El documento analiza la obra de Séneca Apolocyntosis, una sátira que ridiculiza al emperador Claudio después de su muerte. Señala que la obra contrasta los retratos de Claudio y Nerón para criticar el gobierno de Claudio y proponer un modelo alternativo basado en el principado de Augusto. También analiza cómo la sátira se publicó pronto después de la muerte de Claudio para evitar su divinización.
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El documento analiza la obra de Séneca Apolocyntosis, una sátira que ridiculiza al emperador Claudio después de su muerte. Señala que la obra contrasta los retratos de Claudio y Nerón para criticar el gobierno de Claudio y proponer un modelo alternativo basado en el principado de Augusto. También analiza cómo la sátira se publicó pronto después de la muerte de Claudio para evitar su divinización.
El documento analiza la obra de Séneca Apolocyntosis, una sátira que ridiculiza al emperador Claudio después de su muerte. Señala que la obra contrasta los retratos de Claudio y Nerón para criticar el gobierno de Claudio y proponer un modelo alternativo basado en el principado de Augusto. También analiza cómo la sátira se publicó pronto después de la muerte de Claudio para evitar su divinización.
El documento analiza la obra de Séneca Apolocyntosis, una sátira que ridiculiza al emperador Claudio después de su muerte. Señala que la obra contrasta los retratos de Claudio y Nerón para criticar el gobierno de Claudio y proponer un modelo alternativo basado en el principado de Augusto. También analiza cómo la sátira se publicó pronto después de la muerte de Claudio para evitar su divinización.
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Nahuel Sanguinetti ISPJVG 34848010
Trabajo práctico N°1 Tema 9
b) Luego de ser rechazado por unanimidad en la asamblea de los dioses, Claudio,
acompañado por Mercurio, desciende por la Vía Sacra desde el cielo hacia el infierno. No solo la polimetría que maneja Seneca revela el total dominio de todos los registros, sino también la construcción de climas y oposiciones que modelan el perfil que se les imprime a los personajes principales. En relación a esto (Salazar, 2018 ) expresa que:
La evidencia se hace plausible en la diferencia estilística y discursiva que contrapone a Claudio y
Nerón al interior de la obra. La sátira menipea permitía intercalar métricas diversas, prosa y verso, que Séneca utilizó alternadamente para distinguir el tono con el que se refería a cada uno de estos emperadores y configurar así retratos contrapuestos entre ambos. (p 307)
Me permito esta digresión porque es interesante señalar que uno de los motivos del rechazo a la divinización de Claudio es la enumeración (Seneca 1971, 189) en boca ni más ni menos que de Augusto, de todos los asesinatos perpetrados por el ex emperador. El clima generado por dicha enumeración, ahora es modificado por completo, cuando Claudio asiste a su propio funeral. Si en los versos anteriores el tópico de la muerte construyó un clima que agudiza la crueldad de Claudio, ahora la parodia alcanza un punto hiperbólico puesto que Claudio solo reconoce su muerte cuando asiste a su propio funeral. Incluso en ese contexto Seneca se permite deslizar una crítica más, ya que solo los “picapleitos” lloran al difunto emperador. El resto del pueblo festeja con total algarabía el fin de la tiranía. Seneca vuelve a jugar con conceptos claves, introduciendo la sensación de “libertas” para los ciudadanos romanos solo alcanzada después de la muerte del tirano.
La figura de Seneca es de tal magnitud e importancia para la historia romana que
podríamos pensarla desde dos puntos extremos que marcan su biografía: en el año 41 Seneca es acusado de adulterio por Claudio y condenado al exilio, en el 49, y mediante la intervención de Agripina, es reincorporado y nombrado consejero de Nerón, transformándose en el transcurso de esos años en una de las personas más influyentes de la política romana. Finalmente, acusado de participar en la “Conjuración de Pisón” contra Nahuel Sanguinetti ISPJVG 34848010
Nerón, es condenado a muerte en el mes de Abril del años 65. Su muerte está teñida por su filosofía. Representante del estoicismo, afronta la muerte con la imperturbabilidad que la ataraxia estoica le demandaba, se corta las venas y luego de una larga agonía finalmente muere.
Su obra también podría pensarse bajo esa óptica de los extremos: la Apolocintosis y la laudatio fúnebres, pueden leerse como un espejo que devuelve una imagen distorsionada en la que se halaga a un emperador difunto a la vez que se lo ridiculiza al extremo. Considerado uno de los tragediografos más grandes de Roma, este corpus abarca tanto la producción de tragedias, como de diálogos, epístolas, y tratados en los que la variación temática se desliza desde la relación del hombre con la naturaleza hasta las Consolatio ad Helviam donde detalla los periplos de su exilio
2) En ese arco narrativo que construye figuras bajo un contrapunto permanente es
que puede pensarse la relación entre la Apolocyntosis y la Laudatio Funebris. La tríada Claudio, Nerón, Augusto, flota en tres tiempos 1: Claudio es el presente que debe ser mostrado en su peor cara, Augusto es ese pasado donde buscar las referencias a una edad dorada donde Roma debe mirarse para reconstruirse, y por último, Nerón es el garante de este futuro promisorio bajo el que se enlazan la dorada época augustal y el valor contemporáneo agregado por Seneca de un modelo cristiano sostenido desde la ética estoica. Huidobro (Salazar, 2018 ) sostiene esta hipótesis al explicar el pasaje que realiza la Apolocyntosis, una sátira anclada en la crítica personal que va deslizándose hacia una obra que disputa los sentidos gubernamentales:
Al cuestionar un modelo gubernamental, Séneca ofrecería por contraposición una propuesta
ideológica más amplia, que reclamaba el distanciamiento con el estilo político de Claudio y la recuperación del principado augustal para los nuevos tiempos de Nerón (Huidobro: 309)
De este modo, la laudatio funebris funciona como una inversión y leída en conjunto con la Apolocyntosis, parece ser más una vituperatio. La parodia activa engranajes que funcionan como un sutil método de destrucción, dejando a Claudio y su gobierno
1 Parafraseando el célebre texto de Freud “El escritor literario y el fantaseo” Nahuel Sanguinetti ISPJVG 34848010
completamente desdibujados, y construyendo el terreno fértil para el próximo gobierno de
Nerón.
La efectividad de la estrategia de Seneca se consolida en el tiempo de publicación
de su obra. La Apolocyntosis fue publicada poco tiempo después de la muerte de Claudio, cumpliendo con uno de los preceptos fundamentales de la sátira menipea, publicarse al calor de los acontecimientos y romper así con los efectos de divinización esperados para Claudio. Solo basta recordar que según Beard (Mary, 2018), los emperadores eran tratados como semidioses por sus contemporáneos ¿Cuál es el valor que puede tener para la posteridad un dios convertido en calabaza? Esa es la pregunta que parece dejar establecida Seneca con su sátira.
3) Enmarcado en el momento previo al abandono de la ciudad por parte de
Pompeyo, Lucano utiliza todos los tópicos y recursos propios de la épica para vaticinar la tragedia que le espera a Roma. La llegada de Cesar y la consumación de la guerra civil, no son más que la cara visible de un destino trágico vaticinado por los Dioses de múltiples formas. En este destino pres digitado en dos direcciones se define la suerte de Roma; por un lado, según Lucano, Cesar y su consolidación como tirano bajo la máscara del advenimiento de la República; por el otro, los efectos indelebles de las guerras intestinas que inevitablemente conducirán a Roma al fracaso. No solo los presagios son calamitosos, ya que luego de los sacrificios se observa que:
Y- prodigio funesto que nunca apareció en las entrañas impunemente- helo aquí: observa que en la cabeza del hígado ha crecido la protuberancia de otra cabeza; una parte cuelga enfermiza y fláccida, otra irradia salud y mueve sin compasión las venas con rápidas pulsaciones (...) Apenas me es licito, oh dioses del cielo, revelar a las gentes todo lo que esta maquinando (...) indecibles calamidades tememos, pero sobrevendrán mayores aun de lo que tememos. (V 626- 639)
Sino que también la observación de los astros que realiza Figulo termina de organizar el escenario trágico:
O bien este mundo vaga sin ley alguna a través de las edades y los astros van a la deriva con un curso no determinado, o si los rigen los destinos, para la Ciudad y para el género humano se prepara Nahuel Sanguinetti ISPJVG 34848010
una inminente catástrofe (...) Los últimos días de muchos vienen a coincidir en un solo lapso de tiempo. (V 640 a 651)
El destino de Roma, entonces, parece estar atado a esa condensación temporal: el
tiempo de la guerra y la victoria del tirano dejarán marcada por siempre la vida romana. La huella de un tiempo “sin ley” y “a la deriva” parece inevitable.
