Cohecho

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 76

DIEGO EUGENIO CORREDOR BELTRÁN

Magistrado ponente

SP1742-2022
Radicado N° 57051.
Acta 115.

Bogotá, D.C., veinticinco (25) de mayo de dos mil


veintidós (2022).

VISTOS

Se decide el recurso de casación interpuesto por el


defensor del procesado JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, contra
el fallo de segunda instancia proferido por la Sala Penal del
Tribunal Superior de Distrito Judicial de Bogotá, el 26 de
septiembre de 2019, mediante el cual confirmó la sentencia
condenatoria emitida por el Juzgado Noveno Penal del
Circuito con Funciones de Conocimiento de esa ciudad, el 5
de julio de 2018, que lo condenó como autor penalmente
responsable del delito de hurto calificado agravado en
concurso heterogéneo con los reatos de concierto para
delinquir y cohecho propio.

1
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

ANTECEDENTES

1. Fácticos

En la ciudad de Bogotá, durante el año 2016, existió


una organización criminal liderada por JAIBER ORDUAY
GARZÓN SERRATO, alias “Garzón”, la cual se dedicaba
principalmente a cometer hurtos a residencias y
establecimientos de comercio.

La referida organización estaba conformada por


particulares, quienes se encargaban de ejecutar los hurtos,
y, además, por miembros activos de la Policía Nacional,
entre ellos JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, MAICOL QUIROGA
BELTRÁN, SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE
HERNÁNDEZ IMITOLA, quienes bajo la promesa de un pago del
30% del valor de lo hurtado, se apartaban de manera
deliberada y dolosa del cumplimiento de sus funciones
constitucionales y legales, tendientes a proteger la vida,
honra y bienes de la ciudadanía, para garantizar la
consumación de los hurtos, el acrecentamiento del
patrimonio económico de los miembros de la organización
criminal, con el correlativo perjuicio para las víctimas, y
finalmente, la impunidad total de todos los punibles
ejecutados por ellos.

2
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Uno de los delitos que cometió esta organización, en el


que participó el subintendente JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, ocurrió el 31 de julio de 2016, a partir de las
00:13:20 horas en la ciudad de Bogotá, en la carrera 15
#51-36, en el establecimiento de comercio “Almacén y
Platería Tiana”, lugar al que ingresaron de manera violenta
varias personas y sustrajeron múltiples dijes de plata.

El aporte del subintendente JAROL RODRÍGUEZ


GUTIÉRREZ a este específico plan criminal consistió, como
integrante de la patrulla a cargo del cuadrante en el que se
encontraba ubicado el establecimiento de comercio referido,
en (i) cooptar a los miembros de la Policía Nacional que
también patrullaban esa noche, para que no interfirieran en
el plan criminal; (ii) informar y alertar a los otros
integrantes de la organización criminal que estaban
ejecutando el hurto, sobre los movimientos que se
suscitaban al interior de la Policía Nacional; (iii) retardar la
reacción de la autoridad; y (iv) alertarlos sobre cualquier
movimiento que podría poner en riesgo la operación
delincuencial; todo ello con la finalidad de garantizar la
ejecución exitosa del delito y evitar que los coautores fueran
sorprendidos en flagrancia.

2. Procesales

3
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Previa solicitud del Fiscal 133 local 1, el 9 de noviembre


de 2017 se celebraron ante el Juzgado 27 Penal Municipal
con Funciones de Control de Garantías de Bogotá, las
audiencias preliminares de legalización de captura,
formulación de imputación e imposición de medida de
aseguramiento contra JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, JAIBER
ORDUAY GARZÓN SERRATO, MAICOL QUIROGA BELTRÁN, SERGIO
ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ IMITOLA,
a quienes se les formuló imputación por el delito de
concierto para delinquir, en concurso heterogéneo con el
reato de hurto calificado -con violencia sobre las cosas-
agravado –por dos o más personas que se hubieren reunido o
acordado para cometer el hurto-. Además, a JAROL RODRÍGUEZ

GUTIÉRREZ, MAICOL QUIROGA BELTRÁN, SERGIO ENRIQUE


PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ IMITOLA, se les
enrostró el delito de cohecho propio, y a JAIBER ORDUAY
GARZÓN SERRATO, el reato de cohecho por dar u ofrecer
(artículos 340, 239, 240 numeral 1º, 241 numeral 10º, 405, 407, 58
numeral 5º y 31 de la Ley 599 de 2000), 2 cargos que sólo fueron

aceptados por JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO y MAICOL


QUIROGA BELTRÁN.3

El delegado de la Fiscalía solicitó la imposición de


medida de aseguramiento en contra de los imputados, a la
que accedió el Juez, quien les impuso detención preventiva
en establecimiento de reclusión.

1
A folios 14 a 16, carpeta del juzgado.
2
A partir del récord 2:07:29.
3
A partir del récord 44:31.

4
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

El 13 de febrero de 2018, la delegada de la Fiscalía


presentó escrito de acusación 4, que le correspondió al
Juzgado Noveno Penal del Circuito con Funciones de
Conocimiento de Bogotá, ante el cual se llevó a cabo la
audiencia para tal fin el 20 de marzo de ese mismo año,
oportunidad en la que la fiscalía acusó a JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE
HERNÁNDEZ IMITOLA, por los mismos delitos a ellos
imputados, y se les adicionó la circunstancia de agravación
punitiva del delito de hurto, prevista en el numeral 11 del
artículo 241 del Código Penal, esto es -En establecimiento
público o abierto al público-.5

En diligencia del 12 de abril de 2018, que había sido


fijada para llevar a cabo la audiencia preparatoria, la Fiscal
manifestó que había celebrado un preacuerdo con los
procesados SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE
HERNÁNDEZ IMITOLA, y sus defensores, consistente en que
éstos aceptaban los cargos imputados a cambio de que se
degradara su participación de coautores a cómplices, por lo
que la Juez de Conocimiento decretó la ruptura de la
unidad procesal respecto de los dos implicados, y el
proceso siguió su curso respecto del procesado JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ.

4
A folios 45 a 54, cuaderno del juzgado.
5
A partir del récord 38:40.

5
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

La audiencia preparatoria se realizó el 24 de mayo de


2018. El juicio oral se celebró en sesiones del 13, 22 y 25
de junio de 2018, y concluyó con el anuncio del sentido del
fallo de carácter condenatorio.

La lectura de la sentencia se realizó el 5 de julio de


2018; por este medio se condenó a JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, a 135 meses de prisión, multa en cuantía
equivalente a 70 s.m.l.m.v. e inhabilitación para el ejercicio
de derechos y funciones públicas por el término de 85
meses, como autor penalmente responsable del delito de
concierto para delinquir, en concurso heterogéneo con los
reatos de hurto calificado agravado y cohecho propio. Se
negó la suspensión condicional de la ejecución de la pena y
la prisión domiciliaria.

Recurrida la decisión por la defensa, la Sala Penal del


Tribunal Superior de Distrito Judicial de Bogotá, mediante
sentencia del 26 de septiembre de 2019, confirmó el fallo
confutado, decisión en contra de la cual el defensor
interpuso y sustentó el recurso extraordinario de casación,
demanda que fue admitida el 29 de enero de 2021, auto en
el que se dispuso surtir el trámite previsto en el Acuerdo 20
del 29 de abril de ese mismo año, dado el estado de
emergencia con ocasión al Covid-19.

SENTENCIA IMPUGNADA

6
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

La Sala Penal del Tribunal Superior del Distrito Judicial


de Bogotá, el 26 de septiembre de 2019 confirmó la
sentencia condenatoria proferida en contra de JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, por el Juzgado Noveno Penal del
Circuito con Funciones de Conocimiento de esa ciudad, con
base en los siguientes argumentos.

En primer lugar, desechó la solicitud de nulidad


elevada por el defensor del procesado por la presunta
violación del derecho a la defensa, dado que, contrario a lo
alegado, la actividad defensiva desplegada por su antecesor
fue idónea y adecuada.

En segundo lugar, el Ad-quem analizó los elementos


descriptivos del tipo penal del concierto para delinquir y
concluyó que en el presente asunto se probó más allá de
toda duda que el procesado se concertó con otros para
cometer delitos, específicamente, hurtos a residencias y
establecimientos de comercio, y que su aporte a la referida
organización consistió en poner a su disposición la
institución y la función que él representaba.

Luego, el Tribunal descartó la solicitud elevada por el


defensor, consistente en la exclusión de los CDs que fueron
incorporados al juicio con el testimonio del investigador
Jonathan Daniel Chaves Torres, porque, contrario a su

7
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

dicho, la prueba fue incorporada luego de haberse cumplido


el debido proceso probatorio.

En cuarto lugar, en la sentencia impugnada se indicó


que el testigo MAICOL QUIROGA BELTRÁN -compañero de patrulla
de RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ y coprocesado- manifestó que el
procesado «hacía parte de la organización criminal, y tenía
conocimiento de los múltiples hurtos que se realizaban, de los cuales

cada integrante recibía un porcentaje», prueba que permite

corroborar la existencia de los hechos y la responsabilidad


de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ.

Por último, en cuanto a los delitos de hurto calificado


agravado y cohecho propio, el Tribunal aseveró que con las
conversaciones interceptadas se probó «los atentados contra el
patrimonio económico y contra la administración pública por JAROL

RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ», pues, por un lado, se acreditó que la

organización criminal de la cual hacía parte el procesado,


se apoderó de 216 artículos del establecimiento de comercio
“Almacén y Platería Tiana”, y además, que omitió un acto
propio de sus funciones a cambio de recibir un porcentaje
por cada ilícito cometido.

LA DEMANDA

El recurrente, en un escrito repetitivo, confuso y


deshilvanado, manifestó que formulaba tres cargos de
casación, en su orden, por violación directa de la ley

8
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

sustancial, desconocimiento del debido proceso por


afectación sustancial de su estructura o de la garantía
debida a cualquiera de las partes y violación indirecta de la
ley sustancial; sin embargo, al momento de sustentar cada
uno de los yerros demandados, no se ciñó a los parámetros
lógicos, argumentales y de postulación propios del recurso,
pues, amalgamó distintas causales sin percatarse de la
distinción y diferencia entre cada una de ellas, lo que
conspira contra los principios de claridad, autonomía y
taxatividad, aunque obliga su examen de fondo, dado que la
Corte admitió la demanda.

Por lo anterior, para evitar repeticiones innecesarias y


en aras de que se conozcan los motivos de disenso, a
continuación la Sala procederá a sintetizar las críticas,
dirigidas en su mayoría a señalar que en el presente asunto
no se probó más allá de toda duda razonable la
responsabilidad de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, por los
delitos de concierto para delinquir, hurto calificado agravado
y cohecho propio.

En efecto, para el censor no se probó que su


representado: (i) se hubiera concertado con otros para
cometer delitos indeterminados, al punto que ni siquiera
conocía al líder de la presunta organización, tal y como lo
declaró MAICOL QUIROGA BELTRÁN; ello, sumado a que la
fuente no formal nunca señaló a RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ,
como miembro de la organización criminal por él referida;

9
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

(ii) hubiera aceptado una promesa remuneratoria a cambio


de omitir un acto propio de su cargo o para ejecutar uno
contrario a sus deberes oficiales, ni mucho menos, haber
recibido el 30% del valor de lo hurtado, lo que descarta la
existencia de los delitos de cohecho propio y hurto
calificado agravado; (iii) tuviera conocimiento de las
actividades ilícitas desarrolladas por su compañero de
patrulla, MAICOL QUIROGA BELTRÁN, el día 31 de julio de
2016. Asegura que, pues, si en gracia a discusión pudiera
considerarse lo contario, la participación de RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ se muestra circunstancial, lo que no solo
descarta la existencia del delito de concierto para delinquir,
sino que evidencia que debió haber sido condenado como
cómplice y no como coautor del delito de hurto; y, (iv)
participó en los hechos ocurridos el 10 de diciembre de
2016.

De otro lado, asegura que (a) las circunstancias de


calificación y agravación punitiva del delito de hurto no se
le pueden atribuir a su representado, porque él jamás
ingresó al establecimiento de comercio ni ejerció violencia
alguna sobre las cosas; (b) como la cuantía del hurto fue
estimada en la suma de $3.000.000, se requería la querella,
requisito de procedibilidad que no fue cumplido en este
caso, por lo que debe declararse la nulidad de lo actuado; y,
(c) la Fiscal en la acusación manifestó que el hurto ocurrido
el 31 de julio de 2016, fue cometido por dos personas, lo
que excluye la participación del procesado en este reato.

10
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

2. Sustentación del recurso ante la Corte

2.1 El Recurrente
Solicita a la Corte casar la sentencia impugnada,
exponiendo similares razones a las exhibidas en la
demanda de casación.

2.2. No recurrentes

2.2.1. El Fiscal delegado ante la Corte

El Fiscal, de manera preliminar, solicita a la Corte


desestimar los cargos formulados por el defensor del
procesado, dado que no están llamados a prosperar, debido
a la falta de claridad y de rigor técnico en su formulación.

De aceptarse la demanda, solicita a la Corte casar de


oficio y de manera parcial la sentencia impugnada, para
que se absuelva a JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ por el delito
de concierto para delinquir, dado que, en su sentir, el
Tribunal incurrió en violación indirecta de la ley sustancial
por error de hecho por falso juicio de identidad al momento
de valorar los testimonios de varios declarantes, así:

Respecto del testigo Jonathan Daniel Cháves Torres, el


Fiscal aduce que el Tribunal aseguró que éste manifestó lo

11
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

siguiente: «Jonathan Daniel Chaves Torres investigador de la DIJIN,


ratificó la existencia de la organización criminal, la cual era
conformada por el subintendente Jarol Rodríguez y otras personas

que se dedicaban a hurtar en joyerías y apartamentos »;6 sin

embargo, «no se observa que el investigador de manera expresa o en


forma indirecta indique que Rodríguez pertenecía a esa organización

criminal»,7 con lo cual, el Ad-quem incurrió en el yerro

referido.

Luego de transliterar algunos apartes de una


conversación interceptada, señala que dicha comunicación
no deja duda que JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO -alias
“Garzón”, no conocía al compañero de patrulla de MAICOL

QUIROGA BELTRÁN, lo que descarta la pertenencia de este


último a la organización criminal. Y, aunque QUIROGA
BELTRÁN señaló que en el pasado ya había hecho “varias
cosas” con él, no se logró determinar de manera clara y
precisa la «participación del acusado en ellos o que indique que
hayan sido ejecutados como miembro de un grupo criminal».

De igual manera, asegura que el Tribunal tergiversó el


testimonio de José Alirio Martín Martín, pues, contrario a lo
reseñado en la sentencia impugnada, el declarante nunca
manifestó que el procesado pertenecía a una organización
criminal. Lo que arroja la evidencia es que la participación
de RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en los hechos ocurridos el 31 de
julio de 2016, fue circunstancial, a tal punto que QUIROGA

6
A folio 26, cuaderno del Tribunal.
7
A folio 20, carpeta de la Corte.

12
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

BELTRÁN le dijo a alias “Garzón”, que iba a convencer a su


compañero de patrulla para que coadyuvara el propósito
criminal, lo que descarta la responsabilidad del procesado
por el delito de concierto para delinquir.

Por último, el testigo y coprocesado MAICOL QUIROGA


BELTRÁN nunca manifestó que el procesado pertenecía a la
organización criminal de la que él sí hacia parte, contrario a
lo que concluye el Tribunal.

En conclusión, el Fiscal asegura que «el acusado fue


contactado por los miembros del grupo delincuencial para la
ejecución del hurto a la Platería Tiana, no existiendo prueba que
permita establecer su pertenencia a esa agrupación ilegal u otra en la
ejecución de otros hechos delictuosos, por lo tanto, no está incurso en
el delito de concierto para delinquir».

2.2.2.El representante del Ministerio Público

Solicita a la Corte no casar la sentencia impugnada,


con base en los cargos propuestos en la demanda, dado que
no están llamados a prosperar.

Sin embargo, advierte que en el presente asunto se


violó el debido proceso -dado que en las oportunidades
procesales pertinentes no se delimitaron de manera clara y
completa las circunstancias de tiempo y modo que
relacionan al procesado con la existencia de una

13
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

organización criminal- y el principio de congruencia, pues,


respecto del delito de hurto calificado agravado, en el escrito
de acusación «se definió a nivel fáctico fue la ubicación de
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en el lugar de dicho punible, como si hubiera
participado en su ejecución material y directa, es decir, como si

hubiese sido un ejecutor propio de la conducta»; sin embargo, fue

condenado por «facilitar la acción antijurídica de los actores


materiales y directos del hecho, demorándose en llegar a la platería
afectada con el ilícito, junto con otro compañero de la institución
policial igualmente involucrado en los hechos, para procurar la salida
de aquellos de manera expedita llevando consigo el botín obtenido»,

hechos que son disímiles.

En consecuencia, de manera principal solicita a la


Corte que se decrete la nulidad de lo actuado a partir de la
formulación de acusación.

De forma subsidiaria, refiere que las pruebas


practicadas son insuficientes para encontrar acreditada
más allá de toda duda razonable la responsabilidad del
procesado por los delitos de hurto calificado agravado y
cohecho propio, dado que «Ninguna prueba relacionada
directamente con el ingreso de los autores materiales al
establecimiento denominado “Almacén y Platería Tiana”; con las
afectaciones que habría sufrido el mismo por el ejercicio de violencia
sobre los mecanismos de seguridad existentes para su ingreso; con la
acreditación de la prexistencia material y del valor de los elementos
presuntamente hurtados, es traído a colación en los fallos
impugnados como prueba de las fases material y subjetiva del ilícito
que, se dice, fue allí perpetrado el 31 de julio de 2016».

14
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Por lo anterior solicita a la Corte que absuelva al


procesado por los delitos de cohecho propio y hurto
calificado agravado.

CONSIDERACIONES

1. Competencia

La Corte es competente para resolver la demanda de


casación formulada por el defensor de JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, contra la sentencia de segunda instancia
proferida por la Sala Penal del Tribunal Superior del
Distrito Judicial de Bogotá, conforme se desprende del
numeral 1° del artículo 32 de la Ley 906 de 2004.

Dicho esto, la Sala no se referirá a las deficiencias de


fundamentación que claramente se advierten en la
demanda de casación presentada por el defensor del
procesado, pues, la previa admisión de la misma implica
que se resuelva de fondo, para lo cual se adelantará la
siguiente metodología: en primer lugar, se resolverán las
solicitudes de nulidad plateadas por la defensa y por el
delegado del Ministerio Público, seguidamente, la Sala
dedicará un acápite al estudio de la valoración probatoria,
en el que se analizará si se encuentra probada la

15
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

responsabilidad del procesado en los delitos por los que fue


condenado.

2. Sobre las nulidades formuladas

2.1. Ausencia de querella

El defensor del procesado refiere que se violó el debido


proceso porque no se formuló querella dentro del plazo
establecido en la Ley, requisito obligatorio dado que la
cuantía del hurto fue estimada en la suma de $3.000.000,
por lo que debe declararse la nulidad de lo actuado.

Al efecto, debe partir por señalar la Sala, que el artículo


74 de la Ley 906 de 2004 –aún con las modificaciones
introducidas por las leyes 1142/07, 1453/11, 1542/12 y 1826/17- ,

dispone que se requiere querella, entre otros, para el delito


de «hurto simple cuya cuantía no exceda de ciento cincuenta (150)
salarios mínimos mensuales legales vigentes (C. P. artículo 239 inciso
2º)».

Dicho esto, es necesario precisar que en la audiencia de


formulación de imputación se le enrostró a JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, la comisión del delito de hurto
calificado agravado, en calidad de coautor, entre otras
conductas punibles, reato que no se encuentra enlistado en
el artículo 74 de la Ley 906 de 2004, por lo tanto, no se

16
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

necesitaba la interposición de la querella para el inicio de la


acción penal.

Ahora bien, el defensor aduce que las circunstancias de


calificación punitiva –con violencia sobre las cosas- y de
agravación –por dos o más personas que se hubieren reunido o
acordado para cometer el hurto y en establecimiento público o abierto

al público- no le pueden ser atribuidas a su representado,

porque él no ejerció ninguna violencia sobre las cosas, ni


ingresó al lugar donde ocurrieron los hechos.

Con tal postura, el profesional del derecho olvida que


los coautores impropios -grado de participación que se le atribuyó
a RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ- responden por el resultado común

acordado y no por su específica contribución o aporte, de


conformidad con el principio de imputación recíproca que
gobierna la coautoría impropia.

Al respecto, la Sala en la decisión CSJ SP2198-2020,


Rad. 49485 manifestó lo siguiente:

«En estos casos de coautoría impropia, el resultado típico es


producto de la voluntad común, en forma tal que, si bien en
principio podría afirmarse que cada conducta aisladamente
valorada no posibilita su directa adecuación, el común designio
que ata a la totalidad de cuantos intervienen con actos
orientados a su ejecución, rechaza un análisis sectorizado de
cada facción e impone por la realización mancomunada que
desarrolla el plan urdido, que sólo pueda explicarse bajo la tesis
de la coautoría impropia, en tanto compromete a todos los
copartícipes como si cada uno hubiere realizado la totalidad del

17
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

hecho típico y no, desde luego, por la porción que le fue asignada
o finalmente ejecutó.

Desconoce así el casacionista el principio de imputación


recíproca propio de esta clase de coautoría, según el cual los
resultados lesivos que cada uno de los partícipes realice les
serán atribuibles a los demás».

Por lo tanto, la censura propuesta por el defensor no


está llamada a prosperar.
Violación del debido proceso por la indeterminación
de los hechos jurídicamente relevantes referidos al
delito de concierto para delinquir

El delegado del Ministerio Público solicitó a la Corte que


decrete la nulidad de la actuación a partir de la audiencia
de formulación de acusación, dado que se violó el debido
proceso, pues, en las oportunidades procesales pertinentes
no se delimitaron de manera clara y completa las
circunstancias de tiempo y modo que relacionan al
procesado como vinculado con una organización criminal.

La Corte de manera reiterada ha establecido que, si en


las audiencias de formulación de imputación y de
acusación, el fiscal no define de manera clara, completa y
suficiente los hechos jurídicamente relevantes, a tal punto
que el indiciado o imputado no haya tenido la posibilidad de
conocer por qué hechos se le vincula o está siendo
investigado, se vulnera de manera flagrante el debido
proceso –congruencia y defensa-, por lo cual, el único remedio

18
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

posible es la nulidad de la actuación (CSJ SP741-2021, Rad.


54658).

También se ha dicho que para una correcta


construcción de los hechos jurídicamente relevantes es
imprescindible que: (i) se interprete de manera correcta la
norma penal, lo que se traduce en la determinación de los
presupuestos fácticos previstos por el legislador para la
procedencia de una determinada consecuencia jurídica; (ii)
el fiscal verifique que la hipótesis de la imputación o la
acusación abarque todos los aspectos previstos en el
respectivo precepto; y (iii) se establezca la diferencia entre
hechos jurídicamente relevantes, hechos indicadores y
medios de prueba, bajo el entendido que la imputación y la
acusación concierne a los primeros, sin perjuicio de la
obligación de relacionar las evidencias y demás información
recopilada por la Fiscalía durante la fase de investigación –
entendida en sentido amplio-, lo que debe hacerse en el

respectivo acápite del escrito de acusación (CSJ SP, 08 Marzo


2017, Rad. 44599; CSJSP, 08 marzo 2017, Rad. 44599, CSJ SP1271-
2018, Rad. 51408; CSJ SP072-2019, Rad. 50419; CSJ AP283-2019,
Rad. 51539; CSJ SP384-2019, Rad. 49386, entre otras).

El artículo 340 de la Ley 599 de 2000, inciso primero,


describe el delito de concierto para delinquir de la siguiente
manra: «Cuando varias personas se concierten con el fin de cometer
delitos, cada una de ellas será penada, por esa sola conducta, con
prisión…».

19
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Conforme la descripción típica, una adecuada


estructuración de los hechos jurídicamente relevantes exige
que se constate que cada imputado, acusado o condenado:

«(i) participó del acuerdo orientado a generar una empresa


criminal, “con vocación de permanencia y durabilidad”, dispuesta
para cometer cierto tipo de delitos; (ii) se trata de delitos
indeterminados, así sean determinables -homicidios, hurtos-, lo
que se contrapone a los acuerdos esporádicos para cometer un
delito en particular –el homicidio de X, el hurto en la residencia
de Y, etcétera-; (iii) el rol de cada imputado, acusado o condenado
en la organización –promotor, director, cabecilla, lo que implica
suministrar la mayor información posible acerca de la estructura
criminal; (iv) la mayor concreción posible sobre el tiempo de
existencia de la organización, así como de su área de influencia»
(CSJ SP5660-2018, Rad. 52311).

En la audiencia de formulación de imputación


celebrada el 9 de noviembre de 2017, a JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ se le formuló imputación en calidad de autor del
delito de concierto para delinquir, entre otros reatos, con
base en los siguientes hechos jurídicamente relevantes:

«…una matriz que inició a través de una fuente no formal la cual


el pasado 7 de julio de 2016 se acerca a las instalaciones de la
escuela de postgrado de la fiscalía una persona que no quiso
aportar sus datos de identificación por temor a su seguridad…

Esta persona afirmó de manera libre y espontánea que conocía


una organización criminal, la cual era aproximadamente de 7
personas que se dedicaban al hurto de residencias y
establecimientos de comercio, pero que además de ello, esa
organización criminal era conformada por muchos policías
quienes se dedicaban a facilitar estos hurtos, ya sea participando
activamente, o a través de Garzón, realizando los contactos o los
puentes para abordar y cooptar a otros funcionarios activos de la
Policía Nacional en otros cuadrantes, todo ello obviamente con
varias funciones delimitadas y entre esas, la función de alias

20
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

“Garzón”, que aprovechado su condición de policía retirado,


señala la fuente no formal, pues le quedaba fácil abordar a los
servidores activos de la Policía Nacional…

¿Cuál era el objetivo común de esta organización criminal? Se


pudo establecer que el objetivo común de esta organización
criminal era la realización de hurtos a residencias y
establecimientos de comercio, en las cuales participaban
particulares que eran los ya sean o convocados por alias
“Garzón”, o bandas criminales dedicadas a esta clase de ilícitos,
pero que utilizaban a alias “Garzón” para realizar el contacto con
los policías, y por el otro lado la participación de los policías,
quienes facilitaban estos hurtos de manera activa y pasiva.

Activa, es decir, ya no se convertían simplemente en


facilitadores, sino en verdaderos coautores, en la medida en que
participaban en un porcentaje de lo que se recolectara en el
ilícito, y obviamente se comprometían, primero a definir la fecha
y hora del hurto a partir de los turnos en los cuales ellos se
encontraban laborando en el respectivo CAI o cuadrante, porque
efectivamente debía ser era el cuadrante o su zona en la cual
ellos ejercían esa autoridad; por otro lado, su señoría, ellos eran
los encargados, los policías, de informar a “Garzón”, y “Garzón” a
su vez a los miembros de la organización criminal particulares
que estaban realizando el hurto, en caso tal de que reportaran el
caso o también si reportaban un caso cercano, también
alertarlos en el sentido que iba a ir la policía por ahí cerca, pero
que no se preocuparan, es decir, su señoría, a dar esa
participación activa para coordinar la realización de este ilícito.

Y, por otro lado, una participación omisiva pues obviamente


dejando a un lado sus obligaciones legales y constitucionales su
señoría que el estado les confirió para la protección de la vida,
honra, y bienes respecto a su zona o cuadrante, básicamente ese
era el objetivo común de esa organización criminal, y esta
organización criminal su señoría fue denominada “Los Garzones”
a partir que el miembro relevante dentro de esta es conocido
como alias “Garzón”.

¿Dónde opera la organización criminal, su señoría? De acuerdo a


la fuente no formal, pero también a las verificaciones, esta
organización criminal generalmente opera en la ciudad de
Bogotá.

¿Cuál fue la apropiación obtenida? y de ahí entonces


nuevamente informo que a partir de esta información, se
realizaron diferentes actividades investigativas en las cuales se

21
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

recaudó suficiente información respecto a varios hurtos, pero en


la medida en que esta organización criminal iba creciendo en
integrantes, y también iba creciendo en ilícitos, se tomó la
decisión en virtud a los derechos a la verdad, justicia y
reparación de las víctimas de identificar algunos eventos, los
eventos de hurto que ya estuvieran debidamente documentados,
para efectos de hacer una compulsa de copias y judicializarlos,
obviamente eso implica de que existe todavía algunas actividades
que se están esperando simplemente la información para
judicializar otros eventos de hurto.

En lo que tiene que ver con este radicado, la apropiación total


obtenida por la organización criminal fue de $26.000.000, no
obstante, su señoría, de acuerdo a los avances de la indagación,
esta organización criminal la cual participaban de manera activa
varios particulares dedicados al hurto y varios policías activos de
la Policía Nacional, su señoría, pueden superar los 100 o hasta
los 500 millones de pesos.

¿Quiénes son los integrantes de la organización criminal su


señoría para este radicado? Los aquí presentes y que se
encuentran JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO, MAICOL QUIROGA
BELTRÁN, JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, SERGIO ENRIQUE PAREDES
CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ IMITOLA».8

Más adelante, cuando el Fiscal realizó la imputación


jurídica, esto dijo con relación al delito de concierto para
delinquir:

«En primer lugar, vamos a hablar del concierto para delinquir en


donde a todos se les imputó en calidad de autores, entonces el
delito dice lo siguiente, artículo 340 inciso primero…no es lo
mismo que tres ciudadanos x por allá hablando en una esquina
a que funcionarios activos de la Policía Nacional, en compañía de
un ex servidor de la Policía Nacional comiencen a coordinar
delitos en su cuadrante, en el lugar de su jurisdicción, teniendo
en cuenta sus turnos…

Y entonces aquí ya no se acordó un solo delito, aquí ya lo que se


acordó fue pertenecer a esa organización criminal, estar
disponible como miembro de esa organización criminal para
cualquier ilícito, ya sea en su propio cuadrante o en un

8
A partir del récord 1:15:07.

22
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

cuadrante donde haya algún amigo o alguien a quien también se


pueda cooptar, y esa sola conducta ya es castigada por la ley
penal, por eso es el concierto para delinquir.

Pero si fuera adicional, resulta que una cosa es ese acuerdo, que
es un acuerdo que tiene relevancia nada más y nada menos por
funcionarios activos de la Policía Nacional el en su momento,
para los que esta retirados, que no solamente ponen su cargo
sino su jurisdicción al servicio de los criminales, sino que
además de eso en caso tal de que en virtud a ese concierto
cometan algún delito en desarrollo de ese concierto, ya
automáticamente también son coautores de ese delito…».

Ahora bien, en la audiencia de formulación de


acusación celebrada el 20 de marzo de 2018, JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ fue acusado por los mismos delitos
imputados, con base en los siguientes hechos jurídicamente
relevantes:

«El 7 de julio de 2016, se acercó a las instalaciones de la escuela


de postgrados de la Policía Nacional en Bogotá, una persona
quien no quiso aportar sus datos de identificación por temor a su
seguridad y afirmó de manera libre y espontánea, conocer la
existencia de una organización criminal dedicada al hurto a
residencias y entidades comerciales de la ciudad de Bogotá.
Dicha organización se encontraba conformada por policías que
ayudaban facilitando los robos, la cual era liderada por JAIBER
GARZÓN, quien se desempeñó como policía, pero se habría
retirado hacía unos años, y mantenía contactos en la policía.

A través de investigación realizada por la Policía Judicial, se


pudo establecer que la banda está conformada por cinco (5)
personas, quienes con la anuencia de uniformados de la Policía
Nacional ingresaban a residencias y entidades comerciales, en la
mayoría de las ocasiones en ausencia de sus moradores,
administradores y/o propietarios, hurtando objetos de valor,
emprendiendo la huida, sin ser objeto de captura, porque los
uniformados activos participaban recibiendo un porcentaje de lo
hurtado a cambio de omitir sus funciones constitucionales.

La cuantía del ilícito. Se documentaron dos eventos del hurto


donde el valor total de la mercancía fue de $26.000.000. Es de

23
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

aclarar, su señoría, que aquí en el escrito se trata del valor total


de los dos eventos del hurto.

El primer evento tuvo ocurrencia el 31 de julio de 2016


aproximadamente a las 00:02 horas en el establecimiento
público, local comercial de razón social “Almacén y Platería
Tiana”, ubicado en la carrera 15 N° 51-36 de Bogotá, en el que
participaron dos personas, y escalaron por la casa contigua al
local, luego subieron hasta la terraza y desde allí descendieron
hasta el tejado del local, caminando hasta la parte trasera donde
acceden por el patio forzando la chapa y lograr desconectar la
primera alarma, luego se apropiaron de nueve exhibidores, los
cuales contenían cada uno 24 dijes y medallas de plata, para un
total de 216 artículos, los cuales, según el administrador del
local, señor Fernando Mora Cortés, están avaluados en la suma
de $3.000.000. En este hurto participó JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, entre otros.

En el segundo evento el cual tuvo ocurrencia el 10 de diciembre


de 2016 en el apartamento ubicado en la calle 64A N° 1A-67 del
barrio Granada, de Bogotá, en el transcurso del día y en
ausencia de su morador el ciudadano español Eduardo Riesco
Mata, en esta oportunidad los miembros de la organización
criminal ingresaron por los tejados, luego por una ventana de la
casa, y al apartamento accedieron forzando unas rejas,
apropiándose del pasaporte del señor Riesco, dos portátiles, uno
avaluado en $1.500.000 y el otro en $5.000.000, también unas
gafas y un casco de montar en bicicleta, un equipo de fotografía
profesional avaluada en $15.000.000, en total de lo apropiado
asciende a la suma de $23.000.000

En este hurto participaron SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y


LUIS JORGE HERNÁNDEZ IMITOLA.

El líder de la organización es el señor JAIBER ORDUAY SERRATO,


quien se encargó de la planeación y coordinación de los hurtos,
en los cuales participaron en el primer evento los uniformados de
la Policía Nacional JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ y en el segundo
evento SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ
IMITOLA.9

El anterior recuento deja en evidencia que, si bien, en


algunos apartes el Fiscal al momento de narrar los hechos
entremezcló los contenidos probatorios con los hechos
9
A partir del récord 31:18.

24
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

jurídicamente relevantes objeto de imputación y acusación,


lo que indiscutiblemente conspira contra la claridad y
brevedad que debe caracterizar este acto procesal, no cabe
duda que al imputado se le brindó información suficiente
acerca de las circunstancias de tiempo, modo y lugar en
que ocurrieron los hechos que se le enrostraban, las
conductas que se le atribuían, los elementos estructurales
de los delitos imputados, etc., por lo que se cumplieron los
objetivos de ambas diligencias.

Específicamente, sobre el delito de concierto para


delinquir, el representante del ente acusador dio cuenta de
la existencia de una organización criminal denominada “Los
Garzones”, liderada por JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO, ex
miembro de la Policía Nacional, cuya zona de influencia
predominante era la ciudad de Bogotá, la cual se
encontraba conformada por aproximadamente siete
personas, cuya finalidad consistía en cometer hurtos a
residencias y establecimientos de comercio, en la mayoría
de ocasiones en ausencia de sus moradores,
administradores y/o propietarios.

El fiscal refirió que la organización criminal se


encuentra conformada por particulares, quienes se
encargan de ejecutar los hurtos, y por miembros activos de
la Policía Nacional, los cuales cumplen las siguientes
funciones, con la finalidad de facilitar la ejecución y
consumación de los delitos acordados: (i) abordar y cooptar

25
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

a otros policiales para que integren la organización


criminal; (ii) definir la fecha y hora en que se llevarían a
cabo los ilícitos, que debe coincidir con los turnos en los
que los policiales se encuentren prestando el servicio en el
respectivo cuadrante donde los hurtos se van a llevar a
cabo; (iii) informar al líder de la organización sobre
cualquier novedad que se presente en el momento en que se
esté ejecutando el delito; y (iv) no cumplir con sus funciones
constitucionales y legales de proteger la vida, honra y
bienes de los ciudadanos, con el fin de garantizar el éxito de
la operación delincuencial; todo lo anterior, a cambio de un
pago consistente en el 30% sobre el valor de lo hurtado.

Organización criminal a la que pertenece JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, en su condición de miembro activo
de la Policía Nacional.

Lo anterior obliga concluir que la fiscalía expuso cómo


se conformaba la organización ilegal, quiénes eran sus
integrantes y líderes, destacó la finalidad de la conducta y
el papel que, conforme su teoría del caso, desempeñaba
JAROL RODRÍGUEX GUTIÉRREZ, indicando las específicas
funciones y el rol que le correspondía realizar en su
condición de miembro activo de la Policía Nacional, por lo
que, contrario a lo que manifestó el delegado del Ministerio
Público, el Fiscal sí estructuró los hechos jurídicamente
relevantes relacionados con el delito de concierto para
delinquir, de manera adecuada, lo que obliga desechar la

26
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

existenciade algún tipo de violación al debido proceso y a


los derechos de defensa y contradicción del procesado.

Por lo tanto, la solicitud de nulidad elevada por el


delegado del Ministerio Público, no está llamada a
prosperar.

2.2. Nulidad por la violación al principio de


congruencia

El procurador manifestó que se violó el principio de


congruencia con relación al reato de hurto calificado
agravado, dado que en el escrito de acusación «se definió a
nivel fáctico fue la ubicación de RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en el lugar de
dicho punible, como si hubiera participado en su ejecución material y
directa, es decir, como si hubiese sido un ejecutor propio de la

conducta»; sin embargo, fue condenado por «facilitar la acción


antijurídica de los actores materiales y directos del hecho,
demorándose en llegar a la platería afectada con el ilícito, junto con
otro compañero de la institución policial igualmente involucrado en
los hechos, para procurar la salida de aquellos de manera expedita

llevando consigo el botín obtenido», hechos que son disímiles.

La Sala, de manera reiterada, ha señalado que el


principio de congruencia se constituye en una garantía del
debido proceso que implica asegurarle al procesado una
efectiva defensa, de modo que solo podrá ser condenado por
los hechos y los delitos contenidos en la acusación. Se evita

27
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

así sorprenderlo con imputaciones respecto de las cuales no


se defendió y no ejerció su derecho de contradicción (ver,
entre otras, CSJ SP, 15 may. 2008, rad. 25913; CSJ SP, 16 mar.
2011, rad. 32685; CSJ SP6354-2015, rad. 44287 – postura reiterada
en las decisiones CSJ SP9961-2015, rad. 43855; CSJ SP5897-2015,
rad. 44425; CSJ SP15779-2017, rad. 46965, CSJ SP20949-2017, rad.
45273.

Ahora bien, la jurisprudencia también ha registrado


que el aludido postulado puede ser infringido por vía de
acción o de omisión, esto es, cuando el funcionario judicial
condena por: (i) hechos no incluidos en la imputación y
acusación o por conductas punibles diversas a las
atribuidas en el acto de acusación; (ii) un delito jamás
mencionado fácticamente en la imputación, ni fáctica y
jurídicamente en la acusación, (iii) el injusto por el que se
acusó, pero adicionado en una o varias circunstancias
específicas o genéricas de mayor punibilidad, y (iv) el reato
imputado en la acusación pero al que le suprime una
circunstancia genérica o específica de menor punibilidad
reconocida en la audiencia de formulación de acusación.

Sin embargo, la Corte explicó a partir de la sentencia


SP, 27 jul. 2007, Rad 26468, que dicho principio no es
absoluto, y que, por tanto, resulta jurídicamente posible
variar en el fallo la calificación jurídica atribuida en la
acusación, sin quebrantar las garantías fundamentales,
siempre que (i) se trate de un delito de menor entidad, (ii)

28
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

que guarde identidad en cuanto al núcleo básico o esencial


de la imputación fáctica y, (iii) no implique desmedro para
los derechos de las partes e intervinientes.

Con esta claridad, se advierte que en la audiencia de


formulación de imputación se le atribuyó a JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ el delito de hurto calificado -con violencia sobre las
cosas- agravado –por dos o más personas que se hubieren reunido o
acordado para cometer el hurto y en establecimiento público o abierto

al público- en calidad de coautor, por su participación en el

hurto ocurrido el 31 de julio del 2016, a las 00:02 horas, en


la carrera 15 #51-36 de la ciudad de Bogotá, en el
establecimiento de comercio “Almacén y Platería Tiana”.

Así, luego de dar lectura a la entrevista que rindió la


víctima y a la síntesis de unas conversaciones telefónicas
que fueron interceptadas,10 refirió que ese día los policiales
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ y MAICOL QUIROGA BELTRÁN
conformaban el cuadrante 21 del CAI Galerías, patrulla de
la cual el primero de los mencionados era el comandante,
por lo que le correspondía «liderar todos los procedimientos
policiales y todos los patrullajes »11 y que su específico aporte al

plan criminal consistió en (i) informar al líder de la


organización que habían reportado el caso a otros policiales,
y que por lo tanto, los delincuentes que se encontraban al
interior del establecimiento debían salir de inmediato; y (ii)
pese a que conocía que en el establecimiento de comercio
10
A partir del récord 1:23:23.
11
A partir del récord 1:27:12.

29
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

“Almacén y Platería Tiana” se estaba ejecutando un hurto,


omitió cumplir sus funciones como policía, con el fin de
garantizar el éxito de la operación delincuencial; todo lo
anterior, a cambio de un pago consistente en el 30% sobre
el valor de lo hurtado.

Más adelante, cuando el Fiscal realizó la imputación


jurídica, con relación al delito de hurto calificado agravado,
esto dijo:

«Y aquí entonces también se les imputa el delito de hurto


calificado y agravado, y el hurto es definido en el artículo 239…

En este caso efectivamente hubo un apoderamiento, que no fue


el que se quiso, pero la finalidad si era apropiarse de unos
bienes, ¿por qué razón?, porque precisamente ustedes estaban
confiados con relación al primer evento, que ustedes iban a
atender el caso, cuando escucharon por radio que un teniente
también iba allá a atender el caso “uy no pilas, pilas, llámenlos
que salgan rápido”.

Entonces eso que significa, que aquí no solamente es una


participación de mirar hacia otro lado, sino que es una
participación activa, hay un aporte relevante, y por lo tanto, el
aporte relevante en este caso del hurto es para todos,
convirtiéndolos a todos en coautores, es decir, que tan
responsable es de ese hurto como los que entraron allá, en el
evento uno, los que se pasaron la pared y se llevaron unos dijes,
y no pudieron consumar toda la apropiación, no porque no
hubieran querido, sino fue porque se le atravesó el teniente, que
iba también allá a ver ese caso y no alcanzaron a sacar todo…
como ustedes, que obviamente en contacto telefónico o personal
con Garzón, estaban pendientes del desarrollo del ilícito, y es que
si fuera más evidente, no solo en el desarrollo del ilícito sino
después, “q’ubo que fue, cuanto me toca, donde nos vemos..” y
en los dos casos se acordó el 30% de la participación del botín»

30
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Ahora bien, en la audiencia de formulación de


acusación celebrada el 20 de marzo de 2018, la Fiscal dio
lectura al escrito de acusación presentado el 13 de febrero
de 201812, de la siguiente manera:

«El 7 de julio de 2016, se acercó a las instalaciones de la escuela


de postgrados de la Policía Nacional en Bogotá, una persona
quien no quiso aportar sus datos de identificación por temor a su
seguridad y afirmó de manera libre y espontánea, conocer la
existencia de una organización criminal dedicada al hurto a
residencias y entidades comerciales de la ciudad de Bogotá.
Dicha organización se encontraba conformada por policías que
ayudaban facilitando los robos, la cual era liderada por JAIBER
GARZÓN, quien se desempeñó como policía, pero se habría
retirado hacía unos años, y mantenía contactos en la policía.

A través de investigación realizada por la Policía Judicial, se


pudo establecer que la banda está conformada por cinco (5)
personas, quienes con la anuencia de uniformados de la Policía
Nacional ingresaban a residencias y entidades comerciales, en la
mayoría de las ocasiones en ausencia de sus moradores,
administradores y/o propietarios, hurtando objetos de valor,
emprendiendo la huida, sin ser objeto de captura, porque los
uniformados activos participaban recibiendo un porcentaje de lo
hurtado a cambio de omitir sus funciones constitucionales.

La cuantía del ilícito. Se documentaron dos eventos del hurto


donde el valor total de la mercancía fue de $26.000.000. Es de
aclarar, su señoría, que aquí en el escrito se trata del valor total
de los dos eventos del hurto.

El primer evento tuvo ocurrencia el 31 de julio de 2016


aproximadamente a las 00:02 horas en el establecimiento
público, local comercial de razón social “Almacén y Platería
Tiana”, ubicado en la carrera 15 N° 51-36 de Bogotá, en el que
participaron dos personas, y escalaron por la casa contigua al
local, luego subieron hasta la terraza y desde allí descendieron
hasta el tejado del local, caminando hasta la parte trasera donde
acceden por el patio forzando la chapa y lograr desconectar la
primera alarma, luego se apropiaron de nueve exhibidores, los
cuales contenían cada uno 24 dijes y medallas de plata, para un
total de 216 artículos, los cuales, según el administrador del
local, señor Fernando Mora Cortés, están avaluados en la suma
12
A folios 45 a 54, carpeta del juzgado.

31
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

de $3.000.000. En este hurto participó JAROL RODRÍGUEZ


GUTIÉRREZ, entre otros.
(…)

El líder de la organización es el señor JAIBER ORDUAY SERRATO,


quien se encargó de la planeación y coordinación de los hurtos,
en los cuales participaron en el primer evento los uniformados de
la Policía Nacional JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ y en el segundo
evento SERGIO ENRIQUE PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ
IMITOLA.13

En la sentencia de primera instancia se condenó a


JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, por el delito de hurto
calificado agravado, con base en los siguientes hechos:
«Visto como esta, emerge diáfana la participación consciente y
voluntaria en los ilícitos que se le acusan al señor JAROL
RODRÍGUEZ pues, de conformidad con lo narrado por los cinco
investigadores, estos fueron contundentes, coherentes y claros al
develar los procedimientos adelantados por ellos y con los cuales
se recaudaron suficientes medios probatorios que al ser
analizados en conjunto, sin lugar a dudas revelan que el
enjuiciado, para el 31 de julio de 2016, laboraba como miembro
activo de la Policía Nacional con el rango de comandante de
patrulla del cuadrante 21 asignado al sector de Galerías, lugar
en el que ocurrió un hurto a la Platería Tiana a primeras horas
de aquel día…
(…)

Se dice previamente, porque los investigadores presentaron en


juicio numerosas comunicaciones que fueron interceptadas,
entre el compañero de patrulla del hoy acusado (MAICOL QUIROGA)
con el líder de la banda alias GARZÓN. Es así como se concretó el
lugar donde se pretendía ejecutar el hurto, siendo de resaltar que
también se denotó en el uniformado un alto grado de interés en
que se le permitiera su participación, siendo incisivo con alias
GARZÓN de poder contar con su apoyo, en la medida que no solo
sería el encargado del cuadrante correspondiente para aquella
fecha sino que además, aseveró el haber participado previamente
en otros actos similares con éxito por lo que sabía que podía
contar (o en los términos del policía: “cuadrar”) a las personas
con quienes laboraba, resultando que su compañero de patrulla
no era otro que el subintendente JAROL RODRÍGUEZ, lo cual
13
A partir del récord 31:18.

32
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

concuerda con el dicho mismo del uniformado QUIROGA cuando


abiertamente le informa a GARZÓN que podía cuadrar con el
subintendente…

…circunstancia ésta que deja al descubierto que parte del


encubrimiento del proceder delictual, adoptado por el señor
JAROL RODRÍGUEZ, sin duda obedecía precisamente en abstenerse
de entablar contacto directo por vía telefónica, con los
malhechores civiles, cuanto más con el líder de la banda; de allí
que hoy pretenda excusarse en la inexistencia de tales
conversaciones para alegar su inocencia; no obstante, tal y como
se advirtió en precedencia, la Fiscalía logró demostrar más allá
de toda duda, su participación consciente y voluntaria en los
reatos que aquí se investigan, en cuya división del trabajo les
correspondía (como patrulla asignada al cuadrante), propender
por brindar las condiciones de “seguridad” a los asaltantes de la
joyería, informando y alertando a los mismos, sobre los
movimientos que debían realizar en la patrulla y de los reportes
hechos desde la central de radio.
(…)

Entonces, al estar enmarcados ante este particular modus


operandi, nos lleva a un escenario en el cual, los actos
suscitados en torno a este policial RODRÍGUEZ lo revelan como
partícipe plenamente conocedor del apoyo delictual que estaban
brindando junto con su compañero de patrulla a los asaltantes
de la joyería Tiana y a su líder JAIBER GARZÓN, evidenciado ello
con las probanzas que dan cuenta de la línea temporal: anterior,
concomitante y posterior a ese hurto».

Y, en la sentencia impugnada, respecto a la


participación de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en el hurto
ocurrido el 31 de julio de 2016, se indicó lo siguiente:

«Ahora, en lo que tiene que ver con el disenso del recurrente,


atinente a la responsabilidad del procesado por los delitos de
hurto calificado agravado y cohecho propio, se hace necesario
reiterar que como prueba testimonial de la Fiscalía fue
escuchado el investigador Jonathan Chaves Torres, quien
recopiló de varias empresas de telefonía las comunicaciones de
algunos abonados, en las cuales se probaron los atentados
contra el patrimonio económico y contra la administración
pública por JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ.
(…)

33
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

También se estableció que RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, quien era


servidor público, omitió un acto propio de su cargo, cual era
velar por la seguridad de los inmuebles del sector de Galerías, y
a cambio recibía un porcentaje por cada ilícito que cometían los
demás integrantes, dado que como comandante del cuadrante N°
21 arribaba cuando éstos últimos ya habían abandonado el
lugar, no emprendía su persecución y por el contrario, les
comunicaba si en la zona se encontraban otros policiales.

Su testimonio es contundente al confirmar las circunstancias en


que se ejecutaron las conductas antes señaladas. Además,
paradójicamente su afirmación fue corroborada con las pruebas
de descargo, entre ellas el testimonio de MAICOL QUIROGA
BELTRÁN, quien fue enfático en señalar que JAROL RODRÍGUEZ
tenía conocimiento del hurto de la joyería en la localidad de
Galerías, dado que era quien ultimaba detalles relevantes para
su comisión».

El cotejo de los hechos jurídicamente relevantes


enrostrados a JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, relacionados
con el delito contra el patrimonio económico, y aquellos por
los que fue condenado como coautor del reato de hurto
calificado agravado, tienen plena correspondencia, lo que
descarta la violación al principio de congruencia alegado
por el Ministerio Público, por lo que su solicitud no está
llamada a prosperar.

Y si bien, en un apartado de la acusación, después de


referenciar la manera en que ingresaron los sujetos al
establecimiento y tomaron los bienes, se anotó de manera
escueta “En este hurto participó JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, entre
otros”, ello no significa, como de manera descontextualizada

concluye el representante del Ministerio Público, que se le


esté referenciando alguna intervención material de ingreso

34
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

al local. Basta contextualizar la totalidad de la acusación,


para verificar cuál es la específica conducta que se le
atribuye en su calidad de coautor, desde luego, distinta del
ingreso y directa apropiación.

3. Análisis probatorio

De la demanda formulada por el defensor de JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, se logra extraer que, en su sentir, el
procesado debe ser absuelto por todos los delitos por lo que
fue acusado y condenado, esto es, los reatos de concierto
para delinquir, hurto calificado agravado y cohecho propio,
dado que no se probó más allá de toda duda razonable su
responsabilidad en los mismos.

Por su parte, el delegado de la Fiscalía solicita a la


Corte casar de manera oficiosa la sentencia impugnada,
para que se absuelva al procesado, por el delito de concierto
para delinquir, porque no se probó más allá de toda duda
razonable su pertenencia a la organización criminal
liderada por alias “Garzón”.

Y, el delegado del Ministerio Público solicita casar de


oficio la sentencia impugnada, para que se absuelva a
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ por los delitos de hurto
calificado agravado y cohecho propio, porque no se probó
cuál fue su específico aporte en ambos delitos.

35
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Las diversas posturas asumidas por las partes e


intervinientes en este asunto, obligan de la Sala examinar y
valorar las pruebas en su conjunto, a fin de determinar si el
Tribunal erró al emitir la sentencia impugnada, en los
términos ya reseñados.

Dentro del presente asunto aparece probado que el 31


de julio de 2016, a partir de las 00:13:20 horas, en la
carrera 15 #51-36 de la ciudad de Bogotá, varias personas
ingresaron de forma violenta al Almacén y Platería Triana, y
sustrajeron múltiples dijes de plata, con la aquiescencia y
participación de miembros activos de la Policía Nacional.

Este específico suceso, que en un principio podría


considerarse como un hecho de delincuencia aislado, en
realidad representó apenas una de las muchas actividades
delictivas ejecutadas por la organización criminal liderada
por JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO, alias “Garzón”, de la
cual hacían parte el patrullero MAICOL QUIROGA BELTRÁN y el
subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, entre otros
policiales y particulares.

Los uniformados aceptaron la promesa del pago del


30% del valor de lo hurtado, a cambio de omitir cumplir con
las funciones que constitucional y legalmente les
correspondían, esto es, velar por el mantenimiento de las

36
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

condiciones necesarias para el ejercicio de los derechos y


libertades públicas, y asegurar que los habitantes de
Colombia convivan en paz. En concreto, evitar la realización
de delitos o conjurarlos cuando se están ejecutando.

De tan precisas obligaciones deviene la responsabilidad


de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, por los delitos de concierto
para delinquir, hurto calificado agravado y cohecho propio,
tal y como quedará evidenciado a continuación.

3.1. De la responsabilidad del procesado por el


delito de hurto calificado agravado

En el juicio oral se escuchó el testimonio del policial


José Alirio Martín Martín -investigador criminal de la Policía
Nacional- quien manifestó que el 7 de julio de 2016, se dio

apertura a una indagación preliminar identificada con el


Código Único de Identificación -en adelante CUI-

110016000706201600464 con fundamento en la


información que suministró una fuente, quien manifestó
que conocía de la existencia de una organización criminal
liderada por alias “Garzón”, integrada por aproximadamente
siete personas, entre ellos, policías activos de la Policía
Nacional, los cuales se comunicaban desde los abonados
telefónicos 3193293778 y 3196313583; por ello, uno de los
primeros actos de investigación consistió, precisamente, en

37
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

el control y monitoreo telemático de las comunicaciones de


los referidos abonados telefónicos. 14

Así mismo, se recibió el testimonio del policial Jonathan


Daniel Cháves Torres15 -miembro de la Policía Judicial y uno de
los investigadores líderes de ésta investigación- quien declaró que,

en cumplimiento de una orden emitida por la Fiscal del


caso, realizó inspección judicial a aquella indagación y
obtuvo tres copias espejo de los CD que contenían los
resultados de la interceptación de las comunicaciones de
los abonados referidos y de las comunicaciones obtenidas
del Centro Automático de Despacho de la Policía
Metropolitana de Bogotá, para los días 30 y 31 de julio de
2016.

Dijo que fue el encargado de analizar la información


obtenida, lo que le permitió concluir que los abonados
telefónicos 3193293778 y 3196313583, eran utilizados por
JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO -alias “Garzón”-. Desde el
primero, se comunicaba con el patrullero MAICOL QUIROGA
BELTRÁN -compañero de patrulla de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ- a
los abonados 3209246223 y 3135848723; y, desde el
segundo, con el abonado 3012984704, utilizado por alias
“Salado”, integrante de la organización criminal quien, en
compañía de otros, ingresó al establecimiento de comercio
“Almacén y Platería Triana”, el 31 de julio de 2016.

14
A partir del récord 24:22, audiencia del 13 de junio de 2018.
15
A partir del récord 2:08:41.

38
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

En el juicio se reprodujeron algunas conversaciones


que la Fiscal consideró relevantes; con el testimonio del
policial se introdujeron los CD, documentos que fueron
descubiertos, decretados e incorporados al juicio en la forma
debida y que al ser valorados de manera completa y conjunta
con los otros medios de convicción, le permiten a la Sala
recrear los hechos más relevantes ocurridos antes, durante y
después del suceso acaecido el 31 de julio de 2016, labor que
a continuación emprenderá.

Así, el 29 de julio de 2016 a las 18:18:1416 MAICOL


QUIROGA BELTRÁN llamó a JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO,
alias “Garzón”, y conversaron por más de 13 minutos; aun
cuando los interlocutores intentaron comunicarse usando un
lenguaje cifrado, del contexto de esta comunicación se logra
extraer lo siguiente:

(i) Se refirieron a detalles específicos relacionados con


la comisión de un delito que se ejecutaría el 30 de julio de
2016, en la ciudad de Bogotá, en la Calle 51 con carrera 15,
aproximadamente, a las 11 de la noche, zona que
pertenecía al cuadrante que MAICOL QUIROGA BELTRÁN se
comprometió a cubrir esa noche, para lo cual haría las
gestiones pertinentes.

(ii) MAICOL QUIROGA BELTRÁN manifestó que contactaría


al «más antiguo», quien además era su amigo, para que el 30
16
ID 16854030

39
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

de julio de 2016, le asignaran el primer turno, y para que,


en caso de algún servicio, enviara a otro policial; ello, a fin
de garantizar que él sería el policial que conocería del caso.

(iii) QUIROGA BELTRÁN manifestó que esa noche


laborarían cuatro patrullas de vigilancia, pero que él se
encargaría de «cuadrar» a una persona por patrulla,
normalmente, al más antiguo, es decir, a los
subintendentes, quienes eran sus amigos y con los cuales
«ya hemos hecho muchas cosas por ahí» , «con todos hemos hecho
vueltas».
(iv) Acordaron que el pago de los policiales correspondería
al 30% del valor de lo hurtado.

(V) Que, para ejecutar el delito era necesario contar con


la participación activa de las personas encargadas ese día -30
de julio de 2016 en horas de la noche- de monitorear la alarma del

establecimiento de comercio, tarea de la que se encargaría


GARZÓN SERRATO.

Al día siguiente, esto es, el 30 de julio de 2016, a las


11:36:0117, una persona que se identificó con el alias
“Salado” llamó a GARZÓN SERRATO y le dijo que ya todo
estaba listo, que el hurto lo ejecutarían 6 o 7 personas
aproximadamente en un sitio donde venden dijes de plata y
que arribarían al lugar a las 10 de la noche
aproximadamente, porque «toca que no haya por ahí nadie afuera,
17
ID 1693226

40
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

usted sabe cómo se maneja, desde las 10 que estemos todos en

posición».

Estas dos comunicaciones dejan en evidencia la clara


división del trabajo y el aporte específico de cada uno de los
coautores al plan criminal, por un lado, los policiales del
cuadrante del lugar donde se ejecutaría el hurto, quienes
con su participación garantizarían la ejecución exitosa del
delito y su impunidad; del otro, las personas que se
encargarían de ejecutar el delito, y GARZÓN SERRATO, quien
fungía como enlace entre todos los coautores.
Ahora bien, el 30 de julio de 2016, el patrullero MAICOL
QUIROGA BELTRÁN conformó patrulla de vigilancia con el
subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, a cargo de los
cuadrantes 21 y 22 del Comando de Atención Inmediata -en
adelante CAI- de Galerías, en el primer turno, que va de 22:00

a las 06:00 del día siguiente, tal y como aparece en el libro


de la minuta de vigilancia del CAI, 18 cuadrantes que
corresponden, precisamente, a la zona en la que se
encontraba ubicado el establecimiento de comercio
“Almacén y Platería Tiana”.

Estando la patrulla en el ejercicio de sus funciones, a las


22:02:4119 MAICOL QUIROGA BELTRÁN llamó a GARZÓN SERRATO
y le dijo que ya tenía todo listo, a lo que éste le contestó «G:
Ya estoy por aquí en el 20 suyo, sino que me voy a reunir primero con
ellos bien para que me digan bien como es, y luego ya lo llamo a su
18
A partir del récord 6:52:17.
19
ID 17016794

41
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

mercé y ya le comento bien como es también» 20; por lo que a las

22:34:3121 GARZÓN SERRATO se reunió con alias “Salado” para


ultimar los detalles del hurto que éste último en compañía
de sus secuaces cometería menos de dos horas después, en
el establecimiento de comercio “Almacén y Platería Tiana”.

Las conversaciones interceptadas dan cuenta que,


culminada esa reunión, GARZÓN SERRATO se reunió con la
patrulla conformada por el patrullero MAICOL QUIROGA
BELTRÁN y el subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, a
las 22:54:4822, en el Parque Distrital Alfonso López, ubicado
enfrente de la Iglesia Santa Marta, en el barrio Galerías, a
menos de un kilómetro de distancia del lugar donde
ocurrieron los hechos, según lo declaró el policial Jonathan
Daniel Chaves Torres.

A esa hora, los policiales se encontraban en el ejercicio


de sus funciones, no solo porque el turno laboral había
empezado desde las 22:00, sino, además, porque QUIROGA
BELTRÁN le manifestó a GARZÓN SERRATO, que se encontraban
a bordo de la panel, nombre que se usa coloquialmente para
referirse a un vehículo de la Policía Nacional.

En este punto se debe indicar que, aunque en esta


conversación solo se escucha hablar a dos personas -
GARZÓN SERRATO y QUIROGA-, los policiales que declararon
20
A partir del récord 3:36:52
21
ID 17018077.
22
ID 17018664

42
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

en el juicio23 fueron coincidentes en señalar que una


patrulla de vigilancia siempre está conformada mínimo por
dos policías, pues, así lo exige el reglamento, lo que permite
inferir que el policial QUIROGA debía estar al lado de su
compañero de patrulla, el subintendente JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ.

Siguiendo con el análisis de los medios de convicción,


se tiene que el historial de llamadas entrantes y salientes
del abonado 3196313583, utilizado por GARZÓN SERRATO -
documento que fue incorporado con el testimonio del investigador

Chaves Torres-, revela que a las 00:16:45, alias “Salado” lo

llamó; aunque no se cuenta con el contenido de esta


comunicación, se infiere que en este momento le comunicó
que acababan de iniciar la ejecución del delito, dado que a
las 00:13:20, desde la cámara de seguridad N° 7 del
establecimiento de comercio “Almacén y Platería Triana”, se
observa a dos personas, con linternas, sobre el tejado de la
casa que colinda con éste lugar.

Minutos después, a las 00:24 -se desconoce el segundo-24,


el Centro Automático de Despacho de la Policía Nacional, en
adelante CDA, le solicitó a la patrulla Cuadrante 21,
conformada por MAICOL QUIROGA BELTRÁN y JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, que se dirigiera a la calle 49 con
carrera 15, donde se encontraba una cafetería, ya que se

23
El testigo Jonathan Daniel Chaves Torres, a partir del récord 4:00:43.
24
ID 751091975

43
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

informó de un 905 con sujetos al interior 25 -código que se


utiliza para significar un hurto, según lo declaró el policial testigo
Javier Humberto Espitia Betancourt-.

De inmediato, esto es, a las 00:24:5926, QUIROGA


BELTRÁN llamó a GARZÓN SERRATO y le informó que la Central
le había “botado” un caso en la calle 49 con carrera 15, en
una panadería, por lo que se iban a dirigir hasta allá, «por si
los manes me llegan a ver, pero son dos cuadras más hacia el norte,
entonces que todo bien, que soy yo, oyó, en una panadería»;27

información que GARZÓN SERRATO de inmediato -00:25:55-28 le


suministro a alias “Salado”, para darle tranquilidad a él y a
los otros integrantes de la organización criminal que estaban
ejecutando el hurto.

A las 00:31:1429, GARZÓN SERRATO llamó a QUIROGA


BELTRÁN y le dijo que acababa de ver una patrulla
movilizándose en un vehículo marca Duster, dirigiéndose
hacia el sector, a lo que MAICOL QUIROGA BELTRÁN le
contestó que no se preocupara, que iban a atender un caso
en la caracas con calle 47, pero que «hágale, hágale, que todo
eso está charlado», a lo que alias “Garzón” le preguntó «pero ella

si sabe, ¿bien con nosotros?», a lo que QUIROGA BELTRÁN

respondió: «sí, todos, todos, fresco».

25
A partir del récord 5:01:26.
26
ID 17020465 del 31 de julio de 2016
27
A partir del récord 3:43:07
28
ID17020481 del 31 de julio de 2016
29
ID 17020520

44
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Más tarde, a las 00:4630, el CAI Galerías llamó al


cuadrante 22 que, como se dijo, estaba conformado por el
patrullero QUIROGA BELTRÁN y el subintendente JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, y le dice lo siguiente: «Mi cabo, 15
51 36. 947, 15 51 36».31 Los investigadores Martín Martín32 y
Chaves Torres33 explicaron que «mi cabo», hace referencia a
mi subintendente, por lo que no queda duda que la Central
se estaba dirigiendo al subintendente JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ; que el código «947» es el que se utiliza para
informar un reporte de alarma34; y, «15 51 36», la dirección
donde se generó el reporte.

Es decir, en ese momento el CAI le informó a la patrulla


de vigilancia conformada por el patrullero MAICOL QUIROGA
BELTRÁN y el subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ,
que debían dirigirse a la dirección 15 51 36, lugar donde
operaba el “Almacén y Platería Tiuna”, porque había sonado
la alarma.

Sin embargo, como los policiales sabían que en ese sitio


se estaba ejecutando el hurto por parte de los otros
miembros de la organización criminal, en lugar de cumplir
con sus funciones, que les exigían dirigirse inmediatamente
a verificar la información, se comunicaron con alias
“Salado” por intermedio de GARZÓN SERRATO35; MAICOL
30
ID 751093383
31
A partir del récord 5:07:13
32
A partir del récord 1:29:58
33
A partir del récord 5:08:08
34
A partir del récord 1:29:58
35
ID 17002751 del 31 de julio de 2016

45
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

QUIROGA BELTRÁN le dijo lo siguiente: «Q: oiga, póngale cuidado


marica, es que me botaron un caso ahí de alarma, si quiere yo voy 15
51-36, yo voy, pero todo bien, yo voy en un carro grande de la policía»,

a lo que alias “Salado” contestó: «Hágale, pásele pasito que yo ya


voy a mirar porque aquí ya tocó salir»36

Dos minutos después el panorama cambio, puesto que


por el radio de comunicaciones de la Policía Nacional se
conoció que un teniente, es decir, un superior jerárquico de
QUIROGA BELTRÁN y JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, se iba a
acercar hasta el lugar señalado por el CDA, por lo que de
inmediato se comunicaron con alias “Salado”, a quien le
dijeron que debía salir inmediatamente con lo que tuvieran,
para evitar ser sorprendidos por el teniente37; así se evitó que
fuesen sorprendidos al interior del establecimiento de
comercio.

Por último, las cámaras de vigilancia del


establecimiento de comercio revelan que la patrulla
abandonó el lugar a las 02:09:01; cuatro minutos después
GARZÓN SERRATO llamó a QUIROGA BELTRÁN. Sobre el hurto
acabado de cometer, manifestaron que: (i) los coautores
alcanzaron a sustraer varios dijes de plata; (ii) no lograron
hurtar todo lo pretendido, porque el plan se vio frustrado,
dado que el establecimiento de comercio contaba con dos
alarmas, y los operadores de una de ellas no habían
cooptados por la organización; (iii) la labor se dificultó por los
36
A partir del récord 4:39:03.
37
ID 17020786

46
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

dispositivos de seguridad que tenía el establecimiento de


comercio, como candados y doble cerradura; y (iv) decidieron
esperar un mes para volver a cometer el hurto, porque había
muchos objetos valiosos.

Pues bien, la teoría del caso de la defensa consiste en


que el subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, no sabía
de las actividades ilícitas que desarrollaba su compañero de
patrulla MAICOL QUIROGA BELTRÁN, tesis que no pasa de ser
una postura entusiasta del defensor, en todo caso, carente
de comprobación y del todo contraevidente.

Lo primero que debe indicarse, es que el delito se


cometió cuando el subintendente JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ se encontraba desarrollando sus funciones de
policía de vigilancia del cuadrante, en compañía de su
compañero de patrulla, MAICOL QUIROGA BELTRÁN; ello quiere
decir que durante el turno laboral, que para ese día era
desde las 22:00 horas del 30 de julio de 2016, hasta las
06:00 del día siguiente, los dos policiales se encontraban
patrullando, juntos, al interior de un vehículo de la Policía
Nacional.

Ahora bien, el defensor, en su intento por excluir del


escenario delictivo a JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, manifestó
que cuando MAICOL QUIROGA BELTRÁN se reunió y conversó
telefónicamente, en varias oportunidades, con GARZÓN

47
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

SERRATO, el procesado no se encontraba presente; sin


embargo, ello no es cierto.

En primer lugar, no se puede perder de vista que JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, en su condición de subintendente,
era superior jerárquico del patrullero MAICOL QUIROGA
BELTRÁN y, en consecuencia, el comandante de la patrulla de
vigilancia, por lo que tal relación jerárquica impedía que el
subalterno simplemente ignorara la presencia y ascendencia
de su superior.
Al contrario, ello lo que prueba es que MAICOL QUIROGA
BELTRÁN debía contar con la anuencia de su subintendente,
el policía JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, pues, de otro modo,
era imposible que soslayara del cumplimiento de sus
funciones y que participara en el delito.

Esa es la razón por la que en la conversación que


sostuvieron QUIROGA BELTRÁN y GARZÓN SERRATO el 29 de
julio de 2016, el primero dijo que para esa noche trabajarían
cuatro patrullas de vigilancia, pero que no representarían
ningún problema para la operación delincuencial, porque él
se encargaría de «cuadrar» a la persona más antigua de cada
patrulla, es decir, a los subintendentes, quienes eran sus
amigos y con los cuales «ya hemos hecho muchas cosas por ahí»,
«con todos hemos hecho vueltas».

Y por la que, cuando conocieron que al lugar iba a


arribar el teniente, superior jerárquico de MAICOL QUIROGA

48
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

BELTRÁN y JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, les dijeron a quienes


se encontraban al interior del establecimiento de comercio,
que debían salir de inmediato con los objetos que pudieran
tomar.

Ahora bien, se encuentra probado que para esa noche el


patrullero QUIROGA BELTRÁN era el encargado de conducir el
vehículo y el subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ,
quien manejaba el radio de comunicaciones, no solo porque
esa división se estila al interior de la Policía Nacional,
atendiendo los grados de los miembros de la patrulla, sino
además, porque el CDA se dirigía al cabo, grado que
corresponde al subintendente, y porque así lo declaró el
mismo MAICOL QUIROGA BELTRÁN38.

Luego, la única forma en que MAICOL QUIROGA BELTRÁN


podía informarle, en tiempo real y con sólo segundos de
diferencia, a GARZÓN SERRATO, las alertas y los movimientos
que se suscitaban al interior de la Policía Nacional, como en
efecto lo hizo, era porque irremediablemente estaba en
compañía de su subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ,
pues, éste era quien operaba el radio de comunicaciones.

Finalmente, fue el mismo MAICOL QUIROGA BELTRÁN,


quien en juicio manifestó que ambos sabían -refiriéndose a

38
A partir del récord 14:07.

49
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ- del hurto que se iba a cometer el

31 de julio de 2016 en el “Almacén y Platería Tiana”. 39

Por lo anterior, no queda duda del conocimiento y la


participación que tuvo JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en el
hurto cometido en el “Almacén y Platería Tiuna”, el 31 de
julio de 2016.

Además, las conversaciones analizadas se constituyen


en la prueba irrefutable del aporte y del compromiso de los
policiales a ese específico plan criminal, que consistía
precisamente en (i) cooptar a los miembros de la Policía
Nacional que también patrullaban esa noche, para que no
interfirieran en el plan criminal; (ii) informar y alertar a los
otros integrantes de la organización criminal, sobre los
movimientos que se suscitaban al interior de la Policía
Nacional; (iii) retardar la reacción de la autoridad; y (iv)
alertarlos sobre cualquier movimiento que podría poner en
riesgo la operación delincuencial. Todo ello, con la finalidad
de garantizar la ejecución exitosa del delito y evitar que los
coautores fueran sorprendidos en flagrancia.

Dicha pretensión se concretó cuando los policiales


informaron que: (i) iban a pasar por la zona a verificar un
caso en la calle 49 con carrera 15; (ii) que la otra patrulla que
se movilizaba en un carro marca Duster, iba a verificar un
caso en la Caracas con calle 47, pero que no se preocuparan
39
A partir del récord 26:29.

50
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

porque estaba cooptada; (iii) que el CDA habían lanzado la


alerta en el “Almacén y Platería Tiuna”, pero que ellos
pasarían despacio; y, (iv) que debían salir inmediatamente
con lo que tuvieran, para evitar ser sorprendidos por el
teniente.

Y, por último, se acreditó la respuesta tardía de los


policiales, pues, la primera alerta ocurrió a las 00:46, y sólo
arribaron al lugar de los hechos a las 01:01:10, hora en la
que ya tenían la absoluta certeza de que los autores
materiales habían abandonado el lugar.

Ahora bien, el delegado del Ministerio Publico solicitó a


la Corte casar parcialmente la sentencia impugnada, para
absolver a JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ por el delito de
hurto calificado agravado, dado que, en su sentir, no se
probó: (i) el ingreso de los autores materiales al
establecimiento “Almacén y Platería Tiana”; (ii) «las
afectaciones que habría sufrido el mismo por el ejercicio de violencia

sobre los mecanismos de seguridad existentes para su ingreso»; y,

(iii) «la prexistencia material y del valor de los elementos


presuntamente hurtados».

Pues bien, en cuanto a lo primero se debe indicar que,


contrario a lo referido por el procurador, el ingreso ilícito de
los coautores al establecimiento de comercio “Almacén y
Platería Tiana” se encuentra acreditado más allá de toda
duda razonable, con las conversaciones sostenidas entre los

51
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

miembros de la banda, en las cuales dejan al descubierto


que ingresaron y salieron del lugar, en el que se apoderaron
de múltiples dijes de plata.

Pero, además, se cuenta con los vídeos de las cámaras


de seguridad del establecimiento de comercio, que dejan al
descubierto el inicio y la consumación de la actividad
criminal.

En efecto, a las 00:02:27 desde las cámaras de


seguridad 1 y 2 dispuestas en la parte externa del
establecimiento, se observa a dos personas que pasaron por
el frente del lugar, uno de ellos, con lo que parece ser unas
sábanas en sus manos, tras lo cual hicieron un giro hacia
la casa contigua. Luego, a las 00:13:20 desde la cámara 7,
que se encuentra ubicada en el patio trasero del inmueble,
se observa a dos personas, con linternas, sobre el tejado de
la casa colindante. Más adelante, la cámara de seguridad 3
muestra, a las 00:43:48, a dos personas en el interior del
establecimiento de comercio. Desde esa misma cámara se
puede ver, a las 00:51:49, el momento exacto en que una
persona se acerca a una de las vitrinas y guarda varios
objetos en lo que parece ser una bolsa negra. Y, finalmente,
a partir de las 00:52:13, desde las cámaras 1 y 2 se ve a
las dos personas salir del inmueble, una de ellas con una
linterna, y el otro con una bolsa plástica de color negro,
caminando rápidamente, ambos vistiendo jeans y
chaquetas de color azul, gorras y tapabocas.

52
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Por lo que, contrario a lo que sostiene el procurador, no


solo se aprecia demostrada la irrupción ilícita de los otros
miembros de la organización criminal al “Almacén y Platería
Triana”, sino, además, del momento preciso en que se
apoderaron de algunos de los objetos, los cuales, después
se conoció por las interceptaciones de las comunicaciones,
corresponden a múltiples dijes de plata.

Pero si lo anterior no fuera suficiente, en el presente


asunto se probó que el delito no solo se consumó con el
apoderamiento ilícito, sino que se agotó con la obtención del
provecho económico en detrimento del patrimonio de la
víctima, pues, los dijes de plata fueron vendidos a $1.200 el
gramo, tal y como se evidencia en la comunicación que
sostuvo GARZÓN SERRATO con alias “Padrino” quien, según
las conversaciones, tenía una compraventa de platería en el
centro de la ciudad de Bogotá, y al cual le advirtió: «esos
chinos hijueputas la vendieron por allá a $1.200». 40

Tampoco le asiste razón el delegado del Ministerio


Público cuando afirma que no se acreditó el ejercicio de la
violencia sobre los mecanismos de seguridad del local,
pues, la activación de la alarma se constituye en la prueba
evidente de que se violentó la seguridad y los mecanismos
que el propietario tenía dispuestos para proteger su
patrimonio, sumado a que en la conversación sostenida

40
ID 17171267

53
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

entre QUIROGA BELTRÁN y GARZÓN SERRATO, después de


ocurridos los hechos, éste último manifestó que los
coautores tuvieron problemas para violentar los candados y
las cerraduras del lugar.

Por otra parte, no resulta acertado el argumento del


delegado del Ministerio Público, según el cual, no se probó
«la prexistencia material y del valor de los elementos presuntamente

hurtados»; pues, por un lado, las cámaras captaron el

momento preciso del apoderamiento de los objetos


hurtados, lo que prueba su preexistencia; y, de otro lado, el
que no se haya determinado el valor exacto de los objetos
hurtados se muestra del todo irrelevante, en este caso, para
efectos punitivos y procesales; ello, porque la cuantía del
hurto pierde relevancia cuando, como en este caso, la
conducta se califica por alguna de las causales establecidas
en la ley, misma razón por la que no se exige el requisito de
la querella como condición de procedibilidad.

Por último, el argumento del defensor, según el cual, el


procesado debe ser absuelto por el delito de hurto calificado
agravado, porque no se probó que hubiese recibido de
manera efectiva el 30% del valor de lo hurtado, debe ser
desechado, pues, el delito se consuma con el acto del
apoderamiento y no con la obtención del provecho
económico ilícito pretendido.

54
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

3.2. De la responsabilidad del procesado por el


delito de concierto para delinquir

En el presente asunto las partes no discuten la


existencia de la organización criminal liderada por JAIBER
ORDUAY GARZÓN SERRATO, de la cual hacían parte los
policiales MAICOL QUIROGA BELTRÁN, SERGIO ENRIQUE
PAREDES CUEVAS y LUIS JORGE HERNÁNDEZ IMITOLA, junto
otros particulares, la cual se dedicaba a cometer hurtos a
residencias y establecimientos de comercio ubicados en la
ciudad de Bogotá; sujetos que, por lo demás, aceptaron su
responsabilidad por el delito de concierto para delinquir.

El debate que proponen el defensor del procesado y el


delegado de la Fiscalía, radica en que no se probó más allá
de toda duda razonable que JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ
perteneciera a esa organización criminal.

Pues bien, el representante de la Fiscalía refiere que el


Tribunal incurrió en violación indirecta de la ley sustancial
por error de hecho por falso juicio de identidad, al valorar
los testimonios de los investigadores Jonathan Daniel
Chaves Torres y José Alirio Martín Martín, dado que,
concluyó que ambos declarantes manifestaron que JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ pertenecía a la organización criminal
liderada por JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO alias “Garzón”,
pese a que ninguno de los dos testigos hizo tal aseveración.

55
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

La Corte verifica que los testigos Jonathan Daniel


Chaves Torres y José Alirio Martín Martín se refirieron in
extenso a los resultados de las labores investigativas que se
realizaron en este caso -búsqueda selectiva en base de datos,
obtención de documentos, control y monitoreo telemático de las
comunicaciones, registro de las comunicaciones del Centro
Automático de Despacho de la Policía Nacional, entre otras-,

pruebas que fueron introducidas al juicio en la forma


debida, con el testimonio del primero.

Ahora bien, es cierto que los testigos Jonathan Daniel


Chaves Torres y José Alirio Martín Martín no manifestaron
de manera directa y categórica que JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ pertenecía a la organización criminal liderada
por GARZÓN SERRATO, sin embargo, lo que sí aseguraron
ambos declarantes es que la investigación por ellos
adelantada arrojó que existió una organización criminal
liderada por un sujeto a quien se le conoce como alias
“Garzón”, “El huevo”, “El gordo”, a la cual pertenecían
miembros activos de la Policía Nacional, quienes favorecían
al actividad criminal de la banda.

Que el aporte de los policiales a la organización


criminal «no era otra diferente a garantizar que se llevara a cabo la
actividad delictiva y se omitiera la función policial, constitucional, de
proteger la vida, bienes y honra de nuestros conciudadanos».

56
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Y, que la investigación permitió determinar que uno de


los policiales que participó en el hurto ocurrido el 31 de
julio de 2016 al “Almacén y Platería Tiana” fue JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, delito que se le atribuyó a la
organización criminal.

Lo anterior, permite concluir que cuando el Tribunal


concluyó que con el testimonio de los policiales Jonathan
Daniel Chaves Torres y José Alirio Martín Martín se
acreditaba la pertenencia de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ a
la organización criminal liderada por JAIBER ORDUAY GARZÓN
SERRATO alias “Garzón”, no distorsionó el contenido fáctico
de los testimonios rendidos por los policiales, haciéndoles
decir lo que en realidad no dicen.

Así, entocnes, pasó por alto el delegado que la dinámica


valorativa emprendida por el Tribunal, para dilucidar la
responsabilidad del implicado, no partió de la insular
apreciación de los testimonios de los policiales, sino de toda
la actividad investigativa que éstos adelantaron, conjugada
con los restantes medios de prueba allegados a la
actuación, lo que permitió sin lugar a dudas establecer que
efectivamente el aquí procesado hacía parte de la
organización delincuencial; valoración que se encuentra
acorde con los postulados de la sana crítica.

Por otra parte, el delegado de la Fiscalía manifestó que,


si bien, de la conversación sostenida entre GARZÓN SERRATO

57
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

y MAICOL QUIROGA BELTRÁN, se logra extraer que éste último


señaló cómo en el pasado ya había hecho “varias cosas” con
él, -refiriéndose al procesado-, no se logró determinar de
manera clara y precisa la «participación del acusado en ellos o
que indique que hayan sido ejecutados como miembro de un grupo
criminal».

Al respecto se debe indicar que la Corte de manera


pacífica y reiterada ha señalado que el delito de concierto
para delinquir tiene lugar cuando varias personas se
asocian con el propósito de cometer delitos indeterminados,
ya sean homogéneos, como cuando se planea la comisión de
una misma especie de punibles, o bien heterogéneos, caso
en el cual se concierta la realización de ilícitos que lesionan
diversos bienes jurídicos; desde luego, su finalidad
trasciende el simple acuerdo para la comisión de uno o
varios delitos específicos y determinados, en cuanto, se
trata de la organización de dichas personas en una
sociedad con vocación de permanencia en el tiempo.

También se ha dicho que es un delito de peligro y mera


conducta, por lo que, para su configuración basta el
acuerdo con dicho propósito, sin necesidad de su ejecución;
y, autónomo de los delitos cometidos en virtud del mismo,
en razón a la existencia de un concurso material y efectivo
de tipos penales, en los términos del artículo 31 del Código
Penal, en el que los concertados responderán con sujeción

58
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

al grado de contribución o aporte en cada uno de los delitos


distintos al de la asociación criminal.

Así las cosas, el juicio de reproche por la ejecución del


delito de concierto para delinquir, no demanda como
presupuesto de su esencia, la atribución coetánea de
responsabilidad por los punibles objeto del convenio
criminal, en tanto, es una conducta autónoma que
únicamente requiere la concertación para la comisión de la
infracción penal, independientemente de que ésta alcance o
no su consumación.

Por lo tanto, el que no se haya probado la participación


de JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ en otros delitos distintos al
hurto cometido en el “Almacén y Platería Tiana”, cometidos
por la organización criminal, de ningún modo descarta su
pertenencia a la banda criminal.

El que no se tenga noticia de la participación del


procesado en otras conductas punibles ejecutadas por la
banda criminal liderada por alias “Garzón”, puede
explicarse porque sólo se incorporaron al juicio los
resultados de las interceptaciones de las comunicaciones
sostenidas entre el 27 de julio de 2016 y el 29 de agosto de
2016, lo que permite inferir razonablemente que en ese
período la organización criminal sólo cometió ese delito en
Galerías, zona donde patrullaba el procesado.

59
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

De otro lado, el Fiscal y el defensor coinciden en


manifestar que, con el testimonio rendido por MAICOL
QUIROGA BELTRÁN, conforme la comunicación sostenida
entre este último y GARZÓN SERRATO el 29 de julio de 2016,
se probó que JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO -alias “Garzón”
no conocía a JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, lo que descarta
la pertenencia de este último a la organización criminal.

Sobre este tema, la Corte en reiteradas oportunidades


ha señalado lo siguiente (CSJ SP1653-2021, Rad. 49157;
CSJ SP3771-2019, Rad. 51666):

«Ahora bien, como lo ha precisado la Sala, las organizaciones


delincuenciales para evitar su desmembramiento por las
autoridades, generalmente se integran de manera
compartimentada, lo cual conduce a que todos sus integrantes a
pesar de no conocerse actúen bajo el mismo propósito, sin que
por dicha conformación pueda predicarse la inexistencia del
ánimo o la voluntad de asociación de sus integrantes para la
comisión de los delitos que llevaron a su conformación con
vocación de permanencia»
En consecuencia, el sólo hecho que JAIBER ORDUAY
GARZÓN SERRATO, confeso líder de la organización criminal,
no conociera al procesado, de ningún modo descarta la
pertenencia de este último a ella.

Ahora bien, es cierto que MAICOL QUIROGA BELTRÁN


manifestó que JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ no conocía a
GARZÓN SERRATO,41 sin embargo, existen otras pruebas que
acreditan lo contrario, esto es, que el procesado se
41
A partir del récord 31:35

60
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

comunicaba con el líder de la organización, con la intención


de planear la comisión de delitos indeterminados.

En efecto, el 29 de julio de 2016, a las 17:06:47 42, una


voz masculina quien se identificó como RODRÍGUEZ, llamó
al teléfono 3196313583, del cual se comunicaba JAIBER
ORDUAY GARZÓN SERRATO, alias “Garzón”, y sostuvieron la
siguiente conversación:

«G: Aló
D: Con Rodríguez
G: Q’ubo mijo
D: ¿Qué pasó? Cuénteme, ¿qué ha pasado? ¿Sí o no? ¿Vamos
a hacer eso o qué?
G: ¿No me dice usted que hace primero esta mañana?
D: ¿Cómo?
G: ¿No me dice que usted hace primero?
D: Mañana, mañana, sí
G: Por eso, y como llega ahí, o que ¿cómo es la cuestión? ¿Cuántos
hay? ¿Como es ahí?
D: No, nosotros estamos en la parte de abajo, nosotros no más,
dos, o sea, dos, dos
G: ¿Dos no más pa (sic) mañana?
D: Sí
G: ¿Mijo y no hay pollo por allá? ¿Por allá no hay pollito? ¿Nada?
¿No hay pollo por allá mañana sábado?
D: No nada
G: Bueno, entonces yo aviso entonces al muchacho
D: Pero es que yo estaba mirando la dirección exacta y eso no, ahí
no hay casas, no hay casas
G: ¿Ya vio a donde es bien, más exactamente dónde es?
D: Si, por ahí cerca de, prácticamente por donde quedan las
G: Las discos
D: Pero tiene que averiguarme la dirección exacta
G: ¿Usted donde está ahorita?
D: Trabajando

42
ID 16842577

61
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

G: ¿No decía que no, que entraba mañana a hacer primero no


más?
D: ¿Ah?
G: ¿No decía que hacía primero mañana?
D: Por eso, hoy hago tercero y mañana segundo-primero
G: Ah, pero ya está trabajando, ya está en el ciclo, ya está
haciendo ciclo
D: Claro, obvio
G: Ah yo pensé que venía era de descasar y que hacía primero de
una
D: Oiga entonces
G: Espéreme y ya marco y voy y le cumplo cita a usted mijo
D: Bueno hágale porque imagínese ya entramos a agosto y
nada
G: Eso no le pare bolas, todo bien, hágale
D: Pa ir a comprar unos dos marranos
G: Hágale mijo tranquilo
D: Bueno
G: Bueno, chao cucho»

De esta comunicación se desprende que quien llamó a


GARZÓN SERRATO, se identificó con el apellido RODRÍGUEZ, dijo
que en ese momento -29 de julio de 2016 a las 17:06:47- se
encontraba trabajando en tercer turno y que al día siguiente
-30 de julio de 2016- laboraría en primero y segundo turnos.

La comunicación tenía por objeto saber si al día


siguiente se iba a realizar algo de lo que ya habían hablado
en el pasado, pues, conocía el sitio donde se realizaría y
estaría en primer turno, a lo que GARZÓN SERRATO le
manifestó que le avisaría al muchacho.

La siguiente llamada que hizo GARZÓN SERRATO fue a


alias “Salado”,43 persona esta última que, como se sabe,
43
ID 16843893

62
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

ejecutó el hurto en el “Almacén y Platería Tiuna”, y le dijo que


acababa de hablar con el muchacho, que mañana «estaba lo de
gales» y que era necesario que le confirmara, a lo que éste

último le contestó que sí, que estaba confirmado.

El análisis de esta comunicación permite inferir que la


persona que el 29 de julio de 2016, a las 17:06:47, llamó a
JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO, alias “Garzón”, no fue otro
que JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, por lo que no es cierto
que el líder de la organización no conociera al procesado.

En efecto, el libro de la minuta de vigilancia del CAI


Galerías, da cuenta de que el 29 de julio de 2016, el
subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ laboró en el
tercer turno, que va de las 14:00 a las 22:00 horas, en el
cuadrante 21, razón por la que le dijo a GARZÓN SERRATO en
esa conversación, que a esa hora -17:06:47- estaba
trabajando.

La minuta de vigilancia también evidencia que JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ laboró el 30 de julio de 2016 en
segundo turno, que va de 06:00 a 14:00 cubriendo los
cuadrantes 21 y 37; y luego, ese mismo día, en el tercer
turno que va de 22:00 a las 06:00 del día siguiente. 44

Ello, sumado a que ese mismo día, como quedó visto, se


cometió el hurto en al “Almacén y Platería Tiuna”, en el que
44
A partir del récord 7:04:07

63
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

alias “Salado” y JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ participaron


de la forma ya reseñada.

Ahora bien, es cierto que el solo hecho de que JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ conociera al líder de la organización,
no lo convierte, per se, en integrante de la misma; sin
embargo, los hechos que a continuación se narrarán dejan
en evidencia que la participación del procesado no fue
ocasional o circunstancial, sino consecuencia de su
pertenencia a la organización criminal, con vocación de
permanencia en el objetivo de cometer delitos
indeterminados.

En efecto, después de ocurridos los hechos


relacionados con el hurto al “Almacén y Platería Tiuna”,
GARZÓN SERRATO llamó a MAICOL QUIROGA BELTRÁN, a las
02:13:27,45 conversación de la que se destaca el siguiente
apartado:

«G: Otra cosa, cucho, me llamaron ahoritica unos muchachos


por allá que están trabajando en fontecho. 24F por cien.
Q: Me toca llamar mañana al cucho a ver qué me dice
G: Llame al cuchito a ver si nos movemos por ese lado
también a ver
Q: Hágale
G: Oiga usted no tiene a nadie en Usaquén, ¿cierto?
Q: Usaquén, Usaquén, no
G: ¿El de fonteche si está seguro que lo tiene usted?
Q: Me tocaría hablar con el cucho a ver si se le mide o que
G: ¿Cuál es el cucho que usted me dice?
Q: Ten Zipa

45
ID 17021799

64
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

G: Ubíquelo cuchito,
Q: Si yo mañana lo ubico
G: Pa esta semana de una, usted sabe que todo bien
Q: Hágale
G: Usted sabe cómo es todo
Q: Estamos hablando
G: Hágale cuchito. Dios lo bendiga
Q: Chao»

Posteriormente, el 2 de agosto de 2016 a las 09:57:1546,


data en la que nuevamente el patrullero MAICOL QUIROGA
BELTRÁN y el subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ
conformaban la patrulla de vigilancia, cubriendo los
cuadrantes 21 y 22 en el turno de 06:00 a 14:00, 47 el
primero llamó a GARZÓN SERRATO y le informó que había
contactado al policial de Fontibón, pero que éste le dijo que
se encontraba de vacaciones y que no conocía a otra
persona, por lo que lo mejor era esperar un mes que
regresara de su período de descanso para realizar el ilícito
en esa zona.

Luego, continuó la comunicación de la siguiente


manera:

«G: Oiga, póngame cuidao que yo les dije a los muchachos


que ahí donde hubo eso, donde hubo la candela esa noche,
¿será que podemos (inentendible)?
Q: ¿Qué?
G: Será que podemos esperar un mesecito pa volver a hacer
Q: Ayer dizque fueron unos manes de la, de qué, de la DIJIN
por ahí
G: ¿Los de corbata?

46
ID 17242804
47
A partir del récord 6:59:01.

65
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Q: Sí
G: ¿Pero conocidos?
Q: No nada
G: Pero usted cómo la ve, ¿si hay alguito ahí, si está bueno?
Q: Lo que pasa es que ahorita ese man le pone mucha cosa
ahí a la entrada
G: No, no importa, usted sabe que a todo eso se le da manejo,
lo que pasa es que nos cogió fue dormidos, porque no
contábamos con otra señora ahí escondida
Q: Exacto, es que el man tiene dos bichos ahí
G: Sí, pero el bicho que sonó, sonó fue de otro lado
Q: Y esa la maneja es el hermano
G: Sí, ah bueno, espere mejor dicho y hablamos, si algo yo paso
por allá ahorita más tarde
Q: Hágale»

De estas comunicaciones se extrae que MAICOL QUIROGA


BELTRÁN y el líder de la organización, JAIBER ORDUAY GARZÓN
SERRATO, alias “Garzón”, conversaron sobre los siguientes
aspectos: (i) la necesidad de expandir el radio de acción de la
organización, a otras zonas de la ciudad; (ii) la necesidad de
cooptar a policiales en Fontibón y Usaquén, con la finalidad
de cometer delitos en esas zonas, por lo que QUIROGA
BELTRÁN se comprometió a contactar a un policial conocido
en el primer barrio mencionado; y, (iii) el deseo del líder de la
organización en que se insista en el hurto en el “Almacén y
Platería Tiana”.

Como se ve, estas comunicaciones despejan cualquier


duda y evidencian que no se trató de una asociación
espontánea y fugaz dirigida a cometer un delito en
particular, sino de la existencia de un acuerdo ilegal para
cometer delitos, con permanencia en el tiempo.

66
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Ahora, es cierto que quien sostuvo las comunicaciones


con GARZÓN SERRATO, fue MAICOL QUIROGA BELTRÁN, sin
embargo, en ambos casos éste último se encontraba en
compañía de su subintendente JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ,
lo que permite inferir razonablemente que el procesado
estaba al tanto de todo lo que los otros dos integrantes de la
organización criminal conversaban, pues, se insiste, debido a
la relación superior – subalterno, el patrullero QUIROGA
BELTRÁN no podía actuar de manera autónoma u oculta y sin
la aquiescencia de su comandante de patrulla, el
subintendente RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ.

Ahora, el que el patrullero MAICOL QUIROGA BELTRÁN


fuera el policial que en la mayoría de ocasiones se
comunicaba con el líder de la organización, se explica
precisamente porque era el policial de menor rango, a tal
punto que en una de las comunicaciones QUIROGA le dijo a
GARZÓN SERRATO: «Lo que pasa es que a él no le gusta como hablar
así mucho así de eso ¿sí?, él se entiende es conmigo, ¿si ve?».

Por último, es preciso señalar que la ejecución efectiva


del punible de hurto, en las condiciones analizadas, viene a
reforzar que, en efecto, el procesado hizo parte de una
estructura criminal, con permanencia en el tiempo,
enfocada a la ejecución de delitos atentatorios contra el
patrimonio económico (indeterminados).

67
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Por lo anterior, en el presente asunto se probó más allá


de toda duda razonable que JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ
perteneció a la organización criminal liderada por JAIBER
ORDUAY GARZÓN SERRATO, alias “Garzón”, de donde deviene
su responsabilidad por el delito de concierto para delinquir.

3.1.3. Responsabilidad del procesado por el delito de


cohecho propio

El defensor solicitó que se absolviera a JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ por el delito de cohecho propio, dado
que no se acreditó que su representado hubiera aceptado
una promesa remuneratoria a cambio de omitir un acto
propio de su cargo o para ejecutar uno contrario a sus
deberes oficiales.

La Corte de manera reiterada ha señalado que el delito


de cohecho propio se realiza cuando el sujeto activo
cualificado recibe para sí o para otro, dinero o utilidad
diversa a éste o acepta promesa remuneratoria, con el fin
de (i) retardar un acto propio del cargo, (ii) omitir un acto
propio del cargo, o (iii) ejecutar uno contrario a sus deberes
oficiales; resultando intrascendente, de cara al juicio de
adecuación o encuadramiento, si ésta se realiza o no.

La Corte ha señalado que la adecuación jurídica del


comportamiento no exige que el servidor público

68
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

efectivamente reciba para sí o para otro el dinero o la


utilidad, pues, será suficiente con que el sujeto activo acepte
para sí o para otro una promesa remuneratoria, dado que el
objeto de protección de la norma lo son la transparencia,
rectitud, imparcialidad, integridad, legalidad y objetividad
que debe irradiar la administración pública, evitando que se
menoscabe el perfil de impecabilidad y buena gestión que
debe caracterizar a las instituciones públicas y sus
integrantes en un Estado de derecho (CSJ SP14985-2017, Rad.
50366; CSJ AP1938-2017, Rad 34282A).

Respecto de la conducta que ahora se analiza, la Corte


de manera reciente y pacífica ha señalado lo siguiente: (CSJ
AP1938-2017, Rad 34282ª -reiterada en CSJ SP14985-2017, Rad.
50366; CSJ SP1209-2021, Rad. 54384):

«La configuración de este punible demanda la convergencia de


los siguientes elementos:

Un sujeto activo calificado, por requerir que el supuesto de hecho


sea ejecutado por un servidor público permanente o transitorio, y
el pasivo constituido por la administración pública y finalmente
por el Estado como titular del bien jurídico tutelado, no obstante,
también puede resultar perjudicada una persona natural.

El objeto jurídico se relaciona con la necesidad de impedir que la


administración pública y sus cargos sean el origen de
enriquecimientos indebidos, y usados como instrumentos de
injusticia, mientras el material está integrado por el acto
vendido, cuya realización dependerá del pago o el cumplimiento
de lo ofrecido.

En el momento de la dación o aceptación de la promesa el sujeto


agente ha de ostentar la condición de servidor público y tener
facultad para decidir lo pedido o tener la posibilidad de hacerlo.
La ilicitud se debe valorar en el instante de la entrega o la
aceptación antes del retardo, omisión o ejecución del acto ilegal,
sin requerir su ejecución para alcanzar el perfeccionamiento.

69
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

El acto ha de ser futuro, atendiendo a que el fin de la dádiva o la


promesa es obtener del actor hacer u omitir algo, encerrando con
ello el inicial pago o aceptación de la promesa y después el acto
convenido.

La gratificación debe tener el alcance de recompensa o estimulo


como contraprestación por lo prometido a realizar, es
intrascendente la cuantía y el pago o cumplimiento de lo
ofrecido.

El agente debe tener la competencia para ejecutar el acto


arbitrario bien sea por acción u omisión, o tener la posibilidad de
realizarlo, por su calidad, por el organismo a que pertenece o el
oficio que ejecuta.

El acto propio de la función es realizado por el agente atendiendo


sus facultades específicas deferidas por la ley. La pretermisión
implica tener la competencia pues solo se puede omitir o retardar
los comportamientos que está compelido a cumplir o ejecutar en
determinado plazo.

El convenio para realizar un acto contrario a los deberes


oficiales, conlleva la violación de las atribuciones concedidas por
la constitución o la ley.

El material tiene que ver con el precio o la promesa.

Promesa es el ofrecimiento de un estímulo por su actuación.


Remunerar es retribuir, gratificar, recompensar, pagar o premiar
no solo con dinero sino de otras maneras. El costo o la promesa
pueden ser para el autor o para un tercero que en todo caso ha
de ser indebido, no interesa para su perfección el monto o la
calidad de lo cedido o prometido. Debe ser trascendente como
para constituir causa eficiente de la conducta, basta el sólo
acuerdo.

Recibirá o aceptará la dádiva o la promesa de forma directa


cuando en persona toma el dinero o la utilidad indebidos o
admite o accede a la promesa, e indirecta de hacerlo por medio
de un tercero.

La conducta es alternativa recibir dinero u otra utilidad, o


aceptar promesa remuneratoria, con el propósito de retardar u
omitir un acto propio del cargo, o ejecutar uno contrario a sus
deberes.

70
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

No cabe la tentativa porque el delito se perfecciona desde el


momento en que el funcionario acepta la promesa
remuneratoria».

Pues bien, dentro del presente asunto aparece probado


que el 29 de julio de 2016 MAICOL QUIROGA BELTRÁN llamó a
JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO, alias “Garzón” y, además
de referirse a los detalles del hurto que se realizaría en el
“Almacén y Platería Tiana”, pactaron que él y otros
policiales omitirían cumplir con sus deberes oficiales –
proteger la vida, integridad física y seguridad de las personas,

prevenir el delito y velar por el respeto de los bienes jurídicos- a

cambio de recibir un 30% del valor de lo hurtado.

Por lo tanto, a partir del momento en que MAICOL


QUIROGA BELTRÁN aceptó la promesa remuneratoria a
cambio de omitir un acto propio de sus funciones como
policía de vigilancia, se consumó el delito de cohecho propio,
pues, como se vio, este reato es una conducta de ejecución
instantánea que se consuma «con la recepción del dinero o la
utilidad o con la simple aceptación de la promesa remuneratoria,
sin necesidad de obtener la finalidad propuesta» (CSJ AP1938-2017,
Rad. 34282A, CSJ SP14985-2019, Rad. 50366, CJ SP977-2020, Rad.
54509).

Lo anterior, porque a partir del momento en que el


servidor público acepta para sí o para otro una promesa
remuneratoria, a cambio de retardar u omitir un acto
propio de su cargo o para ejecutar uno contrario a sus
deberes, se vulnera el bien jurídico tutelado, esto es, la

71
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

administración pública, en tanto se deteriora la imagen de


irreprochabilidad, impecabilidad y rectitud que debe
caracterizar a las instituciones públicas y sus integrantes
en un Estado de derecho que tenga la sociedad sobre la
administración pública.

Dicho esto, en el presente asunto aparecen como


hechos probados los siguientes:

(i) Los policiales MAICOL QUIROGA BELTRÁN y JAROL


RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ pertenecen a una organización
criminal liderada por JAIBER ORDUAY GARZÓN SERRATO alias
“Garzón”.

(ii) MAICOL QUIROGA BELTRÁN acordó con JAIBER ORDUAY


GARZÓN SERRATO que él y otros policiales omitirían cumplir
con sus deberes oficiales –proteger la vida, integridad física y
seguridad de las personas, prevenir el delito y velar por el respeto de

los bienes jurídicos- a cambio de recibir un 30% del valor de lo

hurtado.

(iii) JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ, en su condición de


subintendente de la Policía Nacional, omitió cumplir con
sus funciones constitucionales y legales, y participó
activamente en el hurto del “Almacén y Platería Tiana”.

Lo anterior nos permite concluir que el acuerdo que


constituye el delito de cohecho propio fue celebrado, en

72
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

principio, entre MAICOL QUIROGA BELTRÁN y JAIBER ORDUAY


GARZÓN SERRATO, sin embargo, no cabe duda que JAROL
RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ se adhirió al mismo, a tal punto que
omitió sus funciones constitucionales y legales, de donde se
puede concluir que la razón de tal omisión obedeció a que
aceptó la promesa remuneratoria.

En este punto, no se puede desconocer que, quien se


involucra en una estructura criminal, con ánimo de
permanencia, con la finalidad de cometer delitos
indeterminados de contenido patrimonial, y además,
participa activamente en una especie delictiva cometida
para la organización, pretende recibir una remuneración a
cambio de su contribución, pues, nada distinto explica el
riesgo que se corre.

Ello permite dar por probado más allá de toda duda


razonable que JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ aceptó la
promesa remuneratoria consistente en el pago del 30% del
valor de lo hurtado en el “Almacén y Platería Tiana”, a
cambio de omitir sus funciones constitucionales y legales.

DECISIÓN

En mérito de lo expuesto, la Sala de Casación Penal de


la Corte Suprema de Justicia, administrando justicia en
nombre de la República de Colombia y por autoridad de la
Ley,

73
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

RESUELVE

Primero: NO CASAR la sentencia de segunda instancia


emitida por la Sala Penal del Tribunal Superior de Distrito
Judicial de Bogotá, el 9 de octubre de 2019, mediante la cual
se confirmó la condena impuesta a JAROL RODRÍGUEZ
GUTIÉRREZ, por el Juzgado Noveno Penal del Circuito con
Función de Conocimiento de Bogotá, luego de hallarlo
penalmente responsable del delito de concierto para
delinquir, en concurso heterogéneo con los reatos de hurto
calificado agravado y cohecho propio.

Segundo: Informar a las partes e intervinientes que


contra la presente determinación no procede recurso
alguno.

Cópiese, notifíquese y cúmplase.

FABIO OSPITIA GARZÓN

74
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

JOSÉ FRANCISCO ACUÑA VIZCAYA

MYRIAM ÁVILA ROLDÁN

FERNANDO LEÓN BOLAÑOS PALACIOS

GERSON CHAVERRA CASTRO

DIEGO EUGENIO CORREDOR BELTRÁN

LUIS ANTONIO HERNÁNDEZ BARBOSA

HUGO QUINTERO BERNATE

75
Casación acusatorio No. 57051
CUI 11001600005720170013801
JAROL RODRÍGUEZ GUTIÉRREZ

Nubia Yolanda Nova García


Secretaria

76

También podría gustarte

pFad - Phonifier reborn

Pfad - The Proxy pFad of © 2024 Garber Painting. All rights reserved.

Note: This service is not intended for secure transactions such as banking, social media, email, or purchasing. Use at your own risk. We assume no liability whatsoever for broken pages.


Alternative Proxies:

Alternative Proxy

pFad Proxy

pFad v3 Proxy

pFad v4 Proxy