El Comercio de Los Esclavos Canarios en
El Comercio de Los Esclavos Canarios en
El Comercio de Los Esclavos Canarios en
Alberto Quartapelle*
cronicascanarias@gmail.com
Resumen
Desde su descubrimiento, las Islas Canarias han sido objeto del interés de mallorquines,
castellanos y portugueses, quienes vieron en sus habitantes la oportunidad de hacerse de
esclavos y de una ganancia fácil. Gracias a los datos recopilados por varios autores** y a
nuevos documentos, el artículo reconstruye un cuadro sintético del comercio de estos
esclavos en España y en Italia a finales del siglo xv. Particular atención se ha puesto en su
origen, su destino, su composición por sexo y edad y en la estructura del precio de venta***.
Palabras clave: esclavos, Islas Canarias, siglo xv, Italia, Génova, Siena.
Abstract
From the moment of the discovery, the Canary Islands have been the object of interest
to Majorcans, Castilians and Portuguese, who saw in their inhabitants the opportunity
DOI: https://doi.org/10.25145/j.histcan.2021.203.07
Revista de Historia Canaria, 203; mayo 2021, pp. 189-224; ISSN: e-2530-8270
1. INTRODUCCIÓN
Hasta el comienzo del siglo xx, el tema del comercio de los esclavos canarios
no había despertado la atención de los historiadores. Solo en 1933, con la publicación
de los documentos del Archivo General de Simancas que daban cuenta de la venta
de los aborígenes gomeros en la baja Andalucía en 14891, este fenómeno empieza
a ser analizado y se evidencia que lo que durante siete siglos se llamó «conquista»
fue, en muchas oportunidades, un saqueo sistemático de las riquezas de las islas2.
La esclavización de los aborígenes, que es parte de la historia del Archipié-
lago desde de su descubrimiento, llega a su máxima expresión en el último cuarto
del siglo xv, cuando el interés de los conquistadores se dirige a las islas mayores,
La Gomera, Gran canaria y Tenerife. Como puede verse en las figs. 1 y 2, de los
más de 1000 esclavos canarios capturados por los «conquistadores» y trasladados a
Sevilla, Mallorca, Valencia, Barcelona u otras ciudades de la Península entre 1475 y
1500, casi el 90% se reporta en solo 7 años. En particular, cuatro son los episodios
de esclavización de mayor relevancia por el número de esclavos y por la brutalidad:
1477: Hernán Peraza, hijo de Diego de Herrera, señor de La Gomera, con la cola-
boración de los tripulantes de dos carabelas de Palos y Moguer consigue cap-
turar a 98 gomeros, tanto hombres como mujeres, y los vende como esclavos
en Andalucía. Gracias a la intervención del obispo del Rubicón, fray Juan
de Frías, los Reyes Católicos ordenan la liberación de todos los prisioneros:
«Somos ynformados que algunas personas han traído ... algunos canarios de las
yslas de Canarias que son cristianos e otros que están en camino para se convertir
a nuestra Santa Fe católica ... e los venden por esclavos ...». «Lo qual es en grand
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 190
* https://independent.academia.edu/AQuartapelle.
** Serra Ràfols, E.: «De esclavos canarios», Revista de Historia Tomo 4, año 7, n.o 25,
pp. 3-10». Wölfel, D.J: «Un episodio de la conquista de la Gomera» El Museo Canario 1933, pp. 5-84.
Cortes, V.: «La conquista de las Islas Canarias a través de la venta de esclavos en Valencia», Anuario
de Estudios Atlánticos n. 1 (1956). Franco Silva, A.: «La esclavitud en Andalucía al término de la
Edad Media», Cuadernos de Investigación Medieval 1985. Gioffre, D.: «La schiavitù a Genova».
*** Un sincero agradecimiento a la paleógrafa Giustina Olgiati, del Archivio Nazionale di
Genova, por su apoyo también en los tiempos de la pandemia de Covid 19.
1
Wölfel, D.J: op. cit.
2
Marrero Rodríguez, M.: «La esclavitud en Tenerife a raíz de la conquista» Instituto de
Estudios Canarios, 1966, p. 54.
3
Rumeu de Armas, A.: «La política indigenista de Isabel la Católica» Instituto Isabel la
Católica de Historia Eclesiástica - Valladolid 1969, p. 48-49
350
Fig. 1. Esclavos canarios vendidos en España a finales del siglo XV
300 290
250
203
200
150 129
126 119
98
100
45
50
0
1477 1489 1492 1493 1494 1495 1496
Sevilla 67 1 1 2 1 1 7 40 3 1 10
Valencia 631 39 2 13 29 125 126 110 158 26 2 1
Mallorca 90 90
Barcelona 19 1 2 2 5 4 3 2
Palos 272 160 14
toma como botín de guerra a mujeres, mozos y niños y los envía a los puertos
de la Baja Andalucía y de Mallorca para venderlos como esclavos. Gracias
a la intervención del franciscano Miguel López de la Sierna, en 1490, los
Reyes Católicos reconocieron que «las mujeres e niños e niñas non pudie-
ron ser cabtivados ni vendidos» y ordenaron que «recogiesen ... los dichos
canarios ... que fallaren en poder de qualsequier personas ... y los pusiesen
en libertad». Desde Andalucía se rescataron y devolvieron a La Gomera 99
esclavos, mientras que nada se sabe de los 90 que fueron vendidos en Ibiza
y de los 39 vendidos en Valencia. Solo sabemos que en 1500 seguían con-
tándose 31 esclavos gomeros en Mallorca4.
Serra Ràfols, E.: op. cit., pp. 3-10. Wölfel, J.D.: «Los gomeros vendidos por Pedro de
4
Vera y doña Beatriz de Bobadilla», El Museo Canario, año i, n.o i (1955) pp. 5-85. De la Torre, A.:
«Los canarios de Gomera vendidos como esclavos en 1489». Anuario de Estudios Americanos, vol. 7
FIG. 3. ESCLAVOS CANARIOS POR SEXO Y EDAD (1475-1500)
Valencia
Total Palos Sevilla Mallorca Barcelona
1489 90/91 1492 1493 1494 1495 1496 1497 98/00
Niños 202 41 14 14 20 9 30 40 2 21 3 8
Hembras 302 14 34 23 1 9 106 29 14 60 5 7
Varones 104 11 33 2 10 2 42 4
No
471 206 90 1 65 56 54 2
especificado
Total 1079 272 67 90 39 15 29 125 126 110 158 26 3 19
(1950) pp. 47-72. Sevillano Colom, F.: «Los viajes medievales desde Mallorca a Canarias», Anua-
rio de Estudios Atlánticos (1972) p. 42.
5
Se ha registrado la presencia de algunos esclavos canarios también en Jerez (13), Málaga
y otras ciudades de la península.
6
En Valencia un aspecto peculiar es la edad de los niños que se colocaba en el 80% de los
casos entre los 8 y los 12 años, o sea en una edad demasiado temprana para su empleo como mano
de obra en el campo o en la casa.
Fig. 4. Precio de los esclavos gomeros vendidos en Palos en 1489
maravedís
9000
8100
8000 7700
7000 6600
6000
6000 hombres
5000 4400
5200 5400 4000 mujeres
4000
3000 3700
2000
1000
0
< 10 11 a 15 16 a 20 21 a 30 31 a 40
7
Benavides «demanda licencia de poder traure los dits catius fora de la present regne per
mar com en aquelles no trobas preu competent, lo qual dit noble batle general era content puix asi
era passat entre lo dit Benavides e lo dit magnifich lochtinent del batle general segons appar dessus
en lo precedent acte donant licencia per poder les s’en portar li hon plaria», en Blumenthal, D.:
Enemies and Familiars: Slavery and Mastery in Fifteenth-Century Valencia, Cornell University Press
2011 p. 52 nota 16.
Fig. 5. Precio de los esclavos canarios en Valencia (1489-1500)
40
35
30
25
20
15
10
5
0 niñas niños 5 10 15 20 25
en cuenta su «vida residual», o sea, el tiempo durante el cual el dueño podía amor-
tiguar el costo de la compra. Los esclavos más jóvenes se valoraban, por lo tanto,
más que los esclavos más viejos.
En lo que concierne al sexo, los varones se cotizaban menos porque se dedi-
caban a actividades manuales de poco valor, como la agricultura y la industria, y
llegaban a su máximo precio entre los 16 y los 20 años, que es cuando podían garan-
tizarle al dueño fuerza física y resistencia al cansancio. Las mujeres se pagaban más
porque eran empleadas en actividades domésticas de alto valor, como el cuidado
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 194
de los niños y de los ancianos y, por esta razón, en la mayoría de los mercados de la
Península las más cotizadas eran las de 16 a 20 años. Sin embargo, en la baja Anda-
lucía fueron las niñas de entre 11 a 15 años las que se vendieron al precio más alto.
Una hipótesis es que estas niñas se consideraran más dóciles, más disponibles a modi-
ficar sus referencias culturales, más capaces de aprender las tareas domésticas y, por
lo tanto, más fáciles de introducir en el ambiente familiar. Una segunda hipótesis
toma en cuenta el aprovechamiento sexual de las esclavas por parte de los dueños.
Por cierto, una menor de edad tenía mayor dificultad de oponerse a los «deseos» de
su dueño. Lo que explicaría el increíble precio de 15 000 maravedís pagado por un
vecino de Sevilla por una muchacha de 14 años, valor difícil de justificar para la
compra de una simple sirvienta.
250 236
151
150
100
100 82
71
50
19 14
6
0
os
os
os
os
ro
so
ro
ri o
io
ni
gr
ss
an
ic
el
et
au
r ta
ja
na
an
ne
gr
ru
si
ab
n
m
tá
ca
a
lc
si
in
rc
ba
m
ci
8
Por su participación a esta empresa el Duque de Medina Sidonia recibió 40 esclavos.
9
Erróneamente C. Verlinden reconoce en este personaje un posible miembro de la fami-
lia de aquel Usodimare que había acompañado el veneciano Alvise da Ca da Mosto en sus viajes de
descubrimiento en África en 1455 por cuenta de Enrique el Navegador. Verlinden, C. «La escla-
vitud en Canarias» IV Coloquio de historia canario-americana, vol. 1, 1982, p. 23. En 1494 tene-
mos noticia de la presencia de este mercader en la colonia genovesa de Barcelona. Madurell, I. y
Marimon, J-M.: «Ambrogio Fatinati, mercader genoves a Barcelona (1472-1497)» p. 528 en Atti del
1.er Congresso Storico Liguria-Catalogna, 1969.
10
Cortes, V.: op. cit. p. 35.
Fig. 7. Esclavos canarios en Italia a finales del siglo XV
Edad
40 37
35 Savona
30 Siena
30
30 27 28 30
26
25 22 22
20 ? ?
20 Florencia Sicilia
16 Siena Venecia
? 15
14 14 14 14 13
15
? 11
10 8 8
0
1462
1463
1465
1465
1466
1468
1471
1475
1481
1482
1485
1486
1487
1487
1488
1488
1489
1495
1496
1496
1496
1496
1498
1498
mujer hombre
con otro esclavo de origen circasiano11. Su nombre y su edad hacen pensar que
podría ser uno de los esclavos enviados para ser vendidos en Francia en 1410 por el
gobernador de Lanzarote, Maciot de Bethencourt, con el fin de financiar la con-
quista de la isla.
Sin embargo, es solo a partir de la segunda mitad del siglo xv, cuando el mer-
cader genovés Centurioni envía desde Sevilla a Florencia una muchacha de 15 años,
que en los actos notariales italianos empiezan a aparecer procedencias de progenie
maurorum canariorum, maura de canaria o de progenie maurorum seu canariorum.
En una primera fase, los genoveses actúan como simples intermediarios
comerciales entre los reinos de Castilla y de Cataluña. Compran esclavos canarios
en Sevilla y en la baja Andalucía y los venden en Génova a mercaderes de Mallorca,
Valencia o Barcelona, como es el caso del joven Jacobino de progenie maurorum
canarie de 30 años quien, como una mercadería cualquiera, llega a Génova el 20 de
octubre de 1462 en un barco procedente de Sevilla, junto con 442 sacos de lana,
11
El nombre Lanzaroto podría no tener relación con la Isla de Lanzarote en el Archipiélago
canario. En 1410 en Génova se registra la venta de un esclavo ruso de 12 años de nombre Lanzarottos.
16 pacas de cochinilla y una mula12. Tan solo dos meses después, el 22 de enero de
1463, Jacobino pasa de mano, comprado por 25 ducados por el mercader mallor-
quín Giovanni Focoberto13 (doc. 1).
En 1465 tuvo un destino similar la joven maura de Canaria Caterina de 20
años, adquirida por el mismo mercader genovés Centurioni en Sevilla, quien fue
embarcada hacia Génova14 y vendida por 122 liras otra vez al mallorquín Focoberto
con destino Mallorca.
En total, de los cinco esclavos canarios vendidos en Génova entre 1463 y
1468, cuatro se reembarcan inmediatamente rumbo a Cataluña y Mallorca. Esta
circunstancia no tiene que hacer pensar que existía un particular interés de los cata-
lanes por los esclavos canarios. En realidad, durante el siglo xiv y la primera mitad
del siglo xv, Génova era el principal mercado esclavista del Mediterráneo Occi-
dental y cientos de rusos, tártaros, circasianos y otros esclavos orientales llegaban
a Génova para ser redistribuidos en Italia, Francia y en la península ibérica. Solo
entre 1450 y 1475 se registran en Génova más de 48 ventas de esclavos y esclavas
a mercaderes españoles. Un ejemplo es Giovanni Focoberto quien compra él sola-
mente, además de los dos canarios citados, dos esclavos circasianos, un abjasio, una
esclava búlgara y otra rusa15.
Después de esta primera fase, los esclavos canarios dejan de ser una simple
mercadería en tránsito hacia España y pasan a formar parte de la sociedad del centro
norte de Italia. En las actas notariales, los canarios ya no son solamente objeto de
compra y venta, sino que son asegurados contra los riesgos del parto, como Cazina
de 26 años, en 1466, o se alquilan como Janicho, de 30 años, rentado por 8 años en
1471; o se le reconoce el derecho a la libertad, como a Caterina de 37 años, manu-
misa en 1488 por Primaflore Ragio, o se dejan en donación a través de testamento,
12
El barco era del mercader vasco Juan Lopez d’Ondàrroa procedente de Sevilla, Barce-
lona, Tortosa y Pisa y transportaba 442 sacos de lana, 16 pacas de cochinilla, 3.300 piezas de cuero,
155 barriles de atún, 1 mula y el joven esclavo Jacobino. ASGe Bartolomeo Canessa, f. 1, a. 16, en
Heeers, J. «Le commerce de Basques en Méditerranée au xv siecle (dapes les archives de Genes)», en
Bulletin Hispanique, tome 57, n.o 3, 1955, pp. 292-324. Por error Heers indica a p. 309 la fecha de 1472.
13
ASGe Tommaso Duracino f. 7, a. 16. Giovanni Focoberto era probablemente el merca-
der Juan de Fontcuberta, de una familia de judíos conversos en el siglo xiv. Pistarino, G.: «Tratta
di schiavi da Genova in Toscana nel secolo xv», en Studi di economia toscana nel Medioevo e nel Rina-
scimento in memoria di Federigo Melis, Pisa (1987), pp. 285-304
14
Hers, J.: Genes au XV siècle: activité economique et problèmes sociaux, SEVPEN, 1971 pp.
15
La compra de esclavos era una parte relevante de la actividad de los mercaderes catala-
nes que operaban en Génova. Los catalanes, no estando autorizados a tratar directamente con mer-
caderes extranjeros, tenían que utilizar forzosamente para sus compras intermediarios genoveses.
Heers, J.: «Les catalans à Genes vers 1450», en Atti del III Convegno Internazionale di Studi Colom-
biani, Genova 1977, p .49.
en 1466, Janicho en 1471 y Aranicha en 1482, venían probablemente directamente
desde el Archipiélago como fruto de capturas corsarias y el nombre aborigen podría
indicar que no habían sido bautizados antes de llegar a Génova.
Por último, se puede inferir que es la isla de Tenerife el origen de una de
las dos esclavas vendidas en 1496, Margherita de 22 años, u otra sin nombre de 14,
quienes llegan directamente (ad dricturam) desde Valencia16. Estas esclavas podrían
ser parte de las 24 mujeres y los 18 varones llevados a Valencia por Benet Benavi-
des en 1494, por cuenta de Alonso de Lugo. Como indica el registro de la Bailía de
Valencia, el 9 de enero de 1495 «al no haber encontrado para ellos un precio ade-
cuado», Benavides es autorizado a reexportar parte de estos esclavos «donde quiera»17.
Los actos notariales de Génova nos permiten calcular el valor que se les daba
a las esclavas canarias. Para este fin se han utilizado los once precios de venta regis-
trados en el período que va desde 1465 a 1498. El precio mínimo fue de 68 liras
genoveses para la maura de canaria Caterina de veinte años, vendida en 1468 por
Pietro di Pietra al valenciano Gabriele Marco. El precio máximo fue de 200 liras
por Anna de progenie maurorum canarie, de 14 años, cedida en 1498 por el magni-
ficus dominus Francesco Cibo a Pietro de Mari.
El precio promedio era de 129 liras y puede considerarse una cantidad rele-
vante para la época, ya que equivalía a 3 toneladas de trigo o a tres años de sueldo
de un marinero18. Sin embargo, si lo comparamos con el valor de las esclavas de
otras etnias puede notarse que las esclavas canarias estaban entre las menos cotiza-
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 198
das del mercado. Como puede verse en la fig. 8, entre 1460 y 1500 el precio pagado
por las canarias es 40% más bajo que el precio de las esclavas orientales y solo un
poco superior al de las esclavas negras.
Para verificar si la baja cotización de las esclavas canarias podía explicarse
por las características propias del mercado esclavista genovés, se ha controlado el
precio de todas las esclavas compradas en Génova por los mercaderes catalanes para
su reexportación a Mallorca, Valencia y Barcelona entre 1460 y 1470. Como puede
verse en la fig. 9, también en este caso las esclavas orientales eran cotizadas entre un
50% y un 90% más caras que las canarias.
16
Gioffrè, D.: «Il commercio d’importazione genovese alla luce del registro dei dazi 1495-
1537», en Studi in onore di Amintore Fanfani, Gioffrè Editore (1962), vol. 5 p. 144.
17
9 de enero de 1495: Benavides «demana licencia de poder traure los dits catius fora de
la present regne per mar con en aquelles no trobas preu competent lo qual dit noble batle general dix era
content puix axi era passat entre lo dit Benavides e lo dit magnifich lochtinent del batle general segons
appar dessus en lo precedent act donant licencia per poder les s’en portar li hon plaria» en Blumenthal,
D.: op. cit., p. 52. Hay que notar, todavía, que entre las esclavas presentadas por Benavides ninguna
tenía menos de 20 años. Cortes v. op. cit., p. 54.
18
Gioffre, D.: «La schiavitù a Genova» op. cit., p. 142.
250 Fig. 8. Valor promedio de las esclavas canarias en Génova
1460-1500 (liras genovesas)
202
194 188
200 182 180
145
150 129
107
100
50
0
as
as
as
sa
sa
ra
ra
ria
ar
gr
an
r ta
au
ja
ru
na
lg
ne
si
ab
m
ta
ca
bu
a
rc
ci
200 190
180 164
156
160
140
113
120 100
100
80
60
40
20
19
En Génova se indicaba con el término mauro tanto a los esclavos procedentes de España
como a los bereberes del norte de África. Sin embargo, el número de esclavos mauros llega a ser sig-
nificativo solo después de 1470, cuando empieza la guerra de Granada. Entre el 1475 y el 1499 la
venta de esclavos «mauros» representa el 31,5% del total. Heers, J.: Esclaves et domestiques au moy-
en-age, Fayard (1981) p. 28.
20
Armenteros Martínez, I.: op. cit., p. 502.
210 Fig. 10. Precio de las esclavas en Génova por edad (1489-1500)
190
170
rusas
150
circasianas
130
tártaras
110 canaria
90 varones
70
50
11 a 15 16 a 20 21 a 25 26 a 30 31 a 35 > 36
(fig. 10). Probablemente, para que se diera esta mayor estimación cumplía un rol
fundamental no solo la posibilidad de utilizar por un tiempo más largo los servi-
cios de las mujeres jóvenes, sino también la posibilidad de emplearlas como niñe-
ras o como nodrizas, después de haber tenido un hijo. Si el alquiler normal de una
esclava era de 6/10 liras anuales por una nodriza que habet lactem, se podía llegar al
doble, como es el caso de una Lucia, alquilada en 1425 por tres años por un valor
de 60 liras «pro famula et servitrice et nutrice, filiorum suorum dando et minis-
trando lac suum dictis filiis suis22».
Como se ve en la fig. 10, el sexo y la edad determinaban una diferencia en
el valor entre mujeres y hombres, jóvenes y viejos. Sin embargo, estas características
personales no justifican por qué las esclavas rusas valían más que las mauras, y las
mauras más que las canarias. Lo cierto es que había una diferencia de precio entre
las diferentes etnias. Para explicar este fenómeno se han propuesto dos teorías que
se consideran relevantes para la determinación del precio: el color de la piel y las
características culturales.
21
Franco Silva, A.: op. cit., p. 31.
22
Tria, L.: La schiavitù in Liguria, Atti della Società Ligure di Storia Patria (1947) p. 170.
Fig. 11. Precio de las esclavas maduras a Génova por color de la piel (1489-1500)
liras
220
200
mauras
180 blancas
160
140
120
canarias
100
mauras
aceitunadas
80
mauras
negras
60
40
5 10 15 20 25 30
23
Vieira y Clavijo (1700) relatan que asumían el mismo color tostado de los canarios tam-
bién los españoles recién llegados a la isla de Tenerife: «... si bien los guanches que habitaban hacia
las partes meridionales de la isla eran de una tez bastantemente tostada, como lo son en el día cuan-
tos españoles moran en ellas, no por eso dejaban de ser blancos, rubios y de buena presencia los que
vivían en los distritos del Norte».
Para sortear esta aparente contradicción de unas esclavas de tez blanca que
cotizaban como las esclavas de tez negra hay que tomar en cuenta que, como señalan
varios cronistas, muchas mujeres canarias lucían una tez tostada y morena debido
a la exposición a los intensos rayos solares típicos de las islas24.
Considerando que las esclavas canarias muchas veces llegaban a Génova
directamente desde el Archipiélago25, es posible que los compradores genoveses con-
fundieran el bronceado temporal provocado por el sol con una pigmentación oscura
permanente. Podría ser este el caso de la esclava que, como se ha visto, llegó en 1496
directamente (ad dricturam) desde Valencia. Como relata el viajero alemán Jero-
nimo Munster, quien en 1494 tuvo la oportunidad de ver en Valencia a los esclavos
canarios recién llegados desde Tenerife: «vi en una casa hombres, mujeres y niños
que estaban en venta [...]. Son muy morenos, pero no negros»26.
Algo similar pasaba en Florencia a finales del siglo xiv, donde los escla-
vos griegos en su mayoría eran registrados como de tez aceitunada (olivastra) y no
blanca 27.
El segundo aspecto que indudablemente influía en el valor de las diferentes
etnias eran las características culturales y comportamentales. En Italia a cada grupo
étnico se le reconocían cualidades y defectos específicos, como explica en una carta
a su hijo la noble dama florentina Alessandra degli Strozzi: «las (esclavas) tártaras
soportan mejor la fatiga y son más rudas. Las rusas son de aspecto más delgado y
24
Edmund Scory (1526): «Los naturales que habitaban en la banda sur de la isla eran del
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 202
color de la aceituna, pero los que vivían en la banda del norte eran rubios, especialmente las muje-
res, y tenían el pelo liso y brillante». Edmund Scory: «Extracts taken out of the Observations of the
Right Worshipfull Sir Edmond Scory», en Quartapelle, A.: op. cit., p. 171. Alonso de Espinosa
(1594): «Es esta gente (los de la banda del Sur) de color algo tostada y morena, agora sea por traer
este color de generación, agora sea por ser la tierra algo cálida y tostarlos el sol, por andar casi des-
nudos, como andaban. Más los de la banda del Norte eran blancos, y las mujeres hermosas y rubias
y de lindos cabellos». Alonso de Espinosa: «Historia de Nuestra Señoras de Candelaria», en Quar-
tapelle, A.: op. cit., p. 340. Abreu Galindo (1632): «A los naturales de esta isla llaman guanches
los que la conquistaron; era gente de mediana estatura. Los de la banda del sur son muy morenos,
y los de la banda del norte son blancos y rubios en cuerpo y cabellos» Abreu Galindo: «Historia de
la conquista de las siete islas de Gran Canaria», en Quartapelle, A.: op. cit., p. 428. Juan Núñez
de la Peña (1666): «Los que habitaban a la banda del Sur, eran de color algo tostada y morena, y los
de la banda de Norte eran blancos y rubios, como hoy se experimenta en los que nacen y se crían de
las partes de Guimar, Arico, Chasna y sus términos que son al Sur algo morenos, de color trigue-
ños, y los que nacen en Taganana, y sus términos que es al Norte, blancos y rubios». Núñez de la
Peña: «Conquista y antigüedades de la isla de la Gran Canaria», en Quartapelle, A.: op. cit., p. 484.
Marin y Cubas (1687): «Los guanches son medianos de cuerpo los de Taoro, que es hacia la parte del
norte son blancos y rubios de cavellos; los de Adexe a la del sur son prietos, y cavello negro...». Tomás
Arias Marín de Cubas: «Historia de las siete islas de Canaria», en Quartapelle, A.: op. cit., p. 541.
25
Gioffrè, D.: «Il commercio d’importazione genovese alla luce del registro dei dazi 1495-
1537», en Studi in onore di Amintore Fanfani, Gioffrè Editore (1962), vol. 5, p. 144.
26
Munster, J., en Quartapelle, A.: op. cit., 204.
27
Boni, M.: La domesticité en Toscane aux XIVe et XVe siècles, Thèse de doctorat Univ. Genève
(2006) p. 252.
son más bellas, pero, a mi parecer, son mejores las tártaras. Las circasianas tienen la
sangre fuerte y, sin embargo, esta característica es común a todas»28.
La importancia que se atribuía en Italia a los aspectos culturales para deter-
minar el valor de las esclavas se explica al considerar que muchas veces las familias
recurrían a las esclavas cuando no encontraban mano de obra libre dispuestas a tra-
bajar a cambio de un salario. En muchas oportunidades, hasta en las actas oficiales,
para referirse a una «esclava» se utilizaba el termino serva o ancilla29, como es el caso
de la joven sclava et serva Anna de 14 años de progenie maurorum canarie, vendida
por Francesco Cibo en 1498, o como Caterina de partibus canarie, de la misma edad,
serva seu ancilla de Giovanni de Bichi de Siena, en 1489. Ciertamente, las jóvenes
esclavas que cumplían la función de servidoras30 sin salario, compartían el día a día
de la vida de los dueños, ya que vivían con ellos en la misma casa y llegaban a ser
consideradas como un miembro más de la familia31, incluso podían llegar a seguir
viviendo en la casa de sus amos después de la manumisión que, en el 85% de los
casos, se concedía antes de los 45 años32. En relación con esta «esclavitud tempo-
ral», cuando se compraba una esclava que no se encargaba solo de la limpieza de la
casa y de las labores más pesadas, sino también del cuidado de niños y ancianos, se
prestaba atención a su cultura y a su posibilidad de integrarse a la familia33.
Que los aspectos culturales tuviesen importancia en la determinación del
valor del esclavo lo certifica también la experiencia española, en la que el precio de
los esclavos africanos variaba en función de su clasificación como bozales o ladi-
nos34. En un sentido estricto, el termino bozal se utilizaba para los esclavos recién
torial Universidad de Granada, Campus Universitario de Cartuja, 2000, p. 232. Meisel Roca, A.
y Granger Serrano, A.: «Determinantes del precio de los esclavos en el caribe neogranadino en el
siglo xviii», Tiempo & Economia 6 (2019) pp. 143-159 (bozales mas caros).
35
En Valencia el término bozal se utilizó por ejemplo en el caso de Caterina de 7 años:
«No jura com fos menor ni menys fonch intorroguada com fos molt boçal e nos pogues interrogar
per altres catives com fos de altres parts e terres de Canaria», en Blumenthal, D.: op. cit. p. 42.
36
Otros lingüistas opinan que bozal deriva del nombre de la traba de cuero que se aplica
en el hocico de ciertos animales para que no muerdan. Un animal con bozal es de naturaleza bravía
y agresiva; igualmente el africano bozal tampoco está domesticado y conserva un resto de su albe-
drío, de su arisca personalidad reacia a la servidumbre.
37
Granada-Casares Martin, A.: La esclavitud en la Granada del siglo XVI. Izquierdo
Labrado, J.: «La esclavitud en Huelva y Palos a fines del siglo xv, Huelva en su historia-2, p. 63.
38
En las colonias de Suramérica esta diferencia de precio a favor de los «ladinos» continua
hasta el siglo xvi. A partir del siglo xvii los propietarios empiezan a apreciar y pagar más los «boza-
les» que se consideraban más obedientes y menos capaces de defender sus derechos.
39
Aznar Vallejo, E.: «El encuentro de las culturas prehistóricas canarias con las civili-
zaciones europeas», X Coloquio de Historia Canario-americana (1994).
Fig. 12. Sclava Maddalena de progenie maurorum canariorum.
40
ASSiena, Carte Salvi, 14 maggio 1487 «... unam sclavam, nomine Caterina, de progenie
Canariarum, etatis annorum triginta vel circa, sanam et nitidam, secundum consuetudinem civitis
Ianue, ad habendum, tenendum et gaudendum dicta sclava...», en Prunaj, G.: Notizie e documenti
sulla servitù domestica nel territorio senese secc. VIII-XVI, Bullettino Senese di Storia Patria 1936 fasc. iv,
pp. 425-430. En Savona los esclavos entre el 1460 y el 1480 habían llegado a ser el 25% de la población.
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 206
41
Por ejemplo, por Charles Verlinden «le terme gaudendum ajoute une note inhabitue-
lle et de couleur incontestablement licencieuse», en Verlinden, C: «L’esclavage dans l’Europe médié-
vale» 1955, vol. 2, p. 389.
42
Dèbax, H.: «Les sociétés méridionales à l’age féodal: Espagne, Italie et sud de la France, X e -
XIII siecle» CNRS 1999, p. 113.
e
43
En la venta en Génova de la esclava Caterina de progenie maurorum alborum di 10 años
en 1474, el notaro Tommaso Duracino utiliza la fórmula: «sanam et nitidam ab omnibus viciis et
magagnis occultis et manifestis, secundum morem et consuetudinem civitatis Janue. Ad habendum,
tenendum, gaudendum, possidendum, usufructuandum, vendendum et alienandum». En el manus-
crito Carte Staglieno, vol. 4, pp. 55-57. Por cierto, en algunas pocas oportunidades, los actos nota-
riales registran de forma explícita el derecho del dueño de disfrutar sexualmente de la esclava, como
en el caso del contrato de alquiler de una joven esclava a Génova en 1420 donde el notario apunta
que la esclava tiene el deber de servir su nuevo dueño no solo en la mesa sino también «en la cama,
de acuerdo a su voluntad».
44
Petti Balbi, G.: Governare la città´. Pratiche sociali e linguaggi politici a Genova in età
medievale, Firenze University Press (2007), p. 240.
45
Stella, A.: «Des esclaves pour la liberté sexuelle de leurs maitres (Europe occidentale
xive-xviiie siecles», Clio, Histoire, femmes et sociétés, pp. 191-209. El estatuto del siglo xiii de la ciudad
de Albenga, cerca de Génova, que punía con una enmienda de 2 florines de oro quien importunaba
una esclava con palabras deshonestas, puede razonablemente motivarse con el deseo de proteger el
dueño en su derecho de no ser molestado en su relación sexual «exclusiva» con su esclava. Cluse, C.:
«Femme en esclavage: quelques remarques sur l’Italie du Nord (xive-xve siècles)», online in Medie-
val Mediterranean Slavery: Comparative Studies on Slavery and Slave Trade in Muslim, Christian and
Jewish Societies (8th-15th centuries) May 2008, p. 11.
forma de concubinato entre amo y esclava46. Así describe la situación el poeta flo-
rentino Pucci a finales del siglo xiv: «La esclava tiene ventajas en todo ... no tiene el
anillo de bodas al dedo, pero satisface los apetitos (sexuales) del marido mejor que
su esposa y con eso le da jaque mate»47.
Como puede imaginarse, no todas las esposas italianas aceptaban de buen
grado este tipo de competencia. Por ejemplo, en una carta al florentino Francesco
Datini de 1393 se lee: «Doña Paparo se queja mucho con Ud. y sobre todo con vues-
tra esposa doña Margherita porque ha permitido que Ud. vendiera a su familia una
esclava tan joven y tan bella. Las mujeres deberían guardarse de hacer cosas simila-
res las unas a las otras»48. Y en otra carta monna Leonarda le pide a su intermediario
en Génova que «no compre una esclava demasiado linda, para evitar tener que hacerle
alguna maldad». También los hombres veían que las esclavas eran un riesgo para la
paz familiar, así Francesco Datini llega a decir de una esclava: «Me han dicho que
es una puta, y yo sé cómo actúa esta clase de mujeres»49. Y Vanno Sacchetti se dirige
en una carta a uno de sus clientes tranquilizándole: «He comprado para Ud. una
joven esclava de 10 o 12 años, con una cara aplastada como un tablón de madera:
estoy seguro de que vuestra esposa Margherita no se pondrá celosa»50.
La profusión de estos amores ancilares, además de lo relacionado con la luju-
ria de los italianos, tenía probablemente una justificación demográfica: en Florencia
en 1426, el censo de los habitantes revela que en la franja etaria que iba de los 18 a
los 32 años se contaban solo 100 mujeres por cada 132 varones51.
La promiscuidad sexual dentro de las familias a veces dejaba consecuen-
cias indeseadas: de los 7534 gettatelli (niños abandonados) llevados a los orfanatos
de Florencia entre 1372 y 1485, más de 1000 eran el fruto de la relación entre una
esclava y su dueño, un miembro de la familia u otro hombre libre, muchos de los
cuales pertenecían a las más poderosas familias de Florencia, como los Medici, los
Strozzi y los Albizzi52. Contrariamente a lo que pasaba en España, en la mayoría de
las ciudades italianas el hijo de un hombre libre y de una esclava heredaba el estatus
del padre y nacía libre53. Por lo tanto, el cabeza de familia podía llegar a querer que
desaparezca de su casa no solo un hijo bastardo, sino un bastardo hijo de una esclava.
Las jóvenes esclavas, sin embargo, no despertaban el interés sexual solo del
amo y de los varones de la familia, sino también de los otros hombres. Para prote-
ger al dueño por el daño económico que podía derivar de un embarazo indeseado
los Statuti Civili e Criminali de Génova de 1375 estatuían que el hombre libre que
hubiera embarazado la esclava de otro estaba obligado a pagar a su amo la cantidad
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 208
de 25 liras y otras 50 si la mujer moría como consecuencia del parto, y tenía que
proveer al niño54.
A partir del siglo xv, para proteger al dueño contra el riesgo de perder un
«bien» tan valioso como una esclava, se difunde en Génova y en Barcelona un peculiar
contrato, el seguro contra el riesgo del parto que, con el pago de una prima, garan-
tizaba al dueño el valor de la esclava si se enfermaba o moría como consecuencia del
parto. Así, en 1466, Damiano de Franchi asegura la esclava canaria Caterina de 17
años al quinto mes de embarazo por la no despreciable cantidad de 175 liras (doc. 5).
52
Boni, M.: op. cit.
53
McKee, S.: «Inherited Status and Slavery in Late Medieval Italy and Venetian Crete»
Past & Present, No. 182 (Feb., 2004), pp. 31-53. Por Florencia: Origo, I.: «The Domestic Enemy:
The Eastern Slaves in Tuscany in the Fourteenth and Fifteenth Centuries» Speculum, vol. 30, n.o 3
(Jul., 1955), p. 364, n.o 113.
54
Penas similares se aplicaban en otras ciudades italianas: en Venecia desde 1344 se tenía
que refundir el dueño; en Florencia se obligaba a pagar una tercera parte del valor de la esclava para
su supuesto «deterioro»; en Lucca, desde 1372, no solamente se condenaba el padre a una sanción
100 liras sino además a tomar con si la esclava y, si el amo quería venderla, a refundir el doble de su
valor. Zanelli, A.: Le schiave orientali in Italia nei secoli XIV e XV, Arnaldo Forni Editore (1885) p. 61.
Volviendo a la historia de Caterina, en el acto de venta se utiliza también la
expresión sana et nitida, que ha sido interpretada en el sentido de que Caterina era
«virgen» y que su valor era, por este motivo, más alto que lo usual55. En realidad, la
especificación sana et nitida quiere decir simplemente que Caterina gozaba de buena
salud (sana ab omnibus viciis et magagnis occultis)56. Declarar las enfermedades de la
esclava o del esclavo era, en efecto, una obligación del vendedor, y eventuales omi-
siones podían comportar la resolución del contrato. Para cautelarse de las posibles
quejas del comprador no era raro encontrar esclavos de los que se declaraba que eran
vendidos cum tigna, sine capillis, cum fetore in naso o cum uno oculo. Para cautelarse,
el comprador podía también obligar al vendedor a excluir algunas enfermedades
específicas, como es el caso del esclavo canario Martinicus de generatione canaria,
vendido en Venecia en 1498, del cual se especifica que es sine defectu caduci morbi vel
aliis defectibus, o sea que no sufre de epilepsia y que no tiene otros «defectos»57. La
introducción de cláusulas para proteger al comprador de eventuales enfermedades del
esclavo no era una prerrogativa solamente italiana: por ejemplo, en 1499, en la venta
en Barcelona de la esclava canaria Caterina de 18 años el vendedor garantiza que
no sufre de epilepsia, demencia y enuresis, es decir, que no se orinaba en la cama58.
En alternativa, el esclavo podía también ser vendido sin ninguna garantía
pro talis qualis est o con omnibus suis magagnis, circunstancia no sin efecto en el pre-
cio: por ejemplo, en 1497, en Génova, la esclava maura Maria de 19 años fue ven-
dida sin garantía a 100 liras, mientras que otra esclava de la misma progenie y edad,
pero sana et nítida, se cotizó a 203 liras59.
55
«Conferenze di Federico Melis ed altri» Società Storica della Valdelsa, 1979, p. 58.
56
Por varios ejemplos ver Tria op. cit., pp. 80, 81, 101, 155, 190, 200, 202, 204, etc.
57
Entre los posibles «defectos» de un esclavo o de una esclava se incluya el estar embara-
zada o, por lo contrario, no tener menstruaciones (de carencia menstruorum), mear en la cama (de
mingendo lectum), ser idiota (de stulticia).
58
Armenteros Martínez, I.: La esclavitud en Barcelona a fines de la Edad Media (1479-
1516), Universitat de Barcelona 2012, p. 1030.
59
Gioffre, D.: op. cit., p. 125.
En los escritos se especifica que Caterina tenía una marca de color casi verde
en la barbilla y una pequeña cruz debajo del ojo derecho60. La descripción de las
características físicas de un esclavo en el acta de venta no debe extrañar, pues los
escritos se utilizaban probablemente como una especie de documento de identifica-
ción. En las actas estipuladas en Toscana, aunque no en las genovesas, era normal
encontrar descripciones detalladas que incluían, además de cicatrices, lunares, sig-
nos de viruelas, también el color de la piel (alba, clara, rubea, bruna, ulivigna), color
y forma de los ojos (chiari, neri, grossi, parvi, suffornati) y forma de la nariz (parva,
grossa, curta, schiacciata, rincagnata, affilata)61.
Seis años más tarde, Caterina, quien en ese momento tenía 20 años, volvió
a ser protagonista de un acta notarial cuando, en 1496, su dueño Johannes de Bichi
decidió donarle la libertad.
La manumisión no era un acontecimiento excepcional en Italia donde la
esclavitud se consideraba raramente una condición de por vida.
Dos eran las principales formas de manumisión de un esclavo: en la primera
el amo donaba la libertad pro anima et in remissione peccatorum, o sea, por la sal-
vación de su alma y por el deseo de ganarse la indulgencia divina. La manumisión
tomaba la forma de un legado testamentario que obligaba a los herederos a liberar el
esclavo en el momento de la muerte del dueño62. La segunda forma era in premium
servitutis, es decir, como premio por los buenos servicios prestados por el esclavo.
En este caso, la forma de donar la libertad era un contrato que preveía la posibili-
dad de poner condiciones y podía ser revocada por ingratitud o por inobservancia
de las condiciones contractuales.
En el caso de Caterina, Johannes de Bichi la manumite maxima sui animi
liberalitate convencido de que, como especifica el contrato, «tanto los hombres como
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 210
las mujeres nacen líberos»63. La libertad donada por Bichi es también un agradeci-
miento por sus servicios (in premio sue servitutis). Para garantizarle a Caterina un
futuro sin problemas económicos, en el mismo acto Bichi casa a Caterina con el
«hombre libre» Cola Gobite, un manumiso ex partibus indianis, y constituye a su
favor una dote de cincuenta ducados. A cambio de su libertad, Caterina y su esposo
se obligan a servir Johannes Bichi y a sus herederos por 15 años sin pretender nin-
gún sueldo (sine aliquo pretio, premio vel mercede).
60
«cum signo in mento coloris quasi viridis et cum una parva cruce in facie sub oculo
dextero». Charles Verlinden se pregunta si podría ser el rastro de las pintaderas. Verlinden, C.
op. cit., p. 19.
61
Boni, M.: op. cit., p. 253.
62
Como ejemplo de manumisión «pro salvatione animae» se puede citar el caso del viajero
veneciano Marco Polo que en su testamento de 1323 escribe: «absolvo Petrum famulum meum de
genere Tartarorum ab omni vinculo servitutis ut Deus absolvat animam meam ab omni culpa et pec-
cato». Zambroni, F.: Gli Ezzelini, Dante e gli schiavi, Vienna, 1870, p. 238. «Los Statuti di Genova
de 1498 prohibieron la manumisión por testamento por temor que el esclavo matara a su dueño para
obtener la libertad», en Prunai, G., op. cit., nota 6, p. 250.
63
«quo omnes tam mares quam femine nascebantur liberi».
Fig. 14. Catalina, eius serva et sclava de progenie Maurorum seu Canariorum.
64
Normalmente 6/8 anos.
65
A este contrato se añade la condición que, en caso de muerte de la dueña dentro de quince
años, Caterina seguirá sirviendo la nieta por cinco años.
66
Olgiati, G.: «La città è piena di schiavi: la condizione servile a Genova nel medioevo» in
«Schiavi a Genova e in Liguria» Sagep, 2018, pp. 34-35.
Fig. 15. Maria, serva dicti Antonii (de Bargaglio), est chanaria et de progenie canariorum.
Caterinetta.
Otro testigo, Benedetto di Dondedeo también embarcado en el navío de
Napoleone Cigalla, después de ser liberado se trasladó a la isla de Fortis Venture
(Fuerteventura) donde vio a María en la casa de la hija de Diegi de Errera de Sibilia,
quien quería vendérsela, pero al no tener dinero el testigo rechazó la oferta. Su ama
trataba a María como «servam chanariam ex insula Parme» (La Palma) y desde For-
tis Venture la había trasladado a España y en el Portus Sancte Marie la había vendido
al esposo da Caterinetta como esclava de las Islas Canarias.
El último testigo, Gregorio de Bozolo, escriba en el navío de Antonio
Nigrone, declaró que mientras estuvo en Sevilla había visto a María viviendo en la
casa de la señora de las Islas Canarias y que era tratada como una esclava y consi-
derada por todos como una canaria.
El documento no explica por qué se recogieron estos tres testimonios. Tal
vez porque Caterinetta, la ama de la esclava sin nombre, quería demostrar la legiti-
midad de sus derechos de propriedad. O tal vez porque la esclava se había dirigido
al Magistrato dei Supremi Sindicatori de Génova para que fuera declarada su escla-
vización como injusta, como lo hizo en 1487 una María que quería volver a ser una
mujer libre alegando su origen hispano y no mauro.
1: 1425, Génova - los carniceros Antonio Palavania y Jacopo Pipo otorgan un poder a Anto-
nio de Antonio porque recupere el esclavo mauro Lanzaroto que se había escapado
junto con otro esclavo circasiano
(ASGe – Lorenzo Villa f. 3, a.79)
2: 1462 Florencia – los mercaderes Centurioni entregan en Sevilla una esclava canaria a
un patrón vasco para que la venda en Florencia
(ASGe – Bartolomeo Canessa f. 1, a. 13)67
3: 1463 Génova – Battista Doria vende a Giovanni Focoberto, mercader de Mallorca, por
25 ducados el esclavo Jacobino de 14 años de progenie maurorum canarie
(AsGe – Tommaso Duracino f.7, a.16)
4: 1465 octubre 3, Génova – se vende a un mercader catalán, por 20 ducados una esclava
canaria de 8 años68
(ASGe – Tommaso Duracino, f.8, a.537)
5: 1465 octubre 11, Génova – Marco de Muste, nauta, vende a Giovanni Focoberto mer-
cader de Mallorca, por 122 liras la esclava Caterina maura di canaria de 20 años
(ASGe – Tommaso Duracino, f.8, a.564)
6: 1466 Génova - Damiano de Franchi asegura por 175 liras contra los riesgos del parto
la esclava Cazina de progenie Canariorum de 26 años al quinto mes de embarazo
(ASGe – Tommaso Duracino f.9, a.72)
7: 1468 Génova – Pietro de Petra vende a Gabriele Marco, mercader de Valencia, por 80
liras la esclava Caterina maura de Canaria de 20 años
(ASGe – Tommaso Duracino f.11, a. 225)
67
Heers, J.: Genes au XV siecle, op. cit., p. 494.
68
Heers, J.: op. cit., p. 35.
13: Génova 1486: Marsilio da Capriata vende al sedero Bartolomeo Sacco la esclava cana-
ria Lucia de 30 años por 150 liras
(ASGe – Gerolamo Loggia f. 3, serie I, a. 288)
14: Siena 1487, mayo 14: Matteo del qm Giovanni Salvi de Siena, banquero, vende por 55
ducados de oro a Raffaello de Signorio de Savona la esclava Caterina de progenie
canariarum de 30 años, sanam et nitidam (la misma esclava del doc. xxx)
(ASSi – Carte Salvi)
15: Génova 1487, febrero: Battista Valle entrega a Antonio Pinu la esclava Maddalena de
progenie maurorum canariorum de 16 años para que la transporte a Sicilia a su riesgo
(risico, periculo et fortuna Dei, mari et gentium) y la venda o la cambie
(ASGe – Nicolò Raggi f. 17 a. 16)
16: Génova 1487, agosto 2: Battista Valle otorga una procura a Marco Cabella para que
recupere en Sicilia la esclava Maddalena de progenie maurorum canariarum de 18
años o, en alternativa, el precio de su venta (ver doc. vvv)
(ASGe – Nicolò Raggi f. 17, a. 579)
17: Génova 1488, junio 4: Raffaele Centurione vende a Giovanni Begazio la pequeña esclava
Maria de progenie maurorum seu canariorum por 30 ducados
18: Génova 1488, abril 2: Primaflore Ragio emancipa a la esclava Caterina de progenie
maurorum seu canariorum de 37 años a condicion que la sirva para toda su vida
(ASGe – Nicolò Raggi f. 18, a. 256)
19: Siena 1489, septiembre 14: Girolamo de Iacopo Spinola de Génova vende en Siena a
Giovanni de Bichi, quien compra por su padre magnificus miles Antonio, la ser-
vam seu ancillam Caterina de 14 años, hija de Hysa de Sala de partibus Cannarie,
por 52 ducados largos de oro.
(ASSi – Legato Bichi–Borghesi)
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 214
20: Siena 1495, octubre 20: Antonio Bichi de Siena emancipa a la esclava Caterina in pre-
mium sue servitutis (ver doc. xx) y la casa con Cola Gobite homo liber ex partibus
indianis. Como acto de gratitud el matrimonio se compromete a servir Antonio
Bichi por 15 años como fideles famuli et amorosi ac solliciti servitores.
(ASSi – Legato Bichi-Borghesi)
21: Valencia 1496, febrero 12: El M.R. recibe de micer Nicolás Cathero, mercader vene-
ciano, 42 sls. por las 31 lbs. en que ha vendido un cautivo blanco de Tenerife.
(A.R.V., C.M.R., 21, fol. 51.)69
22: 1496 Génova, agosto 2: en su testamento Barnaba Carrega deja a su esposa la esclava
canaria Caterina (sin indicación de la edad)
(ASGe – Biagio Foglietta f. 2)
23: 1496 Génova: Lazzaro de Canalis vende al lanero Geronimo de Bardis la esclava cana-
ria Margherita de 22 años por 130 liras
(ASGe – Lorenzo Costa, fl. 17, a. 98)
69
Cortes, V.: op. cit., p. 536.
24: 1496 Génova: el confector Simone Riccio vende al notaro una esclava canaria sin nom-
bre de 11 años por 123 liras
(ASGe – Nicolò Raggi, fl. 23, a. 793)
25: Génova 1496: el sedero Gabriele de Otone vende la esclava canaria Anna de 14 años
a Pietro de Mari por 200 liras
(ASGe – Antonio Pastorino, f. 11, a. 138)
26: Génova 1498, marzo 26: el magníficus dominus Francesco Cibo vende a Pietro de Mari
la esclava Anna de progenie maurorum canarie de 14 años por 200 liras.
(ASGe – Nicoló Raggi, fl.26 n. 269)
27: Venecia 1498, noviembre 19: Antonius Bassus vende unum suum scravum Martini-
cum, de generatione Canaria, de 13 años por 25 ducados sine defectu caduci morbi
vel aliis defectibus secundum morem patrie
(ASVe – Giovanni Bonetti , Cancelleria inferiore. Notai, busta 29)70.
70
Verlinden, C.: «Le recrutement des esclaves à Venise aux XIVe e XV e siecles», Bulletin de
l’Institut historique belge de Rome 1968, vol. 39, p. 182.
DOC. 2
Génova 1481: tres testigos declaran que la esclava Maria chanaria et de progenie canario-
rum de propiedad de Caterina de Bargaglio es originaria de la isla de la Goimera
ASGe, Notai antichi, 872, n. 36
Transcripción de Giustina Olgiati, Archivio Nazionale di Genova
1481, noviembre 22, Génova
Testimonianza di Gregorio di Bozolo fu Simone, cittadino di Génova.
1481, diciembre 5, Genova
Testimonianza di Benedetto de Dondedeo, cittadino di Genova.
Extractum]
1481 testificaciones XXI novembris
In nomine Domini, amen. Ex hoc publico instrumento cuntis pateat evidenter quod,
constitutus in presencia reverendi domini locumtenentis et vicarii archiepiscopi ianuensis
ac mei notarii et testium infrascriptorum, Thedixius Lercarius, filius domini Andree, testis
summarie productus per Caterinetam, uxorem Antonii de Bargalio civis Ianue, probare
volentem ad eternam rei memoriam ne fides veri pereat quod Maria, serva dicti Antonii,
est chanaria et de progenie canariorum et pro canaria eam emit in Ispania et sic tractabatur
et reputabatur ab omnibus cognoscentibus eam, admonitus et eidem delato iuramento per
me notarium infrascriptum, de mandato prefati domini locumtenentis et vicarii, de veritate
dicenda et veritati testimonium perhibendum et de eo quod sciverit et fuerit interrogatus
super predictis, dicto titulo eidem prius lecto et per eum plene intellecto, suo iuramento
testificando dixit se tantum scire de contentis in dicto titulo videlicet quod, dum alias,
modo esse possunt anni quatuor in circa, ipse Tedixius esset in nave patronizata per Nea-
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 216
polionum Cigallam, que ob procellam maris ivit ad quendam insulam Canarie nominatam
Gomeriam, ipse testis, dum descendisset in terram sub fide, fuit captus et captivus stetit
per aliquos menses sub potestate domini Diegi Errerii chavalerii Sibiliensis, domini dicte
insule et aliarum Chanarie, vidit multociens dictam Mariam que tunc stabat cum domina
Maria, filia dicti domini Diegi, pro sclava et tanquam sclava inducta more chanarearum
serviebat / in domo dicte domine Marie et eidem Marie serve, et dum ipse testis detineba-
tur in carceribus, pluries requisivit ut (1), amore Dei, vellet ei dare aliquantulum aque pro
bibendo, de qua eidem testi gratiose porrigebat. Scitque etiam quod dicta domina Maria
dictam Maria<m> conduxit tanquam servam ad aliquas insulas Canarie, ad quas causa eas
vixitandi accedebat, et postremo missit eam in Ispaniam. Postea vero intellexit quod vendita
fuit dicta Maria dicto Antonio, et hoc est quod scit de contentis in dicto titulo.
Interrogatus de causa scientie < respondit> per ea que supra dixit et fuit testificatus.
Interrogatus si attinet producenti respondit non.
Interrogatus si ad eum spectat commodum vel incommodum de predictis respondit non.
Interrogatus super aliis interrogatoriis generalibus, recte respondit et dixit velle obtinere
ius habentem.
De quibus omnibus prefatus dominus vicarius mandavit dictaque Caterineta rogavit per
me notarium infrascriptum confici debere presens publicum instrumentum, in fidem et
testimonium premissorum.
Actum Ianue, ad bancum iuris curie archiepiscopalis ianuensis, anno dominice nativitatis
MCCCC°LXXX primo, indicione XIIII secundum Ianue cursum, die mercurii vigessimo
primo novembris, in vesperis, presentibus nobili Alaono Imperiali et Simone Biono Bar-
tholomei, civibus Ianue, testibus ad premissa vocatis specialiter et rogatis.
Actum in loco suprascripto, anno et indicione suprascriptis, die vero iovis XXII novembris,
in vesperis, presentibus Simone Biono Bartholomei et Baptista Risoto q. Gabrielis, civibus
1. Segue depennato: eadem 2. Segue, depennato: chanaria 3. navi: corretto su precedente nave
4. Guasto per filza.
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 218
DOC. 3
Siena, 14 de mayo de 1487
Matteo del qm Giovanni Salvi de Siena, banquero, vende por 55 ducados de oro a Raffaello
de Signorio de Savona la esclava Caterina de progenie canariarum de 30 años, (la misma
esclava del doc. 14)
(ASSiena – Carte Salvi)
Texto integral en Prunai, G.: «: «Notizie e documenti sulla servitù domestica nel territorio
senese secc. VIII-XVI»
In nomine Domini, amen. Anno ab ipsius Domini salutifera incarnatione millesimo qua-
dringentesimo octuagesimo septimo, indictione quinta, secundum stilum et consuetudinem
notariorum civitatis Senarum, die vero. XIIII. mensis maii, tempore beatissimi in Cristo
patris et domini, domini Innocentii, divina providentia, pape octavi, et regnante serenissi-
mo principe et domino, domino Federico, romanorum imperatore semper augusto, ut Sen
is comuniter fertur. Appareat omnibus evidenter quod egregius mercator Matheus olim
Iohannis de Salvis, bancherius de Senis, dedit, vendidit et tradidit Raphaeli de Signorio de
Savona, presenti, recipienti et ementi pro se et suis heredibus et successoribus unam ipsius
(Mathei] sclavam, nomine Caterina, de progenie Canariarum, etatis annorum triginta vel
circa, sanam et nitidarn, secundum consuetudinem civitatis Ianue, ad habendum, tenen-
dum et gaudendum dicta sclava et quicquid deinceps dicto Raphaeli et suis heredibus et
successoribus placuerit faciendum et disponendum, pro pretio et nomine pretii quinquaginta
ducatorum auri in auro, quos dictus Matheus, venditor, fuit confessus et recognovit dicto
Raphaeli emptori se ab eo habuisse et recepisse integre et numeratos et non sub spe alicuius
future numerationis vel receptionis, exceptioni non numerate pecunie et non soluti dicti
pretii ornnino renunptiante. Et promisit dictus Matheus, venditor, pro se et suos heredes
In nomine domini nostri Iesu Cristi, amen. Anno ab ipsius salutifera incarnatione mille-
simo quatrincentesimo octuagesimo nono, indictione octava, secundum stilum, praticam,
consuetudinem et comunem observantiam notariorum civitatis senensis, die vero decima
quarta mensis septembris, tempore pontificatus beatissimi in Cristo patris et domini, domini
Inocentii, divina providentia, pape octavi, regnanteque serenissimo principe et domino,
domino Federico tertio, divina favente clementia romanorum imperatore semper augusto,
ut comuniter Senis fertur. Pateat omnibus evidenter qualiter spectabilis vir dominus Hiero-
nimus domini Jacobi Spinola de Ianua, per se suosque heredes et successores, iure dominii
et plene proprietatis et possexionis et in perpetuum, dedit, vendidit et tradidit spectabili
et generoso militi domino lohanni domini Antonii domini Iohannis de Bichis de Senis
presenti, ementi et recipienti pro magnifico milite domino Antonio domini Iohannis de
Bichis de Senis predicto eius patre et pro eius domini Antonii heredibus et successoribus,
unam eius domini Hieronimi servam seu ancillam, nomine Caterinam, filiam Hyse, de Sala,
de partibus Cannarie, etatis annorum quatuordecim vel circa, cum signo in mento coloris
quasi viridis et cum una parva cruce in facie sub oculo dextero, ad habendum, tenendum
et possidendum et quidquid dicto emptori, ut supra presenti, ementi et recipienti et ipsius
domini Antonii heredibus et successoribus deinceps perpetuo placuerit faciendum, cum
omnibus et singulis iuribus suis et cum omnibus et singulis que dicta res vendita habet
et continet in et super se, in, super, intra, infra seu supra se, in integrum omnique iure et
ratione, usu seu requisitione sibi ex ea et pro ea re vendita aut eius occasione modo aliquo
pertinentibus et spectantibus et in antea competituris, pro pretio et nomine pretii quin-
quaginta duorum ducatorum auri largorum ad rectum pondus magnifici comunis senensis,
quod quidem pretium fuit confessus et recognovit dicto emptori, ut supra presenti, ementi
et recipienti, se ab eo habuisse et recepisse in ducatis et pecunia numeratis et non sub spe
alicuius future numerationis vel receptionis;
Etc.
In nomine Domini nostri Iesu Cristi, amen. Anno ab ipsius incarnatione quadringente-
simo nonagesimo quinto, indictione decima quarta, secundum stilum et consuetudinem
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 220
+ In nomine Domini amen. Cum sit quod de iure naturali omnes homines oriantur liberi
et servitus per ius gentium contra ius naturale fuerit introducta, et ad ipsius servitutis ex-
tinctione fuerit per dictum ius gentium manumissionis beneficium adinventum, ideoque
Primaflos, filia quondam Antonii de Pendula et uxor quondam Iacobi Ragii, ob multa
grata, servicia et beneficia per ipsam habita et recepta a Catalina, eius serva et sclava de
progenie Maurorum seu Canariorum, etatis annorum triginta septem vel circa, etiam in
remedium anime dicte Primefloris, volens eidem Cataline gratiam facere specialem, eandem
Catalinam, licet absentem, per me notarium infrascriptum, officio publico, stipulantem
et recipientem nomine et vice dicte Cataline a , salvis et sub condictionibus infrascriptis,
liberavit, manumissit et franchivit et a manu et potestate ipsius Primefloris ac ab omni
vinculo et iugo servitutis exemit et liberavit ac absolvit, eidem Cataline, licet absenti, salvis
infrascriptis, largiens et concedens meram, puram ec floridam libertatem, ita quod dicta
Catalina, salvis infrascriptis, sit libera, francha et sui iuris possitque testari, codicillari,
emere, vendere, sibi acquirere, in iamdicto iure venire, et omnes contractus et iudiciarios a[c]
tus b facere et c celebrare ac si nata fuisset libera et in libertate et numquam fuisset dedita in
dominium alicuius, et prout potest quelibet mulier Romana et exitens sui iuris, salvo tamen
iure patronorum in ipsa Primaflore et eius heredibus, et salvis condictionibus infrascriptis,
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 222
videlicet quod dicta Catalina teneatur et debeat d et cogi possit servire et famulari eidem
Primeflori in vita ipsius Primefloris et quamdiu ipsa e viverit bene legaliter et dilengenter,
et si ipsa Primaflos decederit infra annos quindecim proxime venturos quod ipsa Catalina
teneatur et debeat f et cogi possit servire et famulari bene legaliter et diligenter Hyeronime
filie quondam Pelegri de Pendula, fratris dicte Primefloris, annis quinque et per annos quin-
que sive tempore annorum quinque tantum. Renuncians dicta Primaflos exceptioni dicte
franchisie, liberacionis et manumissionis ut supra et cum dictis condictionibus non facte,
rei sic ut supra non esse vel non fuisse, sei sic non se habens vel aliter se habens, doli, mali,
metus in factum, actioni, condicioni g sine causa vel ex iniusta causa et necnon beneficio /
senatus consulti Veleyani, legi Iulie de fondo h dotali, autentice «Si qua mulier» et omni alii
iuri et legum i auxilio quibus contra predicta j et infrascripta venire posset vel aliqualiter
protep<s>tari, certiorata prius dicta Primaflos per me notarium infrascriptum de dictis
iuribus et beneficiis quid sint et dicant. Quam quidem manumissionem, liberacionem et
franchysiam et omnia et singula suprascripta promist dicta k Primaflos et iuravit ad sancta
Dei evangelia, corporaliter tactis scripturis, salvis tamen predictis, michi dicto infrascripto
notario, ut supra stipulanti et recipienti et per me eidem Cataline, licet absenti, firmam,
ratam et gratam et firma, rata et grata habere et tenere, actendere, complere et observare,
contraque in aliquo modo non facere, ducere vel venire per se l vel alium aliqua ratione,
occasione vel causa, cogitata vel non, et que modo aliquo vel ingenio, de iure vel de facto,
dici vel excogitari possit ***, sub pena dupli tocius eius et quo seu de quo contrafactum
foret, vel ut supra non observatum, solemni stipulatione promissa ***, et cum restitutione
damnorum omnium, interesse et expensarum que propterea fierent seu essent, litis et ex-
tra, ratis manentibus suprascriptis, et sub ypoteca et obligatione bonorum omnium ipsius
Primefloris, presentium et futurorum. Faciens dicta Primaflos predicta omnia et singula in
presencia, cum et de consilio Hyeronimi Capelli quondam Iohannis, et Tome de Canicia,
filii m Bartholomei, propinquorum suorum ex melioribus, ut dixit, iurantium ad sancta Dei
evangelia, corporaliter tactis scripturis, sese credere predicta omnia et singula fieri potius n
ad comodum et utilitatem dicte Primefloris quam ad aliquod eius damnum vel lesionem.
Actum Ianue, in Fossatello, ad bancum mei notarii infrascripti, anno dominice nativitatis
MoCCCCLXXXVIIIo, indictione quinta iuxta morem Ianue, die mercurii secunda aprillis,
in vesperis. Testes Pelegrus de Octonello, speciarius, quondam Antonii o et Iohannes de
Marasio, bambaxarius, quondam Bartholomei, vocati et rogati.
a
nomine - Cataline nell’ interlineo b foro della filza c facere et nell’ interlineo d segue depennato
et ad hoc e ipsa nell’ interlineo f segue depennato servire g condicioni corretto h fondo così i segue
depennato ax au j segue depennato ve re k segue depennato Pf l segue depennato se m filii corretto
n
potius nell’ interlineo o segue depennato et Baptista.
Asecuratio sclave a.
In nomine Domini amen. Leonardus de Nigro, civis Ianue, quondam Angeli, sponte et
ex certa scientia confessus fuit et confitetur et in veritate publice recognovit et recognoscit
mihi notario infrascripto, tanquam publice persone officio publico stipulanti et recipienti
nomine et vice Damiani de Franchis de Burgaro, et per per me, dictum notarium infra-
scriptum, eidem Damiano, licet absenti, se a dicto Damiano seu ab alia persona pro eo
emisse, habuisse et recepisse tantam quantitatem suorum rerum b et mercium bonorum
mercantilium causa infrascripta ***, renuncians et cetera ***, unde et pro qua quantitate
dictarum rerum et mercium, seu precio et valoris ipsarum, dictus Leonardus per se et he-
redes suos se obligavit, promisit et solemniter convenit c mihi dicto notario infrascripto, ut
supra stipulanti et recipienti nomine et vice dicti Damiani, licet absentis ut supra, eidem
Damiano vel persone pro eo legitime dare et solvere seu dari et solveri facere realiter et
cum effectu quod hinc ad menses sex proxime venturos libras centum septuaginta quinque
ianuinorum monete currentis ***, sub pena dupli *** / ratis et cetera ***, et proinde et cetera
***. Salvo et specialiter reservato <quod> si quidam sclava ipsius dicti Damiani, nominata
Cazina, de progenie Canariorum, etatis annorum decem septem vel circa, gravida seu pre-
gnans mensium quinque vel circa, de partu suo et de dicte eius gravidacione, pregnatione
REVISTA DE HISTORIA CANARIA, 203; 2021, PP. 189-224 224
et partu, et occasione ipsius gravidacione, pregnatione et partu viva evaserit, quod tunc et
eo casu presens instrumentum sit cassum, irritum et nullum*** d. Actum Ianue, in Bancis,
sub porticu domus Angeli de Nigro et fratris, videlicet ad bancum residencie mei notarii
infrascripti, anno dominice nativitatis MoCCCCLXVI, indictione XIIIa secundum Ianue
cursus, die lune tercia marcii, hora signi meridiei, presentibus testibus Raynaldo Iustiniano
quondam Argoni et Bartholomeo de Roncaiolo quondam Iohannis, civibus Ianue ad hec
vocatis et rogatis.
a
Asecuratio sclave nel margine superiore, al centro del foglio b suorum rerum corretto c segue
depennato dicto d segue, non espunto sit enim cassum.
DOC. 6