Los Reyes de Juda
Los Reyes de Juda
Los Reyes de Juda
2. Rey Asa
El peligro de abandonar al Señor
pg. 14
3. Rey Josafat
Cuando cristianos se comprometen con el
mundo pg. 26
4. Rey Josafat
Confianza durante una crisis pg. 38
5. Rey Joás
Cuando las expectativas engañan pg. 49
6. Rey Joás
Como se hace la obra de Dios pg. 60
7. Rey Amasías
Cristianismo tibio pg. 68
8. Rey Uzías
Los peligros del éxito pg. 78
9. Rey Jotam
Siguiendo a Dios pg. 86
10. Rey Acaz
¿Abandonando el pecado o Dios? pg. 94
16. Conclusión:
Cuando cae el juicio de Dios pg. 154
Capítulo 1
Finalmente:
Capítulo 6
Conclusión
Cristianismo Tibio
Rey Amasías
2 Crónicas 25
Capítulo 9
Siguiendo a Dios
Rey Jotam
2 Crónicas 27
Capítulo 10
Capítulo 11
El gozo de la obediencia
Rey Ezequías
2 Crónicas 30
Capítulo 14
2. Manasés se arrepintió.
Leemos (33:12) que “oró a Jehová su Dios,
humillado grandemente en la presencia del Dios de
sus padres.” y Dios le mostró misericordia. Si el
arrepentimiento es el requisito de Dios para que los
pecadores se reconcilien con Él, entonces es
importante entender lo que significa al dejar que la
Biblia nos lo diga. Mucha gente en la iglesia realmente
no sabe qué es el arrepentimiento bíblico porque
muchas iglesias predican a un Jesús que no nos
cambia.
A. El arrepentimiento significa volverse del
pecado a Dios y realizar obras apropiadas para
el arrepentimiento.
Conclusión
La historia de Josías termina con una nota triste. El
faraón Necao pasó por Judá en su camino al norte
hacia Carquemis, donde tenía la intención de unirse a
Asiria contra Babilonia (35:20). No tenía la intención
de pelear con Josías, pero Josías insistió en pelear con
él. Probablemente parecía lo más sensato. Pero en
ninguna parte leemos de Josías buscando al Señor
acerca de esta batalla. De hecho, se disfraza antes de ir
a la batalla (35:22), lo que nos recuerda la estratagema
utilizada por el malvado Acab. ¿Por qué disfrazarte si
estás en la voluntad de Dios? Pero Josías va contra
Egipto, recibe un disparo en la batalla y muere a los 39
años. El avivamiento se detiene. Y en unos pocos años,
Judá cae ante Babilonia.