Dios Nunca Llega Tarde
Dios Nunca Llega Tarde
Dios Nunca Llega Tarde
La palabra nos enseña que cuando el pueblo de Israel fue libre de la esclavitud de Egipto
huyeron por el desierto en camino a la tierra prometida, hasta encontrarse con el Mar rojo
quien le impedía seguir su trayecto. Ellos pensaron que iban a morir sin ver la promesa de
Dios cumplirse sobre su vida, que fue una locura lo que había dicho Dios por boca de
Moisés, ya que la situación presente los obligaba a creer lo contrario a lo establecido
por Dios (No dejes que las situaciones presentes te hagan creer lo contrario a lo
establecido por Dios). Entonces Dios le dijo a Moisés: extiende tu mano sobre el mar y
divídelo, y el mar se abrió en dos para que el pueblo de Israel pasara en seco al otro lado y
destruir en el lugar del milagro a todo un ejército enemigo. Y posteriormente enfrento a 31
Reyes y los venció para poder llegar a Canaán.
Una vez más Dios nos enseña que no hay nada imposible para él, que para lo que el
hombre es un obstáculo para Dios es una plataforma para manifestar su poder. Lo que
no sabemos es que en ese preciso momento nuestra fe está siendo probada para dar a
conocer si le creemos a Dios por lo que vemos o le creemos a Dios por nuestras
convicciones. La palabra de Dios nos enseña que debemos vivir por fe y no por vista 2
corintios 5:7, porque Dios sabe que su poder no depende de las circunstancias a nuestro
alrededor sino de su voluntad en momentos determinados. En pocas palabras, podemos
estar viviendo el peor momento de nuestra vida, y Dios es y seguirá siendo Dios, y en
su soberanía, hace las cosas según su voluntad.
Orar con fe es clamar sin importar los vientos contrarios que estén golpeando
nuestra barca, si los vientos arrecian, estas apunto de recibir respuesta a tu
oración.
Muchos de nosotros hemos enterrado nuestros talentos, nuestros sueños, nuestros anhelos,
porque las situaciones adversas nos han hecho entender que Dios se ha olvidado de
nosotros, sin saber, que aun en la más densa oscuridad, la luz del día está apunto de
resplandecer. Debemos entender que el tiempo de Dios y el tiempo del hombre son dos
tiempos totalmente diferentes, lo que para el hombre son mil años, para Dios es un día, y
para lo que el hombre es un día, para Dios es mil años 2 Pedro 3:8, pero debemos estar
seguros, que lo que Dios nos prometió, no hay principado, ni potestad, en los cielos, ni en la
tierra que pueda detener el cumplimiento de sus promesas sobre nuestras vidas.
Nuestra fe es lo único que le pone demanda al cumplimiento de las promesas de
Dios en nuestras vidas.
TEMAS DEL CCRM. 3
El padre de la fe (Abraham), tuvo que esperar veinte y cinco años para ver la promesa de
Dios cumplirse sobre su vida. Él pudo hacer dicho en ese trayecto de tiempo, que Dios
había enloquecido en lo que le había prometido, y en el momento naturalmente hablando
menos indicado, Abraham pudo ver la promesa de Dios hecha una realidad sobre su vida.
Muchas veces nuestras circunstancias presentes quieren hacernos dudar de las promesas de
Dios para nuestras vidas, porque no hemos entendido que las circunstancias presentes
van en cambios constantes, lo que nunca cambia es la verdad de Dios.
Dios nunca se demora en sus promesas, Dios siempre llega justo a tiempo. Dios
no depende de tus circunstancias adversas, tus circunstancias adversas dependen
de Dios.
Oración: Señor te doy gracias por tu amor y tu bondad. Gracias por ser mi Dios,
entendiendo con esto que para tí no hay nada imposible. Perdóname por las veces que he
dudado de tus promesas, por las veces que me he dado por vencido a lo que me has
prometido, te pido que restaures mi fe a través de un encuentro contigo, crea en mí el hábito
de leer tu palabra todos los días para que mi fe se fortalezca día a día. Hoy me levanto con
una nueva percepción de la oración y de las situaciones adversas, creyendo que tu oh Dios,
tiene el poder para hacer lo imposible posible, todo te lo pido en el nombre de Jesús.
para confiar plenamente en Dios necesitamos conocer a Dios.Y la mejor
manera de conocerlo es a través de su palabra.
El poder divino de Dios se desata en nuestras vidas a través de su palabra
inspirada (1 Tesalonicenses 2:13). La obra de la palabra de Dios incluye la
salvación (Romanos 10:17; 1 Pedro 1:23), la enseñanza y la formación (2
Timoteo 3:16-17), la guianza (Salmo 119:105), la protección (Salmo
119:114, 117), la fortaleza (Salmo 119:28), y nos hace sabios (Salmo 119:97-
100). Si estudiamos y meditamos diariamente en su palabra, su tiempo se
hará más claro para nosotros.
Cuando cuestionamos el tiempo de Dios, a menudo es porque estamos
buscando orientación o liberación de una situación difícil. Sin embargo,
podemos tener la seguridad que nuestro padre celestial sabe exactamente
dónde estamos en nuestras vidas en cada momento.
Él nos coloca allí o nos permite estar ahí, todo para su propio propósito
perfecto. De hecho, Dios a menudo usa las pruebas para fortalecer nuestra
paciencia, permitiendo que nuestra fe cristiana madure y sea completa
(Santiago 1:3-4).
Y sabemos que todas las cosas, incluyendo estas pruebas difíciles,
obran para bien para los que aman a Dios (Romanos 8:28).
Dios, de hecho, escucha el clamor de sus hijos y responderá de acuerdo a su
perfecta voluntad y tiempo.
TEMAS DEL CCRM. 4
“Muchas son las aflicciones del justo, Pero de todas ellas le librará
Jehová” (Salmo 34:19). Los planes que Dios tiene para sus hijos son
buenos, son para ayudarnos y no para hacernos daño (Jeremías 29:11).
Todo tiene su tiempo – los tiempos de Dios son perfectos
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Tiempo de nacer, y tiempo de morir; tiempo de plantar, y tiempo de
arrancar lo plantado; tiempo de matar, y tiempo de curar; tiempo de
destruir, y tiempo de edificar; tiempo de llorar, y tiempo de reír; tiempo de
endechar, y tiempo de bailar; tiempo de esparcir piedras, y tiempo de juntar
piedras; tiempo de abrazar, y tiempo de abstenerse de abrazar; tiempo de
buscar, y tiempo de perder; tiempo de guardar, y tiempo de desechar;
tiempo de romper, y tiempo de coser; tiempo de callar, y tiempo de hablar;
tiempo de amar, y tiempo de aborrecer; tiempo de guerra, tiempo
de reflexionar, y tiempo de paz.
Eclesiastés 3:1-8
Todo lo hizo hermoso en su tiempo; y ha puesto eternidad en el corazón de
ellos, sin que alcance el hombre a entender la obra que ha hecho Dios desde
el principio hasta el fin.
Eclesiastés 3:11
En tus manos están mis tiempos.
Salmos 31:15
Aunque parezca que se demora en llegar, espera con paciencia, porque sin
lugar a dudas sucederá. No se tardará.
Habacuc 2:3
Pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como
las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Isaías 40:31
Para el Señor, un día es como mil años y mil años son como un día. 9 En
realidad, no es que el Señor sea lento para cumplir su promesa, como algunos
piensan. Al contrario, es paciente por amor a ustedes. imágenes.
2 Pedro 3:8-9 Salmos 34:19
Dios no llega antes, ni después, porque solo Él sabe cuándo y de qué
manera es mejor para nosotros, Él es el dueño del tiempo y del espacio, del
mundo y de lo que en el habita.
Es difícil no tener la fecha en que todo este proceso terminará, pero es tan
reconfortante saber que Dios tiene el control absoluto de todo, que no hay
nada que pueda impedir ni estorbar en lo que Él hará, a pesar de lo mucho
o poco que ha pasado, porque sabes… que el tiempo de Dios es perfecto.