Reactivador de Pozos Negros
Reactivador de Pozos Negros
Reactivador de Pozos Negros
DESCAMIVA
Se trata de un producto granulado, color negro, que se emplea para disolver grasas,
pelos, detergentes, etc., que están impermeabilizando el lecho absorbente del pozo
negro, sea arena, piedras, canto rodado, etc. Cuando el pozo se llenó, el desagote no es
una solución: ya el lecho se ha impermeabilizado y se volverá a llenar en corto plazo. El
pozo está trabajando como un tanque, sin que escurran los líquidos provenientes de la
cámara séptica. La solución es DESCAMIVA.
DESCAMIVA Se aplica directamente en la boca del pozo, sin que pase por la cámara
séptica, para evitar matar la flora microbiana que allí se ocupa de disolver los sólidos,
transformándolos en líquidos (digestión aeróbica y anaeróbica).
Recomendamos en forma empírica agregar 40 Kg (2 bolsas) en pozos de 4/6 metros de
profundidad. Normalmente esta dosis es suficiente, pero al desconocer la cantidad de
residuos impermeabilizantes de cada pozo en particular, no podemos asegurar que en
todos los casos sea la cantidad suficiente. La experiencia de casi 30 años fabricando este
producto, nos indica que en el 90% de los casos, la dosis indicada es suficiente. De
todas formas, hay diversos factores que pueden hacer variar la dosis recomendada,
como ser, la antigüedad del pozo, el uso del mismo (si es domiciliario, o de un
consorcio de varios departamentos, o de una industria, etc). También influye
notablemente la capacidad de absorción de cada tipo de suelo: no es lo mismo un suelo
arenoso con gran rapidez de escurrido, que un lecho arcilloso en el que las grasas
forman una pasta de muy difícil reacción. Por estas razones, la dosis puede variar
considerablemente de un pozo a otro, llegando en casos extremos a que el tratamiento
químico con DESCAMIVA no de el resultado deseado. Por lo expuesto, y la
imposibilidad de conocer cada caso en particular, DESCAMIVA se comercializa sin
garantizar resultado.
DESCAMIVA puede utilizarse tanto en instalaciones industriales como domiciliarias.
Trabaja indistintamente en pozos clásicos, entubados, sangrías, lechos adsorbentes de
arena o piedra, etc.
El desagote atmosferico del pozo ciego no es una solución integral, dado que la napa
absorbente continuará impermeabilizada: al corto o mediano plazo el pozo se llenará
nuevamente. Para aplicar DESCAMIVA no es necesario desagotar previamente el pozo,
pero mientras menos agua tenga el mismo, al potenciarse su eficacia (por diluirse en
menos cantidad de líquido), habrá mayores posibilidades de obtener una completa
desempermeabilización. Una vez agregado DESCAMIVA, en algunos casos, comienza
a bajar el nivel del líquido inmediatamente; en otros, a las 24 – 48 horas el pozo ya está
vacío y trabajando normalmente; aunque ha habido casos donde el nivel de agua recién
comienza a descender pasados los 3 o 4 días contados a partir de la aplicación del
producto. El pozo siempre debe trabajar vacío: si se observa acumulación de líquido,
inmediatamente debe agregarse DESCAMIVA para evitar quedarse sin servicio en esta
instalación fundamental. Preventivamente es aconsejable hacer agregados periódicos de
DESCAMIVA para garantizar siempre el correcto funcionamiento del desagüe.
DESCAMIVA funcionará siempre que las instalaciones sean las adecuadas: en pozos
derrumbados, mal construidos, o que no han llegado a la capa absorbente, el
producto no corregirá estas deficiencias. Tampoco se obtendrán resultados en
aquellos lugares donde las napas freáticas hayan subido su nivel por encima del nivel
del desague del pozo.
Para lograr que el pozo reciba sólo líquidos hay que lograr un correcto
funcionamiento y dimensiones de la cámara séptica. Es allí donde la materia orgánica se
degrada para transformar los sólidos en líquidos. Este efecto es logrado por digestión
aeróbica y anaeróbica realizada por microorganismos. Periódicamente se debe desbarrar
la cámara séptica para lograr un trabajo correcto de la misma. Los barros surgen de la
materia inorgánica que penetra en la cámara (arena, principalmente).
Cuando se observa que un pozo se mantiene lleno, sobre todo en horas en que no
ha recibido descarga de los líquido provenientes de la cámara, es necesario aplicar algún
tratamiento que quite la grasa, pelos, etc., del lecho de arena. No es solución el simple
vaciado del pozo, dado que si se llenó es porque la arena no esta absorbiendo
correctamente. Con DESCAMIVA se logra combinar las grasas, transformándolas en
jabones en una reacción que se denomina técnicamente “saponificación”. Es la misma
reacción que se aprovecha para la elaboración de jabones, combinando los ácidos grasos
del sebo o de los aceites animales o vegetales, con sustancias alcalinas. La soda cáustica
produce esta reacción para formar jabones duros (los jabones en panes). En los pozos
negros no es conveniente el uso de este producto, porque la producción de jabones
duros implica otro tipo de inconvenientes para la arena absorbente, que luego debería
recibir el ataque de otros productos para disolver el jabón duro.
En muchos casos escuchamos a clientes que nos dicen que es mas conveniente o
más barato desagotar el pozo, sin el agregado del tratamiento. Es un grave error. Una
cosa no elimina la otra: si el pozo se llenó, por más que se desagote, se volverá a llenar
en cortísimo plazo, dependiendo sólo de la capacidad del pozo (su volumen). Es la arena
la que dejó de absorver, por lo que hay que desimpermeabilizarla, volverla absorbente.
El vaciado incluso en muchos casos no es necesario. Simplemente permite que con
menos cantidad de DESCAMIVA se logren mejores resultados, al trabajar más puro, sin
tanta dilución en el líquido que está llenando el pozo ciego. Lo ideal (pero más caro), es
vaciar el pozo, desbarrar la cámara séptica y agregar DESCAMIVA directo al fondo del
pozo (donde está la arena).