Congruencia
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REGLAS DE CONGRUENCIA SE SUSTENTAN EN LOS HECHOS QUE CONSTITUYEN EL OBJETO DEL JUICIO Y
NO NECESARIAMENTE EN EL CONTENIDO DE UNA DECLARACIÓN TESTIMONIAL
“Número 1. En aplicación a los Arts. 453 y 459 CPP el tribunal de alzada tiene delimitada su competencia
funcional en el conocimiento de la causa venida en apelación, únicamente en los puntos específicos de
la resolución que causa agravio a la parte recurrente, según ella misma lo consigna en su escrito de
apelación; en el caso in examine, los recurrentes plantean dos vicios de la sentencia, el primero de ellos
es atinente: a) Inobservancia de las reglas relativas a la congruencia entre la sentencia, la acusación y el
auto de apertura a juicio; vicio que se encuentra regulado en el Número 9 Art. 400 CPP el cual adjudican
porque sostienen que el testimonio de la víctima incorporan nuevos hechos cambiando drásticamente el
cuadro fáctico acusado, generándose en su opinión una violación a las reglas de congruencia y al
principio de defensa.
Número 2. Respecto a la alegada violación al principio de Congruencia, bajo los argumentos que la
víctima introduce la existencia de una casa de habitación en la finca [...], que le asigna al imputado las
funciones de encargado y curandero, y finalmente un segundo evento de ataque sexual; con lo cual a
juicio de la defensa estos aspectos del testimonio, generarían hechos incriminatorios distintos aportados
por la víctima, diferentes a otras versiones, lo cual sería un cambio sustancial de los hechos y por ende
de las reglas de congruencia y de la garantía de defensa.
Número 3. Sobre lo expuesto debe primero indicarse que las reglas de congruencia se sustentan
esencialmente sobre los hechos que constituyen el objeto del juicio; y no necesariamente sobre el
contenido de una declaración testimonial; de ahí que las diferentes versiones que puedan entrañar
declaraciones rendidas por un testigo, no necesariamente significan vulneración del principio de
congruencia; puesto que la dimensión de los hechos como sustrato fáctico de la acusación, debe
diferenciarse de lo que son declaraciones y la prueba testimonial en su caso; se trata en verdad, de dos
aspectos diferentes, una cuestión es el factum que constituye el objeto central del debate, y que se
centra en los hechos; y otra muy diferente, son las declaraciones de la víctima o testigos, así como del
testimonio que rindiera aquélla en el juicio oral.”
VARIANTES QUE SE PRESENTEN EN LOS TESTIMONIOS PODRÁN INCIDIR EN EL VALOR PROBATORIO DE
LA PRUEBA TESTIMONIAL PERO NO SIGNIFICA PER SE UN DEFECTO DE CONGRUENCIA
“Número 4. En verdad que se trata de cuestiones diferentes –aunque relacionadas– puesto que los
hechos como sustrato fáctico del delito investigado, son estáticos, es decir se encuentran delimitados
según la precisión que se ha hecho de los mismos –por supuesto que con los elementos de prueba
investigados y ofrecidos– generando una especie de plataforma sobre la cual versara el juicio; en cambio
las declaraciones de las personas, y la misma declaración testimonial, son dinámicas, y pueden ser
cambiantes, según el rito que se emplee para realizar tal acto, con lo cual, las versiones de los testigos
pueden ser objeto de variabilidad –y en su caso podrían afectar la credibilidad del testigo– pero no se
trata de una cuestión que constituya un defecto de congruencia entre los hechos acusados y los hechos
sentenciados, puesto que los hechos como forma jurídica que define el objeto del proceso penal, es
distinto a los testimonio o declaraciones de la personas, con lo cual, las variantes que se presenten en
los testimonios, podrán incidir en el valor probatorio de la prueba testimonial, pero no significan per se
un defecto de congruencia de los establecidos en el artículo 397 y como vicio según el 400 N° 9 CPP.”
“Número 5. En tal sentido, cuando se alude a los hechos objeto de la acusación, así como a la
congruencia de los mismos, respecto de los hechos acreditados, estos no constituyen una cuestión de
variación de la prueba y de apreciación de la misma. Se ve así, como el objeto procesal, con raíz en la
instrucción, concretado en la acusación y desarrollado en el juicio-debate, es la materia de la sentencia;
todo debe ser concordante y ello es lo que se denomina congruencia (Moras Mom, Jorge R. "Manual de
Derecho Procesal Penal" Pág. 59); la congruencia estricto sensu no se refiere a cuestiones de cambio de
versiones en la declaración de los testigos; sino a la modificación esencial de los hechos fijados como
objeto del debate, los cuales no pueden ser modificados salvo los casos expresamente previstos en la ley
para las ampliaciones de la acusación; pero ello es una cuestión completamente distinta a cuestiones de
testimonios rendidos de una manera diferente, que es cuestión de apreciación de prueba, y no de
principio de congruencia, en el sentido de alteración o cambios sustancial de los hechos.
“Número 7. La misma sentencia antes referida establece los impedimentos para el juzgador, o los límites
procesales a los que debe ceñir su pronunciamiento en cuanto a la sentencia y la congruencia respecto
de los hechos acusados y sentenciados, siento éstos: a) Que se condene por un delito más grave que el
de la acusación; b) Que se aprecien agravantes o formas de ejecución y participación más gravosas que
las planteadas en la acusación; c) Que se condene por un delito distinto que no sea homogéneo con el
acusado, esto es que contenga elementos que no hayan sido objeto del juicio y de los que el acusado no
haya podido defenderse. Es decir, la congruencia hace relación al tema principal del debate, como
cuestión fáctica, no a cuestiones de variación de prueba, o de testimonios, los cuales pueden presentar
entre una y otra declaración divergencias, pero ello en nada altera la congruencia, cuando el objeto del
juicio, es decir los hechos acusados, como cuestión medular se respeta, sin que signifique alteración de
los mismos que el testigo en su declaración haya aportado otras circunstancias o hechos, siempre que la
condena se dicte precisamente por el hecho acusado.”
Número 9. También sobre este aspecto, de variación del testimonio, que indica circunstancias que no se
habían conocido, debe señalarse que la doctrina en el aspecto valorativo, ha indicado, que la supresión
de tal información, mantiene intangible la naturaleza de los hechos acusados, tan es así que, al aplicar
sobre ese punto en concreto de la declaración el método de supresión mental hipotética, en cuya virtud
se elimina mentalmente esa información, verificando si con prescindencia de ella hubiere sido posible
obtener el mismo resultado, lo que efectivamente se produce en el caso sub judice (Palacio, Lino
Enrique. ”La Prueba en el Proceso Penal” Pág. 37) es decir suprimida la información nueva que brinda la
testigo, ello en nada modifica los hechos por los cuales ha sido condenado el imputado, y que también
ha aportado la testigo con su declaración, por lo cual, estas circunstancias nuevas añadidas, no
descalifican la prueba, y menos afectan a los hechos originalmente acusados, no resultando violación
alguna del principio de congruencia. De modo que no obstante encontrase lo que podría calificarse
como una cuestión de variación del testimonio la existencia de otros elementos probatorios permiten
arribar al mismo grado de certeza al que llegó la A quo, razón por la cual el motivo de vicio de
congruencia de la sentencia debe ser desestimado.”