Planificacion Tributaria Unidad I
Planificacion Tributaria Unidad I
Planificacion Tributaria Unidad I
Planificación Tributaria
Para Barry (1992, Pág. 17) “es un proceso que consiste en tomar en consideración todos los factores fiscales
relevantes” vale decir, aquellos que inciden y determinan el monto de la declaración fiscal, en tal sentido el autor
continua refiriendo que a través de la planificación tributaria se pueden “establecer relaciones y realizar transacciones y
operaciones con el fin de mantener lo más bajo posible la carga fiscal que recae sobre los hechos y las personas, al
mismo tiempo que se realizan los negocios y se alcanzan objetivos personales”. La planificación tributaria implica
entonces la conjugación organizada de varios elementos encauzados a soportar una carga fiscal justa sin limitar las
actividades necesarias para el cumplimiento de los propósitos de la Organización y sus miembros, siempre enmarcada
en las disposiciones legales. Se observa entonces como se encuentra inserta dentro de la planificación estratégica. Por
su parte Galarraga (2002) y Parra (2001) igualmente afirman, que este tipo de planificación busca conducir el
desarrollo adecuado de los acontecimientos, las actividades y las transacciones financieras, dentro de los límites
establecidos por las leyes fiscales y parafiscales con el fin de disminuir el pasivo tributario de las empresas.
Definitivamente este tipo de guía de acción no se limita únicamente a los impuestos también considera las
contribuciones, porque estas últimas de ejercen igual forma una presión tributaria representativa en las organizaciones
que deben cumplir con su aporte, a pesar de ser de diferentes naturalezas. Considerando que en Venezuela desde
1993 la tendencia ha sido la implementación sucesiva de nuevos tributos, bien sea a nivel nacional, regional o
municipal y en algunos casos el aumento de la alícuota de los ya existentes, para la empresa la posibilidad de diseñar
estrategias que permitan reducir la alta presión tributaria sin incumplir la norma resulta cada vez más necesaria e
importante, ya que de esta manera contará con un aliciente para mantenerse productiva en el mercado. Para Fraga
(2005) la planificación tributaria permite el aprovechamiento de opciones de ahorro que las propias leyes tributarias, de
manera expresa o tácita, ponen a disposición de los contribuyentes.
Cusgüen (1998) señala que un plan de impuestos implementa objetivos y describe la manera de lograr su
cumplimiento, a través de la definición de estrategias, políticas y todo lo necesario para lograrlo como medidas de
control, entre otros. Posterior a un estudio sistemático y profundo de los antecedentes de la Organización, las
operaciones que esta realiza, y el resultado de sus ejercicios económicos, la planificación tributaria se plantea
lineamientos apropiados a la realidad de la Empresa, tomando en cuenta además sus expectativas a futuro. Sirve
como guía para el personal especializado encargado del área de impuestos, mostrando la manera de realizar las
actividades. Anteriormente no era común ver en los organigramas de las Organizaciones el departamento de
impuestos o una coordinación especifica en esta área, no obstante debido al incremento de la presión fiscal por parte
del Gobierno las empresas se han visto en la necesidad de incluirlo dentro de su estructura, con el propósito que la
institución pueda contar con especialistas en materia fiscal que cumplan con múltiples funciones entre las cuales se
encuentra la evaluación económica de las diferentes clases de tributos y la consideración de alternativas que
proporcionen una real optimización de tales obligaciones, además la planificación tributaria le provee a este personal
una descripción de funciones según su cargo que va a permitir simplificar la dirección y determinar responsabilidades.
El proceso de planeación asegura el uso efectivo de los recursos y conlleva al cumplimiento de la visión de la
organización. Rosembuj (1999) afirma que la elección de estrategias tributarias por parte del sujeto pasivo se basa en
la utilización de opciones u oportunidades brindadas por la ley cuya decisión, involucra, a la vez la renuncia o pérdida
de otras. Por ello, la búsqueda de ahorro fiscal exhibe un costo de oportunidad, entendiendo por este, el costo que se
tiene que declinar para conseguir algo que se cree mas conveniente, todo ello en aras de disminuir la incertidumbre y
crear parámetros tributarios que sean susceptibles de ser medibles por medio de la planificación tributaria, a efectos de
constatar los beneficios proyectados con el máximo aprovechamiento de los recursos que posee la Organización. La
planificación tributaria establece un control de las diferentes obligaciones bien sea las generadas por los impuestos,
tasas y/o contribuciones dentro de las operaciones de la empresa, permitiendo a su vez evaluar los logros obtenidos en
la misma. Parra (2001) afirma que debe calcularse la operación matemática entre los ingresos y los impuestos totales y
entre estos y la utilidad neta, proyectando el crecimiento de la Empresa, el resarcimiento de las deudas a los
acreedores además de una remuneración justa para los accionistas. La planificación tributaria también posee entre sus
características principales la pro actividad, entendiendo como esta habilidad según Álvarez de Mon & Cardona, (2001),
la consecuencia del esfuerzo consciente y racional de utilizar la libertad frente a cualquier estimulo de manera racional,
no instintiva; por ello este tipo de planificación busca prever que consecuencias, van a tener las decisiones que como
sujetos pasivos del tributo adopten a lo largo del ejercicio económico a fin de poder anticipar la cifra de tributos a pagar
como lo señala, Galarraga (2002) En consecuencia se alcanza un control mayor del contexto tributario que afecta a la
empresa vale decir, de las normativas ya existentes además de una preparación mas organizada que facilite la
adaptación ante las diferentes vicisitudes que podrían presentarse como modificaciones a las leyes, el anuncio de
Decretos o Providencias que podrían generar crisis por el riesgo que la mismas implican.
Cusgüen (1998) plantea que la planificación tributaria es un instrumento que le permite a las organizaciones disminuir
el monto a incurrir por concepto de impuestos sin interferir en el desenvolvimiento cotidiano de sus actividades y sin
cometer ningún tipo de infracción. Igualmente busca cambiar métodos de administración artesanales, por métodos más
sofisticados que amplíen el panorama financiero. En tal sentido, es importante destacar que este tipo de planificación
le permite a las organizaciones venezolanas adoptar alternativas o estrategias que dentro del marco legal vigente
proporcionen una erogación justa de su carga tributaria sin dejar de cumplir con su obligación hacia el Estado y de esta
forma poder preservar su patrimonio para continuar con su funcionamiento económico, permaneciendo activa dentro
del mercado competitivo; también es utilizada como parámetros para tomar decisiones, por lo que ayuda a reducir la
crisis, da mejor uso a los recursos y define las prioridades, a saber:
• La planificación tributaria, es un instrumento que permite a las empresas disminuir el monto a incurrir por concepto de
impuestos, sin interferir en el desenvolvimiento cotidiano de la organización y sin cometer ninguna infracción.
• Busca actualizar los métodos administrativos, considerando en impacto de los distintos tributos.
• Por otra parte, optimiza la coordinación de los esfuerzos para el cumplimiento de los objetivos y medidas de control
para mantener la eficiencia y la efectividad en el proceso.
Ahora bien, cuando no se consideran los impuestos, en las transacciones económicas, se están sobre-estimando los
ingresos y sub-estimando los egresos, lo que se traduce automáticamente en una sobre estimación de las utilidades.
En tal sentido, la necesidad de planificar los tributos surge de las siguientes circunstancias: Dar un aporte a la sociedad
la aplicación de las disposiciones legales en el proceso de determinación, declaración y pago de los tributos implica un
compromiso personal más allá del cumplimiento de una norma para el sujeto pasivo, tomando en cuenta que todos los
miembros de la sociedad se benefician mediante las instituciones establecidas por el Gobierno para tal fin. Así las
cosas, Pulido (2005) señala que ya en la Edad Media la recaudación era el medio público regular, para financiar las
necesidades de las ciudades estados, los reinos y los imperios. Por ello, se está en presencia de una práctica remota
donde Estados ancestrales han mantenido sus Tutelas a través de las exigencias de aportes de carácter obligatorio de
los ciudadanos, con el objetivo de generar bienestar a sus poblaciones. Poder anticipar la cifra del impuesto a pagar,
la planificación tributaria tiene como uno de sus objetivos fundamentales calcular la distribución de la carga impositiva
durante un periodo (generalmente de un año), en aras de obtener el recurso monetario y cumplir con los montos y
plazos previstos para la extinción de la obligación tributaria apegados a las normas jurídicas vigentes.
El sentido de responsabilidad social, este es un aspecto muy importante relacionado directamente con el proceso de
transición hacia la era de la complejidad que vive la sociedad venezolana, encuentra su fundamento en la ética al ser
considerado como aquel comportamiento que encauza las acciones del hombre hacia el bienestar de la comunidad, la
misma, comenta Corredor (2004), ayudará a consolidar procesos gerenciales, tales como la planificación creativa en
vez de la rutinaria, la valoración de la reputación en el mismo nivel del capital financiero y los aportes tributarios en vez
de la evasión, siendo estos últimos fundamentales para el mejoramiento de la calidad de vida de la población por ser
un ingreso público del Estado cumpliendo así con el mandato constitucional.
La Evasión Fiscal
Consiste en sustraer la actividad al control fiscal y, por tanto, no pagar impuestos. Por lo tanto, se configura como una
figura delictiva, ya que el contribuyente no cumple con sus obligaciones tributarias, convirtiendo su conducta en una
infracción que debe ser sancionada. Intenta reducir los costos tributarios, utilizando para ello medios ilícitos y vedados
por las leyes, como el contrabando, fraude, etc. contra los que las autoridades deben luchar con todos sus medios
legales para conseguir recuperar los ingresos perdidos.
La evasión fiscal es un delito que existe desde los tiempos en que el tributo, nombre que se le dio al impuesto
antiguamente, era considerado como un símbolo de sumisión del vasallo a su señor y que era percibido en forma
arbitraria, atrayendo como consecuencia que fuese fuertemente repudiado.
Evasión Fiscal o tributaria es toda eliminación o disminución de un monto tributario producido dentro del ámbito de un
país por parte de quienes están jurídicamente obligados a abonarlo y que logran tal resultado mediante conductas
fraudulentas u omisivas violatorias de disposiciones legales. Sigue siendo una de las mayores dificultades para el
Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (SENIAT), lejos de disminuir cada día surgen
nuevos estímulos para la evasión fiscal, algunos de ellos proporcionados por el mismo gobierno otros por la sociedad
civil y otros como consecuencia de la ausencia de una cultura tributaria en Venezuela.
Elusión Fiscal
Es la pieza clave de la planificación fiscal. Representa el aprovechamiento de los recursos legales disponibles para
conseguir la mínima carga fiscal o para diferir en el tiempo su impacto. Además, permite al contribuyente evitar que se
realice el hecho imponible, con el fin de no pagar los tributos o abaratar los costos tributarios, procurando para ello
forzar alguna figura jurídica establecida en las leyes. Eludir es perfectamente legal y se combate con un análisis
económico de los hechos que permita al auditor determinar la verdadera naturaleza de las operaciones realizadas por
los agentes económicos para evitar el pago de los impuestos.
Partiendo de que toda sociedad se constituye con el objetivo de lograr un fin común, se establecen las normas que han
de regir su funcionamiento conjuntamente con los organismos que sean necesarios para la realización de este fin
colectivo. La constitución de la República Bolivariana de Venezuela contiene los estatutos que rigen el funcionamiento
del país, y el artículo 136 establece que: "toda persona tiene el deber de coadyuvar a los gastos públicos"
Para hacer efectiva esa contribución el estado recurre a los tributos (impuestos, tasas y contribuciones especiales)
El artículo 316 de la constitución Bolivariana de Venezuela expresa: "el sistema tributario procurara la justa distribución
de las cargas públicas según la capacidad económica del o la contribuyente, atendiendo al principio de progresividad,
así como la protección de la economía nacional y la elevación de la calidad de vida de la población y se sustentara
para ello en un sistema eficiente para la recaudación de tributos"
En aplicación de esta disposición constitucional, el sistema tributario establecerá la obligación de contribuir en atención
a la capacidad económica del sujeto pasivo por lo que los tributos no pueden ser calculados sobre una base
proporcional sino atendiendo al principio de progresividad, mecanismo que debe respetarse para que el estado pueda
cumplir con la obligación de proteger la economía nacional y lograr un adecuado nivel de vida para el pueblo.
Impuestos
Es una obligación unilateral impuesta coactivamente por el Estado en virtud de su poder de imperio. Ya que es un
hecho institucional que va necesariamente unido a la existencia de un sistema social fundado en la propiedad privada o
que al menos reconozca el uso privado de ciertos bienes. Tal sistema social importa la existencia de un órgano de
dirección (el Estado) encargado de satisfacer necesidades públicas. Como ellos requiere gastos, y por consiguientes
ingresos, se lo inviste en la potestad de recabar coactivamente cuotas de riqueza de los obligados sin proporcionarles
servicios concretos divisibles algunos a cambio como retribución.
Teniendo pues en cuenta lo antes dicho se sintetiza el concepto de la siguiente manera: "son impuestos las
prestaciones en dinero o en especies, exigidas por el Estado en virtud del poder del imperio, a quienes se hayan en las
situaciones consideradas por la ley como los hechos imponibles"
Tasas
Es el tributo que probablemente mayores discrepancia ha causado y el que más dificultades presenta para su
caracterización. Ello, se debe en parte, a que quienes la han tratado han confundido elementos económicos, jurídicos y
políticos pero que con el pasar del tiempo se a logrado que además de estas razones se obtenga la caracterización
correcta de la tasa en donde tiene trascendencia en virtud del tan necesario perfeccionamiento en la construcción
jurídica de la tributación.
De modo que se define la tasa como " un tributo cuyo hecho generador está integrado con una actividad del Estado
divisible e inherente, hallándose esa actividad relacionada directamente con el contribuyente".
En Venezuela los contribuyentes no sólo tienen deberes que cumplir, los mismos también gozan de derechos y
garantías frente al ejercicio, potestades y competencias de la Administración Tributaria.
En atención a lo anterior, un aspecto importante a destacar es la preeminencia de los derechos humanos como un
valor superior que orienta y determina el ordenamiento jurídico y toda la actuación del estado en base a lo dispuesto en
el artículo 19 de la Constitución Nacional, por lo que la garantía al respeto del contribuyente como ciudadano es base y
fundamento que debe considerar la Administración Tributaria en el ejercicio de su competencia y atribuciones.
Otros principios constitucionales que protegen al contribuyente son los de igualdad, no discriminación y justicia
tributaria, el de legalidad, el de no confiscatoriedad, el de derecho a la propiedad, de capacidad contributiva, eficiencia,
seguridad jurídica, derecho al trabajo, progresividad y proporcionalidad.
Además de lo antes mencionado todo contribuyente tiene derecho a la dignidad e integridad de la persona,
inviolabilidad del domicilio, al honor intimidad y vida privada, inviolabilidad de las comunicaciones, derecho a petición y
oportuna respuesta, derecho a los datos e informaciones, al reintegro, a solicitar prórrogas y facilidades de pago, y a la
educación tributaria.
Igualmente, todo contribuyente tiene derechos y garantías procesales y procedimentales los cuales se detallan: