Discipulado 2
Discipulado 2
Discipulado 2
“Discipular es hacer un bien espiritual a alguien para que sea más como Cristo”.
Realmente demostramos amar a las personas cuando les ayudamos a seguir a Jesús a
través del camino del discipulado.
Un discípulo de Jesús sigue los pasos de Jesús, haciendo lo que Jesús enseñó y vivió.
Seguir a Jesús primeramente significa que has entrado en una relación personal y
salvadora con él. Tienes una «unión con Cristo».
Has sido unido a través del nuevo pacto en su sangre. Mediante su muerte y
resurrección, toda la culpa del pecado que es tuya pasa a ser suya, y toda su rectitud
pasa a ser tuya.
-Jesús es el Buen Pastor que dio su vida por las ovejas (Jn. 10:11).
-El amó a la Iglesia y por consiguiente dio su vida por ella (Ef. 5:25)
-Pagó toda nuestra deuda y nos unió a sí mismo como su pueblo santo.
Dios es bueno, y nos creo como algo bueno. Pero cada uno de nosotros ha pecado
apartándose de Dios y de su buena ley. Y porque Dios es bueno y santo debía
castigarnos por él nuestro pecado. La buena noticia del cristianismo, es que Jesús vivió
la vida perfecta que nosotros deberíamos haber vivido, y luego sufrió la muerte que
nosotros merecíamos. Se ofreció a sí mismo como sustituto y sacrificio para todo aquel
que se arrepienta de sus pecados y confíe solo en él.
Ser cristiano significa ser un discípulo. No existen cristianos que no sean discípulos.
Ser un discípulo de Jesús significa seguir a Jesús. No existen cristianos o discípulos de
Jesús que NO sigan a Jesús.
Los cristianos son personas que tienen una fe real en Cristo, y que la muestran dejando
sus esperanzas, temores y vidas totalmente en sus manos.
2ª Co. 5:15 y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí,
sino para aquel que murió y resucitó por ellos.
-AMOR. El motivo para discipular a otros comienza con el amor de Dios. Él nos ha
amado en Cristo, y por eso le amamos. Y hacemos esto en parte amando a aquellos
que él ha puesto a nuestro alrededor.
La totalidad de tu devoción a Dios será demostrada por tu amor hacia aquellos que
han sido hechos a la imagen de Dios.
El primer lugar donde los cristianos deberían procurar ser discipulados y discipular es a
través del compañerismo de la iglesia local.
CONCLUSIÓN
¿Buscas solo lo que puedes obtener, o también buscas formas de dar? ¿Y cómo usas
tus comidas y ratos libres a lo largo de la semana? ¿Piensas estrategias para la
evangelización o buscas formas para edificar a otros cristianos?
Parte de crecer en madurez es ayudar a otros a crecer en madurez. Dios quiere que
estés en la iglesia NO solo para que tus necesidades sean satisfechas, sino para que
seas equipado y motivado a cuidar de otros.
1. LA INEVITABILIDAD DE LA INFLUENCIA
Los seres humanos estamos abiertos a ser influenciados. Todos nosotros seremos
inevitables influenciados por otros, y a la vez también influenciaremos a otros.
1ª Co. 15:33 No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres.
Tu vida impacta a las personas de tu alrededor, aun cuando no seas alguien muy
importante o reconocido. Nuestro testimonio y nuestras actitudes tienen más poder
de lo que nos podemos imaginar.
1ª Ped. 3:1 vosotras, mujeres, estad sujetas a vuestros maridos; para que también los que no
creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas,
Ser un discípulo de Jesús significa orientar nuestras vidas hacia otros, tal y como Jesús
lo hizo. Significa trabajar para el bien de otros. Este amor por otros se encuentra en el
corazón del discipulado.
«La vida que discipula es una vida orientada hacia los demás»
Trabaja con el poder de Dios para proclamar a Cristo y presentar a otros creyentes
maduros en Cristo.
§ EL PATRÓN BÍBLICO
Dt. 6:6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón;
Dt. 6:7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa,
y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.
Col. 1:28 a quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre
en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre;
Col. 1:29 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él,
la cual actúa poderosamente en mí.
Pablo trabajó duro y lucho para conseguir creyentes maduros. Si queremos hacer un
bien a los demás, debemos hacer lo mismo.
Saber que Dios obra en nosotros combate el orgullo. Nos recuerda que todo lo que
tenemos y somos, todo lo que podemos hacer y alcanzar, viene de Dios.
§ ANUNCIA Y PRESENTA
La palabra de Dios es la semilla que al final da fruto, aun cuando no lo vemos a corto
plazo. Siembra la Palabra con tu esposa, marido, hijos. Siembra la palabra con los
miembros y hermanos de tu iglesia. Siembra la palabra con los inconversos, con tu
familia y tus amigos. Siembra y confía en que la Palabra de Dios no regresa vacía. Verás
la cosecha y los frutos con el paso del tiempo.
No siempre vemos fruto inmediato. Para discipular, debes ser como el paciente
agricultor que planta su cosecha confiando en que finalmente brotará. Confiamos en
que Dios usará su Palabra, aun cuando nunca veamos el fruto.
3. LA LABOR DE DISCIPULAR
Jesús enseñó a sus discípulos a vivir con una visión no del hoy sino de la eternidad.
No puedes discipular a todo el mundo, así que tienes que escoger a esta persona y no
aquella. También tienes que discernir no solo quién necesita ayuda, sino quién sabe
que la necesita y está dispuesto a recibirla.
No debes perder el tiempo con personas que no sean enseñables, porque estarás
perdiendo el tiempo. Busca a personas que estén dispuestas a recibir el consejo y la
instrucción.
La primera etapa del discipulado puede implicar establecer una amistad. En el caso de
trabajar con una persona no convertida debes presentar y explicar el Evangelio y
llamarlo al arrepentimiento y a la fe. Una vez que la persona cree y se arrepiente, esta
debe ser instruida para cumplir con el mandamiento del bautismo, finalmente pasará a
ser miembro de la iglesia donde comenzará a servir y continuará creciendo.
§ ENSEÑA
Discipular es enseñar. Debemos enseñar todo lo que Jesús nos enseño para ser
verdaderos discípulos, también debemos enseñar el resto de las Escrituras para
obtener una correcta visión del plan y la voluntad de Dios para con nuestras vidas.
§ CORRIGE
Algunas veces discipular requiere amonestar a alguien sobre las decisiones que él o
ella está tomando. Parte de ser cristiano es reconocer que el pecado nos engaña, y
que necesitamos a otros creyentes para que nos ayuden a ver las cosas que no
podemos ver por nosotros mismos.
El objetivo de discipular es ver vidas transformadas, lo cual significa que implica más
que leer un libro o aun la Biblia con otra persona. Discipular supone vivir toda la vida
cristiana ante otros.
Nos comunicamos no solo con nuestras palabras sino con toda nuestra vida.
Discipular es invitar a la persona que te imite, haciendo que tu confianza en Cristo sea
un ejemplo a seguir. Esto requiere que estés dispuesto a ser observado, y luego
acercar a las personas a tu vida, para que vean la realidad y la verdad de tu
cristianismo.
Todos nosotros deberíamos estar dispuestos a decir a los demás cristianos lo mismo
que dijo el Apóstol Pablo: 1ª Co. 11:1 Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo.
§ HUMILDAD
Al igual que tienes que humillarte para ser discipulado, también tienes que humillarte
para discipular. Discipular implica cosas difíciles, decir que no, perseverar a través de
los problemas, saber cuando soportar a alguien, y hacerlo. Tus invitaciones pueden ser
despreciadas, y tus consejos rechazados.
• El discipulador NO es perfecto
Solo escuchamos, obedecemos, nos dejamos aconsejar y seguimos a los que también
están siguiendo a Jesús. Imitamos a la persona porque ella esta imitando a Cristo.
Hay cristianos que pueden caer en el error de pensar que ellos no necesitan tener
estas relaciones. A estos creyentes se le conocen como “Llaneros Solitarios”. Jesús no
murió por individuos separados, sino por una iglesia. Al adoptarte, Dios te introdujo en
una familia, por lo que ahora tienes hermanos y hermanas.
CONCLUSIÓN