Coloquio Lij
Coloquio Lij
Coloquio Lij
Con frecuencia los manuales reconocen a los cuentos de hadas como punto de
partida de la verdadera literatura para niños, e invocan a CHARLES PERRAULT, a LOS
HERMANOS GRIMM y a HANS CHRISTIAN ANDERSEN.
En los sesenta y sesenta lo infantil alcanza un nuevo sentido a partir del aporte
de María Elena Walsh. La interpelación a la imaginación iniciada por Walsh en
consonancia con la propuesta estética de Laura Devetach y Elsa Borneman actualiza los
protocolos de la ficción para niños a partir de tres elementos: la disminución de la
mirada protectora para dirigirse a los niños, la superposición de modos de abordar la
ficción y la complejidad de la estructura social y cultural. Durante estos años la
literatura para niños era más un privilegio de clase que un bien cultural en tanto
derecho del niño.