Lazarillo
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Año 2021
Renacimiento: periodo de la historia europea caracterizado por un renovado interés por el pasado
grecorromano clásico y especialmente por su arte. Comenzó en Italia en el siglo XIV y se difundió por el resto
de Europa durante los siglos XV y XVI. La más reciente investigación ha puesto fin al concepto de la edad
media como época oscura e inactiva y ha mostrado cómo el siglo previo al Renacimiento estuvo lleno de
logros. Gracias a los scriptoria (aulas dedicadas al estudio) de los monasterios medievales se conservaron copias
de obras de autores latinos como Virgilio, Ovidio, Cicerón y Séneca. En el campo de la teología, durante el
Renacimiento se continuaron las tradiciones medievales. El platonismo y el aristotelismo fueron cruciales para
el pensamiento filosófico renacentista. El renacimiento italiano fue sobre todo un fenómeno urbano, un producto
de las ciudades que florecieron en el centro y norte de Italia, como Florencia, Ferrara, Milán y Venecia, cuya
riqueza financió los logros culturales renacentistas.
La Edad Media no acabó de forma repentina; pero sería falso considerar la historia como una perpetua
continuidad y al Renacimiento como una mera continuación de la Edad Media. Una de las más significativas
rupturas renacentistas con la tradición medieval se encuentra en el campo de la historia, que se convirtió en una
rama de la literatura más que de la teología; los historiadores rechazaron la división medieval cristiana de la
historia, que se iniciaba con la Creación, seguía por la encarnación de Jesús, para terminar con el posterior Juicio
Final. La nueva visión también constaba de tres partes: comenzaba con la antigüedad, continuaba con la
edad media y se completaba con la edad de oro, o Renacimiento, que acababa de iniciarse. Los
renacentistas exaltaban el mundo clásico, condenaban el medioevo como una etapa ignorante y bárbara y
proclamaban su propia era como la época de la luz y de regreso al clasicismo.
El estudio de la lengua griega se desarrolló en los siglos XV y XVI gracias a la emigración de eruditos
bizantinos que, tras la caída de Constantinopla en manos del Imperio otomano en 1453, la enseñaron en
Florencia, Ferrara y Milán. El estudio de la literatura antigua, de la historia y de la filosofía moral, aunque a
veces degeneró en una imitación de los clásicos, tenía por objetivo crear seres humanos libres y civilizados,
personas de gusto y juicio, ciudadanos, en definitiva, más que sacerdotes y monjes.
La perfección del cuerpo humano mediante el entrenamiento físico, se convirtió en uno de los objetivos de la
educación renacentista. Los estudios humanísticos, junto a los grandes logros artísticos de la época, fueron
fomentados y apoyados económicamente por grandes familias.
En el campo de las bellas artes la ruptura decisiva con la tradición medieval tuvo lugar en Florencia en torno
a 1420, cuando el arte renacentista alcanzó el concepto científico de perspectiva lineal que hizo posible
representar el espacio tridimensional de forma convincente en una superficie plana.
Donatello, considerado fundador de la escultura moderna, esculpió una estatua de “David”, primer desnudo a
tamaño natural desde la antigüedad. Los ideales renacentistas de armonía y proporción culminaron en las
obras de Rafael, Leonardo da Vinci y Miguel Ángel durante el siglo XVI.
También se hicieron progresos en medicina y anatomía, especialmente tras la traducción, en los siglos XV y
XVI, de numerosos trabajos de Hipócrates y Galeno; también fueron traducidos en el siglo XVI algunos de los
más avanzados tratados griegos sobre matemáticas. A finales del siglo XVI, Galileo ya había dado un paso
fundamental al aplicar modelos matemáticos a la física. La geografía se transformó gracias a los conocimientos
empíricos adquiridos a través de las exploraciones y los descubrimientos de nuevos continentes.
La invención de la imprenta en el siglo XV (por el alemán Gutenberg, en 1474)revolucionó la difusión
de los conocimientos. La imprenta incrementó el número de ejemplares, ofreció a los eruditos textos idénticos
con los que trabajar y convirtió el trabajo intelectual en una labor colectiva. El uso de la pólvora transformó las
tácticas militares entre los años 1450 y 1550, favoreciendo el desarrollo de la artillería, formando los primeros
ejércitos permanentes de Europa.
En lo que respecta al pensamiento político, los renacentistas aseveraron que la misión central del gobernante
era mantener la seguridad y la paz: consolidación del poder monárquico centralizado.
La cristiandad se mantuvo como un elemento vital y esencial de la cultura renacentista. El acercamiento
humanista a la teología y a las Escrituras se puede observar desde el erudito y poeta italiano Petrarca hasta el
holandés Erasmo de Rotterdam, lo que tuvo un poderoso impacto sobre los católicos y protestantes.
El Renacimiento fue sin duda una época en la que las antiguas creencias fueron puestas a prueba y la
ebullición intelectual que entonces se produjo preparó el camino a los pensadores y científicos del siglo XVII.
El Humanismo: El Humanismo nace en Italia y se propaga por toda Europa. Busca una formación en base al
pensamiento greco-latino, un ideal de sabiduría y una filosofía de vida; es un acto de fe en la naturaleza humana.
En su origen fue un movimiento laico (no religioso). Como iniciadores se pueden citar a Petrarca y Bocaccio.
Defiende el antropocentrismo (el hombre como centro de todas las cosas) y es la base ideológica del
Renacimiento. Concebía el saber como integral y sus modelos eran los escritores antiguos(clásicos), que fueron
traducidos. El ideal era el del hombre universal, y el medio más apropiado para encarnarlo era la razón. A través
de este movimiento intelectual, la burguesía encausa su visión del mundo. Más adelante, el Humanismo
propondrá una visión crítica de la Iglesia. Primero, Erasmo de Rotterdam, con su defensa de la libertad del
espíritu en contra de la escolástica, tradujo el Nuevo Testamento y contribuyó a impulsar la Reforma. Después,
Lutero(alemán)inicia el movimiento radical reformista, que involucra a toda Europa y culmina con la división de
la Iglesia en católicos y protestantes. A esto se opondrá luego la reacción de la Iglesia católica, conocida como
“Contrarreforma”. En varios estados funcionará la Inquisición, que castigaba a quienes se apartaban del dogma.
Además, se promoverá la educación religiosa para recuperar fieles.
Siglo de Oro español: se lo denomina así por la importancia universal de las obras y los autores de este
período. Se pueden apreciar dos constitutivas: 1. Renacimiento del siglo XVI. 2. Barroco del siglo XVII.
En esta etapa se da una eclosión cultural influenciada, y de alguna manera originada, por la introducción de
la imprenta, el descubrimiento de América, la conquista de Granada y la importancia del Humanismo. La
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literatura española se renueva con la introducción del Renacimiento; se renuevan las formas métricas, el estilo,
los temas y los géneros. La poesía importa de la italiana metros como el endecasílabo y formas y combinaciones
estróficas como la octava y el soneto. Estilísticamente, se busca ante todo una lengua literaria sencilla y
equilibrada, siguiendo los venerados modelos clásicos. Los temas privilegiados son: la naturaleza, los mitos
clásicos, el amor idealizado; el sentimiento religioso, los acontecimientos históricos propios de un período de
expansión política y militar. La poesía lírica y el diálogo en prosa son dos de los géneros más representativos de
la literatura. En esta etapa surge también, con el “Lazarillo de Tormes”, un género narrativo nuevo: la novela
picaresca.
Algunas figuras representativas: Miguel de Cervantes, Tirso de Molina, Calderón de la Barca, Lope de Vega,
Francisco de Quevedo, Luis de Góngora, El Greco, Velázquez, entre otros.
La novela picaresca: En 1554 se imprimió en Burgos, en Alcalá de Henares y en Amberes, un libro con el
título de “Vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades”. Hay razones para pensar que debió de
existir una edición anterior, quizás de 1553, pero no se ha conservado ningún ejemplar de esta edición. El libro
se hizo pronto popular y se reimprimió muchas veces. Su popularidad se extendió más allá de España, y fue
traducido al francés (1560), al inglés (1576), al holandés (1579), al alemán (1617), al italiano (1622). Esta obra
marcará el inicio de un nuevo género literario: la novela picaresca, de gran importancia en la literatura española
del Siglo de Oro.
Al margen de la individualidad propia de cada obra, todas las novelas picarescas comparten una serie de
características comunes que podrían resumirse en las siguientes: 1. El protagonista es el pícaro: categoría social,
procedente de los bajos fondos que, a modo de antihéroe, es utilizado por la literatura como contrapunto al ideal
caballeresco. Su línea de conducta está marcada por el engaño, la astucia y la trampa ingeniosa. Vive al margen
de los códigos de honra propios de las clases altas de la sociedad de su época. Su libertad es su gran bien. Una
libertad condicionada por su ascendencia, que el protagonista relata al lector para que comprenda su norma de
vida. 2. Carácter autobiográfico: el protagonista narra sus propias aventuras, empezando por su genealogía, que
resulta ser lo más antagónica a la estirpe del caballero. La forma autobiográfica estará en función de la
orientación de crítica social que ejercerá la novela picaresca; al proyectar el autor su personalidad sobre un
personaje ficticio, esto le permite exponer con mayor libertad sus propias ideas. 3. Una doble temporalidad: el
pícaro aparece en la novela desde una doble perspectiva: como autor y como actor. Como autor se sitúa en un
tiempo presente que mira hacia su pasado y narra(en función de narrador protagonista) una acción, cuyo
desenlace conoce de antemano. 4. Estructura abierta: el pluralismo de aventuras que se narran podrían
continuarse; no hay nada que lo impida, porque las distintas aventuras no tienen entre sí más conexión
argumental que la que da el protagonista. 5. Carácter moralizante: Cada novela picaresca vendría a ser un gran
"ejemplo" de conducta aberrante que, sistemáticamente, resulta castigada. 6. Carácter satírico: La sátira es un
elemento constante en el relato picaresco. El protagonista deambulará por las distintas capas sociales, a cuyo
servicio se pondrá como criado, lo que le permitirá conocer los acontecimientos más íntimos de sus dueños.
Todo ello será narrado por el pícaro con actitud crítica. Sus males son, al mismo tiempo, los males de una
sociedad en la que impera la codicia y la avaricia, en perjuicio de los necesitados que pertenecen a las capas más
bajas de la sociedad.
Otros aspectos característicos: *El relato suele estar narrado en primera persona. *Esta autobiografía comienza
al menos con la niñez del protagonista. *La narración sirve para justificar una vida (presente) sin honor. *Los
sucesos narrados no son fantásticos, sino "realistas": hablan de una realidad que el lector reconoce como cercana
y posible.
Generalidades del “Lazarillo de Tormes”: obra de autor desconocido y de la que se conservan tres primeras
ediciones separadas (Burgos, Alcalá y Amberes) que datan de 1554. Es muy probable que la primera edición sea
de 1552 ó 1553. El “Lazarillo” es una novela cómica, de una comicidad a veces brutal, escrito en un estilo
ingenioso y agudo. La impresión de tres ediciones en un año indica que el libro tuvo éxito comercial. En 1555 se
publicó en Amberes una segunda parte. En esta, Lázaro se convierte temporalmente en un pez y tiene una serie
de aventuras submarinas. Las dos partes fueron condenadas por el índice prohibitorio de la Inquisición de 1559.
El libro fue popular en Europa: se tradujo al francés ya desde 1560 y volvió a traducirse tres veces en el siglo
siguiente. Con el “Lazarillo” empieza el género de la novela picaresca de tanto éxito en el siglo XVII. Aunque se
destaca que el auge del personaje pícaro en la novela nació por la publicación de la primera parte de “Guzmán
de Alfarache” de Mateo Alemán.
La presentación de la obra está organizada en Tratados. Su edición supone una importante ruptura con los
hábitos narrativos de la época: * Se utiliza la primera persona para un relato de ficción. * Aparece el antihéroe: a
Lázaro no le interesa mucho luchar contra la injusticia, no le importa que ocurre con los demás.
El relato es una aventura interior y se enmarca dentro del realismo: no hay nada que altere la realidad. El
autor utiliza un estilo “humilde”: sobriedad, huida de toda afectación, selección del léxico empleado, ausencia
casi completa de neologismos, economía expresiva. La redacción de la obra es ante todo un acto de obediencia.
El principal propósito del autor no consiste en narrar, sino en incorporar hechos a su propia persona.
Como toda novela comprende tres planos temporales: 1. Tiempo de narración: momento en que el narrador
cuenta, habla o escribe. Y dos niveles integrados en la trama de la acción misma: 2. Tiempo cronológico,
astronómico o público: horas, días, años. 3. Tiempo personal o psicológico: son los hechos de conciencia;
temporalidad que el hombre siente fluir dentro de sí mismo.
Personajes más representativos: Lazarillo de Tormes: es el protagonista de la novela. Representa la clase baja
y vagabunda de la época. Es humilde y marginal; es artesano consciente, aunque oportunista, de su propio
destino; no inspira odio: es simpático, quimérico, ridículo y mentiroso. Es un antihéroe, astuto y un pícaro. Va
de amo en amo para satisfacer su hambruna. Cada amo recrea una situación social diferente. Una vez pudo
conseguir la felicidad, pudo tener una vida más estable.
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Tomé González: Padre de Lázaro de Tormes. Es acusado de robo, y es mandado a servir a un mozo, y poco
después muere. Antona Pérez: Madre de Lázaro. Entrega a Lázaro a un ciego para que el éste lo guiara. Zaide:
Padrastro de Lázaro. Lo capturan por robo, y es azotado.
El Ciego: Primer amo de Lázaro. Es el personaje que más influye en su vida ya que le enseña a ser astuto,
malicioso, tramposo, y hasta vengativo. El ciego le enseñaba cosas a Lázaro a través de los golpes. Le enseña
también a obtener comida y a conseguir dinero. El ciego era tramposo y avaro. Era un mendigo como Lázaro.
Fingía que sabía predecir el sexo de los bebés de las mujeres embarazadas, y lo hacía sólo para obtener dinero, y
a veces servía como supuesto médico. Lázaro lo deja porque no le traía la felicidad que él buscaba: Comida.
El Clérigo: Segundo amo de Lázaro. Representa el tema de la corrupción del clero, ya que es avaro e
inescrupuloso. Guardaba el pan de la misa en un arca para comérselo él sólo. Es inescrupuloso porque ofrece a
Lázaro comida que supuestamente había sido pulverizada por ratones. La avaricia del clérigo lo enceguece frente
a la realidad. Ej.: piensa que habían ratones en su casa comiéndole el pan.
El Escudero: El escudero es el tercer amo de Lázaro. Representa las falsas apariencias de la época. Lázaro
pensaba que él era un hombre rico y de muchos bienes, pero luego se entera de que es todo lo contrario de lo que
pensaba. En este caso, los papeles entre el amo y servidor cambian: el escudero depende de Lázaro en vez de
Lázaro depender del escudero. El escudero luego lo abandona, y Lázaro vuelve a la calle.
El Arcipreste de San Salvador: Noveno y último amo. Es el que le consigue la esposa a Lázaro. Representa
también la corrupción del clero ya que habían cuentos por esa área sobre relaciones entre la esposa de Lázaro y
el arcipreste(párroco).
La Criada del Arcipreste de San Salvador: Mujer con la que Lázaro se casa, y la que le trae parte de su felicidad.
Una vez que se casa con ella, satisfizo su hambruna, y llegó a una estabilidad en su vida.