El Tequila
El Tequila
El Tequila
Para obtener las mieles del agave es necesaria la conversión de los polisacáridos (almidones)
que contienen las cabezas o piñas del agave en azúcares fermentables, para que éstos puedan
ser metabolizados por las levaduras, agentes responsables de la fermentación alcohólica. Para
tal efecto se introduce la materia prima en hornos, ya sea en los modernos autoclaves o en los
tradicionales de mampostería , los cuales se calientan con vapor de agua, y durante 18 a 48
horas respectivamente cuece con vapor de agua a presión la piña del agave, obteniéndose un
producto con una alta cantidad de azúcar.
Hornos de mampostería
Para extraer las mieles del agave cocido se coloca éste en un molino o desgarradora y se
exprime para obtener el jugo, al mismo tiempo se aplica agua a presión al bagazo para extraer
la mayor cantidad de azúcar posible, el producto que se obtiene en ésta parte del proceso es
un jugo diluido de agave. Entre 55 y 60 kilogramos de bagazo son desechados en la producción
de un litro de tequila.
Las mieles extraídas del agave cocido son captadas en depósitos y transportadas por tuberías
a las tinas de formulación o fermentación, según sea el caso. La formulación consiste en
mezclar las mieles del agave con un preparado de otras mieles (otros azúcares), en especial de
caña de azúcar, para posteriormente ser fermentadas. Las mieles para elaborar tequilas 100%
de agave no requieren formulación y se dirigen directamente hacia la fermentación.
La molienda o triturado
Fermentación.
Los productos de cualquier fermentación son alcohol, bióxido de carbono, agua y energía que se
desprende en forma de calor. El mosto en plena fermentación es efervescente y el movimiento
cesa cuando las levaduras terminan su trabajo. En éste momento finaliza el proceso y se
acostumbra decir que el mosto está muerto, las levaduras han terminado la conversión de
azúcares en alcohol.
Destilación.
Los puntos de ebullición de los diferentes compuestos y los diversos volúmenes y presiones del
alambique ayudan a la separación de gases, que se condensan en productos de mayor riqueza
alcohólica. En la elaboración del tequila son necesarias dos destilaciones, la primera llamada
destrozamiento y la segunda rectificación. Con la rectificación se incrementa la riqueza
alcohólica y se eliminan los productos indeseables. Al tequila que se recibe del destrozamiento
o primera destilación se le llama "tequila ordinario", y el que termina la segunda destilación o
rectificación es considerado ya como "tequila blanco".
Además de las vinazas, existen otros subproductos del inicio y final de la destilación conocidos
como "cabezas" y "colas", respectivamente. Estos productos son fuertes solventes orgánicos
controlados en la calidad del tequila.
Según la Norma Oficial Mexicana, el tequila es una bebida alcohólica regional obtenida por
destilación y rectificación de mostos, preparados directa y originalmente del material
extraído, dentro de las instalaciones de la fábrica derivado de la molienda de las cabezas
maduras de agaveTequilana Weber Variedad Azul, previa o posteriormente hidrolizadas o
cocidas, y sometidos a fermentación alcohólica con levaduras, cultivadas o no, siendo
susceptible de ser enriquecido por otros azúcares hasta en una proporción no mayor del 49%,
en la inteligencia de que no están permitidas las mezclas en frío.
El tequila es la única bebida con denominación de origen del mundo, cuya materia prima tarda
más de siete años en madurar.
Normatividad.
Dado que la norma define el término abocar como un procedimiento para suavizar el sabor del
tequila, se permite el uso no mayor del 1 % de los siguientes productos: color caramelo,
extracto de roble o encino natural, glicerina y jarabe a base de azúcar. Así la otra división son
los tequilas madurados o abocados y los blancos, éstos últimos sin añejamiento o reposo ni
edulcorantes.
La maduración del tequila la define la SECOFI (1997) como "La transformación lenta que le
permite adquirir al producto las características organolépticas deseadas, por procesos
fisicoquímicos que en forma natural tienen lugar durante su permanencia en recipientes de
madera de roble o encino".
Los requisitos de los cuatro tipos de tequila que la norma establece son los siguientes:
Producto cuya graduación alcohólica comercial debe, en su caso, ajustarse con agua de dilución
hasta su grado comercial.
Tequila Joven u Oro (Gold)
Producto susceptible de ser abocado, cuya graduación alcohólica comercial debe, en su caso,
ajustarse con agua de dilución. El resultado de las mezclas de tequila blanco con tequilas
reposados y / o añejos se considera como tequila joven u oro.
Producto susceptible de ser abocado que se deja por lo menos dos meses en recipientes de
madera de roble o encino, cuya graduación alcohólica comercial debe, en su caso, ajustarse con
agua de dilución. En mezclas de diferentes tequilas reposados, la edad para el tequila
resultante es el promedio ponderado de las edades y volúmenes de sus componentes.
Producto susceptible de ser abocado, sujeto a un proceso de maduración de por lo menos tres
años en recipientes de madera de roble o encino, cuya capacidad máxima sea de 600 litros y
con una graduación alcohólica comercial que debe, en su caso, ajustarse con agua de dilución.
En mezclas de diferentes tequilas añejos, la edad para el tequila resultante es el promedio
ponderado de las edades y volúmenes de sus componentes.
Hoy por hoy el tequila se ha convertido en uno de los destilados más apreciados por nacionales
y extranjeros, su fama no tiene límites, así como los mariachis nos han dado a conocer en todo
el continente con su música, ¿Quien podría imaginar a un mariachi vestido de charro tomando
otra bebida que no sea tequila?