Relaciones Con Los Demas
Relaciones Con Los Demas
Relaciones Con Los Demas
Está comprobado que gran parte del éxito de una persona se basa en la capacidad de
relacionarse con sus semejantes. Los conocimientos técnicos, el estudio y el talento son
importantes para desenvolverse en la vida, pero es gracias a las relaciones interpersonales
que conseguimos alcanzar los objetivos. El individuo no existe sin el colectivo.
Dios diseño que las personas viviéramos en compañía, en comunidad y es por eso que lo
primero que satanás intenta dañar en nuestra vida es la confianza en las relaciones.
Las relaciones no solamente son compañía, pero también son pequeños espejos en los que
podemos encontrar confrontación.
Cuando confronto a una persona de una manera diferente a la que lo haría Jesus, es por que
no la estoy viendo con los ojos de Jesus
Podemos ser todo lo frenteros que queramos, lo honestos, lo directos, pero si nos salimos
del amor, en realidad no estamos buscando el beneficio del otro sino aumentar el orgullo
propio
Todos necesitamos a alguien que nos confronte, pero es por esa razón que muchos no se
involucran con la iglesia, por que saben que en la iglesia, el orgullo, el carácter, el ego, la
mala educación serán confrontados
Hemos leído en Génesis 2:18: No es bueno que el hombre este solo, le hare ayuda idónea.
“Le haré un poder (fuerza o socorro) que sea digna de estar al lado, para que lo
esfuerce a continuar con sus propósitos, y que le corrija cuando se salga de estos.”
Esta es la razón de ser por la que Dios no quiere la soledad en la vida de las personas,
Las relaciones nos ayudan a construirnos, estudios dicen que el destino al que llegaras en la
vida, esta ligado a las 5 personas con quien mas pasamos tiempo o aquellas que dejamos
que sean mas influyentes en nosotros.
El problema es que muchas veces le damos acceso a lugares sagrados de nuestro corazón a
personas que no están preparadas para visitarlos.
Proverbios 4:23
Reina-Valera 1960
Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida.
Si usted demuestra interés en las personas, podrá hacer más amigos en dos meses que todos
los que pueda hacer en dos años tratando de que las personas se interesen en usted.
Dale Carnegie
El hábito de Jesús de construir relaciones conlleva a tomar la iniciativa para conocer a otras
personas, más allá de lo superficial, sean cristianas o no.
Podemos dejar que el azar construya relaciones para nosotros, o podemos decidir con quien
nos relacionamos. Dios te dio la capacidad de decidir con el libre albedrio, pero también te
dio sabiduría para escoger correctamente.
4 preguntas que necesitamos hacernos acerca de las relaciones con otros. (ponga un
nombre al final de cada pregunta)
Piensa en una persona especifica o en un tipo de persona que siempre has querido tener en
tu circulo de amigos, es un tipo de persona que no es común en nuestro entorno, pero que
hemos visto seguramente en otros espacios y sabemos que esa amistad puede traer nutrición
a nuestra alma.
Necesitamos amigos que tengan intereses buenos para nosotros, aquellos que nos ayuden a
encontrar soluciones a nuestras preguntas emocionales a través de respuestas espirituales.
¿Tienes algún amigo que te mantenga acercando a una relación más madura con Dios?
No existe nadie que llegue lejos y pueda decir que lo hizo solo.
Busca relaciones de personas con situaciones similares a las tuyas, pero avanzando
Si eres soltero, busca personas solteras y saludables.
Si eres casado, busca matrimonios estables y ejemplares, personas reales y sin fachadas
Necesitas amigos como los que tenía el paralitico de la Biblia, que lo cargaron cuando no
podía caminar, hacia el lugar donde encontraría la sanidad.
En algunas ocasiones Dios pone delante nuestras personas claves para nuestro avance, pero
podemos dejar pasar de largo estas oportunidades por mantener nuestra mente enfocada en
otras cosas.
Una relación no es fuerte por cuanto aguanta sin hablarse, es fuerte, porque cuan
intencionales somos para hablarnos
Filipenses 2:4 Cada uno debe velar no solo por sus propios intereses, sino también por los
intereses de los demás.
Esos amigos que solo buscamos para pedir favores y aun así los hacen, esas son las
relaciones que debemos nutrir.
¿Eres feliz?
¿Tienes mercado?
¿Como estas de ánimo?
¿Como esta tu relación con Dios?
¿Puedo hacer algo por ti?
Vivimos en un mundo que no se detiene, y nosotros no somos ajenos a eso, nos hemos
enredado en activismos y afanes buscando avanzar, olvidando que el avance también
depende de las relaciones.
Hemos dicho muchas veces: Termino esto y llamo, acabo esto y me contacto con esa
persona. La otra semana cuando me desocupe de esto hare lo demás, pero nos damos cuenta
de que al salir de una cosa, nos metemos en otra que consume más nuestro tiempo.
Decir que no tienes tiempo es una excusa, porque seguramente tendrás que sacar
obligadamente tiempo para visitar en una clínica, en una despedida o en un velorio
Cuando dejamos de sumergirnos solo en nosotros, entonces podemos nutrir las relaciones
que estas quebrantadas.
Esta es la pregunta que más excusas genera en la persona que fue lastimada, porque
necesitara de la persona, el ser intencional en negarse a si mismo
No hay una razón para que un creyente esté involucrado en rencores, la única razón seria la
soberbia de ambos o de unos de los dos
Dios no restaura una relación sin antes intervenir en nuestra naturaleza, es decir, los seres
humanos nos defendemos por naturaleza, nos ofendemos por naturaleza, nos enojamos por
naturaleza, pero cuando Dios interviene en nuestra naturaleza, transforma nuestra manera
de percibir las cosas.
¿La pregunta es, percibes más importante tu orgullo que tus relaciones?
Cuando sabemos que hay malestar en una relación, ya sea por distancias, conflictos
personales entre las dos partes o mal entendidos a causa de terceros, del creyente es de
quien se espera que actúe con madurez y se tome un par de intentos buscando arreglar las
cosas, sin disculpas, sin excusas, sin pensar en el futuro después de la restauración, pero
sobre todas las cosas, no haciéndonos los sordos a la voz de Dios
Como sabemos, Dios nos ha rodeado de personas claves para nuestra vida, pero la falta de
perdón, el orgullo, el egoísmo y la ofensa, crean distancias con esas personas.
Cuando no perdonamos, estamos diciéndole a las personas, que ahora para nosotros es mas
importante el problema que la relación.
1 Juan 4:20 Si alguno dice: Yo amo a Dios, pero aborrece a su hermano, es mentiroso.
Porque el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a
quien no ha visto?
Terminar una relación, es tomar una decisión saludable para al menos una de las dos partes.
Hay una diferencia entre quedar bien y estar bien, generalmente anclamos nuestro bienestar
a alguna relación en particular, pero cuando percibimos que mantener esa relación, dejo de
ser de alimento para nuestra alma y se empieza a convertir en un lugar de esclavitud,
debemos decidir entre quedar bien y estar bien.
Muchas veces por no quedar mal con la sociedad, la familia, la iglesia o aun con nosotros
mismos, mantenemos relaciones nocivas con la esperanza que en algún momento esa
persona pueda cambiar y aun algunos le dejan esa responsabilidad al azar, confianza que
alguna cosa extraordinaria o fuera de lo común ocurra y los libre de esas cadenas.
Terminar una relación, no es agradable, por mucho que hayan pasado cosas negativas y que
sea lo mejor. Pase lo que pase, hay que procurar siempre que termine lo mejor posible.
El objetivo nunca debe ser lastimar a otra u otras personas descargando todo nuestro dolor
sobre ellos así ellos sean los responsables, de hecho, como es el primer paso hacia la
sanidad no podemos obtenerla enfermando a otros.
Una relación que te retrasa por que la otra persona no tiene claro su propósito
Aquellas personas que deciden resolver su vida sin tener en cuenta a Dios
Las personas que permites entrar en tu vida entraran en tu casa y entraran a tus hijos
Romanos 13:8 8 No le deban nada a nadie. La única deuda que deben tener es la de
amarse unos a otros.
Proverbios 18:16-18 Nueva Versión Internacional (NVI)
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Con regalos se abren todas las puertas y se llega a la presencia de gente importante.
El resultado de toda relación correcta siempre será bendición en todas las áreas.