Como Surgen Las Leyes
Como Surgen Las Leyes
Como Surgen Las Leyes
En 1813, varios años antes de que los españoles fueran derrotados, el jefe
principal de nuestras tropas, don José María Morelos y Pavón, reunió a un
grupo de personas para discutir las leyes que nos regirían cuando se
ganara la guerra. La principal conclusión fue que, por la ley y el derecho,
México sería un país independiente, gobernado por el pueblo, sin esclavos
ni diferencias raciales, donde todos podríamos ser dueños de terrenos,
casas o cualquier tipo de propiedad, y donde todos fuéramos iguales ante la
ley.
Era el momento de decidir y de crear una ley, una ley tan importante que
todos estuvieran obligados a respetar. Así, en 1824 se diseñó y elaboró la
primera Constitución Federal de los Estados Unidos Mexicanos.
Por supuesto fue muy difícil, porque todas las personas pensamos diferente
y creemos tener la razón. De esta manera, los diputados se reunieron para
elaborar la Constitución, denominándose esa concentración de diputados:
Congreso Constituyente de 1824, en el que se destacaron dos visiones
diferentes de Estado:
Parecía que todo marcharía mejor, pero no fue así. ¡Ojalá que una ley
pudiera cambiar las cosas de la noche a la mañana! El conflicto entre los
grupos políticos continuó por 33 años y mantuvo al país en constantes
guerras, golpes militares e inestabilidad política.
De esta manera, la idea filosófica que impulsó Benito Juárez cuando dio a
conocer las Leyes de Reforma, fue la que indujo a muchos a ponerse de su
lado. Estas leyes ordenaron la nacionalización de los bienes eclesiásticos y
determinaron la separación de la Iglesia y el Estado. Además, gracias a
ellas, se instauró el Registro Civil para nacimientos, matrimonios y
defunciones, y la secularización de los cementerios y de las fiestas públicas.
Interesante, ¿verdad?
3. De la República a la Dictadura.
Llegó 1910, Porfirio Díaz seguía en el poder. Durante treinta años había
cambiado las leyes a su gusto, beneficiando a los poderosos y dejando de
lado las necesidades de la población. Ahora, don Porfirio se reelegía por
enésima ocasión y perseguía a los opositores que encontraron en la figura
de Francisco I. Madero un nuevo líder.
4. La Revolución Maderista.
Madero lanzó el Plan de San Luis, que desconoció el resultado oficial de las
elecciones. Llamó enérgicamente a los ciudadanos a alzarse en armas el 20
de noviembre de 1910. Muy pocos respondieron con exactitud al día fijado
por Madero, pero en diversos puntos del país hubo grupos de personas que
antes y después de la fecha citada se sublevaron contra la dictadura.
En todo el país hubo levantamientos y Porfirio Díaz tuvo que abandonar la
Presidencia e irse derrotado. En unas nuevas elecciones, Francisco I.
Madero fue electo Presidente y José María Pino Suárez, Vicepresidente.
Pero sus propuestas de gobierno no convencieron a todos los
revolucionarios. La guerra continuó, ahora en contra de Madero.
Emiliano Zapata lo atacó por el sur, mientras otros ejércitos lo hacían desde
el norte. Además, viejos porfiristas intentaron reponer el antiguo sistema. En
medio de aquel barullo surgió un hombre que, aprovechando la situación,
arrebató la Presidencia a Madero, asesinándolo para proclamarse él mismo
Presidente. Su nombre: Victoriano Huerta.
Por cierto, ¿alguna vez has visitado el edificio del Senado, en la calle de
Xicoténcatl 9, en el Centro Histórico de la Ciudad de México? Ahí podrás
admirar en el Patio Central una imponente estatua de Belisario Domínguez,
donde cada 7 de octubre se conmemora el aniversario luctuoso de este
prócer de la Patria.
5. Otras Revoluciones.
Finalmente, las rebeliones del Centauro del Norte, Francisco Villa y del
Caudillo del Sur, Emiliano Zapata, fueron sometidas por el poder militar y
político de Venustiano Carranza. Fue entonces cuando los revolucionarios
triunfantes comenzaron a colocar los cimientos de un nuevo orden para todo
el país.
Por otra parte, en 1933 se amplió a tres años la duración de los integrantes
de la Cámara de Diputados, lo mismo que el periodo del Presidente de la
República, el cual aumentó de cuatro a seis años.