Introducción

A través de estudio se permite definir a la criminología como la ciencia

multidisciplinaria que estudia el delito, el delincuente, la víctima, así como la
conducta humana desviada tanto de los casos en forma individual como de los
fenómenos de masa, a fin de determinar y explicar la génesis del fenómeno,
prevenirlos, como a su vez aplicar los tratamientos o remedios necesarios del
caso.

Las enfermedades mentales son condiciones médicas que interrumpen el

pensamiento, los sentimientos, el humor, la habilidad de relacionarse con otros y
el funcionamiento diario de una persona.

Cabe destacar que las enfermedades mentales pueden afectar a cualquier

persona, sin importar su edad, su raza, su religión o su clase social. Dichas
enfermedades no son el resultado de alguna debilidad personal, de la falta de
carácter o de la indisciplina. Lo importante es saber que estas enfermedades son
tratables. Por esto, la mayoría de las personas que padecen una enfermedad
mental seria puede experimentar una gran mejoría si participan activamente de un
plan de tratamiento individual.

La conducta del hombre como todos sabemos, desde tiempos remotos

siempre ha preocupado a los estudiosos y siempre ha sido de estudio y criticas.
De ahí es que intervienen las Escuelas Jurídico Penales, según Jiménes de Asua.
Los términos de causal - explicativos, normativos y aplicativos provienen del
estudio de la naturaleza de la conducta humana.

1
 ENFERMEDADES MENTALES COMO CAUSA DE CRIMINALIDAD

Conceptos generales:

La enfermedad mental es una alteración de los procesos cognitivos y

afectivos del desarrollo, considerado como anormal con respecto al grupo social
de referencia del cual proviene el individuo. Se encuentra alterado el
razonamiento, el comportamiento, la facultad de reconocer la realidad o de
adaptarse a las condiciones de la vida. Además, el término "enfermedad mental"
puede asociarse a estigmatización social. Por estas razones, este término está en
desuso y se usa más trastorno mental, trastorno o psicopatología.

Según Leoncio Ramos; La mayoría de criminalistas están de acuerdo de

que las enfermedades mentales son causas eficientes de la criminalidad. Han
dicho, que hubo una época en la que se consideraba que el solo hecho de
cometer un crimen implicaba la existencia, en el agente, de una enfermedad
mental.

Para fines del estudio criminológico, estas enfermedades han sido divididas
en dos grupos: unas, denominadas psicosis y otras denominadas psicopatías. Las
primeras han sido consideradas siempre como enfermedades mentales o
espirituales, y las ultimas, como perturbaciones espirituales que unas veces
tienden a aparentar cierta lucidez en el enfermo mental.

La psicopatía a diferencia de psicosis, es innata, mutable y por lo general

hereditaria.

Para Olga Elena Resumil; las enfermedades mentales son una alteración
o desviación de las normas en el estado anatómico del encéfalo, ya sea primaria o
secundaria a los demás procesos orgánicos.

Las Psicosis y El Crimen

Las enfermedades mentales o psicosis, son aquellos procesos que, a

manera de cuerpos extraños, se desarrollan en el cerebro, reemplazan las leyes

2
psíquicas, en virtud de una modificación de la actividad y del contenido de la
conciencia.

Psicosis se presenta casi siempre, como enfermedades de carácter

corporal, precisamente cuando son causadas por la afectación de algún órgano
biológico del cuerpo psicopatológico, cuando su origen y su existencia se hallan
condicionados por procesos patógenos o morbosos del cerebro, o por
enfermedades desarrolladas en el mismo cerebro sean estos cortos o a largos
plazos.

Según sea origen, la psicosis puede presentarse de tres formas distintas,

como son las siguientes. 1. Las psicosis orgánicamente condicionadas. 2. Las
psicosis tóxicamente condicionadas., 3.Las psicosis funcionales.

Las enfermedades citadas llegan al extremo de producir perturbaciones de

carácter mental o demencial, es porque posen un estado muy grave, y por tanto
declararlo totalmente irresponsables de sus actos delictivos, principalmente de
sus actos con grado de criminalidad.

El mismo Benigno Di Tulio refiere que entre las perturbaciones psíquicas

morbosas que más frecuentemente se pueden desarrollar durante el proceso de la
encefalitis epidémica es menester recordar las crisis ansiosas, los estados
distímicos y especialmente los estados de excitación, los delirios de interpretación,
los impulsos irresistibles y además dice, por otro lado, que tales psicosis de
encefalitis epidémica, por su propia naturaleza particular y por las especiales
lesiones que determinan están entre aquellas que mayormente favorecen el
desarrollo de automatismo y de impulsos que muchas veces son de fondo
antisocial y delictuoso.

Existe una relación muy estrecha entre conductas delictivas principalmente

el homicidio, trastornos de la personalidad y los procesos psicóticos.

3
La imputabilidad atenuada para los individuos psicópatas que cometen
delitos, siendo los requisitos para la misma los siguientes:

• Psicopatías graves o profundas en base a su condición en intensidad.

• Relación causal demostrada entre el trastorno y el delito cometido.

• Demostración de que la psicopatía disminuye la inteligencia o voluntad del

individuo de forma clara.

Por otra parte, los diferentes tratamientos en prisión pueden tener un efecto
indeseado y relacionarse con otros delincuentes con características similares
puede tener efectos adversos al darla la posibilidad al psicópata de aprender a
delinquir de forma más eficaz.

Es decir, para intervenir sobre un psicópata de manera moderadamente

eficaz sería necesario diseñar programas específicos llevados a cabo por
profesionales especializados y en un contexto diferente al que existe en un centro
penitenciario o un hospital psiquiátrico.

La psicosis tóxicamente condicionada: Estos son estados psicopáticos

causados por sustancias que resulten nocivas al cuerpo humano. Las sustancias
toxicas que pueden ser causantes de las referidas perturbaciones mentales o
anímicas, son entre otras, las siguientes: el alcohol, la nicotina, del tabaco, la
morfina, la marihuana, la cocaína y otras sustancias narcóticas. Además, pueden
ser causantes de psicosis toxicas, la autointoxicación del cuerpo humano,
producida como consecuencia de la no desasimilación de sustancias desechables,
las cuales tienden, por su naturaleza, a convertirse en toxinas que no solo afectan
la parte somática del ser sino también su parte psico-motriz .

Benigno Di Tulio expresa: que la demencia y los delirios toxi-infeciosos

constituyen psicosis que están caracterizadas por prevalentes perturbaciones de
la conciencia, bajo formas de estadios de anublamiento y de confusión que se
acompañan de alteraciones psico-sensoriales y de intranquilidad motriz.

4
 Que los fines médicos-legales, será útil precisar que en todas esa formas
de psicosis, son especialmente las perturbaciones de la conciencia aquellas que,
bajo forma de estupor, onirismo y de confusión que, aunque veces muy fugaces,
pueden ser motivo de acciones delictuosas por lo menos no graves, las cuales
pueden ser provocadas por la negligencia, la imprevisión o la observancia de las
leyes y reglamentos, ósea los delitos prevalentemente culposos.

Así las mismas psicosis, sean ellas demenciales autónomas o de

autointoxicación, pueden en algunas casos, determinar actos de violencia más
graves y aun delito de homicidio, causados por impulsos que se desarrollan
imprevisiblemente bajo la influencia de fenómenos alucinatorios, estados de
angustia, ideas delirantes, etc.

La psicosis traumática

Los traumas craneanos pueden ser causas de delitos en general, en cuanto

también ellos pueden provocar el desarrollo de particulares perturbaciones
nerviosas y psíquicas, y de graves alteraciones del temperamento y de la esfera
neuro-vegetativa, y más precisamente de fenómenos de emotividad, de
irritabilidad, y de impulsividad que predispone al individuo a un comportamiento
irregular, antisocial y aun delictuoso.

Esto sucede cuando el trauma que toda vez que el trauma craneano
determina un estado de deficiencia moral aún más grande con más acentuadas
manifestaciones de perversidad, de vanidad, de prepotencia, de agresividad, etc.,
se viene a desarrollar un cuadro sintomatológico que recuerde muy de inmediato
aquel de la locura moral.

Psicosis funcionales

Son enfermedades mentales, cuyas causas pueden ser el producto de taras

hereditarias o de otras desviaciones por otra parte se dice, que estas psicosis no
tienen asiendo en el cerebro, pero que parece que ellas juegan un papel de suma
importancia sobre ciertas modificaciones metabólicas. También, que la psiquiatría

5
moderna entiende que las secreciones internas contribuyen a la aparición de estas
psicosis, aunque a estas se les asemeja como causantes de las psicosis
tóxicamente condonadas.

También consideramos, que las psicosis funcionales son causadas por

emociones angustiantes permanentes, provocas por ciertos estados críticos
extremos que sufre el individuo, como consecuencias de la aperción de
necesidades obstructivas.

Debido a ello, toda persona física inmersa en problemas en problemas que

no puede resolver, por causa de una persistente y continua situación de carencia
de medios factibles o de acoso, tiende a inclinarse hacia la delincuencia, o al
suicidio o a la locura, convirtiéndose esta en la llamada psicosis funcional, cuando
solo sea el resultado de fenómenos morales y no de factores corporales o tóxicos.

Entre las psicosis funcionales podemos citar las siguientes enfermedades

mentales: la epilepsia, la locura circular o maniaco depresiva, la histeria, las
paranoias tales como: el delirio de prosecución, el delirio querulante, de
cleptomanía, la piromanía.

Quede de acuerdo al artículo 64 1 del Código Penal Dominicano, el estado

demencial manifestado en la persona del agente en el momento de cometer un
acto criminoso, lo exime de responsabilidad penal; empero, sin embargo, lo que
interesa en este tema no es determinar el grado de responsabilidad del agente,
sino tratar de relacionar la perturbación mental del delincuente y el delito; o más
bien, determinar si la psicosis puede causar una conducta delincuente.

Para evaluar la sociedad dominicana, no tenemos estadísticas que

contengan estos resultados; pero una sencilla y superficial observación nos
demostrara que una gran cantidad de nuestros delincuentes sufren demencias, de
una u otra forma.

1
Artículo 64 del Código Penal Dominicano

6
 Por otro lado, debemos expresar, que el citado criminólogo dominicano nos
dice, que mediante serias investigaciones se lía comprobado que la inclinación
hacia el delito y la enfermedad mental puede darse conjuntamente; y que para
demostrar esta opinión se ha experimentado en manicomios, donde se han
obtenido una gran cantidad de individuos internos con antecedentes penales.

Un psicópata es:

 Una persona asocial,

 Altamente impulsiva y agresiva,
 Generalmente carece de sentimientos de culpa,
 Además de ser incapaz de crear lazos de afecto por tiempo prolongado.
 Parece frío,
 Carente de compasión,
 Trata a las personas y a los objetos como medios de placer,
 Así como de agresiones explosivas.

Se considera al psicópata como una persona impulsiva, sus actos y

conductas carecen de una verdadera meta, su estructura es narcisista, no expresa
tolerancia a la frustración, a lo que se debe su irritabilidad y excitabilidad.

El lenguaje del psicópata se basa en la acción, siente enorme placer por la

aventura y constantemente busca otros ambientes y nuevas situaciones de ahí su
inestabilidad.

Se encuentra en el psicópata una necesidad de afirmación de la propia

personalidad, sintomática de una escasa capacidad de adaptación a la disciplina
en general.

El psicópata al parecer ignora los códigos sociales y los valores. Actúa

solamente en respuesta a sus propios deseos e impulsos. Es incapaz de posponer
el placer inmediato o la gratificación de un impulso. Carece de la capacidad para
mantener una relación cercana y, No siente ni culpa ni ansiedad acerca de sus
actos antisociales.

7
 Al parecer el ambiente familiar en el que se ha desarrollado es en gran
parte responsable de esto, generalmente, la infancia del psicópata transcurrió en
un ambiente de mucha inestabilidad.

Externamente el psicópata muestra frialdad, embotamiento moral y ético, y

una falta de simpatía hacia los demás. Su vida emocional es superficial y
afectivamente anestesiada, son personas demasiado rebeldes.

El psicópata es un individuo celoso, autodestructivo, con una comunicación

alternativa, tendiente a sorprender, si desea expresar verbalmente un sentimiento,
lo actúa. El contenido es sádico, irónico en la formulación de las ideas y
planteando siempre la duda con la persona con quien habla, tiende a la
manipulación, es cortante y autoritario. Mencionan que tal vez en el fondo es una
proyección de una conflictiva interfamiliar y una búsqueda de relación materna.
Existe en él una gran capacidad para pasar de las situaciones de agresividad a las
de amabilidad y seducción.

Parece ser que la angustia del psicópata, que si existe, pero que está
manifestada de un modo diferente a la del neurótico y del psicótico, es una
angustia centrada en el temor de quedarse solo y aislado afectivamente.

El psicópata es indiferente a las agresiones dirigidas a otras personas y

también a las consecuencias, miente aún cuando no exista razón alguna, o lógica,
para hacerlo puede realizar un daño físico de una manera causal y sin pensarlo,
ya que las necesidades y sentimientos de los demás no tienen sentido inmediato
para él, sólo como se mencionó, sus propias necesidades y deseos son más
importantes y absolutos. Presenta por esto un narcisismo muy marcado.

El psicópata se autopercibe como singular debido a su narcisismo y a

medida que se incide en sus conductas rebeldes, se consolidan sus actividades
hostiles y típicamente antisociales. Se acentúa esto hacia las figuras revestidas
ante la autoridad, particularmente los agentes de policía, los guardias-cárceles,
podríamos decir que se mantienen constantemente contra las autoridades.

8
 Podemos anotar en éste delincuentemente una desviación de las normas
sociales, él se ha adaptado a las normas y valores de una subcultura que
podríamos llamar delictiva.

Al parecer el psicópata se caracteriza por haber tenido una infancia

desfavorable para el desarrollo, inadecuado control familiar debido a la falta o
abandono de alguno de sus padres, frustraciones a sus necesidades internas y
externas por la carencia de una adecuada protección. A la edad de 9 o 10 años,
ya se manifiestan sus conductas antisociales. Por el contrario frente a los demás,
el psicópata parece frío, rígido, pero es una coraza externa para protegerse de sus
sentimientos infantiles.

Los Psicópatas y el Crimen

Leoncio Ramos nos indica dos acepciones, la primera en sentido lato, que
se refiere a todas las personalidades morbosas, la segunda en sentido estricto la
cual se refiere a todas aquellas personalidades morbosas con la exclusión de los
retrasados y de los débiles mentales. De esta definición se puede deducir, que
esas personalidades son al fin personas que sufren cierta degeneración de
carácter, o bien, individuos de personalidad anormal, quienes se desvían del tipo
medio normal, y a consecuencia de ello, entran más o menos, en conflictos
internos y externos con cada situación o estado vital, bajo todas las circunstancias.

Clasificación del psicópata

Psicópatas lábiles de ánimo

Considerados demasiado sensibles, su estado de ánimo varía, son

inquietos, incapaces de soportar los problemas que se les presentan
generalmente son alcohólicos, derrochan el dinero y roban.

9
Psicópatas depresivos

Son personas pesimistas. Todo lo toman con mucha seriedad, únicamente

ven el lado malo de las cosas personales, su conducta es más reservada,
silenciosa y más rígida. Son por lo general personas pacíficas.

Psicópatas inseguros de sí mismos

Se caracterizan por presentar sentimientos de inseguridad e insuficiencia,

buscan en sí mismos la culpa de todo fracaso o acontecimiento. Presentan con
frecuencia conflictos sexuales.

Psicópatas necesitados de estimulación

Estas personas se caracterizan por tener una accesibilidad afectiva

aumentada, falta de perseverancia, atracción, tienen ideas fantasiosas por lo cual
tienden a la mentira, se excitan muy fácilmente, son muy sensibles, vanidosos,
egoístas, demasiado egocéntricos, quieren ser el centro de atracción, son
fácilmente influenciables, impulsivos e hipocondriacos. Es muy común que
cometan fraudes, atacan a las mujeres sexualmente generalmente para lograr
algún propósito y relatan los hechos con detalle.

Psicópatas desalmados

Son personas que no sienten compasión por nada ni por nadie, no tienen
arrepentimientos ni hacen caso a los valores morales, considerados altamente
peligrosos y antisociales. Desde la niñez se caracterizan por una marcada
crueldad con animales o con otros niños, son sumamente destructores.

Los Psicópatas Insensibles

Esta es una de las psicopatías más peligrosas quienes sufren esta especie
de psicopatía, pueden ser distinguidos en base a las funciones y características
siguientes:

10
 Por su estupidez apática frente a los otros seres humanos y también frente
a sí mismo;

Por faltarles, tanto el sentimiento del valor ajeno, como son: amor,
comprensión, honor; así como el sentimiento de su propio valer, tal como: orgullo,
pudor, conciencia.-

Por carecer del sentimiento de abnegación (capacidad de exaltación,

voluntad de sacrificio);

Por faltarles energía para reprimir los instintos, lo que los lleva a la
brutalidad, la crueldad fría y la impulsividad irreprimible;

Porque éstos desde niños, sorprenden muchas, veces, demostrando que

tienen poco apego a la familia, poca inclinación hacia la ternura, ni necesidad de
ésta. Se dice además, que éstos no tienen ningún rasgo de amor en pro de su
propia familia dentro del ambiente donde habitan, ni sufren nostalgia, y que aún
carecen de vínculos sociales.

Socialmente, esta es una clase de delincuentes muy peligrosa, y que los

mismos forman el grupo que podría denominarse, el núcleo de los profesionales
del crimen.

Los Psicópatas Abúlicos

Se dice, que son considerados como abúlicos, todos aquellos individuos

carentes de una voluntad firme y definida, más bien, se trata de individuos de
débil resistencia y fáciles de conducir o seducir, a quienes, - según Leoncio
Ramos -, influencias surgidas de una deficiente o mala educación, causada por un
psiquismo débil y flexible, los hacen proclives a sucumbir ante la más próxima
tentación del mundo circundante.

Estos individuos han sido estudiantes modelos, debido a su docilidad, a su

comprensión y aplicación; empero, según nuestro eminente autor dominicano, a
veces los mismos frente a tentaciones graves, han cometido delitos de los cuales

11
nadie habría creído que eran capaces de cometer; esto debido a cambios súbitos
sufridos por ellos, que han dejado atónitos a su observadores.

Se ha considerado que este cambio brusco que sufren o experimentan los

psicópatas públicos, es originado por la falta de seguridad interna, y a la falta de
energía para imponerse frente a los obstáculos que fe presenta el ambiente que le
rodea o a la incapacidad para imponerse un freno a a sus propios instintos.

No tienen capacidad para resistirse a las influencias de los demás. Son

fácilmente seducibles por otros individuos, o por las situaciones. Se observa esta
conducta en ambos sexos, generalmente en la adolescencia, debido a su
inmadurez.

Los abúlicos se dejan engañar fácilmente por proposiciones o consejos de

cualquiera.

La importancia social de los abúlicos es que ocupan el primer lugar en

robos, desfalcos y fraudes generalmente asaltabancos. En relación con la víctima,
el psicópata por lo general la desconoce, le interesa el objeto no la persona.

Los instrumentos con los que generalmente lleva a cabo sus delitos son
múltiples, de preferencia armas de fuego.

El psicópata se siente seguro cuando posee un arma o algún instrumento

para defenderse, ya que piensa que todos actúan como él.

Se considera el psicópata como un criminal inteligente y de gran

controversia en casos de imputabilidad o inimputabilidad.

El psicopático reacciona a la frustración con la agresión, esto puede ser el

resultado de recompensas recibidas a temprana edad por dicho comportamiento.
La agresión es el método de atraer la atención, ya que prefiere el castigo antes
que el descuido.

12
Los Psicópatas Hipertérmicos

Exner describe al delincuente hipertímico de la siguiente manera: corno

individuos de humos alegres dignidad personal temperamento sanguíneo y de
actividad. El prominente criminólogo alemán nos dice, además, que son
optimistas, incluso en el juicio que forman de su propia capacidad y de su propio
destino.

Expresa que este carácter y temperamento les da una "seguridad" en sí

mismos, y no son capaces de estremecerse ni aun con experiencias sufridas en su
propia carne, ni en su propia desgracia.

Los Psicópatas Explosivos

Se ha demostrado que éstos son tipos psicopáticos que se caracterizan por

su fácil y rápida caída en la excitabilidad, la cual es un estado que los lanza a
cometer actos de violencia: tan excesivos y acelerados que, en razón de ello, los
mismos han merecido la denominación de reacciones de corto circuito; según
Leoncio Ramos, estos individuos montan en cólera por el motivo más
insignificante, razón por la que actúan violentamente casi siempre, sin entrar en
ningún tipo de reflexión. También se dedican al uso y abuso del alcohol, lo que,
unido a su temperamento, aumenta sus inclinaciones impulsivas hacia la
delincuencia; Confirma, además, que aún fuera de la embriaguez, es característico
entre ellos, el entusiasmo por los delitos afectivos, no pudiendo en la mayoría de
los casos obedecer a las reflexiones de su propia personalidad.

Generalmente se enfurecen por el motivo más insignificante, comienzan a

golpear sin ninguna consideración en cualquier momento pueden llegar a
suicidarse o cometer homicidios.

Los psicópatas explosivos son alcohólicos, beben por lo general para

aminorar su coraje.

En su matrimonio existen golpes constantes, tanto a los hijos como a la

esposa. Causan un sin número de daños materiales.

13
Los psicópatas con manía de figurar

Se ha demostrado que estos sicópatas se caracterizan por su abundante

fanfarronería, por su fantasía, sus vanas presunciones y por su ágil habilidad de
acomodarse a la forma de presentarse ante los demás. Se confirma que esta
forma de conducirse públicamente les facilita el éxito en la comisión de delitos. Y
además que entre éstos se encuentran los estafadores; empero, no aquéllos que
aspiran a obtener lucro sin el menor esfuerzo, sino aquellos cuyos propósitos son
deslumbrar a todos, para jugar un papel de notable importancia, porque para ellos
no tienen ningún valor de ser, el verdadero valer, sino la simple apariencia.

Los afamados sexuales y los pseudópodos; es decir, aquellos que disfrutan

de la vida, mayormente durante su juventud, haciendo falsas y fingidas
imputaciones, a causa de la comisión de delitos contra la moral. También, aquellos
dedicados a la emisión de falsas declaraciones sobre su fantasía sexual, a fin de
demostrar una falsa importancia. Se ha descubierto que estos individuos tienen la
tendencia de tratar a las personas que ellos entiendan están por debajo de su
posición social y económica, pero, sin embargo son tan vulgares y bajos, que se
arrastran ante aquellos que están social y económicamente sobre ellos.

Los Psicópatas Fanáticos

Estos se caracterizan por tener ideas sobre valoradas y por estar formados
colorirte a una vivencia de las disciplinas humanas. Se afirman también, que estos
tienden a ser conmovidos por sus ideas fijas y en razón de ello, las siguen a todo
riesgo, aun poniendo en peligro su libertad y su vida. Entre éstos podemos señalar
a los políticos y religiosos, quienes en defensa de, sus propias ideas son capaces
de inclinarse hacia la criminalidad.

Los Psicópatas de Disposición Anímica Lábil

Se ha demostrado que éstos se caracterizan por la depresión de ánimo, por

su propensión a la irritabilidad y a la aflicción. Además, que en ese estado, dichos
individuos son capaces de cometer delitos pasionales incendios y deserciones.

14
También, que son extravagantes y sentimentales, por cuyos estados gozan de una
grave inestabilidad, lo que los lleva al derrotismo incalculado. A este respecto,
consideramos, que estos son de los individuos que pueden llegar con toda
facilidad al suicidio.

Breves Nociones sobre la Locura Moral

A este respecto, Benigno Di Tulio, en su tratado de Antropología Criminal,

nos expresa, que a propósito del delincuente constitucional con orientación
hipoevolutiva, sostengo que cuando los caracteres de tal tipo de, delincuente son
llevados, por causas diversas, a acentuarse hasta alcanzar el límite de la
morbosidad, viene a desarrollarse aquel particular estado mental morboso, que es
el único que puede ser recordado con el nombre de Locura Moral.

Los psicópatas sexuales

A este respecto, Di Tulio nos expresa, que "otra condición biológica que
puede asumir particular importancia en las relaciones del desarrollo de la
criminalidad, es aquella ligada al sexo y a los particulares períodos de la vida
sexual de la mujer". Fundamentado en la presente opinión del distinguido
criminólogo italiano, optaremos por exponer más adelante, no lo referente a las
tendencias criminales del hombre y la mujer, relacionadas con el mundo
circundante, sino a las tendencias derivadas de las psicopatías sexuales.

Así que, para hacer una exposición completa, nos referiremos a la mayoría
de las distintas formas del instinto sexual, entre las cuales se cuentan las
siguientes: el sadismo, el masoquismo, la menstruación, el climaterio, el
fetichismo, etc.

Diversas Variaciones del Instinto Sexual: Leoncio Ramos nos expresa

que dentro del grupo de psicópatas que sufren variaciones del instinto sexual, se
puede destacar como condición típica, la hiperestesia sexual, la cual consiste en
un alto grado del estado de agradabilidad sexual, o bien en una elevadísima
intensidad de su excitabilidad.

15
 Los Psicópatas por Exhibicionismo: Se expresa que esta psicopatía la
sufren todas aquellas personas que se divierten con la auto contemplación de sus
propios órganos genitales en presencia de otras personas. La mayoría de autores
afirman que esto sucede más en los hombres que en las mujeres; empero, a
simple vista se puede demostrar que en esta era, la cantidad de mujeres que
realizan estos actos es mayor que la de los hombres.

Los Psicópatas por Sadismo: Diversos tratadistas dicen, que la palabra

sadismo se deriva del nombre de un libertino francés llamado "El Marqués de
Sade", quien en una novela suya, llamada "Justina o Los Peligros de la Juventud",
se ocupa en demostrar la extraña aberración que consiste en una anormalidad del
instinto sexual, en la cual la excitación y la satisfacción sexual que disfruta el
individuo, sólo pueden ser intensificadas y satisfechas mediante la producción del
dolor, o, como se expresa en la obra de Leoncio Ramos, "mediante una especial
conexión entre la voluptuosidad y la crueldad".

Exner, en relación con esta característica delincuente, nos indica, que "esta
angustia y mortificación de una víctima indefensa, está en estrecha relación sexual
con aquel con quien tiene lugar antes o durante dicho acto sexual"; empero, esta
crueldad está aparentemente fuera de toda relación con lo sexual en general;
porque, aunque según el criminólogo alemán, el delincuente sustituya el acto
sexual con el sufrimiento de la víctima; empero también puede gozar con otras
clases de maltratos, como aquellos que les da el educador a sus alumnos.

Psicopatías por Causa de las Desviaciones de la Dirección del Instinto

Sexual: Por otro lado se ha demostrado que a estos grupos de sicópatas sexuales
pertenecen varias clases de anormales, entre las cuales se pueden nombrar: 1.
Los que padecen de homosexualismo; 2 - Los que tienen tendencia hacia la
zoofilia; 3 -Los que tienden hacia la pedofilia; 4.- Los que tienden hacia el
fetichismo; 5 .- Los psicópatas masoquistas; 6 - Los que gozan del travestismo; 7 -
Los que disfrutan de la necrofilia, etc.

16
 El Homosexualismo: Esta es una desviación sexual que sufren algunas
personas, debida a causas distintas, de las cuales hemos hablado en otro sitio.

Psicópatas con tendencia sexual hacia la zoofília: Se ha demostrado

que existe una variedad de psicópatas sexuales que tienden a dirigir su instinto
sexual hacia los animales, por lo que esta clase de psicopatía ha sido llamada
"Zoofília". Este término proviene de las voces griegas, zoo que significa animal y
filis que significa amor, significando dicho término: amor por los animales.

Psicópatas con tendencia sexual hacia la pedofília: Asimismo se ha

demostrado mediante estudios apropiados, que existen algunas personas que,
impulsadas por ciertos estados obsesivos, se rigen su instinto sexual hacia la
niñez y la adolescencia. Esta clase de psicopatía la padecen los ancianos y recibe
el nombre de "pedofília", la cual tiende a significar "amor erótico hacia los niños".

Los Psicópatas con Tendencia Hacia el Fetichismo: Esta tendencia la

padecen aquellas personas que dirigen sus instintos sexuales hacia la
observación de objetos excitantes, los cuales despiertan en ellas, apetitos
sexuales. Por eso se ha dicho que esta variedad de psicopatía sexual, "no es más
que una anormalidad psico-sexual que padece aquellos individuos, cuyo instinto
es excitable en presencia de determinados objetos que despiertan en ellos
apetitos de carácter sexual".

Los Psicópatas Masoquistas: Se cuenta que el término masoquismo

proviene del nombre "Sacher Mosoch", quien fue un novelista austríaco, y consiste
esta psicopatía, "en el goce o excitación sexual que disfrutan algunos individuos,
cuando previo al acto sexual, son sometidos a la servidumbre, mediante actos de
humillación o de relajamientos productores de repugnancia o dolor que les propina
su sexo opuesto. Se comenta que esta excitación sexual psicopática se manifiesta
en el enfermo cuando éste goza viendo su cónyuge opuesto, disfrutar
sexualmente con un tercero. En este caso el placer que disfruta el masoquista,
consiste en sentirse víctima de los actos sexuales que efectúa el sexo opuesto.

17
 El Psicópata Travestista: Esta psicopatía la padecen aquellos individuos
que sienten excitabilidad sexual mediante el uso de disfraces o ropas de vestir de
personas del sexo opuesto. Se ha demostrado, que esta anormalidad psico-
sexual, suele manifestarse en hombres que son cabalmente normales, quienes no
presentan ningún signo de homosexualidad. También se ha demostrado, que
existen mujeres que tienen tendencia hacia el uso de disfraces y ropas
masculinas, sin que las mismas presenten signos de homosexualismo, todo con la
finalidad de nacerse pasar ante los demás, como personas del sexo opuesto.

Los Psicópatas con Tendencia hacia la Necrofilia: Esta clase de

psicopatía la sufren aquellos individuos que disfrutan dirigiendo su instinto sexual
hacia los cadáveres, o sea, mediante la relación sexual sostenida por el psicópata
con un cadáver.

La embriaguez alcohólica y el crimen

Clifford T. Morgan. Introducción a la Psicología, 1974, para muchas

personas, las bebidas alcohólicas representan un medio de huir de la frustración y
la ansiedad lo que se demuestra median te el hecho de que las personas que se
hallan bajo los efectos de la angustia, beben algo más de lo que acostumbran en
los días de normalidad. Dice además, dicho autor, que las personas beben para
ahogar las penas y que no cabe duda que su conducta bajo los efectos del alcohol
se libera algo de la ansiedad. Morgan nos aclara, que "se reconoce que
muchas personas se hacen agresivas cuando beben, pero que éste sólo indica
que se liberan de la angustia que suele acompañar a la manifestación externa de
los sentimientos hostiles".

Asimismo, Benigno Di Tulio nos expresa en su citada "Antropología

Criminal", que entre los principales factores causales de la criminalidad que actúan
prevalentemente con favores secundarios preparatorios o realizadores de la
criminalidad latente, se deben recordar especialmente los siguientes: el
alcoholismo y las comunes intoxicaciones.

18
 Además, Di Tulio continúa diciendo, que es bien notoria la gran importancia
médico-legal del alcoholismo, ó sea de aquel conjunto de perturbaciones y de
procesos morbosos, agudos y crónicos que son determinados por la acción
intoxicante del alcohol.

La embriaguez no patológica la embriaguez patológica

Manifiesta, que la primera consiste en un proceso de debilitamiento de los

procesos psíquicos de mayor dignidad evolutiva, en la que predomina un estado
de debilitamiento de la capacidad inhibitoria, con el consiguiente desarrollo de
acciones inconsultas, irreflexivas, discordantes en los deberes individuales y con
la moral común, y a veces de fondo antisocial y a un delictuoso.

Formas de estudiar la embriaguez

Leoncio Ramos nos expresa en su libro titulado Notas De Derecho Penal

Dominicano, que el estudio de la embriaguez se puede hacer desde tres puntos de
vista que son el social, jurídico y el criminológico;

Lo social le corresponde a la sociología y a todas aquellas instituciones públicas o

privadas que tienen interés de curar y de enmendar a los alcohólicos y drogadictos
y lo jurídico al derecho penal y a la justicia represiva, que son instituciones que
tienen la misión de investigar, perseguir, instruir y juzgar a todas aquellas
personas que perturbadas por el alcohol o a las drogas, cometan infracciones
penales.

La embriaguez Alcohólica o narcótica, la ingestión de alcohol y de drogas

narcóticas, así como las sustancias alucinógenas, producen perturbaciones y
procesos morbosos, tales como alteraciones de la funciones intelectuales del
individuo; también paraliza del impulso de la voluntad; excitaciones del buen
humor; de las emociones, y muchas veces, una manifestación negativa,
consistente en un estado de depresión y dinámica, y también una gran cantidad de
actos de raíces fisio-psiquicas.

19
 Los efectos morbosos de la indigestión del alcohol de la relación que suele
existir entre el uso excesivo o la indigestión abusiva de esas sustancias
embriagantes y la delincuencia en general, relación que se hace necesario
estudiar, a fin descubrir en la indigestión de dichas sustancias, los efectos
causales de la criminalidad.

La drogadicción y el crimen:

La drogadicción consiste en la manifestación habitual que produce el

consumo reiterado de las drogas narcóticas. También se le llamado toxicomanía.

Cual consiste en el vicio que tienen algunas personas de abusar del

consumo o ingestión de sustancias toxicas para preocuparse sensaciones
agradables y suprimir el dolor. Las principales drogas que producen la
drogadicción son: el éter, la morfina, la cocaína, el opio la heroína, la marihuana,
etc.

La droga y la drogadicción son productores de delitos; unos, que pueden

ser llamados directos, porque están relacionados directamente con las sustancias
narcóticas; y otros; que pueden ser denominados como indirectos, porque son el
resultado de los efectos de la drogadicción.

 Una compulsión o necesidad invencible de consumir continuamente la

droga, cualesquiera que séanlos medios empleados para obtenerla.
 Crea una tendencia aumentar la cantidad de dosificación.
 Crea una dependencia psicológica y fisiológica de los efectos de la droga.
 Produce efectos deletéreos en el individuo y en la sociedad o sea efectos
venenosos y destructivos de la salud de los consumidores.

Todos aquellos estupefacientes que producen en el individuo un estado de

dependencia.

20
Psicosis con síndrome orgánico

Resulta de una afección física, en la sintomatología principal se encuentran

trastornos de orden físico a consecuencia de traumas, estados tóxicos, trastornos
degenerativos. Se observa un deterioro, que puede ser desde aspectos leves,
hasta desorganización grave de personalidad.

Puede desarrollar actividades mínimas o por el contrario una actividad

exagerada, el estrés físico también repercute con su comportamiento casi a todos
los niveles de personalidad que inclusive no sólo pueden desarrollar conductas
violentas sino autoagresiones y hasta llegar al suicidio.

* Psicosis Alcohólica

La tolerancia al alcohol cambia de un individuo a otro. En individuos con

una estructura de personalidad determinada, con ciertas características
psicológicas y con una adicción alcohólica grave puede, producir psicosis. La
conducta delictiva del alcohólico se caracteriza por no ser planeada aunque existe
un resentimiento hacia las personas que lo rodean o desplaza ese sentimiento
destructivo hacia personas que no conoce. La desorganización de la personalidad
se manifiesta en la desorientación espacio-temporal. 2

* Psicosis Senil

Los procesos del envejecimiento en relación a los problemas de

delincuencia. La psicosis senil comienza en ciertos individuos a partir de los 65
años, los trastornos físicos son sumamente notables y se caracterizan por una
declinación de funciones y por el proceso de envejecimiento. En la Psicosis Senil,
los delitos más comunes son de tipo sexual, aunque igualmente delitos como
homicidios y suicidios. Durante una crisis maníaca, los delitos suelen ser con un
marcado sadismo. Las conductas criminales pueden desarrollarse sin ninguna
razón manifiesta. Existen casos de homicidios inesperados, cometidos
aparentemente sin vacilación.

2
Arteaga Sánchez, Alberto, La Culpabilidad en la teoría general del Derecho Punible

21
 El desencadenamiento imprevisto es propio de la impulsividad
esquizofrénica, que puede manifestarse en el odio agresivo respecto a un
miembro de la familia o un desconocido. Las conductas criminales pueden
desarrollarse sin ninguna razón manifiesta. Existen casos de homicidios
inesperados, cometidos aparentemente sin vacilación.

Existen diversas formas de Paranoia que pueden dar lugar a conductas

delictuosas: la afección comienza a menudo después de un periodo de depresión
y de concentración afectiva con tentativa de explicaciones de sus sufrimientos
personales y morales mediante una conducta delirante que involucra a los otros en
forma de uno o varios perseguidores.

Cuando hablamos de delirio, su razonamiento se basa en deducciones

falsas o coincidencias, algunos disimulan su delirio durante algún tiempo pero
algunos acaban por identificar a su adversario en su enemigo, amigo o familiar,
realizando así un acto delictivo.

Cuando se trata de alucinaciones, el individuo no sabe que es lo que lo

persigue, pero sus alucinaciones auditivas le señalan individuos que conspiran
contra él o que lo inducen a actuar en forma delictiva.

En el homicidio patológico se observa una súbita impulsión homicida como

resultado de sus delirios o bien sin motivo definido. En el inicio de las condiciones
esquizofrénicas existen crímenes particularmente dramáticos y paradójicos que se
denominan homicidios inmotivados. Encontramos homicidios que realizan
conductas totalmente opuestas a las que realizarían otros; como son quedarse a
dormir por horas con la víctima, entrar en crisis nerviosa o quedarse por horas
viendo el cadáver hasta que se realiza su aprehensión, así como mostrar una gran
tranquilidad ante su conducta.

22
Retraso mental y criminalidad

La gravedad de la sintomatología nos indicará con una mayor claridad la

dinámica criminológica. La Asociación Americana para la Deficiencia Mental,
define a ésta como todo funcionamiento intelectual por debajo del promedio
general, que se origina durante el periodo de desarrollo asociado con la alteración
de la conducta de adaptación.

Las características principales del débil mental se relacionan a un desarrollo

retrasado, adaptación social inmadura e insuficiente.

El nivel intelectual inferior a lo normal le ha impedido un aprendizaje de tipo

escolar y laboral ya que sus actividades se encuentran limitadas y se desarrollan a
través de una actitud pasiva, permisiva y de carácter receptivo.

No se observan marcadas distorsiones de los valores sociales y morales, ya

que en su mayoría no son agresivos en el plano verbal, y no se presentan
conflictivas con la figura de autoridad, aunque existen casos en que por imitación
del grupo delictivo llega a una alta agresión.

El mismo se coloca en situaciones difíciles que no sabe resolver si no es

por medio de la mentira o la violencia y esto es debido a que es incapaz de hacer
frente a situaciones nuevas que exigen un análisis pasivo de sus dificultades.

Se ha observado que la personalidad con un retardo mental y con una

conflictiva social, desarrolla frente a determinadas circunstancias, generalmente
delitos de propiedad ajena, conductas que consisten en destruir, inutilizar o de
cualquier modo dañar un objeto ajeno.

Es una conducta impulsiva e incontrolada. También se ven involucrados en

robos y homicidios. Cuando juegan el papel de víctimas, se observa que
frecuentemente la persona con un retardo mental es víctima de delitos sexuales.
Esto sucede por las dificultades en la comunicación, su poca asertividad, fácil
manejo y convencimiento, además que en muy pocas ocasiones piden auxilio y/o
denuncian el delito del que fueron víctimas.

23
Personalidad senil y criminalidad

En toda existencia humana, hay periodos de transición, en los cuales se

producen crisis fisiológicas que pueden desencadenar trastornos físicos, psíquicos
y sociales. Esta edad se caracteriza por determinados trastornos orgánicos, que
en algunos casos desencadenan conductas delictivas.

La condición actual del anciano, depende de los valores genéticos, del

carácter y temperamento, de las enfermedades sufridas, de las experiencias del
estado socioeconómico, de sus nexos familiares y afectivos, de su soledad y
posibilidades de comunicación. La depresión es el cuadro psicológico que
denomina prácticamente toda la patología psíquica del anciano.

Muchos de los conflictos psicológicos que aparecen en la vejez se

relacionan con la marginación y la muerte involucrada en esta marginación,
conocida como muerte social. En la demencia senil, se observa que la actividad
es desordenada, insólita, existe pérdida a la iniciativa y del interés por adaptarse,
incapacidad de auto conducción, lenguaje incoherente. En los ancianos,
especialmente predominan los delitos contra las personas en los que encontramos
homicidios, fraudes, delitos sexuales, entre otros.

Son personas desconfiadas, con tendencia a controlar su medio, en

especial el familiar, a través de mecanismos obsesivos compulsivos, que son
característicos de conductas agresivas que llevan al homicidio.

Trastornos convulsivos y criminalidad

El término epilepsia, derivado de la palabra griega que significa apoderarse

o caer sobre, se aplica a un complejo de síntomas que se caracterizan por
episodios periódicos y transitorios de alteración en el estado de la conciencia, las
cuales pueden asociarse a movimientos convulsivos, transitorios emocionales y de
la conducta.

En términos generales una crisis convulsiva es producida por una descarga

neuronal. El sujeto está consciente y el aura es la primera manifestación de la

24
descarga neuronal que habitualmente es desagradable a nivel emocional. El aura
puede consistir en adormecimiento, hormigueo, sensaciones desagradables,
ruidos determinados o alucinaciones. La epilepsia es uno de los trastornos que
se ha asociado comúnmente con las conductas impulsivas especialmente en los
crímenes violentos.

El tipo de conductas delictivas que se proyecta en las personalidades

epilépticas con acentuados rangos paranoides y agresivos, son crisis violentas
caracterizadas por agresiones por lo común familiares. Se ha observado casos de
homicidios repentinos, impulsivos en los que la víctima del delito queda inhibida,
paralizada por lo sorpresivo del ataque y por la mínima motivación que lo
desencadena.

Personalidad dependiente y criminalidad

La personalidad dependiente, con un síndrome de toxicomanía está muy

relacionada con aspectos criminológicos. Se manifiesta la desinhibición en sus
relaciones con los demás y el progresivo deterioro psíquico y social.

Perfil de adictos

Es un sujeto que por lo general tiene una acentuada inestabilidad familiar,

laboral y educacional. El comportamiento inestable e inseguro del drogadicto
puede entenderse en la relación a su estructura familiar ya que proviene de la
familia autoritaria, con padres rígidos, castrantes, exigentes, en donde por ejemplo
se observa que el padre quiere que el hijo se conduzca exactamente como él
desea.

Se considera al drogadicto como una persona inmadura, infantil con

sentimientos de omnipotencia, evasivo y manifestando su permanente
dependencia a las drogas. Presenta valores sociales distorsionados que le
impiden discriminar entre los aspectos negativos y favorables, existe una
justificación de su accionar delictivo, de su dependencia que:

 Le permiten trabajar mejor

25
  Que tiene mayor resistencia
 Que así no se preocupará

Personalidad Psicopática y Criminalidad

La Psicopatía ó Personalidad Psicopática es la alteración más frecuente en

el ámbito carcelario y la de mayor significación en la Psicopatología criminal.
Generalmente el psicópata, se aparta físicamente de las normas sociales, si
bien esta desviación es a menudo difícil de abordar, es comúnmente un individuo
flexible, ágil y se mueve más rápidamente que los demás.

Las coincidencia del mundo circundante en el desarrollo de las conducta

criminales

La Herencia y el mundo Circundante y la Sociología Criminal, dentro del

desarrollo de estos estaremos tocando temas relacionados con estos, los cuales
son fáciles de dominar, porque son cosas que vemos y se nos plantean a diario,
dentro de una sociedad como la nuestra es fácil identificar la criminalidad de los
hechos sociales, y plantearnos ideas. En todas partes del mundo existe lo que
llamamos crímenes. De aquí tenemos la sociología criminal, pero esta se ocupa
sólo de la relación que existe entre el autor del delito, como sujeto activo, con la
sociedad. También podemos determinar si la criminalidad, o la capacidad de
comer delitos se puede heredar, algo muy importante que es necesario saber
cómo futuros abogados, y cómo influye la sociedad en los ciudadanos para que
estos comenten delitos

El renombrado criminólogo dominicano nos explica, que "el estudio

separado que se hace sobre la Disposición, el Mundo Circundante y la
Personalidad, sólo entraña un método de investigación, porque el delito es una
respuesta de los tres factores causales", y por eso lo define de la siguiente
manera: "el delito es siempre considerado gomo una respuesta de la personalidad,
considerada ésta como una totalidad indivisible, en la circunstancia externa
determinada".

26
 Por otra parte se expresa, que apoyados en las anteriores definiciones, se
han podido concebir diferentes clases de delincuentes, entre las cuales pueden
citarse "el delincuente de estado" y el "delincuente de ocasión". Por "delincuente
de estado" hemos de entender dice Leoncio Ramos—, no el habitual y peligroso,
sino aquel cuya personalidad está caracterizada por cualidades intrínsecas que
producen una tendencia hacia el delito, sin que para ello deban existir relaciones
circundantes especialmente graves; por lo que se podría decir con propiedad, que
el delito corresponde a su carácter, o bien, que el agente es un delincuente por
carácter. Expresa además, que el delincuente llamado de estado, no siempre es
un reincidente, sino que está amenazado para serlo, mientras no sea cambiada su
disposición, la cual puede ser llamada criminógena.

Por "delincuente de ocasión" se conoce aquel cuya causa del delito se halla
fuera, y no arraigada permanente y constantemente en su temperamento.

Estos son individuos que sólo delinquen, cuando coyunturas ó sucesos

sociales extraordinarios trastornan el curso de la vida social, tal como ha sucedido
en las grandes guerras. Y está demostrado, que las crisis y desasosiegos
provocados por las luchas y situaciones calamitosas, llevan a estos individuos a
delinquir, pero tan pronto como se torna la paz y la justicia, son incapaces de
cometer delito alguno.

Se ha comprobado que la mayoría de investigadores criminológicos

coinciden en afirmar que, tanto la disposición ó la constitución fisiobiológica del
individuo, así como el mundo circundante y la personalidad son los principales
elementos causales de la criminalidad. Empero, como todo pueblo está integrado
por individuos que habitan en un mundo circundante nacional, regional, municipal
ó familiar; resulta indispensable por tanto —según Leoncio Ramos—, que la
delincuencia total de dicho pueblo sea el resultado de la suma de la delincuencia
de cada individuo en particular.

27
 Opinión personal

Generalmente, las enfermedades mentales han sido relacionadas a la

delincuencia, pues existen determinados comportamientos criminales que pueden
relacionarse o atribuirse a anomalías mentales. Esta relación entre la ley y la
enfermedad mental ha sido objeto de un intenso debate a través de la historia. En
algunos casos se ha llegado a afirmar que existe una correlación inversa e
invariante entre el número de pacientes en hospitales psiquiátricos y el número de
presos; tal afirmación se llegó a denominar Ley Penrose. Sin embargo, es preciso
tener en cuenta que no todo criminal o delincuente es un enfermo mental, ni todo
enfermo mental comete actos delictivos, pues aunque existe un diagnóstico clínico
debe existir una relación de causalidad con el acto.

La mayor parte de personas con alguna alteración psicopatológica no

comete delitos o su comportamiento no es violento, pero la probabilidad de que
esta circunstancia se produzca mayor entre las personas con problemas de salud
mental que entre aquellos que no los tienen.

Así, aunque el porcentaje de psicóticos no es más alto entre la población

encarcelada que entre la población no encarcelada, bien es cierto que suelen ser
más violentos lo que se hallan en la primera situación; otras alteraciones
psicopatológicas frecuentemente diagnosticadas entre delincuentes presos son
trastornos de conducta y trastorno por déficit de atención con hiperactividad, los
trastornos de personalidad (trastorno de la personalidad antisocial) y por estrés
post traumático, éstos últimos más frecuentes entre la población reclusa que entre
la población general.

Los trastornos del estado de ánimo también son frecuentes entre la

población reclusa, con una morbilidad mayor entre las mujeres; aunque el
porcentaje más alto de trastornos mentales en la población ingresada en prisión
son aquellos relacionados con el consumo de drogas.

28
 Conclusión

Sabemos que el Derecho Penal es un sistema discontinuo de ilicitudes y

que es función de su legislador escoger, entre las muchas conductas humanas
que importan una violación de las normas jurídicas, aquellas que, por especiales
razones de interés social, deben dar lugar a la aplicación de una pena. Sabemos
también que el señalamiento preciso y previo de estas conductas por la ley es
tenido como una garantía de libertad, igualdad y seguridad jurídica para los seres
humanos, en cuanto a nadie puede imponérsele una pena por un hecho que de
antemano no hubiera podido encontrar indicado en la ley como delito y sancionado
con una pena determinada.

La conducta delictiva del psicópata tiene una significación mágica; exaltar o

restaurar un sentimiento primitivo de omnipotencia y esto le da una visión
distorsionada de la realidad.

Las personalidades antisociales se ven con frecuencia envueltas en

multitud de actitudes delictivas como autores, encubridores o cómplices. Su
XLVII
desprecio por las normas de convivencia, su frialdad de ánimo y su incapacidad
para aprender por la experiencia los hace eminentemente peligrosos.

Por ende las autoridades y funcionarios tienen obligación de poner en

conocimiento de Fiscalía cualquier caso de posible incapacidad del que tengan
conocimiento por razón de su cargo. Toda esta información es examinada y
valorada por Fiscales y en un porcentaje bajo de ocasiones se presenta demanda
cuando el presunto incapaz es una persona que sufre una enfermedad mental.

El conocimiento de que una persona presenta un trastorno mental, por sí

sólo es de uso limitado de cara a la prevención de la conducta violenta. Esto se
debe a que la mayoría de los individuos con trastorno mental no son violentos y
que la mayoría de los individuos violentos no tienen un trastorno mental. Los
factores, tanto individuales como ambientales asociados con la conducta violenta
en personas con trastornos mentales requieren de más investigación.

29
 Bibliografía
 Américo Herasme Medina, manual de criminología Pág. 332
 Arteaga Sánchez, Alberto, La Culpabilidad en la teoría general del Derecho
Punible
 BARRITA LOPEZ, Fernando; Manual de Criminología, Edit. Porrúa, Mexico,
1996, 345 págs.
 CARRARA, FRANCHESCO. Programa del curso de Derecho Criminal,
tomo I., Depalma. Buenos Aires, Argentina. 1944.
 DI TULLIO, Benigno. "Principios de Criminología Clínica y Psiquiatría
Forense". Editorial Aguilar, Madrid. España. 1966, pág. 402.
 "Derecho Penal Mexicano", Tomo III, Gonzalo De La Vega Porrua, 1974.
 De la Cuesta Aguado, Paz M. (1995). Tirant lo Blanch (ed.). Tipicidad e
Imputación Objetiva, Primera edición.
 "Endocrinología y Criminalidad", Capitulo I. Leopoldo Baeza y Aceves
 FERRI, ENRRICO. Los nuevos horizontes del Derecho y del Procedimiento
Penal. Centro Editorial de Gongora. Madrid, España. 1887.
 FERRI, ENRRIQUE. Principio de Derecho Criminal. Editorial Reus. Madrid,
España. 1933.

30