Cese Del Estado de Indivisión Hereditaria.
Cese Del Estado de Indivisión Hereditaria.
Cese Del Estado de Indivisión Hereditaria.
El principio general del uso y goce de los bienes hereditarios indiviso (porque todavía estamos en la etapa previa a la partición) es que
todos los herederos tienen derecho al uso y goce de esos bienes indivisos, el límite es el derecho al uso y goce de los otros herederos
(independientemente de que haya administrador designado o no).
Puede suceder que uno de los herederos esté utilizando exclusivamente ese bien hereditario (ej, un inmueble), en este caso si los otros
coherederos/copartícipes prestan el consentimiento o no se oponen fehacientemente, ese coheredero va a poder seguir utilizando
exclusivamente ese bien, por lo tanto si los demás no están conformes con la situación deberán efectuar una oposición por un medio
fehaciente, que puede consistir en una intimación de carácter judicial o extrajudicial.
Ese coheredero está obligado a satisfacer una indemnización desde el momento en que le es requerida.
Dicho reclamo por medio fehaciente beneficio al coheredero que lo efectuó, no al resto; y le va a corresponder una indemnización
proporcional a su cuota parte indivisa.
Si no hay oposición se considera que prestan la conformidad para que lo utilice en forma exclusiva (hay una presunción).
En la práctica generalmente el juez los cita a una audiencia para ver si se ponen de acuerdo, y en caso negativo, debe tramitar por un
incidente de fijación de canon locativo.
No es necesario que esté iniciado el proceso sucesorio.
No hay que confundir esto con la utilización del bien pero no a título de dueño, es decir, lo utiliza en favor de la posesión de los
herederos (acá hay una intervención del título), lo utilizaba a nombre de la posesión de los herederos y comienza a poseer en nombre
propio (prescripción adquisitiva de dominio).
Había una discusión doctrinaria respecto de si el estado de indivisión hereditaria en caso de inmuebles cesaba con la inscripción en el
registro.
Art. 2363.- Conclusión de la indivisión. La indivisión hereditaria sólo cesa con la partición. Si la partición incluye bienes
registrables, es oponible a los terceros desde su inscripción en los registros respectivos.
Graciela Medina define a la partición como un acto jurídico complejo encaminado a poner fin al estado de indivisión mediante la
liquidación y distribución de los bienes entre los copartícipes del caudal proindiviso en lotes que en principio guarden relación con la
cuota parte ideal que le corresponde a cada uno de ellos. Este es el principio que rige en la partición judicial, no así en la partición
privada, donde siendo todos los herederos mayores de edad y plenamente capaces pueden distribuir los bienes como lo deseen ya que
rige la autonomía de la voluntad al ser un contrato celebrado entre los copartícipes o herederos. En cambio en la partición judicial se
debe respetar la cuota que le corresponde a cada uno.
Es un conjunto complejo de actos jurídicos, porque para realizar la partición primero se debe realizar el inventario del avalúo (requiere
de ciertas etapas previas).
No puede haber una partición judicial sin proceso sucesorio iniciado, pero sí una privada.
Caracteres de la partición:
-Es imprescriptible; se puede pedir en todo momento luego que se efectúe el inventario del avalúo.
-Es de carácter declarativo: art. 2403.- Efecto declarativo. La partición es declarativa y no traslativa de derechos. En razón de ella, se
juzga que cada heredero sucede solo e inmediatamente al causante en los bienes comprendidos en su hijuela y en los que se le
atribuyen por licitación, y que no tuvo derecho alguno en los que corresponden a sus coherederos.
Igual solución se entiende respecto de los bienes atribuidos por cualquier otro acto que ha tenido por efecto hacer cesar la indivisión
totalmente, o de manera parcial sólo respecto a ciertos bienes o ciertos herederos.
Los actos válidamente otorgados respecto de algún bien de la masa hereditaria conservan sus efectos a consecuencia de la partición,
sea quien sea el adjudicatario de los bienes que fueron objeto de esos actos.
La ley supone que los bienes le corresponden a cada uno de los herederos desde el momento mismo de la apertura de la sucesión, y
que lo han recibido del causante y no de sus coherederos.
Ferrier, en cuanto al carácter declarativo, sostiene que la partición se limita a determinar y reconocer un derecho preexistente, que ya
fue adquirido por una situación anterior: por el llamamiento a la sucesión y la aceptación de la herencia.
-Tiene efecto retroactivo al momento de la apertura de la sucesión.
-Es integral, aunque puede ser parcial, porque en el caso de haber varios bienes integrantes del acervo hereditario los herederos pueden
convenir partir algunos y respecto de otros continuar con el estado de indivisión.
-Es obligatoria. Un bien integrante del acervo hereditario no puede quedar indiviso por tiempo indeterminado, en algún momento se
va a producir el cese (salvo en los supuestos de indivisiones forzosas contemplados por el CCYC).
Inventario: consiste en determinar los bienes que integran el acervo hereditario. Debe realizarse en un plazo de 3 meses de la
intimación que hayan hecho al respecto.
¿Desde cuando se puede intimar? Después de que los herederos hayan aceptado la herencia y hasta que los derechos de los acreedores
legatarios prescriban.
El inventario debe ser realizado por un escribano (CPCCBA), se designa por la mayoría de los herederos presentes en la audiencia y si
no hay acuerdo lo designa el juez. Además se debe citar a la realización del inventario a todos aquellos que tengan interés legítimo
(herederos, acreedores, legatarios).
Art. 2341.- Inventario. El inventario debe hacerse con citación de los herederos, acreedores y legatarios cuyo domicilio sea conocido.
El inventario debe ser realizado en un plazo de tres meses desde que los acreedores o legatarios hayan intimado judicialmente a los
herederos a su realización.
El inventario se puede suplir por la denuncia de bienes (cuerpo de bienes). Art. 2342.- Denuncia de bienes. Por la voluntad unánime
de los copropietarios de la masa indivisa, el inventario puede ser sustituido por la denuncia de bienes, excepto que el inventario haya
sido pedido por acreedores o lo imponga otra disposición de la ley.
En este caso debe haber unanimidad entre los coherederos, basta con que alguien que tenga interés legítimo se oponga para que se
proceda a realizar el inventario en lugar de la denuncia de bienes.
El inventario no es obligatorio, salvo que lo requiera parte interesada.
Avalúo: consiste en asignarle un valor a los bienes (por perito valuador). Art. 2343.- Avalúo. La valuación debe hacerse por quien
designen los copropietarios de la masa indivisa, si están de acuerdo y son todos plenamente capaces o, en caso contrario, por quien
designa el juez, de acuerdo a la ley local. El valor de los bienes se debe fijar a la época más próxima posible al acto de partición.
En caso de que alguno de los coherederos no esté de acuerdo con el resultado del avalúo, éste puede solicitar una retasa, y se procede a
realizar devuelta el avalúo de los bienes.
Partición provisoria. Se da cuando el bien continúa indiviso, pero se dividen entre los coherederos el uso y goce de los bienes.