Expediente 01454 2006 HC LPderecho
Expediente 01454 2006 HC LPderecho
Expediente 01454 2006 HC LPderecho
RAZÓN DE RELATORÍA
/J En Li na, a los 30 días del mes de enero de 2007 la Sala Segunda del Tribunal
// Const"tucional , integrada por los magistrados Gonzales Ojeda, Bardelli Lartirigoyen y
· Verg ra Gotelli , pronuncia la siguiente sentencia
ASUNTO
/ Recurso de agravio constitucional interpuesto por don José Alfredo Yelásquez Ríos
contra la resolución de la Primera Sala Penal de la Corte Superior de Justicia del Callao, a
fojas 630, su fecha 9 de noviembre de 2005 , que declaró infundada la demanda de autos.
ANTECEDENTES
excesiva demora en la tramitación del beneficio, para luego denegárselo, vulnerando de esta
manera su derecho a ser juzgado en un plazo razonable.
3.
FUNDAMENTOS
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~ . ·.
3. Asimismo antes de analizar aquéllas, es preciso reiterar lo ya señalado por este Tribunal
en el sentido de que no es labor de la justicia constitucional el resolver asuntos de mera
legalidad. Es por ello que el sentido del pronunciamiento en la presente sentencia no
consistirá en determinar, desde el texto de las normas legales que fueron de aplicación
al proceso penal, qué interpretación resulta más correcta, sino si la resolución
cuestionada, aunque corresponda a una correcta aplicación de la ley, resulta
vulneratoria de los derechos constitucionales del actor del presente hábeas corpus.
4. El Decreto Legislativo N.º 824, la Ley de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Drogas,
contempla los beneficios procesales y penitenciarios excepcionales para aquellos
agentes que, sometidos a investigación policial o a proceso judicial por encontrarse
incursos en la comisión del delito de tráfico ilícito de drogas (TID), puedan contribuir a
la lucha contra el mencionado delito.
Al respecto el inciso "a" del artículo 19º de dicho decreto, establece que "El agente que
se encuentre o no sometido a investigación policial o a proceso judicial, por tráfico
ilícito de drogas, podrá quedar exento de pena, en los siguientes casos: (... ) Cuando
proporcione información oportuna y veraz que permita identificar y detener a dirigentes
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
I
• Proporci narle una identidad ficticia. (artículo 20º del Decreto Legislativo Nº
824)
10. El artículo 26º del Decreto Legislativo precitado establece que " Cuando la so licitud del
agente no sea atendida favorablemente por falta de pruebas, las declaraciones y los
medios acordados se tendrán como inexistentes y no podrán ser utilizados en su
contra" .
11 . Dicha disposición armoniza con lo resuelto por este Tribunal en la sentencia recaída en
el Expediente Nº 6712-2005-HC/TC, en la que se concluyó que para que los medios
probatorios sean admitidos, deben . ser presentados en su oportunidad , esto es, deben
guardar relaci ón directa con el carácter de preclusión o eventualidad que debe tener la
prueba y, en virtud del cual, toda prueba solicitada fuera de etapa deviene en inválida,
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
puesto que existe una oportunidad procesal para solicitar la actuaciqn de medios
probatorios.
12. En ese sentido, el derecho a probar es uno de los componentes elementales del derecho
a la tutela procesal efectiva, tal como lo señaló el mismo Tribunal también en la
sentencia del Expediente Nº O10-2002-AI/TC; y, por tanto, constituye un elemento
implícito del derecho a la defensa. No resultará lógico, así, sostener que una testimonial
rendida por un procesado a fin de acceder a un beneficio sea invocada por el juez
/ericar ado de la instrucción penal para determinar el grado de culpabilidad de aquél,
/ pues e esta manera no sólo se estaría vulnerando el principio de preclusión de la
actua ión de los medios probatorios, sino que se limitaría el derecho a la defensa del
proce ado, al no permitírsele presentar medios probatorios en la oportunidad respectiva
y en a manera que considere pertinente para crear convicción en el juzgador respecto
de s inocencia.
13. De autos se tiene que el actor fue condenado con fecha 5 de noviembre de 2004 (fojas
426), a 12 años de pena privativa de libertad, por la comisión del delito de tráfico ilícito
de drogas, tomándose como base para dicha condena la confesión que el actor hiciera
en el ámbito policial sobre su participación en los hechos delictivos; situación que el
actor considera vulneratoria de sus derechos afirmando que efectuó dicha manifestación
en el marco del beneficio de exención de la pena a la que previamente se había acogido,
por lo que no solo no debió contar con valor probatorio alguno en el ámbito de proceso
principal, sino que no debió utilizarse su nombre verdadero para efectuar la condena
cuestionada.
14. En ese sentido y tal como se ha establecido en el fundamento 9, supra, del presente
voto, una vez que un peticionario se acoge al beneficio de exención de la pena,
corresponde asignarle una identidad ficticia y una clave, con la cual deberá rendir su
manifestación ante la policía, en presencia del representante del Ministerio Público. En
ese sentido, corre en autos, a fojas 90, la manifestación policial rendida por el actor en
presencia del representante de la Dirección Nacional Antidrogas de la Policía Nacional
del Perú, el Fiscal Provincial Especializado Antidrogas de Lima y su abogado defensor;
declaración en la cual el actor, sin hallarse con identidad ficticia o clave de
identificación alguna y brindando voluntariamente su nombre real y sus datos
particulares, acepta todos los cargos que se le imputan respecto del delito instruido,
procediendo finalmente a firmar dicha acta y colocar su huella digital, consignando
nuevamente su nombre real.
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15. Siendo así resulta claro que en el presente caso no existió vulneraci<m alguna del
derecho al debido proceso o a la tutela procesal efectiva, puesto que de la instrumental
precitada no se aprecia indicio alguno de que la manifestación estuvo siendo dada en el
marco del beneficio procesal de exención, limitándose a consignar el demandante al
final de ella que se halla arrepentido y desea colaborar con la justicia a fin de esclarecer
los hechos, lo cual no implica prueba idónea suficiente que acredite que dicha
declaración se emitió en el marco de la tramitación del alegado beneficio. Por el
contrario, se tiene de dicho documento que en todo momento el actor estuvo
debidamente asesorado por su abogado defensor, el cual, en todo caso, debió haber
exigido el cumplimiento de las formalidades contempladas en el Decreto Legislativo Nº
824;'es ecir, la asignación de una identidad ficticia y un código de identificación, antes
de la ren ición de su manifestación.
1
16. Por tant se puede concluir válidamente que la declaración rendida por el actor a nivel
policial tiene efecto de medio probatorio, que por ello fue incorporada al proceso como
declara -ión de parte y que no existe óbice alguno que impida al juez ordinario otorgar a
ésta v lor probatorio y admitirlo como tal , de modo que carece de sustento la
afirm· ción vertida por el actor respecto a que dicha declaración fue rendida al interior
de pr ceso incidental apa11e.
17. Así las cosas, la pretensión del demandante colisiona con el inciso 2) del artículo 139º
de la Carta de 1993 , que prohíbe desconocer la cosa juzgada material , en salvaguarda de
la eficacia del proceso, así como de la paz y el respeto a la firmeza e intangibilidad de
las situaciones jurídicas solucionadas en definitiva por el Poder Judicial. E llo ,
obviamente, sin perjuicio de que sea posible su modificación o revisión a través de los
cauces extraordinarios legalmente previstos.
18 . Necesario es subrayar que el hábeas corpus no puede ser utilizado como un recurso más
para modificar la decisión colegiada que dio fin al proceso penal seguido contra el
recurrente, más aún si ésta fue confirmada por ejecutoria de la Corte Suprema de la
República, vía recurso de nulidad interpuesto por el demandante en ejercicio pleno de
su derecho de defensa y en cumplimiento del principio constitucional de la doble
instancia. Consecuentemente, resulta de aplicación al caso el artículo 2º , contrario
sensu, del Código Procesal Constitucional.
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
20. Por lo expuesto , dado que en el caso de autos se tiene que el actor estuvo debidamente
asesorado por abogado defensor de su elección durante la investigación preliminar, la
instrucción, el juicio oral y la tramitación del cuaderno de exención de la pena, tuvo la
oportunidad de participar en Jos debates contradictorios y que en todo momento se
cumplió con los principios rectores del proceso penal , tales como la oralidad,
inmediación, concentración y contradicción, cabe desestimar la presente demanda de
hábeas corpus en virtud de lo dispuesto por el artículo 2° del Código Procesal
Constitucional.
HA RESUELTO
Publíquese y notifíquese.
SS.
/
, /''
GONZALES OJEDA
BARDELLI LARTIRIGOYE /
VERGARA GOTELLI
Lo
ANTECEDENTES
asistido por abogado defensor, en especial al en las audiencias orales, en medio de las
cuales brindó su testimonio que fue merituado por la Sala. Asimismo, argumenta consideró
que en ninguna parte de la sentencia consta que se haya tomado declaración alguna en el
cuaderno de exención de pena, para condenarlo ya que dicho incidente no era de
conocimiento de la sala; y que, con fecha 22 de diciembre de 2004, es decir, antes de la
emisión de la Ejecutoria Suprema, su pedido de exención de pena fue declarado
improcedente, por lo que no se advierte vulneración alguna del derecho constitucional al
debido proceso .
FUNDAMENTOS
25º del Código acotado, procede también ante Ja vulneración del debido proceso y la
tutela procesal efectiva, siempre que de la inobservancia de ésta se desprenda una
limitación o amenaza de vulneración de uno o más derechos conexos a la libertad
individual. En el presente caso, dado que Ja sentencia condenatoria que pone fin al
proceso contiene una restricción judicial a Ja libertad individual del actor, resulta
procedente pronunciarse sobre las aducidas vulneraciones al debido proceso en el
presente háceas corpus.
Al respecto, el inciso "a" del artículo 19º de dicho decreto, establece que "El agente
que se encuentre o no sometido a investigación policial o a proceso jl!dicial, por tráfico
ilícito de drogas, podrá quedar exento de pena, en los siguientes casos: (... ) Cuando
proporcione información oportuna y veraz que permita identificar y detener a dirigentes
o jefes de organizaciones dedicadas al tráfico ilícito de drogas en el ámbito nacional e
internacional o a las actividades de tráfico ilegal de armas o lavado de dinero,
vinculados con el tráfico ilícito de drogas. ( ... ) Que, la información proporcionada
permita el decomiso de drogas, insumes químicos fiscalizados, dinero , materias primas,
infraestructuras y otros medios, utilizados en ia obtención de drogas ilícitas, que
est<ibkzcan fehacientemente el funcionamiento de una organización dedicada al T1D.
Dicha información también d~be1á permitir la identificación de los dirigentes o jefes; y,
el desbaratumiento de la organización criminal" .
:5. Pc1r tanto, la exención de la pena permite al implicado, sometido a investigación policial
o a proceso judicial por tráfico ilícito de drogas, quedar fuera del proceso , es decir,
exento de responsabilidad. Dicho en otras pa.labras, la exención se produce cuando , una
vez producido un delito, la persona que cometió el hecho punible queda exenta de
sanción algun<i o la misma se le aplica en menor medida, a cambio de cumplir con una
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
condición señalada por ley : entregar información veraz y oportuna que resulte idónea
para cumplir determinada finalidad. En ningún caso la exención de la pena es una causa
de extinción de la acción penal.
!O. El artículo 26º del Decreto Legislativo precitado establece que ''C uando la solicitud del
agente no sea atendida favorablemente por falta de pruebas, las dec laraciones y lo s
medios acordados se tendrán como inexistentes y no podrán ser utilizados en su
contrn".
l 2. En ese sentido, el derecho a probar es uno de los componentes elementales del derecho
a la tutela procc3al efectiva, tal ..::orno lo señaló el mismo Tribunal también en la
sentencia del Expediente Nº 010-2002-Al/TC; y, por tanto, constituye un ele111ent1
implícito del derecho a la defensa. No resultará lógico, así, sostener que un ::l testimonial
)¡ rendida por U!1 procesado a fin de acceder a un beneficio sea invocada por el juez
encargado de la instrucción penal para determinar el grado de culp::.bilidad de aq uél ,
pues de esta 1m:nera no sólo se estaría vulnerando el principio de preclusión de la
actuación de los medios probatorios, sino que se limitaría el derecho a la defensa del
proces:ido, c:l no permitírselc presentar medios probatorios en la oportunidad respectiva
y en la :mnern que considere pe11inente para crear convicción en el juzgador respecto
de su i11occr1c i;t.
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
13. De autos se tiene que el actor fue condenado con fecha 5 de noviembre de 2004 (fojas
426), a 12 años de pena privativa de libertad, por la comisión del delito de tráfico ilícito
de drogas, tomándose como base para dicha condena la confesión que el actor hiciera
en el ámbito policial sobre su participación en los hechos delictivos ; situación que el
actor considera vulneratoria de sus derechos afirmando que efectuó dicha manifestación
en el marco del beneficio de exención de la pena a la que previamente se había acogido,
por lo que no solo no debió contar con valor probatorio alguno en el ámbito de proceso
principal, sino que no debió utilizarse su nombre verdadero para efectuar la condena
cuestionada.
14. En ese sentido , y tal como se ha establecido en el fundamento 9, supra, del presente
voto , una vez que un peticionario se acoge al beneficio de exención de la pena,
corresponde asignarle una identidad ficticia y una clave , con la cual deberá rendir su
manifestación ante la policía, en presencia del representante del Ministerio Público. En
ese sentido, corre en autos, a fojas 90 , la manifestación policial rendida por el actor en
presencia del representante de !a Dirección Nacional Antidrogas de la Policía Nacional
del Perú , el Fiscal Provincial Especializado Antidrogas de Lima y su abogado defensor;
declaración en la cual el actor, sin hallarse con identidad ficticia o clave de
identificación alguna y brindando voluntariamente su nombre real y sus datos
particulares, acepta todos los cargos que se le imputan respecto del delito instruido,
procediendo fü~almente a firmar dicha acta y colocar su huella digital, consignando
nuevamente su nombre real.
15 . Siendo así, resulta claro que en el presente caso no existió vulneración alguna del
derecho al debido proceso o a la tutela procesal efectiva, puesto que de la in strumental
precitada no se aprecia indicio alguno de que la manifestación estuvo siendo dada en el
marco del beneficio procesal de exención, limitándose a consignar el demandante al
final de ella que se halla arrepentido y desea colaborar con la justicia a fin de esclarecer
los hechos, lo cual no implica prueba idónea suficiente que acredite que dicha
declaración se: emitió en el marco de la tramitación del alegado beneficio. Por el
_¡j/l comr:::rio, se tiene de dicho documento que en todo momento el actor estuv o
j debidamente asesorado por su abogado defensor, el cual, en todo caso , debió haber
exigido e l cumplimiento de las formalidades contempladas en el Decreto Legislativo Nº
824, es decir, la asignación de una identidad ficticia y un código de identificación , antes
de la rendic;ó:1 de su manifestación .
16 . Por tanto, se puede concluir válidamente que la declaración rendida por el acto1 a nivel
policial tiene efecto de medio probatorio, que, por ello, fue incorpo rada al proceso
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
como declaración de parte, y que no existe óbice alguno que impida al juez ordinario
otorgar a ésta valor probatorio y admitirlo como tal, de modo que carece de sustento la
afirmación vertida por el actor respecto a que dicha declaración fue rendida al interior
de proceso incidental aparte .
17. Así las corns, consideramos que la pretensión del demandante colisiona con el inciso 2)
dd ª 'tícu!o 139º de la Carta de 1993, que prohíbe desconocer la cosa juzgada material,
en salv<:guarda de la eficacia del proceso, a5Í como de la paz y el respeto a la firmeza e
intangibiJi.dad de las situaciones jurídicas solucionadas en definitiva por el Poder
Judicial. Ello, obviamente, sin perjuicio de que sea posible su modificación o revisión a
través de los cauces extraordinarios legalmente previstos.
18. Necesario es subrayar que el hábeas corpus no puede ser utilizado como un recurso m<Ís
para modificar la decisión colegiada que dio fin al proceso penal seguido contra el
recurrrnte, más aún si ésta fue confirmada por ejecutoria de la Corte Suprema de la
República, vía recurso de nulidad interpuesto por el demandante en ejercicio pleno d~
su derecho de defens<l y en cumplimiento del principio constitucional de la doble
instancia. Consecuentemente, e~timamos que resulta de aplicación al caso el artículo 2º,
contrario sensu, del Código Procesal Constitucional.
20. Por lo expuesto, dado que en el caso de autos se tiene que el actor estuvo debidamente
asesorado por abogado defensor de su elección durante la investigación preliminar, la
instrucc:ón, el juicio oral y la tramitación del cuaderno de exención de la pena, tuvo la
oportunidad de participar en los debates contradictorios y que en todo momento se
cumplió con :os principios reclores del proceso penal , tales como la oralidad,
inmcdiaci Cin, concentración y contradicción, consideramos que corresponde desestimar
TRIBUNAL CONSTITUCIONAL
Srs.
GONZALES OJEDA
BARDELLI LARTIRIGOYEN