Proteccion Catodica
Proteccion Catodica
Proteccion Catodica
CORROSION Y DESGASTE
PROF.: ESTUDIANTE:
Diciembre de 2020
1. PROTECCIÓN CATÓDICA.
La protección catódica (CP) es una técnica para controlar la corrosión galvánica de una
superficie de metal convirtiéndola en el cátodo de una celda electroquímica. El método más
sencillo de aplicar la CP es mediante la conexión del metal a proteger con otro metal más
fácilmente corroible al actuar como ánodo de una celda electroquímica. Los sistemas de
protección catódica son los que se usan más comúnmente para proteger acero, el agua o de
combustible el transporte por tuberías y tanques de almacenamiento, barcos, o una plataforma
petrolífera tanto mar adentro como en tierra firme.
1.1. HISTORIA
La protección catódica fue descrita por primera vez por Humphry Davy en una serie de
documentos presentados a la Royal Society2 en Londres en 1824. Después de una serie de
pruebas, la primera aplicación fue en el buque HMS Samarang3 en 1824. Se dispuso un
ánodo de sacrificio de hierro a la plancha de cobre del casco por debajo de la línea de
flotación y eso redujo drásticamente la velocidad de corrosión del cobre. Sin embargo, un
efecto secundario de la CP fue que hizo aumentar el crecimiento de algas. El cobre, cuando
se corroe, libera iones de cobre que tienen un efecto antialgas. Dado que el exceso de
crecimiento de algas afecta las prestaciones de la nave, la Royal Navy decidió que era mejor
permitir que el cobre se corroyera y tener el beneficio del crecimiento reducido de algas efecto
anti-incrustación, de manera que la CP se dejó de utilizar.
1.2. TIPOS.
1.2.A. CP Galvanicas.
Los ánodos galvánicos son diseñados y seleccionados para tener una tensión más "activa"
(potencial electroquímico más negativo) que el metal de la estructura (en general acero). Para
una CP eficaz, el potencial de la superficie de acero ha de estar polarizado más negativo
hasta que la superficie tenga un potencial uniforme. En este momento, la fuerza impulsora
para la reacción de corrosión se elimina. El ánodo galvánico se sigue corroyendo, se consume
el material del ánodo hasta que finalmente éste debe ser reemplazado. La polarización es
causada por el flujo de electrones de la ánodo en el cátodo. La fuerza impulsora para el flujo
de CP actual es la diferencia de potencial electroquímico entre el ánodo y el cátodo.
Como se vi anteriormente, en una celda galvánica existe un flujo de corriente a través del
electrolito desde el ánodo hacia el cátodo, mientras que los electrones pasan del ánodo al
cátodo por un conductor metálico. De esta forma el cátodo se beneficia del suministro de
electrones, disminuyendo así su velocidad de corrosión.
Una propiedad importante de los ánodos de zinc es que su capacidad no se ve afectada por la
densidad de corriente de operación. Por lo tanto, los ánodos de aleaciones de zinc se
emplean generalmente para proteger tuberías, donde el efecto que produce el hecho de que
el tubo esté enterrado, junto con un recubrimiento de alto desempeño, tienden a proveer una
densidad de corriente anódica baja. Los ánodos de zinc se pueden emplear exitosamente
para proteger estructuras en agua o en medios lodosos con resistividades de hasta 1000
cm.
Este ánodo se hizo popular debido a su superioridad en comparación con los ánodos de Mg y
Zn respecto a su: 1) bajo costo, 2) larga vida, 3) alta capacidad energética, y 4) bajo peso.
Estos ánodos son ideales para estructuras que tienen un peso limitado, como submarinos y
armamento, pero también para todo tipo de estructuras incluyendo plataformas costeras y
naves. Se han desarrollado varias aleaciones comerciales ampliamente usadas, como el
“Galvalum”. Sin embargo, como contiene mercurio, que es un elemento ambientalmente
controversial, los ingenieros en PC crearon nuevas aleaciones que pueden dividirse en tres
tipos principales:
Tienen un potencial de corrosión altamente negativo y por lo tanto se disuelven con mucha
fuerza en agua de mar. Por lo tanto, las aleaciones de Mg están restringidas a la protección de
tuberías enterradas o de estructuras en aguas de estuario, donde la resistividad es
suficientemente alta como para limitar la efectividad de los ánodos de Zn o Al. También se han
empleado en la protección de naves cuando éstas entran en aguas con alta resistividad, como
el agua de río. La protección de tanques de almacenamiento conteniendo agua fresca o
salobre es otra aplicación adecuada. Estos ánodos son de gran ayuda en la protección de las
cajas de condensación (condenser boxes) en los sistemas de enfriamiento con agua. A
continuación, se presenta la eficiencia, potencial y vida de los ánodos de magnesio y sus
aleaciones.
De esta forma se logra que la corriente fluya a través de un ánodo fijo hacia el
electrolito, y de ahí a la estructura a proteger. La gran ventaja es que la cantidad
de corriente de protección suministrada no está limitada por la diferencia de
potencial entre el ánodo y la estructura, como ocurre al emplear ánodos de
sacrificio. Se pueden proteger grandes estructuras, con un menor número de
ánodos, y una mayor corriente.
El agua de mar lleva millones de organismos vivos que cuando entran en el circuito de
refrigeración del barco, se adhieren a las paredes internas de las tuberías y tomas de
agua de mar pudiendo llegar a obstruir por completo estas conducciones.
Cathelco cuenta con sistemas ICCP (Impress Current Cathodic Protection) especializados
en cualquier tipo de buque. El sistema C–Shield, dispone la combinación de un panel de
control con diseño avanzado y una amplia selección de ánodos para el casco del barco.