Estrategia BREVE Word - Parme Y ALEX REVID Con Portada

ESTRATEGIA MISION ALMAS BREVE
Breve / Etapa 1
© 2024
ASESOR
Presidente, Joaquín Jiménez
COMITÉ DE LA COMISION A LA ESTRATEGIA MISION

ALMAS BREVE
Director: Pastor, Alexander Gómez
Secretario: Pastor, Parménides Rodríguez
Miembros:
Pastor, Luis Evelio Álvarez
Pastor, Harol Orobio
Pastor, Daner Pinto
COMPILADO POR:
Pastor, Parménides Rodríguez
EDITORES
Pastor, Parménides Rodríguez
Pastor, Alexander Gómez Montoya
DISEÑO Y GRAFICAS
Hno. Alberto Villalobos
Pastor, Humberto Marín
DIAGRAMADORA
Hna. Victoria Pérez
IGLESIA PENTECOSTES UNIDA INTERNACIONAL DE COLOMBIA

Cr 9 #42.39 Bucaramanga-Colombia
www.iglesiapentecostesunidainternacionaldecolombia.org
ETAPA 1
Cómo implementar el modelo
celular de la Iglesia Pentecostés
en obras nuevas, misiones o
iglesias que deseen crecer.
Estrategia Mision Almas Breve
CONTENIDO:
Introducción del Director del Decov ........................6

SECCIÓN 1: CÓMO IMPLEMENTAR LA
ESTRATEGIA BREVE
I. ¿Por qué “Estrategia Breve”?.......................9
II. La misión de nuestra iglesia .......................9
III. Un modelo sencillo y práctico ................. 11
IV. El ciclo de evangelización ...................... 14
V. El grupo celular ..................................... 17
VI. La escuela de discipulado ....................... 25
VII. Jesús y el discipulado ................................ 29
SECCIÓN 2: ELEMENTOS IMPORTANTES A
CONSIDERAR
I. El Pastor, pieza clave para el éxito ............. 34
II. La importancia del trabajo en equipo ....... 35
III. Administración de los grupos celulares ... 37
IV. Modelos de reportes .................................. 40
Otros recursos disponibles ................................ 42
MANUAL PARA PASTORES PG5

PRESENTACIÓN DEL
PRESIDENTE
Apreciados Pastores y Lideres de la IPUIC
Saludos en el Nombre del Señor Jesucristo.
El mundo que nos ha tocado vivir está en una profunda
crisis espiritual, moral, económica, política y física y la
respuesta a esta crisis solo está en Jesucristo. La razón
de la Iglesia en este mundo es dar testimonio de
Jesucristo. La IPUIC ha sido fiel a la visión de predicar
este glorioso evangelio del señor Jesucristo; hasta el día
de hoy no hemos ahorrado esfuerzo para predicar el
evangelio a todos y evangelizar los territorios no
evangelizados; producto de este esfuerzo hoy tenemos
unos 900 lugares de predicación entre extensiones,
iglesias en formación e iglesias reconocidas. No cabe
duda de que Dios ha sido fiel y continúa moviéndose
entre nosotros.
Nuestro propósito este año es Ir Más Allá de Nosotros
y para hacerlo necesitamos saber dónde estamos hoy,
las estadísticas nos muestran el estado de crecimiento
numérico de nuestras congregaciones y a diciembre
31 de 2023 nuestras congregaciones se clasifican
según su número de miembros así:
Entre Entre Entre Entre Entre Entre Entre Entre Entre Total
Menos de
15 16 - 26 - 51 a 81 - 121 - 151 - 201 - 301 - 401 - Congre-
miembros 25 50 80 120 150 200 300 400 500 gaciones
124 293 257 133 63 23 16 7 916
Necesitamos una estrategia que nos ayude a

fortalecer lo que tenemos y nos impulse a ir Más allá
de Nosotros.
Estoy convencido que la Iglesia Pentecostés Unida
Internacional de Colombia está viviendo el mejor
tiempo para el avivamiento y el crecimiento.
La Junta General en cumplimiento de su función de
órgano ejecutivo de la IPUIC como es el de
“Establecer políticas, planes y objetivos a corto,
mediano y largo plazo para la marcha de la IPUIC en
general.” (Artículo 32.2 de los Estatutos), nombró una
comisión para estudiar y formular un plan estratégico
para el cumplimiento de la visión de ser una Iglesia
evangelizadora, discipuladora y misionera.
Esta comisión ha sido fiel al postulado y ha formulado
la Estrategia Misión Almas. En el mes de diciembre
la comisión presentó a la Junta General La estrategia
compuesta por 8 engranes que tiene el propósito de
equipar a los pastores con herramientas para el
avance y crecimiento de nuestras congregaciones.
Esta estrategia no es una idea nueva, es un plan que
ha sido usado por diferentes Iglesias en el mundo y ha
probado ser efectiva; en Colombia algunos de
nuestros pastores ya la han implementado con muy
buenos resultados. Hemos encontrado que en la
IPUIC hay 625 congregaciones que ya trabajan con el
sistema celular y hay 54 congregaciones que ya han
implementado la Estrategia. Esto nos dice que algunos
están en un nivel avanzado, pero la mayoría de
nuestras congregaciones necesitan hacer la transición
para adoptar la Estrategia Misión Almas, esta realidad
nos hizo pensar en la necesidad de crear una manera
que facilite la transición y adopción de la Estrategia a
los pastores y congregaciones que aun no trabajan
con este plan.
De allí que surge lo que hemos llamado Estrategia

Misión Almas Breve para ayudar a los pastores a

hacer la transición. El objetivo es que al fin de este año
fiscal todas las congregaciones comiencen el proceso
de transición y adopción de la Estrategia Misión Almas
en su nivel Breve y cuando hayan adoptado la
Estrategia Breve, estarán preparados para pasar al
nivel avanzado de la Estrategia Misión Almas. La
Estrategia Avanzada, estará disponible para apoyar
más a los pastores que ya han hecho la transición.
Estas conferencias los ayudarán a establecer
estructuras fuertes que permitirán que el modelo
celular florezca.
La Estrategia Breve provee los componentes
esenciales, que son los Grupos Celulares, el Ciclo de
Evangelización y el discipulado Nivel 1 Nacer. El plan
Breve de la Estrategia Misión Almas se estableció
porque en la IPUIC estamos determinados a que, en
el futuro más cercano posible, cada iglesia reconocida
y en formación abrace este modelo de crecimiento.
Agradezco a los miembros de la comisión del plan
estratégico que prepararon este manual. Estas
enseñanzas están respaldadas por su experiencia y
conocimiento.
Que Dios les bendiga ricamente.
Joaquín Emilio Jiménez Patiño

Presidente IPUIC

INTRODUCCIÓN DEL
DIRECTOR DEL DECOV
Bienvenidos a este valioso recurso diseñado
para guiar a la Iglesia Pentecostés Unida
Internacional (IPUIC) hacia una dirección
unificada y efectiva en el servicio de Dios. En
este libro, nos embarcamos en un viaje para
consolidar una visión común, sin importar el
tamaño de la congregación. La compilación de
este material busca ser una herramienta valiosa
para el avance continuo de la obra divina.
En un esfuerzo inicial, la Estrategia Breve se

presenta como una parte integral de la Estrategia
Misión Almas. El propósito es claro: brindar a los
pastores de la IPUIC un conjunto de principios de
crecimiento, accesibles y aplicables con
facilidad. Este enfoque se adapta a la diversidad
de tamaños de iglesias dentro de nuestra iglesia,
asegurando que cada pastor y congregación
pueda implementar estos principios con éxito.
Los tres engranajes fundamentales que
impulsarán esta estrategia son el ciclo de
evangelización, los Grupos Celulares y la
Escuela de Discipulado. Cada uno desempeñará
un papel crucial en la promoción de la unidad, el
crecimiento espiritual y el cumplimiento de la
misión de la IPUIC. A través de estos
componentes, buscamos no solo fortalecer
nuestra conexión con Dios sino también fomentar
una comunión más profunda entre los miembros
de la iglesia.
Este libro no solo es un recurso informativo, sino

un llamado a la acción. Al aplicar los principios

aquí expuestos, estamos seguros de que la
IPUIC experimentará un avance significativo en
su labor y contribuirá de manera tangible al reino
de Dios. ¡Que este viaje sea inspirador y
fructífero para cada pastor y miembro de nuestra
amada iglesia!
Alexander Gómez Montoya

Director DECOV

SECCIÓN 1
CÓMO IMPLEMENTAR
LA ESTRATEGIA
MISIÓN ALMAS BREVE

I. ¿Por qué “Estrategia

Breve”?
El Comité de la Estrategia de Misión almas ha
propuesto una simplificación a la Estrategia de Jesús
que permita a muchas iglesias locales superar los
obstáculos que han tenido hasta ahora para poder
llevar adelante el programa.
Entendiendo que la implementación de los ocho
engranes con sus propósitos presenta un desafío
para muchos pastores, poder comprender y aplicar
estos conceptos a su iglesia local.
Según la encuesta presentada
recientemente, el tamaño promedio de las
congregaciones de la Iglesia Pentecostés es de 40 a
60 miembros. A ese desafío se le añade la dificultad
de que en nuestra iglesia existe un importante
número de pastores bi-vocacionales (pastores que
tiene un trabajo aparte del ministerio para su
mantenimiento).
Analizando los retos existentes, dispusimos
que la Estrategia se organizara en tres etapas de
implementación. Creemos que esto facilitará la
implementación de la Estrategia Misión Almas en cada
congregación de nuestra iglesia pentecostés,
independientemente de su tamaño.
El Plan se implementará localmente en tres etapas.

La primera etapa de este plan comprende tres
engranes: Grupos Celulares, Ciclo de Evangelización y
Escuela de Discipulado Nivel 1 Nacer. Estos tres
elementos son la esencia—el ADN— de la misión de la
Iglesia del Señor. (Este primer nivel es el que llamaremos
estrategia Breve)
La segunda etapa comprende otros tres engranes:

Reunión de Líderes, Estrategia Espiritual y Excelencia en
Ministerios.
Finalmente, la última etapa adicionará los dos engranes
restantes, que son: Retiros Espirituales y Plantación de
Iglesias; completando así la totalidad de los procesos de
la Estrategia de Mision Almas.
A través de este primer manual, iniciamos entonces el

plan breve de la Estrategia Misión Almas, con la
esperanza de que en el futuro más cercano posible cada
iglesia, misión u obra nueva de la iglesia Pentecostés
abrace nuestro modelo de desarrollo celular.
II. La misión de nuestra

iglesia
El cuerpo de Cristo, la Iglesia (1ª Corintios 12.27), tiene
la tarea ineludible de ir por todo el mundo y hacer
discípulos; es decir, su asunto principal es convertirse en
un cuerpo discipulador de almas para el Reino de Dios.
Bíblicamente nuestra misión es clara: Debemos
evangelizar y discipular al mundo (Mateo 28.19–20).
Estas dos cosas deben ocupar la mayor parte del
esfuerzo de la iglesia local. Si hiciésemos un análisis
cuidadoso del calendario de nuestra iglesia local, ¿qué
revelaría el mismo? ¿Mostraría que estamos enfocados
en el evangelismo, en alcanzar y discipular a los
perdidos?
La historia nos enseña que las iglesias

crecientes están enfocadas en la misión. Sus
actividades y calendarios reflejan su compromiso con
la misión. Por otro lado, hay congregaciones que

“hacen mucho”, pero se enfocan en otras cosas. Estas
congregaciones, aunque muy ocupadas, no ven
mucho fruto por sus labores.
El peligro que hay en la falta de fruto es que

produce frustración y desánimo congregacional.
¿Cuál es el antídoto para este mal? Ser una iglesia con
una misión y con fruto. En Juan 15.8 Jesús nos dice: “En
esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho
fruto, y seáis así mis discípulos.” Las palabras de Jesús
son directas. Nuestra misión es el Evangelismo y nuestro
fruto son las almas: “Venid en pos de mí, y os haré
pescadores de hombres” Mateo 4.19.
La Estrategia de Jesús es un modelo que

tiene como objetivo redirigir a la Iglesia en su misión,
para que llegue a cumplir los propósitos para los que
fue fundada. Creemos que la aplicación de la
ESTRATEGIA BREVE resultará en mucho fruto.
“Así es el reino de Dios, como cuando un

hombre echa semilla en la tierra; y duerme y se
levanta, de noche y de día, y la semilla brota y
crece sin que él sepa cómo. Porque de suyo lleva
fruto la tierra, primero hierba, luego espiga,
después grano lleno en la espiga; y cuando el
fruto está maduro, en seguida se mete la hoz,
porque la siega ha llegado.” Marcos 4.26–29.
En esta cita bíblica se encuentran los cuatro

propósitos de nuestro modelo celular: “brota”
(Nacer), “crece” (Crecer), “maduro” (Madurar) y
“siega” (Multiplicar). Por medio de la ESTRATEGIA
BREVE, pretendemos entregar a líderes con hambre
herramientas que les ayuden en el cumplimiento de

su misión y ministerio dentro del Reino de Dios.
Nuestro plan conecta directamente con la visión de la
Iglesia Pentecostés, que es unirnos para la expansión
del Reino. Es decir, queremos llegar a ser una iglesia
del Nombre de Jesucristo que convierta a las personas
de cada comunidad al Reino de Dios a través de la
Estrategia de Mision Almas.
Lucas 10.1: “Designó el Señor también a

otros setenta, a quienes envió de dos en dos
delante de él a toda ciudad y lugar adonde él había
de ir.” Cumplir con esta misión y alcanzar nuestra
visión requiere que cada uno de nosotros se envuelva
en la tarea de llevar los perdidos a Cristo a través de
los cuatro propósitos de la Estrategia de Mision Almas.
Para que eso se vuelva una realidad, queremos
hacer por lo menos tres cosas:
(1) Aclarar la visión

Toda organización exitosa tiene una visión
clara acerca de cómo desarrollar sus propósitos y
planes. Sin embargo, y con bastante frecuencia,
nuestras iglesias no poseen claridad con respeto a su
misión ni tienen un proceso claro de cómo hacer
discípulos. Consecuentemente, sus esfuerzos muchas
veces no producen los resultados esperados, y algunas
iglesias incluso caen en el decrecimiento. Una visión
clara de cómo se logrará la misión es clave para el éxito.
(2) Enfocar nuestra gente

El enfoque aumenta la efectividad porque se niega
hacer aquellas cosas que no están centradas en la misión.
El enfoque es muy importante. Los programas
tradicionales de nuestras iglesias locales que fueron
buenos en su tiempo pueden cesar de producir los

resultados deseados para la misión de la Iglesia, que
es hacer discípulos.
Iglesias estancadas frecuentemente solo son

impulsadas por sus actividades y no por el propósito
de Dios. En cambio, el modelo ESTRATEGIA BREVE,
al focalizar nuevamente sobre la visión de la Iglesia
Pentecostés, busca dar dirección a nuestra iglesia
para que regrese a su tarea o misión principal, que
es ganar al mundo para Jesucristo (Marcos 16.15).
(3) Apasionar la congregación

La Iglesia nació con una gran pasión por llevar
las buenas nuevas de Jesucristo a todo el mundo
(Hechos 1.8). En el Aposento Alto, el Espíritu Santo
tomó la boca de los 120 discípulos —mediante las
nuevas lenguas— para que evangelizaran a miles de
almas que por esos días participaban de la fiesta de
Pentecostés. Así fue como a muchos les fue revelado
Jesucristo y sólo aquel día se produjo una cosecha de
3.000 almas (Hechos 2.38–41).
Cuando no estamos enfocados en la misión,

tendemos a dejar los resultados “en las manos de Dios”.
Pensamos: “Que vengan a la iglesia aquellos que Dios
quiera.” En otras palabras: “Yo no traeré a nadie”. Pero,
aunque es cierto que Dios es quien da el crecimiento,
también es cierto que Él no va a venir a sembrar
nuestra tierra.
Pablo, en 1ª Corintios 3.6, dice que “el

crecimiento lo ha dado Dios”, pero antes dice: “Yo
planté, Apolos regó.” Por lo tanto, que la semilla
pueda nacer es cosa del Señor, pero la tarea de
sembrarla ¡es nuestra! Y la tarea de cuidar la siembra

para ver resultados ¡es nuestra también!
III. Un modelo sencillo y

práctico
Los cuatro propósitos que hemos hallado en
la analogía de la semilla plantada en la tierra, del
pasaje de Marcos 4.26–29, son vitales para el
desarrollo de una siembra que conseguirá traer una
gran cosecha. Estos propósitos (que representan
cuatro etapas de desarrollo) guían a los nuevos
creyentes a través de las enseñanzas de Jesús, para
que puedan experimentar el nacimiento, el
crecimiento, la madurez y la multiplicación. La
finalidad de estos cuatro propósitos es que nuestros
amigos nazcan de nuevo, crezcan en su relación con
el cuerpo de Cristo, maduren en su servicio al Señor
y se multipliquen al traer otros a Jesús usando sus
dones para el servicio de Dios.
Por medio de la ESTRATEGIA BREVE

proponemos un modelo sencillo y práctico para que
cualquier iglesia en transición, pueda moverse con
mayor facilidad al nuevo modelo celular. También
será aplicable a nuevas iglesias —obras nuevas. La
ESTRATEGIA BREVE se puede aplicar en toda
etapa de desarrollo de una congregación: Obra
Nueva, Misión o Iglesia. Este modelo se puede aplicar
a partir de un sólo grupo celular dirigido por un líder y
apoyado por sus miembros. No se necesitan masas
para empezar a ganar almas; sólo un pequeño grupo
de discípulos de Jesús comprometidos a llevar a cabo

la tarea que Él nos ha encomendado: ‘‘Id y predicad

el evangelio a toda criatura.” Marcos 16.15.
El Ciclo Nacer
¿Cómo logramos el propósito Nacer? Por medio
del Ciclo Nacer, que es un período de trabajo de cuatro
meses. Esto permite que el Ciclo Nacer pueda
realizarse hasta tres veces en un año. El objetivo del
Ciclo Nacer es llevar el número más grande posible
de personas a una relación personal con Jesucristo.
El Ciclo Nacer tiene tres etapas. Primero, el ciclo

comienza con cada miembro de la congregación o Nueva
Obra orando, ayunando e intentando evangelizar
cinco almas cada uno. Esta parte del ciclo de
nacimiento termina con el Día del Amigo, ya sea en
un hogar o en la iglesia. Segundo, los miembros de la
iglesia entonces trabajan para que las almas que
asistieron al Día del Amigo se conecten a un grupo
celular. Tercero, después de asistir al grupo celular, se
les animará a recibir clases de discipulado. Esto puede
suceder en un salón de clases en la propiedad de la
iglesia o en un hogar. Si la clase de discipulado Nivel 1
Nacer, se lleva a cabo en un grupo celular, debería ser
un día diferente del día de la reunión celular. En ese caso
será de persona a persona. El objetivo es que entreguen
sus vidas a Cristo, se bauticen en agua y reciban el
Espíritu Santo (Juan 3.5). Posteriormente, el creyente

recién bautizado continuará siendo guiado hasta que

se convierta en un ganador de almas.
A continuación, presentamos en detalle los tres

procesos clave del Ciclo Nacer, que, si son bien
ejecutados, eventualmente producirán una gran
cosecha de almas:
• Ciclo de Evangelización
• Grupo Celular
• Escuela de Discipulado

El Ciclo de Evangelización
Éste consiste en un esfuerzo sincronizado de cinco
semanas en el cual participan todas las personas
bautizadas de la célula o de la iglesia. Éstas trabajan
para traer a cinco nuevas almas a Cristo. Cada
semana se realiza una labor específica:
(1) Anotar el nombre de diez amigos,
(2) Contactarlos por teléfono,
(3) Visitarlos,
(4) Invitarlos al Día del Amigo y
(5) Llevarlos al Día del Amigo para que la
Palabra sea sembrada en ellos.
El Grupo Celular
Durante las siguientes tres semanas, los
miembros de la iglesia que trajeron almas al Día del
Amigo trabajarán para integrarlas al Grupo Celular. Ahí
desarrollarán amistades y recibirán el mensaje de la
palabra de Dios. El poder de la Palabra y las nuevas
amistades ayudarán a llevarlos a un encuentro con
Dios. Es indispensable seguir orando por ellos,
porque la oración es un componente esencial. Esto
ayudará a que se logre integrarlos permanentemente
a la célula.
Escuela de Discipulado
Durante las siguientes ocho semanas (dos
meses) el nuevo miembro de la célula asistirá a la
clase de discipulado NACER. Esta clase se dará en
un día diferente de la reunión de la célula. Se darán
una o dos lecciones semanales del libro de
Discipulado Nivel 1 Nacer, al nuevo miembro del
grupo celular. El objetivo de esto es poner
fundamento bíblico en el corazón de la persona para
que tome la decisión de ser bautizada en el nombre de
Jesucristo (Hechos 2.38). Durante este tiempo, se
debe orar para que las personas reciban el bautismo
del Espíritu Santo. Así se completa el primer propósito,

que es nacer de nuevo. El Ciclo Nacer culmina con la
celebración de bautismos en agua, evento que puede
llamarse “Fiesta de la Cosecha”, “Fiesta de
Bautismos”, o algo parecido.
“En toda labor hay fruto; más las vanas

palabras de los labios empobrecen.” Proverbios
14.23. La ESTRATEGIA BREVE pretende mucho
más que traer personas a la iglesia: trabaja para
formar discípulos cristianos que se conviertan en
sembradores de la Palabra de Dios. Estamos orando para
que a través de la Estrategia de Misión Almas un gran
avivamiento se vuelva realidad en la Iglesia
Pentecostés. Nuestra disposición de sembrar,
determinará el resultado de crecimiento que la iglesia
obtendrá. A mayor siembra, mayor cosecha, y para
lograr esa cosecha, se tiene que prestar atención al
seguimiento de la visión de la ESTRATEGIA BREVE,
y trabajar cuidando todos los detalles. Así es como se
obtiene una gran cosecha de almas para el Reino de
Dios.
IV. El Ciclo de Evangelización

1ª Corintios 3.6–8: “Yo planté, Apolos regó;
pero el crecimiento lo ha dado Dios. Así que ni el
que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que
da el crecimiento. Y el que planta y el que riega
son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su
recompensa conforme a su labor.”
Como hemos dicho anteriormente, el Ciclo de

Evangelización es un período de cinco semanas
donde cada miembro de la iglesia se enfoca en ganar
diez almas para Cristo. Durante estas semanas se
preparan los corazones donde se sembrará la semilla

de la Palabra de Dios.
Las cinco semanas de evangelización son un esfuerzo de

toda la iglesia, misión, obra nueva o grupo celular. Cada
miembro debe participar, pues todos tenemos familiares
o amigos que necesitan a Cristo. Esta es una realidad que
debe servir como motivación a todo miembro para
envolverse en el Ciclo de Evangelización. Durante este
ciclo, el Pastor o líder motivará a la iglesia o al grupo

para que se envuelva completamente en el trabajo de
evangelizar. Además, motivará a todos a, pues para
tener respaldo y efectividad en el campo espiritual, se
deben hacer esfuerzos espirituales.
La consagración espiritual se debe llevar a cabo
antes y durante el Ciclo de Evangelización, para que la
cosecha de almas sea abundante.
¿Qué debemos hacer durante las cinco semanas

del Ciclo de Evangelización?
La primera semana: IDENTIFICAR

En la primera semana, los nombres de cinco amigos se
registrarán en un marcador. El miembro de la iglesia
orará por cada una de las personas que está tratando de
evangelizar durante las cinco semanas del Ciclo.
También ayunará un día a la semana para que el Señor los
libere de las cadenas que los atan. “Ninguno puede entrar
en la casa de un hombre fuerte y saquear sus bienes,
si antes no le ata, y entonces podrá saquear su casa.”
Marcos 3.27.
La segunda semana: CONTACTAR

En la segunda semana se contactará a cada
amigo mediante llamada telefónica. El fin es avisarle
que se le está llevando en oración y ayuno; también
conocer sus necesidades y así poder orar más
específicamente por cada uno. Es muy importante
además atar al espíritu que le tiene ciegos a la luz del
Evangelio:
“En los cuales el dios de este siglo cegó el
entendimiento de los incrédulos, para que no les
resplandezca la luz del evangelio de la gloria de
Cristo, el cual es la imagen de Dios.” 2ª Corintios
4.4.

La tercera semana: VISITAR

En la tercera semana se les visitará en sus
casas o trabajos para hablarles por la Palabra de
Dios y orar personalmente por ellos. Se les debe
ministrar con palabras que edifiquen sus vidas: “Sea
vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con
sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada
uno.” Colosenses 4.6.
La cuarta semana: INVITAR

En la cuarta semana se les llevará una
invitación para que asistan a la comida que se
compartirá en el grupo celular o en el templo. Ellos
deben confirmar su asistencia para que se puedan
hacer los preparativos adecuados. Debemos
asegurarnos de que los miembros del grupo celular
asistirán también.
La quinta semana: TRAER

En la quinta semana se llevará al amigo al Día
del Amigo. Esta actividad se celebrará en cada célula
donde se reúne la o en la propiedad de la iglesia. Una
recepción extraordinaria se preparará para las almas
que vienen por primera vez. Allí cada convidado será
recibido cálidamente y presentado a los demás
asistentes. Se les expondrá la Palabra de Dios a todos
los que asisten. Durante la actividad los amigos
disfrutarán la confraternidad y finalmente, la cena que
se preparó para ellos.
Todo el programa de la reunión debe estar

pensado para quienes vienen por primera vez, para
causar la mejor impresión en ellos. Que ese día reine
en la célula un ambiente especial de amor y servicio.
No hay una segunda oportunidad para una primera
buena impresión. Que ninguna persona quede
desatendida.

La oración al inicio debe ser sencilla y breve.

Los cantos deben tener el amor de Dios como tema,
evitándose temas doctrinales o lenguaje extraño para
los convidados. La enseñanza debe ser clara, fácil de
entender; relevante a las necesidades de los amigos.
La meta es que ellos abran su corazón a Cristo Jesús.
El programa no debe ser demasiado extenso; una

hora y media, dos como máximo. Que los convidados
queden con ganas de regresar. Hay que asegurarse
que todos llenen tarjetas de registro con sus datos y
peticiones. Antes de despedirlos, se les invitará a la
próxima reunión y al servicio en la iglesia.
Con esta actividad finaliza el Ciclo de

Evangelización; un proceso que pone a cada
miembro de la célula a funcionar como evangelista y
a cumplir su misión como verdadero discípulo de
Jesús.
Aquellos que saben de siembras, saben que

para sembrar hay que esperar que llegue el momento
apropiado del ciclo; ya que cada semilla tiene su ciclo
y su momento para ser sembrada. Si se siembra fuera
de tiempo, es muy probable que la planta no nazca o que
el fruto sea escaso. El Evangelio no necesita complicadas
cosas para dar resultado; sólo necesita ser sembrado en
un corazón, y luego en otro, y así. El Evangelio de por
sí solo tiene poder para salvación: “Porque no me
avergüenzo del evangelio, porque es poder de
Dios para salvación a todo aquel que cree; al
judío primeramente, y también al griego.”
Romanos 1.16. “Obteniendo el fin de vuestra fe,
que es la salvación de vuestras almas.” 1ª Pedro
1.9.

V. El Grupo Celular
Los grupos celulares constituyen un elemento
esencial de la ESTRATEGIA BREVE. Generalmente
hablando, los grupos celulares se reúnen en los
hogares de los miembros de la congregación. Los
cristianos de la iglesia primitiva se propusieron
trabajar en los hogares. Ellos emplearon la estrategia
de evangelización en las casas, como podemos ver
en las siguientes Escrituras:
“Y todos los días, en el templo y por las

casas, no cesaban de enseñar y predicar a
Jesucristo.” Hechos 5.42. “Y habiendo considerado
esto, llegó a casa de María la madre de Juan…
donde muchos estaban reunidos orando.” Hechos
12.12. “Y les hablaron la palabra del Señor a él y a
todos los que estaban en su casa.” Hechos 16.32.
“Y cómo nada que fuese útil he rehuido de
anunciaros y enseñaros, públicamente y por las
casas.” Hechos
20.20. “Saludad también a la iglesia de su casa.
Saludad a Epeneto, amado mío, que es el primer
fruto de Acaya para Cristo. Saludad a los de la casa
de Aristóbulo. Saludad a Herodión, mi pariente.
Saludad a los de la casa de Narciso, los cuales
están en el Señor.” Romanos 16.5,10,11. “Aquila y
Priscila, con la iglesia que está en su casa, os
saludan mucho en el Señor.” 1ª Corintios 16.19.
Como vemos en estos pasajes, las casas de

los creyentes eran centrales para llevar a cabo el
trabajo de la Iglesia. Los grupos celulares de la iglesia
son muy importantes, ya que ofrecen a la gente la
oportunidad de reunirse para descubrir y desarrollar el
plan de Dios para ellos, por medio del apoyo en
oración, el estudio de la Palabra de Dios y el desarrollo
de relaciones personales cercanas. Los grupos

celulares cumplen una quíntuple función:
# 1 — Adoración
La adoración acerca a la gente a Dios. Es por
medio de los cantos que cantan los miembros de la

célula que los no convertidos y los creyentes se

acercan a la presencia de Dios. Cuando alabamos a
Dios los visitantes descubren una avenida hacia
nuestro Salvador. “…partiendo el pan en las casas…
alabando a Dios, y teniendo favor con todo el
pueblo.” Hechos 2.46–47.
# 2 — Discipulado
Quienes asisten a la reunión semanal del
grupo celular aprenden las verdades bíblicas por
medio de la enseñanza del líder. ¡Incluso aprenden
cómo ser líderes ellos mismos! La célula es el mejor
taller de discipulado que existe, porque trasciende la
teoría y conlleva a la práctica: “Enseña a ellos las
ordenanzas y las leyes, y muéstrales el camino por
donde deben andar, y lo que han de hacer.” Éxodo
18.20. Enseñar y entrenar en la doctrina bíblica es
vital para que los miembros del grupo celular
desarrollen fuertes convicciones en la Palabra de Dios
y reproduzcan esas convicciones en otras personas.
Este es el modo en que el grupo cuida de las almas
ganadas, a la vez que gana a las perdidas.
# 3 — Ministerio
En el grupo celular se aprende a servir a los
demás, al conocerse las necesidades de cada uno al
orar por las peticiones. Esto es de gran ayuda para el
desarrollo del ministerio y la vida cristiana en general:
“…servíos por amor los unos a los otros. Porque
toda la ley en esta sola palabra se cumple: Amarás
a tu prójimo como a ti mismo.” Gálatas 5.13–14.
# 4 — Compañerismo
Desarrollar relaciones cercanas en nuestras
reuniones en la iglesia puede ser un desafío, en
particular cuando la congregación está creciendo. En
el contexto del grupo grande, las relaciones suelen ser

casuales.
El verdadero compañerismo se desarrolla en la

célula, donde aprendemos a relacionarnos con los
demás y a aceptarnos unos a otros con todos nuestros
errores, fallas y defectos —que salen a la luz
precisamente en la intimidad que hay en las casas.
Dios nos ha hecho para relacionarnos con nuestros
hermanos, y es importante aprender a hacerlo aquí; ya
que un día viviremos juntos en el Cielo, y por una
eternidad.
# 5 — Evangelismo
Los grupos celulares son la unidad básica para
el evangelismo en la iglesia. Cada miembro de la
célula debe comprometerse a invitar a sus amigos y
familiares a las reuniones celulares. En el Nuevo
Testamento, la mejor manera de ganar a los perdidos
era llevándolos a Jesús; o en el caso de la iglesia del
Nuevo Testamento, llevándolos a sus casas. Allí el
amor de Dios era evidente.
De la misma manera, el evangelismo en la

iglesia celular no consiste solo en decirle a la gente
que Dios les ama, sino en llevarlos adonde el amor de
Cristo es evidente, el Grupo Celular. El líder del Grupo
Celular debe ser consciente de los esfuerzos que los
miembros de su célula están haciendo para ganar a sus
amigos y vecinos. Él o ella debe alentar a cada
miembro a ser un evangelista. Él entiende que la
célula es donde las personas vendrán a Cristo y serán
atendidas hasta que se desarrollen y puedan
sostenerse por sí mismas. El objetivo es hacer por los
demás lo que otros han hecho por él. Aquí
nuevamente podemos apreciar que la evangelización
en el Grupo Celular ayuda a los creyentes a cumplir lo

que Cristo les encargó que hicieran, que es ir y hacer
discípulos de todas las naciones.
Importancia del Grupo Celular

Estamos convencidos de que el trabajo con
grupos celulares ha sido y continúa siendo una
estrategia poderosa que nuestro Señor Jesucristo
emplea para acercar al perdido. El grupo celular
ofrece una excelente oportunidad de cumplir con el
llamado divino. El grupo celular cumple así dos
funciones muy importantes para la multiplicación del
Reino de Dios. Una es que los bautizados sean
cuidados con amor para que no regresen al mundo; y
la otra es que los perdidos sean entrenados para
servir a Cristo.
La célula también permite a sus miembros

desarrollar los dones espirituales, ya que al estarse
edificando y ministrando unos a otros, ellos
descubren que tienen habilidades sobrenaturales que
Dios les ha dado por medio del bautismo del Espíritu
Santo; habilidades que ellos podrán ejercitar mediante
el servicio mutuo en el grupo celular. Por eso no
sorprende que en las actividades de las células haya
sanidad, liberación, edificación y conversiones; ya que
estas cosas son producidas por el poder del Espíritu
de Dios que actúa en la Iglesia.
Orden de la reunión del Grupo Celular

La célula puede abrirse con tres personas: el Líder,
el asistente y el anfitrión —quien presta su casa para la
reunión. Si el anfitrión sirve también como Líder o como
ayudante del Líder (asistente), el grupo puede incluso
comenzar con ellos dos. La reunión semanal de la
célula se realiza de la siguiente manera:
(1) QUINCE MINUTOS DE ALABANZA

Se hace el saludo de bienvenida y la oración, y
luego se entra al tiempo de las alabanzas. Es
importante que los cantos sean dirigidos por alguien
que pueda “entonar” (cantar) bien. Para que nuestros
amigos se sientan involucrados durante este tiempo,
podemos usar:
• Un proyector o pantalla, donde mostramos las

letras de los cantos.
• “Karaokes”, es decir, videos musicales que
muestran la letra de los cantos.
Éstos pueden reproducirse de Internet, por
ejemplo, del popular sitio YouTube®.
• Copias de las alabanzas, en papel o mediante
mensajes de texto o WhatsApp®.
(2) TREINTA MINUTOS DE ENSEÑANZA

La enseñanza es una parte central de la célula.
Las personas crecen a través de la enseñanza de la
Palabra. Ellos vienen a ser puestos bajo la
convicción del Espíritu Santo a través de la
enseñanza de la palabra de Dios. Se convierten por
la exposición de la Palabra. Con respecto a la
lección, recomendamos:
• Que el líder o maestro designado para

esto estudie bien la lección y evite la
monotonía de leer la misma durante la
reunión. La lección impresa sólo se usa
como guía.
• Que la lección se imparta en un máximo
de 30 minutos, para no cansar a las
personas; especialmente a las que vienen
por primera vez. Se debe respetar el tiempo

de los demás.
• Que se hagan preguntas durante la lección,
para motivar la participación.
En las últimas páginas de este manual

damos información sobre el libro de lecciones para
grupos celulares, así como otros recursos
disponibles de la ESTRATEGIA BREVE.
(3) DIEZ MINUTOS DE ORACIÓN

Se hará un llamamiento y se orará enfatizando
el tema de la lección. Se orará también por los
enfermos y otras necesidades que haya. Esta sección
es fundamental, porque sin dudas habrá respuestas
de Dios a las oraciones y se oirán testimonios de Su
poder.
(4) CINCO MINUTOS DE PLANEACIÓN

En esta parte, el líder planeará la
siguiente reunión del grupo celular,
pudiendo delegar en otras
personas lo siguiente:
• La bienvenida y la oración de inicio.
• El tiempo de la alabanza.
• La atención a los niños.
• La oración por las necesidades y la oración de
despedida.
• El refrigerio: “¿Qué haremos de refrigerio la
próxima semana?”
• La lección, cuando ya se
cuenta con un “timoteo” (un
ayudante o auxiliar) o con
miembros aptos para
enseñar.
(5) ANUNCIOS

Enseguida de la planeación se dan los anuncios

de la semana —los que el Pastor haya indicado— y se
hace una atenta invitación a la celebración dominical
de la iglesia, poniéndose todos de acuerdo para
asistir a la misma.
(6) REFRIGERIO/CONVIVENCIA
Esta es una parte muy importante de la vida del
grupo celular, ya que es durante la convivencia que los
lazos de compañerismo se estrechan y los convidados
se sienten aceptados. El tiempo del refrigerio es un
excelente rompe- hielo para los nuevos amigos y una
muy buena ocasión para pasar buenos momentos de
convivencia en el grupo celular. Puede practicarse
antes o después de la reunión. La duración variará en
función de la cultura y la química del grupo. Unos 30
o 40 minutos sería lo recomendable.
El factor amistad
La reunión celular es básicamente un grupo de
amigos que se reúnen semanalmente para conocer
más de Dios y crecer en la relación de unos con otros.
Por eso muchas iglesias llaman a sus células “Grupos
de Amistad”.
La amistad produce unidad y fortaleza, y por lo

tanto crecimiento. La amistad es clave para hacer
florecer los grupos celulares de la iglesia, pues al
hacernos amigos de las personas, podemos ganarlas
mucho más fácilmente para el Señor, ayudándolas a
perseverar en el Camino. Está comprobado que una
persona que ha llegado a la iglesia, pero no tiene
amigos allí, tiene mucho más probabilidades de dejar
de asistir que otras que sí tienen amigos. La amistad
es un antídoto contra la deserción, es decir, un gran
factor de retención en los grupos celulares; es un imán
que atrae a las personas.

La amistad satisface la necesidad de
aceptación. “Para alegrar el corazón, buenos
perfumes; para endulzar el alma, un consejo de
amigos.” Proverbios 27.9 DHH. Una de las cosas que
las personas más temen es ser rechazadas. Todos
necesitamos ser aceptados, y todos queremos
regresar a un lugar donde se nos acepta. La amistad
provee esa aceptación. Provee también un descanso
emocional a las personas. Cuando la carga de
alguien es compartida con alguien más, su peso se
reduce en gran medida: “En todo tiempo ama el
amigo y es como un hermano en tiempo de
angustia.” Proverbios 17.17. “Porque si caen, el uno
levantará a su compañero; pero ¡ay del que está
solo! Cuando caiga no habrá otro que lo levante.”
Eclesiastés 4.10.
Estas son algunas maneras de fomentar la

amistad entre los asistentes a la célula:
• Una llamada telefónica. Mediante esto,
mostramos un genuino interés por la persona
y por su amistad. No debemos mostrar
interés solamente en que ella asista a
nuestra reunión.
• Una invitación a comer. Comer juntos es una
de las expresiones más elevadas de la
comunión. La iglesia primitiva practicaba
esta forma de convivir (Hechos 2.46).
• Un paseo juntos. Actividades grupales fuera
de la reunión propician la unidad. Nuestros
nuevos amigos obtienen una alternativa a su
vida social y poco a poco se integran,
sintiéndose cómodos en la iglesia.
• Un convivio. Pasar el rato sin una razón
específica es una inversión de tiempo
significativa y productiva. La amistad fuera

del grupo celular profundiza relaciones y
acelera el proceso de conversión.
¿Quién es quién en el Grupo Celular?

Cada integrante de la célula debe conocer
sus funciones, para así participar efectiva y
activamente en la visión. A continuación, daremos
una breve descripción de las funciones de los tres
elementos clave del grupo celular, que son:
• El Líder
• El Asistente
• Los Miembros del Grupo
EL LÍDER
“Habiendo reunido a sus doce discípulos,
les dio poder y autoridad sobre todos los
demonios, y para sanar enfermedades. Y los envió
a predicar el reino de Dios, y a sanar a los
enfermos.” Lucas 9.1–2. “Pues no me envió Cristo a
bautizar, sino a predicar el evangelio; no con
sabiduría de palabras, para que no se haga vana la
cruz de Cristo.” 1ª Corintios 1.17.
Los líderes de los grupos celulares dirigen al
pueblo de Dios puesto bajo su cuidado. Los líderes
de los grupos celulares son pastores de un pequeño
grupo de creyentes que su Pastor Principal les ha
confiado. No son el Pastor, son los que asisten al
Pastor. Es decir, están ayudando al Pastor a cuidar a
las personas que Dios ha puesto bajo su
responsabilidad. El líder celular primero debe
asegurarse de que comprende la visión de su Pastor
y debe estar comprometido a transmitir esa visión al
pequeño grupo que se le ha confiado. Debe cuidarlos y
asegurarse de que sean fructíferos.
Predicar el evangelio del Reino de Dios es
para lo que Dios nos ha enviado. Los líderes de

grupos celulares tenemos esa misión. Es una tarea
ardua, pero ¡el Señor va con nosotros como
poderoso gigante, derribando todo argumento que
se levante contra Su conocimiento! Para ser eficaz
en su función, el líder del Grupo Celular deberá
cumplir con las responsabilidades que mostraremos
mediante el acróstico C. A. F. E.
Conexión / Evangelismo
• Conectar a la gente del Día del Amigo
con el grupo celular.
• Conectar con una célula a aquellos que
sólo asisten al templo.
• Motivar al asistente y al anfitrión a
llevar amigos, vecinos y familiares a la
célula.
• Salir con los miembros del grupo a
invitar personas; por calles, plazas,
lugares públicos y otras casas.
Administración
• Planificar con cuidado la reunión celular
de cada semana, para que tenga éxito.
• En la reunión, realizar los seis pasos
que hemos presentado en el capítulo
anterior.
• Involucrar en el trabajo de la célula a la
mayor cantidad posible de miembros.
• Enseñarle a su gente a rendir cuentas.
• Ser responsable,
presentando en
tiempo y forma los
reportes de su célula
a la autoridad
superior que
corresponda.

Fidelidad
• Ser fiel a su Pastor y líderes.
• Tener un buen testimonio dentro y
fuera de la iglesia.
• Asistir fielmente a la reunión, siendo
ejemplo en el llevar almas al mismo.
• Estar dispuesto a recibir críticas y quejas.
Espiritualidad / Evangelismo
• Amar a todos.
• Tener una vida de oración y santidad.
• Establecer
relación de mentor-
discípulo con
aquellos miembros
de la célula que
tienen llamado al
liderazgo.
• Tener mucha paciencia con la gente.
• Ser firme, pero a la vez tolerante.
Proverbios 24.6: “Porque con ingenio harás la guerra, y en la
multitud de consejeros está la victoria.”
Lucas 9.56: “Porque el Hijo del Hombre no ha venido
para perder las almas de los hombres, sino para
salvarlas. Y se fueron a otra aldea.” Juan 12.47: “Al que
oye mis palabras, y no las guarda, yo no le juzgo;
porque no he venido a juzgar al mundo, sino a salvar
al mundo.” 1ª Corintios 1.21: “Pues ya que en la
sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios
mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los
creyentes por la locura de la predicación.” 2ª Corintios
12.15: “Y yo con el mayor placer gastaré lo mío, y aun
yo mismo me gastaré del todo por amor de vuestras
almas, aunque amándoos más, sea amado menos.” 1ª
Timoteo 1.15: “Palabra fiel y digna de ser recibida por

todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a

los pecadores, de los cuales yo soy el primero.”
Ser líder de Grupo Celular es una tarea hermosa

que nos ha sido encomendada por el mismo Señor
Jesucristo; tarea que requiere que nos mantengamos
“volando con dos alas”, y que enseñemos a cada
miembro del grupo a hacer lo mismo. ¿Qué significan
las “dos alas”? Un ala representa el cuidar a los
ganados y la otra el ganar a los perdidos. Líderes
celulares enfocados en estas dos cosas traerán como
resultado un gran avivamiento en la iglesia local, en el
Reino de Dios, con una gran multiplicación y
consolidación de discípulos.
EL ASISTENTE
El asistente de la célula —llamado también
“timoteo”— es el colaborador más inmediato del líder.
El asistente es un líder en potencia, alguien que se está
preparando para servir como líder en la obra celular. Él
o ella debe:
Amar a Dios y a la gente

Al igual que su Líder, tener pasión por los
perdidos y ser un evangelista, un ganador de almas.
Debe modelar lo que significa ser una persona
enfocada en la misión de la iglesia, es decir, ganar a
los perdidos y hacer discípulos. Ser un siervo
• El progreso del asistente en la
estructura del grupo celular
depende en gran medida de que
aprenda la importancia de ser un
siervo. Los que sirven
ascienden; mientras que los que
se sirven a sí mismos, no.
• Estar dispuesto a servir cuando se le llame

para hacerlo.
• Esforzarse por ganar ese grado honroso
que significa llegar a ser Líder en el futuro.
• Ser una persona dispuesta a colaborar,
ayudar y aprender.
• Ser enseñable. El asistente
debe ser enseñable. Debe
buscar la dirección e
instrucción de su líder de
grupo celular.
• Capacitarse para ser un servidor excelente.
Trabajar bien en equipo

• Reconocer autoridad,
porque así es como se
consigue un carácter
maduro, reconocible por el
respeto y la obediencia al
superior.
• Tener compromiso, entrega y buena
disposición en las tareas que se le
delegan.
• Los grandes líderes son líderes
obedientes. Aquellos que
busquen liderar equipos primero
deben ser abiertamente jugadores
de equipo. Deben ser geniales
siguiendo las instrucciones.
• El Auxiliar debe ser promotor de la unidad
del grupo celular.
• Debe trabajar para que los
miembros del grupo
celular se sientan como un
equipo y conectados a la
visión más amplia de la
iglesia; motivar a los
demás con su actitud.
Ser fiel
• El Asistente debe ser fiel a su iglesia
local, su liderazgo y visión.
• Debe cumplir con
todas las tareas que le
fueron asignadas de
manera oportuna, y
hacerlo con
excelencia.
• Debe reconocer y estar sujeto a
la autoridad. Así es como logrará
construir un carácter,
evidenciado por su respeto y
obediencia a su superior.
LOS MIEMBROS
La Gran Comisión dada a todos nosotros es ir y

hacer discípulos: “Por tanto, id, y haced discípulos
a todas las naciones, bautizándolos en el nombre
del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.” Mateo
28.19. La Iglesia existe para ganar el mundo para
Cristo. Esa es su tarea más apremiante. Podemos
realizar todo tipo de eventos que no generan
crecimiento, y pensar que con ellos agradamos a
Dios; pero no podemos perder de vista que el
propósito principal por el cual vino Jesucristo es
salvar al ser humano.
Proverbios 11.30: “El fruto del justo es árbol
de vida; y el que gana almas es sabio.” Todo
miembro de la iglesia debe estar involucrado en el
evangelismo y comprometerse con un Grupo Celular.
Y todo aquel que participa de una célula debe
mantener siempre en mente que ganar almas para
Cristo es la tarea principal del Reino de Dios. ¡El que

gana almas es sabio! Como miembros del grupo
celular, no tenemos un trabajo más importante que
ese; ganar almas para expandir el Reino de Dios. La
Iglesia de Jesús existe para exaltarle a Él, equipar a los
santos y evangelizar al mundo.
NOTA IMPORTANTE: Todos los miembros
del grupo celular deben entender y estar
comprometidos con el Ciclo NACER y el proceso de
discipulado. Si el propósito y el proceso del Ciclo
NACER es claro, los miembros estarán motivados
para ayudar a los nuevos conversos a moverse a
través de todas las etapas del Ciclo y alegrarse cuando
se conviertan en miembros establecidos de la iglesia.
Sin una clara comprensión y compromiso con el Ciclo
NACER, el grupo celular puede llegar a ser no
productivo. Las gente se motiva por el éxito y el
progreso. Cuando el grupo celular capta la visión y
comienza a ver a sus amigos y familiares inconversos
moverse a través del proceso NACER y finalmente
entregar sus vidas a Cristo, los resultados los
mantendrán motivados para continuar trabajando. Los
grupos estancados e improductivos mueren porque el
sacrificio y el esfuerzo necesarios para mantener un
grupo celular parece inútil.
VI. La Escuela de Discipulado

El tercer componente del ciclo Nacer es
Discipulado Nivel 1 Nacer. Es importante notar que,
durante el primer año de la vida del creyente como
cristiano, hay cuatro niveles de Discipulado en la
Estrategia de Jesús. El Nivel 1 está relacionado con el
nuevo nacimiento, mientras que los otros tres se
enfocan en otras áreas del desarrollo espiritual.

Discutiremos eso después en este manual. Los

cursos de discipulado de la Estrategia Misión Almas
están enfocados y orientados hacia un propósito. La
Estrategia de Misión Almas insiste que la tarea de la
Iglesia no sólo es enseñar al pueblo sobre
ministerios, sino también hacerlos miembros
plenamente productivos de la Iglesia.
2ª Timoteo 2.2: “Lo que has oído de mí ante

muchos testigos, esto encarga a hombres fieles
que sean idóneos para enseñar también a otros.”
Hechos 6.1: “En aquellos días, como creciera el
número de los discípulos…” Hechos 6.7: “Y crecía la
palabra del Señor, y el número de los discípulos se
multiplicaba grandemente…” Mateo
28.19: “…id, y haced discípulos a todas las
naciones…”
La tarea principal de la Estrategia de Mision Almas es

recobrar en la Iglesia el sacerdocio de todos los
santos a través del discipulado; es decir, que a través
de la Estrategia de Jesús la Iglesia deje de llenarse
sólo de creyentes, y que éstos se conviertan en
verdaderos discípulos de Jesús. A eso nos
dedicamos en la Estrategia de Jesús.
Hechos 6.7: “Y crecía la palabra del Señor, y

el número de los discípulos se multiplicaba
grandemente…” La Iglesia necesita enfocarse en hacer
discípulos, no sólo creyentes; y para ello urge un cambio
de paradigma en nuestro sistema educativo. Con
frecuencia, el conocimiento que impartimos en la
iglesia local no sirve para formar discípulos
ganadores de almas, ni tiene un propósito claro.
Las escuelas dominicales actuales ya no

cumplen la función para la que fueron creadas, que era

ganar almas a través del enseñar a la gente a leer y
escribir. Roberto Raikes (1735–1811), conocido como el
“Padre de la Escuela Dominical”, vivía en Gloucester,
Inglaterra y como cristiano anhelaba servir a Dios. En la
segunda mitad del siglo XVIII, cerca del año 1780,
empezó su trabajo al servicio de la comunidad. Él y
William Fox diseñaron los propósitos de la Escuela
Dominical:
• Prevenir el vicio.
• Animar la laboriosidad y las virtudes.
• Disipar la oscuridad de la ignorancia.
• Difundir la luz del conocimiento.
• Ayudar al hombre a entender su lugar
social en el mundo.
La ESTRATEGIA BREVE establece la Escuela de

Discipulado para ofrecer una educación que conduce al
nuevo creyente a través del crecimiento, desde que
nace de nuevo hasta que se multiplica o comienza a
ganar almas; para que tenga una misión en el mundo
y un ministerio en la Iglesia.
La Escuela de Discipulado de la Estrategia

Misión Almas consta de cuatro niveles para desarrollar
secuencialmente al discípulo, hasta llevarlo a su
objetivo. Estos cuatro niveles son: (1) Nacer, (2)
Crecer, (3) Madurar y (4) Multiplicar.
Cómo discipular a las personas
Reunión del grupo celular. Se hará esta

reunión un día a la semana, y se llevarán a la misma
las almas que queremos ganar para Cristo,

procurando hacer amistad con ellas.
Discipulado Nivel 1 Nacer. El líder del grupo

celular aparta otro día de la semana para discipular en
esa misma casa, usándola como un aula de la Escuela
de Discipulado. En esta reunión no se seguirá el formato
de una célula, sino que se dictarán las lecciones de la
Escuela de Discipulado Nivel 1, Nacer. Cuando la iglesia
aún es pequeña, el líder del Grupo Celular tiene estas
dos tareas: dirigir la reunión semanal del grupo y dar
las enseñanzas de la Escuela de Discipulado Nivel 1
Nacer (Encuentre información sobre el libro de
Discipulado Nivel 1 Nacer y otros recursos de
ESTRATEGIA BREVE en las últimas páginas de este
manual).
El líder también debe animar a los miembros
del grupo celular a traer a sus amigos a la reunión.
Debe trabajar para lograr que todos los miembros se
activen en ganar almas, y para que a través del
Discipulado Nivel 1 Nacer, las almas alcancen el
nuevo nacimiento. Cuando en el grupo ya se cuenta
con más miembros comprometidos, se nombran
nuevos maestros que llevan a los discípulos a los
demás niveles: Crecer, Madurar y Multiplicarse.
Se deben celebrar Ciclos de Evangelización en

la célula cada cuatro meses. El propósito de esto es
traer almas nuevas e integrarlas en el grupo celular y
en la Escuela de Discipulado que funciona en la misma
casa de la célula. Por medio del cumplimiento del
primer propósito de la Escuela de Discipulado, que
es lograr que las almas nazcan de nuevo a través del
bautismo en agua en el nombre de Jesús, podemos
obtener para la gloria de Dios una gran cosecha de
almas cada cuatro meses, es decir tres veces por año.

Iniciando la Escuela de Discipulado
Marcos 8.34: “Y llamando a la gente y a sus

discípulos, les dijo: Si alguno quiere venir en pos
de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y
sígame.”
Formar verdaderos discípulos es la tarea

principal de la Estrategia Misión Almas. Podremos
traer a las personas a través de campañas, días del
amigo, cultos de evangelización, etc. pero sólo por
medio del discipulado a la manera de Jesús, ellas
serán conservadas sirviendo al Señor.
Por eso, en la Estrategia Misión Almas nos

dedicamos a cumplir la Gran Comisión que Jesús nos
ha dejado: ir y hacer discípulos. Tres son los pasos
básicos para que alguien llegue a ser un discípulo:
• Ser bautizado en agua: “De cierto, de cierto te digo,
que el que no naciere de agua…” Juan 3.5.
• Ser bautizado en Espíritu: “Vosotros seréis
bautizados con el Espíritu Santo dentro de no
muchos días.” Hechos 1.5.
• Dar fruto para Dios —ganar almas: “El que fue
sembrado en buena tierra, éste es el que oye y
entiende la palabra, y da fruto; y produce a
ciento, a sesenta, y a treinta por uno.” Mateo
13.23.
Creer en Jesucristo nos salva, ser discípulo es dar

fruto. Si dejamos a los nuevos miembros creyendo
solamente, y no aplicando la Palabra de Dios en sus
vidas, seguiremos teniendo muchos “bebés”
espirituales, que siempre necesitarán de otros para
vivir su “vida cristiana”; y en el momento en que no
haya alguien para empujarles, dejarán de vivirla. Pero
si se convierten en discípulos, no tendremos que

seguir manteniendo “bebés”, sino que tendremos
verdaderos guerreros del Reino de Dios en la Iglesia.
Niveles de la Escuela de Discipulado

Para hacer el seguimiento formativo de los
discípulos, cada grupo celular estructurará la Escuela de
Discipulado en cuatro niveles; siguiendo los
Propósitos de la Estrategia Misión Almas. Si la iglesia
aún es pequeña, se trabajará sólo el Nivel 1 Nacer,
hasta lograr el crecimiento apropiado para poder
establecer los otros tres niveles de la Escuela de
Discipulado. En la ESTRATEGIA BREVE, el mismo
líder de grupo celular se hace cargo de la Escuela de
Discipulado. El líder deberá esforzarse y dedicar dos
días a la semana a la célula. Un día él o ella dirigirá la
reunión del grupo celular y otro día dará la clase de
Discipulado Nivel 1 Nacer. Del mismo modo si se trata
de una obra nueva o una misión. El encargado o
responsable de la misma será quien lleve adelante la
célula y también el que se haga cargo de las
enseñanzas de Nivel 1 Nacer.
Los siguientes tres niveles —Crecer, Madurar y
Multiplicarse— se irán implementando a medida que la
iglesia vaya teniendo el crecimiento necesario para
que se establezca la Escuela de Discipulado en todos
sus niveles. Pero hasta tanto eso suceda, se trabajará
en lo básico, que es el Nivel 1 Nacer, para preparar a
la gente para los bautismos. Veamos de qué manera
y para qué funciona cada nivel de la Escuela de
Discipulado.

NIVEL 1 NACER. “Respondió Jesús y le dijo: De

cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de
nuevo, no puede ver el reino de Dios.” Juan 3.3. En
este nivel, tenemos 8 lecciones de doctrinas básicas
para ser enseñadas a los discípulos antes de ser
bautizados. El objetivo de este curso es poner las
bases para que el nuevo convertido conozca los
rudimentos de la vida cristiana, y sea debidamente
preparado para el bautismo. La meta es la

conversión. Dictándose una lección por semana, el

curso durará ocho semanas, o sea dos meses.
NIVEL 2 CRECER. “Hasta que todos

lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento
del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de
la estatura de la plenitud de Cristo.” Efesios 4.13. En
este nivel presentamos al recién bautizado 14
lecciones, las cuales le ayudarán a desarrollar más
profundamente su nueva relación con Dios, así como
su relación con los demás miembros del Cuerpo de
Cristo. En el Nivel 2 Crecer, enseñamos disciplinas
cristianas y otros temas que son de la mayor
importancia para la vida espiritual del discípulo, a fin
de que pueda crecer sano en el Reino de Dios y
convertirse en un cristiano lleno del Espíritu Santo; un
verdadero discípulo del Señor.
NIVEL 3 MADURAR. “Lo que has oído de mí

ante muchos testigos, esto encarga a hombres
fieles que sean idóneos para enseñar también a
otros.” 2ª Timoteo 2.2. En este nivel tenemos
nuevamente 16 lecciones, cuyo objetivo es que el
creyente madure en sus responsabilidades en el
Reino de Dios; comenzando a servir y dando sus
primeros pasos como anfitrión e incluso como
Asistente de un grupo celular. Mediante un
entrenamiento teórico– práctico, él aprenderá a ser un
sacerdote del Reino de Dios, un ganador de almas
comprometido con su grupo celular y con su iglesia.
NIVEL 4 MULTIPLICAR. “Y crecía la palabra

del Señor, y el número de los discípulos se
multiplicaba grandemente en Jerusalén; también
muchos de los sacerdotes obedecían a la fe.”
Hechos 6.7. Después de haberse envuelto en el

servicio en una célula, el discípulo inicia la

preparación para llegar a ser un líder de grupo
celular. En el Nivel 4 Multiplicar, damos 20 lecciones
que proveen el entrenamiento básico para la
multiplicación, conectando al discípulo con la visión de
su iglesia, y enseñándole paso a paso cómo funciona la
Estrategia de Jesús con sus engranes y procesos.
La Escuela de Discipulado es clave para el éxito y

el crecimiento de la Iglesia local. Esta escuela, que en
realidad es un proceso de hacer discípulos, debe ser
entendida por toda la iglesia para que sea
completamente exitosa. La congregación necesita
entender que la iglesia local ya no está dando
estudios bíblicos solo por el simple hecho de
aprender. La iglesia está llevando a las personas a un
proceso con el propósito de producir discípulos que
estén capacitados para el ministerio y para dar
frutos.
Encuentre información acerca de los libros de

Discipulado Niveles 1, 2, 3 y 4, así como otros recursos
disponibles de ESTRATEGIA BREVE en las últimas
páginas de este manual.
VII. Jesús y el discipulado

Jesús se comprometió a hacer discípulos. Él
vio el proceso de discipulado como central para el
avance del Reino. Por eso enseñó a sus discípulos
que también deberían discipular a otros. Nunca en la
historia del cristianismo ha habido tantas personas
convirtiéndose como en nuestro tiempo. Cada
semana, miles y miles de personas creen en Cristo y
se bautizan. Al mismo tiempo y según varias estadísticas,
la tasa de deserción es muy alta. Los cristianos se están
alejando de su fe en un porcentaje muy alto. ¿Por qué?

Un factor significativamente contribuyente debe ser
que nunca se convirtieron en discípulos. Creyeron en
el Señor, pero nadie se tomó el tiempo para
discipularles.
¿Cómo discipuló Jesús?
(1) JESÚS MODELÓ Y ENSEÑÓ A SUS

DISCÍPULOS CÓMO VIVIR Y MINISTRAR
Hechos 1.1: “…Jesús comenzó a hacer y

enseñar…” Lucas narra en este versículo que Jesús
hacía y enseñaba, es decir, Su discipulado era tanto
teórico como práctico. Jesús enseñaba lo que vivía. El
mejor discipulado es el ejemplo. Una importante lección
es que Jesús hacía discípulos en cercanía. La gente
hace lo que nos ve hacer, no solo lo que le decimos que
haga. La más grande enseñanza del líder es su
ejemplo. Los doce discípulos de Jesús fueron
entrenados y discipulados por tres años y medio,
mientras el Señor vivía entre ellos. Jesús les instruía en
la Palabra y gracias a eso, la convicción de ellos se
hizo muy fuerte; tanto así que la mayoría terminó
dando la vida por Jesús.
La capacitación de la mayoría de los miembros

de iglesias tradicionales se ha limitado a dentro de las
cuatro paredes del templo. El Discipulado se ha
separado de las necesidades actuales de los no
convertidos; ha sido teórico y no práctico. Ese tipo de
educación no los ha llevado a descubrir y a vivir su misión
en el Reino de Dios. La iglesia necesita equilibrio.
Necesitamos ofrecer a nuestros miembros ministerios,
tanto dentro de la iglesia como en el campo de labor.
Nuestro enfoque debe ser que cada creyente
recupere el sacerdocio de los santos.
En la ESTRATEGIA BREVE, la parte formativa del

discípulo se produce no sólo en el aula de clases, sino
también viendo al maestro realizar el trabajo. Hechos
1.1: “Hablé acerca de todas las cosas que Jesús
comenzó a hacer y a enseñar…” Hechos 4.4:
“…oísteis de mí…” Después de ser ejemplo al discípulo,
hay que saber transmitirle el conocimiento. Se deben
poner fundamentos y conocimiento de la Palabra en los
nuevos creyentes. Esto es fundamental para la
madurez de ellos, para ayudarles a que se conviertan
en hombres y mujeres ganadores de almas.
(2) JESÚS DIO MANDAMIENTOS A SUS

DISCÍPULOS
Juan 14.21: “El que tiene mis mandamientos, y

los guarda, ése es el que me ama…” Los
discípulos son guardadores de mandamientos.
Jesús les dio a sus discípulos mandamientos para
guardar. El Discipulado tiene que ver con
mandamientos, doctrinas y disciplinas.
La teología de muchos grupos hoy, busca

“liberar” al nuevo creyente de tener que soportar las
disciplinas cristianas; afirmando que las mismas
convierten la vida del creyente en algo legalista y
farisaico. Se argumenta con frecuencia que “la
salvación es por gracia”, que las obras no son
necesarias para ser salvo, y que por lo tanto es inútil
que el creyente haga cualquier intento de obrar.
A partir de los años 80 y hasta ahora, esa

forma de pensar ha sido la causante de que muchos
cristianos carezcan de la formación y los valores
espirituales necesarios, así como de las bases para

una vida espiritual duradera; y ha provocado que
muchos en la iglesia vivan más como mundanos que
como cristianos: “Mi pueblo fue llevado cautivo,
porque no tuvo conocimiento.” Isaías 5.13. Si bien
es cierto que la salvación es un regalo de Dios y que
no se puede comprar con nada que hagamos,
también es cierto que las disciplinas o mandamientos
del Señor son necesarios, no para ser salvos, pero sí
como una salvaguarda del mundo, como una zona de
seguridad para nuestra vida cristiana. Efesios 2.20:
“Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y
profetas, siendo la principal piedra del ángulo
Jesucristo mismo.” Las buenas obras en el creyente
no son para hacerlo salvo, pero sí son el resultado de
haber sido salvo. El creyente debe convertirse en un
discípulo de Jesús, y su vida debe ser una constante
búsqueda por agradar a Dios.
(3) JESÚS HIZO DISCÍPULOS AL HABLARLES

VERDAD
Hechos 1.3: “A quienes también, después

de haber padecido, se presentó vivo con muchas
pruebas indubitables, apareciéndoseles durante
cuarenta días y hablándoles acerca del reino de
Dios.”
Mucho se comunica simplemente hablando:

amor, ira, pasión, desilusión, esperanza y muchas otras
cosas. La palabra “hablar” en este texto no es lo
mismo que la palabra “mandar” del párrafo anterior.
La palabra hablar es más amplia en su significado. Es
relacional. Esta palabra fue cuidadosamente elegida
por Lucas para comunicar la idea de que, durante los
cuarenta días posteriores a su resurrección, Jesús no
solo les estaba enseñando sino que también

fortalecía su relación con sus discípulos.
Aún después de Su resurrección, el Señor

continuó impartiéndoles discipulado, enseñándoles la
importancia de servir en Su Reino. El Reino de Dios es
el mensaje central del Evangelio de Jesús. No se puede
entender el Evangelio
—las buenas nuevas de Salvación— sin entender el
cambio de vida que ello implica. Se trata de una forma
de vida alineada con el Reino de Dios; un resultado de
haber sido trasladados del reino de las tinieblas al
Reino de los Cielos, en el cual nos hemos convertido
en súbditos del Rey, para ya no hacer nuestra propia
voluntad sino la voluntad de Aquel que nos tomó por
soldados.
(4) JESÚS EMPODERÓ A SUS DISCÍPULOS
Hechos 1.4: “Y estando juntos, les mandó

que no se fueran de Jerusalén, sino que
esperasen la promesa del Padre…” Todo lo que
Jesús hizo con sus discípulos fue con el propósito de
liberarlos para un ministerio significativo. No es
suficiente enseñar y entrenar a un discípulo cristiano;
él debe ser empoderado y luego enviado. En algún
momento, la persona que discipula a otra lleva al
discípulo a una experiencia de empoderamiento,
Luego, debe delegarle responsabilidades
significativas. Todo el entrenamiento ha sido para
este fin. El ser lleno del Espíritu Santo, junto con el
proceso de discipulado, es nuestro empoderamiento.
“Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y
comenzaron a hablar en otras lenguas, según el
Espíritu les daba que hablasen.” Hechos 2.4. Sin el
poder del Espíritu Santo operando en la vida del
creyente, éste no tendrá las fuerzas para ser un

verdadero testigo de Jesucristo: “Pero recibiréis
poder, cuando haya venido sobre vosotros el
Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén,
en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la
tierra.” Hechos 1.8
Notas

SECCIÓN 2
ELEMENTOS
IMPORTANTES
A CONSIDERAR

I. El Pastor, pieza clave para

el éxito
Jeremías 3.15: “Os daré pastores según mi

corazón, que os apacienten con ciencia y con
inteligencia.” El papel del Pastor local en el desarrollo
de la ESTRATEGIA BREVE es determinante. A
continuación, veremos las funciones más importantes
del Pastor en este modelo celular.
El Pastor provee visión
El compromiso con la visión comienza con el

Pastor. El Pastor debe comprender claramente la
visión de la Estrategia Misión Almas para ser el
principal lanzador de la visión. Debe dominar la
mecánica del modelo. La visión es como una semilla
viva: para que crezca en la vida de la iglesia, debe
plantarse en los corazones de los líderes. Esta es la
tarea principal del Pastor; recibir la visión y transmitirla
claramente a sus líderes. Sin la dirección del Pastor,
las células se convierten en un programa más dentro
de la iglesia y no en el elemento principal de la
iglesia.
El Pastor es el comunicador principal de la

visión. El éxito del programa dependerá de cuán
efectivamente haga él este trabajo. El Pastor debe vivir
abierta y claramente su visión, y transmitirla con pasión
a sus ovejas. Trasmitir una visión en forma clara es
como encender una gran fogata en medio de una
noche oscura. Las personas alrededor son atraídas a
la fuente de luz y calor. Si el Pastor logra encender la
visión, la gente a su alrededor se aproximará y
conseguirá ver con claridad lo que está delante. La

pasión y el enfoque del Pastor iluminan a la
congregación. La gente capta con nitidez lo que tiene
el Pastor. Ven lo que ve el Pastor y hacen lo que hace
el Pastor. El comunicador principal de la visión es el
Pastor.
El pastor debe pensar en forma creativa acerca

de cómo comunicar efectivamente la visión. Debe
incluirla en sus sermones con la mayor frecuencia
posible. Debe reconocer a los líderes celulares que
tienen bautismos y aquellos que completan el proceso
de Discipulado. Puede colocar carteles, pancartas y
otros materiales para mantener la visión ante las
personas. Debe presentar constantemente la visión a la
congregación. La gente, al hablar con el Pastor, debería
escuchar y llenarse de la visión de la iglesia.
El Pastor demuestra compromiso
El Pastor debe involucrase con las células.

Esto es vital porque en una iglesia celular, la base y la
vida de la iglesia son los grupos pequeños. Las
personas siempre se interesarán en lo que el Pastor
se interese; por lo tanto, el Pastor debe estar
involucrado plenamente en los grupos celulares y
tener pasión por lo que se está haciendo en ellos. El
compromiso en la iglesia comienza en el Pastor. Si un
pastor no se involucra y apasiona, los líderes tampoco
lo harán. La delegación es un principio importante en
las iglesias celulares, pero la visión y el ejemplo no
pueden ser delegados. Lo mejor y lo primero que el
Pastor debe hacer para ser ejemplo de compromiso
en este aspecto, es dirigir él mismo un grupo celular.

¿De qué otras formas se involucra el Pastor

en el trabajo celular de su iglesia? Impartiendo la
visión a sus líderes en la reunión con ellos; orando
por ellos para que sean ungidos con el poder de
Dios; capacitándoles para el trabajo que deben
realizar; coordinando y organizando el material de
estudio y administrativo que se emplea en las
células; visitando con frecuencia las células; y
pidiendo cuentas periódicamente a sus líderes sobre
el trabajo que realizan.
El Pastor busca el crecimiento personal
El Pastor debe preocuparse por su desarrollo

personal. Esto es muy importante en toda iglesia, y
especialmente en aquella que ha abrazado el modelo
celular. Una congregación nunca crecerá más de lo
que crece su pastor; por lo tanto, él debe dedicar
tiempo al estudio y la preparación. Es muy bueno y
recomendable para el crecimiento de las iglesias
locales que éstas inviertan recursos en la preparación
de sus pastores.
El Pastor y su relación con Dios
La vida de oración del Pastor es una clave

fundamental de la Estrategia Misión Almas. El
Pastor debe crecer continuamente en su vida de
oración. Su vida espiritual es crucial para el éxito de la
visión. Los feligreses deben tener la confianza de que
su Pastor es un hombre de oración y consagración.
Él no puede exigir a los demás algo que no está
haciendo personalmente. Es importante saber que la
congregación generalmente no progresará más allá
de la espiritualidad del Pastor. Alrededor del mundo,
los pastores de las iglesias celulares que crecen son

hombres de oración; hombres apasionados por Dios
y por los perdidos.
II. La importancia del trabajo

en equipo
El trabajo en equipo es fundamental para
lograr algo grandioso. John Maxwell dice que el
trabajo en equipo hace que el sueño funcione. La
verdad es que las iglesias en crecimiento son
excelentes para formar equipos. Cuanto mejor sea el
equipo, mayor será el potencial de crecimiento. Las
iglesias tradicionales acuñaron el paradigma de que
sólo el Pastor puede cuidar al pueblo y tratar sus
asuntos; y que ningún otro miembro de la iglesia se
debe entrometer en dicha área, pues pertenece a la
órbita pastoral exclusivamente. Pero, ¿qué dice la
Biblia sobre esto? La historia del consejo de Jetro a
Moisés es esclarecedora.
“Desfallecerás del todo, tú, y también este

pueblo que está contigo; porque el trabajo es
demasiado pesado para ti; no podrás hacerlo tú
solo.” Éxodo 18.18.
Dios le enseñó a Moisés, a través de Jetro, la

importancia de la delegación proporcional. Cuidar de
una congregación en crecimiento, no es trabajo de un
solo hombre. Dios ha provisto líderes para ayudarlo.
La delegación tenía que ser proporcional al número
de personas necesitando atención.
Por medio de Jetro, Dios reveló a Moisés que la
tarea de cuidar al pueblo no era exclusiva de él, sino

que otros hombres bien entrenados en la Palabra

podían ejercerla también, a fin de que la gente no
desfalleciera esperando que un solo hombre les
pudiera atender.
“Ellos juzgarán al pueblo en todo tiempo; y

todo asunto grave lo traerán a ti, y ellos juzgarán todo
asunto pequeño. Así aliviarás la carga de sobre ti,
y la llevarán ellos contigo. Si esto hicieres, y Dios
te lo mandare, tú podrás sostenerte, y también
todo este pueblo irá en paz a su lugar. Y juzgaban
al pueblo en todo tiempo; el asunto difícil lo traían
a Moisés, y ellos juzgaban todo asunto pequeño.”
Éxodo 18.22,23,26.
El principio que la Palabra nos enseña aquí es

que la tarea pastoral se tiene que compartir. Para eso,
Dios ha provisto un Cuerpo que es su Iglesia. El
trabajo en la obra de Dios es muy arduo e intenso, y
ningún hombre lo podría realizar solo. Es por ello por
lo que nuestro Señor Jesucristo dio diversidad de
dones a su Iglesia, para que todo el cuerpo funcione,
cada miembro en su lugar; y así podamos realizar la
tan importante misión de ir “…por todo el mundo y
predicar el evangelio a toda criatura.” Marcos
16.15.
Cuando los hebreos salieron de Egipto
liderados por Moisés, era tan grande el número de
personas y tanto el trabajo que Moisés debía
desempeñar, que Dios tuvo que enviarle a Jetro para
que le enseñara los principios de la delegación de
responsabilidades y tareas, es decir, el trabajo en
equipo: “Viendo el suegro de Moisés todo lo que él
hacía con el pueblo, dijo: ¿Qué es esto que haces
tú con el pueblo?” Éxodo 18.14.
Jetro era un sacerdote de Madián, que pudo

haber aprendido el principio de delegación en su orden
religioso y Moisés necesitaba instrucción. Durante los
últimos cuarenta años había vivido como pastor. Para
liderar a este nuevo nivel, tuvo que aprender nuevas
maneras de administrar. Dirigir más de un millón de
personas, a diferencia de unos pocos cientos de
ovejas, requería un cambio de paradigma de
liderazgo. Si nuestro deseo es hacer crecer la iglesia,
tendremos que cambiar nuestra forma de pensar
sobre el liderazgo de la iglesia. La autoridad de los
pastores debe delegarse de manera proporcional al
tamaño del grupo que dirige.
Al ser cuestionado el modelo de liderazgo que

ejercía, Moisés respondió a Jetro diciendo: “…el
pueblo viene a mí.” Éxodo 18.15. Esta filosofía de
liderazgo impide la delegación y la participación del
cuerpo de Cristo, ya que tiende a centrar la autoridad
en una sola persona.
Jetro pudo ver que Moisés estaba

distorsionando la naturaleza de su llamado divino
como cabeza de Israel, ejerciendo un modelo de
liderazgo autocrático. Moisés estaba fracasando en
su función porque en realidad sólo el modelo
teocrático —el modelo provisto por Dios— funciona
en el liderazgo de Su obra.
El gobierno teocrático
La palabra teocrático proviene de los vocablos
griegos Teos (Dios) y kratos (gobierno). Teocracia se
puede definir como el gobierno de Dios. Así que una
sociedad o grupo teocrático es aquel donde la

autoridad emana de Dios; un grupo que funciona bajo

el orden divino. En la Iglesia, este tipo de gobierno no
es elegido por gustos pastorales, sino con base en los
dones ministeriales. El Señor es quien da los
ministerios. El Pastor sólo los administra. Por ello, la
Iglesia debe establecer sus autoridades según los
dones dados por Dios: “Hay diversidad de dones,
pero el Espíritu es el mismo. Y hay diversidad de
ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay
diversidad de operaciones…” 1ª Corintios 12.4–6.
Jetro presentó con habilidad este concepto,
subrayando a Moisés las consecuencias del método
de liderazgo que él había escogido para gobernar a
Israel. Jetro le dijo: “No está bien, lo que haces.
Desfallecerás del todo, tú, y también este pueblo
que está contigo…” Éxodo 18.17–18. ¡Qué difícil
suele ser para nosotros los líderes escuchar palabras
así! Pero al parecer para Moisés no lo fue, sino que él
decidió aprender de Jetro esta importante lección.
Los Apóstoles entendieron también que el

trabajo del reino de Dios no es para que unos pocos
lo hagan. Hechos 6.3 dice: “Buscad, pues,
hermanos, de entre vosotros a siete varones de
buen testimonio, llenos del Espíritu Santo y de
sabiduría, a quienes encarguemos de este
trabajo.” Un solo hombre jamás podrá suplir todas las
necesidades que hay en un cuerpo local de creyentes. Por
lo tanto, descentralizar el gobierno de la iglesia local es muy
importante.
Nuestras iglesias locales han mantenido en

general un modelo eclesiástico establecido desde
hace décadas; uno de tipo conservador, con presencia
de fraternidades que se organizan por género, estado
civil y edad —los llamados departamentos de varones,
señoras, jóvenes e intermedios; así como un cuerpo

ministerial local que sirve de ayuda al Pastor
conformado por ministros y diáconos. Por mucho
tiempo hemos operado con base en estos grupos que,
claro está, han sido de ayuda para la Iglesia, pero hoy
presentan el problema de que trabajan casi
exclusivamente dentro del templo y muy pocas veces
llegan a cumplir funciones de evangelismo; es decir,
casi nunca salen para “predicar el evangelio a toda
criatura.” Marcos 16.15.
Claro está que aquellos programas han sido

buenos, pero muchas veces no guardan una relación
cercana con la Gran Comisión. La iglesia local necesita
activarse en la Gran Comisión, reorganizarse con la
misma como eje o tarea principal. Para eso
precisamente fuimos comisionados y enviados.
Debemos delegar autoridad donde el Espíritu Santo ya
delegó cuando otorgó los dones espirituales a los
miembros del cuerpo de Cristo. Sólo así se puede
elevar el cuerpo de Cristo a su pleno potencial, y
conseguir que los miembros de la iglesia local se
preocupen los unos por los otros y por las almas
perdidas, cumpliendo así la ley de Cristo, es decir, el
sacerdocio cristiano.
III. Administración de los

grupos celulares
Una de las preguntas importantes que los
pastores tienen que hacer respecto de la
administración de los grupos celulares es ¿quién se
supone que debe hacer qué? Aunque existen
muchos enfoques diferentes para la administración de

grupos celulares, aquí proveemos una idea simple sobre

cómo esto se podría hacer en la ESTRATEGIA BREVE.
Esencialmente, las responsabilidades son las
siguientes:
• El Pastor:
(1) Proyecta la visión
(2) Motiva y enseña a sus líderes
(3) Lee los informes semanales
(4) Responsabiliza a sus líderes
• El Líder del Grupo Celular:
(1) Reúne estadísticas de asistencia a la
célula
(2) Presenta sus informes al
Administrador o al Pastor
(3) Asiste a las reuniones del Pastor con
sus líderes celulares
• El coordinador celular:
(1) Recibe los informes semanales de
los líderes del grupo celular
(2) Organiza la información en informes
generales.
(3) Entrega los informes organizados al
Pastor para su revisión
Pastor / Ministro Encargado
(1) PROYECTA LA VISIÓN

El Pastor es el principal lanzador de la visión de
la iglesia. Lo que está en su mente y corazón
eventualmente será atrapado por su gente. Como ya
hemos dicho, esta responsabilidad no puede ser
delegada. Le compete al Pastor solamente. Cuando
hablamos de visión queremos decir que la Estrategia
de Jesús está siempre en su corazón y

conversaciones. Él está promoviendo siempre la

visión entre el liderazgo y la congregación.
(2) MOTIVA Y ENSEÑA A SUS LÍDERES

El Pastor dirige la reunión semanal de líderes.
Allí repasa con ellos la lección que darán en su
reunión del grupo celular. Ora por ellos y los motiva
a continuar el trabajo.
(3) LEE LOS INFORMES SEMANALES

El Pastor debe nombrar un administrador que
sea responsable de darle informes semanales. El
Pastor recibirá informes semanales, mensuales y
generales que le darán una idea general de cómo
están funcionando los grupos celulares. Debe leer los
informes. Es crucial para él mantenerse informado
sobre la condición de sus grupos. ¿Están creciendo?
¿Los miembros de la célula están invitando a sus
amigos? ¿Qué áreas necesitan atención?
(4) RESPONSABILIZA A SUS LÍDERES

Para que sea efectivo, el Pastor no solo debe
estar al tanto de las estadísticas, sino que también
debe estar dispuesto a responsabilizar a sus líderes
—amorosamente pero con firmeza— por el trabajo
que están haciendo. Los líderes que no están
obligados a dar cuenta de su trabajo pronto perderán
motivación. Durante actividades especiales como el
Ciclo de Evangelización, debe mantenerse
informado del progreso que se está haciendo. La
rendición de cuentas es clave para el éxito del grupo
celular. Aunque llamar a líderes voluntarios es difícil,
es una tarea necesaria que, si se hace de manera
consistente, eventualmente dará sus frutos.

Líder del Grupo Celular
(1) REÚNE ESTADÍSTICAS DE ASISTENCIA A LA

CÉLULA
Además de sus muchas responsabilidades
relativas al cuidado de los miembros,
administrativamente el líder del grupo celular es
responsable de asegurarse de que toda la
información requerida por el Pastor se presente en su
Informe semanal. El líder celular puede delegar esta
responsabilidad de recopilación de datos a otra
persona en el grupo, pero “al final del día” él es el
responsable de que la misma se recopile.
(2) PRESENTA SUS INFORMES AL

ADMINISTRADOR O AL PASTOR
El líder celular, o la persona asignada para
esta tarea, debe enviar el Informe semanal al
administrador de los grupos celulares, o al Pastor. El
informe debe presentarse a tiempo. Esto es
fundamental para ayudar al Pastor a mantener el
pulso de la salud y el crecimiento de la iglesia. Si los
informes semanales no se presentan a tiempo, será
imposible hacer un seguimiento del avance general
del ministerio.
(3) ASISTE A LAS REUNIONES “MEET”

Los líderes de los Grupos Celulares deben
asistir a una reunión semanal con el Pastor. Allí él o
ella recibe instrucción y es responsabilizado por el
trabajo que se está haciendo en el grupo celular.
Coordinador de Grupos Celulares
(1) RECIBE LOS INFORMES SEMANALES DE LOS

LÍDERES DEL GRUPO CELULAR

El administrador de los grupos celulares es
responsable de recopilar toda la información de los
grupos celulares. El Pastor no debería tener que
preocuparse por reunir información. Esta es
responsabilidad de los líderes de los grupos celulares
y del Administrador.
(2) ORGANIZA LA INFORMACIÓN EN
DIFERENTES INFORMES
Una vez que el Administrador tiene la
información, la organiza de tal manera que el Pastor
tenga una visión global de cómo están funcionando
los grupos celulares. El tamaño de la iglesia
determinará cómo se organizan los informes
semanales. Se pueden organizar de forma semanal,
mensual y anual. Lo importante es que el Pastor tenga
una idea clara de cómo funcionan las células.
(3) DA LOS INFORMES ORGANIZADOS AL
PASTOR PARA SU REVISIÓN
Una vez que se ha organizado la información
de los grupos celulares, el coordinador se asegura de
que el Pastor obtenga la información.
Conclusión
La urgencia de hoy es reorganizar la Iglesia con
la Gran Comisión en mente, solo así alcanzaremos
nuestro potencial y seremos la iglesia que Cristo
pretende que seamos: una iglesia que alcanza, una
iglesia discipuladora, una iglesia habilitada y capacitada
por el espíritu, una iglesia eso está afectando a sus
comunidades y luego a las naciones. Estamos viviendo
en un momento muy especial. Dios ha puesto en
nuestras manos las herramientas para cumplir la misión
de la iglesia. Trabajemos para avanzar la causa más
importante del mundo – el Evangelio.

Modelos de Reportes


Otros Recursos
8 lecciones de Discipulado Nivel 1
Preparación para el bautismo en agua y compromiso
con la membresía local


Para ayudar al nuevo creyente a desarrollar su
relación con Dios y las demás personas


Para guiar al discípulo hacia la excelencia en el
servicio al Señor y Su Iglesia

20 Lecciones de Discipulado Nivel 4

Para introducir al discípulo a la visión celular de la
Iglesia y comprometerlo con la misma

52 Lecciones para Grupos Celulares

Estudios bíblicos de evangelización y edificación
para todo el año

Se recominda que las iglesias que estan empezando, o que
tienen un numero menor de 50 creyentes, que hagan un solo
ciclo al año.
Bibliografía
• Manual de la estrategia de
Jesús simplificada. Etapa 1
• Revisado y adaptado, por la comisión
de Iglecrecimiento IPUIC 2024.
Si usted es Pastor,
ministro o Evangelista y
necesita asesoramiento o
seminarios sobre este
manual, puede
escribirnos a: WhatsApp:
3209831248 Oficina principal de
STRATEGIA MISION ALMAS
“Estrategia Breve”
Para nosotros será un
placer ayudarle.

Estrategia BREVE Word - Parme Y ALEX REVID Con Portada

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Estrategia BREVE Word - Parme Y ALEX REVID Con Portada

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Estrategia BREVE Word - Parme Y ALEX REVID Con Portada

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

ESTRATEGIA MISION ALMAS BREVE

COMITÉ DE LA COMISION A LA ESTRATEGIA MISION

IGLESIA PENTECOSTES UNIDA INTERNACIONAL DE COLOMBIA

Introducción del Director del Decov ........................6

MANUAL PARA PASTORES PG5

Necesitamos una estrategia que nos ayude a

MANUAL PARA PASTORES PG7

Misión Almas Breve para ayudar a los pastores a

Joaquín Emilio Jiménez Patiño

MANUAL PARA PASTORES PG8

En un esfuerzo inicial, la Estrategia Breve se

Este libro no solo es un recurso informativo, sino

un llamado a la acción. Al aplicar los principios

Alexander Gómez Montoya

MANUAL PARA PASTORES PG10

MANUAL PARA PASTORES PG11

I. ¿Por qué “Estrategia

El Plan se implementará localmente en tres etapas.

La segunda etapa comprende otros tres engranes:

A través de este primer manual, iniciamos entonces el

II. La misión de nuestra

La historia nos enseña que las iglesias

la misión. Por otro lado, hay congregaciones que

El peligro que hay en la falta de fruto es que

La Estrategia de Jesús es un modelo que

“Así es el reino de Dios, como cuando un

En esta cita bíblica se encuentran los cuatro

herramientas que les ayuden en el cumplimiento de

Lucas 10.1: “Designó el Señor también a

(1) Aclarar la visión

(2) Enfocar nuestra gente

buenos en su tiempo pueden cesar de producir los

Iglesias estancadas frecuentemente solo son

(3) Apasionar la congregación

Cuando no estamos enfocados en la misión,

Pablo, en 1ª Corintios 3.6, dice que “el

sembrarla ¡es nuestra! Y la tarea de cuidar la siembra

III. Un modelo sencillo y

Por medio de la ESTRATEGIA BREVE

MANUAL PARA PASTORES PG17

la tarea que Él nos ha encomendado: ‘‘Id y predicad

El Ciclo Nacer tiene tres etapas. Primero, el ciclo

MANUAL PARA PASTORES PG18

recién bautizado continuará siendo guiado hasta que

A continuación, presentamos en detalle los tres

MANUAL PARA PASTORES PG19

del Espíritu Santo. Así se completa el primer propósito,

“En toda labor hay fruto; más las vanas

IV. El Ciclo de Evangelización

Como hemos dicho anteriormente, el Ciclo de

preparan los corazones donde se sembrará la semilla

Las cinco semanas de evangelización son un esfuerzo de

ciclo, el Pastor o líder motivará a la iglesia o al grupo

¿Qué debemos hacer durante las cinco semanas

La primera semana: IDENTIFICAR

La segunda semana: CONTACTAR

MANUAL PARA PASTORES PG23

La tercera semana: VISITAR

La cuarta semana: INVITAR