIÓN
El Parque Nacional Natural Sierra Nevada de Santa Marta se encuentra ubicado en los
departamentos de Magdalena, Cesar y La Guajira, a nivel del mar entre los ríos de Don Diego y
Palomino, abarcando un sistema montañoso que incluye diferentes pisos térmicos y alcanza las
nieves perpetuas.
FLORA
Se han registrado 126 especies vegetales endémicas, entre las cuales sobresalen árboles gigantes
como el caracolí (Anacardium excelsum), la ceiba de leche (Hura crepitans), el chupo (Quararibea
cordata), la palma de cera (Ceroxylon) y la tagua (Gaia dendron) conocida como ‘marfil vegetal’.
FAUNA
Viven 44 de las 340 especies endémicas registradas en territorio colombiano y 49 de las 3.057
especies amenazadas que están registradas en Colombia. Algunas de las más significativas son: el
cóndor (Vultur gryphus), la danta (Tapirus kabomani), el jaguar (Panthera onca), el paujil (Crax
alberti) y el venado de páramo (Mazama rufina). Todas están incluidas en alguna categoría de
amenaza de acuerdo con los criterios de la Unión Internacional para la Conservación de la
Naturaleza (UICN).
ECOSISTEMAS
HIDROGRAFIA
El agua es una de sus mayores riquezas, forma una estrella hidrográfica de muy alto rendimiento,
conformada por 35 ríos (16 nacen en el parque) con un caudal que riega las tierras de las planicies
y los valles de los ríos Cesar y Ariguaní y alimenta una extensa zona semiárida de La Guajira, en
especial el valle del río Ranchería, columna vertebral del pueblo Wayuu. Abastece los acueductos
que surten a cerca de 1.5 millones de habitantes de varias ciudades principales y es fuente para
las agroindustrias de banano, palma, arroz, algodón, ganadería y para el sector turístico.
UBICACIÓN
FLORA
FAUNA
La fauna terrestre del Parque está representada principalmente por algunos reptiles como la iguana
(Iguana iguana rhinolopha), el pennie lizard (Anolis pinchoti), el jack lizard (Ameiva ameiva
folliginosa) y el lagarto azul (Cnemidophorus lemnistcatus lemniscatus). Además, hay numerosas
especies de aves entre residentes y migratorias, algunas como la fragata o man o’war (Fragata
magnificens) anidan en los cayos volcánicos. En cuanto a mamíferos, solo existen murciélagos,
incluyendo una especie endémica. La fauna marina es muy variada; se destacan las formaciones
arrecifales, con gran abundancia de corales duros y blandos y esponjas, donde habita una gran
diversidad de peces como pargos, chernas, loros, ballestas, cirujanos y roncos. Entre los
crustáceos se destaca la langosta espinosa (Panulirus argus) y entre los moluscos, el caracol pala
(Strombus gigas).
ECOSISTEMAS
Bosque Seco (Dry Forest): Este Corresponde a formaciones vegetales con coberturas boscosas
continuas, que se distribuyen entre los 0 – 100 msnm, en lugares donde se presenta temperaturas
superiores a los 24 ºC y precipitaciones entre los 700 y 2.000 mm anuales, con uno o dos periodos
marcados de sequía. Típicamente, el número de especies, en muestreos de 0.1 ha, es entre 50 y
70, siendo el valor promedio de 64.9.
Los Pastos marinos en el Parque Nacional se ubican en las zonas litorales adyacentes de los
sectores de Iron Wood Hill y McBean Mangrove, ocupando una extensión aproximada de 50 ha,
(3.4% del área del Parque) que corresponden al 3,12 % de la extensión de Pastos marinos de
Providencia y Santa Catalina Islas. Están conformados principalmente por tres (3)
especies: Thalassia testudinum, Halodule wrigthtii y Syringodium filiforme, que se encuentran
asociadas con algas de los géneros Halimeda, Caulerpa, Penicillus y Dictyota.
En el área del Parque Nacional se pueden definir tres grandes formaciones de coral que hacen
parte del complejo coralino: las formaciones coralinas en laguna arrecifal y terraza lagunar,
conformadas principalmente por parches aislados de coral donde predominan corales masivos,
especies ramificadas y foliares; las formaciones coralinas en la barrera (continua y pináculos).
Estas formaciones ocupan un área aproximada de 1.343.4 ha (90,4% del área del PNN) y que
representa el 0,47% de la extensión de este ecosistema en las Islas de Providencia y Santa
Catalina.
HIDROGRAFIA
Es un área de gran importancia ambiental, ya que posee un ecosistema de bosque nublado único
en el país que funciona como un regulador hídrico para la región, es un oasis en medio de la aridez
que sostiene una gran diversidad de fauna y flora, especialmente adaptada a sobrevivir, crecer y
reproducirse en este tipo de ambiente. A su vez, salvaguarda especies de aves endémicas y
migratorias, lo cual lo hizo merecedor de la declaratoria de Área Especial para la Conservación de
las Aves (AICA) de Colombia y del mundo en el año 2003. El Parque es también un escenario
especialmente importante dentro de la cosmogonía, mitología, orden social y cultural de la étnia
Wayuu
UBICACIÓN
FLORA
El área del Parque tiene una flora muy diversa, con 349 especies vegetales, de las cuales 10 son
endémicas. El bosque tiene hojas permanentes todo el año con abundancia de epífitas, gran
cantidad y variedad de musgos y plantas inferiores (como los helechos), capaces de almacenar
agua de niebla, fenómeno denominado Yauráma por los wayuu.
FAUNA
La diversidad de fauna es uno de los rasgos más significativos del Parque. Se han registrado más
de 140 especies de aves, 17 de las cuales son endémicas y más de 10 migratorias. En cuanto a
mamíferos, se cuentan cerca de 10 especies, entre ellas ardilla, conejo, mico cariblanco, oso
palmero, ratón, tigrillo, venado y zorro perro. También es notable y variada la población de
insectos, así como las de reptiles y anfibios. De hecho, se han registrado alrededor de 15 especies
de serpientes, y recientemente una nueva especie de rana.
ECOSISTEMAS
Los ecosistemas mejor representados en el Parque Nacional Natural de Macuira son el bosque de
niebla, bosque seco tropical, bosque caducifolio o deciduo y bosque ripario o de galería. Sin
embargo, la característica más llamativa del Parque es la presencia del bosque de niebla, de
apariencia muy similar a los bosques andinos situados cerca de la línea de páramo (alturas
superiores a los 2.700 msnm), pero tan solo ubicado por encima de los 550 msnm en esta serranía
de baja altitud. Este bosque, ambientalmente frágil y a la vez sagrado para el Pueblo Wayuu, está
ubicado a escasos cinco kilómetros de un área semidesértica y se encuentra presente en las tres
principales cimas del macizo montañoso denominadas Paluwo’u, Walechi y Alo’ulaa. Por su parte,
el Bosque seco tropical constituye una fuente importante de productos forestales maderables y no
maderables tales como el Uraichi (Handroanthus billbergii), Pasaira (Astronium graveolens) y la
Seiwa (Pachira quinata), entre otros. Finalmente, los bosques de galería demarcan importantes
zonas de recarga hídrica superficial y subterránea formando corredores que conectan el bosque de
niebla con el bosque seco perennifolio y caducifolio, siendo a su vez el hábitat ideal para muchas
especies de aves residentes y migratorias.
HIDROGRAFIA
En sus cimas más altas, el Parque es zona de abundante niebla acumulada por los vientos alisios
del nordeste, que se cargan de humedad al pasar por el mar Caribe y chocan contra la Serranía de
Macuira, especialmente en horas nocturnas. La achaparrada vegetación atrapa la humedad
condensada en la niebla que flota sobre las cumbres. La vertiente nororiental aporta la mayoría de
fuentes de agua como manantiales y arroyos que son permanentes en época de lluvias e
intermitentes en el período seco, mientras que el costado suroccidental es característicamente más
seco. La mayor parte del agua que se produce en la Serranía de la Macuira se filtra en el
piedemomonte entre las arenas de la zona semidesértica aledaña y se convierte en fuente
subterránea que utilizan las comunidades Wayuu para sus necesidades, extrayéndola mediante
pozos profundos. Los principales arroyos de caracter semipermanente son Wotkasainru,
Mekijano’u, Chaamaalu’u y Kaneweru, considerados a su vez, valor objeto de conservación del
área protegida.
Uno de los espectáculos que podrá disfrutar el visitante es la quietud de los cielos azules y
despejados de la península de La Guajira, interrumpida por arreboles de un rosado intenso que se
disuelven en espirales sobre las lagunas del Santuario. Se trata de bandadas de flamencos, aves
esbeltas de plumaje rosa que dan el nombre a esta área protegida. Los gráciles flamencos y el
majestuoso colorido de su plumaje son el principal atractivo del Santuario, que a pesar de su
reducida extensión, es considerado una de las áreas protegidas más ricas en variedad de aves
acuáticas residentes y migratorias.
UBICACIÓN
La Guajira
FLORA
El Santuario está ubicado en una franja transicional entre el bosque seco tropical y muy seco
tropical desarrollándose en un área donde se presenta un período prolongado de sequía en el cual
la mayoría de plantas pierde su follaje. Durante la temporada de lluvias el bosque adquiere
nuevamente su follaje y su exuberancia, para posteriormente florecer de forma masiva, como es el
caso del Puy (Handroanthus billbergii) de hermosas flores amarillas. Alrededor de los estuarios, el
visitante encontrará una vegetación diversa compuesta principalmente por manglares, compuestos
por especies de mangle negro (Avicennia germinans), dulce (Conocarpus
erectus), blanco Laguncularia racemosa (mangle blanco) y en menor proporción el mangle rojo
(Rhizophora mangle), estos bosques que juegan un papel relevante al contribuir a la regulación
hidroecológica y servir de refugio a diferentes especies y en la regulación hidrogeológica.
FAUNA
Al subir los niveles de las aguas durante la época de lluvias, las ciénagas se comunican con el mar
y los camarones (Penaeus sp.) migran masivamente para su reproducción. Hay más de 250
especies de aves, entre ellas se destacan migratorias y amenazadas como el flamenco
rosado (Phoenicopterus ruber ruber) y residentes típicas de ecosistemas secos de la Guajira: como
el rey guajiro (Cardinalis phoeniceus), Pinzón Guajiro (Arremonops tocuyensis) y el Colibrí Anteado
(Leucippus falax). A su vez, el área marina adyacente al Santuario se caracteriza por ser corredor
migratorio de tortugas marinas como la Laúd (Dermochelys coriacea), Cabezona (Caretta caretta),
Carey (Eretmochelys imbricata) y la Tortuga Verde (Chelonia mydas), que se alimentan de las
praderas de pastos marinos.
ECOSISTEMA
El ecosistema representativo del Santuario son las lagunas costeras: laguna Navío Quebrado y
Laguna Grande. Ambas son de gran importancia social, económica y cultural además de tener una
singular capacidad para proveer bienes y servicios ambientales. El área también cuenta con
relictos de bosque seco tropical y muy seco tropical, y ecosistemas de manglar, estos últimos
asociados directamente a las lagunas costeras, y con estuarios que son hábitat de una comunidad
biológica de gran importancia compuesta principalmente por crustáceos, moluscos y peces.
HIDROGRAFIA
Al arribar al Santuario se contemplará una planicie costera formada por valles de fondo plano
drenados por arroyos que aportan el agua dulce a las lagunas costeras. Aquí hay cuatro ciénagas
separadas del mar por barras de arena: la ciénaga de Manzanillo, laguna Grande, la ciénaga de
Chentico y la laguna del Navío Quebrado, donde desemboca el río Tomarrazón-Camarones. En el
área existen otros cuerpos de aguas intermitentes que se originan en épocas de lluvias como Pozo
Redondo, la Barranquita y la Marucha, y algunas corrientes menores como arroyo Perico y laguna
Grande, que son de gran importancia para la existencia de los estuarios. Al terminar el período de
lluvias, el intenso oleaje del mar tiende a arrastrar sedimentos hacia lo alto de la playa hasta cerrar
nuevamente las bocas de las lagunas.
La isla de Salamanca recibió la denominación ‘Vía Parque’ porque permite al visitante contemplar
bosques de manglar, ciénagas y playas excepcionales desde la carretera que comunica
Barranquilla con Santa Marta. Fue declarada Área de Importancia para la Conservación de las
Aves (AICA). Además, esta área, junto con el Santuario de Fauna y Flora de la Ciénaga Grande de
Santa Marta, fueron declaradas en 1998 como Sitios Ramsar de importancia mundial, y en
noviembre de 2000, como Reservas de la Biosfera por la UNESCO. La isla de Salamanca es, en
realidad, un agregado de pequeñas islas formadas por acumulación de sedimentos del delta del
Magdalena, sobre el fondo de una antigua bahía; comunicadas por pequeños canales, integran una
barrera que separa la Ciénaga Grande de Santa Marta del mar Caribe.
UBICACIÓN
Se puede llegar hasta Barranquilla o Santa Marta por tierra y desde allí, por la carretera troncal del
Caribe, se accede al Centro Administrativo Los Cocos y al sector de Cangarú en transporte público.
FLORA
En la Vía Parque podemos encontrar una considerable variedad de vegetación de agua dulce. El
monte espinoso de follaje caduco, con una altura variable de entre 3 y 6 m, tiene predominancia de
especies como el olivo. Los manglares son la formación más extensa y representativa de la zona.
En cuanto a las formaciones de pantanos, destaca la comunidad acuática de especies flotantes,
lechuga de agua, hierbas de agua dulce y bosque de pantano.
FAUNA
El área tiene 52 familias de peces (140 especies) y 17 familias de reptiles, con 35 especies, entre
las que destacan la boa constrictor, el caimán aguja, la iguana, el lagarto, la serpiente de cascabel,
la tortuga cana y la tortuga verde, entre otras. La diversidad de mamíferos está representada por la
presencia de 14 familias y 33 especies. Entre ellos se pueden destacar: el gato de monte, el hurón,
el manatí, el mico de noche, el mono colorado, la nutria, el ocelote, el zorro chucho, el zorro
manglero y el zorro patón. Pero son las aves el grupo mejor conocido, puesto que se trata de uno
de los hábitats más importantes en todo el Caribe como sitio de alimentación y descanso de aves
migratorias. Aquí se han registrado 199 especies de aves y, entre ellas, dos que son endémicas de
la región del Caribe colombiano y que además son especies amenazadas a nivel mundial: el colibrí
(Lepidopyga lilliae) y el golofio.
ECOSISTEMAS
Los principales ecosistemas del área protegida son los bosques de manglar, los bosques
semisecos tropicales, los bosques mixtos y el monte espinoso.
HIDROGRAFIA
El Via Parque consta de una planicie costera que no supera los cinco metros sobre el nivel del mar
y está conformada por valles de fondo plano drenados por arroyos que aportan el agua dulce a las
pequeñas lagunas costeras.
UBICACIÓN
Se encuentra ubicado en la costa Caribe de Colombia, comprende una amplia zona marina frente a
las costas de los departamentos de Bolívar y Sucre, ocupando un área aproximada de 120.000
hectáreas en la jurisdicción del Distrito Turístico y Cultural (D.T. y C.) de Cartagena de Indias. El
Parque inicia a 23 Km al sur de la ciudad de Cartagena de Indias en el sector de Punta Gigante en
el corregimiento de Barú. Y en la zona sur, se encuentra en el bajo Sotavento en el sector del
Archipiélago de San Bernardo a 35 km al noreste de la ciudad de Santiago de Tolú.
FLORA
El Área Protegida se caracteriza por ser en su mayoría submarino donde predomina la vegetación
de manglar y los pastos marinos. En cuanto a la vegetación terrestre, encontramos un remanente
de bosque seco tropical en Isla Rosario (zona intangible) en el Archipiélago de Nuestra Señora del
Rosario.
FAUNA
En el Área Protegida, se han identificado una gran variedad de especies asociadas a los
ecosistemas marinos costeros. Para el caso de los arrecifes de coral, se han identificado 62
especies de corales y otros celenterados, entre los que se encuentran el coral cuerno de arce
(Millepora complanata,) el coral lechuga (Agaricia teniufolia) y el coral Siderastrea
sidérea. Igualmente, se han identificado 18 especies de corales blandos, entre los que se
encuentran el abanico de mar (Gorgonia ventalina), entre otras especies. Otro grupo identificado en
el Área Protegida, comprende a los crustáceos decápodos, con 153 especies; los moluscos con
244 especies, no menos de 153 especies de equinodermos, 199 especies de esponjas
y 513 especies de peces. En cuanto a reptiles se refiere, en el área podemos encontrar tortugas
marinas de la especie Caretta caretta, Chelonia mydas y Eretmochelys imbricata.
ECOSISTEMAS
Se protegen los ecosistemas marino-costeros, tales como Arrecifes de Coral, Pastos Marinos,
Fondos Sedimentarios, Bosque Seco Tropical, Lagunas Costeras, Litoral Rocoso y Arenoso y el
Bosque de Manglar y sus especies asociadas, con el fin de contribuir en la prestación de los
servicios ambientales y/o ecosistémicos.
GEOMORFOLOGIA
El Parque Nacional Natural Los Corales del Rosario y de San Bernardo comprende en su totalidad
la plataforma continental adyacente a los 120 km de costa entre los corregimientos de Barú y Punta
San Bernardo en los departamentos de Bolívar y Sucre. La batimetría, en términos generales
corresponde a una plataforma de ancho homogéneo que varía entre los 20 y 30 km. Su mayor
profundidad se encuentra en el sector centro-oeste alcanzando un valor cercano a los -110 m. Este
Parque Natural se caracteriza, en su zona sumergida, por ser un área plana, levemente ondulada
que se ve interrumpida hacia el norte y sur por la presencia de relieves positivos correspondientes
a corales emergidos asociados al diapirismo de lodos.
Las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta, la montaña costera más alta del mundo, se
hunden en el mar como los dedos de una mano gigantesca entre los que se forman bahías y
ensenadas de belleza singular: Chengue, Gayraca, Cinto, Neguanje, Concha, Guachaquita, con
sus playas de arenas blancas delimitadas por, manglares, matorrales o bosques, y bañadas todas
por las aguas cristalinas del mar Caribe, hacen parte de los muchos atractivos que ofrece el
Parque Nacional Natural Tayrona. Para quienes buscan la contemplación y el descanso, el Parque
ofrece magníficas playas y el relajante panorama de un mar intensamente azul. Quienes se sienten
atraídos por actividades más emocionantes podrán disfrutar de caminatas, careteo y buceo
autónomo.
UBICACIÓN
El Zaíno es la entrada principal y está a 32 km de Santa Marta, por la carretera troncal del Caribe
en dirección a Riohacha. Tiempo estimado en vehículo privado 45 minutos. Por el Zaíno se puede
llegar a Cañaveral, Arrecifes y Cabo de San Juan de Guía.
Palangana queda por el kilómetro 5 por la carretera troncal del Caribe en dirección a Riohacha por
donde se puede llegar a Neguanje, Gayraca y Playa del Muerto “Playa Cristal”. En esta zona el
visitante solo puede pasar el día y no tiene acomodación para pernoctar.
FLORA
Los bosques secos del parque presentan entre la mitad y un tercio de las plantas, en comparación
con los bosques húmedos. Aquí sobresalen especies como la ceiba (Hura crepitans), trupillo
(Prosopis julliflora), aromo (Acacia tortuosa), brasil (Haematoxylon brasiletto), dividivi
(Caesalpinia coriaria), guamacho (Pereskia guamacho), candelabro (Subpilocereus russellianus),
tuna (Opuntia wentiana), resbalamono (Bursera simarouba) y olla de mono (Lecythis minor).
Entre las especies de plantas siempre verdes del bosque húmedo tropical se encuentra gran
variedad de epífitas como musgos, bromelias, aráceas y orquídeas como también la palma de vino
(Sheelea magdalenica), palma amarga (Sabal mauritiiformis), iraca (Caludovica palmata), caracolí
(Anacardium excelsum), guáimaro (Brosimun alicastrum), macondo o bonga (Cavanillesia
platanifolia), ariza (Brownea ariza) e higuerón (Ficus sp.).
Para el bosque nublado, las especies que se destacan son el guarumo (Cecropia peltata), cafecillo
(Senna occidentalis), majagua blanca (Heliocarpus americanus), aguacate (Persea americana) y
guáimaro (Brosimum sp.), entre otras.
FAUNA
Sin contar las cuarenta especies de murciélagos, se reportan un total de 59 especies de mamíferos
entre los que se destacan el mono nocturno (Aotus lemurinus), mico maicero (Cebus albifrons),
perezoso (Bradypus variegatus), armadillo (Dasypus novemcinctus), venado colorado (Mazama
americana), jaguar (Panthera onca), ocelote (Leopardus pardalis),
oso hormiguero (Myrmecophaga tridactyla), así como cinco especies de mamíferos marinos.
Se reportan 396 especies de aves, entre ellas, el tinamú chico (Cripturellus soui), buitre
rey (Sarcoramphus papa), gavilán caminero (Buteo magnirostris), halcón garrapatero (Milvago
chimachima) y torcaza morada (Columba cayannensis).
ECOSISTEMAS
El Parque tiene ecosistemas que albergan una gran variedad y número de especies vegetales;
entre éstos sobresalen el matorral espinoso y los bosques secos, húmedos y nublados. El bosque
húmedo, hacia el sector este del Parque, permanece exuberante y verde todo el año y el bosque
seco del área protegida es uno de los mejores conservados del país. Los ecosistemas marino
costeros consisten de fondos arenosos, formaciones coralinas, lagunas costeras, litoral rocoso,
playas arenosas, praderas de pastos marinos y manglares.
HIDROGRAFIA
La red hidrográfica del Parque está conformada por dos sistemas de drenaje. El primero consiste
de un conjunto de pequeñas quebradas y arroyos que fluyen directamente al mar Caribe. Hacia el
oriente los caudales aumentan gradualmente y se hacen permanentes. Igualmente, las quebradas
Cinto, La Boquita, San Lucas, Santa Rosa y Mason suministran agua dulce todo el año. El segundo
sistema de drenaje es continental, integrado por las quebradas que desembocan al río Piedras, de
las cuales la más importante es la quebrada Jordán.