Capacitacion Organizacional Diagnostico Lopera 2019
Capacitacion Organizacional Diagnostico Lopera 2019
Capacitacion Organizacional Diagnostico Lopera 2019
Artículo de revisión presentado para optar al título de Especialista en Psicología de las Organizaciones
y del Trabajo
Resumen
La volátil realidad en la que está inmerso el ser humano actual, desdibuja la aparente
dicotomía que tal vez pueda pensarse entre desarrollo humano y productividad, el hombre requiere
cada vez más alcanzar una integralidad que lo haga más competitivo frente a las exigencias del
mercado y, la organización por su parte, necesita también garantizar una respuesta a las demandas
del mundo cada vez más cambiante; es entonces cuando la formación se hace necesaria y aparece
como una respuesta estratégica. La capacitación ha de responder a la demanda de un contexto, lo
cual requiere que esta sea pensada como un proceso formal. Este artículo se centra en pensar la
fase inicial del proceso formativo, a saber: el diagnóstico, el cual dará todas las herramientas para
proceder a estructurar un plan de capacitación que supla las necesidades reales de la organización.
Abstract
The volatile reality which the current human being is immersed in, blurs apart the apparent
dichotomy that may be thought between human development and productivity, man increasingly
requires to reach an integrality that makes him more competitive to face the market demands and,
the organization, in turn, also needs to guarantee a response to the demands of the increasingly
changing world; it´s then when training becomes necessary and arises as a strategic response. The
training must respond to a context demand and requires to be thought as a formal process. This
article focuses on thinking the initial phase of the training process, namely: the diagnosis, which
will give all the tools to proceed to structure a training plan that fills the real needs of the
organization
Introducción
Cada vez son mayores las habilidades blandas con las que necesita contar el ser humano
para adaptarse a las transformaciones tecnológicas y a las exigencias de la sociedad cambiante, ya
no se trata solo del conocimiento técnico que adquiere con su profesión, ni de las destrezas que le
ayudarán a desempeñar cierta tarea, sino que requiere un desarrollo constante que le conduzca a la
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 5
integralidad y le permita estar a la par con el mercado mostrando ventajas competitivas, se hace
necesario entonces un desarrollo que le facilite la supervivencia, que le garantice estar vigente en
el mundo. Esto es un asunto que fácilmente puede atribuirse a la educación académica, lo que de
alguna manera le otorga un rol productivo y servil, (Salgado, Gómez, & Juan, 2017) mencionan
que las empresas de hoy se percataron de lo indispensable que es transformar el sistema
educacional para responder a las demandas actuales (Morales, 2009 citado por Salgado et al.,
2017); ahora bien, no es tema de este escrito examinar si la academia es o no responsable de esta
formación o si está obligada a supeditarse a las demandas del mercado, tampoco se trata de esperar
que tome medidas que contribuyan a una educación que responda a un perfil laboral o de
comprometerla con el desarrollo de competencias organizacionales, lo que se pretende es resaltar
la necesidad que tienen las empresas de llevar a cabo acciones orientadas a la formación de su
capital humano para lograr ventajas competitivas que respondan a las exigencias del contexto;
“ante tal escenario, cobra relevancia la educación, formación, capacitación de la fuerza de trabajo,
pues con su conocimiento mantienen o desarrollan a las empresas” (Añez & Nava, 2009, p. 165).
Al hablar de formación en un ambiente organizacional es necesario plantearse la pregunta sobre el
cómo saber si realmente existe tal necesidad, qué elementos nos ayudan a definir que se necesita
capacitar al personal, es decir, se requiere analizar la situación actual, elaborar un diagnóstico de
necesidades.
Sapién, Piñón, & Gutiérrez (2014) muestran que si bien la capacitación y el adiestramiento
son formas educativas que proporcionan habilidades y destrezas, tienen diferencias entre sí, (Ayala,
2004 citado por Sapién et al., 2014, p. 124) señalan que “la capacitación es un proceso educacional
de carácter estratégico, aplicado de manera organizada y sistemática que modifica actitudes”
(citando a William, 1993), así mismo muestran que el adiestramiento, por su parte, brinda
conocimientos en los diferentes aspectos técnicos del trabajo
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 6
La capacitación en cambio va un paso más allá, puesto que apunta no solo al nivel primario
de operar una tarea correctamente sino que abarca aspectos como el desarrollo humano, el cual
desemboca en la inserción de la organización en el mercado. Con la capacitación se busca entonces
la integralidad, tal como lo mencionan (Sapién et al., 2014, p.124), la capacitación refiriéndose al
hombre “debe tener en cuenta toda la formación de su personalidad: carácter, hábitos, educación
de la voluntad, cultivo de la inteligencia, sensibilidad hacia los problemas humanos y capacidad
para dirigir” (citando a Rubio, 2004)
Muchas son entonces las definiciones que podemos encontrar sobre capacitación, sin
embargo, no se pasará a investigar cada una sino más bien a resaltar un aspecto importante que
Guiñazú (2004) menciona a propósito de su propia definición sobre capacitación, a saber: las
demandas del contexto. La autora define la capacitación como:
necesita aprender la gente?, ¿con qué velocidad?, ¿lo tiene que aprender de manera formal o basta
con prácticas informales?” (Gore, 2006, p.23); todos estos son cuestionamientos que dan a la
capacitación una visión más elaborada y manifiestan su relación con la productividad. De acuerdo
con Reynoso (2007) el objetivo de las actividades de capacitación es “generar procesos de cambio
para cumplir las metas de la organización” (p.166), es decir que la capacitación está ligada al
mejoramiento de los resultados internos de la empresa, no se da como fenómeno aislado sino que
es una aliada para el desarrollo.
La volátil realidad en la que está inmerso el ser humano actual, desdibuja la aparente
dicotomía que tal vez pueda pensarse entre desarrollo humano y productividad o como lo menciona
más claramente Siliceo (2010):
capacitación en países como por ejemplo México, nos encontramos con que la capacitación
organizacional está inmersa en el derecho al trabajo ya que “la formación profesional es un
instrumento económico que mejora la productividad-competitividad de la empresa; asimismo,
entre otras razones, porque la formación profesional es un campo fértil para el diálogo social”
(Sánchez, 2007, p. 228). Cuando nos preguntamos entonces por la clave del éxito en las empresas,
ya no solo se responde en términos de productos o servicios, ahora la mirada se dirige también a la
formación que posee el ser humano “es necesario implantar la gerencia del conocimiento, con la
cual se pretende fortalecer y desarrollar actitudes, así como competencias en los trabajadores, a fin
de encontrar soluciones rápidas a los problemas organizaciones y del mercado” (Añez & Nava,
2009, p. 163). Mejía & Jaramillo (2006) nos dicen que ahora nos encontramos en la era del talento
en la cual el capital y la tecnología ya no son suficientes para que una organización se mantenga
vigente y sobreviva al entorno globalizado de hoy, sino que ahora es indispensable contar con
capacidad de innovación y talento humano. Rivera (2006) apunta también que “ahora las
organizaciones comprenden que el conocimiento es su principal activo y la clave para una ventaja
competitiva” (p. 66), la capacitación tiene efectos positivos no solo en cuanto a resultados y
productividad, también en el desarrollo personal y profesional del individuo, (Mitchell, 1995 citado
por Bermúdez, 2015) nos muestra beneficios adicionales tales como:
tiene un proyecto de futuro para él. La compañía le agrega valor y los sitúa en una posición de
expectativa en el mercado”.
Méndez (2004) nos menciona que la capacitación ha de tomarse “como un medio para
conseguir un fin determinado” (párr. 6), es decir, como una herramienta que nos permitirá ir de un
punto a otro, de lo que es a lo que debería ser, tomado de esta forma se vislumbra en esta definición
el asunto de la necesidad, se requiere la capacitación para poder impulsar a la persona a un estado
óptimo que le permita ejercer su cargo de manera efectiva, o como lo expresa Pablo (2005) la
necesidad de capacitación surge como “una diferencia entre los requisitos exigidos por el cargo y
las habilidades actuales del ocupante del cargo” (Blake, 1987 citado por Pablo, 2005, p. 10); es
aquí entonces donde inicia un proyecto de capacitación, existe una carencia, una demanda que
necesita atención.
La capacitación como todo proceso deberá tener unos momentos de elaboración, de acuerdo
con López (2005) los proyectos de entrenamiento deberán pasar por los siguientes estadios:
Identificación y definición de las necesidades de capacitación
Detección de las necesidades encubiertas
Fijación de objetivos a partir de las necesidades
Elaboración de un plan de capacitación
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 10
Elaboración de programas
Redacción de objetivos de los cursos en términos conductuales
Contenidos
Métodos
Materiales
Organización de los eventos de capacitación
Evaluación del plan y de los programas, así como de la realización y resultados
obtenidos
Seguimiento
De acuerdo con Nagles (2006) el propósito del diagnóstico es “determinar las causas del
evento y su influencia en la ocurrencia del mismo, es decir, los efectos sobre la organización”
(p.103). Un correcto diagnóstico de necesidades de capacitación permite determinar, según Lay &
Zamora (2005):
un nivel más allá y menciona dentro de la situación ideal aspectos como los recursos materiales, es
decir las herramientas físicas que requieren los colaboradores para realizar eficientemente su labor,
también habla sobre el ambiente laboral ideal como el que proporciona las condiciones adecuadas
para que el empleado se desenvuelva, al igual que las medidas de seguridad que pretenden prevenir
accidentes. La situación ideal encierra entonces todos los aspectos que se desean del cargo y de la
organización o como lo expresa más claramente Moreno (2015) respecto a su definición “se
entiende como situación ideal de la organización cuando cuenta con recursos suficientes y son
totalmente aprovechados, permitiendo desarrollar las actividades de manera óptima”(p. 38).
Implica investigar lo que el personal hace y cómo lo hace (…), algunas técnicas
que ayudan a recopilar esta información son: la entrevista; la encuesta; la
observación, análisis y evaluación de tareas; el autoanálisis; y la evaluación de
conocimientos y habilidades (Rodríguez, 2002, p. 77).
Observación: la observación no es más que el registro de los hallazgos que dan cuenta de
necesidades dentro de la organización, esto puede ir tanto desde falencias en el desempeño de los
colaboradores hasta cuestiones ergonómicas de la empresa, (Chivenato, 2008 citado por Ávila,
2016) nos menciona que el registro de “equipos rotos, atraso en relación con el cronograma,
desperdicio de materia prima, número de problemas disciplinarios, alto índice de ausentismo, etc.”,
pueden ser aspectos a incluir en el registro de observación para detectar necesidades de
capacitación. Es importante que en el proceso de la observación no se haga ningún tipo de filtro
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 14
que pretenda separar los casos correspondientes a capacitación, ya que toda la información
consignada puede servir para detectar otro tipo de necesidades.
Los grupos de formación: en esta técnica se recogen las soluciones de los miembros de la
organización frente a un problema planteado, acá se ponen de manifiesto asuntos como el
conocimiento del cargo, destrezas, competencias, etc., también se discute “acerca de asuntos que
conciernen a los objetivos de la organización, problemas de operaciones, planes para determinados
objetivos y otros asuntos administrativos” (Chivenato, 2008 citado por Ávila, 2016, p. 27).
Cuestionarios: los cuestionarios permiten hacer uso de todo tipo de preguntas que ayuden a
dilucidar un problema, preferiblemente preguntas abiertas y usando palabras con adverbios poco
precisos, con el fin de que la persona que responde brinde información amplia que no solo responda
la pregunta en cuestión, sino que también dé cuenta de otros asuntos. A propósito de esta técnica,
Ávila (2016) citando a Chiavenato (2008) sugiere en cambio un listado preciso a manera de lista
de control que dé cuenta de la evidencia de las necesidades de capacitación; los cuestionarios son
en todo caso una técnica sencilla que puede utilizarse para hacer manifiestas situaciones de todas
las áreas y de cualquier cargo dentro de la empresa.
La entrevista: según Siliceo (2006) esta técnica, así como la anterior, son las utilizadas con
mayor éxito en la búsqueda de información relativa a la situación real de la organización, “el
entrevistado puede expresar más abiertamente cuestiones que son de interés o preocupación para
la realización de sus tareas” (Ávila, 2016), lo cual proporciona bastantes insumos para los hallazgos
de detención de necesidades.
ahondar en lo que se ha hecho y descubrir las brechas entre los proyectos ejecutados y lo que se
desea alcanzar en términos formativos.
Con los insumos que dejan el análisis de la situación ideal y de la situación real, ya se puede
avanzar al tercer paso el cual se trata de realizar una comparación entre ambos. Acá se pasa a
confrontar lo que se debe hacer con lo que se hace, “al tener claro los datos ideales de cada puesto
se procede a comparar con el desempeño de los trabajadores para obtener como resultado la
problemática existente en cada uno de ellos” (Moreno, 2015, p. 61). (Goldestein, 1986 citado por
Ciruela, 2008) señala 3 etapas que podemos enmarcar dentro de esta fase comparativa, estas son:
Análisis de la organización
Análisis del puesto de trabajo
Análisis de las personas
Ejecutados estos pasos se tendrán los insumos que servirán como base para determinar si
lo observado obedece o no a una carencia de conocimientos para así proceder con la elaboración
objetivos de un plan estructurado de capacitación y en general de las demás fases expuestas por
López (2005). Según Lay, Suarez y Zamora (2005) “una vez determinadas las necesidades de
capacitación, la planificación, la iniciación, la medición y la comprobación de la capacitación
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 16
ganan en significación y se organizan mucho más” (p. 267). Ahora bien, es importante aclarar que
la búsqueda de necesidades de capacitación no es un proceso que debe realizarse en cierta época o
cada vez que se quiera renovar o ajustar la gestión de conocimiento de la organización, esto es más
bien como lo menciona Karina (2005) “un proceso continuo, ya que siempre habrá un
comportamiento diferente al esperado o por lo menos siempre estará el deseo de superarse” (p. 8),
García (2015) expresa al respecto que
Lay, Suarez y Zamora (2005) indican también que “la determinación de necesidades de
capacitación es un proceso permanente, sistemático y planificado que permite determinar, mediante
la aplicación de métodos e instrumentos de investigación, el estado real de la capacitación de una
persona o grupo de ellas” (p. 267), lo ideal sería entonces que la empresa constantemente se esté
preguntando si la situación actual responde o no a lo que se quiere, de esta forma más que un
proceso sería una actitud, una manera de interpretar la realidad, así poco a poco el interés por el
conocimiento se irá instaurando en el día a día, como lo expresan Garzón y Fisher (2008) se debe
generar un ambiente en el que todas las personas estén comprometidas con la observación de lo
que sucede, analizar y sacar conclusiones que enriquezcan el aprendizaje individual y colectivo;
(McDermott y O’Dell, 2011 citado por Castañeda, 2015, p. 65) menciona que “cuando una
organización cuenta con una cultura del aprendizaje, el conocimiento de los trabajadores se integra
a la solución de los problemas prácticos del negocio”.
efectivamente una situación que exhibe carencia de conocimientos, habilidades o actitudes, o si por
el contrario estamos frente a una demanda de otro tipo” (p. 15), es preciso entonces detectar y
separar las necesidades de capacitación de aquellas que no lo son, revisar qué situaciones no se
solucionan con entrenamiento y aislaras como pertenecientes a otras carencias de la organización.
Méndoza, 1982 citado por Juárez, 2004) expresa que situaciones tales como peticiones de jefes por
resolver problemas con su personal, solicitud de jefes para que el personal sea responsable y se
interese en el trabajo, actividades que se irán a realizar una sola vez, ineptitud de los jefes y
superiores, los bajos niveles de escolaridad, entre otros; todo esto son cuestiones que no obedecen
a una necesidad de capacitación sino que deben solucionarse a través de otros mecanismos ya sean
de índole administrativo o de liderazgo de los superiores.
La necesidad del hacer apunta a alguna distancia encontrada entre el saber y la práctica, la
persona conoce la teoría pero presenta falencias al intentar realizarla. Existe una falencia en “las
habilidades que permiten poner en práctica los conocimientos que se poseen” (Capuano, 2004, p.
17), ya sean técnicas, sociales o cognitivas.
sociales, etc.) a la persona, que determinan que ésta se esfuerce o no por mostrar
una competencia determinada (p. 33).
Estas tres distinciones de las necesidades de capacitación (saber, hacer y querer) están
presentes dentro de los tres grupos de necesidad que exponen Blake, Artus y Barreto (1990), los
cuales son: necesidad por discrepancia, por cambio o por incorporación, la explicación general del
proceso se resume en la figura 1:
conocimientos y habilidades” (p. 58), de esta forma estas necesidades por discrepancia “se
identifican en términos de resultados, no de procesos” (Bausela, 2007, p. 66), es decir que se pueden
detectar por la respuesta que proporciona el colaborador; Gairín (1995) dice que: “el mayor
problema de este tipo de necesidades es el reconocimiento del déficit por parte de los afectados del
déficit” (p. 223), ningún área de cualquier empresa tomaría de buena forma el aceptar “que se está
trabajando por debajo de las expectativas y que no se poseen suficientes conocimientos o
habilidades (...)" Por lo general las personas inmersas en la discrepancia opinan que sus labores las
están ejecutando correctamente y que por lo tanto no tienen la necesidad de aprender algo nuevo.
Frente a esto Pablo (2005) indica que se requiere un tipo de capacitación correctiva la cual “no
tiene por objeto desarrollar habilidades nuevas sino corregir las deficiencias actuales” (p.8). Según
González, Velasco & Villamarín (2017) la capacitación correctiva es la que está orientada
directamente a solucionar problemas de desempeño.
Las necesidades por cambio son las que “surgen cuando un proyecto cambia la manera de
hacer algo que ya se está haciendo, pero que no se lo podría hacer sin ninguna forma de
aprendizaje” (Pablo, 2005, p. 12), un ejemplo de esta necesidad podría ser la inmersión de una
nueva plataforma tecnológica o quizá una forma distinta de abordar los procesos como resultado
de una actualización; acá se hace estrictamente necesaria una intervención puesto que la forma
tradicional de ejecución cae en desuso y sin la capacitación “los empleados podrían verse
desplazados por dichos cambios” (Pablo, 2005)); es preciso una capacitación que apunte a la
gestión del cambio de tal manera que “permita descomponer la complejidad del cambio en tareas
y actividades tangibles” (Borroso y Delgado, 2007) y de esta manera la transformación no se
convierta en un suceso traumático dentro de la organización.
Las necesidades de incorporación por su parte se dan cuando se adiciona una actividad al
proceso que se venía ejecutando, tienen que ver con una nueva acción que se agrega a la labor
actual, estas necesidades “surgen como consecuencia (...) de la realización de tareas que
actualmente no se están haciendo. Se precisa aquí un aprendizaje para una nueva tarea” (Gairín,
1995). También pueden darse por la incursión de nuevas políticas, se requiere entonces una
capacitación que acompañe el cambio y minimice la resistencia a éste.
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 20
Al finalizar esta fase del diagnóstico se obtienen los insumos necesarios para iniciar con las
demás fases, este paso inicial deja un gran número de posibilidades, abre un panorama que permite
la transformación de las necesidades en actividades formativas que propugnan por el desarrollo del
saber, el hacer y el querer, se da paso a nuevos retos iluminados por hallazgos que facilitarán la
fijación de objetivos y la elaboración de un plan de capacitación formal.
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 21
Conclusiones
La capacitación no es una actividad aislada sino que debe atender las demandas
del contexto, lo cual abre sus posibilidades pedagógicas y la impulsa a pensarse
como un proceso que requiere pasos estructurados para su elaboración.
Referencias
Añez, C., & Nava, Y. (2009). Gestión del conocimiento del capital humano en las pequeñas empresas.
Omnia, 15(1), 162–177.
Aragón, A., & Esteban, N. (2010). La formación en la empresa española: ¿sólo se busca mejorar los
resultados organizacionales? Universia Business Review, 26, 34–56.
Ávila, J. D. (2016). DIAGNÓSTICO DE NECESIDADES DE CAPACITACIÓN PARA LA EMPRESA
“IMPORTADORA TOMEBAMBA S.A.” Universidad Politécnica Salesiana.
Barrosa, F., & Salazar, J. (2010). Necesidades de capacitación en empresas comerciales y de servicios. un
estudio comparativo en 60 empresas de la ciudad de mérida, yucatán, méxico. Panorama
Administrativo, 4, 27–46.
Barroso, G., & Delgado, M. (2007). Gestión del cambio organizacional a través de proyectos. Ingeniería
Industrial, XXVIII(1), 42–47.
Bausela, E. (2007). ANÁLISIS DE NECESIDADES EN EL PROCESO DE DISEÑO DE UN
PROGRAMA DE ORIENTACIÓN. Retrieved from
http://www.academia.edu/36222067/ANÁLISIS_DE_NECESIDADES_EN_EL_PROCESO_DE_DI
SEÑO_DE_UN_PROGRAMA
Bermudez, L. A. (2015). Capacitación: Una Herramienta De Fortalecimiento De Las Pymes. InterSedes:
Revista de Las Sedes Regionales, XVI(33), 1–25. Retrieved from
http://www.redalyc.org/pdf/666/66638602001.pdf
Blake, Artus, & Barreto. (1990). Qué hago con la gente? : cómo se generan y se detectan las necesidades
de capacitación. Buenos Aires: Tesis.
Blake, O. (1987). La Capacitación, un recurso dinamizador de las organizaciones (Parte B).
Böhrt, M. (2000). Capacitación y desarrollo de los recursos humanos: reflexiones integradoras. Retrieved
from http://www.scielo.org.bo/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2077-33232000000200015
Bravo, Y., & Vasquez, J. (2012). Diagnostico de necesidades y propuesta de capacitacion para la empresa
ESFEL SAS esmaltes ferro eljuri. Universidad Politécnica Salesiana. Retrieved from
http://dspace.ups.edu.ec/bitstream/123456789/7130/1/UPS-CT003947.pdf
Bustelo Ruesta, C., & Amarilla Iglesias, R. (2006). Gestión del conocimiento y gestión de la información.
Revista Tecnológicas, (16), 59–82.
Capuano A. (2004). Evaluación desempeño por Competencias. Invenio, 7(13), 139–150. Retrieved from
http://www.redalyc.org/pdf/877/87713710.pdf
Castañeda, D. I. (2015). Condiciones para el aprendizaje organizacional. Estudios Gerenciales, 31(134),
62–67. https://doi.org/10.1016/j.estger.2014.09.003
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 23
Ciruela Lorenzo, A. M. (2009). La formación del capital humano como elemento de desarrollo de las
cooperativas. Análisis de las necesidades formativas en las sociedades cooperativas mediante procesos
de auditoría sociolaboral. CIRIEC-España. Revista de Economía Pública, Social y Cooperativa, (64),
85–104. Retrieved from http://www.ciriec-
revistaeconomia.es/ver_pdf.php?archivo=6404_Ciruela.pdf&id_articulo=686
Fernández-Salinero, C. (2004). Un enfoque pedagógico para el diseño de programas de formación en
contextos organizativos. Teoría de La Educación, (16), 109–144.
Gairín Sallán, J. (1995). Estudio de las necesidades de formación de los equipos directivos de los centros
educativos. Madrid: Ministerio de Educación y Ciencia.
García López, J. (2013). EL PROCESO DE CAPACITACIÓN, SUS ETAPAS E IMPLEMENTACIÓN PARA
MEJORAR EL DESEMPEÑO DEL RECURSO HUMANO EN LAS ORGANIZACIONES.
Garzón, M., & Fischer, A. (2008). Modelo teórico de aprendizaje organizacional. Pensamiento y Gestión,
No 24, 195–224.
Gonzales, J., Jesús, V., & Villamarín, Os. (2017). Creación de un plan de capacitación del recurso humano
para la empresa Quesera Uno A S.A.S de Bogotá. Universidad de la Salle, Facultad de ciencias
Administrativas y Contables, Bogotá.
Gore, E. (2001). La capacitación laboral y la construcción del conocimiento en las organizaciones, la
generación a la luz de un análisis de casos. Universidad de Buenos Aires, Facultad de Ciencias
Económicas, Buenos Aires.
Gore, E., & Dunlap, D. (2006). Aprendizaje y organización: Una lectura educativa de teorías de la
organización. (E. G. S.A., Ed.). Argentina.
Guiñazú, G. (2004). Capacitación efectiva en la empresa. Invenio, 7, 103–116.
Herrera, D., Ramirez, G., & Rosas, J. (2017). Evaluación y Daignóstico de las Organizaciones. Journal of
Experimental Psychology: General (1st ed.). México: Grupo Editorial Hess S.A.
Hidalgo Arancibia, R. (2006). DETECCIÓN DE NECESIDADES DE CAPACITACIÓN DE
COMPETENCIAS LABORALES EN OPERADORES Y MANTENEDORES DE LHD EN MINERÍA.
Universidad de Santiago de Chile, Facultad de Ingeniería, Santiago.
Jaeger, W. (1968). PAIDEIA: LOS IDEALES DE LA CULTURA GRIEGA ((2a. ed.).). MEXICO: FONDO
DE CULTURA ECONOMICA.
Juárez, V. (2004). EL PROCESO DE DETECCIÒN DE NECESIDADES DE CAPACITACIÒN EN EL
SISTEMA NACIONAL PARA EL DESARROLLO INTEGRAL DE LA FAMILIA DIF. Universidad
Pedagógica Nacional, Academia de Administración Educativa, México.
Lay, M. T., & Zamora, J. S. M. (2005). Modelo para gestionar la capacitación de directivos y reservas en la
empresa ganadera cubana . II . Determinación de las necesidades de capacitación individuales. Pastos
y Forrajes, 28(4), 365–372. https://doi.org/10.1038/363527a0
López, B. (2014). DIAGNÓSTICO DE NECESIDADES DE CAPACITACIÓN EN EL HOSPITAL
NACIONAL DEL MUNICIPIO DE SAN PEDRO NECTA, HUEHUETENANGO. Universidad Rafael
Landívar, Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales, Huehuetenango.
López, M. (2005). Capacitación. Ciencía Tecnológica, 27–30.
Mejía, A., & Jaramillo, M. (2006). Formación del talento humano: factor estratégico para el desarrollo de
LA CAPACITACIÓN ORGANIZACIONAL: EL DIAGNÓSTICO Y SUS POSIBILIDADES 24
Torres, M., & Torres, C. (2010). Capacitación Por Competencias Laborales Un Logro Productivo
Para La Empresa Farmacéutica Laboratories De Colombia.