Educacion y Cultura 93
Educacion y Cultura 93
Educacion y Cultura 93
93 Revista No.
Bogotá, D.C., - Colombia - • Diciembre 2011 • No. 93 • ISSN 0120-7164 • Tarifa Postal Reducida 2011- 311 • $ 12.000
30 años del Movimiento Pedagógico (1982-2012)
Hacia el Encuentro Nacional del Proyecto Educativo Pedagógico Alternativo PEPA
Diciembre 5 y 6 de 2012
ENERO FEBRERO marzo abril
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6 Marzo Día de la Mujer 7 Agosto Batalla de Boyacá
19 Marzo Día de San José 15 Octubre Día de la Raza
23 Abril Día del idioma 12 Noviembre Independencia Cartagena
1 Mayo Día del Trabajo
13 Mayo Día de la Madre Receso Escolar
15 Mayo Día del Maestro
17 Junio Día del Padre 18 de Junio al 6 de Julio
20 Julio Día de la Independencia 8 al 12 Octubre
• Edición Nº 93 •
• CONTENIDO •
Revista trimestral del Centro de Estudios Por el país próspero y justo que soñamos:
e Investigaciones Docentes CEID de la Federación al alcance de los niños.
Colombiana de Educadores FECODE
Gabriel García Márquez
Diciembre de 2011 No. 93 • Valor $12.000
C
DIRECTOR
Senén Niño Avendaño
uán distante y extraño parece este justo sueño con el que cierra
CONSEJO EDITORIAL
Luis Eduardo Varela, Luis Grubert Ibarra, John Ávila, Víctor Gaona, Gabriel García Márquez la hermosa proclama en el “Informe de la Mi-
Jairo Arenas, José Hidalgo Restrepo, Marcela Palomino, José Fernando sión de Sabios1 con respecto a la tremenda realidad que hoy vive la
Ocampo, Alfonso Tamayo
educación pública en Colombia.
EDITORA
María Eugenia Romero
A pocos días de presentado el informe se inició en el país la más
FOTOGRAFÍAS grande contrarreforma educativa de que se tenga conocimiento: asig-
Jesús Alberto Motta Marroquín
Diva Nelly Mejía - La Bebeteca,
nación per cápita por niño, desaparición de cerca de 30.000 institu-
Carvanal de Barranquilla - Astrid Marina Coronado ciones educativas por la vía de la integración, drástica reducción de
Ied Antonio Nariño la nómina de docentes directivos, desmantelamiento de la planta de
Fecode
personal administrativo, incremento de la jornada laboral docente, au-
CARICATURAS mento del número de estudiantes por curso, recorte de los recursos
Kekar (César Almeida)
para la educación mediante dos reformas constitucionales, expedición
DIAGRAMACIÓN de un arbitrario Estatuto Docente que desprofesionalizó al magisterio,
Andrea Salazar y Sandra González
www.diagramacion.com privatización de la educación pública mediante la intermediación de
DISEÑO DE PORTADA los recursos estatales educativos, establecimiento de la educación con
4 Andrea Salazar y Sandra González ánimo de lucro desde el Preescolar hasta la Educación Media, ataques
IMPRESIÓN a la autonomía y a la democracia de las instituciones educativas y lo
Prensa Moderna (Cali - Colombia) último, aprobación de un Plan Nacional de Desarrollo que despoja a
DISTRIBUCIÓN Y SUSCRIPCIONES los niños de 3 y 4 años del derecho fundamental a la educación.
Calle 35 Nº 14 - 55
Teléfonos: 245 3925 Ext. 104
Línea Gratuíta: 01-8000-12-2228 La Ley 1450 del 16 de junio de 2011 debería llamarse: PLAN NA-
Celular: 315 529 9515 CIONAL DE DESARROLLO: PROSPERIDAD PARA TODOS LOS QUE NO
Telefax: 232 7418
SON POBRES, y debe denominarse así porque es monstruosa la forma
Bogotá, D.C., Colombia
como la ley en mención trata a la Educación Preescolar de los sectores
www.fecode.edu.co más desfavorecidos.
correo electrónico: revedcul@fecode.edu.co
• EDITORIAL •
El derecho a la educación
preescolar de tres grados
Para poder garantizar los derechos humanos fundamentales de niños y niñas se requiere
con urgencia de una política más seria, que contemple planes para propiciar transforma-
ciones en la sociedad y en el seno de las familias, de modo que se generen condiciones
materiales de existencia que le permitan a la niñez colombiana vivir y crecer con dignidad
y justicia, y en ello, la educación tiene un peso mas importante que el lugar secundario y
accesorio que se le ha asignado en la llamada PAIPI (Política de Atención Integral de la
Primera Infancia).
No podemos ahorrar esfuerzos en la lucha por la defensa del derecho a la educación para toda la infancia y la juventud, incluyendo el preescolar de
tres grados, la educación básica, la media y la educación superior.
De la educación preescolar
a la educación inicial Graciela Fandiño C.1
Referirse a la Educación Inicial significa buscar un cambio cultural que lleve a re-concep-
tualizar la noción de Educación Preescolar con su sentido preparatorio para la educación
primaria, para pasar a una educación centrada en el afianzamiento del desarrollo, en donde
el juego, el arte, la literatura y la exploración del medio, sean los pilares fundamentales, en
tanto son las actividades primordiales a través de las cuales los niños y niñas de cero a 5
años se relacionan con el mundo.
1 Profesora del programa de Educación Infantil de la Universidad Pedagógica Nacional. Licenciada en Educación Primaria, Universidad de San
Buenaventura. Doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación. Programa de Formación del profesorado en la didáctica y Organización Escolar
de las áreas del currículum. UNED. Madrid. Coordina el grupo de investigación “Pensamiento y Creencias de los profesores de Educación Infan-
til”. Correo Electrónico: gmfandiño@pedagogica.edu.co.
2 La educación formal a que se refiere la presente Ley, se organizará en tres (3) niveles: a) El preescolar que comprenderá mínimo un grado obli-
gatorio. Ley 115 de 1994
3 Decreto 1860 ARTICULO 6o. ORGANIZACION DE LA EDUCACION PREESCOLAR. La educación preescolar de que trata el artículo 15 de la Ley
115 de 1994, se ofrece a los niños antes de iniciar la educación básica y está compuesta por tres grados, de los cuales los dos primeros grados
constituyen una etapa previa a la escolarización obligatoria y el tercero es el grado obligatorio.
4 “Artículo 29. Derecho al desarrollo integral en la primera infancia. La primera infancia es la etapa del ciclo vital en la que se establecen las
bases para el desarrollo cognitivo, emocional y social del ser humano. Comprende la franja poblacional que va de los cero (0) a los seis (6)
años de edad. Desde la primera infancia, los niños y las niñas son sujetos titulares de los derechos reconocidos en los tratados internacionales,
en la Constitución Política y en este Código. Son derechos impostergables de la primera infancia, la atención en salud y nutrición, el esquema
completo de vacunación, la protección contra los peligros físicos y la educación inicial. En el primer mes de vida deberá garantizarse el registro
civil de todos los niños y las niñas.”
5 El Departamento Administrativo de Bienestar Social (DABS), se reestructuró en 2007 y pasó a llamarse Secretaria Distrital de Integración Social
de Bogotá SDIS.
6 Sanchidrian, Carmen, “La educación Infantil en Gran Bretaña. Modelos y debates” en Sanchidrian, Carmen y Ruiz Berrío Julio, “Historia y pers-
pectiva Actual de la educación Infantil”, GRAO, Barcelona, 2010, pp. 47-67.
7 Sanchidrian, Carmen, (2010). “La educación maternal francesa. La construcción de un modelo propio. en Sanchidrian, Carmen y RUIZ Berrio
Julio, “Historia y perspectiva Actual de la educación Infantil, GRAO, Barcelona, págs. 69-88.
Aunque no es posible ser tan simplista contribuyen a entender nuestros debates actuales, pues
forman parte de nuestra historia por las influencias que de
como para afirmar que “todas” allí se han tenido. Los “asilos”, por ejemplo, fueron nuestras
las instituciones a la que asisten primeras instituciones de atención a los niños abandonados
y de ellos, se podría decir, nacen nuestras instituciones del
los infantes de sectores populares
servicio social8. Pero, a su vez, las ideas de Frobel, Montes-
son asistencialistas y que “todas” sori y en general de la Escuela Nueva, llegaron a Colombia al
aquellas del sector privado que comienzo del siglo XX, por lo que no es fácil explicarse por
qué a pesar de esas influencias, el peso de lo “asistencial”
atienden a la población de clases haya sido tan fuerte, que aún hoy se mantiene, o que nues-
media y alta, hacen énfasis en la tra educación de la primera infancia esté tan centrada en la
preparación para la primaria e incluso mirada preparatoria para la escolaridad, algo que valdría la
pena investigar 9.
la primarización; y que las instituciones
cuyo énfasis es el potenciamiento Estas tres miradas sobre la escuela para la primera infan-
cia, las encontramos “actualizadas” hoy en nuestro país, pero
del desarrollo que frecuentan ciertos enmarcadas dentro de la gran dicotomía de nuestra educa-
sectores profesionales, cercanos a los ción. Por una parte, la educación para los sectores populares
temas educativos, son privadas, pues financiada por el Estado y ofrecida por instituciones públicas
y privadas, separada casi totalmente de la educación para los
existen varios casos que negarían sectores medios y altos financiada por los padres de familia
esta afirmación, lo que quiere decir y ofrecida por instituciones privadas. Es así como persiste, de
un lado, la mirada asistencialista a pesar de grandes esfuerzos
que estas miradas atraviesan a las
realizados por algunas administraciones de incorporar con el
instituciones que atienden a los distintos peso debido el componente pedagógico, la “primarización”,
10
sectores sociales. Sin embargo, que de cierta manera, cambió a una preparación para lo que
se requiere en la educación primaria y que es, tal vez, el ma-
el porcentaje de estas excepciones yor objetivo de la educación en estas edades10, Y por último,
lleva a afirmar que nuestra educación la educación acorde con las características del niño, que es
la que se comparte en el Lineamiento Pedagógico Curricular
de la primera infancia es la etapa
del Distrito, y que se conceptualiza como: “Potenciamiento
educativa más inequitativa, de todo del desarrollo”, que aunque posee cierta tradición, todavía no
el sistema educativo. alcanza la generalización que se quisiera desde muchas ins-
tancias, entre ellas la universidad.
8 Cerda H. (1996). Educación preescolar. Historia, legislación, currículo y realidad socioeconómica. Magisterio, Bogotá
9 Vale la pena aprovechar este espacio, para invitar a los maestros que estudian maestrías y doctorados a realizar investigaciones sobre esta
etapa educativa sobre la cual hemos construido muy poco saber.
10 Aunque con cierta preocupación se observa nuevamente, una tendencia a la “primarización”, o sea bajar los contenidos de la primaria a este
nivel. Por ejemplo: la idea de enseñar las vocales a los tres años, es hoy muy generalizada a pesar de conocerse que en un país como Finlandia,
que tiene los mejores resultados en las pruebas internacionales de lenguaje, los niños aprender a leer y escribir a los 7 años.
12 Ministerio de Educación Nacional, (1982) “Currículo de Preescolar, niños de 4 a 6 años”, Bogotá, D.C., Ministerio de Educación Nacional, (1998)
Lineamientos curriculares de Preescolar, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (1989) el Proyecto Pedagógico Comunitario del ICBF, de
1989. Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS (2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bogotá, DC. Estos dos últimos, si
bien no son considerados por ellos mismos curriculares, responden a este tipo de documentos.
13 Alcaldía Mayor de Bogotá, (2010) Lineamiento Pedagógico y Curricular para la Educación Inicial en el Distrito, Bogotá, D.C.
14 Zabalza Miguel, “El curriculum de la Educación Infantil” http://www.infantiae.org/zabacurriITA1807.asp. consultado el 7 de Enero de 2005,
Los currículos son propuestas políticas y pedagógicas de En la actualidad en Bogotá, la SDIS está trabajando para
los estados, pero representan líneas de política. Estos se que todos los jardines infantiles tengan una perspectiva de
reelaboran y se reinterpretan por los diferentes actores: por Atención Integral por lo que se rigen por el Acuerdo 057 de
las instituciones y por cada maestro en sus ejercicios de pla- 2009, que establece los estándares técnicos que todos los
neación, interacción en el aula y evaluación. Los maestros de jardines públicos y privados deben seguir. Así mismo, en el
Educación Infantil, no pueden pensar en el currículo al tiempo caso de los jardines de la Secretaria, en sus cuatro modalida-
que ejercen de maestros, al igual que los otros educadores des: Jardines Propios, Casas Vecinales, Jardines Cofinanciados
del sistema educativo necesitan de unos currículos que les y Jardines Sociales operados por las Cajas de Compensación,
den orientación. No porque ellos no puedan realizarlos, por- se ofrece el servicio en jornada completa, de 8 a 5 de la tarde,
que de hecho en las construcciones curriculares participan lo que les facilita a los niños y niñas una Atención Integral y
maestros, sino porque esa no es su función cuando están en además, contribuye a que las familias puedan sentirse tran-
las aulas; allí su trabajo es elevar el desarrollo de los niños y quilas mientras sus miembros consiguen su sustento.
en eso utilizan toda su energía intelectual y física.
De otra parte, existen unos elementos en los colegios
Se plantea, entonces, que asumir el concepto de Educación públicos y privados sobre los cuales es importante llamar la
Inicial no implica la desaparición de la educación preescolar sino atención. Una investigación realizada por la Universidad Pe-
que es una reconceptualización que intenta garantizar el derecho dagógica Nacional15 sobre la articulación preescolar-primaria,
a una educación acorde con las características de los niños. las maestras de los grados de transición de los colegios ofi-
15 Rojas S., Fandiño G., Castaño I., (2006) Las creencias de los profesores sobre la articulación entre preescolar y el primer grado de primaria.
Universidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investigación, 2004- 2005.
ciales luego de la integración de varias instituciones a un Decreto 1860 ARTICULO 6o. ORGANIZACION DE LA
solo centro educativo, afirman que las directivas, en general, EDUCACION PREESCOLAR
desconocen la importancia del grado de transición y mues-
Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS
tran poco interés en él. En otra investigación se observa que
(2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bo-
en los colegios privados, cuando una maestra es percibida gotá, D.C.
como “buena” en el grado de transición, rápidamente se le
ofrece pasarse a los grados de primaria, pareciendo que en Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS
estos se pudiese aprovechar mejor de sus talentos16. (2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bo-
gotá, D.C.
Así mismo, se hizo evidente otro problema en la organiza- Fandiño G. Castaño I, (2011) Haciéndose maestras: pro-
ción de los profesores. En general, en los colegios las reunio- blemas de enseñanza en su primer y tercer año de
nes se organizan por áreas de conocimiento y los docentes trabajo de las maestras de educación infantil Univer-
del grado de transición, como no son especialistas en áreas, sidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investi-
ni su trabajo gira en torno a ellas, cuando son invitadas de- gación, 2006- 2010.
ben elegir alguna de las áreas de conocimiento e ir a estas
Fandiño Graciela (2007), “El pensamiento del profesor
reuniones; pero allí los problemas de los niños y niñas del sobre la planificación en el trabajo por proyectos”,
grado de transición casi nunca son abordados. Igualmente en Colección tesis Doctorales. Universidad Pedagógica
las citadas investigaciones y en otras17, incluso en algunos do- Nacional, Bogotá
cumentos de la misma Secretaria de Educación18 se observó
que a pesar que los lineamientos de año 1998 se refieren Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (1989) Pro-
al juego como uno de los componentes fundamentales del yecto Pedagógico Comunitario del ICBF.
mismo, los espacios de juego, se reducen al recreo, pues en Ministerio de Educación Nacional, (1982) “Currículo de
el aula estos espacios casi no existen, aunque las maestras lo Preescolar, niños de 4 a 6 años”, Bogotá.
reconozcan como la actividad más importante para los niños y
niñas, y sea considerada por ellos como la actividad que más Ministerio de Educación Nacional, (1998) Lineamientos
14 les gusta realizar. curriculares de Preescolar,
Alcaldía Mayor de Bogotá, (2010) Lineamiento Pedagógi- Secretaria de Educación del Distrito Capital, SED (1998)
co y Curricular para la Educación Inicial en el Distrito, El grado cero en el Distrito Capital Evaluación de Im-
Bogotá, D.C. pacto, Bogotá, D.C.
Cerda H. (1996). Educación preescolar. Historia, legisla- Zabalza Miguel, “El curriculum de la Educación Infantil”
ción, currículo y realidad socioeconómica. Ed. Magis- http://www.infantiae.org/zabacurriITA1807.asp. con-
terio, Bogotá, D.C. sultado el 7 de Enero de 2005,
16 Fandiño G. Castaño I, (2011) Haciéndose maestras: problemas de enseñanza en su primer y tercer año de trabajo de las maestras de educación infantil
Universidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investigación, 2006- 2010.
17 Fandiño Graciela (2007), “El pensamiento del profesor sobre la planificación en el trabajo por proyectos”, Colección tesis Doctorales. Universi-
dad Pedagógica Nacional, Bogotá
18 Secretaria de Educación Secretaría de Educación del Distrito Capital, (1998) El grado cero en el distrito capital evaluación de impacto, Bogotá.
La tesis que sustenta el artículo pone en escena los desafíos del educador infantil frente a
las realidades de las niñas y los niños. Aunque se reconoce la diversidad de infancias que
tiene Colombia, éste centra su atención en la población escolarizada, haciendo un recorri-
do desde dos perspectivas, la primera centrada en el niño y la segunda en el contexto del
educador en el marco de la política distrital y nacional de Educación Inicial. El documento
se fundamenta principalmente en los aspectos coincidentes entre ambas posturas: la in-
tencionalidad de la acción, las concepciones de niño y el conocimiento del niño, resaltan-
do el papel de la práctica reflexiva en la interacción con los niños pequeños. A manera de
conclusión se proponen algunos desafíos.
1 Docente asistente de la Licenciatura en Educación Infantil en la Universidad Pedagógica Nacional. Magistrada en Comunicación, Licenciada en
Educación Preescolar. Ha trabajado como docente de aula en el nivel de preescolar en el ámbito oficial y privado, como coordinadora académica
y en el acompañamiento de la renovación de los PEI con la Secretaria de Educación del Distrito. Investigadora en el campo de Comunicación
–Educación. Contacto: dconcha@pedagogica.edu.co.
ellos sí viven situaciones parecidas o por lo menos cercanas chos elementos de una educación tradicional, en cuanto a la
a ésta descripción. Este texto centra la discusión en la forma- manera de relacionarnos con los niños en las interacciones
ción de la infancia escolarizada en sus primeros años y en los cotidianas, se mantienen vigentes: el uso del uniforme (pien-
retos que el adulto encargado de ésta responsabilidad debe se usted en el bebé de un año con el uniforme del jardín al
asumir en el día a día. cual asiste), las obligaciones escolares, la tarea, el aprendi-
zaje por repetición y a través del libro como fuente primaria
Niños diversos, instituciones homogéneas de información, el aprendizaje de contenidos fragmentados,
las guías, inclusive los ejercicios denominados “planas”, pero
A pesar de los esfuerzos que las instituciones como la fa- sobre todo información obsoleta de lo que es el mundo y la
milia2 y la escuela realizan para proveer a las niñas y los ni- manera de vivirlo en el siglo XXI.
ños elementos, que según su perspectiva, son los necesarios
para su “adecuada” formación, ellos sobreviven a éstas. No Por otra parte, la emergencia de la infancia como un nicho
obstante serán varios los años que tendrán que transcurrir de consumo, ha llevado a una comprensión de ella acorde
para emancipar su pensamiento y su ser, sobre todo cuando a los intereses de los medios; ahora son los publicistas los
éste no ha sido el foco de atención en su proceso educativo. que saben qué les gusta a los niños, qué quieren, cuáles son
Si bien ésta afirmación nos puede parecer dura y cruel, es sus sueños e ideales, los que interaccionan con imágenes y
la verificación desde la experiencia en la vida cotidiana de juegos llenos de colores, niveles, que en muy pocos casos
lo que estamos haciendo con los infantes3 más pequeños; padres y maestros han podido alcanzar.
cada vez el tiempo de la infancia es más corto y no nos refe-
rimos aquí desde un enfoque proteccionista, sino haciendo Buckingham5 nos propone que las actividades de los niños
evidente cómo a partir de las diversas interacciones que he- en su tiempo libre están cada día más privatizadas y mercanti-
mos construido con los niños tendemos a responsabilizarlos lizadas, lo que hace el niño en el hogar se convirtió en bienes
de acciones acorde a las exigencias del mundo actual desde de consumo: la televisión, los video juegos, la internet, los ju-
la realidad del adulto, complicándoles desde muy pequeños guetes, etc. Así se transformaron los espacios públicos de la
su ser y su quehacer en el mundo sin vivir y disfrutar la vida. infancia también en apropiaciones del mercado6. La institución
16 de los medios, aunque sabe qué decirle al niño, dista también
La agitación permanente de la vida cotidiana y las situacio- de acercarse a la infancia en cuanto a su verdadera esencia.
nes difíciles que sienten los padres y maestros por pretender
que cada niño sea el potencial de lo que no se pudo ser o La idea de novato de Marín7, es muy pertinente ya que la
el ideal de sujeto que la sociedad espera, no permite que él, propuesta de las instituciones (Familia, escuela, medios) en
como ser humano se conozca y experimente la vida como un la interacción con los niños, es lo que en esencia forma su
todo integral, sino que su vinculación con el mundo se da a subjetividad; seguimos construyendo una subjetividad centra-
partir de interacciones cuyos roles no son equitativos y que da en los intereses del adulto y no en los del niño, no desde
están mediados por instancias de autoridad y poder: Madre- su realidad y desde sus necesidades y mucho menos desde
padre- hijo, Maestro- estudiante, los que le asignan un rol de sus potencialidades originales a partir de lo que él o ella son.
sumisión constante, ya sea por exceso o por defecto4. Pocas Continuamos formando al niño, desconociéndolo.
son las experiencias, a las cuales se las ha denominado alter-
nativas, por no ser la mayoría y ser distintas, que presentan Un rol insuficiente y una política educativa
un contexto diferente. poco comprendida y descontextualizada
Aunque, las familias se han transformado, las políticas edu- Es importante aclarar que no es responsabilidad exclusiva
cativas han cambiado y las instituciones han asumido otras del docente ni de los padres de familia la situación que viven
perspectivas en el proceso de enseñanza-aprendizaje, mu- muchas niñas y niños en el país. Para comprender el sentido
2 El término Novato es presentado por la Dra. Dora Lilia Marín, en el marco del Encuentro Interinstitucional de Prácticas en la Formación de Do-
centes para la Infancia. 2011.
3 Se entiende por “familia” el espacio de nicho afectivo en el cual crece el niño o la niña sin reducirse a la idea de nuclear.
4 A partir de este punto el término niño se entenderá incluyendo la perspectiva de género Masculino y Femenino.
5 Cuando me refiero a la sumisión por exceso hago referencia a las interacciones en las cuales los niños y las niñas son sometidos al poder del
adulto por el maltrato ya sea físico o verbal, en el caso de la sumisión por defecto, se entiendo como aquella en la que la interacción con los
padres se da a partir de negociaciones en las que el poder lo ejerce el niño a través de la manipulación, quien en últimas igual es sometido, ya
sea por la desatención de sus padres quienes compensan dicha acción a través de otros elementos como juguetes, tecnología o dinero o por la
influencia exagerada de los medios de comunicación.
6 Buckingham, David. (2008) Más allá de la tecnología. Aprendizaje infantil en la era de la cultura digital. Editorial Manantial. Pág. 114.
7 Se puede pensar, por ejemplo, los parques infantiles que restaurantes de cadena han instaurado en sus locales como un agregado al tiempo de
la comida familiar.
de ésta afirmación debemos remitirnos al ámbito de la cultu- La pérdida de sentido, es tal vez una de las razones más
ra; son muchas las prácticas culturales heredadas de genera- frecuentes que los docentes expresan en este contexto, mu-
ción en generación, cuyas significaciones se han consolidado chas veces generada por cansancio, desatención del Estado 17
a través del tiempo, lo que hace que resignificarlas sea un para proveer unas mejores condiciones laborales, aumento
asunto complejo que trasciende las nociones de espacio y de cobertura sin los requerimientos de infraestructura nece-
tiempo. sarios. Sin embargo la razón principal de dicha rutina recae
sobre la ausencia de reflexión sobre su propia acción; por
La acción del docente, muchas veces es limitada, ya sea supuesto, que ésta tendencia es derivada de factores políti-
por la acción institucional o de los padres de familia, quie- cos y culturales. Así como el niño construye su subjetividad
nes ejercen gran influencia a partir de las expectativas que a partir de las interacciones sociales, el docente también se
se generan en torno al “ideal” de lo que “debe ser” su hijo o ha formado en un contexto de interacciones que lo llevan a
hija. Es importante reconocer que la actualización constante constituirse como tal.
tampoco es garantía de una adecuada interacción con las ni-
ñas y los niños. Entonces ¿cuál es la esencia del asunto? Si se Ahora bien, aunque las políticas educativas para la educa-
observa, la práctica del docente en ejercicio, con frecuencia ción inicial tanto en el ámbito distrital como nacional están
encontramos la tendencia cada vez mayor a cumplir con los construidas desde enfoques e intereses distintos, existen tres
“requerimientos” solicitados ya sea en el ámbito institucional, postulados coincidentes que requieren ser objeto de aten-
distrital o nacional (por ejemplo a través de las pruebas Saber ción: el primero se relaciona con la “intencionalidad” de la
y Comprender). acción docente, el segundo con el “concepto sobre el niño” y
el tercero llama la atención sobre “el conocimiento del niño”.
Éstas presiones externas, derivadas de una política de Si observamos la realidad de la vida cotidiana, estos postula-
estándares y evaluaciones nacionales e internacionales, han dos se encuentran en el discurso de los sujetos, no obstante,
llevado cada vez más a la pérdida de sentido de la acción la comprensión sobre ellos vacila cuando de realizar la acción
docente, convirtiendo al maestro en un hacedor de quehace- se trata: la intencionalidad se pierde por alcanzar el logro del
res y no en un sujeto pensante de su propia acción, es decir, bimestre, la concepción de niño se transforma al interactuar
cada vez más la tendencia sigue orientada a que el maestro con él en el aula, y el conocimiento del niño termina siendo
haga y otros se ocupen de pensar lo que él debe hacer. Por una rutina de diagnósticos y seguimientos acorde a paráme-
supuesto, desde ésta perspectiva las niñas y los niños termi- tros externos al propio niño, por lo que ni la acción del maes-
nan viviendo también como autómatas en el sistema que los tro es suficiente para realmente comprenderlo, ni la política
sostiene. educativa alcanza a impactar desde sus propósitos.
La tensión existente entre la teoría y la práctica recae enton- Retomando una perspectiva comunicativa, la interacción
ces sobre la idea de rutinas, las acciones orientadas hacia los con los niños debería ser cada vez más dialógica y menos
niños más pequeños han sido el cúmulo de prácticas que se unidireccional, aunque ya muchos autores han hablado al res-
convirtieron en rutinas aprehendidas más por la experiencia del pecto9, no se puede conocer a los niños sino dialogamos con
maestro (así me enseñaron o así he enseñado siempre), que ellos, si no los escuchamos. De acuerdo con los resultados
por una amplia reflexión teórica sobre el conocimiento del niño de una investigación10 se muestra cómo la construcción del
y su educación. La ausencia de reflexión no permite la forma- mundo por parte de los niños en bien distinta al mundo del
ción de la conciencia del sujeto que enseña; para Sañudo8, la adulto, y precisamente la fractura en la comunicación es la
reflexión es un proceso dialógico y recursivo que en diferentes que no permite conocer dicha realidad; los niños viven en
etapas produce mejoras en la práctica de los docentes y que tiempo presente mientras el adulto se fija en el pasado o en
conlleva en primer lugar redefinir la situación donde se produce las expectativas de futuro; sus significaciones están construi-
la acción, reinterpretándola y asignando un nuevo significado a das desde los espacios que recorren en sus trayectorias día
características conocidas o antes ignoradas. En segundo lugar, a día, por ejemplo, la ruta del bus, el camino al jardín, la casa
permite la reconstrucción del profesional cuando se adquiere de la abuela, la panadería dónde se compra el pan. Por lo ge-
conciencia sobre la manera como estructura sus conocimien- neral estas significaciones son ignoradas por el adulto quien
tos, afectos y estrategias y, finalmente, genera la construcción se esfuerza en “transmitir” los contenidos para alcanzar los
de los supuestos acerca de la enseñanza aceptados como bá- logros del período.
sicos. Siguiendo a ésta misma autora “dependiendo de cómo el
educador signifique su práctica así la realiza”, como plantean ¿Y qué puede hacer el educador infantil
los lineamientos sobre educación inicial en el país, así como el en este contexto?
adulto conciba al niño, así será su interacción con él.
Con base en los planteamientos anteriores, muchos son
La brecha existente entre los planteamientos para la educa- los desafíos que se proponen en consideración para el edu-
ción inicial y la realidad de los espacios escolares en la cotidia- cador infantil que trabaja con las niñas y los niños más peque-
nidad, más que un asunto de la política o del maestro significa ños. Continuamos caminando a través de un proceso edu-
18 una carencia de reflexión sobre la acción docente y sobre las cativo que no se ha revisado a fondo de tal manera que sea
políticas mismas que orientan su práctica. Una política que no pertinente a las realidades del siglo XXI en un contexto cada
se reflexione y que no sea construida conjuntamente con los vez más globalizado y fragmentado socialmente. No hemos
actores sociales a los cuales afecta, pierde su sentido cuando logrado alcanzar una educación de calidad, pero no entendida
busca canales para su implementación, y una acción docente a la luz de los estándares y las competencias, sino de calidad
que carece de reflexión pierde su intencionalidad al terminar en la medida que se centra en el pleno desarrollo del suje-
inmersa en las tareas cotidianas. to en todas sus dimensiones desde una perspectiva humana
para la construcción de una nueva sociedad.
Desde esta perspectiva, es que cobra sentido la idea de
“intencionalidad” propuesta tanto en la política nacional como Trascender la visión transmisionista
distrital; el pensar las acciones que realizamos con las niñas y de la educación
los niños implica a su vez, considerar cómo se está concibiendo
al niño y cómo es él o ella, ya que al pensar la acción más allá A pesar de los desarrollos teóricos y de la tendencia inter y
del alcance de unos logros institucionales el ejercicio intelectual transdisciplinar de las últimas décadas, la organización curricu-
emerge. No es lo mismo plantear una actividad pensada para lar continua siendo fragmentada y basada en contenidos que
mínimo 25 sujetos diferentes a cuando se propone una actividad no permiten la pregunta, el cuestionamiento, la búsqueda de
para todos considerados como “iguales”. Con esto no se quiere otros caminos para aprender. Los infantes desde muy tempra-
decir que cada niño debe desarrollar una acción distinta (aun- na edad (incluso antes de los dos años) se enfrentan a activi-
que la idea de “rincones” nos propondría algo así) sino tener en dades mecánicas que no les favorecen en la realización plena
cuenta las características sociales y culturales con las que el niño de su desarrollo sino que más bien obstaculizan el mismo.
interactúa cotidianamente para plantear la didáctica.
8 Marín, Dora Lilia. (2011) Pensar la formación de pedagogos infantiles: Sobre las posibles relaciones de prácticas formativas y prácticas investiga-
tivas. Conferencia inaugural del IV encuentro interinstitucional de prácticas en la formación de docentes para la infancia. Bogotá. D.C. Apuntes.
9 Sañudo, Lya. La investigación (o significación) de la práctica para la mejora educativa. (2011). Ponencia presentada en el IV encuentro interins-
titucional de prácticas en la formación de docentes para la infancia. Bogotá, D.C. Mimeo, Pág. 10.
10 Tough, Joan. (1978) Cómo dialogar con los niños. Editorial el Ateneo. 125 Págs.; Camps, Ana. (2005) Hablar en clase. Aula de innovación educa-
tiva. Editorial Graó. 111 págs. Bruner, Jerome. (1997) La educación puerta de la cultura. Editorial Visor. 216 Págs; Freire, Paulo. (2005) Pedagogía
del oprimido. Editorial Siglo XXI. 246 págs. (Entre otros)
11 Concha Ramírez, Diana. (2011) Construcción de subjetividad en niñas-niños de 5 y 6 años desde las interacciones sociales cotidianas. Revista
Itinerario educativo. Universidad de San Universidad Buenaventura. Págs. 239-273.
A partir de los interrogantes sobre las concepciones de infancia que se abordan en los procesos
de formación de formadores, se alude a reflexiones y cuestionamientos sobre las relaciones
con la infancia y principalmente con los procesos de formación de formadores, pues depende
desde donde se conciba al niño, se asume y se incide de distinta manera en su educación. Estos
planteamientos, se formulan a partir de los resultados de un ejercicio investigativo enfocado
en la relación entre “la formación de formadores y la política pública de primera infancia” que tuvo
como una de sus categorías centrales de análisis la concepción de infancia.
1 Universidad Libre. Facultad de Educación. Docente– Investigadora. Licenciatura en Pedagogía Infantil. Psicopedagoga. Especialista en Infancia,
desarrollo y comunidad y Magister en Desarrollo Educativo y Social. Email: lucnossa@hotmail.com.
2 Universidad Santo Tomás. Vicerrectoría General de Universidad Abierta y a distancia. Facultad de Educación. Docente – Investigadora Licenciada
en Educación Preescolar. Especialista en Educación y Orientación Sexual. Magister en Educación. Email: patricialondono@ustadistancia.edu.co.
3 Pontificia Universidad Javeriana. Facultad de Educación. Docente – Investigadora. Psicóloga. Especialista en Atención Social Integral en Salud
Mental. Magister en Educación. Email: s.ochoa@javeriana.edu.co.
4 Para efectos de esta reflexión las autoras se refieren a aquellos enunciados con mayor recurrencia en los procesos de formación en la investi-
gación “Formación de Formadores y Política Pública de Primera Infancia” ASCOFADE, 2011.
5 Ochaíta A. E. et al (2004), Hacia una teoría de las necesidades infantiles y adolescentes: necesidades y derechos en el marco de la Convención
de Naciones Unidas sobre los derechos del niño. McGraw-Hill.
6 Alzate, P. M. (2003) La infancia concepciones y perspectivas. Pereira. Colombia. Editorial Papiro.
7 Ariès, P. (1987) El niño y la vida familiar en el Antiguo Régimen. Madrid. Editorial Taurus.
8 Lloyd DeMause. Historia de la Infancia. Versión española de María Dolores López. Madrid. Alianza Editorial.
9 Muñoz, C; Pachón, X (1991) La niñez en el siglo XX. Comienzos de siglo. Santa Fe de Bogotá: Editorial Planeta.
10 Alzate, M.V. (2003), op. Cit. Pág. 147.
11 Casas, F. (1998). Infancia: perspectivas psicosociales. Barcelona: Paidós.
12 Colángelo, M. (2003) La mirada antropológica sobre la infancia. Reflexiones y perspectivas de abordaje: Mesa: Infancias y juventudes. Peda-
gogía y Formación. Ponencia. Laboratorio de Investigaciones en Antropología Social. Universidad de La Plata. Y Seminario Internacional. La
formación docente entre el siglo XIX. Ministerio de Educación. Argentina.
13 Alzate, P. M. Revista N° 28 (2001) Concepciones e imágenes de la infancia. en: Revista de Ciencias Humanas. Universidad Tecnológica de Pereira.
Colombia. ISSN0121 -9677
nológicos, la eclosión de la información y la comunicación, los niños como sujetos de derechos, se considera aún débil
donde se alude a un niño con más y mejores competencias, la reflexión de lo que esto significa y sus implicaciones en
que superan lo posible para la infancia vivida por las antiguas la educación
generaciones.
Siguiendo a Alzate14, como lo cita la investigación en men-
Hasta aquí, un punto de partida para realizar reflexiones, ción, “(…) aunque se haga referencia a que no basta con pro-
sobre las concepciones de infancia que circulan en el con- mulgar los derechos, se vuelve a la idea de la vulnerabilidad
texto educativo, y como éstas se matizan de acuerdo con la como una opción de atención educativa. “Parece como si es-
época en la cual están inmersas y con los cambios profun- tuviese muy enraizada la idea de que en la práctica no son
dos que se vienen dando a nivel social-cultural y que inciden todos los niños y niñas los que merecen actuaciones sociales
en la forma de comprenderla y por ende, orientadores en los protectoras o promotoras sino sólo unos pocos: los abando-
procesos de formación. nados, explotados, maltratados, mal nutridos o enfermos”.15”
Reflexiones finales
propuestas educativas formuladas. Se hace interesante el reto venir. Aquello que otrora era privado, reservado, considerado
de trascender, las concepciones de infancia homogenizantes en la intimidad, ya no lo es. ¿De qué niño hablamos entonces
y ancladas que llevan a desarrollar prácticas pedagógicas en- hoy? Siguiendo la reflexión de Colángelo18 ¿Para qué tipo de
focadas a la atención y asistencia. niños estan formuladas las políticas y diríamos en este campo
que convoca la reflexión, para qué tipo de niños estan hechas
Desde esta lógica, es peligroso entonces, por ejemplo, las propuestas educativas? ¿Y por ende, qué tipo de formado-
hacer el discurso por el discurso de los Derechos Humanos, res estamos formando? ¿Para qué y para quienes?
sin profundizar en su fundamentación, dejando de lado su
razón ética y política, que rescata la condición de dignidad
• Bibliografía
humana inherente al hombre y su legado como conquista
social. Así el discurso de los niños como sujetos de dere-
cho y de política, fácilmente puede tacharse de homogeni- Ariès, P. (1987) “El niño y la vida familiar en el Antiguo
zante e invisibilizador de diferencias. De este modo, surgen Régimen”. Madrid. Editorial Taurus.
críticas, sin propuestas y con muchas ausencias del rol del
maestro como sujeto político en escenarios de reflexión y Alzate, P. M. Revista N° 28 (2001) Concepciones e imá-
construcción en ésta línea. Es necesario, ir más allá de las genes de la infancia. en: Revista de Ciencias Humanas.
respuestas estrategicas en las que se enmarcan, por mo- Universidad Tecnológica de Pereira. Colombia.
mentos, los procesos de autoevaluación y acreditación de
los programas educativos, respondiendo a normativas ad- Alzate, P. M. (2003) La infancia concepciones y perspec-
ministrativas de gestión y eficiencia, orientando más bien tivas. Editorial Papiro Pereira. Colombia.
los esfuerzos, a fortalecer los procesos educativos en la
formación de formadores. En este caso, buscando ampliar Casas, F. (1998). Infancia: perspectivas psicosociales. Bar-
y profundizar sobre la infancia, como una categoría esen- celona: PaidósCasas, F. (1998). Infancia: perspectivas
cial de estudio, propia de la especialidad de la educación y psicosociales. Barcelona: Paidós.
pedagogía infantil.
24 Colángeno, M. (2003) La mirada antropológica sobre la
Se considera importante que en los programas de forma- infancia. Reflexiones y perspectivas de abordaje:
ción de formadores se permita dar una mirada de inclusión, Mesa: Infancias y juventudes. Pedagogía y Formación.
trascendiendo las clasificaciones asociadas a la procedencia, Ponencia. Laboratorio de Investigaciones en Antro-
el contexto geográfico, o la problemática o a la condición pología Social. Universidad de La Plata. Y Seminario
-al que pertenece el niño-, refiriéndose por ejemplo al niño Internacional. La formación docente entre el siglo XIX.
de la selva, el niño rural, el niño urbano, al niño en alto Ministerio de Educación. Argentina.
riesgo. Pues en muchos casos, todas estas variedades en su
denominación de acuerdo con la condición, se consumen Lloyd DeMause. Historia de la Infancia. Versión española
en la idea de la escolarización como unica opción de me- de María Dolores López. Madrid. Alianza Editorial.
joramiento.
Muñoz, C; Pachón, X (1991) La niñez en el siglo XX. Co-
Por último, contemplando nuevas reflexiones a propósito mienzos de siglo. Santa fe de Bogotá: Editorial Planeta.
del ejercicio investigativo, se hace alusión a la noción de niño
en esta época contemporánea. Tal vez “expósito” también Ochaíta A. E. et al (2004), Hacia una teoría de las necesida-
como en la antigüedad, no solo expuesto a la intemperie de des infantiles y adolescentes: necesidades y derechos
los flagelos sociales, sino ahora, expuesto a la saturación y el en el marco de la Convención de Naciones Unidas
mundo del denominado tercer entorno. El niño de hoy, ya sobre los derechos del niño. McGraw-Hill.
no es oculto, ya no es invisible como refería Ariès. Ahora es
asunto público, nada se reserva a la necesidad de información Ochoa S., Nossa L., Londoño P., Escobar S., Quiroga J., Rojas
y vigilancia del mundo adulto. Ahora es público, y esto implica S. (2011). Formación de Formadores y Política Pública
que todos tienen la posibilidad de informarse, conocer e inter- de Primera Infancia. ASCOFADE. Bogotá, Colombia.
Requerimos una educación desde la cuna hasta la El termómetro infalible para medir el grado de civilización,
tumba, inconforme y reflexiva, que nos inspire un el desarrollo material y espiritual de una nación, no es otro
nuevo modelo de pensar y nos incite a descubrir que el sistema educativo gestado en su interior como una
quiénes somos en una sociedad que se quiera relación directamente proporcional e incuestionable frente a
a sí misma, que aproveche al máximo nuestra 25
la estructuración, organización y funciones en la vida de los
creatividad inagotable y concilie una ética y,
pueblos, con el compromiso moral, político, social y científico,
tal vez, una estética para nuestro afán,
desaforado y legítimo de superación personal. en respuesta a las crecientes necesidades planteadas por la
evolución histórica y el diario descubrir de la comunidad.
Gabriel García Márquez
El convulsionado mundo de hoy, exige personas críticas y
El lenguaje del maestro de infancia analíticas que sean capaces de convivir democráticamente,
aceptar las diferencias y construir consensos para el bienestar
1 Magíster en Educación. Licenciado en ciencias de la educación. “Grupo de investigación Innovaciones Pedagógicas y Educativas”. Universidad
Pedagógica y Tecnológica de Colombia. Correo electrónico: jefharvey@hotmail.com.
2 Especialista en Infancia, Licenciada en preescolar, profesora Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia. “Grupo de Investigación Inno-
vaciones Pedagógicas y Educativas” Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia. Correo electrónico: luzabus@gmail.com.
3 En: Requejo Osorio, Agustín. Conocer para trasformar. En: Pedagogías del siglo XX. Barcelona: Cisspraxis, 2000. p. 134.
Nadie educa a nadie, nadie se educa a sí mismo, los hombres se educan entre sí mediados por el mundo. Paulo Freire
26
Es de vital importancia mencionar el papel que juega la se utilizan para la comprensión de las acciones, intenciones,
educación impartida en los primeros años de la vida del emociones y deseos propios y ajenos, para descubrirse a sí
hombre, pues en esta época se consolida su futuro emo- mismo como un ser único, diferente a los demás e igual a
cional y social, se cimentan las actitudes de aceptación y ellos; para darse explicaciones, simbolizar y otorgar signifi-
adecuación al mundo cambiante en el que le corresponderá cado a las características propias del lenguaje y del medio
vivir y es precisamente el maestro en infancia, quien tiene que habita. Las capacidades y habilidades cognitivas, sociales,
en sus manos la responsabilidad y el compromiso de ejer- emocionales y motrices que poseen los pequeños deben ser
cer esta labor abnegada, silenciosa pero fecunda en valores descubiertas por los adultos que los atienden, para ayudarlos
éticos, académicos, científicos y sociales, en donde se pro- e impulsarlos a hacerlas visibles y a enriquecerlas en el trans-
penda por formar a nuevas generaciones capaces de con- curso de su desarrollo4. Es acá donde uno de estos adultos es
ducir, el futuro, una patria sobre los principios de libertad, el maestro de infancia.
democracia, justicia encaminadas a la paz que tanto hemos
anhelado. La concepción de infancia
Todos los niños y niñas desde su nacimiento, emplean En lo que sigue se establecen algunos referentes que per-
formas de pensamiento que demuestran una gran riqueza mitieren realizar un acercamiento a la concepción de infancia.
mental para elaborar sus experiencias, sistematizar informa- Es con Rousseau en su libro el “Emilio o la educación” con
ción, construir conocimiento y apropiarse de su entorno. Las quien se puede realizar un primer acercamiento a la concep-
experiencias de interacción con su madre y demás personas ción de infancia, pues hasta la época solo al niño se le consi-
que lo rodean le permiten establecer un sistema de afecto, deraba con un adulto en miniatura. O en sus palabras “Buscan
para dar cuenta del intercambio emocional en el que risas, siempre al hombre en el niño, sin considerar lo que éste es
caricias, abrazos, juegos y otras formas de contacto corporal antes de ser hombre”5 El texto percibido de carácter revolu-
4 Segovia Ospina, Isabel. Atención a la primera infancia: bases sólidas para el desarrollo humano. En: Revista Internacional Magisterio. No 34
(ago. - sep. 2008); p. 35.
5 Rousseau. Juan Jacobo. Traducción Ricardo Viñas. 2000. El aleph.com.
Así, se puede decir que la infancia es “una época clave Las teorías, los fundamentos pedagógicos y educativos jue-
de la vida, en la cual se configuran todos los resortes afecti- gan un papel determinante desde el punto de vista que liga
vos e intelectuales del individuo, de cuyo correcto desarrollo al maestro con los lineamientos educativos, el estudiante y la
depende buena parte del éxito o fracaso posterior de cada misma sociedad en aras de construir una política mucho más
individuo en su proyecto vital”6. dinámica, pero a la vez comprometida con una realidad social
donde la humanización de la educación, la plataforma tecno-
Lo anterior, significa que necesariamente, la infancia debe lógica y los medios didácticos y lúdicos se conviertan quizá
concebirse como una etapa dentro de la vida de la persona que en la mejor herramienta para lograr sus fines, y por lo tanto
enmarca una época de transición donde se adquieren los co- construir una política educativa de permanente evaluación y
nocimientos adecuados para lograr no sólo un enriquecimiento retroalimentación que atienda las necesidades y expectativas
cultural e intelectual, sino que lleva a propiciar un desarrollo ple- propias de la sociedad de cara a la formación de nuestra niñez.
no, con características específicas que le acompañarán a futuro y
mediante las cuales toma las decisiones a que haya lugar. Consecuentes con la pretensión de Plan Decenal de
Educación es desde “las instituciones de Educación Supe-
El contexto de la educación colombiana rior, las facultades de educación y las normales superiores
encargadas de formar los educadores, realizarán cambios
Pensar la educación […] de hoy conlleva a pensar sus im- sustanciales en sus concepciones y en su quehacer, a fin de
plicaciones de carácter político, histórico, económico y por garantizar una formación que transforme y mejore significa-
supuesto, de carácter social de cara a la realidad actual7. tivamente la calidad de la educación en el país”10.
Si bien es cierto el país se ha preocupado por la situación
educativa, a través de los planes de desarrollo pues, “Se Una mirada a la formación del maestro de infancia 27
sabe que en ellos se cristaliza, en gran medida el futuro
económico y político de país”8. En esta línea surgen políticas Las instituciones educativas formadoras de educadores
educativas impuestas que tienen según los gobiernos de conciben y desarrollan programas en un plano general, cen-
turno buenas intenciones, pero que a la larga resultan con- trando su objetivo en dotar a sus alumnos de herramientas
traproducentes, para la pretensión de la calidad educativa. necesarias para ayudar a construir su personalidad. En las
Se entenderá como política educativa la que se “refiere a instituciones formadoras de maestros, este sentido debe
todas aquellas decisiones que orientan las acciones de los ampliarse de una manera que permita “vincular e interrela-
sistemas educativos y que se traducen en normas y decre- cionar un ser humano con un proyecto de vida articulado
tos que de una u otra forma afectan al docente”9. a su proceso formativo, lo cual se convierte en garante de
que el maestro pueda aprender a aprender, aprender a ha-
Desde tiempos inmemoriales al tratar la educación en Co- cer, aprender a convivir, aprender a ser, aprender a sentir y
lombia se le aducen diversos contenidos y teorías a fin de aprender a amar”11.
lograr que exista una mayor profundización de los procedi-
mientos, y que por lo mismo se puedan generar resultados Es responsabilidad de instituciones educativas formado-
muchos más satisfactorios para fortalecer el sistema de for- ras de maestros de infancia, construir un proyecto acadé-
mación. Cumplir con los fines propios de la educación que mico para formar con la más alta calidad científica y ética;
han sido dispuestos por el Ministerio de Educación Nacional un proyecto en el que la pedagogía, como saber fundante,
en su mismo interés de conseguir una formación mucho más se constituye en fuente y vector que impulse la formación
6 Gallardo Rodríguez, Isabel María y González Mesa, Noelia. La infancia como concepto y como realidad [en línea]. España: Universidad de Sevilla,
s.f. [citado el 06-04-11]. Disponible en: http://alojamientos.us.es/pedsocial/archivos/tema13.PDF.
7 Cabezas, Jeffer Harvey. Algunos apuntes sobre la política educativa en educación superior “universidad” y su incidencia en el profesor universi-
tario. Cuadernos de lingüística hispánica. #13.2009. UPTC. Tunja.
8 Herrera, Cecilia y Acevedo, Raúl. Las políticas públicas y su impacto en el sistema educativo colombiano. Una mirada desde los planes de desa-
rrollo1970 – 2002. Revista Nómadas # 20. 2004.
9 Calvo, Óp. cit.
10 Plan Decenal de Educación 1996 – 2005. La educación un compromiso de Todos.
11 Gadner, H. Estructuras de la mente: la teoría de las inteligencias múltiples. México: Fondo de Cultura Económica, 1994.
de un sujeto portador de un saber que pueda integrar la aprendizaje, a razón de la información que debe poseer el
educabilidad y la enseñabilidad, y a la vez que contribuya a maestro para reformular su esquema educativo. Pues como
la construcción de una cultura de la convivencia, de la soli- lo denotó Dewey “los niños no llegan a la escuela como
daridad, de la participación y del medio ambiente, creando limpias pizarras pasivas en las que los maestros pudieran
mecanismos para la formación de una cultura de justicia so- escribir las lecciones de la civilización. Cuando el niño lle-
cial y estableciendo relaciones y aportes con otros saberes. ga al aula ya es intensamente activo y el cometido de la
educación consiste en tomar a su cargo esta actividad y
La sociedad demanda de las instituciones formadoras de orientarla”15.
maestros de infancia y, cada vez con mayor urgencia, la forma-
ción de profesionales excelentes y la “calidad en la formación del Nuestra infancia día a día constituye nuevas formas de
profesional depende no sólo de los conocimientos y habilidades apropiarse del conocimiento, por consiguiente el maestro de
que desarrolle al abordar el currículum universitario, sino tam- infancia, debe mostrar preocupación no sólo para conocer la
bién de los intereses y valores que regulan su actuación profe- nueva realidad en materia educativa del infante moderno, sino
sional”12. En el nuevo milenio, cada individuo y cada organización que además busque alternativas de formación actualizada y
construirán su capacidad de acción y, por tanto, su posición en la conforme con las expectativas y necesidades de la población
sociedad, mediante el conocimiento y la capacidad para generar infantil en facultades especializadas y que muestren preocu-
nuevo conocimiento, que le permita adaptarse al ritmo veloz del pación por atender dichos intereses. Sólo de esta manera, se
cambio. Este es el rasgo central de las sociedades del conoci- podrá fortalecer aún más el grado de formación del niño en
miento, o sociedades capaces de generar conocimiento acerca todas y cada una de sus fases de desarrollo.
de su realidad y de su entorno, y capaces de utilizar dicho cono-
cimiento para concebir y construir su futuro. Dicho lo anterior el ejercicio del maestro debe partir por
entender el mundo de la niñez, de su niñez; partir del maestro
La formación de un maestro de infancia demanda la necesi- mismo. Esto se logra si él es capaz de contestarse el siguien-
dad de reflexionar sobre su quehacer cotidiano con categorías te interrogante ¿Quién quiero ser cuando sea niño? Pregunta
pedagógicas. Esto se convierte en una garantía y punto de par- que en un principio puede parecer un tanto ingenua, pero
28 tida para que cada institución pueda elegir entre las múltiples que si se analiza detenidamente emerge como un elemento
ofertas de la producción intelectual pedagógica y que esa elec- que solidifica una propia concepción de niñez frente a las
ción sea coherente y pertinente, como bien lo plantea Ochoa: realidades contextuales de la infancia. Así las cosas el interro-
“Coherente por la consistencia interna del programa como los gante se convierte en oportunidad de reconocer en nosotros,
propósitos institucionales, congruente por la articulación entre los participantes, ese niño que en nosotros habita, pero que
los componentes del programa y pertinente por la correspon- para algunos ya está muerto.
dencia con las demandas de la sociedad”13.
Emerge la oportunidad de la pedagogía, pues es ella la
Es necesario señalar que la formación de los maestros de que permite aminorar “la brecha existente entre la teoría y
infancia, se debe concebir como un proceso permanente, de la práctica, para tejer las relaciones que se enmarcan en los
tal manera que sea posible trascender las instituciones forma- ambientes de aprendizaje; es decir, en ese espacio concep-
doras, “hasta consolidar procesos de autoformación que per- tual, los estudiantes y profesores son sujetos epistemológi-
mitan la articulación de la práctica docente a la investigación y cos, éticos y políticos que conforman parte activa de la so-
la generación de experiencias en los campos científico-técnico, ciedad”16. Existe un saber teórico y práctico, entendido como
pedagógico y didáctico, ético-axiológico, humanístico, etc.”14. el universo complejo -cúmulo de experiencias, creencias,
saberes, tanto pedagógicos como disciplinares, así como las
La niñez y el profesorado desde la praxis educativa ideas que posee y por las cuales es poseído, como hechos
que giran alrededor de su mundo, en los diversos contextos
El niño de la época actual, ha venido desarrollando una de aprendizaje y de enseñanza-, “en el que teoría y práctica
serie de habilidades que el maestro hoy por hoy debe saber son los elementos mágicos, místicos, míticos, entre otros,
descifrar con ocasión del mismo proceso de enseñanza y que integran la alquimia pedagógica. La teoría y la práctica,
Algunos elementos constitutivos del lenguaje Lo pedagógico, comprende en una primera mirada, el
en el maestro de infancia desarrollo de habilidades, de procesos con carácter reflexivo;
que ofrecen una posibilidad razonable para solucionar un
No basta con ser un maestro justo, responsable, cumplidor problema determinado desde el aula de clase. Así mismo, se
de su deber, alegre y respetuoso; es necesario ser un creador ve orientado a la construcción de conocimientos, mediante
nato, un soñador constante que haga realidad todos sus sue- recursos y acciones creativas proyectadas hacia la el aporte
ños y los de sus estudiantes, pero sobre todo, que tenga una que se pueden dar en campos tales como educativos, cien-
visión clara y positiva del mundo. tíficos, tecnológicos y artísticos, entre otros, con el fin de
17 Ibídem
18 Cabezas, Jeffer Harvey (2011). Aproximación al pensamiento pedagógico del profesor universitario. Análisis de caso. Manuscrito no publicado.
Universidad pedagógica y Tecnológica de Colombia. Tunja. Colombia.
hacer frente a las cambiantes demandas del entorno, social y cidencia en el profesor universitario. Cuadernos de lin-
cultural. De esta manera se ejerce una praxis transformadora güística hispánica. #13.2009. UPTC. Tunja
que satisface dichas demandas a través del desarrollo de la COLOMBIA. MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL. For-
capacidad del trabajo individual y colaborativo con respon- mación de maestros: elementos para el debate. Bo-
sabilidad social gotá: Consejo Nacional de Acreditación de Escuelas
Normales Superiores, 2000.
Lo disciplinar, está caracterizado, desde las diversas
DaviniI, M. C. La formación docente en cuestión: política y
formas de aproximarse a la realidad del mundo. Por con-
pedagogía. Buenos Aires: Paidós, 1995.
siguiente el conocimiento se puede dar desde diversas vi-
siones, y que generalmente se presenta en el entorno edu- Dewey, John. The school and society. En: Middle works of
cativo; por otra parte este conocimiento, se define desde John Dewey. Carbondale, Southern Illinois: University
una génesis histórica y científica, como un conocimiento Press (1976). Vol. 1. p. 25.
establecido, acabado e inamovible. El maestro de infancia,
Flórez Ochoa, Rafael. Abrirle paso al nuevo maestro. En:
debe tener presente, su dimensión epistemológica, la cual Revista Educación y Pedagogía. Universidad de Antio-
implica la discusión de las teorías y el establecimiento de quia. No. 2 (1990).
las condiciones propicias en la producción y la validez de
ese conocimiento, en concordancia con los fines propios FONDO DE NACIONES UNIDAS PARA LA INFANCIA.
de la educación. UNICEF Definición de infancia [en línea]. España:
Amnistía Internacional, 2005. Disponible en: http://
www.amnistia catalunya.org/edu/2/nin/inf-unicef.
Lo axiológico, en el maestro de infancia se convierte en
html.
un elemento preponderante, puesto que, le permite adquirir y
crecer en distintos aspectos fundamentales para con la niñez Freire, Paulo. Pedagogía de la autonomía: saberes necesa-
y por consiguiente con la sociedad; de esta manera, lo axioló- rios para la práctica educativa. Madrid: Siglo Veintiuno
gico respalda al maestro no sólo en cuanto al conocimiento, Editores, 1999.
sino en esta línea desarrolla distintos valores relevantes que Kuhn, Thomas. La estructura de las revoluciones científicas.
30 enmarcan al maestro, entre los cuales sobresalen: la respon-
Reimpresión. México: Fondo de Cultura Económica.
sabilidad, la veracidad, la belleza, el respeto, pero sobre todo, 1998.
y tal vez a nuestro juicio en más relevante, en la constitución
de la labor profesoral, es la paciencia, ya que como dice Tho- Lucio R. Educación y pedagogía, enseñanza y didáctica:
diferencias y relaciones. En: Revista Universidad de la
mas Kuhn, “Ni los problemas ni los enigmas ceden ante los
Salle, N° 17 (1989).
primeros ataques”19. A manera de cierre temporal sobre la
discusión que se puede generar en torno de la formación del Piaget, Jean. Psicología y pedagogía. Barcelona: Ariel, 1977.
maestro de infancia, se puede decir que su humana labor se
fundamenta sobre bases empírico-teóricas que hacen posible Sacristán, , José Gimeno y Pérez Gómez , Angel. Compren-
der y transformar la enseñanza. 2ª ed. Madrid: Morata,
el acceso al conocimiento propio de la infancia y sus relacio-
1993.
nes más inmediatas.
Sáenz J.; Saldarriaga, O y Ospina, A. Mirar la infancia. En:
FORO POR COLOMBIA S. Colciencias, Universidad de
• Bibliografía
Antioquia, Universidad de Los Andes, 1997.
19 Kuhn, Thomas. La estructura de las revoluciones científicas. Reimpresión. México: Fondo de Cultura Económica. 1998.
En el artículo 2 del Decreto 2247 de 1997 se estableció la prestación del “servicio público”
del nivel de preescolar para educandos de tres a cinco años de edad, con tres grados: pre
jardín, para niños de 3 años de edad; jardín, para niños de cuatro años de edad; y, transi-
ción, para niños de cinco años de edad y “que corresponde al grado obligatorio constitu-
cional”. La Ley 1098 o Código de la Infancia y Adolescencia expedida en 2006 no incluyó la
educación gratuita para los menores de pre jardín y jardín, dejando cobijado únicamente
en nivel de transición, que desde los noventa, en el Plan de Apertura Educativa (1991-1994)
había sido nombrado en los documentos técnicos como “grado cero”.
La Infancia en la historia
31
La noción de infancia como objeto de estudio “tiene un diendo su fuerza de trabajo, de esta manera, los asilos, los
carácter histórico y cultural y es por ello que ha tenido dife- orfanatos y las escuelas surgieron como espacios apropiados
rentes apreciaciones en la historia; su concepción depende para la formación, y la transmisión de conocimientos y valores
del contexto cultural de la época”4. Las nociones de la catego- necesarios con el fin de mantener el sistema.
ría “infancia” a través de la historia han mostrado a los niños
como dependientes, indefensos, “malos de nacimiento” e El desconocimiento de la categoría infancia y la búsqueda
inacabados; es, durante el siglo XX cuando “se reconoce una de una posible conceptualización, o de las múltiples catego-
nueva categoría: ‘el niño como sujeto social de derecho’. La rías asumidas para referirse a ella, ha tenido implicaciones
“‘reinvención’ moderna de la infancia se inicia desde el siglo en el reconocimiento de la condición, necesidades y requeri-
XVIII en las sociedades democráticas y muy especialmente a mientos de los niños y niñas, de esta manera, se ha desviado
través de Rousseau, quien advertía las características espe- su atención y cuidados necesarios. Esto ha propiciado que
ciales de la infancia”5. contrario al reconocimiento de sus derechos, como se pre-
tendió con la Declaración Universal de los Derechos del Niño,
La infancia como categoría sociológica no siempre ha exis- de 1959, se haya instrumentalizado la visión de los niños,
tido, no obstante que desde siempre han existido los niños. minimizando su condición de sujeto.
Hasta la publicación del texto clásico de Phillippe Ariès6, bien
entrado el siglo XX, la historia de la infancia y la historia de la Las políticas educativas para la Primera Infancia
educación se encontraban en el proceso de reconstruir la defi-
nición precisa de su campo. Según conceptuó Ariès, la historia A través del diseño y la planeación de políticas educativas
de la infancia y la historia de la educación están relacionadas asesoradas por organismos internacionales y de un discurso
de manera especial. En primer lugar, conceptualmente; en se- que ha insertado el tema de los derechos humanos como
gundo lugar, relacionadas en el tiempo; y, en tercer lugar, están concepto fundamental, y en cumplimiento de diferentes pac-
unidas social e institucionalmente. Ariès enfatizó la simultanei- tos establecidos, entre otros, en reuniones de Ministros, los
dad en el tiempo del descubrimiento o reconocimiento de la gobiernos nacionales han planteado la política educativa de la
infancia moderna y de la aparición de políticas protectoras y primera infancia en la ampliación de cobertura, entregando la
32 asistencialistas para cuidar y formar a la generación más joven. educación preescolar a las madres comunitarias, al Bienestar
Estos dos hechos coincidentes, si no casualmente relacionados, Familiar o entidades similares. No obstante que la polémica,
confirieron una nueva característica y posibilidad en la educa- desde la expedición de la Ley General de Educación, Ley 115
ción del niño, la de un régimen de protección y supervisión de de 1994, ha exigido un preescolar de tres años, los gobiernos
control cuidadosamente planificado desde el Estado. lo han desconocido y, por el contrario, han abonado el terreno
para que durante los últimos años se profundice una educa-
Si en un primer momento los infantes fueron considera- ción cada vez más desigual para los niños, niñas del país. En
dos inacabados o “estorbosos” para la sociedad, y muchos el artículo 2 del Decreto 2247 de 1997 se estableció la pres-
de ellos morían por el entorno de abandono, los asilos y los tación del “servicio público” del nivel de preescolar para edu-
claustros religiosos crearon las condiciones para que llegaran candos de tres a cinco años de edad, con tres grados: pre jar-
a una edad en la que podían ser “beneficiosos” o “útiles” a la dín, para niños de 3 años de edad; jardín, para niños de cuatro
sociedad. La infancia adquirió importancia fundamental por años de edad; y, transición, para niños de cinco años de edad
cuanto representaba a un sector de la población en forma- y “que corresponde al grado obligatorio constitucional”. Ade-
ción que podía ser útil al desarrollo industrial requerido en los más, en la Ley 1098 o Código de la Infancia y Adolescencia
nacientes países europeos. Nuevos contingentes de infantes, expedida en 2006, el Estado no incluyó la educación gratuita
a los que era importante educar e higienizar, serían los hom- para los menores de pre jardín y jardín, dejando cobijado úni-
bres y las mujeres que impulsarían la rueda del progreso y el camente en nivel de transición, que desde los noventa, en el
desarrollo de las naciones. Plan de Apertura Educativa (1991-1994) había sido nombrado
en los documentos técnicos como “grado cero”7.
Para la naciente burguesía los infantes eran considerados
como los providenciales herederos y continuadores de su En este contexto, el actual gobierno asumió en su Plan
fortuna; por el contrario, los de la clase popular, del pueblo, Nacional: “el desarrollo de la primera infancia como una de
serían quienes harían posible la acumulación de riqueza ven- las líneas de acción prioritaria” teniendo como marco la legis-
4 Jaramillo, Leonor (2007). Concepción de infancia. Revista Zona próxima, Nº 8, Pág. 110.
5 Jaramillo, Op.cit. Pág. 111.
6 Ariès, Ph. (1987). El niño y la vida familiar en el Antiguo Régimen. Madrid: Taurus.
7 Ministerio de Educación Nacional. (2010). Orientaciones pedagógicas para el grado de Transición. Bogotá: EDESCO, Ltda, Pág. 16.
8 Departamento Nacional de Planeación, DNP (2010). Bases del Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014. Prosperidad para todos. Bogotá, D.C.,
Pág. 266.
9 DNP (2010) Op. Cit. Pág. 269.
10 DNP, Op.cit, Pág. 269-270.
11 Departamento Nacional de Planeación, DNP (2005). Hacia una Colombia equitativa e incluyente. Informe de Colombia, objetivos de desarrollo
del Milenio. Bogotá, D.C. Pág. 73.
lidad, proporcionándole un estado psicológico de confianza preescolar de tres grados y fortalecer la intermediación. Al
y preparando el camino para ampliar su radio de acción a respecto, es necesario señalar la importancia de hacer un
través del desarrollo de las formas básicas del movimiento debate profundo sobre el modelo educativo que guía esta
y del lenguaje. propuesta. Desde tiempo atrás FECODE ha planteado la im-
portancia de mantener un preescolar de tres grados, ello
El movimiento corporal y el lenguaje son los medios más implica que la atención a la primera infancia defina dos eta-
importantes y perfectos de que se vale el niño para inte- pas diferenciadas en el aspecto educativo: la primera que
ractuar con el medio. Al ampliar su radio de acción, el niño va de los cero a los 3 años y la segunda, de los tres a los
estará en condiciones de asistir a otros escenarios como el cinco años.
de la ludoteca, el parque y la escuela, donde a través de
actividades de juego interactuará con otros niños y con el La existencia de este preescolar es imposible en el Plan
mundo de los objetos. El juego comprendido como una ac- Sectorial de Educación del actual gobierno. Por un lado,
tividad desinteresada, que no tiene objetivos fuera del mis- mantiene una visión monolítica entre los cero y los cinco
mo y que tiene diferentes manifestaciones como los juegos años, sin establecer esa diferenciación indispensable que se
competitivos, representativos, de azar y de vértigo, encierra debe propiciar cuando el niño llega a los tres años de edad.
las actividades que tienen que ver con la educación física, Pese a decir lo contrario, el gobierno mantiene el asistencia-
la educación artística y la literatura, constituyéndose en un lismo y la idea de guardería y de atención en la perspectiva
mundo de posibilidades y de retos impregnados de manera del cuidado, sacrificando la visión de lo educativo y la ne-
permanente del disfrute, la alegría y las interacciones con los cesaria inducción a lo escolar. Además, la política establece
sujetos y con los objetos. que la prestación de esta atención se entregará prioritaria-
mente a cajas de compensación y a empresas privadas que
Los primeros años de vida son decisivos en los procesos han hecho del discurso sobre la infancia una forma particular
de desarrollo y de formación del niño. Es así como la edu- de ganancia y rentabilidad. La visión académica sobre la in-
cación, entendida, para la primera infancia, como la adqui- fancia no debe estar en manos de expertos que la utilizan
sición de hábitos de vida, la orientación en el desarrollo del para comercializar con ella; por eso, insistimos que es el
34 movimiento corporal y del lenguaje y el cultivo del afecto, sector público el lugar en que se debe desarrollar una visión
debe contar con los escenarios y las condiciones materiales pedagógica que diferencie las necesidades del preescolar
ajustadas, tanto a la edad de los niños como a los propósitos y las de la población infantil menor de tres años que no
ya enunciados. El juego constituye la actividad privilegiada está en el preescolar pero que debe estar atendida por el
para el desarrollo individual y social de los infantes; a tra- Estado, y que además, debe integrar una política de apoyo
vés de éste el niño se va introduciendo en el mundo de a las familias.
la cultura y va dotando de intencionalidad sus acciones, de
igual manera, va asumiendo responsabilidades propias de FECODE ha insistido en la creación de un preescolar de
su edad, es en éste ambiente de desarrollo y aprendizaje tres grados en las instituciones educativas del Estado. El gra-
en que el niño construye su individualidad y su autonomía. do cero, que actualmente existe, es insuficiente para aten-
der las necesidades de formación y aprendizaje de la niñez
Sin pretender exponer una teoría sobre el desarrollo y colombiana. El Estado deber ir más allá de una visión asis-
la formación de la infancia, estas reflexiones ilustran la ne- tencialista y proteccionista en la atención a la niñez desde
cesidad de una educación de alta calidad en esa etapa de los cero hasta los cinco años de edad. La atención a la niñez
la vida en la que deben participar las madres y padres en debe tener entre sus objetivos la protección de esta pobla-
el ámbito familiar y los licenciados en pedagogía infantil o ción contra muchas injusticias que desafortunadamente vi-
preescolar en el ámbito escolar, pues esta tarea debe es- ven los niños y las niñas; sin embargo, la protección no debe
tar encomendada a personas que tengan el conocimiento ser el único objetivo de una política social para la infancia. Es
de las características de la infancia y de la intencionalidad necesario crear una auténtica política de desarrollo del ser
y metodología que favorezca los procesos de formación y humano, de crecimiento personal y social, y de potenciación
desarrollo de los niños. de las facultades naturales de la infancia para aprender, for-
marse, crecer y disfrutar plenamente de la vida.
Fundamentos para una política educativa alternativa
del preescolar Ello implica que es responsabilidad del Estado, crear den-
tro de esa política, unas estrategias que generen las condi-
La política de atención integral a la primera infancia guia- ciones para que los niños y las niñas vivan en su experiencia
da por la articulación entre ajuste fiscal y privatización, está cotidiana, procesos afectivos, lúdicos, sociales y culturales
orientada a mantener la visión asistencialista, sacrificar el que les permitan vivir sus días de manera enriquecedora y
Su gran limitación es la cobertura, porque los cupos no FECODE Federación Colombiana de Educadores (2005).
son suficientes para toda la población infantil de la ciudad Reflexiones sobre la Política Educativa para la Primera
que está entre los cero y los cinco años de edad. Por eso, Infancia. Revista Educación y Cultura, 69, septiembre.
esta acción importante se podría complementar con una de- Bogotá: Autora: María Cristina Torrado.
cisiva política de impulso al preescolar de tres grados que
atendiera a niños y niñas entre los tres y los cinco años de Jaramillo, Leonor (2007). Concepción de infancia. Revista
edad y que tendría las siguientes características: Zona próxima, Nº 8, p.p. 108-123.
Estaría a cargo de las Secretarías de Educación. Ministerio de Educación Nacional. (2010). Orientaciones
pedagógicas para el grado de Transición. Bogotá:
Se realizaría en las instituciones educativas públicas, EDESCO, Ltda.
construyendo en ellas las áreas y espacios especializa-
dos junto con la dotación de materiales lúdicos indis- Reyes, Y. ¿Agentes educativos? Maestros, ¡a mucho honor!
pensables. El Tiempo, febrero 20 de 2012.
El lugar de la literatura
en la primera infancia
Yolanda Reyes 1
Quiero compartir tres escenas, a la manera de instantáneas, para ilustrar los descubrimientos que
he presenciado durante estos años en los que me he dedicado a enseñar y a compartir la litera-
tura con bebés, niños y niñas y que han transformado profundamente mi visión acerca del lugar
que ocupa en la formación de los seres humanos desde el comienzo de la vida. Gracias a lo que
me han enseñado mis jóvenes lectores, he adquirido una perspectiva para mirar mis tiempos de
universidad y mis primeros años como maestra y he descubierto lo poco que me enseñaron (y lo
poco que yo enseñé) sobre su significado profundo. Tuve que ir aprendiendo –o quizás sería mejor
decir “desaprendiendo”, como quien se libera de cargas inútiles– datos, fechas, objetivos y estra-
tegias. Mediante un lento proceso, empecé a mirar hacia atrás, guiada por una pregunta: “¿desde
cuándo leemos?” y terminé trabajando con los lectores más pequeños que puedan imaginarse.
1. Licenciada en Ciencias de la Educación con especialización en Literatura, realizó estudios de postgrado en Lengua y Literatura Española. Fun-
dadora y directora de Espantapájaros Taller, librería y proyecto cultural de formación de lectores dirigido a niños y mediadores adultos. Autora
de libros para niños, jóvenes y adultos, entre los que se destacan El terror de Sexto B, Los años terribles y Pasajera en tránsito y del ensayo La
casa imaginaria, sobre lectura y literatura en la primera infancia. Es columnista del diario El Tiempo y dirige la colección Nidos para la Lectura
de Alfaguara. Correo electrónico: yolandareyesv@gmail.com.
Mi premisa es que la experiencia literaria –y quiero enfatizar Bruner llama la atención sobre el significado de esos primeros
en ese binomio: experiencia literaria– se puede enseñar, vale juegos que se dan en todas las culturas con nombres diferen-
decir, transmitir desde el comienzo de la vida y que es más sen- tes. “Hay juegos que están constituidos por el lenguaje y que
cillo de lo que se nos hace creer. Se trata de un proceso que se sólo pueden existir donde el lenguaje está presente. El forma-
inicia, literalmente, por ósmosis: piel e piel, verso a verso, canto to de esos juegos tiene una estructura profunda y un conjunto
a cuento, como veremos en las escenas siguientes. de reglas de realización con las cuales se maneja la superficie
del juego”4. Quizás valdría la pena añadir que esos juegos ya
Primera escena: la voz, el texto madre y la poesía han puesto en escena el juego metafórico de representar unas
cosas –ausentes– valiéndose de otras cosas que cobran presen-
Pensemos en un bebé imaginado desde el vientre materno cia mediante la palabra. En los textos de nuestra tradición oral
al que se inventa rostro y nombre, incluso antes de nacer, y a como el Aserrín, Aserrán o el Tope, tope, tun está contenida la
quien se le entrega, en el tiempo de la espera y durante sus complejidad de esa experiencia de lectura interpretativa descrita
primeros meses de vida, una compleja historia de palabras: la por Bruner, lo que prueba que ponemos en marcha complejos
historia de la cultura, entretejida con la historia de su familia y mecanismos de construcción de significados desde los prime-
con la de su particularidad como sujeto. ros meses de vida y que también desde esos primeros meses
“aprendemos” de un modo visceral, el significado de lo poético
El psicólogo Jerome Bruner afirma que: “La interpretación y la como lenguaje abierto a múltiples sentidos y sonoridades.
negociación comienzan en el momento en que el niño entra en 37
la escena humana. Los niños, al intentar usar el lenguaje para Segunda escena: en el bosque de la narrativa
lograr sus fines, hacen mucho más que simplemente dominar
un código. Están negociando procedimientos y significados y, al Vamos a suponer que han pasado dos años desde la es-
aprender a hacer eso, están aprendiendo los caminos de la cul- cena anterior y que aquel bebé que dejamos ha vivido pro-
tura, así como los caminos de su lenguaje”2. Para Bruner es clara cesos de desarrollo de orden físico y psíquico que inciden en
la idea de que esas facultades originales con las que el bebé sus capacidades simbólicas. Después de haber aprendido a
viene al mundo se activan en la medida en que madre e hijo sentarse, a gatear y a caminar, procesos que le entregan una
inician esa transacción, ese juego de doble vía que él denomina movilidad insospechada y que lo sacan de la contemplación
“reciprocidad” y que ilustra como “la cada vez mayor capacidad exclusiva de la madre para mirar a dúo otras cosas, han en-
de la madre para diferenciar las razones de llorar del niño, así trado en la escena los juguetes y también los primeros libros
como la capacidad del niño de anticipar esos acuerdos”3. de imágenes. En ese triángulo –adulto, libro y lector– nuestro
bebé ha descubierto un “mundo otro” hojeando y mordien-
Es ese pacto el que crea muy pronto una forma de atención do libros y sabe que las ilustraciones, esas figuras bidimen-
mutua, una “armonía de la intersubjetividad”. A medida que sionales parecidas a la realidad, no pertenecen al orden de
la madre “lee”, el llanto de su bebé, va fundando en él nuevos la realidad sino a esa convención cultural llamada libro. Ese
significados y matices y abre la puerta a la experiencia del len- “como si”, que es el germen de lo simbólico, le permite jugar
guaje o de la lectura, en su acepción más amplia de construir a la casita o a los caballitos y descubrir que en los libros está
sentidos, lo cual significa que el ingreso al mundo de lo simbó- representado su entorno. Así mismo, el lenguaje verbal, que
lico se da en virtud de esa primera “con-versación”. ya se ha consolidado, le demuestra que es posible nombrar
lo que no está presente. Ese lenguaje conquistado le permite
Veamos cómo el pacto madre-hijo está profundamente li- evocar simbólicamente la ausencia. Es un descubrimiento, a
gado a la experiencia poética: mientras el niño incorpora las vo- la vez maravilloso y terrible, en el que aforan los miedos y sur-
ces de sus seres queridos, fluye también, en la voz de la madre, ge también una necesidad de independencia,“yo solito”, que
entra en conflicto permanente con el mundo de los límites y personajes y tantos otros etcéteras) que algunos de nosotros
las normas y con la necesidad contradictoria de estar solo y asociamos con los ejercicios tediosos de análisis literario de
acompañado-protegido al tiempo. nuestras clases de literatura en la escuela.
De nuevo, la literatura vuelve a acompañar su desarrollo psí- Tercera escena, no siempre gozosa, del rito de tránsito
quico como lector que se entrena en hacerse preguntas, en
inventar, imaginar, soñar y tener pesadillas. Los relatos le permi- Saltemos otro par de años para encontrarnos de nuevo con
ten entrar en contacto con hechos, peripecias y personajes que ese niño que ya ha ingresado a la educación formal y que está
suceden en un tiempo lejano: el tiempo de la ficción. De esta iniciando el proceso de alfabetización propiamente dicho. Este
forma, se inaugura el paso a otro lenguaje muy sofisticado que paso hacia la conquista plena de la autonomía lectora, se consti-
va más allá de lo fáctico y de las situaciones cotidianas y que se tuye en un largo rito de tránsito –es falso que dure un solo año–
traduce en los relatos. Según la psiquiatra Marie Bonnafé, en la y está lleno de complejidades y minucias. Según afirma Vygostky,
forma relato todo está incluido. “Se puede hablar de lo ausente “El lenguaje escrito es la forma más elaborada de lenguaje”8,
y se utilizan formas discursivas más complejas. Ésa es la única y dicha elaboración supone la puesta en marcha de complejos
forma de lenguaje que tiene las características de la lengua procesos de pensamiento. Lo escrito no es la mera transposición
escrita. Se trata de un preescrito en el lenguaje oral”5. del lenguaje oral, en tanto que implica operaciones psíquicas re-
lacionadas con la estructuración de lo temporal en un orden grá-
Además del profundo poder emocional que posee la ficción fico espacial y con una planeación emanada de la nueva índole
para nombrar los dramas psíquicos que vive el niño de esta eta- del discurso. La ausencia física de un interlocutor visible elimina
pa y darles una resolución simbólica, estos relatos aportan una los supuestos propios de la comunicación oral –dado que el otro
clave definitiva para la conciencia de que hay diferentes formas no está ahí, es necesario proporcionarle unas coordenadas co-
de lenguaje. En efecto, las historias que se le cuentan al niño munes– y ello implica, desde un proceso de planeación mental
obedecen a un “orden otro”, a una “transcripción” de sucesos en deliberado, hasta la incorporación progresiva de convenciones
una forma de tiempo estructurado según las leyes de la escritura. que reemplazan las pausas y las inflexiones naturales del lengua-
je oral, como los signos de puntuación y las reglas ortográficas.
38 El relato de ficción es distinto a la lengua de la inmediatez
pues el hecho de decir había una vez o “La noche en que Max Adicionalmente, el acercamiento al sistema de escritura re-
se puso su traje de lobo y se dedicó a hacer travesuras6…” su- quiere procesos complejos de análisis y síntesis. Lo que en el
giere “un tiempo otro”, no presente, que se nombra en “un len- lenguaje oral iba junto, ahora hay que separarlo en oraciones,
guaje otro”. Al introducir al niño en esas coordenadas “otras” de palabras y sonidos. Al tener que representar los sonidos indivi-
una historia, los adultos lo sitúan en el amplio texto de la cultura duales del habla, que en la oralidad eran percibidos como un
escrita, para mostrarle cómo la literatura permite emprender todo, nuestro niño encara la difícil tarea de descomponer las uni-
viajes más allá del aquí y del ahora y aventurarse por lugares y dades en pequeñas piezas. Ello le supone tomar conciencia de
por tiempos lejanos, que pueden visitarse con la imaginación. la relación entre grafemas y fonemas, relación que para efectos
de nuestra lengua no es unívoca del todo, puesto que los gra-
El álbum de Maurice Sendak, Donde viven los monstruos7, femas no corresponden exactamente a los fonemas. Durante
puede servirnos como metáfora de lo que constituye ese nuevo este proceso de entender “el truco de la lengua escrita”, tendrá
salto en la formación del lector literario. A través de la ficción, que enfrentarse a una serie de arbitrariedades emanadas de la
nuestro niño se identifica con Max, el protagonista de la historia índole convencional del lenguaje escrito, que le demandan una
y oculto bajo esa “identidad otra”, puede viajar simbólicamente atención conciente para entender que cada letra puede repre-
al “espacio otro” donde viven los monstruos; trasladarse a un sentar un sonido –o a veces más de uno– lo cual implica el lento
“tiempo otro”, hablar de sí mismo en un lenguaje cifrado, explo- proceso de descomponer las palabras en fonemas y, simultánea-
rar sus propios miedos, mirarlos fijamente y regresar al “tiempo mente, el de volver a unir fonemas para leer o escribir palabras.
real” de su habitación real, justo a tiempo para la hora de la cena. Pero además de estas minuciosas operaciones que concentran
la atención en el complejo mecanismo de armar y desarmar pa-
Nótese que nuestro lector no ha cumplido siquiera tres labras, el texto sigue inscrito en un contexto amplio de oraciones,
años y ya ha experimentado –con una profunda emoción vital– párrafos y posturas comunicativas diversas que afectan el senti-
esas “categorías” (tiempo cronológico/psicológico; espacio, do de esas pequeñas unidades.
5 Bonnafé, Marie. Poner al bebé en el centro. Entrevista concedida al periódico “Espacios para la Lectura”; número 5, México, Fondo de Cultura
Económica, 2000.
6 Sendak, Maurice. Donde viven los monstruos. Colección Nidos para la Lectura. Bogotá, Alfaguara, 2005
7 Ibid.
8 Vygostky, Lev, S. Pensamiento y lenguaje. Buenos Aires, Ediciones Fausto, 1996.
El preescolar, un sueño
para el futuro Celio Nieves Herrera 1
40 Confucio
1 Licenciado en Biología, Posgraduado en Planeación para la Educación Ambiental. Integrante de la dirección del Polo Democrático Alternativo
PDA. Concejal de Bogotá. Correo electrónico: celionievesherrera@gmail.com.
“Los niños de edad pre-escolar quieren tocar, gustar, oler, Con fundamento en estos argumentos, por ejemplo, en
escuchar y examinar todas las cosas por sí mismos. Están la sentencia T-356 de 2001, la Corporación sostuvo que con
ansiosos por aprender. Ellos aprenden experimentando y ha- base en un decreto presidencial, no puede interpretarse, en
ciendo. Los pre-escolares aprenden de sus juegos. Están muy contravía del carácter flexible del artículo 67 de la Carta, que
ocupados desarrollando habilidades, usando el lenguaje y el único grado obligatorio de preescolar es transición, pues
luchando por ganar control interno (emociones)”. una norma de tal rango no puede limitar garantías constitu-
cionales como la objeto del presente pronunciamiento.
Los niños de esta edad deben ser sujetos activos e incor-
porados a los sistemas educativos tempranos, para garantizar En lo que respecta a la progresividad con la que debe ir
a futuro su desarrollo integral desde la visión de una educa- ampliándose la cobertura del sistema educativo, deben re-
ción igualmente integral. cordarse las pautas que en materia de progresividad de los
derechos económicos, sociales y culturales en general, esta
De hecho la Corte Constitucional ha promulgado sendas Corporación ha fijado siguiendo el derecho internacional de
sentencias que esclarecen el camino para un preescolar de los derechos humanos.
tres grados:
En este sentido, la Corte ha indicado que el mandato de
“El derecho fundamental de los niños a la educación. progresividad de estos derechos no puede entenderse como
Reiteración de la jurisprudencia una justificación para la inactividad del Estado, sino que im-
plica la obligación de éste de actuar lo más expedita y eficaz-
Como lo ha resaltado desde sus primeros fallos esta Cor- mente posible a fin de ampliar la satisfacción de los mismos.
poración, en particular en la sentencia T-787 de 2006, la Lo anterior siempre y cuando se respete por lo menos el con-
educación es un derecho y un servicio de vital importancia tenido mínimo de aquellos –que se deduce, por ejemplo, de
para sociedades como la nuestra, por su relación con la erra- los tratados internacionales y de la Constitución-, el cual es
dicación de la pobreza, el desarrollo humano y la construc- de exigibilidad inmediata”.
La educación preescolar, de
conformidad con el artículo 15 de
la Ley 115 de 1994 -“por la cual
se expide la ley general de edu-
cación”-, es aquella “(…) ofrecida
al niño para su desarrollo integral
en los aspectos biológico, cognos-
citivo, sicomotriz, socio-afectivo y
espiritual, a través de experiencias
de socialización pedagógicas y re-
creativas”, antes de iniciar el ciclo
de educación básica. Ésta com-
prende tres niveles de formación
denominados pre jardín, jardín y
transición, de los cuales por lo me-
nos uno es de carácter obligatorio.”
No se justifica que en Colombia no se haya avanzado en la institucionalización de los 3 grados de
preescolar desconociendo los principios de equidad social.
Con fundamento en estos argumentos, por ejemplo, en Para tal efecto se tendrá en cuenta que la ampliación de
la sentencia T-356 de 2001, la Corte Constitucional sostuvo la educación preescolar debe ser gradual a partir del cubri-
que con base en un decreto presidencial, no puede inter- miento del ochenta por ciento (80%) del grado obligatorio
pretarse, en contravía del carácter flexible del artículo 67 de de preescolar establecido por la Constitución y al menos del
42 la Carta, que el único grado obligatorio de preescolar sea ochenta por ciento (80%) de la educación básica para la
transición, pues una norma de tal rango no puede limitar población entre seis (6) y quince (15) años“.
garantías constitucionales como la objeto del presente pro-
nunciamiento. El preescolar debe partir de los intereses, ne- Cabe anotar que los estudios y experiencias en países de
cesidades y características de los niños y de los procesos. Europa, como Suecia, Finlandia y Dinamarca en los cuales, los
Partimos de los intereses, necesidades y características de niños y niñas menores asisten, desde los 3 años de edad, a
los niños, de los ejes y desarrollos propuestos entre otros instituciones para su desarrollo integral, en donde son aten-
por los PEI con respecto a los ritmos de cada individuo, para didos por personal pedagógico capacitado en despertar la
dar a los niños y niñas la flexibilidad y autonomía en su pen- creatividad de los menores frente a su entorno, estimular su
sar, sentir y actuar, reduciendo el “poder adulto”. inteligencia cognitiva y cenestésica-corporal, donde es forta-
lecida su personalidad, su carácter e inteligencia emocional
En Colombia el reto hacia la educación preescolar de tres siempre en la búsqueda formar personas de éxito.
grados es romper la brecha enorme que existe entre la edu-
cación pública y privada y demostrar que la equidad empieza Para esto es fundamental que la participación total de las
por una educación profundamente humanista y con los ele- familias en el proceso, de tal manera que así son coadyuvan-
mentos que constituyen la educación formal para formular tes en el desarrollo de los pre-escolares, colaborando en su
políticas públicas de avanzada, sin mezquindades y sin ningún formación educativa, familiar y social, ofreciendo un desarrollo
tipo de cálculo político. armónico; que a su vez los protege del maltrato, del abuso,
de la explotación comercial y de todo tipo de violencia que
El artículo 18 de la Ley 115 de 1994 establece: atenta contra los niños y niñas, cobijados dentro de un am-
biente pedagógico y de estimulación, por tanto es necesario
“ARTÍCULO 18. AMPLIACIÓN DE LA ATENCIÓN. El nivel de tener un control de la permanencia de los menores desde los
educación preescolar de tres grados se generalizará en ins- 3 años de edad.
tituciones educativas del Estado o en las instituciones que
establezcan programas para la prestación de este servicio, de Si el país quiere lograr una educación inicial que sea el
acuerdo con la programación que determinen las entidades soporte efectivo para garantizar más y mejores posibilidades
territoriales en sus respectivos planes de desarrollo. de desarrollo humano y social se deben asumir desafíos en
Dentro del sistema educativo colombiano debe existir una reforma muy seria del nivel
preescolar y básica primaria, las Normales Superiores debemos dar el paso para pre-
sentar al gobierno el cambio de estructura; somos nosotros, como protagonistas de las
historia quienes debemos proponerlo; aquellos centros preescolares y de básica pri-
maria concebidos todavía con un docente orquesta forman parte de un modelo caduco,
mediante el cual no se superan hoy los vacíos de la educación colombiana, mucho me-
nos con normas estáticas que no permiten repensar la educación. Ellas limitan nuestro
actuar a 42 metros cuadrados de reflexión, con 22 horas de presencia en ese recinto
creador de adaptaciones a la sociedad presente sin medir las consecuencias tanto para
alumnos como para maestros.
1 Licenciado de la Pontificia Universidad Bolivariana de Medellín; Maestría en Desarrollo Social de la Universidad del Norte de Barranquilla.
Rector de la Normal Superior La Hacienda de Barranquilla, Atlántico. Correo electrónico: luisgermanribvera@hotmail.com.
Las organizaciones que agrupan a las Normales deben ser proactivas en una defensa abierta, clara y
pensada desde la pedagogía para sentarse frente al gobierno y que les sea devuelta la cédula de ciuda-
danía que el Estado les dio a las Normales para ser formadoras de maestros con los niveles completos.
artículos 2,8 y 9 del Decreto 2247 de 1997, se establece integrarlo por medio de procesos de exploración hacia los
que la educación preescolar se ofrecerá a los educandos de requerimientos de aprendizaje. Hasta el extremo de que
tres a cinco años de edad. El sistema no establece en qué hoy el preescolar figura desde los 85 días de nacidos has-
momento deben cumplir esa edad, por ello se señala que ta los cinco años. Robert Owen fundó en el año 1816 en
esta ha sido más una estrategia operativa que conceptual. Escocia un instituto de Educación Preescolar formal, pero
La sentencia T-323 de 1994 y T-1030 de 2006 de la Corte bien conocemos que en 1837 en Alemania ya se contaba
Constitucional, dice que el umbral edad de 15 años no es con el Kindergarten en el que sólo se tenía a los infantes
un criterio por el que deba restringirse el derecho a la edu- ocupados jugando y en entretenidos. .
cación de los menores de edad. Insiste en que las edades
fijadas en las normas no pueden tomarse como criterios ex- En el año de 1978 el Ministerio de Educación Nacional
cluyentes sino inclusivos. A su vez, las mismas sentencias ar- reglamentó la atención a niños de 4 a 6 años en las insti-
guyen que si bien las instituciones educativas públicas están tuciones educativas, y esa historia construida exitosamen-
obligadas a atender a los niños de cinco años como mínimo, te por las Normales Superiores, se pierde en el espacio y
sin perjuicio de los grados existentes en las instituciones tiempo sin reflexión seria que detenga la avalancha imposi-
educativas que ofrezcan más de un grado preescolar. tiva de gobiernos de turno en detrimento de las institucio-
nes educativas públicas, abriendo abanicos de empobreci-
En el mundo entero el preescolar dejó de ser un centro miento pedagógico a las mismas instituciones formadoras
de cuidados, de guardería, de alimentación y de reemplazo de Maestros y fortaleciendo maliciosamente la educación
de madres trabajadoras, o sólamente de entretenimiento, privada, hasta el punto de afirmar en varias ocasiones que
para darle el carácter de educación formal, y de esa manera estamos en decadencia frente a lo privado.
Las Escuelas Normales Superiores debemos volver a social y humano acertado para una sociedad cada día que
conquistar el espacio perdido; sin reflexión alguna dejamos vive cada día más crisis de toda índole. Hoy consideramos
al gobierno del momento deteriorar el gran laboratorio de algunos que estos años de oro de un niño deben interpre-
expresión pedagógica fundante. Nuestras organizaciones tarse a la luz de procesos de exploración y desarrollo de
como la misma ASONEN fuimos inferiores a esta reflexión, sus potenciales talentos e inteligencias, estructurando su
quedando totalmente silenciada la exigencia constitucio- mente desde el mundo posible que el sujeto trae como
nal y los principios que rigieron la reestructuración de las tendencias genéticas. Estos ambientes los puede generar y
Escuelas Normales; a pesar de considerar una autonomía desarrollar una Normal Superior realmente acreditada para
en los planes de estudio dada a las Normales Superiores tal fin.
Acreditadas, dejamos perder un espacio privilegiado en la
organización de nuestras Instituciones. Muchas de ellas si- En los países en donde han desaparecido las Norma-
guieron conservando el preescolar con 4 años, pero debe- les, hoy se arrepienten de semejante desastre. ¿Por qué
ríamos llegar a los 3 años; mucho más en cuanto la norma entonces, sin razones pedagógicas serias y sin discusión
constitucional da libertad y derecho a los padres de familia se anula este proceso que ellas han tenido, sólo con el
para optar el ingreso de sus hijos al sistema educativo. sofisma financiero que de todas maneras no tiene sustento
ni presentación? Dentro del sistema educativo colombiano
Las experiencias construidas en las Instituciones Educati- debe existir una reforma muy seria del nivel preescolar y
vas Públicas han sido vulneradas por los vaivenes de la polí- básica primaria, las Normales Superiores debemos dar el
tica educativa del sistema, a veces sin revisión, sin escuchar paso para presentar al gobierno el cambio de estructura;
argumentos, con el pretexto de las simples leyes que hay somos nosotros, como protagonistas de las historia quie-
que cumplir a ciegas, leyes que se construyen con sofismas nes debemos proponerlo; aquellos centros preescolares
pedagógicos que no consultan a las verdaderas instituciones y de básica primaria concebidos todavía con un docente
que forman Maestros para el nivel de preescolar y básica orquesta forman parte de un modelo caduco, mediante el
primaria. Ya habían perdido algunas de las las Normales su cual no se superan hoy los vacíos de la educación colom-
formación pedagógica desde 8º grado, otras desde el mismo biana, mucho menos con normas estáticas que no permi-
46 6º grado; hoy con la creación de los Ciclos Complementarios ten repensar la educación. ¡Ellas limitan nuestro actuar a
se redujo la formación a partir de 10º grado. 42 metros cuadrados de reflexión, con 22 horas de presen-
cia en ese recinto creador de adaptaciones a la sociedad
No es posible quedarnos en las simples normatividades presente sin medir las consecuencias tanto para alumnos
del gobierno; se requiere hacer un análisis pedagógico de como para maestros!.
los espacios formativos que el sistema debe brindar a través
de las instituciones que históricamente han sido reconocidas Las Normales tenemos que volver sobre los niños de
para tal fin, como lo son las Escuelas Normales Superiores, 3 a 5 años según lo previsto en la Constitución y en la
que desde 1994 se han dado a la tarea de repensar su que- ley, demandar frente al gobierno la entrega de esos espa-
hacer para estos tiempos que requiere otro modelos edu- cios pedagógicos que se nos dio, y que por capricho de
cativos mas asertivos. Pretender que cualquiera puede ser gobierno se nos arrebató, irrespetando a las instituciones
Maestro en estos tiempos ha sido la gran equivocación del que fuimos creadas para ello. No se puede seguir toleran-
gobierno, basta dar un vistazo a los criterios que el gobierno do la violencia pedagógica sobre las Normales Superiores,
establece para ello, como un simple concurso de conoci- no se puede seguir pensando a la Normal como cualquier
mientos; nos olvidamos de los perfiles requeridos para ser colegio, se nos debe considerar con diferencias, con di-
Maestro, para dar el paso a la formación de Instructores de versidad y con estructuras administrativas muy diferentes.
disciplinas. Las Normales no formamos en las disciplinas, Nuestros laboratorios no pueden desaparecer, la esencia
formamos un Maestro para el preescolar y la básica primaria. nuestra es aquella práctica docente sobre la que hemos
Hoy vemos con cierta distancia el desarrollo de estos nue- construido una experiencia y que nos permite mirar con
vos llamados maestros de cualquier disciplina y profesión; el cuidado el potencial de un nuevo Maestro. Las organi-
tiempo nos dirá qué resultados produce esta estrategia no zaciones que agrupan a las Normales deben ser proac-
reflexionada desde la pedagogía. tivas en una defensa abierta, clara y pensada desde la
pedagogía para sentarse frente al gobierno y que les sea
Tanto el preescolar como la educación básica primaria devuelta la cedula de ciudadanía que el Estado les dio a
requieren personas adecuadamente formadas, los años y las Normales para ser formadoras de maestros con los
la experiencia son las que nos permiten construir un futuro niveles completos.
Aprender a leer y a escribir es uno de los alcances más significativos del ser humano, no sólo
por el gran número de expectativas a nivel familiar, social y escolar que lo enmarcan sino
porque ambas habilidades se convierten en una fuente de enriquecimiento personal para el
individuo. Desde su más tierna infancia los niños reciben diferentes estímulos con el fin de
alcanzar el pleno desarrollo de estas destrezas. Haciendo referencia específicamente a la
actividad de escribir se puede decir que, diversos factores se conjugan con el fin de afianzar o
limitar su alcance en el ámbito educativo y personal. Estos agentes son: las concepciones que
fundamentan la práctica pedagógica, la metodología, el rol del docente y el contexto escolar.
47
1 Especialización en Didácticas para la Lectura y Escritura con Énfasis en Literatura. Universidad San Buenaventura.
2 Camps, A. (1997): “Escribir. La enseñanza y el aprendizaje de la composición escrita”. Signos, 20, 24-33.
3 Ferreiro, E. y Teverosky, A. (1979): “Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño”. México: Siglo XXI.
4 Camps, A. op. Cit.
5 Camps, A. op. cit.
6 Según Vygotsky (1978), es necesario llevar al niño a una comprensión interna de la escritura y lograr que ésta se organice como un desarrollo
más que como un aprendizaje.
www.serviciospostalesnacionales.com
La Bebeteca: un puente
para llegar a la escuela
Diva Nelly Mejía Franco 1, 2
1 El presente artículo corresponde a la ponencia alterna presentada por la autora el 22 de agosto de 2009 como requisito para optar el título de
Doctora en Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, CINDE -Universidad de Manizales. Docente. Correo Electrónico: divanelly07@gmail.com.
2 Ferreiro, E. (s.f.). La alfabetización no es un lujo ni una obligación: es un derecho. Disponible en http://www.taringa.net/posts/ info/861531/Dra_-
Emilia- Ferreiro:-Leer-y-escribir-en-un-mundo-cambiante.html. [Recuperado 2009, marzo 26].
3 De Zubiría, M. (2001). Teoría de las seis lecturas. Mecanismos de aprehendizaje semántico. Tomo I. Santafé de Bogotá: FAMDI.
4 Cassany, D. (1999). La cocina de la escritura. Barcelona: Anagrama.
5 Teberosky & Tolchinsky (1992). Más allá de la alfabetización. En: Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Education and Development, (pp.
5-13). Madrid: Board.
6 Fundación Iberoamericana Down 21. (s.f.). Método Doman. Disponible en http://www.down21.org/educ_psc/ educacion/ tecnica_inetrvencion/
doman.htm [Recuperado 2009, julio 17].
7 Ferreiro, E. & Teberosky, A. (1979). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México: Siglo XXI.
8 Goodman, Y. (1992). Las raíces de la alfabetización. En Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Education and Development, (pp. 29-42).
Madrid: Board.
Consecuente con la preocupación por el tema, el Ministerio Ferreiro & Teberosky (1979) y Goodman (1992); autores que
de Educación MEN de Colombia ha diseñado los Lineamientos tocan algunos puntos cercanos a esta exploración de la cultura
52 Curriculares de la Lengua Castellana. Uno de los campos del tra- letrada en la primera infancia.
bajo curricular, que propone el documento hace énfasis en las
competencias y actos comunicativos, entre ellos la lectura y la De Zubiría (2001) propone la Teoría de las seis lecturas y
escritura. Su concepto: “Leer es un proceso de construcción de con ella un modelo que promueva los procesos psicológicos
significados a partir de la interacción entre el texto, el contexto y relativos a las formas superiores de decodificación semántica
el lector, (…) factores que determinan la comprensión” (1998, de un texto. Es una teoría de nivel pedagógico que habla de
p. 72)14, da pie a amplias interpretaciones. Sin embargo, su ma- la necesidad de aprender a leer y de enseñar a leer, y de las
yor interés es que el lector o lectora (estudiante), a través de un condiciones que se requieren para hacerlo. Sustenta la hipó-
proceso, llegue a dar cuenta de un texto escrito, sus ideas y sus tesis: es completamente imposible aprender a leer durante
relaciones; reconoce la importancia de los saberes previos y el primero de primaria, ya que la lectura no se circunscribe sólo
nivel de desarrollo cognitivo del lector o lectora, pero no aborda a la identificación de letras y sílabas; corresponde a una serie
de manera explícita la primera infancia. de procesamientos secuenciales que obedecen a seis niveles
de lectura: Lectura fonética (de naturaleza perceptual analítico-
La presente revisión bibliográfica sobre la enseñanza de la sintética), decodificación primaria (las palabras y su significado),
lectura y la escritura permite conocer que cada uno ha sido decodificación secundaria (las frases y sus pensamientos), de-
tratado teóricamente de manera independiente, aunque en la codificación terciaria (los párrafos y sus estructuras), categorial
práctica son procesos relativamente simultáneos y de incidencia (estructura semántica del escrito) y metasemántica (análisis
mutua. transtextual). Los mecanismos asociados con los procesos de
comprensión, en cada uno de los niveles, abarcan desde el
Exploración teórica en lectura y escritura preescolar –o transición– hasta la universidad.
Alrededor de la lectura y la escritura se han configurado diver- Cassany (1999), critica a la escuela porque sólo ofrece unos
sas teorías, discusiones y estudios; unos, generales; otros, parti- rudimentos esenciales de gramática, insuficientes para cubrir las
culares, entre los que merecen destacarse el de Zubiría (2001), complejas demandas escriturales de la vida moderna. Afirma
Cassany (1999), Teberosky & Tolchinsky (1992), Doman (s.f.), que la formación en escritura de la mayoría de las personas
El Método Doman es una metodología de intervención tem- Nivel I: Los niños y niñas reconocen el dibujo y la escritura 53
prana diseñada para niños y niñas con lesiones cerebrales que como dos formas básicas de representación gráfica, ya que
se basa en el aprovechamiento de su potencial de desarrollo. utilizan elementos similares: líneas, rectas, curvas y puntos.
Gracias a los resultados positivos obtenidos con el tratamiento Y perciben que su diferencia radica en un principio organiza-
su autor, Glen Doman, decidió aplicarlo a niños y niñas norma- dor: la forma de las letras es arbitraria y están ordenadas de
les, desde edades muy tempranas, con el ánimo de lograr avan- manera lineal. Simultáneamente comprenden que las letras
ces más significativos. Básicamente consiste en elaborar un Per- se usan para representar una propiedad de los objetos del
fil de Desarrollo Neurológico de los niños y niñas y, de acuerdo mundo –sus nombres–. Sin embargo, se cuestionan por las
con éste, estructurar un programa secuenciado y sistematizado condiciones (en cantidad y variedad) que dicha escritura debe
de la labor educativa fundamentado en movimientos progre- tener para que sea entendible, “legible”. Las autoras sintetizan
sivos, eficaces en áreas motrices e intelectuales. Este método dichas construcciones conceptuales en dos principios: Princi-
comprende los siguientes programas: de lectura, de inteligencia pio de cantidad mínima y Principio de variaciones cualitativas
(o conocimientos enciclopédicos), musical, de matemáticas, de internas, los cuales no son suficientes para el niño o niña, por-
escritura, de excelencia física, y de segundo idioma como lengua que aún no tiene claro los criterios para representar diferencias
extranjera (para las lenguas extranjeras que se enseñan como de significado.
lengua materna se usa el método de lectura).
Nivel II: La búsqueda siguiente se concentra en las cadenas
Uno de los métodos más difundidos del Método Doman escritas para encontrar diferencias gráficas objetivas que justifi-
es el de la enseñanza de la lectura global que, al igual que los quen diferentes intenciones e interpretaciones. El niño o niña
demás aprendizaje propuestos, se desarrolla por la presentación ahora establece comparaciones entre los nombres escritos rela-
de bits de inteligencia –máxima cantidad de información que cionándolos con algunas propiedades físicas de las representa-
puede ser procesada a la vez en un segundo–. Estas unidades ciones (grandes, pequeños, antiguos, nuevos…). En otras pala-
de información o bits deben ser: precisas (lo más exactas po- bras, a los principios de comparación intra-relacional –cantidad,
sible), discretas (contener un solo elemento, sin adornos), sin variedad– se suma un tipo de comparación inter-relacional.
ambigüedades, novedosas (para mantener el interés). El proce-
dimiento consiste en que las palabras, los números, las láminas Nivel III: Se caracteriza porque el niño o niña empieza a en-
de animales... son enseñadas a los niños y niñas en grupos de tender que el sistema alfabético corresponde a un valor sono-
10, varias veces al día (3 ó 4 veces) y cada lámina se le muestra ro. Se trata de la fonetización de la representación escrita. En
este nivel los niños y niñas construyen tres hipótesis: silábica, transición natural entre los dos niveles de lectura, basado en
silábico-alfabética y alfabética. La hipótesis silábica constituye un los principios psicogenéticos, pedagógicos y conceptuales que
intento por asignarle a cada letra un valor silábico, pero cuando demanda la etapa en desarrollo.
dicho intento de correspondencia entre grafía-sílaba no enca-
ja, lo conduce a buscarla entre grafía-sonido. Inicia así la ex- Formar conciencia de lector o de lectora
ploración silábico-alfabética. Es un proceso constructivo donde
algunas letras ocupan el lugar de sílabas y otras el de unidades En el ámbito escolar, tradicionalmente es común la expecta-
sonoras menores o fonemas. Cuando los niños y niñas descu- tiva de que todos los niños y niñas deben aprender a “leer” al
bren que las diferencias sonoras suponen letras diferentes, es finalizar el primer año o grado; la escuela asume que al llegar
decir, el principio fundamental de cualquier sistema de escritura a este nivel los niños y niñas están en capacidad de producir
alfabética, han arribado a la hipótesis alfabética. textos “bien escritos y con sentido”. Pero esta idea no ha consi-
derado los nuevos problemas que deben enfrentar, entre ellos
De acuerdo con Goodman (1992), los niños y niñas mo- la separación entre palabras, la ortografía y la puntuación, opera-
dernos están inmersos en una sociedad alfabetizada que –in- ciones que demandan un alto nivel de simbolización y abstrac-
dependiente de su contexto, nivel socioeconómico y nivel cul- ción. La comprensión del sistema escritural exige un primer nivel
tural– los pone en contacto, desde que nacen, con múltiples de reflexión sobre la lengua relacionado con las posibilidades de
materiales y formas de lectura y escritura. Por tanto, al ingresar a segmentación del habla, pero las unidades de análisis lingüísti-
la escuela llevan consigo un importante cúmulo de experiencias, co no corresponden al nivel de conceptualización de los niños
generalmente ignorado, que para el autor constituyen las raíces y niñas de esta etapa (Ferreiro, 2002)15. A todo ello se suma
de un árbol, que eventualmente se convertirá en el árbol de la el desconocimiento de la historia social y personal; se olvida
alfabetización de la vida. Estas raíces incluyen: precisamente la cultura letrada, “derecho de cualquier niño que
nace en los tiempos de la interconexión” (Ferreiro, s.f.). No se
a) Mostrar conocimiento de lo impreso en contextos situa- ha tenido en cuenta que la conciencia de lector o de lectora se
cionales forma desde muy temprana edad y requiere la adquisición de
habilidades que se van dando poco a poco en los espacios y
54 b) Tomar conciencia de lo impreso en discursos coherentes contactos con el libro y sus mediadores. Hay un trayecto en el
c) Conocer las formas y funciones de la escritura proceso formativo del lector o lectora que se hace invisible a los
d) Usar el habla para acompañar el lenguaje escrito ojos de un sujeto adulto desprevenido: se trata de la primera
infancia. En esta etapa del ser humano la lectura se relaciona
e) Exhibir habilidad de pensar sobre la lectura y la escritura
con oír, mirar, oler, tocar, probar y moverse. La familia, como
núcleo social primario, es la llamada a comprometerse en un
Goodman (1992) afirma que estas cinco raíces de la alfabe- proyecto de educación integral que fortalezca el desarrollo del
tización son desarrolladas por los niños y niñas en colaboración sujeto infante en todas sus dimensiones.
con los miembros de su familia y su grupo social, gracias al
continuo contacto con los actos significativos de alfabetización Todas las encuestas coinciden en un hecho muy simple: si
que ocurren diariamente en su contexto. Cada niño o niña res- el niño ha estado en contacto con lectores antes de entrar a la
ponde al proceso de forma diferente de acuerdo con la historia escuela, aprenderá más fácilmente a escribir y leer que aque-
personal; inventa o reinventa formas y funciones de la lectura y llos niños que no han tenido contacto con lectores (Ibíd., s.f.).
la escritura a medida que explora y experimenta con los usos
de la alfabetización, sean éstos agradables, dolorosos o difíciles. Los niños y niñas le confieren atención e importancia a los
objetos que tengan algún significado para las personas adultas,
Haciendo una breve reflexión sobre los seis estudios revi- aún sin comprender muy bien lo que subyace en ellos. Así su-
sados para abordar el tema de la lectura en la primera infan- cede con la lectura y las letras. Ferreiro denomina este evento
cia, se vislumbran dos categorías o grupos: uno, tradicionalista, como primera inmersión en la cultura letrada, la cual consiste
preocupado sólo por la aprehensión de la lectura y escritura básicamente en escuchar leer en voz alta, haber visto escribir
alfabética convencional, pero con propuestas interesantes y bien con intencionalidad, haber participado en actos sociales donde
fundamentadas; y el otro, vanguardista, más reciente y en pro- leer y escribir tiene sentido, plantear preguntas y obtener res-
ceso de construcción, que reconoce la incidencia del contexto puestas… Este acto de lectura –de acuerdo con la autora– es
socio-cultural en la formación de un lector o lectora precoz. Dos para niños y niñas un acto de magia, donde entran en escena
posiciones que urgen de un puente articulador que permita una un sujeto intérprete, los símbolos (o código escrito) y el mismo
15 Ferreiro, E. (2002). Escritura y oralidad: unidades, niveles de análisis y conciencia metalingüística. En Relaciones de (in)dependencia entre ora-
lidad y escritura. Barcelona: Gedisa.
La Bebeteca, ¿un puente en construcción? La magia de las historias y la lectura de textos, acordes con
las necesidades y expectativas de los niños y niñas, con-
La Bebeteca ha sido implementada en varios países de Amé- tribuyen favorablemente en el proceso que requiere un
rica Latina y Europa (México, Cuba, Colombia, España y Francia). lector autónomo (sentido, fluidez, predicción, inferencia).
Según Reyes (2003)16, su principal papel es la animación de la La decodificación mecánica y/o precoz no garantiza la ca-
lectura para los más pequeños, para la primera infancia: pacitación suficiente para la lectura adecuada de los textos.
El proyecto alberga la esperanza de que muchos niños de Es un proyecto que involucra a diversos mediadores (pa-
Colombia puedan encontrar en las palabras y en los libros un dres y madres, maestros y maestras, bibliotecarios y biblio-
tejido simbólico para empezar a crecer, para descubrir cami- tecarias…) en un trabajo de equipo, comprometidos en la
nos, para construir sentidos y, ojalá, para habitar un país dis- formación simultánea y sistemática de sus integrantes en
tinto en el futuro. el amor por la lectura.
La Bebeteca, como programa nacional colombiano, surge La Bebeteca se consolida entonces como espacio educativo
paulatinamente de la experiencia con animación a la lectura en significativo, como un espacio sociocultural con intencionalidad
el Taller Espantapájaros, conformado por un equipo interdisci- pedagógica, con una nueva óptica en cuanto al desarrollo infan-
16 Reyes, Y. (2003). Yo no leo, alguien me lee… me descifra y escribe en mí. La bebeteca, relato de una experiencia de lectura en la primera infan-
cia, desarrollada en Espantapájaros Taller. En: Infancia, lenguaje y lectura. México: Conaculta.
til, consciente de la importancia que tienen las experiencias cor- De Zubiría, M. (2001). Teoría de las seis lecturas. Mecanis-
porales, emocionales, sociales y cognitivas de los niños y niñas mos de aprehendizaje semántico. Tomo I. Santafé de
con su contexto. Teniendo en cuenta las dimensiones para el Bogotá: FAMDI.
desarrollo integral del infante, la dimensión socio-afectiva ocu- Espinosa, G. (2002). La aventura del lenguaje. Bogotá: Pla-
pa un lugar privilegiado en la Bebeteca; allí padres, madres y neta.
sujetos adultos aprovechan el espacio cultural con un acompa-
ñamiento amoroso y paciente para leer con los bebés los libros Ferreiro, E. (s.f.). La alfabetización no es un lujo ni una
obligación: es un derecho. Disponible en http://www.
disponibles y participar de las actividades. El desarrollo afectivo
taringa.net/posts/ info/861531/Dra_-Emilia- Ferreiro:-
del niño o niña se perfila de acuerdo con la emotividad y las Leer-y-escribir-en-un-mundo-cambiante.html. [Recupe-
manifestaciones que se dan en las relaciones con las personas rado 2009, marzo 26].
más cercanas y significativas para él o ella. Las más estimulan-
tes y efectivas serán las relaciones positivas; éstas facilitan la Ferreiro, E. (2002). Escritura y oralidad: unidades, niveles
de análisis y conciencia metalingüística. En Relaciones
expresión de sus emociones y sentimientos, así como también
de (in)dependencia entre oralidad y escritura. Barcelo-
situaciones de bienestar y seguridad, decisivas para el fortaleci-
na: Gedisa.
miento de sus esquemas morales y la adquisición de formas de
relación interpersonal. Ferreiro, E. & Teberosky, A. (1979). Los sistemas de escritura
en el desarrollo del niño. México: Siglo XXI.
La Bebeteca ofrece un espacio de seguridad y confianza para Fraser, J. (2003). Desarrollo infantil inicial: salud, aprendiza-
el desarrollo de la sensibilidad, la expresión espontánea, el es- je, y comportamiento a lo largo de la vida. En: Primera
tablecimiento de relaciones, analogías, metáforas, de acuerdo infancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias
con el nivel de desarrollo de los niños y niñas. El contacto con del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargra-
la literatura infantil se asume como una práctica cultural que phics S. A. p. 85.
beneficia su desarrollo en las diferentes dimensiones. Como Fundación Iberoamericana Down 21. (s.f.). Método Doman.
ambiente socio-cultural la Bebeteca se configura como puente Disponible en http://www.down21.org/educ_psc/
de estructuras firmes entre la familia y la escuela, propiciando educacion/ tecnica_inetrvencion/doman.htm [Recupe-
56 un ambiente significativo que contribuye a la definición de es- rado 2009, julio 17].
quemas propicios para el aprendizaje de la lectura y la escri- García, M. C. (2003). La participación de los padres como
tura. De igual manera, podría afirmarse que es el primer paso factor de calidad en programas de desarrollo infantil,
hacia la educación formal acompañado por la familia, o mejor, desarrollo humano y desarrollo social. En: Primera in-
de la incorporación de la familia en actividades de aprendizaje fancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias
escolar; es el primer acercamiento transitorio hacia una nueva del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargra-
etapa. Es además un espacio para la formación democrática del phics S. A. p. 147.
ciudadano o ciudadana, si se tiene en cuenta que está abierto a Goodman, Y. (1992). Las raíces de la alfabetización. En En
todas las familias, independiente del nivel socio-cultural del que Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Edu-
procedan. Fortalece los vínculos de la familia con la escuela y la cation and Development, (pp. 29-42). Madrid: Board.
prepara para el acompañamiento amoroso de sus hijos e hijas Ministerio De Educación Nacional (1998). Lineamien-
en el proceso educativo. Tal como lo afirma García17, la partici- tos Curriculares. Lengua Castellana. Santafé de Bogotá:
pación de los padres y madres en los programas de desarrollo Magisterio.
y educación infantil constituye un factor de calidad que asegura Reyes, Y. (2003). Yo no leo, alguien me lee… me descifra
logros importantes en los niños y niñas, y en las mismas familias y escribe en mí. La bebeteca, relato de una experiencia
y las comunidades. de lectura en la primera infancia, desarrollada en Espan-
tapájaros Taller. En: Infancia, lenguaje y lectura. México:
Conaculta.
• Bibliografía
Reyes, Y. (2005). Lectura en la primera infancia. Disponible
en http://www.oei.es/inicial/articulos/lectura_primera_
Caivano, F. (2003). Bienvenidos a casa. Infancia, lenguaje y infancia.pdf. [Recuperado 2010, julio 25].
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Teberosky, A. & Tolchinsky, L. (1992). Más allá de la alfabet-
Cassany, D. (1999). La cocina de la escritura. Barcelona: ización. En: Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of
Anagrama. Education and Development, (pp. 5-13). Madrid: Board.
17 García, M. C. (2003). La participación de los padres como factor de calidad en programas de desarrollo infantil, desarrollo humano y desarrollo
social. En: Primera infancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargraphics S. A. p. 147.
• ACTUALIDAD •
• ACTUALIDAD •
Si el Estado no resuelve prontamente la preocupante situación nutricional de la infancia y la juventud, muchos esfuerzos que se emprendan en otros sectores, como
en el de la educación, no podrán tener todo el efecto deseado. No es posible que Colombia continúe manteniendo uno de los mayores niveles de desigualdad entre su
población, en el conjunto de países de América Latina.
los acompañan los jefes de hogar, las madres y cabezas de Respecto a la desnutrición global, –ésta significa la de-
familia, que es claro, han sido efectivamente afectados por ficiencia del peso con relación a la edad-, representa el re-
58 las condiciones ya anotadas. sultado de desequilibrios pasados y recientes- se presenta
con mayor prevalencia en el nivel 1 del SISBEN (13.4%);
Por ello se observa el deterioro de indicadores de creci- en niños con madres sin educación (24.1%) y en niños
miento de los niños menores de 5 años, manifiesto en el indígenas (29%). Sin embargo, uno de cada 6 niños y ado-
retraso en talla y en desnutrición global, así como retraso en lescentes presenta sobrepeso y obesidad, y es mayor a
crecimiento en niños de 5 a 17 años; es desafortunado que medida que aumenta el nivel educativo de la madre (9.4%
en el documento referenciado no estén disponibles los indi- en mujeres sin educación frente a 26.8% en madres con
cadores por segmentos de edad como, los de 6 a 10 años y educación superior); por ello es necesario considerar con
de 10 a 17, ni tampoco de cuenta de la diferencia de género. cautela la variable del nivel educativo de las madres para
aducirles a esta condición, una mayor o menor condición
Tal como lo cita el documento que nos atañe4, el porcenta- del nivel nutricional de los hijos a cargo. Tanto en zonas
je de retraso en crecimiento de los niños menores de 5 años rurales como urbanas hay retraso en talla en los menores
es de 13.2%, manifiesto en un mayor porcentaje en la pobla- de 5 años y retraso en crecimiento en niños de 5 años
ción de los niveles 1 y 2 del SISBEN, en hijos con madres con a 17 años. (Cuadro No. 1). Es a todas luces imperativo
menor grado de educación y residentes en zonas rurales de emprender esfuerzos para detener dichos procesos en
las regiones Atlántica, Amazonia, Orinoquia y Pacífica. Se se- la población infantil dado el peligro que se presenta de
ñala que en las familias con mayor número de hijos (6 o más) derivar en desnutrición crónica. La encuesta fue realizada
son los últimos hijos los más afectados por el retraso en cre- principalmente en población mayor de cinco años; sólo se
cimiento. El área rural del país casi duplica la prevalencia de presentan algunos indicadores –por lo menos en la infor-
desnutrición global frente al área urbana (4.7% frente a 2.9%) mación disponible– respecto a la población menor de 5
y la población infantil más afectada por este flagelo reside en años. Es necesario preguntarse ¿cuáles son las condiciones
las regiones Atlántica (4.9%), Amazonia y Orinoquia (3.6%)5. de salud y nutrición de dicha población?
En relación con la condición anémica se destaca que Tanto las políticas como los programas de salud y nutrición
uno de cada 6 niños de 1 a 4 años y una de cada 6 mu- deben revisar estos resultados en razón de la asociación
jeres embarazadas de la muestra encuestada presentaron existente entre la anemia, el parasitismo y las deficiencias
anemia y 11% de jóvenes entre 13 a 17 años manifiestan en Vitamina A. A una población en edad escolar que ma-
esta deficiencia; 30.8% de la población total nacional en- nifieste dichas falencias nutricionales, ¿cómo se le puede
cuestada manifestó anemia (Cuadro No. 1–2). Uno de cada exigir una permanencia en la escuela y un rendimiento aca-
4 niños de 1 a 4 años posee deficiencia de Vitamina A; y démico? ¿Se le puede exigir un rendimiento académico a
cerca de 1 de cada 2 niños de 1 a 4 años manifestaron una población universitaria, que en la edad temprana –an-
deficiencias de zinc, “considerado un problema de salud tes de los cinco años- no ha recibido la adecuada atención
pública por la Organización Mundial de la Salud OMS” 8 . en salud y nutrición?
59
Cuadro Nº 2
Indicadores de salud y nutrición por región geográfica
• ACTUALIDAD •
También es paradójico que “Bogotá sigue reportando los mayoría, en la edad escolar”16, puesto que la población que
mayores niveles de desnutrición entre preescolares y la re- ha recibido atención en refrigerios y suplementos nutriciona-
gión más cercana a los niveles de desnutrición reportados les es la de los establecimientos educativos de la Secretaría
es la Caribe”15. (Atlántica). La autora señala que este hecho de Educación Distrital de Bogotá, D.C17.
puede sugerir que “los programas contra la desnutrición en
Bogotá son dirigidos y están teniendo un mayor efecto, en su La seguridad alimentaria se define como la “disponibilidad
suficiente y estable de alimentos, el acceso y el consumo
oportuno y permanente de los mismos en cantidad, calidad
e inocuidad de parte de todas las personas, bajo condiciones
que permitan su adecuada utilización biológica para llevar
una vida saludable y activa”18. Sin embargo, un alto porcentaje
de los hogares de la muestra de zonas rurales y urbanas, de
las distintas regiones manifiestan “inseguridad alimentaria”:
57.5% total nacional, 42.7% zona rural y 38.4% zona urbana.
(Cuadro No. 1 y Cuadro No. 2). Prácticas alimentarias inade-
cuadas, aspectos relacionados con la educación nutricional, ac-
ceso a la canasta de alimentos y las condiciones económicas
son factores condicionantes de la situación nutricional.
Cuadro Nº 3
Prácticas alimentarias diarias19
Se señala, como lo concluye uno de los documentos ana- ambientales y culturales que ejercen gran influencia en el
lizados, que “Es imperioso abordar la problemática de la estado de salud”20.
malnutrición colombiana a partir del enfoque de los deter-
minantes sociales de la salud, entendidos como los deter- Los niveles de bienestar -condiciones generales de vida,
minantes, estructurales y las condiciones de vida que son salud y nutrición– son responsabilidad del Estado el cual
causa de buena parte de las inequidades sanitarias entre debe velar por cumplir los fundamentos constitucionales para
los países o dentro de cada uno de ellos. Se trata en particu- que cada día su población –infantil, estudiantil, en general
lar de: los ingresos y los bienes y servicios; las circunstancias toda la población- logre mejores condiciones de vida; si no se
que rodean la vida de las personas, tales como su acceso resuelven prontamente estos preocupantes factores ya men-
a la atención sanitaria, la escolarización y la educación; sus cionados, muchos esfuerzos que emprendan otros sectores,
condiciones de trabajo y ocio; y el estado de su vivienda como el de la educación, no podrán tener todo el efecto de-
y entorno físico. La expresión determinantes sociales pro- seado. No es posible que Colombia continúe manteniendo
puesta por la Organización Mundial de la Salud OMS resu- uno de los mayores niveles de desigualdad entre su población
me el conjunto de factores sociales políticos, económicos, en el entorno de los países de América Latina.
15 Acosta Ordóñez, Karina. (2012) La desnutrición en los primeros años de vida: un análisis regional para Colombia. Documentos de trabajo sobre
Economía Regional N. 16 Banco de la República. Enero. ISSN 1692 3715 http//www.banrep.gov.co/documentos/publicaciones/regional/docu-
mento/DTSER-160.pdf. Consultado febrero 17, 5 pm.
16 Acosta, loc. cit.
17 Álvarez, A. et al. (2008) Lo que antes era un privilegio hoy es un derecho. Plan de desarrollo de la administración de L.E Garzón. Alcaldía Mayor
de Bogotá, IDEP.
18 CONPES Social 113 de 2007. http://www.dnp.gov.co/Programas/Educaci%C3%B3nyculturasaludempleoypobreza/Pol%C3%ADticasSocialesTra
nsversales/SeguridadAlimentariayNutricional.aspx. Consultado Febrero 17 5 pm.
19 Elaborado a partir de ENSIN (2010), Pág. 13-15. Elaborado M.E. Romero. (2012).
20 ENSIN, (2010) OP. CIT Pág. 22.
• ACTUALIDAD •
E l pasado 20 de Febrero de 2012 en las instalaciones de COMPENSAR, y por convocatoria de FECODE, se reu-
nieron veintinueve organizaciones representantes del magisterio de educación básica y media, del profesorado
universitario, delegados de la Mesa Ampliada Nacional Estudiantil, MANE, representantes de los trabajadores de la
educación pública, directivos docentes, mujeres y voceros de organizaciones no gubernamentales interesadas en
la educación.
Fue palpable el interés y entusiasmo que despertó la propuesta, consistente en la modificación de varios artículos
de la Constitución Nacional para hacer de la Educación un Derecho Fundamental, financiado por el Estado, desde el
preescolar hasta la educación superior; de igual manera, se propone establecer la Carrera Administrativa Docente
Especial, que acabe con la tercerización de la actividad docente. Al respecto, se recogen importantes aportes para
hacer realidad esta tarea titánica de gran contenido político, que colocará barreras al tratamiento de la educación
como mercancía, como sucede actualmente en el país.
61
• ACTUALIDAD •
62
El Referendo propuesto con entusiasmo tiene como propósito la modificación de varios artículos de la Constitución Nacional para hacer de la Edu-
cación un Derecho Fundamental, financiado por el Estado, desde el preescolar hasta la educación superior. De igual manera, propone establecer la
Carrera Administrativa Docente Especial, que acabe con la tercerización de la actividad docente.
El estudiantado fue particularmente receptivo, ya que comprendieron su estrecha ligazón con las luchas que ade-
lantan, los directivos docentes expresan el compromiso institucional, los trabajadores del sector hacen un llamado
a la unidad como garantía para avanzar y las organizaciones no gubernamentales muestran toda su disposición de
acompañar el proceso; algunas intervenciones ponen de presente, que esta iniciativa recorre nuestro continente de
manera que tendrá también el apoyo internacional. El Senador del Polo Luís Carlos Avellaneda presentó su mirada
relacionada con el Proyecto de Acto Legislativo que está gestionando en el Congreso.
Aclaradas las condiciones legales dentro de las cuales debe tramitarse el Referendo y las exigencias sobre el
número de apoyos y de votos, se concluyó que este representa un objetivo de largo aliento que requiere trabajo
de varios equipos y financiación adecuada de carácter nacional, acompañado de grandes movilizaciones y de con-
tacto permanente con el Congreso de la República. En este sentido, el Presidente de la Federación Colombiana de
Educadores FECODE, resaltó la importancia de las organizaciones participantes, sustentó la propuesta que hasta
el momento se ha trabajado y llamó a los asistentes a asumir con entusiasmo este reto que tendrá repercusiones
históricas a nivel nacional e internacional.
Finalmente, se acordó que el Comité de Impulso está integrado por un representante de las organizaciones par-
ticipantes, ampliado con las demás entidades convocadas que se excusaron de asistir y con este Comité amplio, se
decidirán las personas integrantes del Comité Promotor.
• ACTUALIDAD •
Internacional de la Educación
Oficina Regional para América Latina
www.ei-ie-al.org
63
• ACTUALIDAD •
Internacional de la Educación
Oficina Regional para América Latina
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64
65
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
1 Licenciado en Humanidades, Español y lenguas extranjeras de la Universidad Pedagógica Nacional y Magíster en Educación de la misma uni-
versidad. Profesor del Liceo de Cervantes y la Universidad Pedagógica Nacional. Ha desarrollado investigaciones sobre evaluación educativa,
enseñanza del lenguaje y la literatura. También se desempeña en el ámbito de la traducción, la creación y la crítica literarias. Correo electrónico:
sneider201@hotmail.com.
2 Torres, Carlos Alberto. Grandezas y miserias de la educación latinoamericana en el siglo XXI. En: Torres, Carlos Alberto (compilador) Paulo
Freire y la agenda de la educación latinoamericana en el siglo XXI. Buenos Aires, CLASCO.
3 Gobierno lanza programa para contrarrestar analfabetismo, que es del 7.6% en el país. Disponible en: http://www.colombiaaprende.edu.
co/html/home/1592/article-73557.html Consultado el 10 de noviembre de 2009.
4 ¿Qué hace Colombia frente a este problema social? Disponible en: http://www.cmi. com.co/?ir=noticia¬a=34159&seccion=8 Consulta-
do el 10 de noviembre de 2009.
Consecuencia palpable de estos procesos son los bajos En este nuevo orden, la “inasibilidad” del concepto de
niveles de comprensión y argumentación de los educandos calidad lo convierte en un fenómeno fácilmente demagógi-
pues, más allá de descifrar un código escrito o producirlo co12, amparado además por la acepción positiva del término
como respuesta comunicativa a una situación inmediata, (buena calidad, superioridad, excelencia)13 y por su repetición
les resulta difícil otorgar sentidos distintos a los explícitos constante como objetivo loable de cualquier acción educativa,
en los textos, involucrar el contexto y su entramado dis- especialmente en términos institucionales. En alfabetización,
cursivo, lo cual es caracterizado por Ferreiro7 como iletris- su afán cuantificador con pretensión de objetividad, la equipa-
mo, esa práctica que no supera la decodificación textual ración de productos educativos a cualquier otro tipo de mer-
por parte de personas alfabetizadas. Esto demuestra que cancía, su obsesión por la eficiencia, la creación de patrones,
5 Venegas, María Clemencia. Módulo sobre hábitos de lectura y consumo de libros: una mirada desde la escuela. En: Rey, Germán y otros (2001)
Hábitos de lectura y consumo de libros en Colombia. Bogotá, FUNDALECTURA. Pág. 89.
6 Lerner, Delia (2001) Leer y escribir en la escuela: lo real, lo posible y lo necesario. México, Fondo de Cultura Económica.
7 Ferreiro, Emilia (2001) Pasado y presente de los verbos leer y escribir. México, Fondo de Cultura Económica.
8 Giroux, Henry A. (1997) Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagogía crítica del aprendizaje. Barcelona, Paidós.
9 Teberosky, Ana (2003) Propuesta constructivista para aprender a leer y a escribir. Barcelona, Vincens Vives.
10 McLaren, Peter (1998) Pedagogía, identidad y poder: los educadores frente al multiculturalismo. Rosario: Homo Sapiens.
11 Freire, Paulo. (2006) Pedagogía de la autonomía. Saberes necesarios para la práctica educativa. México: Siglo XXI.
12 Santos Guerra, Miguel Ángel (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
13 Niño Zafra, L.S. (2002) Dimensiones de la evaluación de la calidad de la educación. En: Opciones pedagógicas. Vol.25 U.D. Francisco José
de Caldas.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
indicadores y estándares aplicables en cualquier contexto y la privado, entre otros, y de determinados aspectos de los sis-
competitividad extrema14, generan una ruptura entre el cum- temas burocráticos en cuanto a su organización, gerencia y
plimiento de los índices de alfabetizados demandados por administración. Esta situación va en detrimento de los ideales
estos organismos y las prácticas de formación de lectores y formadores de un hombre integral, reducidos a dos funciones
escritores en sentido amplio, que además del reconocimiento escolares: la inserción de sujetos a la sociedad como fuerza
y la apropiación del código escrito, desarrollen sus potenciali- laboral y consumidores acríticos, así como foco de rentabi-
dades pragmáticas y discursivas. lidad económica a través de la reducción del gasto público.
Neoliberalismo, evaluación y calidad: la exclusión Los centros escolares se han convertido en “indicador
de los bienes simbólicos de competitividad”18 de los sistemas económicos lo cual
conlleva prácticas como la gestión empresarial que bus-
En su propuesta sobre una pedagogía de la autonomía, ca, ya no la formación del ciudadano, sino la satisfacción
Freire15 llama la atención sobre la función esencialmente del cliente o del consumidor. Así se configura el concepto
formadora de la escuela, cuyo soporte fundamental es la de calidad educativa como “grito de batalla del discurso”19
concepción del carácter humano que reside en el ejerci- que se pone en ejecución y se institucionaliza a través de
cio educativo. Este planteamiento es el andamiaje para las políticas educativas en general y, específicamente, en
establecer una crítica sobre los procesos de enseñanza- las políticas evaluativas. Ellas permiten centrar y orientar
aprendizaje direccionados desde paradigmas distintos al lo planteado en las primeras, poniéndolas a prueba20. Ade-
pedagógico, de orden administrativo, político o económico. más, proporcionan la información necesaria para intervenir
La educación es una interacción entre humanos, que habla el sistema a través de la identificación de “crisis educativas”
de lo humano, que propende por la humanización. Por lo o en la búsqueda y promoción de la calidad.
tanto, su carácter formador no puede ser desplazado por
otros elementos contextuales que suplanten su esencia. La educación basada en el sistema económico ha en-
contrado como su mayor égida la evaluación para legitimar
Sin embargo, Niño Zafra16 da cuenta de esta tergiver- su accionar y, prescindiendo de los aportes de los peda-
68 sación educativa a través de concepciones como los test gogos, ha generado, “todo un arsenal lingüístico” 21 que
de rendimiento desde la psicometría, la Teoría de la Ad- soporta su propuesta en la búsqueda de la calidad educa-
ministración Científica del trabajo de Taylor, los objetivos tiva. Paradójicamente, tal concepto de calidad poco o nada
conductuales de Bloom o las tecnologías educativas. En la tiene que ver con los procesos de formación humana (con
actualidad neoliberal, la educación ha heredado prácticas la educación) sino que promueve “el control burocrático,
que son justificadas por el discurso de la calidad e instru- aunque se presupone académico, del Estado hacia las ins-
mentalizadas por la evaluación entendida en términos de tituciones de educación” 22, los buenos desempeños en la
calificación, a través de la cual los individuos son tasados administración y la gestión en el ámbito transnacional, ade-
según su rendimiento y normalizados de acuerdo con cri- más de buscar sanear las finanzas de los gobiernos, gene-
terios estandarizados que fomentan un currículo y pensa- rar mano de obra barata y fomentar prácticas de exclusión y
miento únicos. alienación de sujetos dentro de las dinámicas neoliberales
de estandarización, privatización y consumo.
La ideología neoliberal ha generado una crisis de identi-
dad del ámbito escolar17, el cual se ha tornado en un híbrido Dentro de esta reducción de la enseñanza a las compe-
de aspectos propios del sector financiero como el servicio tencias útiles para las empresas, la alfabetización entendida
a la clientela, la competitividad, la eficacia, el financiamiento como decodificación cobra valor como práctica que dismi-
14 Santos Guerra, Miguel Ángel. (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
15 Freire, Paulo. (2006) Pedagogía de la autonomía. Saberes necesarios para la práctica educativa. México: Siglo XXI.
16 Niño Zafra, Libia Stella (2006) El sujeto en la evaluación educativa en la sociedad globalizada. En: Opciones pedagógicas. No. 32-33. U.D.
Francisco José de Caldas.
17 Al respecto se puede consultar: Laval, Christian (2004) La escuela no es una empresa: el ataque neoliberal a la enseñanza pública. Bar-
celona, Paidós y Jodar, Francisco. Alteraciones pedagógicas. Barcelona, Laertes.
18 Laval, C. Op. Cit.
19 Husen, citado por Santos Guerra, Miguel Ángel (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
20 Suárez Ruiz, Pedro Alejandro (2007) Incidencia de la actual política evaluativa en instituciones de educación básica del país. Bogotá,
Universidad Pedagógica Nacional.
21 Díaz Borbón, Rafael (2007) Políticas, evaluación y metaevaluación en la reforma neoliberal: connivencia o acción transformadora. En: Niño
Zafra, Libia (Comp.) Políticas educativas. Evaluación y metaevaluación. Bogotá, Universidad Pedagógica Nacional.
22 Díaz Barriga, Ángel (2000) Evaluar lo académico. Organismos internacionales, nuevas reglas y desafíos. En: Pacheco, Teresa y Díaz Barri-
ga, Ángel. Evaluación académica. México, Fondo de Cultura Económica. Pág. 17.
nuye el gasto público, responde a los organismos interna- cional (como bien lo propone el Decreto 1290 de 2009 y
cionales y sus postulaciones frente a la calidad educativa sus ámbitos de evaluación, o la Ley General de Educación
(inclusión y alfabetización para todos los estudiantes) y, asi- y su recurrencia en la calidad como objetivo del sistema 69
mismo, forja un individuo que, incapaz de leer los signos educativo) con esa alfabetización técnica en cuyo seno se
más allá de su realidad inmediata, fácilmente se deja absor- desvirtúan las contingencias del hecho literario.
ber por el mismo sistema configurado por el consumo y el
juego oferta-demanda de la producción. En este contexto, Irónicamente, las políticas educativas referentes a la lite-
vale más un iletrado o analfabeta funcional que responda ratura parecen el espacio en el que se reconoce la importan-
pruebas estandarizadas o logre decodificar los instructivos cia de la recepción y creación literarias de acuerdo con los
referentes a su labor técnica, que un lector-escritor crítico últimos acercamientos teóricos e investigaciones, aunque
que, profundizando en el entramado discursivo y la ideología esta normatividad, su argumentación y loables propósitos
neoliberal subyacente, cuestione las prácticas de evaluación formativos contradicen las prácticas reales sujetas a las de-
emergentes o la instrucción técnica para la contratación de mandas neoliberales y su apuesta por la calidad. Por ejem-
mano de obra barata. plo, en los Lineamientos curriculares de Lengua Castellana
se concibe el acto de escribir, no sólo como una codificación
Contradicciones de las políticas educativas de significados a través de reglas lingüísticas, sino como pro-
en torno a la educación literaria ceso social e individual de construcción de mundo, en el
cual se ponen en juego saberes, competencias e intereses
El valor de la literatura como bien simbólico, estético y en un contexto socio-cultural y pragmático determinado23.
cultural que contribuye a la formación humana desde la No obstante, las prácticas difícilmente se centran en esta
exploración y el uso divergente del lenguaje, también se concepción de la literatura como creadora de realidades
margina de estas prácticas lingüísticas que optan por la y, por el contrario, asumen la enseñanza y calificación de
apropiación de la lengua en cuanto técnica para responder aspectos lingüísticos en la estructura superficial del texto24;
unas pruebas estandarizadas que circunscriben las posibi- esa técnica que, según el MEN y con la mención de autoras
lidades de sentido a una respuesta correcta. Este contexto como Ferreiro, Teberosky, Tolchinsky y Villegas, sólo encuen-
une tales directrices evaluativas desde el estándar interna- tran su lugar en la producción de sentido.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
27 Ravela, Pedro (2009) Evaluaciones externas, evaluación en el aula y calidad educativa en América latina (conferencia internacional) En: Desa-
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28 Savater, Fernando (2002) Instrucciones para olvidar al Quijote. Barcelona, Taurus.
29 Ministerio de Educación MEN, (2003) Estándares del Lenguaje, la lengua, la literatura y otros sistemas simbólicos.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
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múltiples sentidos y mundos posibles desde la realidad con- Homo Sapiens.
textual al tiempo que se exigen y miden resultados predeci- MINISTERIO DE EDUCACIÓN MEN (1998) Lineamientos
bles, estandarizados, circunscritos a unas cuantas respuestas curriculares de Lengua Castellana.
correctas? ¿Cómo hacer de lo literario un eje de formación en
lenguaje si su exploración discursiva va en detrimento de la (2003) Estándares del Lenguaje, la len-
lengua normativa que se exige, o si sus aportes a la formación gua, la literatura y otros sistemas simbólicos.
atañen a procesos inconmensurables como la imaginación o Niño Zafra, Libia Stella (2006) El sujeto en la evaluación
la creatividad, o, en últimas, si su indagación por lo huma- educativa en la sociedad globalizada. En: Opcio-
no no se constriñe a unas competencias básicas del mundo nes pedagógicas. No. 32-33. U.D. Francisco José de
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adecuado del código estándar?
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Lerner, Delia (2001) Leer y escribir en la escuela: lo real, escuela. En: Rey, Germán y otros (2001) Hábitos de
lo posible y lo necesario. México: Fondo de Cultura lectura y consumo de libros en Colombia. Bogotá,
Económica. FUNDALECTURA.
“Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses,
yo creo que cada quien lo construye con su propio esfuerzo y dedicación”.
73
Eduardo Galeano
1 Profesores del Área de Ciencias sociales. IED Antonio Nariño, Bogotá, D.C. Correo electrónico: caito7a@hotmail.com.
Evidencias
Nivel de participación
Jueves 23 de Septiembre Lunes 27 de Septiembre Martes 28 de Septiembre Miércoles 29 de Septiembre Jueves 30 de Septiembre
Primer Modulo: 603-604 Primer Modulo:702-704 Primer Modulo: Undécimos Primer Modulo: 902-903 Primer Modulo: 801-803
Responsable: Stella Agúdelo Responsable: Yolanda Contreras Responsable: Claudia Peña Responsable: Alejandra Chacón Responsable: Carlos Rodríguez
Me quiero y Respeto Me quiero y Respeto El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones Identidad Y libre Desarrollo
Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida
La Alegría de Aprender La Guerra del Coltan Libertad de prensa Machismo- Feminismo El Agua Un Derecho
Fundación Libro de Vida Dilan Marín Dra. Ángela Marcela Cárdenas Luisa Aquello Juan González 803
Jasón Ceballos 1101 Paola López 901
Crezco cada día como persona DDHH pagina Web Violencia La Guerra del Coltan El Derecho a la Libertad
Fundación Libro de Vida Camila Galindo Dra. Liliana Burbano Dilan Marín Brayan Cortés 801
Felipe Barreto 1102 Abogada Fundar Jasón Ceballos 1101
Justicia de Genero Prostitución en Colombia El Hombre en tres Dimensiones Justicia de Genero Indicadores de Pobreza
Katherine de la Hoz Alejandra Amado 1101 Fundación Libro de Vida Katherine de la Hoz Daniela y Víctor González 803
Jonathan Corredor 1102 Jonathan Corredor 1102
Segundo Modulo: 601-602 Segundo Modulo: 1002-1003-1004 Segundo Modulo: 802-1001 Segundo Modulo:901-904 Segundo Modulo: 701-703
Responsable: Stella Agúdelo Responsable: Néstor Cangrejo Responsable: Carlos Rodríguez Responsable: Alejandra Chacón Responsable: Yolanda Contreras
Me quiero y Respeto El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones Identidad Y libre Desarrollo
Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida.
La Alegría de Aprender Libertad y Comunicación Libertad versus Drogadicción Violencia de Genero Educación y Desigualdad Social.
Fundación Libro de Vida Luis Sebastián Ortiz. Ángela Muñoz 802 Vanessa Hernández Luis Sebastián Ortiz 1003
Cristián Parra 1102 Grupo Opción de Vida
Crezco cada día como persona Vender o Regalar los Recursos Desarrollo Humano Sostenible Desempleo La Guerra del Coltan
Fundación Libro de Vida Juan David Chaparro: 1102 Erika Pimentel 1001 Sebastián Betancur Dilan Marín
Andrés Guerrero 1003 Jasón Ceballos 1101
DDHH pagina Web Desarrollo Humano Sostenible Convivencia Experiencia de Vida DDHH Prostitución en Colombia
Camila Galindo Jorge Castrillón 1004 José Joaquín Ruíz Jorge Castillo 904 Alejandra Amado 1101
Felipe Barreto 1102 Coordinador Jornada Tarde
76
L a Revista Educación y Cultura es una publicación de la Federación Colombiana de Educadores FECODE, que desde el año
1984 viene divulgando aspectos importantes relacionados con la política pública en educación, investigaciones e innovaciones
educativas, temas de actualidad y de gran interés para los educadores, docentes e investigadores en educación. Además, la
revista es baluarte de las conquistas para el reconocimiento de la labor de los maestros colombianos y representa un faro de
creatividad y de discusión del Movimiento Pedagógico Colombiano, ampliamente reconocido en el exterior. Con cuatro números
al año, la revista llegó a sus 25 años de existencia en el año 2009, y, en el año 2011, publica su edición número 90.
Castaño, Inés Elvira, Blanco Catalina y Pinto Martha. Educa- Mi tallercito: Jardín Infantil. Ed. no. 13, Pág. 65, Dic., 1987.
ción preescolar: evolución, retos y alternativas. Ed. No.
12, Pág. 15. 20, Jun., 1987. Mondragón, Hugo. Derechos y necesidades fundamenta-
les de los niños y los adolescentes. Ed. No. 9, Pág. 55
Declaración de los derechos del Niño. Ed. No. 8, Pág. 62-
– 59, Sep. 1986.
62, Jul. 1986.
Martínez, Amparo. Educación de la infancia, según Pesta- Muñoz, José y Julia Inés Landazábal. Acerca de la educa-
lozzi. Ed. No. 18, Pág. 44-45, Jul. 1989. ción de la infancia. Ed. No. 2, Pág. 71-76. Sep. 1984.
Rubiano, Félix y Forero Alfonso. Licenciatura en primeria de labras clave: Educación infantil. Juego infantil. Apren-
la Universidad Distrital: formación integral y pedagógi- dizaje escolar
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Acosta Ayerbe, Alejandro. La primera infancia exige un só-
Zeta Periodismo investigativo. Los niños tienen la palabra. lido consenso nacional para promover la Educación
Ed. No. 3, Pág. 26-30, Marzo de 1985. Inicial. Ed. No. 69, Pág. 65- 72. Sep. de 2005.. aaacin-
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La educación preescolar: posición de FECODE Ed. No. 28 cia. Políticas públicas.
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78 Forero, María Victoria. La derogatoria del Código del Me- tercambio de conocimiento para la incidencia en polí-
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Servicios parafiscales. Política de infancia. infancia
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cl Palabras clave: Acceso de los niños a la educación. Pedagógica por la primera infancia. Infancia y políticas
Permanencia y retención. públicas.
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clave: Respeto a los derechos de la infancia. Exclusión niño preescolar. Currículo preescolar. Pedagogía y ta-
escolar. Pedagogía y política. lento
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san a la enseñanza en la Primera Infancia. Ed. No 69, tianaromerorey@hotmail.com. Palabras clave: Primera
Página 73. Sep. de 2005. psarle@speedy.com.ar. Pa- infancia. Educación inicial.
• ARTE Y CULTURA •
El carnaval de Barranquilla,
constructor de identidad
Hugo Morales 1, Astrid Marina Coronado Pérez 2
• ARTE Y CULTURA •
• ARTE Y CULTURA •
carnaval durante 18 años y liderada por el maestro Álvaro superando todas las dificultades, viene realizando un pro-
Bustillo, ha legitimado su presencia en estas magnas fies- ceso de formación, cátedra que después de varias versio-
tas plenamente reconocido por las autoridades educativas nes fue institucionalizada por la Secretaría de Educación
y los entes organizadores de las actividades del carnaval, Distrital bajo la administración del Licenciado Jorge De Las
quienes valoran el aporte académico y cultural que realizan Salas Sarmiento, según Resolución Nº 001522 del 27 de
no solo esta institución sino todas las presentes en una de Septiembre de 2007. La falta de un apoyo real ha impedi-
las fiestas más importantes del país, que vienen haciéndo- do valorar justamente la importancia de dicho proceso del
lo sin apoyo gubernamental, situación que debería cam- que se han beneficiado cerca de 300 docentes, los cuales
biar si los entes encargados de la realización de este gran adquieren el compromiso de llevar a sus aulas los conoci-
suceso educativo-cultural denominado carnaval de Barran- mientos adquiridos.
quilla, destinaran recursos para garantizar la presencia de
los planteles educativos, que generación tras generación Sin duda alguna el desarrollo de la Cátedra del Carnaval
garantizan que no muera la tradición. se enmarca dentro de las exigencias de la UNESCO para
que el Carnaval mantenga la condición de patrimonio,
Los entes gubernamentales, tanto del sector educativo razón válida para garantizar su funcionamiento y porque
como del Cultural no abanderan ningún proceso de difusión además es el espacio que ha permitido que los docentes
y mucho menos de formación; trabajan en forma desarticu- comiencen a mirar el carnaval como sinónimo de cultura
lada lo que demuestra la poca importancia que le dan en las y educación y por eso el centro educativo se convierte en
instituciones educativas donde sobresale el aspecto lúdico y escenario natural para su vivencia e investigación, donde el
se soslaya lo cultural de nuestras fiestas y esto solamente en docente a partir de un trabajo interdisciplinar pueda orga-
los días previos al carnaval. Desafortunadamente no existe nizar el grupo de danzas, el grupo folclórico y la microem-
una corriente educativa constante, no hay proceso durante presa encargada de elaborar los vestidos de las danzas,
todo el año y aún más grave: lo extranjero se ha ido pose- disfraces y accesorios requeridos por la institución y la co-
sionando en algunas instituciones educativas, tanto las que munidad para participar activamente en esta gran fiesta,
participan en los grandes desfiles como las que organizan con el compromiso de liderar las actividades artistico-cul-
82 internamente el carnaval en sus instalaciones y en calles ale- turales al interior de la Institución Educativa y que en orden
dañas, y en casos extremos coronándolo con enormes des- preferencial la actividad más importante sea la del Carnaval
ordenes que nada tienen que ver con el auténtico Carnaval. para que el grito ¡quien lo vive es quien lo goza! e impreg-
ne de educación y cultura y llegue a ese colectivo histórico
El paulatino pero sostenido proceso de extranjerización que año tras año saca a relucir el orgullo de Barranquillero
de las manifestaciones dancísticas que confluyen en los di- y Caribeño inmerso en el deleite que produce esta fiesta
versos espacios del Carnaval de Barranquilla pone en serio sin igual en el país y el mundo.
peligro el aspecto primordial por el que fue declarado por
parte de la UNESCO como OBRA MAESTRA DEL PATRIMO- Mantener la condición de Patrimonio Oral e Inmaterial
NIO ORAL E INTANGIBLE DE LA HUMANIDAD. de la Humanidad del Carnaval de Barranquilla exige sal-
vaguardar sus expresiones tradicionales para propiciar el
La ausencia de una estrategia clara en el sentido de desarrollo de una identidad cultural, un espíritu axiológico,
implementar la CÁTEDRA DEL CARNAVAL en los diversos cívico y pedagógico promoviendo entre la niñez y la juven-
estamentos educativos y ciudadanos no ha permitido que tud de las instituciones educativas el valor de nuestras tra-
se conozca por parte del común de las gentes el origen y diciones por ser éstas las bases de identidad del carnaval.
arraigo profundamente CULTURAL - FOLCLÓRICO de nues- Por esta razón regresa EL CARNAVAL ESTUDIANTIL y este
tras fiestas llevando las de ganar la idea de un espacio año 2012 los niños y jóvenes nuevamente tendrán su espa-
para el goce y el desenfreno, soslayando la función que cio lúdico y formativo en el que se enfatiza la importancia
como constructor de identidad y dinamizador del sentido de la tradición con sus danzas, su música, sus letanías y sus
de pertenencia debe tener en las nuevas generaciones; por comedias. Las Instituciones Educativas tienen las puertas
eso es en las aulas donde debe iniciarse ese proceso de abiertas para que sus estudiantes gocen culturalmente el
apropiación y defensa de nuestro Carnaval a partir del co- Carnaval y al mismo tiempo se acerquen a su historia y
nocimiento de sus orígenes y desarrollo. comprendan su importancia como elemento formador de
Identidad por excelencia y sentirse realmente orgullosos
Al respecto una solitaria voz se alza en medio del am- de hacer parte de esa maravilla cultural declarada por la
biente barranquillero promoviendo la CÁTEDRA DEL CAR- UNESCO OBRA MAESTRA DEL PATRIMONIO ORAL E INMA-
NAVAL, es la del gestor cultural Cesar Martínez Lara quien, TERIAL DE LA HUMANIDAD.
• CONTENIDO •
Revista trimestral del Centro de Estudios Por el país próspero y justo que soñamos:
e Investigaciones Docentes CEID de la Federación al alcance de los niños.
Colombiana de Educadores FECODE
Gabriel García Márquez
Diciembre de 2011 No. 93 • Valor $12.000
C
DIRECTOR
Senén Niño Avendaño
uán distante y extraño parece este justo sueño con el que cierra
CONSEJO EDITORIAL
Luis Eduardo Varela, Luis Grubert Ibarra, John Ávila, Víctor Gaona, Gabriel García Márquez la hermosa proclama en el “Informe de la Mi-
Jairo Arenas, José Hidalgo Restrepo, Marcela Palomino, José Fernando sión de Sabios1 con respecto a la tremenda realidad que hoy vive la
Ocampo, Alfonso Tamayo
educación pública en Colombia.
EDITORA
María Eugenia Romero
A pocos días de presentado el informe se inició en el país la más
FOTOGRAFÍAS grande contrarreforma educativa de que se tenga conocimiento: asig-
Jesús Alberto Motta Marroquín
Diva Nelly Mejía - La Bebeteca,
nación per cápita por niño, desaparición de cerca de 30.000 institu-
Carvanal de Barranquilla - Astrid Marina Coronado ciones educativas por la vía de la integración, drástica reducción de
Ied Antonio Nariño la nómina de docentes directivos, desmantelamiento de la planta de
Fecode
personal administrativo, incremento de la jornada laboral docente, au-
CARICATURAS mento del número de estudiantes por curso, recorte de los recursos
Kekar (César Almeida)
para la educación mediante dos reformas constitucionales, expedición
DIAGRAMACIÓN de un arbitrario Estatuto Docente que desprofesionalizó al magisterio,
Andrea Salazar y Sandra González
www.diagramacion.com privatización de la educación pública mediante la intermediación de
DISEÑO DE PORTADA los recursos estatales educativos, establecimiento de la educación con
4 Andrea Salazar y Sandra González ánimo de lucro desde el Preescolar hasta la Educación Media, ataques
IMPRESIÓN a la autonomía y a la democracia de las instituciones educativas y lo
Prensa Moderna (Cali - Colombia) último, aprobación de un Plan Nacional de Desarrollo que despoja a
DISTRIBUCIÓN Y SUSCRIPCIONES los niños de 3 y 4 años del derecho fundamental a la educación.
Calle 35 Nº 14 - 55
Teléfonos: 245 3925 Ext. 104
Línea Gratuíta: 01-8000-12-2228 La Ley 1450 del 16 de junio de 2011 debería llamarse: PLAN NA-
Celular: 315 529 9515 CIONAL DE DESARROLLO: PROSPERIDAD PARA TODOS LOS QUE NO
Telefax: 232 7418
SON POBRES, y debe denominarse así porque es monstruosa la forma
Bogotá, D.C., Colombia
como la ley en mención trata a la Educación Preescolar de los sectores
www.fecode.edu.co más desfavorecidos.
correo electrónico: revedcul@fecode.edu.co
• EDITORIAL •
El derecho a la educación
preescolar de tres grados
Para poder garantizar los derechos humanos fundamentales de niños y niñas se requiere
con urgencia de una política más seria, que contemple planes para propiciar transforma-
ciones en la sociedad y en el seno de las familias, de modo que se generen condiciones
materiales de existencia que le permitan a la niñez colombiana vivir y crecer con dignidad
y justicia, y en ello, la educación tiene un peso mas importante que el lugar secundario y
accesorio que se le ha asignado en la llamada PAIPI (Política de Atención Integral de la
Primera Infancia).
No podemos ahorrar esfuerzos en la lucha por la defensa del derecho a la educación para toda la infancia y la juventud, incluyendo el preescolar de
tres grados, la educación básica, la media y la educación superior.
De la educación preescolar
a la educación inicial Graciela Fandiño C.1
Referirse a la Educación Inicial significa buscar un cambio cultural que lleve a re-concep-
tualizar la noción de Educación Preescolar con su sentido preparatorio para la educación
primaria, para pasar a una educación centrada en el afianzamiento del desarrollo, en donde
el juego, el arte, la literatura y la exploración del medio, sean los pilares fundamentales, en
tanto son las actividades primordiales a través de las cuales los niños y niñas de cero a 5
años se relacionan con el mundo.
1 Profesora del programa de Educación Infantil de la Universidad Pedagógica Nacional. Licenciada en Educación Primaria, Universidad de San
Buenaventura. Doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación. Programa de Formación del profesorado en la didáctica y Organización Escolar
de las áreas del currículum. UNED. Madrid. Coordina el grupo de investigación “Pensamiento y Creencias de los profesores de Educación Infan-
til”. Correo Electrónico: gmfandiño@pedagogica.edu.co.
2 La educación formal a que se refiere la presente Ley, se organizará en tres (3) niveles: a) El preescolar que comprenderá mínimo un grado obli-
gatorio. Ley 115 de 1994
3 Decreto 1860 ARTICULO 6o. ORGANIZACION DE LA EDUCACION PREESCOLAR. La educación preescolar de que trata el artículo 15 de la Ley
115 de 1994, se ofrece a los niños antes de iniciar la educación básica y está compuesta por tres grados, de los cuales los dos primeros grados
constituyen una etapa previa a la escolarización obligatoria y el tercero es el grado obligatorio.
4 “Artículo 29. Derecho al desarrollo integral en la primera infancia. La primera infancia es la etapa del ciclo vital en la que se establecen las
bases para el desarrollo cognitivo, emocional y social del ser humano. Comprende la franja poblacional que va de los cero (0) a los seis (6)
años de edad. Desde la primera infancia, los niños y las niñas son sujetos titulares de los derechos reconocidos en los tratados internacionales,
en la Constitución Política y en este Código. Son derechos impostergables de la primera infancia, la atención en salud y nutrición, el esquema
completo de vacunación, la protección contra los peligros físicos y la educación inicial. En el primer mes de vida deberá garantizarse el registro
civil de todos los niños y las niñas.”
5 El Departamento Administrativo de Bienestar Social (DABS), se reestructuró en 2007 y pasó a llamarse Secretaria Distrital de Integración Social
de Bogotá SDIS.
6 Sanchidrian, Carmen, “La educación Infantil en Gran Bretaña. Modelos y debates” en Sanchidrian, Carmen y Ruiz Berrío Julio, “Historia y pers-
pectiva Actual de la educación Infantil”, GRAO, Barcelona, 2010, pp. 47-67.
7 Sanchidrian, Carmen, (2010). “La educación maternal francesa. La construcción de un modelo propio. en Sanchidrian, Carmen y RUIZ Berrio
Julio, “Historia y perspectiva Actual de la educación Infantil, GRAO, Barcelona, págs. 69-88.
Aunque no es posible ser tan simplista contribuyen a entender nuestros debates actuales, pues
forman parte de nuestra historia por las influencias que de
como para afirmar que “todas” allí se han tenido. Los “asilos”, por ejemplo, fueron nuestras
las instituciones a la que asisten primeras instituciones de atención a los niños abandonados
y de ellos, se podría decir, nacen nuestras instituciones del
los infantes de sectores populares
servicio social8. Pero, a su vez, las ideas de Frobel, Montes-
son asistencialistas y que “todas” sori y en general de la Escuela Nueva, llegaron a Colombia al
aquellas del sector privado que comienzo del siglo XX, por lo que no es fácil explicarse por
qué a pesar de esas influencias, el peso de lo “asistencial”
atienden a la población de clases haya sido tan fuerte, que aún hoy se mantiene, o que nues-
media y alta, hacen énfasis en la tra educación de la primera infancia esté tan centrada en la
preparación para la primaria e incluso mirada preparatoria para la escolaridad, algo que valdría la
pena investigar 9.
la primarización; y que las instituciones
cuyo énfasis es el potenciamiento Estas tres miradas sobre la escuela para la primera infan-
cia, las encontramos “actualizadas” hoy en nuestro país, pero
del desarrollo que frecuentan ciertos enmarcadas dentro de la gran dicotomía de nuestra educa-
sectores profesionales, cercanos a los ción. Por una parte, la educación para los sectores populares
temas educativos, son privadas, pues financiada por el Estado y ofrecida por instituciones públicas
y privadas, separada casi totalmente de la educación para los
existen varios casos que negarían sectores medios y altos financiada por los padres de familia
esta afirmación, lo que quiere decir y ofrecida por instituciones privadas. Es así como persiste, de
un lado, la mirada asistencialista a pesar de grandes esfuerzos
que estas miradas atraviesan a las
realizados por algunas administraciones de incorporar con el
instituciones que atienden a los distintos peso debido el componente pedagógico, la “primarización”,
10
sectores sociales. Sin embargo, que de cierta manera, cambió a una preparación para lo que
se requiere en la educación primaria y que es, tal vez, el ma-
el porcentaje de estas excepciones yor objetivo de la educación en estas edades10, Y por último,
lleva a afirmar que nuestra educación la educación acorde con las características del niño, que es
la que se comparte en el Lineamiento Pedagógico Curricular
de la primera infancia es la etapa
del Distrito, y que se conceptualiza como: “Potenciamiento
educativa más inequitativa, de todo del desarrollo”, que aunque posee cierta tradición, todavía no
el sistema educativo. alcanza la generalización que se quisiera desde muchas ins-
tancias, entre ellas la universidad.
8 Cerda H. (1996). Educación preescolar. Historia, legislación, currículo y realidad socioeconómica. Magisterio, Bogotá
9 Vale la pena aprovechar este espacio, para invitar a los maestros que estudian maestrías y doctorados a realizar investigaciones sobre esta
etapa educativa sobre la cual hemos construido muy poco saber.
10 Aunque con cierta preocupación se observa nuevamente, una tendencia a la “primarización”, o sea bajar los contenidos de la primaria a este
nivel. Por ejemplo: la idea de enseñar las vocales a los tres años, es hoy muy generalizada a pesar de conocerse que en un país como Finlandia,
que tiene los mejores resultados en las pruebas internacionales de lenguaje, los niños aprender a leer y escribir a los 7 años.
12 Ministerio de Educación Nacional, (1982) “Currículo de Preescolar, niños de 4 a 6 años”, Bogotá, D.C., Ministerio de Educación Nacional, (1998)
Lineamientos curriculares de Preescolar, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (1989) el Proyecto Pedagógico Comunitario del ICBF, de
1989. Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS (2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bogotá, DC. Estos dos últimos, si
bien no son considerados por ellos mismos curriculares, responden a este tipo de documentos.
13 Alcaldía Mayor de Bogotá, (2010) Lineamiento Pedagógico y Curricular para la Educación Inicial en el Distrito, Bogotá, D.C.
14 Zabalza Miguel, “El curriculum de la Educación Infantil” http://www.infantiae.org/zabacurriITA1807.asp. consultado el 7 de Enero de 2005,
Los currículos son propuestas políticas y pedagógicas de En la actualidad en Bogotá, la SDIS está trabajando para
los estados, pero representan líneas de política. Estos se que todos los jardines infantiles tengan una perspectiva de
reelaboran y se reinterpretan por los diferentes actores: por Atención Integral por lo que se rigen por el Acuerdo 057 de
las instituciones y por cada maestro en sus ejercicios de pla- 2009, que establece los estándares técnicos que todos los
neación, interacción en el aula y evaluación. Los maestros de jardines públicos y privados deben seguir. Así mismo, en el
Educación Infantil, no pueden pensar en el currículo al tiempo caso de los jardines de la Secretaria, en sus cuatro modalida-
que ejercen de maestros, al igual que los otros educadores des: Jardines Propios, Casas Vecinales, Jardines Cofinanciados
del sistema educativo necesitan de unos currículos que les y Jardines Sociales operados por las Cajas de Compensación,
den orientación. No porque ellos no puedan realizarlos, por- se ofrece el servicio en jornada completa, de 8 a 5 de la tarde,
que de hecho en las construcciones curriculares participan lo que les facilita a los niños y niñas una Atención Integral y
maestros, sino porque esa no es su función cuando están en además, contribuye a que las familias puedan sentirse tran-
las aulas; allí su trabajo es elevar el desarrollo de los niños y quilas mientras sus miembros consiguen su sustento.
en eso utilizan toda su energía intelectual y física.
De otra parte, existen unos elementos en los colegios
Se plantea, entonces, que asumir el concepto de Educación públicos y privados sobre los cuales es importante llamar la
Inicial no implica la desaparición de la educación preescolar sino atención. Una investigación realizada por la Universidad Pe-
que es una reconceptualización que intenta garantizar el derecho dagógica Nacional15 sobre la articulación preescolar-primaria,
a una educación acorde con las características de los niños. las maestras de los grados de transición de los colegios ofi-
15 Rojas S., Fandiño G., Castaño I., (2006) Las creencias de los profesores sobre la articulación entre preescolar y el primer grado de primaria.
Universidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investigación, 2004- 2005.
ciales luego de la integración de varias instituciones a un Decreto 1860 ARTICULO 6o. ORGANIZACION DE LA
solo centro educativo, afirman que las directivas, en general, EDUCACION PREESCOLAR
desconocen la importancia del grado de transición y mues-
Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS
tran poco interés en él. En otra investigación se observa que
(2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bo-
en los colegios privados, cuando una maestra es percibida gotá, D.C.
como “buena” en el grado de transición, rápidamente se le
ofrece pasarse a los grados de primaria, pareciendo que en Departamento Administrativo de Bienestar Social DABS
estos se pudiese aprovechar mejor de sus talentos16. (2003) “Desarrollo Infantil y Educación Inicial” Bo-
gotá, D.C.
Así mismo, se hizo evidente otro problema en la organiza- Fandiño G. Castaño I, (2011) Haciéndose maestras: pro-
ción de los profesores. En general, en los colegios las reunio- blemas de enseñanza en su primer y tercer año de
nes se organizan por áreas de conocimiento y los docentes trabajo de las maestras de educación infantil Univer-
del grado de transición, como no son especialistas en áreas, sidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investi-
ni su trabajo gira en torno a ellas, cuando son invitadas de- gación, 2006- 2010.
ben elegir alguna de las áreas de conocimiento e ir a estas
Fandiño Graciela (2007), “El pensamiento del profesor
reuniones; pero allí los problemas de los niños y niñas del sobre la planificación en el trabajo por proyectos”,
grado de transición casi nunca son abordados. Igualmente en Colección tesis Doctorales. Universidad Pedagógica
las citadas investigaciones y en otras17, incluso en algunos do- Nacional, Bogotá
cumentos de la misma Secretaria de Educación18 se observó
que a pesar que los lineamientos de año 1998 se refieren Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (1989) Pro-
al juego como uno de los componentes fundamentales del yecto Pedagógico Comunitario del ICBF.
mismo, los espacios de juego, se reducen al recreo, pues en Ministerio de Educación Nacional, (1982) “Currículo de
el aula estos espacios casi no existen, aunque las maestras lo Preescolar, niños de 4 a 6 años”, Bogotá.
reconozcan como la actividad más importante para los niños y
niñas, y sea considerada por ellos como la actividad que más Ministerio de Educación Nacional, (1998) Lineamientos
14 les gusta realizar. curriculares de Preescolar,
Alcaldía Mayor de Bogotá, (2010) Lineamiento Pedagógi- Secretaria de Educación del Distrito Capital, SED (1998)
co y Curricular para la Educación Inicial en el Distrito, El grado cero en el Distrito Capital Evaluación de Im-
Bogotá, D.C. pacto, Bogotá, D.C.
Cerda H. (1996). Educación preescolar. Historia, legisla- Zabalza Miguel, “El curriculum de la Educación Infantil”
ción, currículo y realidad socioeconómica. Ed. Magis- http://www.infantiae.org/zabacurriITA1807.asp. con-
terio, Bogotá, D.C. sultado el 7 de Enero de 2005,
16 Fandiño G. Castaño I, (2011) Haciéndose maestras: problemas de enseñanza en su primer y tercer año de trabajo de las maestras de educación infantil
Universidad Pedagógica Nacional CIUP, Informe de investigación, 2006- 2010.
17 Fandiño Graciela (2007), “El pensamiento del profesor sobre la planificación en el trabajo por proyectos”, Colección tesis Doctorales. Universi-
dad Pedagógica Nacional, Bogotá
18 Secretaria de Educación Secretaría de Educación del Distrito Capital, (1998) El grado cero en el distrito capital evaluación de impacto, Bogotá.
La tesis que sustenta el artículo pone en escena los desafíos del educador infantil frente a
las realidades de las niñas y los niños. Aunque se reconoce la diversidad de infancias que
tiene Colombia, éste centra su atención en la población escolarizada, haciendo un recorri-
do desde dos perspectivas, la primera centrada en el niño y la segunda en el contexto del
educador en el marco de la política distrital y nacional de Educación Inicial. El documento
se fundamenta principalmente en los aspectos coincidentes entre ambas posturas: la in-
tencionalidad de la acción, las concepciones de niño y el conocimiento del niño, resaltan-
do el papel de la práctica reflexiva en la interacción con los niños pequeños. A manera de
conclusión se proponen algunos desafíos.
1 Docente asistente de la Licenciatura en Educación Infantil en la Universidad Pedagógica Nacional. Magistrada en Comunicación, Licenciada en
Educación Preescolar. Ha trabajado como docente de aula en el nivel de preescolar en el ámbito oficial y privado, como coordinadora académica
y en el acompañamiento de la renovación de los PEI con la Secretaria de Educación del Distrito. Investigadora en el campo de Comunicación
–Educación. Contacto: dconcha@pedagogica.edu.co.
ellos sí viven situaciones parecidas o por lo menos cercanas chos elementos de una educación tradicional, en cuanto a la
a ésta descripción. Este texto centra la discusión en la forma- manera de relacionarnos con los niños en las interacciones
ción de la infancia escolarizada en sus primeros años y en los cotidianas, se mantienen vigentes: el uso del uniforme (pien-
retos que el adulto encargado de ésta responsabilidad debe se usted en el bebé de un año con el uniforme del jardín al
asumir en el día a día. cual asiste), las obligaciones escolares, la tarea, el aprendi-
zaje por repetición y a través del libro como fuente primaria
Niños diversos, instituciones homogéneas de información, el aprendizaje de contenidos fragmentados,
las guías, inclusive los ejercicios denominados “planas”, pero
A pesar de los esfuerzos que las instituciones como la fa- sobre todo información obsoleta de lo que es el mundo y la
milia2 y la escuela realizan para proveer a las niñas y los ni- manera de vivirlo en el siglo XXI.
ños elementos, que según su perspectiva, son los necesarios
para su “adecuada” formación, ellos sobreviven a éstas. No Por otra parte, la emergencia de la infancia como un nicho
obstante serán varios los años que tendrán que transcurrir de consumo, ha llevado a una comprensión de ella acorde
para emancipar su pensamiento y su ser, sobre todo cuando a los intereses de los medios; ahora son los publicistas los
éste no ha sido el foco de atención en su proceso educativo. que saben qué les gusta a los niños, qué quieren, cuáles son
Si bien ésta afirmación nos puede parecer dura y cruel, es sus sueños e ideales, los que interaccionan con imágenes y
la verificación desde la experiencia en la vida cotidiana de juegos llenos de colores, niveles, que en muy pocos casos
lo que estamos haciendo con los infantes3 más pequeños; padres y maestros han podido alcanzar.
cada vez el tiempo de la infancia es más corto y no nos refe-
rimos aquí desde un enfoque proteccionista, sino haciendo Buckingham5 nos propone que las actividades de los niños
evidente cómo a partir de las diversas interacciones que he- en su tiempo libre están cada día más privatizadas y mercanti-
mos construido con los niños tendemos a responsabilizarlos lizadas, lo que hace el niño en el hogar se convirtió en bienes
de acciones acorde a las exigencias del mundo actual desde de consumo: la televisión, los video juegos, la internet, los ju-
la realidad del adulto, complicándoles desde muy pequeños guetes, etc. Así se transformaron los espacios públicos de la
su ser y su quehacer en el mundo sin vivir y disfrutar la vida. infancia también en apropiaciones del mercado6. La institución
16 de los medios, aunque sabe qué decirle al niño, dista también
La agitación permanente de la vida cotidiana y las situacio- de acercarse a la infancia en cuanto a su verdadera esencia.
nes difíciles que sienten los padres y maestros por pretender
que cada niño sea el potencial de lo que no se pudo ser o La idea de novato de Marín7, es muy pertinente ya que la
el ideal de sujeto que la sociedad espera, no permite que él, propuesta de las instituciones (Familia, escuela, medios) en
como ser humano se conozca y experimente la vida como un la interacción con los niños, es lo que en esencia forma su
todo integral, sino que su vinculación con el mundo se da a subjetividad; seguimos construyendo una subjetividad centra-
partir de interacciones cuyos roles no son equitativos y que da en los intereses del adulto y no en los del niño, no desde
están mediados por instancias de autoridad y poder: Madre- su realidad y desde sus necesidades y mucho menos desde
padre- hijo, Maestro- estudiante, los que le asignan un rol de sus potencialidades originales a partir de lo que él o ella son.
sumisión constante, ya sea por exceso o por defecto4. Pocas Continuamos formando al niño, desconociéndolo.
son las experiencias, a las cuales se las ha denominado alter-
nativas, por no ser la mayoría y ser distintas, que presentan Un rol insuficiente y una política educativa
un contexto diferente. poco comprendida y descontextualizada
Aunque, las familias se han transformado, las políticas edu- Es importante aclarar que no es responsabilidad exclusiva
cativas han cambiado y las instituciones han asumido otras del docente ni de los padres de familia la situación que viven
perspectivas en el proceso de enseñanza-aprendizaje, mu- muchas niñas y niños en el país. Para comprender el sentido
2 El término Novato es presentado por la Dra. Dora Lilia Marín, en el marco del Encuentro Interinstitucional de Prácticas en la Formación de Do-
centes para la Infancia. 2011.
3 Se entiende por “familia” el espacio de nicho afectivo en el cual crece el niño o la niña sin reducirse a la idea de nuclear.
4 A partir de este punto el término niño se entenderá incluyendo la perspectiva de género Masculino y Femenino.
5 Cuando me refiero a la sumisión por exceso hago referencia a las interacciones en las cuales los niños y las niñas son sometidos al poder del
adulto por el maltrato ya sea físico o verbal, en el caso de la sumisión por defecto, se entiendo como aquella en la que la interacción con los
padres se da a partir de negociaciones en las que el poder lo ejerce el niño a través de la manipulación, quien en últimas igual es sometido, ya
sea por la desatención de sus padres quienes compensan dicha acción a través de otros elementos como juguetes, tecnología o dinero o por la
influencia exagerada de los medios de comunicación.
6 Buckingham, David. (2008) Más allá de la tecnología. Aprendizaje infantil en la era de la cultura digital. Editorial Manantial. Pág. 114.
7 Se puede pensar, por ejemplo, los parques infantiles que restaurantes de cadena han instaurado en sus locales como un agregado al tiempo de
la comida familiar.
de ésta afirmación debemos remitirnos al ámbito de la cultu- La pérdida de sentido, es tal vez una de las razones más
ra; son muchas las prácticas culturales heredadas de genera- frecuentes que los docentes expresan en este contexto, mu-
ción en generación, cuyas significaciones se han consolidado chas veces generada por cansancio, desatención del Estado 17
a través del tiempo, lo que hace que resignificarlas sea un para proveer unas mejores condiciones laborales, aumento
asunto complejo que trasciende las nociones de espacio y de cobertura sin los requerimientos de infraestructura nece-
tiempo. sarios. Sin embargo la razón principal de dicha rutina recae
sobre la ausencia de reflexión sobre su propia acción; por
La acción del docente, muchas veces es limitada, ya sea supuesto, que ésta tendencia es derivada de factores políti-
por la acción institucional o de los padres de familia, quie- cos y culturales. Así como el niño construye su subjetividad
nes ejercen gran influencia a partir de las expectativas que a partir de las interacciones sociales, el docente también se
se generan en torno al “ideal” de lo que “debe ser” su hijo o ha formado en un contexto de interacciones que lo llevan a
hija. Es importante reconocer que la actualización constante constituirse como tal.
tampoco es garantía de una adecuada interacción con las ni-
ñas y los niños. Entonces ¿cuál es la esencia del asunto? Si se Ahora bien, aunque las políticas educativas para la educa-
observa, la práctica del docente en ejercicio, con frecuencia ción inicial tanto en el ámbito distrital como nacional están
encontramos la tendencia cada vez mayor a cumplir con los construidas desde enfoques e intereses distintos, existen tres
“requerimientos” solicitados ya sea en el ámbito institucional, postulados coincidentes que requieren ser objeto de aten-
distrital o nacional (por ejemplo a través de las pruebas Saber ción: el primero se relaciona con la “intencionalidad” de la
y Comprender). acción docente, el segundo con el “concepto sobre el niño” y
el tercero llama la atención sobre “el conocimiento del niño”.
Éstas presiones externas, derivadas de una política de Si observamos la realidad de la vida cotidiana, estos postula-
estándares y evaluaciones nacionales e internacionales, han dos se encuentran en el discurso de los sujetos, no obstante,
llevado cada vez más a la pérdida de sentido de la acción la comprensión sobre ellos vacila cuando de realizar la acción
docente, convirtiendo al maestro en un hacedor de quehace- se trata: la intencionalidad se pierde por alcanzar el logro del
res y no en un sujeto pensante de su propia acción, es decir, bimestre, la concepción de niño se transforma al interactuar
cada vez más la tendencia sigue orientada a que el maestro con él en el aula, y el conocimiento del niño termina siendo
haga y otros se ocupen de pensar lo que él debe hacer. Por una rutina de diagnósticos y seguimientos acorde a paráme-
supuesto, desde ésta perspectiva las niñas y los niños termi- tros externos al propio niño, por lo que ni la acción del maes-
nan viviendo también como autómatas en el sistema que los tro es suficiente para realmente comprenderlo, ni la política
sostiene. educativa alcanza a impactar desde sus propósitos.
La tensión existente entre la teoría y la práctica recae enton- Retomando una perspectiva comunicativa, la interacción
ces sobre la idea de rutinas, las acciones orientadas hacia los con los niños debería ser cada vez más dialógica y menos
niños más pequeños han sido el cúmulo de prácticas que se unidireccional, aunque ya muchos autores han hablado al res-
convirtieron en rutinas aprehendidas más por la experiencia del pecto9, no se puede conocer a los niños sino dialogamos con
maestro (así me enseñaron o así he enseñado siempre), que ellos, si no los escuchamos. De acuerdo con los resultados
por una amplia reflexión teórica sobre el conocimiento del niño de una investigación10 se muestra cómo la construcción del
y su educación. La ausencia de reflexión no permite la forma- mundo por parte de los niños en bien distinta al mundo del
ción de la conciencia del sujeto que enseña; para Sañudo8, la adulto, y precisamente la fractura en la comunicación es la
reflexión es un proceso dialógico y recursivo que en diferentes que no permite conocer dicha realidad; los niños viven en
etapas produce mejoras en la práctica de los docentes y que tiempo presente mientras el adulto se fija en el pasado o en
conlleva en primer lugar redefinir la situación donde se produce las expectativas de futuro; sus significaciones están construi-
la acción, reinterpretándola y asignando un nuevo significado a das desde los espacios que recorren en sus trayectorias día
características conocidas o antes ignoradas. En segundo lugar, a día, por ejemplo, la ruta del bus, el camino al jardín, la casa
permite la reconstrucción del profesional cuando se adquiere de la abuela, la panadería dónde se compra el pan. Por lo ge-
conciencia sobre la manera como estructura sus conocimien- neral estas significaciones son ignoradas por el adulto quien
tos, afectos y estrategias y, finalmente, genera la construcción se esfuerza en “transmitir” los contenidos para alcanzar los
de los supuestos acerca de la enseñanza aceptados como bá- logros del período.
sicos. Siguiendo a ésta misma autora “dependiendo de cómo el
educador signifique su práctica así la realiza”, como plantean ¿Y qué puede hacer el educador infantil
los lineamientos sobre educación inicial en el país, así como el en este contexto?
adulto conciba al niño, así será su interacción con él.
Con base en los planteamientos anteriores, muchos son
La brecha existente entre los planteamientos para la educa- los desafíos que se proponen en consideración para el edu-
ción inicial y la realidad de los espacios escolares en la cotidia- cador infantil que trabaja con las niñas y los niños más peque-
nidad, más que un asunto de la política o del maestro significa ños. Continuamos caminando a través de un proceso edu-
18 una carencia de reflexión sobre la acción docente y sobre las cativo que no se ha revisado a fondo de tal manera que sea
políticas mismas que orientan su práctica. Una política que no pertinente a las realidades del siglo XXI en un contexto cada
se reflexione y que no sea construida conjuntamente con los vez más globalizado y fragmentado socialmente. No hemos
actores sociales a los cuales afecta, pierde su sentido cuando logrado alcanzar una educación de calidad, pero no entendida
busca canales para su implementación, y una acción docente a la luz de los estándares y las competencias, sino de calidad
que carece de reflexión pierde su intencionalidad al terminar en la medida que se centra en el pleno desarrollo del suje-
inmersa en las tareas cotidianas. to en todas sus dimensiones desde una perspectiva humana
para la construcción de una nueva sociedad.
Desde esta perspectiva, es que cobra sentido la idea de
“intencionalidad” propuesta tanto en la política nacional como Trascender la visión transmisionista
distrital; el pensar las acciones que realizamos con las niñas y de la educación
los niños implica a su vez, considerar cómo se está concibiendo
al niño y cómo es él o ella, ya que al pensar la acción más allá A pesar de los desarrollos teóricos y de la tendencia inter y
del alcance de unos logros institucionales el ejercicio intelectual transdisciplinar de las últimas décadas, la organización curricu-
emerge. No es lo mismo plantear una actividad pensada para lar continua siendo fragmentada y basada en contenidos que
mínimo 25 sujetos diferentes a cuando se propone una actividad no permiten la pregunta, el cuestionamiento, la búsqueda de
para todos considerados como “iguales”. Con esto no se quiere otros caminos para aprender. Los infantes desde muy tempra-
decir que cada niño debe desarrollar una acción distinta (aun- na edad (incluso antes de los dos años) se enfrentan a activi-
que la idea de “rincones” nos propondría algo así) sino tener en dades mecánicas que no les favorecen en la realización plena
cuenta las características sociales y culturales con las que el niño de su desarrollo sino que más bien obstaculizan el mismo.
interactúa cotidianamente para plantear la didáctica.
8 Marín, Dora Lilia. (2011) Pensar la formación de pedagogos infantiles: Sobre las posibles relaciones de prácticas formativas y prácticas investiga-
tivas. Conferencia inaugural del IV encuentro interinstitucional de prácticas en la formación de docentes para la infancia. Bogotá. D.C. Apuntes.
9 Sañudo, Lya. La investigación (o significación) de la práctica para la mejora educativa. (2011). Ponencia presentada en el IV encuentro interins-
titucional de prácticas en la formación de docentes para la infancia. Bogotá, D.C. Mimeo, Pág. 10.
10 Tough, Joan. (1978) Cómo dialogar con los niños. Editorial el Ateneo. 125 Págs.; Camps, Ana. (2005) Hablar en clase. Aula de innovación educa-
tiva. Editorial Graó. 111 págs. Bruner, Jerome. (1997) La educación puerta de la cultura. Editorial Visor. 216 Págs; Freire, Paulo. (2005) Pedagogía
del oprimido. Editorial Siglo XXI. 246 págs. (Entre otros)
11 Concha Ramírez, Diana. (2011) Construcción de subjetividad en niñas-niños de 5 y 6 años desde las interacciones sociales cotidianas. Revista
Itinerario educativo. Universidad de San Universidad Buenaventura. Págs. 239-273.
A partir de los interrogantes sobre las concepciones de infancia que se abordan en los procesos
de formación de formadores, se alude a reflexiones y cuestionamientos sobre las relaciones
con la infancia y principalmente con los procesos de formación de formadores, pues depende
desde donde se conciba al niño, se asume y se incide de distinta manera en su educación. Estos
planteamientos, se formulan a partir de los resultados de un ejercicio investigativo enfocado
en la relación entre “la formación de formadores y la política pública de primera infancia” que tuvo
como una de sus categorías centrales de análisis la concepción de infancia.
1 Universidad Libre. Facultad de Educación. Docente– Investigadora. Licenciatura en Pedagogía Infantil. Psicopedagoga. Especialista en Infancia,
desarrollo y comunidad y Magister en Desarrollo Educativo y Social. Email: lucnossa@hotmail.com.
2 Universidad Santo Tomás. Vicerrectoría General de Universidad Abierta y a distancia. Facultad de Educación. Docente – Investigadora Licenciada
en Educación Preescolar. Especialista en Educación y Orientación Sexual. Magister en Educación. Email: patricialondono@ustadistancia.edu.co.
3 Pontificia Universidad Javeriana. Facultad de Educación. Docente – Investigadora. Psicóloga. Especialista en Atención Social Integral en Salud
Mental. Magister en Educación. Email: s.ochoa@javeriana.edu.co.
4 Para efectos de esta reflexión las autoras se refieren a aquellos enunciados con mayor recurrencia en los procesos de formación en la investi-
gación “Formación de Formadores y Política Pública de Primera Infancia” ASCOFADE, 2011.
5 Ochaíta A. E. et al (2004), Hacia una teoría de las necesidades infantiles y adolescentes: necesidades y derechos en el marco de la Convención
de Naciones Unidas sobre los derechos del niño. McGraw-Hill.
6 Alzate, P. M. (2003) La infancia concepciones y perspectivas. Pereira. Colombia. Editorial Papiro.
7 Ariès, P. (1987) El niño y la vida familiar en el Antiguo Régimen. Madrid. Editorial Taurus.
8 Lloyd DeMause. Historia de la Infancia. Versión española de María Dolores López. Madrid. Alianza Editorial.
9 Muñoz, C; Pachón, X (1991) La niñez en el siglo XX. Comienzos de siglo. Santa Fe de Bogotá: Editorial Planeta.
10 Alzate, M.V. (2003), op. Cit. Pág. 147.
11 Casas, F. (1998). Infancia: perspectivas psicosociales. Barcelona: Paidós.
12 Colángelo, M. (2003) La mirada antropológica sobre la infancia. Reflexiones y perspectivas de abordaje: Mesa: Infancias y juventudes. Peda-
gogía y Formación. Ponencia. Laboratorio de Investigaciones en Antropología Social. Universidad de La Plata. Y Seminario Internacional. La
formación docente entre el siglo XIX. Ministerio de Educación. Argentina.
13 Alzate, P. M. Revista N° 28 (2001) Concepciones e imágenes de la infancia. en: Revista de Ciencias Humanas. Universidad Tecnológica de Pereira.
Colombia. ISSN0121 -9677
nológicos, la eclosión de la información y la comunicación, los niños como sujetos de derechos, se considera aún débil
donde se alude a un niño con más y mejores competencias, la reflexión de lo que esto significa y sus implicaciones en
que superan lo posible para la infancia vivida por las antiguas la educación
generaciones.
Siguiendo a Alzate14, como lo cita la investigación en men-
Hasta aquí, un punto de partida para realizar reflexiones, ción, “(…) aunque se haga referencia a que no basta con pro-
sobre las concepciones de infancia que circulan en el con- mulgar los derechos, se vuelve a la idea de la vulnerabilidad
texto educativo, y como éstas se matizan de acuerdo con la como una opción de atención educativa. “Parece como si es-
época en la cual están inmersas y con los cambios profun- tuviese muy enraizada la idea de que en la práctica no son
dos que se vienen dando a nivel social-cultural y que inciden todos los niños y niñas los que merecen actuaciones sociales
en la forma de comprenderla y por ende, orientadores en los protectoras o promotoras sino sólo unos pocos: los abando-
procesos de formación. nados, explotados, maltratados, mal nutridos o enfermos”.15”
Reflexiones finales
propuestas educativas formuladas. Se hace interesante el reto venir. Aquello que otrora era privado, reservado, considerado
de trascender, las concepciones de infancia homogenizantes en la intimidad, ya no lo es. ¿De qué niño hablamos entonces
y ancladas que llevan a desarrollar prácticas pedagógicas en- hoy? Siguiendo la reflexión de Colángelo18 ¿Para qué tipo de
focadas a la atención y asistencia. niños estan formuladas las políticas y diríamos en este campo
que convoca la reflexión, para qué tipo de niños estan hechas
Desde esta lógica, es peligroso entonces, por ejemplo, las propuestas educativas? ¿Y por ende, qué tipo de formado-
hacer el discurso por el discurso de los Derechos Humanos, res estamos formando? ¿Para qué y para quienes?
sin profundizar en su fundamentación, dejando de lado su
razón ética y política, que rescata la condición de dignidad
• Bibliografía
humana inherente al hombre y su legado como conquista
social. Así el discurso de los niños como sujetos de dere-
cho y de política, fácilmente puede tacharse de homogeni- Ariès, P. (1987) “El niño y la vida familiar en el Antiguo
zante e invisibilizador de diferencias. De este modo, surgen Régimen”. Madrid. Editorial Taurus.
críticas, sin propuestas y con muchas ausencias del rol del
maestro como sujeto político en escenarios de reflexión y Alzate, P. M. Revista N° 28 (2001) Concepciones e imá-
construcción en ésta línea. Es necesario, ir más allá de las genes de la infancia. en: Revista de Ciencias Humanas.
respuestas estrategicas en las que se enmarcan, por mo- Universidad Tecnológica de Pereira. Colombia.
mentos, los procesos de autoevaluación y acreditación de
los programas educativos, respondiendo a normativas ad- Alzate, P. M. (2003) La infancia concepciones y perspec-
ministrativas de gestión y eficiencia, orientando más bien tivas. Editorial Papiro Pereira. Colombia.
los esfuerzos, a fortalecer los procesos educativos en la
formación de formadores. En este caso, buscando ampliar Casas, F. (1998). Infancia: perspectivas psicosociales. Bar-
y profundizar sobre la infancia, como una categoría esen- celona: PaidósCasas, F. (1998). Infancia: perspectivas
cial de estudio, propia de la especialidad de la educación y psicosociales. Barcelona: Paidós.
pedagogía infantil.
24 Colángeno, M. (2003) La mirada antropológica sobre la
Se considera importante que en los programas de forma- infancia. Reflexiones y perspectivas de abordaje:
ción de formadores se permita dar una mirada de inclusión, Mesa: Infancias y juventudes. Pedagogía y Formación.
trascendiendo las clasificaciones asociadas a la procedencia, Ponencia. Laboratorio de Investigaciones en Antro-
el contexto geográfico, o la problemática o a la condición pología Social. Universidad de La Plata. Y Seminario
-al que pertenece el niño-, refiriéndose por ejemplo al niño Internacional. La formación docente entre el siglo XIX.
de la selva, el niño rural, el niño urbano, al niño en alto Ministerio de Educación. Argentina.
riesgo. Pues en muchos casos, todas estas variedades en su
denominación de acuerdo con la condición, se consumen Lloyd DeMause. Historia de la Infancia. Versión española
en la idea de la escolarización como unica opción de me- de María Dolores López. Madrid. Alianza Editorial.
joramiento.
Muñoz, C; Pachón, X (1991) La niñez en el siglo XX. Co-
Por último, contemplando nuevas reflexiones a propósito mienzos de siglo. Santa fe de Bogotá: Editorial Planeta.
del ejercicio investigativo, se hace alusión a la noción de niño
en esta época contemporánea. Tal vez “expósito” también Ochaíta A. E. et al (2004), Hacia una teoría de las necesida-
como en la antigüedad, no solo expuesto a la intemperie de des infantiles y adolescentes: necesidades y derechos
los flagelos sociales, sino ahora, expuesto a la saturación y el en el marco de la Convención de Naciones Unidas
mundo del denominado tercer entorno. El niño de hoy, ya sobre los derechos del niño. McGraw-Hill.
no es oculto, ya no es invisible como refería Ariès. Ahora es
asunto público, nada se reserva a la necesidad de información Ochoa S., Nossa L., Londoño P., Escobar S., Quiroga J., Rojas
y vigilancia del mundo adulto. Ahora es público, y esto implica S. (2011). Formación de Formadores y Política Pública
que todos tienen la posibilidad de informarse, conocer e inter- de Primera Infancia. ASCOFADE. Bogotá, Colombia.
Requerimos una educación desde la cuna hasta la El termómetro infalible para medir el grado de civilización,
tumba, inconforme y reflexiva, que nos inspire un el desarrollo material y espiritual de una nación, no es otro
nuevo modelo de pensar y nos incite a descubrir que el sistema educativo gestado en su interior como una
quiénes somos en una sociedad que se quiera relación directamente proporcional e incuestionable frente a
a sí misma, que aproveche al máximo nuestra 25
la estructuración, organización y funciones en la vida de los
creatividad inagotable y concilie una ética y,
pueblos, con el compromiso moral, político, social y científico,
tal vez, una estética para nuestro afán,
desaforado y legítimo de superación personal. en respuesta a las crecientes necesidades planteadas por la
evolución histórica y el diario descubrir de la comunidad.
Gabriel García Márquez
El convulsionado mundo de hoy, exige personas críticas y
El lenguaje del maestro de infancia analíticas que sean capaces de convivir democráticamente,
aceptar las diferencias y construir consensos para el bienestar
1 Magíster en Educación. Licenciado en ciencias de la educación. “Grupo de investigación Innovaciones Pedagógicas y Educativas”. Universidad
Pedagógica y Tecnológica de Colombia. Correo electrónico: jefharvey@hotmail.com.
2 Especialista en Infancia, Licenciada en preescolar, profesora Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia. “Grupo de Investigación Inno-
vaciones Pedagógicas y Educativas” Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia. Correo electrónico: luzabus@gmail.com.
3 En: Requejo Osorio, Agustín. Conocer para trasformar. En: Pedagogías del siglo XX. Barcelona: Cisspraxis, 2000. p. 134.
Nadie educa a nadie, nadie se educa a sí mismo, los hombres se educan entre sí mediados por el mundo. Paulo Freire
26
Es de vital importancia mencionar el papel que juega la se utilizan para la comprensión de las acciones, intenciones,
educación impartida en los primeros años de la vida del emociones y deseos propios y ajenos, para descubrirse a sí
hombre, pues en esta época se consolida su futuro emo- mismo como un ser único, diferente a los demás e igual a
cional y social, se cimentan las actitudes de aceptación y ellos; para darse explicaciones, simbolizar y otorgar signifi-
adecuación al mundo cambiante en el que le corresponderá cado a las características propias del lenguaje y del medio
vivir y es precisamente el maestro en infancia, quien tiene que habita. Las capacidades y habilidades cognitivas, sociales,
en sus manos la responsabilidad y el compromiso de ejer- emocionales y motrices que poseen los pequeños deben ser
cer esta labor abnegada, silenciosa pero fecunda en valores descubiertas por los adultos que los atienden, para ayudarlos
éticos, académicos, científicos y sociales, en donde se pro- e impulsarlos a hacerlas visibles y a enriquecerlas en el trans-
penda por formar a nuevas generaciones capaces de con- curso de su desarrollo4. Es acá donde uno de estos adultos es
ducir, el futuro, una patria sobre los principios de libertad, el maestro de infancia.
democracia, justicia encaminadas a la paz que tanto hemos
anhelado. La concepción de infancia
Todos los niños y niñas desde su nacimiento, emplean En lo que sigue se establecen algunos referentes que per-
formas de pensamiento que demuestran una gran riqueza mitieren realizar un acercamiento a la concepción de infancia.
mental para elaborar sus experiencias, sistematizar informa- Es con Rousseau en su libro el “Emilio o la educación” con
ción, construir conocimiento y apropiarse de su entorno. Las quien se puede realizar un primer acercamiento a la concep-
experiencias de interacción con su madre y demás personas ción de infancia, pues hasta la época solo al niño se le consi-
que lo rodean le permiten establecer un sistema de afecto, deraba con un adulto en miniatura. O en sus palabras “Buscan
para dar cuenta del intercambio emocional en el que risas, siempre al hombre en el niño, sin considerar lo que éste es
caricias, abrazos, juegos y otras formas de contacto corporal antes de ser hombre”5 El texto percibido de carácter revolu-
4 Segovia Ospina, Isabel. Atención a la primera infancia: bases sólidas para el desarrollo humano. En: Revista Internacional Magisterio. No 34
(ago. - sep. 2008); p. 35.
5 Rousseau. Juan Jacobo. Traducción Ricardo Viñas. 2000. El aleph.com.
Así, se puede decir que la infancia es “una época clave Las teorías, los fundamentos pedagógicos y educativos jue-
de la vida, en la cual se configuran todos los resortes afecti- gan un papel determinante desde el punto de vista que liga
vos e intelectuales del individuo, de cuyo correcto desarrollo al maestro con los lineamientos educativos, el estudiante y la
depende buena parte del éxito o fracaso posterior de cada misma sociedad en aras de construir una política mucho más
individuo en su proyecto vital”6. dinámica, pero a la vez comprometida con una realidad social
donde la humanización de la educación, la plataforma tecno-
Lo anterior, significa que necesariamente, la infancia debe lógica y los medios didácticos y lúdicos se conviertan quizá
concebirse como una etapa dentro de la vida de la persona que en la mejor herramienta para lograr sus fines, y por lo tanto
enmarca una época de transición donde se adquieren los co- construir una política educativa de permanente evaluación y
nocimientos adecuados para lograr no sólo un enriquecimiento retroalimentación que atienda las necesidades y expectativas
cultural e intelectual, sino que lleva a propiciar un desarrollo ple- propias de la sociedad de cara a la formación de nuestra niñez.
no, con características específicas que le acompañarán a futuro y
mediante las cuales toma las decisiones a que haya lugar. Consecuentes con la pretensión de Plan Decenal de
Educación es desde “las instituciones de Educación Supe-
El contexto de la educación colombiana rior, las facultades de educación y las normales superiores
encargadas de formar los educadores, realizarán cambios
Pensar la educación […] de hoy conlleva a pensar sus im- sustanciales en sus concepciones y en su quehacer, a fin de
plicaciones de carácter político, histórico, económico y por garantizar una formación que transforme y mejore significa-
supuesto, de carácter social de cara a la realidad actual7. tivamente la calidad de la educación en el país”10.
Si bien es cierto el país se ha preocupado por la situación
educativa, a través de los planes de desarrollo pues, “Se Una mirada a la formación del maestro de infancia 27
sabe que en ellos se cristaliza, en gran medida el futuro
económico y político de país”8. En esta línea surgen políticas Las instituciones educativas formadoras de educadores
educativas impuestas que tienen según los gobiernos de conciben y desarrollan programas en un plano general, cen-
turno buenas intenciones, pero que a la larga resultan con- trando su objetivo en dotar a sus alumnos de herramientas
traproducentes, para la pretensión de la calidad educativa. necesarias para ayudar a construir su personalidad. En las
Se entenderá como política educativa la que se “refiere a instituciones formadoras de maestros, este sentido debe
todas aquellas decisiones que orientan las acciones de los ampliarse de una manera que permita “vincular e interrela-
sistemas educativos y que se traducen en normas y decre- cionar un ser humano con un proyecto de vida articulado
tos que de una u otra forma afectan al docente”9. a su proceso formativo, lo cual se convierte en garante de
que el maestro pueda aprender a aprender, aprender a ha-
Desde tiempos inmemoriales al tratar la educación en Co- cer, aprender a convivir, aprender a ser, aprender a sentir y
lombia se le aducen diversos contenidos y teorías a fin de aprender a amar”11.
lograr que exista una mayor profundización de los procedi-
mientos, y que por lo mismo se puedan generar resultados Es responsabilidad de instituciones educativas formado-
muchos más satisfactorios para fortalecer el sistema de for- ras de maestros de infancia, construir un proyecto acadé-
mación. Cumplir con los fines propios de la educación que mico para formar con la más alta calidad científica y ética;
han sido dispuestos por el Ministerio de Educación Nacional un proyecto en el que la pedagogía, como saber fundante,
en su mismo interés de conseguir una formación mucho más se constituye en fuente y vector que impulse la formación
6 Gallardo Rodríguez, Isabel María y González Mesa, Noelia. La infancia como concepto y como realidad [en línea]. España: Universidad de Sevilla,
s.f. [citado el 06-04-11]. Disponible en: http://alojamientos.us.es/pedsocial/archivos/tema13.PDF.
7 Cabezas, Jeffer Harvey. Algunos apuntes sobre la política educativa en educación superior “universidad” y su incidencia en el profesor universi-
tario. Cuadernos de lingüística hispánica. #13.2009. UPTC. Tunja.
8 Herrera, Cecilia y Acevedo, Raúl. Las políticas públicas y su impacto en el sistema educativo colombiano. Una mirada desde los planes de desa-
rrollo1970 – 2002. Revista Nómadas # 20. 2004.
9 Calvo, Óp. cit.
10 Plan Decenal de Educación 1996 – 2005. La educación un compromiso de Todos.
11 Gadner, H. Estructuras de la mente: la teoría de las inteligencias múltiples. México: Fondo de Cultura Económica, 1994.
de un sujeto portador de un saber que pueda integrar la aprendizaje, a razón de la información que debe poseer el
educabilidad y la enseñabilidad, y a la vez que contribuya a maestro para reformular su esquema educativo. Pues como
la construcción de una cultura de la convivencia, de la soli- lo denotó Dewey “los niños no llegan a la escuela como
daridad, de la participación y del medio ambiente, creando limpias pizarras pasivas en las que los maestros pudieran
mecanismos para la formación de una cultura de justicia so- escribir las lecciones de la civilización. Cuando el niño lle-
cial y estableciendo relaciones y aportes con otros saberes. ga al aula ya es intensamente activo y el cometido de la
educación consiste en tomar a su cargo esta actividad y
La sociedad demanda de las instituciones formadoras de orientarla”15.
maestros de infancia y, cada vez con mayor urgencia, la forma-
ción de profesionales excelentes y la “calidad en la formación del Nuestra infancia día a día constituye nuevas formas de
profesional depende no sólo de los conocimientos y habilidades apropiarse del conocimiento, por consiguiente el maestro de
que desarrolle al abordar el currículum universitario, sino tam- infancia, debe mostrar preocupación no sólo para conocer la
bién de los intereses y valores que regulan su actuación profe- nueva realidad en materia educativa del infante moderno, sino
sional”12. En el nuevo milenio, cada individuo y cada organización que además busque alternativas de formación actualizada y
construirán su capacidad de acción y, por tanto, su posición en la conforme con las expectativas y necesidades de la población
sociedad, mediante el conocimiento y la capacidad para generar infantil en facultades especializadas y que muestren preocu-
nuevo conocimiento, que le permita adaptarse al ritmo veloz del pación por atender dichos intereses. Sólo de esta manera, se
cambio. Este es el rasgo central de las sociedades del conoci- podrá fortalecer aún más el grado de formación del niño en
miento, o sociedades capaces de generar conocimiento acerca todas y cada una de sus fases de desarrollo.
de su realidad y de su entorno, y capaces de utilizar dicho cono-
cimiento para concebir y construir su futuro. Dicho lo anterior el ejercicio del maestro debe partir por
entender el mundo de la niñez, de su niñez; partir del maestro
La formación de un maestro de infancia demanda la necesi- mismo. Esto se logra si él es capaz de contestarse el siguien-
dad de reflexionar sobre su quehacer cotidiano con categorías te interrogante ¿Quién quiero ser cuando sea niño? Pregunta
pedagógicas. Esto se convierte en una garantía y punto de par- que en un principio puede parecer un tanto ingenua, pero
28 tida para que cada institución pueda elegir entre las múltiples que si se analiza detenidamente emerge como un elemento
ofertas de la producción intelectual pedagógica y que esa elec- que solidifica una propia concepción de niñez frente a las
ción sea coherente y pertinente, como bien lo plantea Ochoa: realidades contextuales de la infancia. Así las cosas el interro-
“Coherente por la consistencia interna del programa como los gante se convierte en oportunidad de reconocer en nosotros,
propósitos institucionales, congruente por la articulación entre los participantes, ese niño que en nosotros habita, pero que
los componentes del programa y pertinente por la correspon- para algunos ya está muerto.
dencia con las demandas de la sociedad”13.
Emerge la oportunidad de la pedagogía, pues es ella la
Es necesario señalar que la formación de los maestros de que permite aminorar “la brecha existente entre la teoría y
infancia, se debe concebir como un proceso permanente, de la práctica, para tejer las relaciones que se enmarcan en los
tal manera que sea posible trascender las instituciones forma- ambientes de aprendizaje; es decir, en ese espacio concep-
doras, “hasta consolidar procesos de autoformación que per- tual, los estudiantes y profesores son sujetos epistemológi-
mitan la articulación de la práctica docente a la investigación y cos, éticos y políticos que conforman parte activa de la so-
la generación de experiencias en los campos científico-técnico, ciedad”16. Existe un saber teórico y práctico, entendido como
pedagógico y didáctico, ético-axiológico, humanístico, etc.”14. el universo complejo -cúmulo de experiencias, creencias,
saberes, tanto pedagógicos como disciplinares, así como las
La niñez y el profesorado desde la praxis educativa ideas que posee y por las cuales es poseído, como hechos
que giran alrededor de su mundo, en los diversos contextos
El niño de la época actual, ha venido desarrollando una de aprendizaje y de enseñanza-, “en el que teoría y práctica
serie de habilidades que el maestro hoy por hoy debe saber son los elementos mágicos, místicos, míticos, entre otros,
descifrar con ocasión del mismo proceso de enseñanza y que integran la alquimia pedagógica. La teoría y la práctica,
Algunos elementos constitutivos del lenguaje Lo pedagógico, comprende en una primera mirada, el
en el maestro de infancia desarrollo de habilidades, de procesos con carácter reflexivo;
que ofrecen una posibilidad razonable para solucionar un
No basta con ser un maestro justo, responsable, cumplidor problema determinado desde el aula de clase. Así mismo, se
de su deber, alegre y respetuoso; es necesario ser un creador ve orientado a la construcción de conocimientos, mediante
nato, un soñador constante que haga realidad todos sus sue- recursos y acciones creativas proyectadas hacia la el aporte
ños y los de sus estudiantes, pero sobre todo, que tenga una que se pueden dar en campos tales como educativos, cien-
visión clara y positiva del mundo. tíficos, tecnológicos y artísticos, entre otros, con el fin de
17 Ibídem
18 Cabezas, Jeffer Harvey (2011). Aproximación al pensamiento pedagógico del profesor universitario. Análisis de caso. Manuscrito no publicado.
Universidad pedagógica y Tecnológica de Colombia. Tunja. Colombia.
hacer frente a las cambiantes demandas del entorno, social y cidencia en el profesor universitario. Cuadernos de lin-
cultural. De esta manera se ejerce una praxis transformadora güística hispánica. #13.2009. UPTC. Tunja
que satisface dichas demandas a través del desarrollo de la COLOMBIA. MINISTERIO DE EDUCACIÓN NACIONAL. For-
capacidad del trabajo individual y colaborativo con respon- mación de maestros: elementos para el debate. Bo-
sabilidad social gotá: Consejo Nacional de Acreditación de Escuelas
Normales Superiores, 2000.
Lo disciplinar, está caracterizado, desde las diversas
DaviniI, M. C. La formación docente en cuestión: política y
formas de aproximarse a la realidad del mundo. Por con-
pedagogía. Buenos Aires: Paidós, 1995.
siguiente el conocimiento se puede dar desde diversas vi-
siones, y que generalmente se presenta en el entorno edu- Dewey, John. The school and society. En: Middle works of
cativo; por otra parte este conocimiento, se define desde John Dewey. Carbondale, Southern Illinois: University
una génesis histórica y científica, como un conocimiento Press (1976). Vol. 1. p. 25.
establecido, acabado e inamovible. El maestro de infancia,
Flórez Ochoa, Rafael. Abrirle paso al nuevo maestro. En:
debe tener presente, su dimensión epistemológica, la cual Revista Educación y Pedagogía. Universidad de Antio-
implica la discusión de las teorías y el establecimiento de quia. No. 2 (1990).
las condiciones propicias en la producción y la validez de
ese conocimiento, en concordancia con los fines propios FONDO DE NACIONES UNIDAS PARA LA INFANCIA.
de la educación. UNICEF Definición de infancia [en línea]. España:
Amnistía Internacional, 2005. Disponible en: http://
www.amnistia catalunya.org/edu/2/nin/inf-unicef.
Lo axiológico, en el maestro de infancia se convierte en
html.
un elemento preponderante, puesto que, le permite adquirir y
crecer en distintos aspectos fundamentales para con la niñez Freire, Paulo. Pedagogía de la autonomía: saberes necesa-
y por consiguiente con la sociedad; de esta manera, lo axioló- rios para la práctica educativa. Madrid: Siglo Veintiuno
gico respalda al maestro no sólo en cuanto al conocimiento, Editores, 1999.
sino en esta línea desarrolla distintos valores relevantes que Kuhn, Thomas. La estructura de las revoluciones científicas.
30 enmarcan al maestro, entre los cuales sobresalen: la respon-
Reimpresión. México: Fondo de Cultura Económica.
sabilidad, la veracidad, la belleza, el respeto, pero sobre todo, 1998.
y tal vez a nuestro juicio en más relevante, en la constitución
de la labor profesoral, es la paciencia, ya que como dice Tho- Lucio R. Educación y pedagogía, enseñanza y didáctica:
diferencias y relaciones. En: Revista Universidad de la
mas Kuhn, “Ni los problemas ni los enigmas ceden ante los
Salle, N° 17 (1989).
primeros ataques”19. A manera de cierre temporal sobre la
discusión que se puede generar en torno de la formación del Piaget, Jean. Psicología y pedagogía. Barcelona: Ariel, 1977.
maestro de infancia, se puede decir que su humana labor se
fundamenta sobre bases empírico-teóricas que hacen posible Sacristán, , José Gimeno y Pérez Gómez , Angel. Compren-
der y transformar la enseñanza. 2ª ed. Madrid: Morata,
el acceso al conocimiento propio de la infancia y sus relacio-
1993.
nes más inmediatas.
Sáenz J.; Saldarriaga, O y Ospina, A. Mirar la infancia. En:
FORO POR COLOMBIA S. Colciencias, Universidad de
• Bibliografía
Antioquia, Universidad de Los Andes, 1997.
19 Kuhn, Thomas. La estructura de las revoluciones científicas. Reimpresión. México: Fondo de Cultura Económica. 1998.
En el artículo 2 del Decreto 2247 de 1997 se estableció la prestación del “servicio público”
del nivel de preescolar para educandos de tres a cinco años de edad, con tres grados: pre
jardín, para niños de 3 años de edad; jardín, para niños de cuatro años de edad; y, transi-
ción, para niños de cinco años de edad y “que corresponde al grado obligatorio constitu-
cional”. La Ley 1098 o Código de la Infancia y Adolescencia expedida en 2006 no incluyó la
educación gratuita para los menores de pre jardín y jardín, dejando cobijado únicamente
en nivel de transición, que desde los noventa, en el Plan de Apertura Educativa (1991-1994)
había sido nombrado en los documentos técnicos como “grado cero”.
La Infancia en la historia
31
La noción de infancia como objeto de estudio “tiene un diendo su fuerza de trabajo, de esta manera, los asilos, los
carácter histórico y cultural y es por ello que ha tenido dife- orfanatos y las escuelas surgieron como espacios apropiados
rentes apreciaciones en la historia; su concepción depende para la formación, y la transmisión de conocimientos y valores
del contexto cultural de la época”4. Las nociones de la catego- necesarios con el fin de mantener el sistema.
ría “infancia” a través de la historia han mostrado a los niños
como dependientes, indefensos, “malos de nacimiento” e El desconocimiento de la categoría infancia y la búsqueda
inacabados; es, durante el siglo XX cuando “se reconoce una de una posible conceptualización, o de las múltiples catego-
nueva categoría: ‘el niño como sujeto social de derecho’. La rías asumidas para referirse a ella, ha tenido implicaciones
“‘reinvención’ moderna de la infancia se inicia desde el siglo en el reconocimiento de la condición, necesidades y requeri-
XVIII en las sociedades democráticas y muy especialmente a mientos de los niños y niñas, de esta manera, se ha desviado
través de Rousseau, quien advertía las características espe- su atención y cuidados necesarios. Esto ha propiciado que
ciales de la infancia”5. contrario al reconocimiento de sus derechos, como se pre-
tendió con la Declaración Universal de los Derechos del Niño,
La infancia como categoría sociológica no siempre ha exis- de 1959, se haya instrumentalizado la visión de los niños,
tido, no obstante que desde siempre han existido los niños. minimizando su condición de sujeto.
Hasta la publicación del texto clásico de Phillippe Ariès6, bien
entrado el siglo XX, la historia de la infancia y la historia de la Las políticas educativas para la Primera Infancia
educación se encontraban en el proceso de reconstruir la defi-
nición precisa de su campo. Según conceptuó Ariès, la historia A través del diseño y la planeación de políticas educativas
de la infancia y la historia de la educación están relacionadas asesoradas por organismos internacionales y de un discurso
de manera especial. En primer lugar, conceptualmente; en se- que ha insertado el tema de los derechos humanos como
gundo lugar, relacionadas en el tiempo; y, en tercer lugar, están concepto fundamental, y en cumplimiento de diferentes pac-
unidas social e institucionalmente. Ariès enfatizó la simultanei- tos establecidos, entre otros, en reuniones de Ministros, los
dad en el tiempo del descubrimiento o reconocimiento de la gobiernos nacionales han planteado la política educativa de la
infancia moderna y de la aparición de políticas protectoras y primera infancia en la ampliación de cobertura, entregando la
32 asistencialistas para cuidar y formar a la generación más joven. educación preescolar a las madres comunitarias, al Bienestar
Estos dos hechos coincidentes, si no casualmente relacionados, Familiar o entidades similares. No obstante que la polémica,
confirieron una nueva característica y posibilidad en la educa- desde la expedición de la Ley General de Educación, Ley 115
ción del niño, la de un régimen de protección y supervisión de de 1994, ha exigido un preescolar de tres años, los gobiernos
control cuidadosamente planificado desde el Estado. lo han desconocido y, por el contrario, han abonado el terreno
para que durante los últimos años se profundice una educa-
Si en un primer momento los infantes fueron considera- ción cada vez más desigual para los niños, niñas del país. En
dos inacabados o “estorbosos” para la sociedad, y muchos el artículo 2 del Decreto 2247 de 1997 se estableció la pres-
de ellos morían por el entorno de abandono, los asilos y los tación del “servicio público” del nivel de preescolar para edu-
claustros religiosos crearon las condiciones para que llegaran candos de tres a cinco años de edad, con tres grados: pre jar-
a una edad en la que podían ser “beneficiosos” o “útiles” a la dín, para niños de 3 años de edad; jardín, para niños de cuatro
sociedad. La infancia adquirió importancia fundamental por años de edad; y, transición, para niños de cinco años de edad
cuanto representaba a un sector de la población en forma- y “que corresponde al grado obligatorio constitucional”. Ade-
ción que podía ser útil al desarrollo industrial requerido en los más, en la Ley 1098 o Código de la Infancia y Adolescencia
nacientes países europeos. Nuevos contingentes de infantes, expedida en 2006, el Estado no incluyó la educación gratuita
a los que era importante educar e higienizar, serían los hom- para los menores de pre jardín y jardín, dejando cobijado úni-
bres y las mujeres que impulsarían la rueda del progreso y el camente en nivel de transición, que desde los noventa, en el
desarrollo de las naciones. Plan de Apertura Educativa (1991-1994) había sido nombrado
en los documentos técnicos como “grado cero”7.
Para la naciente burguesía los infantes eran considerados
como los providenciales herederos y continuadores de su En este contexto, el actual gobierno asumió en su Plan
fortuna; por el contrario, los de la clase popular, del pueblo, Nacional: “el desarrollo de la primera infancia como una de
serían quienes harían posible la acumulación de riqueza ven- las líneas de acción prioritaria” teniendo como marco la legis-
4 Jaramillo, Leonor (2007). Concepción de infancia. Revista Zona próxima, Nº 8, Pág. 110.
5 Jaramillo, Op.cit. Pág. 111.
6 Ariès, Ph. (1987). El niño y la vida familiar en el Antiguo Régimen. Madrid: Taurus.
7 Ministerio de Educación Nacional. (2010). Orientaciones pedagógicas para el grado de Transición. Bogotá: EDESCO, Ltda, Pág. 16.
8 Departamento Nacional de Planeación, DNP (2010). Bases del Plan Nacional de Desarrollo 2010-2014. Prosperidad para todos. Bogotá, D.C.,
Pág. 266.
9 DNP (2010) Op. Cit. Pág. 269.
10 DNP, Op.cit, Pág. 269-270.
11 Departamento Nacional de Planeación, DNP (2005). Hacia una Colombia equitativa e incluyente. Informe de Colombia, objetivos de desarrollo
del Milenio. Bogotá, D.C. Pág. 73.
lidad, proporcionándole un estado psicológico de confianza preescolar de tres grados y fortalecer la intermediación. Al
y preparando el camino para ampliar su radio de acción a respecto, es necesario señalar la importancia de hacer un
través del desarrollo de las formas básicas del movimiento debate profundo sobre el modelo educativo que guía esta
y del lenguaje. propuesta. Desde tiempo atrás FECODE ha planteado la im-
portancia de mantener un preescolar de tres grados, ello
El movimiento corporal y el lenguaje son los medios más implica que la atención a la primera infancia defina dos eta-
importantes y perfectos de que se vale el niño para inte- pas diferenciadas en el aspecto educativo: la primera que
ractuar con el medio. Al ampliar su radio de acción, el niño va de los cero a los 3 años y la segunda, de los tres a los
estará en condiciones de asistir a otros escenarios como el cinco años.
de la ludoteca, el parque y la escuela, donde a través de
actividades de juego interactuará con otros niños y con el La existencia de este preescolar es imposible en el Plan
mundo de los objetos. El juego comprendido como una ac- Sectorial de Educación del actual gobierno. Por un lado,
tividad desinteresada, que no tiene objetivos fuera del mis- mantiene una visión monolítica entre los cero y los cinco
mo y que tiene diferentes manifestaciones como los juegos años, sin establecer esa diferenciación indispensable que se
competitivos, representativos, de azar y de vértigo, encierra debe propiciar cuando el niño llega a los tres años de edad.
las actividades que tienen que ver con la educación física, Pese a decir lo contrario, el gobierno mantiene el asistencia-
la educación artística y la literatura, constituyéndose en un lismo y la idea de guardería y de atención en la perspectiva
mundo de posibilidades y de retos impregnados de manera del cuidado, sacrificando la visión de lo educativo y la ne-
permanente del disfrute, la alegría y las interacciones con los cesaria inducción a lo escolar. Además, la política establece
sujetos y con los objetos. que la prestación de esta atención se entregará prioritaria-
mente a cajas de compensación y a empresas privadas que
Los primeros años de vida son decisivos en los procesos han hecho del discurso sobre la infancia una forma particular
de desarrollo y de formación del niño. Es así como la edu- de ganancia y rentabilidad. La visión académica sobre la in-
cación, entendida, para la primera infancia, como la adqui- fancia no debe estar en manos de expertos que la utilizan
sición de hábitos de vida, la orientación en el desarrollo del para comercializar con ella; por eso, insistimos que es el
34 movimiento corporal y del lenguaje y el cultivo del afecto, sector público el lugar en que se debe desarrollar una visión
debe contar con los escenarios y las condiciones materiales pedagógica que diferencie las necesidades del preescolar
ajustadas, tanto a la edad de los niños como a los propósitos y las de la población infantil menor de tres años que no
ya enunciados. El juego constituye la actividad privilegiada está en el preescolar pero que debe estar atendida por el
para el desarrollo individual y social de los infantes; a tra- Estado, y que además, debe integrar una política de apoyo
vés de éste el niño se va introduciendo en el mundo de a las familias.
la cultura y va dotando de intencionalidad sus acciones, de
igual manera, va asumiendo responsabilidades propias de FECODE ha insistido en la creación de un preescolar de
su edad, es en éste ambiente de desarrollo y aprendizaje tres grados en las instituciones educativas del Estado. El gra-
en que el niño construye su individualidad y su autonomía. do cero, que actualmente existe, es insuficiente para aten-
der las necesidades de formación y aprendizaje de la niñez
Sin pretender exponer una teoría sobre el desarrollo y colombiana. El Estado deber ir más allá de una visión asis-
la formación de la infancia, estas reflexiones ilustran la ne- tencialista y proteccionista en la atención a la niñez desde
cesidad de una educación de alta calidad en esa etapa de los cero hasta los cinco años de edad. La atención a la niñez
la vida en la que deben participar las madres y padres en debe tener entre sus objetivos la protección de esta pobla-
el ámbito familiar y los licenciados en pedagogía infantil o ción contra muchas injusticias que desafortunadamente vi-
preescolar en el ámbito escolar, pues esta tarea debe es- ven los niños y las niñas; sin embargo, la protección no debe
tar encomendada a personas que tengan el conocimiento ser el único objetivo de una política social para la infancia. Es
de las características de la infancia y de la intencionalidad necesario crear una auténtica política de desarrollo del ser
y metodología que favorezca los procesos de formación y humano, de crecimiento personal y social, y de potenciación
desarrollo de los niños. de las facultades naturales de la infancia para aprender, for-
marse, crecer y disfrutar plenamente de la vida.
Fundamentos para una política educativa alternativa
del preescolar Ello implica que es responsabilidad del Estado, crear den-
tro de esa política, unas estrategias que generen las condi-
La política de atención integral a la primera infancia guia- ciones para que los niños y las niñas vivan en su experiencia
da por la articulación entre ajuste fiscal y privatización, está cotidiana, procesos afectivos, lúdicos, sociales y culturales
orientada a mantener la visión asistencialista, sacrificar el que les permitan vivir sus días de manera enriquecedora y
Su gran limitación es la cobertura, porque los cupos no FECODE Federación Colombiana de Educadores (2005).
son suficientes para toda la población infantil de la ciudad Reflexiones sobre la Política Educativa para la Primera
que está entre los cero y los cinco años de edad. Por eso, Infancia. Revista Educación y Cultura, 69, septiembre.
esta acción importante se podría complementar con una de- Bogotá: Autora: María Cristina Torrado.
cisiva política de impulso al preescolar de tres grados que
atendiera a niños y niñas entre los tres y los cinco años de Jaramillo, Leonor (2007). Concepción de infancia. Revista
edad y que tendría las siguientes características: Zona próxima, Nº 8, p.p. 108-123.
Estaría a cargo de las Secretarías de Educación. Ministerio de Educación Nacional. (2010). Orientaciones
pedagógicas para el grado de Transición. Bogotá:
Se realizaría en las instituciones educativas públicas, EDESCO, Ltda.
construyendo en ellas las áreas y espacios especializa-
dos junto con la dotación de materiales lúdicos indis- Reyes, Y. ¿Agentes educativos? Maestros, ¡a mucho honor!
pensables. El Tiempo, febrero 20 de 2012.
El lugar de la literatura
en la primera infancia
Yolanda Reyes 1
Quiero compartir tres escenas, a la manera de instantáneas, para ilustrar los descubrimientos que
he presenciado durante estos años en los que me he dedicado a enseñar y a compartir la litera-
tura con bebés, niños y niñas y que han transformado profundamente mi visión acerca del lugar
que ocupa en la formación de los seres humanos desde el comienzo de la vida. Gracias a lo que
me han enseñado mis jóvenes lectores, he adquirido una perspectiva para mirar mis tiempos de
universidad y mis primeros años como maestra y he descubierto lo poco que me enseñaron (y lo
poco que yo enseñé) sobre su significado profundo. Tuve que ir aprendiendo –o quizás sería mejor
decir “desaprendiendo”, como quien se libera de cargas inútiles– datos, fechas, objetivos y estra-
tegias. Mediante un lento proceso, empecé a mirar hacia atrás, guiada por una pregunta: “¿desde
cuándo leemos?” y terminé trabajando con los lectores más pequeños que puedan imaginarse.
1. Licenciada en Ciencias de la Educación con especialización en Literatura, realizó estudios de postgrado en Lengua y Literatura Española. Fun-
dadora y directora de Espantapájaros Taller, librería y proyecto cultural de formación de lectores dirigido a niños y mediadores adultos. Autora
de libros para niños, jóvenes y adultos, entre los que se destacan El terror de Sexto B, Los años terribles y Pasajera en tránsito y del ensayo La
casa imaginaria, sobre lectura y literatura en la primera infancia. Es columnista del diario El Tiempo y dirige la colección Nidos para la Lectura
de Alfaguara. Correo electrónico: yolandareyesv@gmail.com.
Mi premisa es que la experiencia literaria –y quiero enfatizar Bruner llama la atención sobre el significado de esos primeros
en ese binomio: experiencia literaria– se puede enseñar, vale juegos que se dan en todas las culturas con nombres diferen-
decir, transmitir desde el comienzo de la vida y que es más sen- tes. “Hay juegos que están constituidos por el lenguaje y que
cillo de lo que se nos hace creer. Se trata de un proceso que se sólo pueden existir donde el lenguaje está presente. El forma-
inicia, literalmente, por ósmosis: piel e piel, verso a verso, canto to de esos juegos tiene una estructura profunda y un conjunto
a cuento, como veremos en las escenas siguientes. de reglas de realización con las cuales se maneja la superficie
del juego”4. Quizás valdría la pena añadir que esos juegos ya
Primera escena: la voz, el texto madre y la poesía han puesto en escena el juego metafórico de representar unas
cosas –ausentes– valiéndose de otras cosas que cobran presen-
Pensemos en un bebé imaginado desde el vientre materno cia mediante la palabra. En los textos de nuestra tradición oral
al que se inventa rostro y nombre, incluso antes de nacer, y a como el Aserrín, Aserrán o el Tope, tope, tun está contenida la
quien se le entrega, en el tiempo de la espera y durante sus complejidad de esa experiencia de lectura interpretativa descrita
primeros meses de vida, una compleja historia de palabras: la por Bruner, lo que prueba que ponemos en marcha complejos
historia de la cultura, entretejida con la historia de su familia y mecanismos de construcción de significados desde los prime-
con la de su particularidad como sujeto. ros meses de vida y que también desde esos primeros meses
“aprendemos” de un modo visceral, el significado de lo poético
El psicólogo Jerome Bruner afirma que: “La interpretación y la como lenguaje abierto a múltiples sentidos y sonoridades.
negociación comienzan en el momento en que el niño entra en 37
la escena humana. Los niños, al intentar usar el lenguaje para Segunda escena: en el bosque de la narrativa
lograr sus fines, hacen mucho más que simplemente dominar
un código. Están negociando procedimientos y significados y, al Vamos a suponer que han pasado dos años desde la es-
aprender a hacer eso, están aprendiendo los caminos de la cul- cena anterior y que aquel bebé que dejamos ha vivido pro-
tura, así como los caminos de su lenguaje”2. Para Bruner es clara cesos de desarrollo de orden físico y psíquico que inciden en
la idea de que esas facultades originales con las que el bebé sus capacidades simbólicas. Después de haber aprendido a
viene al mundo se activan en la medida en que madre e hijo sentarse, a gatear y a caminar, procesos que le entregan una
inician esa transacción, ese juego de doble vía que él denomina movilidad insospechada y que lo sacan de la contemplación
“reciprocidad” y que ilustra como “la cada vez mayor capacidad exclusiva de la madre para mirar a dúo otras cosas, han en-
de la madre para diferenciar las razones de llorar del niño, así trado en la escena los juguetes y también los primeros libros
como la capacidad del niño de anticipar esos acuerdos”3. de imágenes. En ese triángulo –adulto, libro y lector– nuestro
bebé ha descubierto un “mundo otro” hojeando y mordien-
Es ese pacto el que crea muy pronto una forma de atención do libros y sabe que las ilustraciones, esas figuras bidimen-
mutua, una “armonía de la intersubjetividad”. A medida que sionales parecidas a la realidad, no pertenecen al orden de
la madre “lee”, el llanto de su bebé, va fundando en él nuevos la realidad sino a esa convención cultural llamada libro. Ese
significados y matices y abre la puerta a la experiencia del len- “como si”, que es el germen de lo simbólico, le permite jugar
guaje o de la lectura, en su acepción más amplia de construir a la casita o a los caballitos y descubrir que en los libros está
sentidos, lo cual significa que el ingreso al mundo de lo simbó- representado su entorno. Así mismo, el lenguaje verbal, que
lico se da en virtud de esa primera “con-versación”. ya se ha consolidado, le demuestra que es posible nombrar
lo que no está presente. Ese lenguaje conquistado le permite
Veamos cómo el pacto madre-hijo está profundamente li- evocar simbólicamente la ausencia. Es un descubrimiento, a
gado a la experiencia poética: mientras el niño incorpora las vo- la vez maravilloso y terrible, en el que aforan los miedos y sur-
ces de sus seres queridos, fluye también, en la voz de la madre, ge también una necesidad de independencia,“yo solito”, que
entra en conflicto permanente con el mundo de los límites y personajes y tantos otros etcéteras) que algunos de nosotros
las normas y con la necesidad contradictoria de estar solo y asociamos con los ejercicios tediosos de análisis literario de
acompañado-protegido al tiempo. nuestras clases de literatura en la escuela.
De nuevo, la literatura vuelve a acompañar su desarrollo psí- Tercera escena, no siempre gozosa, del rito de tránsito
quico como lector que se entrena en hacerse preguntas, en
inventar, imaginar, soñar y tener pesadillas. Los relatos le permi- Saltemos otro par de años para encontrarnos de nuevo con
ten entrar en contacto con hechos, peripecias y personajes que ese niño que ya ha ingresado a la educación formal y que está
suceden en un tiempo lejano: el tiempo de la ficción. De esta iniciando el proceso de alfabetización propiamente dicho. Este
forma, se inaugura el paso a otro lenguaje muy sofisticado que paso hacia la conquista plena de la autonomía lectora, se consti-
va más allá de lo fáctico y de las situaciones cotidianas y que se tuye en un largo rito de tránsito –es falso que dure un solo año–
traduce en los relatos. Según la psiquiatra Marie Bonnafé, en la y está lleno de complejidades y minucias. Según afirma Vygostky,
forma relato todo está incluido. “Se puede hablar de lo ausente “El lenguaje escrito es la forma más elaborada de lenguaje”8,
y se utilizan formas discursivas más complejas. Ésa es la única y dicha elaboración supone la puesta en marcha de complejos
forma de lenguaje que tiene las características de la lengua procesos de pensamiento. Lo escrito no es la mera transposición
escrita. Se trata de un preescrito en el lenguaje oral”5. del lenguaje oral, en tanto que implica operaciones psíquicas re-
lacionadas con la estructuración de lo temporal en un orden grá-
Además del profundo poder emocional que posee la ficción fico espacial y con una planeación emanada de la nueva índole
para nombrar los dramas psíquicos que vive el niño de esta eta- del discurso. La ausencia física de un interlocutor visible elimina
pa y darles una resolución simbólica, estos relatos aportan una los supuestos propios de la comunicación oral –dado que el otro
clave definitiva para la conciencia de que hay diferentes formas no está ahí, es necesario proporcionarle unas coordenadas co-
de lenguaje. En efecto, las historias que se le cuentan al niño munes– y ello implica, desde un proceso de planeación mental
obedecen a un “orden otro”, a una “transcripción” de sucesos en deliberado, hasta la incorporación progresiva de convenciones
una forma de tiempo estructurado según las leyes de la escritura. que reemplazan las pausas y las inflexiones naturales del lengua-
je oral, como los signos de puntuación y las reglas ortográficas.
38 El relato de ficción es distinto a la lengua de la inmediatez
pues el hecho de decir había una vez o “La noche en que Max Adicionalmente, el acercamiento al sistema de escritura re-
se puso su traje de lobo y se dedicó a hacer travesuras6…” su- quiere procesos complejos de análisis y síntesis. Lo que en el
giere “un tiempo otro”, no presente, que se nombra en “un len- lenguaje oral iba junto, ahora hay que separarlo en oraciones,
guaje otro”. Al introducir al niño en esas coordenadas “otras” de palabras y sonidos. Al tener que representar los sonidos indivi-
una historia, los adultos lo sitúan en el amplio texto de la cultura duales del habla, que en la oralidad eran percibidos como un
escrita, para mostrarle cómo la literatura permite emprender todo, nuestro niño encara la difícil tarea de descomponer las uni-
viajes más allá del aquí y del ahora y aventurarse por lugares y dades en pequeñas piezas. Ello le supone tomar conciencia de
por tiempos lejanos, que pueden visitarse con la imaginación. la relación entre grafemas y fonemas, relación que para efectos
de nuestra lengua no es unívoca del todo, puesto que los gra-
El álbum de Maurice Sendak, Donde viven los monstruos7, femas no corresponden exactamente a los fonemas. Durante
puede servirnos como metáfora de lo que constituye ese nuevo este proceso de entender “el truco de la lengua escrita”, tendrá
salto en la formación del lector literario. A través de la ficción, que enfrentarse a una serie de arbitrariedades emanadas de la
nuestro niño se identifica con Max, el protagonista de la historia índole convencional del lenguaje escrito, que le demandan una
y oculto bajo esa “identidad otra”, puede viajar simbólicamente atención conciente para entender que cada letra puede repre-
al “espacio otro” donde viven los monstruos; trasladarse a un sentar un sonido –o a veces más de uno– lo cual implica el lento
“tiempo otro”, hablar de sí mismo en un lenguaje cifrado, explo- proceso de descomponer las palabras en fonemas y, simultánea-
rar sus propios miedos, mirarlos fijamente y regresar al “tiempo mente, el de volver a unir fonemas para leer o escribir palabras.
real” de su habitación real, justo a tiempo para la hora de la cena. Pero además de estas minuciosas operaciones que concentran
la atención en el complejo mecanismo de armar y desarmar pa-
Nótese que nuestro lector no ha cumplido siquiera tres labras, el texto sigue inscrito en un contexto amplio de oraciones,
años y ya ha experimentado –con una profunda emoción vital– párrafos y posturas comunicativas diversas que afectan el senti-
esas “categorías” (tiempo cronológico/psicológico; espacio, do de esas pequeñas unidades.
5 Bonnafé, Marie. Poner al bebé en el centro. Entrevista concedida al periódico “Espacios para la Lectura”; número 5, México, Fondo de Cultura
Económica, 2000.
6 Sendak, Maurice. Donde viven los monstruos. Colección Nidos para la Lectura. Bogotá, Alfaguara, 2005
7 Ibid.
8 Vygostky, Lev, S. Pensamiento y lenguaje. Buenos Aires, Ediciones Fausto, 1996.
El preescolar, un sueño
para el futuro Celio Nieves Herrera 1
40 Confucio
1 Licenciado en Biología, Posgraduado en Planeación para la Educación Ambiental. Integrante de la dirección del Polo Democrático Alternativo
PDA. Concejal de Bogotá. Correo electrónico: celionievesherrera@gmail.com.
“Los niños de edad pre-escolar quieren tocar, gustar, oler, Con fundamento en estos argumentos, por ejemplo, en
escuchar y examinar todas las cosas por sí mismos. Están la sentencia T-356 de 2001, la Corporación sostuvo que con
ansiosos por aprender. Ellos aprenden experimentando y ha- base en un decreto presidencial, no puede interpretarse, en
ciendo. Los pre-escolares aprenden de sus juegos. Están muy contravía del carácter flexible del artículo 67 de la Carta, que
ocupados desarrollando habilidades, usando el lenguaje y el único grado obligatorio de preescolar es transición, pues
luchando por ganar control interno (emociones)”. una norma de tal rango no puede limitar garantías constitu-
cionales como la objeto del presente pronunciamiento.
Los niños de esta edad deben ser sujetos activos e incor-
porados a los sistemas educativos tempranos, para garantizar En lo que respecta a la progresividad con la que debe ir
a futuro su desarrollo integral desde la visión de una educa- ampliándose la cobertura del sistema educativo, deben re-
ción igualmente integral. cordarse las pautas que en materia de progresividad de los
derechos económicos, sociales y culturales en general, esta
De hecho la Corte Constitucional ha promulgado sendas Corporación ha fijado siguiendo el derecho internacional de
sentencias que esclarecen el camino para un preescolar de los derechos humanos.
tres grados:
En este sentido, la Corte ha indicado que el mandato de
“El derecho fundamental de los niños a la educación. progresividad de estos derechos no puede entenderse como
Reiteración de la jurisprudencia una justificación para la inactividad del Estado, sino que im-
plica la obligación de éste de actuar lo más expedita y eficaz-
Como lo ha resaltado desde sus primeros fallos esta Cor- mente posible a fin de ampliar la satisfacción de los mismos.
poración, en particular en la sentencia T-787 de 2006, la Lo anterior siempre y cuando se respete por lo menos el con-
educación es un derecho y un servicio de vital importancia tenido mínimo de aquellos –que se deduce, por ejemplo, de
para sociedades como la nuestra, por su relación con la erra- los tratados internacionales y de la Constitución-, el cual es
dicación de la pobreza, el desarrollo humano y la construc- de exigibilidad inmediata”.
La educación preescolar, de
conformidad con el artículo 15 de
la Ley 115 de 1994 -“por la cual
se expide la ley general de edu-
cación”-, es aquella “(…) ofrecida
al niño para su desarrollo integral
en los aspectos biológico, cognos-
citivo, sicomotriz, socio-afectivo y
espiritual, a través de experiencias
de socialización pedagógicas y re-
creativas”, antes de iniciar el ciclo
de educación básica. Ésta com-
prende tres niveles de formación
denominados pre jardín, jardín y
transición, de los cuales por lo me-
nos uno es de carácter obligatorio.”
No se justifica que en Colombia no se haya avanzado en la institucionalización de los 3 grados de
preescolar desconociendo los principios de equidad social.
Con fundamento en estos argumentos, por ejemplo, en Para tal efecto se tendrá en cuenta que la ampliación de
la sentencia T-356 de 2001, la Corte Constitucional sostuvo la educación preescolar debe ser gradual a partir del cubri-
que con base en un decreto presidencial, no puede inter- miento del ochenta por ciento (80%) del grado obligatorio
pretarse, en contravía del carácter flexible del artículo 67 de de preescolar establecido por la Constitución y al menos del
42 la Carta, que el único grado obligatorio de preescolar sea ochenta por ciento (80%) de la educación básica para la
transición, pues una norma de tal rango no puede limitar población entre seis (6) y quince (15) años“.
garantías constitucionales como la objeto del presente pro-
nunciamiento. El preescolar debe partir de los intereses, ne- Cabe anotar que los estudios y experiencias en países de
cesidades y características de los niños y de los procesos. Europa, como Suecia, Finlandia y Dinamarca en los cuales, los
Partimos de los intereses, necesidades y características de niños y niñas menores asisten, desde los 3 años de edad, a
los niños, de los ejes y desarrollos propuestos entre otros instituciones para su desarrollo integral, en donde son aten-
por los PEI con respecto a los ritmos de cada individuo, para didos por personal pedagógico capacitado en despertar la
dar a los niños y niñas la flexibilidad y autonomía en su pen- creatividad de los menores frente a su entorno, estimular su
sar, sentir y actuar, reduciendo el “poder adulto”. inteligencia cognitiva y cenestésica-corporal, donde es forta-
lecida su personalidad, su carácter e inteligencia emocional
En Colombia el reto hacia la educación preescolar de tres siempre en la búsqueda formar personas de éxito.
grados es romper la brecha enorme que existe entre la edu-
cación pública y privada y demostrar que la equidad empieza Para esto es fundamental que la participación total de las
por una educación profundamente humanista y con los ele- familias en el proceso, de tal manera que así son coadyuvan-
mentos que constituyen la educación formal para formular tes en el desarrollo de los pre-escolares, colaborando en su
políticas públicas de avanzada, sin mezquindades y sin ningún formación educativa, familiar y social, ofreciendo un desarrollo
tipo de cálculo político. armónico; que a su vez los protege del maltrato, del abuso,
de la explotación comercial y de todo tipo de violencia que
El artículo 18 de la Ley 115 de 1994 establece: atenta contra los niños y niñas, cobijados dentro de un am-
biente pedagógico y de estimulación, por tanto es necesario
“ARTÍCULO 18. AMPLIACIÓN DE LA ATENCIÓN. El nivel de tener un control de la permanencia de los menores desde los
educación preescolar de tres grados se generalizará en ins- 3 años de edad.
tituciones educativas del Estado o en las instituciones que
establezcan programas para la prestación de este servicio, de Si el país quiere lograr una educación inicial que sea el
acuerdo con la programación que determinen las entidades soporte efectivo para garantizar más y mejores posibilidades
territoriales en sus respectivos planes de desarrollo. de desarrollo humano y social se deben asumir desafíos en
Dentro del sistema educativo colombiano debe existir una reforma muy seria del nivel
preescolar y básica primaria, las Normales Superiores debemos dar el paso para pre-
sentar al gobierno el cambio de estructura; somos nosotros, como protagonistas de las
historia quienes debemos proponerlo; aquellos centros preescolares y de básica pri-
maria concebidos todavía con un docente orquesta forman parte de un modelo caduco,
mediante el cual no se superan hoy los vacíos de la educación colombiana, mucho me-
nos con normas estáticas que no permiten repensar la educación. Ellas limitan nuestro
actuar a 42 metros cuadrados de reflexión, con 22 horas de presencia en ese recinto
creador de adaptaciones a la sociedad presente sin medir las consecuencias tanto para
alumnos como para maestros.
1 Licenciado de la Pontificia Universidad Bolivariana de Medellín; Maestría en Desarrollo Social de la Universidad del Norte de Barranquilla.
Rector de la Normal Superior La Hacienda de Barranquilla, Atlántico. Correo electrónico: luisgermanribvera@hotmail.com.
Las organizaciones que agrupan a las Normales deben ser proactivas en una defensa abierta, clara y
pensada desde la pedagogía para sentarse frente al gobierno y que les sea devuelta la cédula de ciuda-
danía que el Estado les dio a las Normales para ser formadoras de maestros con los niveles completos.
artículos 2,8 y 9 del Decreto 2247 de 1997, se establece integrarlo por medio de procesos de exploración hacia los
que la educación preescolar se ofrecerá a los educandos de requerimientos de aprendizaje. Hasta el extremo de que
tres a cinco años de edad. El sistema no establece en qué hoy el preescolar figura desde los 85 días de nacidos has-
momento deben cumplir esa edad, por ello se señala que ta los cinco años. Robert Owen fundó en el año 1816 en
esta ha sido más una estrategia operativa que conceptual. Escocia un instituto de Educación Preescolar formal, pero
La sentencia T-323 de 1994 y T-1030 de 2006 de la Corte bien conocemos que en 1837 en Alemania ya se contaba
Constitucional, dice que el umbral edad de 15 años no es con el Kindergarten en el que sólo se tenía a los infantes
un criterio por el que deba restringirse el derecho a la edu- ocupados jugando y en entretenidos. .
cación de los menores de edad. Insiste en que las edades
fijadas en las normas no pueden tomarse como criterios ex- En el año de 1978 el Ministerio de Educación Nacional
cluyentes sino inclusivos. A su vez, las mismas sentencias ar- reglamentó la atención a niños de 4 a 6 años en las insti-
guyen que si bien las instituciones educativas públicas están tuciones educativas, y esa historia construida exitosamen-
obligadas a atender a los niños de cinco años como mínimo, te por las Normales Superiores, se pierde en el espacio y
sin perjuicio de los grados existentes en las instituciones tiempo sin reflexión seria que detenga la avalancha imposi-
educativas que ofrezcan más de un grado preescolar. tiva de gobiernos de turno en detrimento de las institucio-
nes educativas públicas, abriendo abanicos de empobreci-
En el mundo entero el preescolar dejó de ser un centro miento pedagógico a las mismas instituciones formadoras
de cuidados, de guardería, de alimentación y de reemplazo de Maestros y fortaleciendo maliciosamente la educación
de madres trabajadoras, o sólamente de entretenimiento, privada, hasta el punto de afirmar en varias ocasiones que
para darle el carácter de educación formal, y de esa manera estamos en decadencia frente a lo privado.
Las Escuelas Normales Superiores debemos volver a social y humano acertado para una sociedad cada día que
conquistar el espacio perdido; sin reflexión alguna dejamos vive cada día más crisis de toda índole. Hoy consideramos
al gobierno del momento deteriorar el gran laboratorio de algunos que estos años de oro de un niño deben interpre-
expresión pedagógica fundante. Nuestras organizaciones tarse a la luz de procesos de exploración y desarrollo de
como la misma ASONEN fuimos inferiores a esta reflexión, sus potenciales talentos e inteligencias, estructurando su
quedando totalmente silenciada la exigencia constitucio- mente desde el mundo posible que el sujeto trae como
nal y los principios que rigieron la reestructuración de las tendencias genéticas. Estos ambientes los puede generar y
Escuelas Normales; a pesar de considerar una autonomía desarrollar una Normal Superior realmente acreditada para
en los planes de estudio dada a las Normales Superiores tal fin.
Acreditadas, dejamos perder un espacio privilegiado en la
organización de nuestras Instituciones. Muchas de ellas si- En los países en donde han desaparecido las Norma-
guieron conservando el preescolar con 4 años, pero debe- les, hoy se arrepienten de semejante desastre. ¿Por qué
ríamos llegar a los 3 años; mucho más en cuanto la norma entonces, sin razones pedagógicas serias y sin discusión
constitucional da libertad y derecho a los padres de familia se anula este proceso que ellas han tenido, sólo con el
para optar el ingreso de sus hijos al sistema educativo. sofisma financiero que de todas maneras no tiene sustento
ni presentación? Dentro del sistema educativo colombiano
Las experiencias construidas en las Instituciones Educati- debe existir una reforma muy seria del nivel preescolar y
vas Públicas han sido vulneradas por los vaivenes de la polí- básica primaria, las Normales Superiores debemos dar el
tica educativa del sistema, a veces sin revisión, sin escuchar paso para presentar al gobierno el cambio de estructura;
argumentos, con el pretexto de las simples leyes que hay somos nosotros, como protagonistas de las historia quie-
que cumplir a ciegas, leyes que se construyen con sofismas nes debemos proponerlo; aquellos centros preescolares
pedagógicos que no consultan a las verdaderas instituciones y de básica primaria concebidos todavía con un docente
que forman Maestros para el nivel de preescolar y básica orquesta forman parte de un modelo caduco, mediante el
primaria. Ya habían perdido algunas de las las Normales su cual no se superan hoy los vacíos de la educación colom-
formación pedagógica desde 8º grado, otras desde el mismo biana, mucho menos con normas estáticas que no permi-
46 6º grado; hoy con la creación de los Ciclos Complementarios ten repensar la educación. ¡Ellas limitan nuestro actuar a
se redujo la formación a partir de 10º grado. 42 metros cuadrados de reflexión, con 22 horas de presen-
cia en ese recinto creador de adaptaciones a la sociedad
No es posible quedarnos en las simples normatividades presente sin medir las consecuencias tanto para alumnos
del gobierno; se requiere hacer un análisis pedagógico de como para maestros!.
los espacios formativos que el sistema debe brindar a través
de las instituciones que históricamente han sido reconocidas Las Normales tenemos que volver sobre los niños de
para tal fin, como lo son las Escuelas Normales Superiores, 3 a 5 años según lo previsto en la Constitución y en la
que desde 1994 se han dado a la tarea de repensar su que- ley, demandar frente al gobierno la entrega de esos espa-
hacer para estos tiempos que requiere otro modelos edu- cios pedagógicos que se nos dio, y que por capricho de
cativos mas asertivos. Pretender que cualquiera puede ser gobierno se nos arrebató, irrespetando a las instituciones
Maestro en estos tiempos ha sido la gran equivocación del que fuimos creadas para ello. No se puede seguir toleran-
gobierno, basta dar un vistazo a los criterios que el gobierno do la violencia pedagógica sobre las Normales Superiores,
establece para ello, como un simple concurso de conoci- no se puede seguir pensando a la Normal como cualquier
mientos; nos olvidamos de los perfiles requeridos para ser colegio, se nos debe considerar con diferencias, con di-
Maestro, para dar el paso a la formación de Instructores de versidad y con estructuras administrativas muy diferentes.
disciplinas. Las Normales no formamos en las disciplinas, Nuestros laboratorios no pueden desaparecer, la esencia
formamos un Maestro para el preescolar y la básica primaria. nuestra es aquella práctica docente sobre la que hemos
Hoy vemos con cierta distancia el desarrollo de estos nue- construido una experiencia y que nos permite mirar con
vos llamados maestros de cualquier disciplina y profesión; el cuidado el potencial de un nuevo Maestro. Las organi-
tiempo nos dirá qué resultados produce esta estrategia no zaciones que agrupan a las Normales deben ser proac-
reflexionada desde la pedagogía. tivas en una defensa abierta, clara y pensada desde la
pedagogía para sentarse frente al gobierno y que les sea
Tanto el preescolar como la educación básica primaria devuelta la cedula de ciudadanía que el Estado les dio a
requieren personas adecuadamente formadas, los años y las Normales para ser formadoras de maestros con los
la experiencia son las que nos permiten construir un futuro niveles completos.
Aprender a leer y a escribir es uno de los alcances más significativos del ser humano, no sólo
por el gran número de expectativas a nivel familiar, social y escolar que lo enmarcan sino
porque ambas habilidades se convierten en una fuente de enriquecimiento personal para el
individuo. Desde su más tierna infancia los niños reciben diferentes estímulos con el fin de
alcanzar el pleno desarrollo de estas destrezas. Haciendo referencia específicamente a la
actividad de escribir se puede decir que, diversos factores se conjugan con el fin de afianzar o
limitar su alcance en el ámbito educativo y personal. Estos agentes son: las concepciones que
fundamentan la práctica pedagógica, la metodología, el rol del docente y el contexto escolar.
47
1 Especialización en Didácticas para la Lectura y Escritura con Énfasis en Literatura. Universidad San Buenaventura.
2 Camps, A. (1997): “Escribir. La enseñanza y el aprendizaje de la composición escrita”. Signos, 20, 24-33.
3 Ferreiro, E. y Teverosky, A. (1979): “Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño”. México: Siglo XXI.
4 Camps, A. op. Cit.
5 Camps, A. op. cit.
6 Según Vygotsky (1978), es necesario llevar al niño a una comprensión interna de la escritura y lograr que ésta se organice como un desarrollo
más que como un aprendizaje.
www.serviciospostalesnacionales.com
La Bebeteca: un puente
para llegar a la escuela
Diva Nelly Mejía Franco 1, 2
1 El presente artículo corresponde a la ponencia alterna presentada por la autora el 22 de agosto de 2009 como requisito para optar el título de
Doctora en Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, CINDE -Universidad de Manizales. Docente. Correo Electrónico: divanelly07@gmail.com.
2 Ferreiro, E. (s.f.). La alfabetización no es un lujo ni una obligación: es un derecho. Disponible en http://www.taringa.net/posts/ info/861531/Dra_-
Emilia- Ferreiro:-Leer-y-escribir-en-un-mundo-cambiante.html. [Recuperado 2009, marzo 26].
3 De Zubiría, M. (2001). Teoría de las seis lecturas. Mecanismos de aprehendizaje semántico. Tomo I. Santafé de Bogotá: FAMDI.
4 Cassany, D. (1999). La cocina de la escritura. Barcelona: Anagrama.
5 Teberosky & Tolchinsky (1992). Más allá de la alfabetización. En: Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Education and Development, (pp.
5-13). Madrid: Board.
6 Fundación Iberoamericana Down 21. (s.f.). Método Doman. Disponible en http://www.down21.org/educ_psc/ educacion/ tecnica_inetrvencion/
doman.htm [Recuperado 2009, julio 17].
7 Ferreiro, E. & Teberosky, A. (1979). Los sistemas de escritura en el desarrollo del niño. México: Siglo XXI.
8 Goodman, Y. (1992). Las raíces de la alfabetización. En Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Education and Development, (pp. 29-42).
Madrid: Board.
Consecuente con la preocupación por el tema, el Ministerio Ferreiro & Teberosky (1979) y Goodman (1992); autores que
de Educación MEN de Colombia ha diseñado los Lineamientos tocan algunos puntos cercanos a esta exploración de la cultura
52 Curriculares de la Lengua Castellana. Uno de los campos del tra- letrada en la primera infancia.
bajo curricular, que propone el documento hace énfasis en las
competencias y actos comunicativos, entre ellos la lectura y la De Zubiría (2001) propone la Teoría de las seis lecturas y
escritura. Su concepto: “Leer es un proceso de construcción de con ella un modelo que promueva los procesos psicológicos
significados a partir de la interacción entre el texto, el contexto y relativos a las formas superiores de decodificación semántica
el lector, (…) factores que determinan la comprensión” (1998, de un texto. Es una teoría de nivel pedagógico que habla de
p. 72)14, da pie a amplias interpretaciones. Sin embargo, su ma- la necesidad de aprender a leer y de enseñar a leer, y de las
yor interés es que el lector o lectora (estudiante), a través de un condiciones que se requieren para hacerlo. Sustenta la hipó-
proceso, llegue a dar cuenta de un texto escrito, sus ideas y sus tesis: es completamente imposible aprender a leer durante
relaciones; reconoce la importancia de los saberes previos y el primero de primaria, ya que la lectura no se circunscribe sólo
nivel de desarrollo cognitivo del lector o lectora, pero no aborda a la identificación de letras y sílabas; corresponde a una serie
de manera explícita la primera infancia. de procesamientos secuenciales que obedecen a seis niveles
de lectura: Lectura fonética (de naturaleza perceptual analítico-
La presente revisión bibliográfica sobre la enseñanza de la sintética), decodificación primaria (las palabras y su significado),
lectura y la escritura permite conocer que cada uno ha sido decodificación secundaria (las frases y sus pensamientos), de-
tratado teóricamente de manera independiente, aunque en la codificación terciaria (los párrafos y sus estructuras), categorial
práctica son procesos relativamente simultáneos y de incidencia (estructura semántica del escrito) y metasemántica (análisis
mutua. transtextual). Los mecanismos asociados con los procesos de
comprensión, en cada uno de los niveles, abarcan desde el
Exploración teórica en lectura y escritura preescolar –o transición– hasta la universidad.
Alrededor de la lectura y la escritura se han configurado diver- Cassany (1999), critica a la escuela porque sólo ofrece unos
sas teorías, discusiones y estudios; unos, generales; otros, parti- rudimentos esenciales de gramática, insuficientes para cubrir las
culares, entre los que merecen destacarse el de Zubiría (2001), complejas demandas escriturales de la vida moderna. Afirma
Cassany (1999), Teberosky & Tolchinsky (1992), Doman (s.f.), que la formación en escritura de la mayoría de las personas
El Método Doman es una metodología de intervención tem- Nivel I: Los niños y niñas reconocen el dibujo y la escritura 53
prana diseñada para niños y niñas con lesiones cerebrales que como dos formas básicas de representación gráfica, ya que
se basa en el aprovechamiento de su potencial de desarrollo. utilizan elementos similares: líneas, rectas, curvas y puntos.
Gracias a los resultados positivos obtenidos con el tratamiento Y perciben que su diferencia radica en un principio organiza-
su autor, Glen Doman, decidió aplicarlo a niños y niñas norma- dor: la forma de las letras es arbitraria y están ordenadas de
les, desde edades muy tempranas, con el ánimo de lograr avan- manera lineal. Simultáneamente comprenden que las letras
ces más significativos. Básicamente consiste en elaborar un Per- se usan para representar una propiedad de los objetos del
fil de Desarrollo Neurológico de los niños y niñas y, de acuerdo mundo –sus nombres–. Sin embargo, se cuestionan por las
con éste, estructurar un programa secuenciado y sistematizado condiciones (en cantidad y variedad) que dicha escritura debe
de la labor educativa fundamentado en movimientos progre- tener para que sea entendible, “legible”. Las autoras sintetizan
sivos, eficaces en áreas motrices e intelectuales. Este método dichas construcciones conceptuales en dos principios: Princi-
comprende los siguientes programas: de lectura, de inteligencia pio de cantidad mínima y Principio de variaciones cualitativas
(o conocimientos enciclopédicos), musical, de matemáticas, de internas, los cuales no son suficientes para el niño o niña, por-
escritura, de excelencia física, y de segundo idioma como lengua que aún no tiene claro los criterios para representar diferencias
extranjera (para las lenguas extranjeras que se enseñan como de significado.
lengua materna se usa el método de lectura).
Nivel II: La búsqueda siguiente se concentra en las cadenas
Uno de los métodos más difundidos del Método Doman escritas para encontrar diferencias gráficas objetivas que justifi-
es el de la enseñanza de la lectura global que, al igual que los quen diferentes intenciones e interpretaciones. El niño o niña
demás aprendizaje propuestos, se desarrolla por la presentación ahora establece comparaciones entre los nombres escritos rela-
de bits de inteligencia –máxima cantidad de información que cionándolos con algunas propiedades físicas de las representa-
puede ser procesada a la vez en un segundo–. Estas unidades ciones (grandes, pequeños, antiguos, nuevos…). En otras pala-
de información o bits deben ser: precisas (lo más exactas po- bras, a los principios de comparación intra-relacional –cantidad,
sible), discretas (contener un solo elemento, sin adornos), sin variedad– se suma un tipo de comparación inter-relacional.
ambigüedades, novedosas (para mantener el interés). El proce-
dimiento consiste en que las palabras, los números, las láminas Nivel III: Se caracteriza porque el niño o niña empieza a en-
de animales... son enseñadas a los niños y niñas en grupos de tender que el sistema alfabético corresponde a un valor sono-
10, varias veces al día (3 ó 4 veces) y cada lámina se le muestra ro. Se trata de la fonetización de la representación escrita. En
este nivel los niños y niñas construyen tres hipótesis: silábica, transición natural entre los dos niveles de lectura, basado en
silábico-alfabética y alfabética. La hipótesis silábica constituye un los principios psicogenéticos, pedagógicos y conceptuales que
intento por asignarle a cada letra un valor silábico, pero cuando demanda la etapa en desarrollo.
dicho intento de correspondencia entre grafía-sílaba no enca-
ja, lo conduce a buscarla entre grafía-sonido. Inicia así la ex- Formar conciencia de lector o de lectora
ploración silábico-alfabética. Es un proceso constructivo donde
algunas letras ocupan el lugar de sílabas y otras el de unidades En el ámbito escolar, tradicionalmente es común la expecta-
sonoras menores o fonemas. Cuando los niños y niñas descu- tiva de que todos los niños y niñas deben aprender a “leer” al
bren que las diferencias sonoras suponen letras diferentes, es finalizar el primer año o grado; la escuela asume que al llegar
decir, el principio fundamental de cualquier sistema de escritura a este nivel los niños y niñas están en capacidad de producir
alfabética, han arribado a la hipótesis alfabética. textos “bien escritos y con sentido”. Pero esta idea no ha consi-
derado los nuevos problemas que deben enfrentar, entre ellos
De acuerdo con Goodman (1992), los niños y niñas mo- la separación entre palabras, la ortografía y la puntuación, opera-
dernos están inmersos en una sociedad alfabetizada que –in- ciones que demandan un alto nivel de simbolización y abstrac-
dependiente de su contexto, nivel socioeconómico y nivel cul- ción. La comprensión del sistema escritural exige un primer nivel
tural– los pone en contacto, desde que nacen, con múltiples de reflexión sobre la lengua relacionado con las posibilidades de
materiales y formas de lectura y escritura. Por tanto, al ingresar a segmentación del habla, pero las unidades de análisis lingüísti-
la escuela llevan consigo un importante cúmulo de experiencias, co no corresponden al nivel de conceptualización de los niños
generalmente ignorado, que para el autor constituyen las raíces y niñas de esta etapa (Ferreiro, 2002)15. A todo ello se suma
de un árbol, que eventualmente se convertirá en el árbol de la el desconocimiento de la historia social y personal; se olvida
alfabetización de la vida. Estas raíces incluyen: precisamente la cultura letrada, “derecho de cualquier niño que
nace en los tiempos de la interconexión” (Ferreiro, s.f.). No se
a) Mostrar conocimiento de lo impreso en contextos situa- ha tenido en cuenta que la conciencia de lector o de lectora se
cionales forma desde muy temprana edad y requiere la adquisición de
habilidades que se van dando poco a poco en los espacios y
54 b) Tomar conciencia de lo impreso en discursos coherentes contactos con el libro y sus mediadores. Hay un trayecto en el
c) Conocer las formas y funciones de la escritura proceso formativo del lector o lectora que se hace invisible a los
d) Usar el habla para acompañar el lenguaje escrito ojos de un sujeto adulto desprevenido: se trata de la primera
infancia. En esta etapa del ser humano la lectura se relaciona
e) Exhibir habilidad de pensar sobre la lectura y la escritura
con oír, mirar, oler, tocar, probar y moverse. La familia, como
núcleo social primario, es la llamada a comprometerse en un
Goodman (1992) afirma que estas cinco raíces de la alfabe- proyecto de educación integral que fortalezca el desarrollo del
tización son desarrolladas por los niños y niñas en colaboración sujeto infante en todas sus dimensiones.
con los miembros de su familia y su grupo social, gracias al
continuo contacto con los actos significativos de alfabetización Todas las encuestas coinciden en un hecho muy simple: si
que ocurren diariamente en su contexto. Cada niño o niña res- el niño ha estado en contacto con lectores antes de entrar a la
ponde al proceso de forma diferente de acuerdo con la historia escuela, aprenderá más fácilmente a escribir y leer que aque-
personal; inventa o reinventa formas y funciones de la lectura y llos niños que no han tenido contacto con lectores (Ibíd., s.f.).
la escritura a medida que explora y experimenta con los usos
de la alfabetización, sean éstos agradables, dolorosos o difíciles. Los niños y niñas le confieren atención e importancia a los
objetos que tengan algún significado para las personas adultas,
Haciendo una breve reflexión sobre los seis estudios revi- aún sin comprender muy bien lo que subyace en ellos. Así su-
sados para abordar el tema de la lectura en la primera infan- cede con la lectura y las letras. Ferreiro denomina este evento
cia, se vislumbran dos categorías o grupos: uno, tradicionalista, como primera inmersión en la cultura letrada, la cual consiste
preocupado sólo por la aprehensión de la lectura y escritura básicamente en escuchar leer en voz alta, haber visto escribir
alfabética convencional, pero con propuestas interesantes y bien con intencionalidad, haber participado en actos sociales donde
fundamentadas; y el otro, vanguardista, más reciente y en pro- leer y escribir tiene sentido, plantear preguntas y obtener res-
ceso de construcción, que reconoce la incidencia del contexto puestas… Este acto de lectura –de acuerdo con la autora– es
socio-cultural en la formación de un lector o lectora precoz. Dos para niños y niñas un acto de magia, donde entran en escena
posiciones que urgen de un puente articulador que permita una un sujeto intérprete, los símbolos (o código escrito) y el mismo
15 Ferreiro, E. (2002). Escritura y oralidad: unidades, niveles de análisis y conciencia metalingüística. En Relaciones de (in)dependencia entre ora-
lidad y escritura. Barcelona: Gedisa.
La Bebeteca, ¿un puente en construcción? La magia de las historias y la lectura de textos, acordes con
las necesidades y expectativas de los niños y niñas, con-
La Bebeteca ha sido implementada en varios países de Amé- tribuyen favorablemente en el proceso que requiere un
rica Latina y Europa (México, Cuba, Colombia, España y Francia). lector autónomo (sentido, fluidez, predicción, inferencia).
Según Reyes (2003)16, su principal papel es la animación de la La decodificación mecánica y/o precoz no garantiza la ca-
lectura para los más pequeños, para la primera infancia: pacitación suficiente para la lectura adecuada de los textos.
El proyecto alberga la esperanza de que muchos niños de Es un proyecto que involucra a diversos mediadores (pa-
Colombia puedan encontrar en las palabras y en los libros un dres y madres, maestros y maestras, bibliotecarios y biblio-
tejido simbólico para empezar a crecer, para descubrir cami- tecarias…) en un trabajo de equipo, comprometidos en la
nos, para construir sentidos y, ojalá, para habitar un país dis- formación simultánea y sistemática de sus integrantes en
tinto en el futuro. el amor por la lectura.
La Bebeteca, como programa nacional colombiano, surge La Bebeteca se consolida entonces como espacio educativo
paulatinamente de la experiencia con animación a la lectura en significativo, como un espacio sociocultural con intencionalidad
el Taller Espantapájaros, conformado por un equipo interdisci- pedagógica, con una nueva óptica en cuanto al desarrollo infan-
16 Reyes, Y. (2003). Yo no leo, alguien me lee… me descifra y escribe en mí. La bebeteca, relato de una experiencia de lectura en la primera infan-
cia, desarrollada en Espantapájaros Taller. En: Infancia, lenguaje y lectura. México: Conaculta.
til, consciente de la importancia que tienen las experiencias cor- De Zubiría, M. (2001). Teoría de las seis lecturas. Mecanis-
porales, emocionales, sociales y cognitivas de los niños y niñas mos de aprehendizaje semántico. Tomo I. Santafé de
con su contexto. Teniendo en cuenta las dimensiones para el Bogotá: FAMDI.
desarrollo integral del infante, la dimensión socio-afectiva ocu- Espinosa, G. (2002). La aventura del lenguaje. Bogotá: Pla-
pa un lugar privilegiado en la Bebeteca; allí padres, madres y neta.
sujetos adultos aprovechan el espacio cultural con un acompa-
ñamiento amoroso y paciente para leer con los bebés los libros Ferreiro, E. (s.f.). La alfabetización no es un lujo ni una
obligación: es un derecho. Disponible en http://www.
disponibles y participar de las actividades. El desarrollo afectivo
taringa.net/posts/ info/861531/Dra_-Emilia- Ferreiro:-
del niño o niña se perfila de acuerdo con la emotividad y las Leer-y-escribir-en-un-mundo-cambiante.html. [Recupe-
manifestaciones que se dan en las relaciones con las personas rado 2009, marzo 26].
más cercanas y significativas para él o ella. Las más estimulan-
tes y efectivas serán las relaciones positivas; éstas facilitan la Ferreiro, E. (2002). Escritura y oralidad: unidades, niveles
de análisis y conciencia metalingüística. En Relaciones
expresión de sus emociones y sentimientos, así como también
de (in)dependencia entre oralidad y escritura. Barcelo-
situaciones de bienestar y seguridad, decisivas para el fortaleci-
na: Gedisa.
miento de sus esquemas morales y la adquisición de formas de
relación interpersonal. Ferreiro, E. & Teberosky, A. (1979). Los sistemas de escritura
en el desarrollo del niño. México: Siglo XXI.
La Bebeteca ofrece un espacio de seguridad y confianza para Fraser, J. (2003). Desarrollo infantil inicial: salud, aprendiza-
el desarrollo de la sensibilidad, la expresión espontánea, el es- je, y comportamiento a lo largo de la vida. En: Primera
tablecimiento de relaciones, analogías, metáforas, de acuerdo infancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias
con el nivel de desarrollo de los niños y niñas. El contacto con del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargra-
la literatura infantil se asume como una práctica cultural que phics S. A. p. 85.
beneficia su desarrollo en las diferentes dimensiones. Como Fundación Iberoamericana Down 21. (s.f.). Método Doman.
ambiente socio-cultural la Bebeteca se configura como puente Disponible en http://www.down21.org/educ_psc/
de estructuras firmes entre la familia y la escuela, propiciando educacion/ tecnica_inetrvencion/doman.htm [Recupe-
56 un ambiente significativo que contribuye a la definición de es- rado 2009, julio 17].
quemas propicios para el aprendizaje de la lectura y la escri- García, M. C. (2003). La participación de los padres como
tura. De igual manera, podría afirmarse que es el primer paso factor de calidad en programas de desarrollo infantil,
hacia la educación formal acompañado por la familia, o mejor, desarrollo humano y desarrollo social. En: Primera in-
de la incorporación de la familia en actividades de aprendizaje fancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias
escolar; es el primer acercamiento transitorio hacia una nueva del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargra-
etapa. Es además un espacio para la formación democrática del phics S. A. p. 147.
ciudadano o ciudadana, si se tiene en cuenta que está abierto a Goodman, Y. (1992). Las raíces de la alfabetización. En En
todas las familias, independiente del nivel socio-cultural del que Infancia y aprendizaje. Journal for the Study of Edu-
procedan. Fortalece los vínculos de la familia con la escuela y la cation and Development, (pp. 29-42). Madrid: Board.
prepara para el acompañamiento amoroso de sus hijos e hijas Ministerio De Educación Nacional (1998). Lineamien-
en el proceso educativo. Tal como lo afirma García17, la partici- tos Curriculares. Lengua Castellana. Santafé de Bogotá:
pación de los padres y madres en los programas de desarrollo Magisterio.
y educación infantil constituye un factor de calidad que asegura Reyes, Y. (2003). Yo no leo, alguien me lee… me descifra
logros importantes en los niños y niñas, y en las mismas familias y escribe en mí. La bebeteca, relato de una experiencia
y las comunidades. de lectura en la primera infancia, desarrollada en Espan-
tapájaros Taller. En: Infancia, lenguaje y lectura. México:
Conaculta.
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17 García, M. C. (2003). La participación de los padres como factor de calidad en programas de desarrollo infantil, desarrollo humano y desarrollo
social. En: Primera infancia y desarrollo. El desafío de la década. Memorias del encuentro sobre Primera Infancia. Bogotá: Cargraphics S. A. p. 147.
• ACTUALIDAD •
• ACTUALIDAD •
Si el Estado no resuelve prontamente la preocupante situación nutricional de la infancia y la juventud, muchos esfuerzos que se emprendan en otros sectores, como
en el de la educación, no podrán tener todo el efecto deseado. No es posible que Colombia continúe manteniendo uno de los mayores niveles de desigualdad entre su
población, en el conjunto de países de América Latina.
los acompañan los jefes de hogar, las madres y cabezas de Respecto a la desnutrición global, –ésta significa la de-
familia, que es claro, han sido efectivamente afectados por ficiencia del peso con relación a la edad-, representa el re-
58 las condiciones ya anotadas. sultado de desequilibrios pasados y recientes- se presenta
con mayor prevalencia en el nivel 1 del SISBEN (13.4%);
Por ello se observa el deterioro de indicadores de creci- en niños con madres sin educación (24.1%) y en niños
miento de los niños menores de 5 años, manifiesto en el indígenas (29%). Sin embargo, uno de cada 6 niños y ado-
retraso en talla y en desnutrición global, así como retraso en lescentes presenta sobrepeso y obesidad, y es mayor a
crecimiento en niños de 5 a 17 años; es desafortunado que medida que aumenta el nivel educativo de la madre (9.4%
en el documento referenciado no estén disponibles los indi- en mujeres sin educación frente a 26.8% en madres con
cadores por segmentos de edad como, los de 6 a 10 años y educación superior); por ello es necesario considerar con
de 10 a 17, ni tampoco de cuenta de la diferencia de género. cautela la variable del nivel educativo de las madres para
aducirles a esta condición, una mayor o menor condición
Tal como lo cita el documento que nos atañe4, el porcenta- del nivel nutricional de los hijos a cargo. Tanto en zonas
je de retraso en crecimiento de los niños menores de 5 años rurales como urbanas hay retraso en talla en los menores
es de 13.2%, manifiesto en un mayor porcentaje en la pobla- de 5 años y retraso en crecimiento en niños de 5 años
ción de los niveles 1 y 2 del SISBEN, en hijos con madres con a 17 años. (Cuadro No. 1). Es a todas luces imperativo
menor grado de educación y residentes en zonas rurales de emprender esfuerzos para detener dichos procesos en
las regiones Atlántica, Amazonia, Orinoquia y Pacífica. Se se- la población infantil dado el peligro que se presenta de
ñala que en las familias con mayor número de hijos (6 o más) derivar en desnutrición crónica. La encuesta fue realizada
son los últimos hijos los más afectados por el retraso en cre- principalmente en población mayor de cinco años; sólo se
cimiento. El área rural del país casi duplica la prevalencia de presentan algunos indicadores –por lo menos en la infor-
desnutrición global frente al área urbana (4.7% frente a 2.9%) mación disponible– respecto a la población menor de 5
y la población infantil más afectada por este flagelo reside en años. Es necesario preguntarse ¿cuáles son las condiciones
las regiones Atlántica (4.9%), Amazonia y Orinoquia (3.6%)5. de salud y nutrición de dicha población?
En relación con la condición anémica se destaca que Tanto las políticas como los programas de salud y nutrición
uno de cada 6 niños de 1 a 4 años y una de cada 6 mu- deben revisar estos resultados en razón de la asociación
jeres embarazadas de la muestra encuestada presentaron existente entre la anemia, el parasitismo y las deficiencias
anemia y 11% de jóvenes entre 13 a 17 años manifiestan en Vitamina A. A una población en edad escolar que ma-
esta deficiencia; 30.8% de la población total nacional en- nifieste dichas falencias nutricionales, ¿cómo se le puede
cuestada manifestó anemia (Cuadro No. 1–2). Uno de cada exigir una permanencia en la escuela y un rendimiento aca-
4 niños de 1 a 4 años posee deficiencia de Vitamina A; y démico? ¿Se le puede exigir un rendimiento académico a
cerca de 1 de cada 2 niños de 1 a 4 años manifestaron una población universitaria, que en la edad temprana –an-
deficiencias de zinc, “considerado un problema de salud tes de los cinco años- no ha recibido la adecuada atención
pública por la Organización Mundial de la Salud OMS” 8 . en salud y nutrición?
59
Cuadro Nº 2
Indicadores de salud y nutrición por región geográfica
• ACTUALIDAD •
También es paradójico que “Bogotá sigue reportando los mayoría, en la edad escolar”16, puesto que la población que
mayores niveles de desnutrición entre preescolares y la re- ha recibido atención en refrigerios y suplementos nutriciona-
gión más cercana a los niveles de desnutrición reportados les es la de los establecimientos educativos de la Secretaría
es la Caribe”15. (Atlántica). La autora señala que este hecho de Educación Distrital de Bogotá, D.C17.
puede sugerir que “los programas contra la desnutrición en
Bogotá son dirigidos y están teniendo un mayor efecto, en su La seguridad alimentaria se define como la “disponibilidad
suficiente y estable de alimentos, el acceso y el consumo
oportuno y permanente de los mismos en cantidad, calidad
e inocuidad de parte de todas las personas, bajo condiciones
que permitan su adecuada utilización biológica para llevar
una vida saludable y activa”18. Sin embargo, un alto porcentaje
de los hogares de la muestra de zonas rurales y urbanas, de
las distintas regiones manifiestan “inseguridad alimentaria”:
57.5% total nacional, 42.7% zona rural y 38.4% zona urbana.
(Cuadro No. 1 y Cuadro No. 2). Prácticas alimentarias inade-
cuadas, aspectos relacionados con la educación nutricional, ac-
ceso a la canasta de alimentos y las condiciones económicas
son factores condicionantes de la situación nutricional.
Cuadro Nº 3
Prácticas alimentarias diarias19
Se señala, como lo concluye uno de los documentos ana- ambientales y culturales que ejercen gran influencia en el
lizados, que “Es imperioso abordar la problemática de la estado de salud”20.
malnutrición colombiana a partir del enfoque de los deter-
minantes sociales de la salud, entendidos como los deter- Los niveles de bienestar -condiciones generales de vida,
minantes, estructurales y las condiciones de vida que son salud y nutrición– son responsabilidad del Estado el cual
causa de buena parte de las inequidades sanitarias entre debe velar por cumplir los fundamentos constitucionales para
los países o dentro de cada uno de ellos. Se trata en particu- que cada día su población –infantil, estudiantil, en general
lar de: los ingresos y los bienes y servicios; las circunstancias toda la población- logre mejores condiciones de vida; si no se
que rodean la vida de las personas, tales como su acceso resuelven prontamente estos preocupantes factores ya men-
a la atención sanitaria, la escolarización y la educación; sus cionados, muchos esfuerzos que emprendan otros sectores,
condiciones de trabajo y ocio; y el estado de su vivienda como el de la educación, no podrán tener todo el efecto de-
y entorno físico. La expresión determinantes sociales pro- seado. No es posible que Colombia continúe manteniendo
puesta por la Organización Mundial de la Salud OMS resu- uno de los mayores niveles de desigualdad entre su población
me el conjunto de factores sociales políticos, económicos, en el entorno de los países de América Latina.
15 Acosta Ordóñez, Karina. (2012) La desnutrición en los primeros años de vida: un análisis regional para Colombia. Documentos de trabajo sobre
Economía Regional N. 16 Banco de la República. Enero. ISSN 1692 3715 http//www.banrep.gov.co/documentos/publicaciones/regional/docu-
mento/DTSER-160.pdf. Consultado febrero 17, 5 pm.
16 Acosta, loc. cit.
17 Álvarez, A. et al. (2008) Lo que antes era un privilegio hoy es un derecho. Plan de desarrollo de la administración de L.E Garzón. Alcaldía Mayor
de Bogotá, IDEP.
18 CONPES Social 113 de 2007. http://www.dnp.gov.co/Programas/Educaci%C3%B3nyculturasaludempleoypobreza/Pol%C3%ADticasSocialesTra
nsversales/SeguridadAlimentariayNutricional.aspx. Consultado Febrero 17 5 pm.
19 Elaborado a partir de ENSIN (2010), Pág. 13-15. Elaborado M.E. Romero. (2012).
20 ENSIN, (2010) OP. CIT Pág. 22.
• ACTUALIDAD •
E l pasado 20 de Febrero de 2012 en las instalaciones de COMPENSAR, y por convocatoria de FECODE, se reu-
nieron veintinueve organizaciones representantes del magisterio de educación básica y media, del profesorado
universitario, delegados de la Mesa Ampliada Nacional Estudiantil, MANE, representantes de los trabajadores de la
educación pública, directivos docentes, mujeres y voceros de organizaciones no gubernamentales interesadas en
la educación.
Fue palpable el interés y entusiasmo que despertó la propuesta, consistente en la modificación de varios artículos
de la Constitución Nacional para hacer de la Educación un Derecho Fundamental, financiado por el Estado, desde el
preescolar hasta la educación superior; de igual manera, se propone establecer la Carrera Administrativa Docente
Especial, que acabe con la tercerización de la actividad docente. Al respecto, se recogen importantes aportes para
hacer realidad esta tarea titánica de gran contenido político, que colocará barreras al tratamiento de la educación
como mercancía, como sucede actualmente en el país.
61
• ACTUALIDAD •
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El Referendo propuesto con entusiasmo tiene como propósito la modificación de varios artículos de la Constitución Nacional para hacer de la Edu-
cación un Derecho Fundamental, financiado por el Estado, desde el preescolar hasta la educación superior. De igual manera, propone establecer la
Carrera Administrativa Docente Especial, que acabe con la tercerización de la actividad docente.
El estudiantado fue particularmente receptivo, ya que comprendieron su estrecha ligazón con las luchas que ade-
lantan, los directivos docentes expresan el compromiso institucional, los trabajadores del sector hacen un llamado
a la unidad como garantía para avanzar y las organizaciones no gubernamentales muestran toda su disposición de
acompañar el proceso; algunas intervenciones ponen de presente, que esta iniciativa recorre nuestro continente de
manera que tendrá también el apoyo internacional. El Senador del Polo Luís Carlos Avellaneda presentó su mirada
relacionada con el Proyecto de Acto Legislativo que está gestionando en el Congreso.
Aclaradas las condiciones legales dentro de las cuales debe tramitarse el Referendo y las exigencias sobre el
número de apoyos y de votos, se concluyó que este representa un objetivo de largo aliento que requiere trabajo
de varios equipos y financiación adecuada de carácter nacional, acompañado de grandes movilizaciones y de con-
tacto permanente con el Congreso de la República. En este sentido, el Presidente de la Federación Colombiana de
Educadores FECODE, resaltó la importancia de las organizaciones participantes, sustentó la propuesta que hasta
el momento se ha trabajado y llamó a los asistentes a asumir con entusiasmo este reto que tendrá repercusiones
históricas a nivel nacional e internacional.
Finalmente, se acordó que el Comité de Impulso está integrado por un representante de las organizaciones par-
ticipantes, ampliado con las demás entidades convocadas que se excusaron de asistir y con este Comité amplio, se
decidirán las personas integrantes del Comité Promotor.
• ACTUALIDAD •
Internacional de la Educación
Oficina Regional para América Latina
www.ei-ie-al.org
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• ACTUALIDAD •
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65
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
1 Licenciado en Humanidades, Español y lenguas extranjeras de la Universidad Pedagógica Nacional y Magíster en Educación de la misma uni-
versidad. Profesor del Liceo de Cervantes y la Universidad Pedagógica Nacional. Ha desarrollado investigaciones sobre evaluación educativa,
enseñanza del lenguaje y la literatura. También se desempeña en el ámbito de la traducción, la creación y la crítica literarias. Correo electrónico:
sneider201@hotmail.com.
2 Torres, Carlos Alberto. Grandezas y miserias de la educación latinoamericana en el siglo XXI. En: Torres, Carlos Alberto (compilador) Paulo
Freire y la agenda de la educación latinoamericana en el siglo XXI. Buenos Aires, CLASCO.
3 Gobierno lanza programa para contrarrestar analfabetismo, que es del 7.6% en el país. Disponible en: http://www.colombiaaprende.edu.
co/html/home/1592/article-73557.html Consultado el 10 de noviembre de 2009.
4 ¿Qué hace Colombia frente a este problema social? Disponible en: http://www.cmi. com.co/?ir=noticia¬a=34159&seccion=8 Consulta-
do el 10 de noviembre de 2009.
Consecuencia palpable de estos procesos son los bajos En este nuevo orden, la “inasibilidad” del concepto de
niveles de comprensión y argumentación de los educandos calidad lo convierte en un fenómeno fácilmente demagógi-
pues, más allá de descifrar un código escrito o producirlo co12, amparado además por la acepción positiva del término
como respuesta comunicativa a una situación inmediata, (buena calidad, superioridad, excelencia)13 y por su repetición
les resulta difícil otorgar sentidos distintos a los explícitos constante como objetivo loable de cualquier acción educativa,
en los textos, involucrar el contexto y su entramado dis- especialmente en términos institucionales. En alfabetización,
cursivo, lo cual es caracterizado por Ferreiro7 como iletris- su afán cuantificador con pretensión de objetividad, la equipa-
mo, esa práctica que no supera la decodificación textual ración de productos educativos a cualquier otro tipo de mer-
por parte de personas alfabetizadas. Esto demuestra que cancía, su obsesión por la eficiencia, la creación de patrones,
5 Venegas, María Clemencia. Módulo sobre hábitos de lectura y consumo de libros: una mirada desde la escuela. En: Rey, Germán y otros (2001)
Hábitos de lectura y consumo de libros en Colombia. Bogotá, FUNDALECTURA. Pág. 89.
6 Lerner, Delia (2001) Leer y escribir en la escuela: lo real, lo posible y lo necesario. México, Fondo de Cultura Económica.
7 Ferreiro, Emilia (2001) Pasado y presente de los verbos leer y escribir. México, Fondo de Cultura Económica.
8 Giroux, Henry A. (1997) Los profesores como intelectuales. Hacia una pedagogía crítica del aprendizaje. Barcelona, Paidós.
9 Teberosky, Ana (2003) Propuesta constructivista para aprender a leer y a escribir. Barcelona, Vincens Vives.
10 McLaren, Peter (1998) Pedagogía, identidad y poder: los educadores frente al multiculturalismo. Rosario: Homo Sapiens.
11 Freire, Paulo. (2006) Pedagogía de la autonomía. Saberes necesarios para la práctica educativa. México: Siglo XXI.
12 Santos Guerra, Miguel Ángel (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
13 Niño Zafra, L.S. (2002) Dimensiones de la evaluación de la calidad de la educación. En: Opciones pedagógicas. Vol.25 U.D. Francisco José
de Caldas.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
indicadores y estándares aplicables en cualquier contexto y la privado, entre otros, y de determinados aspectos de los sis-
competitividad extrema14, generan una ruptura entre el cum- temas burocráticos en cuanto a su organización, gerencia y
plimiento de los índices de alfabetizados demandados por administración. Esta situación va en detrimento de los ideales
estos organismos y las prácticas de formación de lectores y formadores de un hombre integral, reducidos a dos funciones
escritores en sentido amplio, que además del reconocimiento escolares: la inserción de sujetos a la sociedad como fuerza
y la apropiación del código escrito, desarrollen sus potenciali- laboral y consumidores acríticos, así como foco de rentabi-
dades pragmáticas y discursivas. lidad económica a través de la reducción del gasto público.
Neoliberalismo, evaluación y calidad: la exclusión Los centros escolares se han convertido en “indicador
de los bienes simbólicos de competitividad”18 de los sistemas económicos lo cual
conlleva prácticas como la gestión empresarial que bus-
En su propuesta sobre una pedagogía de la autonomía, ca, ya no la formación del ciudadano, sino la satisfacción
Freire15 llama la atención sobre la función esencialmente del cliente o del consumidor. Así se configura el concepto
formadora de la escuela, cuyo soporte fundamental es la de calidad educativa como “grito de batalla del discurso”19
concepción del carácter humano que reside en el ejerci- que se pone en ejecución y se institucionaliza a través de
cio educativo. Este planteamiento es el andamiaje para las políticas educativas en general y, específicamente, en
establecer una crítica sobre los procesos de enseñanza- las políticas evaluativas. Ellas permiten centrar y orientar
aprendizaje direccionados desde paradigmas distintos al lo planteado en las primeras, poniéndolas a prueba20. Ade-
pedagógico, de orden administrativo, político o económico. más, proporcionan la información necesaria para intervenir
La educación es una interacción entre humanos, que habla el sistema a través de la identificación de “crisis educativas”
de lo humano, que propende por la humanización. Por lo o en la búsqueda y promoción de la calidad.
tanto, su carácter formador no puede ser desplazado por
otros elementos contextuales que suplanten su esencia. La educación basada en el sistema económico ha en-
contrado como su mayor égida la evaluación para legitimar
Sin embargo, Niño Zafra16 da cuenta de esta tergiver- su accionar y, prescindiendo de los aportes de los peda-
68 sación educativa a través de concepciones como los test gogos, ha generado, “todo un arsenal lingüístico” 21 que
de rendimiento desde la psicometría, la Teoría de la Ad- soporta su propuesta en la búsqueda de la calidad educa-
ministración Científica del trabajo de Taylor, los objetivos tiva. Paradójicamente, tal concepto de calidad poco o nada
conductuales de Bloom o las tecnologías educativas. En la tiene que ver con los procesos de formación humana (con
actualidad neoliberal, la educación ha heredado prácticas la educación) sino que promueve “el control burocrático,
que son justificadas por el discurso de la calidad e instru- aunque se presupone académico, del Estado hacia las ins-
mentalizadas por la evaluación entendida en términos de tituciones de educación” 22, los buenos desempeños en la
calificación, a través de la cual los individuos son tasados administración y la gestión en el ámbito transnacional, ade-
según su rendimiento y normalizados de acuerdo con cri- más de buscar sanear las finanzas de los gobiernos, gene-
terios estandarizados que fomentan un currículo y pensa- rar mano de obra barata y fomentar prácticas de exclusión y
miento únicos. alienación de sujetos dentro de las dinámicas neoliberales
de estandarización, privatización y consumo.
La ideología neoliberal ha generado una crisis de identi-
dad del ámbito escolar17, el cual se ha tornado en un híbrido Dentro de esta reducción de la enseñanza a las compe-
de aspectos propios del sector financiero como el servicio tencias útiles para las empresas, la alfabetización entendida
a la clientela, la competitividad, la eficacia, el financiamiento como decodificación cobra valor como práctica que dismi-
14 Santos Guerra, Miguel Ángel. (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
15 Freire, Paulo. (2006) Pedagogía de la autonomía. Saberes necesarios para la práctica educativa. México: Siglo XXI.
16 Niño Zafra, Libia Stella (2006) El sujeto en la evaluación educativa en la sociedad globalizada. En: Opciones pedagógicas. No. 32-33. U.D.
Francisco José de Caldas.
17 Al respecto se puede consultar: Laval, Christian (2004) La escuela no es una empresa: el ataque neoliberal a la enseñanza pública. Bar-
celona, Paidós y Jodar, Francisco. Alteraciones pedagógicas. Barcelona, Laertes.
18 Laval, C. Op. Cit.
19 Husen, citado por Santos Guerra, Miguel Ángel (Coord.) (2003) Trampas en educación. El discurso sobre la calidad. Muralla.
20 Suárez Ruiz, Pedro Alejandro (2007) Incidencia de la actual política evaluativa en instituciones de educación básica del país. Bogotá,
Universidad Pedagógica Nacional.
21 Díaz Borbón, Rafael (2007) Políticas, evaluación y metaevaluación en la reforma neoliberal: connivencia o acción transformadora. En: Niño
Zafra, Libia (Comp.) Políticas educativas. Evaluación y metaevaluación. Bogotá, Universidad Pedagógica Nacional.
22 Díaz Barriga, Ángel (2000) Evaluar lo académico. Organismos internacionales, nuevas reglas y desafíos. En: Pacheco, Teresa y Díaz Barri-
ga, Ángel. Evaluación académica. México, Fondo de Cultura Económica. Pág. 17.
nuye el gasto público, responde a los organismos interna- cional (como bien lo propone el Decreto 1290 de 2009 y
cionales y sus postulaciones frente a la calidad educativa sus ámbitos de evaluación, o la Ley General de Educación
(inclusión y alfabetización para todos los estudiantes) y, asi- y su recurrencia en la calidad como objetivo del sistema 69
mismo, forja un individuo que, incapaz de leer los signos educativo) con esa alfabetización técnica en cuyo seno se
más allá de su realidad inmediata, fácilmente se deja absor- desvirtúan las contingencias del hecho literario.
ber por el mismo sistema configurado por el consumo y el
juego oferta-demanda de la producción. En este contexto, Irónicamente, las políticas educativas referentes a la lite-
vale más un iletrado o analfabeta funcional que responda ratura parecen el espacio en el que se reconoce la importan-
pruebas estandarizadas o logre decodificar los instructivos cia de la recepción y creación literarias de acuerdo con los
referentes a su labor técnica, que un lector-escritor crítico últimos acercamientos teóricos e investigaciones, aunque
que, profundizando en el entramado discursivo y la ideología esta normatividad, su argumentación y loables propósitos
neoliberal subyacente, cuestione las prácticas de evaluación formativos contradicen las prácticas reales sujetas a las de-
emergentes o la instrucción técnica para la contratación de mandas neoliberales y su apuesta por la calidad. Por ejem-
mano de obra barata. plo, en los Lineamientos curriculares de Lengua Castellana
se concibe el acto de escribir, no sólo como una codificación
Contradicciones de las políticas educativas de significados a través de reglas lingüísticas, sino como pro-
en torno a la educación literaria ceso social e individual de construcción de mundo, en el
cual se ponen en juego saberes, competencias e intereses
El valor de la literatura como bien simbólico, estético y en un contexto socio-cultural y pragmático determinado23.
cultural que contribuye a la formación humana desde la No obstante, las prácticas difícilmente se centran en esta
exploración y el uso divergente del lenguaje, también se concepción de la literatura como creadora de realidades
margina de estas prácticas lingüísticas que optan por la y, por el contrario, asumen la enseñanza y calificación de
apropiación de la lengua en cuanto técnica para responder aspectos lingüísticos en la estructura superficial del texto24;
unas pruebas estandarizadas que circunscriben las posibi- esa técnica que, según el MEN y con la mención de autoras
lidades de sentido a una respuesta correcta. Este contexto como Ferreiro, Teberosky, Tolchinsky y Villegas, sólo encuen-
une tales directrices evaluativas desde el estándar interna- tran su lugar en la producción de sentido.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
27 Ravela, Pedro (2009) Evaluaciones externas, evaluación en el aula y calidad educativa en América latina (conferencia internacional) En: Desa-
rrollo Humano, Evaluación y Educación con Calidad y Pertinencia para Todos. Bogotá, Universidad Nacional de Colombia.
28 Savater, Fernando (2002) Instrucciones para olvidar al Quijote. Barcelona, Taurus.
29 Ministerio de Educación MEN, (2003) Estándares del Lenguaje, la lengua, la literatura y otros sistemas simbólicos.
• REFLEXIONES PEDAGÓGICAS •
punitiva de la calificación como égida del discurso neoliberal McLaren, Peter (1998) Pedagogía, identidad y poder:
y su calidad educativa?¿Cómo educar para la construcción de los educadores frente al multiculturalismo. Rosario:
múltiples sentidos y mundos posibles desde la realidad con- Homo Sapiens.
textual al tiempo que se exigen y miden resultados predeci- MINISTERIO DE EDUCACIÓN MEN (1998) Lineamientos
bles, estandarizados, circunscritos a unas cuantas respuestas curriculares de Lengua Castellana.
correctas? ¿Cómo hacer de lo literario un eje de formación en
lenguaje si su exploración discursiva va en detrimento de la (2003) Estándares del Lenguaje, la len-
lengua normativa que se exige, o si sus aportes a la formación gua, la literatura y otros sistemas simbólicos.
atañen a procesos inconmensurables como la imaginación o Niño Zafra, Libia Stella (2006) El sujeto en la evaluación
la creatividad, o, en últimas, si su indagación por lo huma- educativa en la sociedad globalizada. En: Opcio-
no no se constriñe a unas competencias básicas del mundo nes pedagógicas. No. 32-33. U.D. Francisco José de
escolar-laboral para codificar textos que den cuenta del uso Caldas.
adecuado del código estándar?
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• Bibliografía
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lo posible y lo necesario. México: Fondo de Cultura lectura y consumo de libros en Colombia. Bogotá,
Económica. FUNDALECTURA.
“Hay quienes creen que el destino descansa en las rodillas de los dioses,
yo creo que cada quien lo construye con su propio esfuerzo y dedicación”.
73
Eduardo Galeano
1 Profesores del Área de Ciencias sociales. IED Antonio Nariño, Bogotá, D.C. Correo electrónico: caito7a@hotmail.com.
Evidencias
Nivel de participación
Jueves 23 de Septiembre Lunes 27 de Septiembre Martes 28 de Septiembre Miércoles 29 de Septiembre Jueves 30 de Septiembre
Primer Modulo: 603-604 Primer Modulo:702-704 Primer Modulo: Undécimos Primer Modulo: 902-903 Primer Modulo: 801-803
Responsable: Stella Agúdelo Responsable: Yolanda Contreras Responsable: Claudia Peña Responsable: Alejandra Chacón Responsable: Carlos Rodríguez
Me quiero y Respeto Me quiero y Respeto El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones Identidad Y libre Desarrollo
Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida
La Alegría de Aprender La Guerra del Coltan Libertad de prensa Machismo- Feminismo El Agua Un Derecho
Fundación Libro de Vida Dilan Marín Dra. Ángela Marcela Cárdenas Luisa Aquello Juan González 803
Jasón Ceballos 1101 Paola López 901
Crezco cada día como persona DDHH pagina Web Violencia La Guerra del Coltan El Derecho a la Libertad
Fundación Libro de Vida Camila Galindo Dra. Liliana Burbano Dilan Marín Brayan Cortés 801
Felipe Barreto 1102 Abogada Fundar Jasón Ceballos 1101
Justicia de Genero Prostitución en Colombia El Hombre en tres Dimensiones Justicia de Genero Indicadores de Pobreza
Katherine de la Hoz Alejandra Amado 1101 Fundación Libro de Vida Katherine de la Hoz Daniela y Víctor González 803
Jonathan Corredor 1102 Jonathan Corredor 1102
Segundo Modulo: 601-602 Segundo Modulo: 1002-1003-1004 Segundo Modulo: 802-1001 Segundo Modulo:901-904 Segundo Modulo: 701-703
Responsable: Stella Agúdelo Responsable: Néstor Cangrejo Responsable: Carlos Rodríguez Responsable: Alejandra Chacón Responsable: Yolanda Contreras
Me quiero y Respeto El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones El Hombre en tres Dimensiones Identidad Y libre Desarrollo
Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida Fundación Libro de Vida.
La Alegría de Aprender Libertad y Comunicación Libertad versus Drogadicción Violencia de Genero Educación y Desigualdad Social.
Fundación Libro de Vida Luis Sebastián Ortiz. Ángela Muñoz 802 Vanessa Hernández Luis Sebastián Ortiz 1003
Cristián Parra 1102 Grupo Opción de Vida
Crezco cada día como persona Vender o Regalar los Recursos Desarrollo Humano Sostenible Desempleo La Guerra del Coltan
Fundación Libro de Vida Juan David Chaparro: 1102 Erika Pimentel 1001 Sebastián Betancur Dilan Marín
Andrés Guerrero 1003 Jasón Ceballos 1101
DDHH pagina Web Desarrollo Humano Sostenible Convivencia Experiencia de Vida DDHH Prostitución en Colombia
Camila Galindo Jorge Castrillón 1004 José Joaquín Ruíz Jorge Castillo 904 Alejandra Amado 1101
Felipe Barreto 1102 Coordinador Jornada Tarde
76
L a Revista Educación y Cultura es una publicación de la Federación Colombiana de Educadores FECODE, que desde el año
1984 viene divulgando aspectos importantes relacionados con la política pública en educación, investigaciones e innovaciones
educativas, temas de actualidad y de gran interés para los educadores, docentes e investigadores en educación. Además, la
revista es baluarte de las conquistas para el reconocimiento de la labor de los maestros colombianos y representa un faro de
creatividad y de discusión del Movimiento Pedagógico Colombiano, ampliamente reconocido en el exterior. Con cuatro números
al año, la revista llegó a sus 25 años de existencia en el año 2009, y, en el año 2011, publica su edición número 90.
Castaño, Inés Elvira, Blanco Catalina y Pinto Martha. Educa- Mi tallercito: Jardín Infantil. Ed. no. 13, Pág. 65, Dic., 1987.
ción preescolar: evolución, retos y alternativas. Ed. No.
12, Pág. 15. 20, Jun., 1987. Mondragón, Hugo. Derechos y necesidades fundamenta-
les de los niños y los adolescentes. Ed. No. 9, Pág. 55
Declaración de los derechos del Niño. Ed. No. 8, Pág. 62-
– 59, Sep. 1986.
62, Jul. 1986.
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maria.forero@icbf.gov.co. Palabras clave: Código del cabletv.net.co. Palabras clave: Comunicación. Movili-
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Servicios parafiscales. Política de infancia. infancia
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Página 73. Sep. de 2005. psarle@speedy.com.ar. Pa- infancia. Educación inicial.
• ARTE Y CULTURA •
El carnaval de Barranquilla,
constructor de identidad
Hugo Morales 1, Astrid Marina Coronado Pérez 2
• ARTE Y CULTURA •
• ARTE Y CULTURA •
carnaval durante 18 años y liderada por el maestro Álvaro superando todas las dificultades, viene realizando un pro-
Bustillo, ha legitimado su presencia en estas magnas fies- ceso de formación, cátedra que después de varias versio-
tas plenamente reconocido por las autoridades educativas nes fue institucionalizada por la Secretaría de Educación
y los entes organizadores de las actividades del carnaval, Distrital bajo la administración del Licenciado Jorge De Las
quienes valoran el aporte académico y cultural que realizan Salas Sarmiento, según Resolución Nº 001522 del 27 de
no solo esta institución sino todas las presentes en una de Septiembre de 2007. La falta de un apoyo real ha impedi-
las fiestas más importantes del país, que vienen haciéndo- do valorar justamente la importancia de dicho proceso del
lo sin apoyo gubernamental, situación que debería cam- que se han beneficiado cerca de 300 docentes, los cuales
biar si los entes encargados de la realización de este gran adquieren el compromiso de llevar a sus aulas los conoci-
suceso educativo-cultural denominado carnaval de Barran- mientos adquiridos.
quilla, destinaran recursos para garantizar la presencia de
los planteles educativos, que generación tras generación Sin duda alguna el desarrollo de la Cátedra del Carnaval
garantizan que no muera la tradición. se enmarca dentro de las exigencias de la UNESCO para
que el Carnaval mantenga la condición de patrimonio,
Los entes gubernamentales, tanto del sector educativo razón válida para garantizar su funcionamiento y porque
como del Cultural no abanderan ningún proceso de difusión además es el espacio que ha permitido que los docentes
y mucho menos de formación; trabajan en forma desarticu- comiencen a mirar el carnaval como sinónimo de cultura
lada lo que demuestra la poca importancia que le dan en las y educación y por eso el centro educativo se convierte en
instituciones educativas donde sobresale el aspecto lúdico y escenario natural para su vivencia e investigación, donde el
se soslaya lo cultural de nuestras fiestas y esto solamente en docente a partir de un trabajo interdisciplinar pueda orga-
los días previos al carnaval. Desafortunadamente no existe nizar el grupo de danzas, el grupo folclórico y la microem-
una corriente educativa constante, no hay proceso durante presa encargada de elaborar los vestidos de las danzas,
todo el año y aún más grave: lo extranjero se ha ido pose- disfraces y accesorios requeridos por la institución y la co-
sionando en algunas instituciones educativas, tanto las que munidad para participar activamente en esta gran fiesta,
participan en los grandes desfiles como las que organizan con el compromiso de liderar las actividades artistico-cul-
82 internamente el carnaval en sus instalaciones y en calles ale- turales al interior de la Institución Educativa y que en orden
dañas, y en casos extremos coronándolo con enormes des- preferencial la actividad más importante sea la del Carnaval
ordenes que nada tienen que ver con el auténtico Carnaval. para que el grito ¡quien lo vive es quien lo goza! e impreg-
ne de educación y cultura y llegue a ese colectivo histórico
El paulatino pero sostenido proceso de extranjerización que año tras año saca a relucir el orgullo de Barranquillero
de las manifestaciones dancísticas que confluyen en los di- y Caribeño inmerso en el deleite que produce esta fiesta
versos espacios del Carnaval de Barranquilla pone en serio sin igual en el país y el mundo.
peligro el aspecto primordial por el que fue declarado por
parte de la UNESCO como OBRA MAESTRA DEL PATRIMO- Mantener la condición de Patrimonio Oral e Inmaterial
NIO ORAL E INTANGIBLE DE LA HUMANIDAD. de la Humanidad del Carnaval de Barranquilla exige sal-
vaguardar sus expresiones tradicionales para propiciar el
La ausencia de una estrategia clara en el sentido de desarrollo de una identidad cultural, un espíritu axiológico,
implementar la CÁTEDRA DEL CARNAVAL en los diversos cívico y pedagógico promoviendo entre la niñez y la juven-
estamentos educativos y ciudadanos no ha permitido que tud de las instituciones educativas el valor de nuestras tra-
se conozca por parte del común de las gentes el origen y diciones por ser éstas las bases de identidad del carnaval.
arraigo profundamente CULTURAL - FOLCLÓRICO de nues- Por esta razón regresa EL CARNAVAL ESTUDIANTIL y este
tras fiestas llevando las de ganar la idea de un espacio año 2012 los niños y jóvenes nuevamente tendrán su espa-
para el goce y el desenfreno, soslayando la función que cio lúdico y formativo en el que se enfatiza la importancia
como constructor de identidad y dinamizador del sentido de la tradición con sus danzas, su música, sus letanías y sus
de pertenencia debe tener en las nuevas generaciones; por comedias. Las Instituciones Educativas tienen las puertas
eso es en las aulas donde debe iniciarse ese proceso de abiertas para que sus estudiantes gocen culturalmente el
apropiación y defensa de nuestro Carnaval a partir del co- Carnaval y al mismo tiempo se acerquen a su historia y
nocimiento de sus orígenes y desarrollo. comprendan su importancia como elemento formador de
Identidad por excelencia y sentirse realmente orgullosos
Al respecto una solitaria voz se alza en medio del am- de hacer parte de esa maravilla cultural declarada por la
biente barranquillero promoviendo la CÁTEDRA DEL CAR- UNESCO OBRA MAESTRA DEL PATRIMONIO ORAL E INMA-
NAVAL, es la del gestor cultural Cesar Martínez Lara quien, TERIAL DE LA HUMANIDAD.
25 61 Marcela Palomino
Celular 311 7707177
Teléfono 0942913685 Luis Fernando Betancur
Teléfono 098 4204236
CAQUETA QUINDIO
Carlos Alberto Rodríguez y otros Correo electrónico: marcelapalomino@yahoo.com Cra. 13A N. 34-36
Luz Amparo Bustamante ARAUCA Florencia Armenia
Correo electrónico: caito7a@hotmail.com Infancia-historia AICA Celular 315 8149282
Correo electrónico: luzabus@gmail.com IED Antonio Nariño Política educativa Arauca SUTEQ
Cra. 8 N.6-58 Henry Castro
Formación maestros de infancia Educación juvenil Primera infancia ASEDAR Cra. 13 N. 9-51
Teléfono 098 4354253 Cra. 13A N. 34-36
Familia Preescolar de 3 grados Cll. 19 N. 22-74 Teléfono 096 7369060
Derechos Humanos Celular 300 8283560
Sociedad Teléfono 097 8852123 CAUCA
Juventud crítica Plan de Desarrollo 2010-2014 RISARALDA
Ambientes educativos ATLÁNTICO Popayan GUAJIRA
Pereira
Primera infancia Barranquilla ASOINCA Fonseca Librería Nuevo Libro
20 36 ADEA Cll. 5 N. 12-55
Riohacha Cra. 4 N. 19-09
Cra. 38B N. 66-39 Teléfono 092 8220835
25 Patricia Londoño Yolanda Reyes
Teléfono 095 3563349 Ediciones Ciudad Universitaria
ASODEGUA Teléfono 096 3332688
Correo electrónico: Correo electrónico: yolandareyes@gmail.com Cll. 9 N. 10-107 SER
Jeff Harvey Cabezas Norman Alarcón Cll. N. 4-44 Teléfono 095 7285061
patricialondono@ustadistancia.edu.co Primera infancia Cll. 13 N. 6-39
Correo electrónico: jefharvey@hotmail.com Cll. 56 N. 46-104 Boston Teléfono 092 8244903
Infancia Literatura GUAINIA Teléfono 096 3251827
Formación maestros de infancia Celular 3106601461 Santander De Quilichao
Educación infantil Bebeteca P to. Inirida SAN ANDRÉS ISLAS
Familia Lenguaje Cecilia Ramos Mellizo
Formadores BOLIVAR SEG San Andrés Islas
Sociedad Cra. 11 N. 4 22 Julian Gutierrez Murillo
Monpox Teléfono 092 8297949 ASISAP
Ambientes educativos Teléfono 098 5656063
Rosalba Veleño Cra. 3 N. 6-25
Primera infancia
50 44 Cll. 10 N. 1A 17
CÉSAR GUAVIARE Teléfono 098 5123829
Diva Nelly Mejía Luís Germán Rivera C artagena Valledupar San José Del Guaviare
SANTANDER
47 Correo electrónico: divanelly07@gmail.com Correo electrónico: luisgermanrivera@hotmail.com Rosalba Guerrero Jurado ADUCESAR ADEG
Cll. 9 N. 22-56 Bucaramanga
Bebeteca Escuelas Normales Superiores Celular 315 3562358 Cll. 16 A N. 19-75
Judith Castillo Teléfono 098 5840327 SES
Primera infancia Escuelas Anexas SUDEB Teléfono 095 5713516
Lectura y escritura Cra. 27 N. 34-44
Lectura Preescolar Ley 115 de 1994 Calle del cuartel 36-32 HUILA Teléfono 097 6341827
Metodología por proyectos Decreto 2247 de 1997 CHOCÓ
Educación infantil Neiva
Pedagogía infantil BOYACÁ Quibdo ADIH Bucaramanga/Sangil
Composición de textos Chiquinquira UMACH Cra. 8 N. 5 -04 Richard Campo Ballesteros
79 57 Luis Miguel Aponte Martinez Cra. 6A N. 26-94 Teléfono 098 8720633 Cra. 8 N. 9-68
Celular 316 6649319
Cll. 19 N. 9-61/9-36 Teléfono 094 6711769
María Eugenia Romero José Fendel Tovar
Hugo Morales Celular 314 2285854
15 Correo electrónico: fundarcultura@hotmail.com Correo electrónico: mereditora@gmail.com
Tunja CÓRDOBA
Cll. 1G N. 15B-20
Teléfono 098 8737690 Sincelejo
SUCRE
Barranquilla ENSIN 2010 Encuesta Nacional e Nutrición
Diana Concha Ramírez Martha Ines Barrera Monteria ADES
Carnaval Desnutrición infantil MAGDALENA
Correo electrónico: adonaiacademia@gmail.com Cra. 7 N. 18-16 ADEMACOR Cra. 30 N. 13A-67
Tradiciones culturales Estadística Nutrición Cll. 12A N. 8A-19 Santa Marta
Política educativa Teléfono 098 7432302 Teléfono 095 2820352
Costa Caribe Colombia Teléfono 094 7865231 EDUMAG
Padres y madres de familia SINDIMAESTROS
Manuel Guzman Espitia Cra. 22 N. 15 -10 TOLIMA
Práctica reflexiva Cra. 10 N. 16 47
Teléfono 095 4203849 Ibague
Conciencia del docente 66 Teléfono 098 7441546 Cll. 12A N. 8A-19 Buena Vista
40 Sneider Saavedra CALDAS
Celular 314 5410085
Teléfonos 094 7835630 Villavicencio
META SIMATOL
Avda. 37 Cra. 4 Esquina
79 Celio Nieves
Correo electrónico: celionievesherrera@gmail.com
Correo electrónico: sneider201@hotmail.com Manizales 094 7865231 ADEM Teléfono 098 2646913
Calidad EDUCAL Eida Tobias Cra. 26 N. 35 - 09 San Isidro VALLE
Astrid Marina Coronado Preescolar Educación literaria Cll. 18 N.23-42 Teléfono 098 6715558
N. 26-52 C ali
Correo electrónico: astridcoronado@gmail.com Equidad Políticas educativas Teléfono 968801046 Teléfono 094 7823522 NARIÑO SUTEV
Barranquilla Educación infantil Neoliberalismo Pasto Cra. 8 N. 6-38
Carnaval Derechos fundamentales SIMANA Teléfono 092 8811008
Tradiciones culturales Infancia Cra. 23 N. 20-80
Costa Caribe 31 Teléfono 092 7210696
Mitú
VAUPES
Y CULTURA Infancia
Educación infantil
Primera infancia
Preescolar de 3 grados
Diciembre 2011 Formadores Plan de Desarrollo 2010-2014
25 61 Marcela Palomino
Celular 311 7707177
Teléfono 0942913685 Luis Fernando Betancur
Teléfono 098 4204236
CAQUETA QUINDIO
Carlos Alberto Rodríguez y otros Correo electrónico: marcelapalomino@yahoo.com Cra. 13A N. 34-36
Luz Amparo Bustamante ARAUCA Florencia Armenia
Correo electrónico: caito7a@hotmail.com Infancia-historia AICA Celular 315 8149282
Correo electrónico: luzabus@gmail.com IED Antonio Nariño Política educativa Arauca SUTEQ
Cra. 8 N.6-58 Henry Castro
Formación maestros de infancia Educación juvenil Primera infancia ASEDAR Cra. 13 N. 9-51
Teléfono 098 4354253 Cra. 13A N. 34-36
Familia Preescolar de 3 grados Cll. 19 N. 22-74 Teléfono 096 7369060
Derechos Humanos Celular 300 8283560
Sociedad Teléfono 097 8852123 CAUCA
Juventud crítica Plan de Desarrollo 2010-2014 RISARALDA
Ambientes educativos ATLÁNTICO Popayan GUAJIRA
Pereira
Primera infancia Barranquilla ASOINCA Fonseca Librería Nuevo Libro
20 36 ADEA Cll. 5 N. 12-55
Riohacha Cra. 4 N. 19-09
Cra. 38B N. 66-39 Teléfono 092 8220835
25 Patricia Londoño Yolanda Reyes
Teléfono 095 3563349 Ediciones Ciudad Universitaria
ASODEGUA Teléfono 096 3332688
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Jeff Harvey Cabezas Norman Alarcón Cll. N. 4-44 Teléfono 095 7285061
patricialondono@ustadistancia.edu.co Primera infancia Cll. 13 N. 6-39
Correo electrónico: jefharvey@hotmail.com Cll. 56 N. 46-104 Boston Teléfono 092 8244903
Infancia Literatura GUAINIA Teléfono 096 3251827
Formación maestros de infancia Celular 3106601461 Santander De Quilichao
Educación infantil Bebeteca P to. Inirida SAN ANDRÉS ISLAS
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Sociedad Cra. 11 N. 4 22 Julian Gutierrez Murillo
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Ambientes educativos Teléfono 098 5656063
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Primera infancia
50 44 Cll. 10 N. 1A 17
CÉSAR GUAVIARE Teléfono 098 5123829
Diva Nelly Mejía Luís Germán Rivera C artagena Valledupar San José Del Guaviare
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47 Correo electrónico: divanelly07@gmail.com Correo electrónico: luisgermanrivera@hotmail.com Rosalba Guerrero Jurado ADUCESAR ADEG
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Bebeteca Escuelas Normales Superiores Celular 315 3562358 Cll. 16 A N. 19-75
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Primera infancia Escuelas Anexas SUDEB Teléfono 095 5713516
Lectura y escritura Cra. 27 N. 34-44
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Educación infantil Neiva
Pedagogía infantil BOYACÁ Quibdo ADIH Bucaramanga/Sangil
Composición de textos Chiquinquira UMACH Cra. 8 N. 5 -04 Richard Campo Ballesteros
79 57 Luis Miguel Aponte Martinez Cra. 6A N. 26-94 Teléfono 098 8720633 Cra. 8 N. 9-68
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Cll. 19 N. 9-61/9-36 Teléfono 094 6711769
María Eugenia Romero José Fendel Tovar
Hugo Morales Celular 314 2285854
15 Correo electrónico: fundarcultura@hotmail.com Correo electrónico: mereditora@gmail.com
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Barranquilla ENSIN 2010 Encuesta Nacional e Nutrición
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Política educativa Teléfono 098 7432302 Teléfono 095 2820352
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79 Celio Nieves
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Astrid Marina Coronado Preescolar Educación literaria Cll. 18 N.23-42 Teléfono 098 6715558
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Barranquilla Educación infantil Neoliberalismo Pasto Cra. 8 N. 6-38
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Tradiciones culturales Infancia Cra. 23 N. 20-80
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