Descargue como DOCX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 2
También son los sufragios actos de esperanza heroica, pues por la fe Nuestra Madre del Cielo, la Reina del
, la Reina del Purgatorio, nos impulse a repetir las
conocemos que nada de esa plegaria se pierde, que redunda en eternidad palabras de Jesús en la Cruz: “Padre en tus manos encomiendo su espíritu”. gozosa para los que han muerto encaminados hacia Dios. ¿Acaso podrán Oraciones por los fieles difuntos olvidarnos, estando tan cerca de Dios, con tanta fuerza intercesora, a quienes desde aquí les impulsamos al Cielo? ¿Acaso no serán nuestros entusiastas La Iglesia Católica, que quiere ser Madre de todos los hombres, anima en este valedores cuando finalmente alcancen la morada celestial? día a sus hijos a rezar por los difuntos. Los fieles difuntos son asimismo miembros del Cuerpo Místico de Cristo y forman parte de la Iglesia. Es admirable con cuánta vehemencia de san Juan Crisóstomo hablaba a sus Constituyen la Iglesia Purgante que viven en solidaridad con los demás fieles de los que murieron, leales a Jesucristo, necesitados todavía, sin miembros –los de la Iglesia Militante en la tierra, nosotros y los de la Iglesia embargo, de alguna purificación: llevémosles socorros y hagamos su Triunfante en el Paraíso, los santos– y en comunión con Dios, aunque de conmemoración. Si los hijos de Job fueron purificados por el sacrificio de su diverso modo. padre, ¿por qué habríamos de dudar de que nuestras ofrendas* por los muertos les lleven un cierto consuelo? No dudemos, pues, en socorrer a los Así como las almas de los fieles que alcanzaron ya su meta definitiva en el que han partido y en ofrecer nuestras plegarias por ellos. Cielo, viven en una perfecta intimidad con la Trinidad Beatísima, y los que aún vivimos en el mundo nos sentimos y somos hijos de Dios, y batallamos La Santa Misa, sacrificio de Jesucristo en el Calvario, sacrificio por contra nuestras pasiones por ser fieles al creador, mientras nos dura el tiempo excelencia, es sin duda el mejor de los sufragios ofrecido por los fieles de merecer, las almas del Purgatorio pasaron ya por el mundo, pero todavía no difuntos. Desde los primeros tiempos, nos recuerda en Catecismo de la Iglesia gozan de Dios. Católica, la Iglesia ha honrado la memoria de los difuntos y ha ofrecido sufragios en su favor, en particular el sufragio eucarístico, para que, una vez Nos enseña la Iglesia, por el Catecismo de la Iglesia Católica, que los que purificados, puedan llegar a la visión beatífica de Dios. mueren en la gracia y en la amistad de Dios, pero imperfectamente purificados, aunque están seguros de su eterna salvación, sufren después de Tendríamos que incorporar a nuestra piedad habitual la oración por los fieles su muerte una purificación, a fin de obtener la santidad necesaria para entrar del Purgatorio. Así lo recomienda san Josemaría: Las ánimas benditas del en la alegría del cielo. Estos son los fieles difuntos y forman parte de la purgatorio. —Por caridad, por justicia, y por un egoísmo disculpable — misma Iglesia de Jesucristo, como los santos del cielo y como los hijos de ¡pueden tanto delante de Dios! — tenlas muy en cuenta en tus sacrificios y en Dios todavía en la tierra, que anhelamos la misma salvación que ellos ya tu oración. tienen garantizada. La Iglesia llama Purgatorio a esta purificación final de Ojalá, cuando las nombres, puedas decir: "Mis buenas amigas las almas del los elegidos que es completamente distinta del castigo de los condenados, purgatorio..." continúa el Catecismo. Por lo demás, como venimos diciendo, el Purgatorio es lugar de Afirmó Jesús, según recoge san Mateo en su Evangelio, que a quien comete padecimiento tras esta vida, si quedan en nuestra alma impurezas del pecado cierto tipo pecados, el pecado contra el Espíritu Santo, no se le perdonará ni que todavía desdicen de la limpieza absoluta del Paraíso. Por eso, ante el dolor en este mundo ni en el venidero. Algunos Padres de la Iglesia, como san y la persecución, decía un alma con sentido sobrenatural: "¡prefiero que me Gregorio, han entendido, a partir de esa frase del Señor, que algunas faltas peguen aquí, a que me peguen en el purgatorio!" Esta consideración, puede pueden ser personadas mientras vivimos en la tierra, o bien después, en un servirnos para soportar de buena gana algunos momentos –inevitables muchas momento posterior. Con razón, aparece ya en el Antiguo Testamento, la veces– de cansancio, de dolor, de injusticia, de adversidad en general, con el práctica de ofrecer oraciones y sacrificios en expiación por los pecados de los íntimo pensamiento de que merecemos limpiarnos más profundamente de muertos. En el segundo libro de los Macabeos se recuerda la colecta nuestras faltas y pecados. recaudada entre los fieles para ofrecer un sacrificio expiatorio en favor de los muertos para que quedaran liberados del pecado. Ayudemos a los difuntos con muchos actos de virtud en el transcurso del día, con una señal de la cruz, con el Rosario, el Via crucis, con una limosna, con En el día de hoy se nos recuerda la práctica multisecular de los sufragios. Ese una contrariedad aceptada, con una tentación vencida por amor, con modo de vivir la caridad con los que nos han precedido en el camino hacia la sacrificios, sobre todo La Misa Dominical y obras de caridad. Pensemos en santidad, tal vez sea una de las manifestaciones más delicadas de amor entre las almas más abandonadas y, alguna vez, en las más santas que sufren nosotros. también mucho. En efecto, quienes ofrecen esos sufragios –oraciones y sacrificios por los difuntos– ejercitan de modo admirable, no solamente la fe en la eficacia de la oración, sino que hacen asimismo actos espléndidos de amor generoso y satisfacer por mis pecados. En ti, Madre mía, pongo toda mi confianza desprendido, para ayudar a quienes sufren, pues se ven aún detenidos en su de hijo, y sé que no he de quedar defraudado. Amén. tránsito a la Bienaventuranza Eterna de intimidad con Dios. Oración a la Virgen María, reina del Purgatorio. Oración final: Oh Santísima Virgen María, reina del purgatorio! Venimos a depositar tu corazón inmaculado una plegaria en favor de las benditas almas que Dios misericordioso, que nos perdonas y quieres la salvación de todos expiran sus faltas del en el purgatorio. Dígnate escucharnos, los hombres, imploramos tu clemencia, para que, por la intercesión de María Santísima, de San José y de todos los santos, concedas a las benignísima Señora y Madre Nuestra, si ésta es tu voluntad y la de tu almas de nuestros padres, hermanos, parientes, amigos, bienhechores, y santísimo hijo. Amén. las almas más olvidadas, que han salido de este mundo, la gracia de 1.- ¡Oh María reina del purgatorio! Te rogamos por aquellas almas, por llegar a la reunión de la eterna felicidad. Por Jesucristo nuestro Señor. lo cuales tenemos o podemos tener alguna obligación, sea de caridad o Amén. de justicia. Oración de San Agustín por las almas del purgatorio
Dios te Salve María… Dales, Señor el eterno descanso y luzca para
ellas la luz eterna. Que el alma de todos los fieles difuntos por la Oración de san Agustín por las almas del purgatorio infinita misericordia de Dios, descansen en paz. Dulcísimo Jesús mío, que para redimir al mundo quisiste nacer, ser 2.- ¡Oh María reina del purgatorio! Te rogamos por el alma de los circuncidado, desechado de los judíos, entregado con el beso de Judas, abandonados y olvidadas, por las cuales nadie ruega. Tú, ¡oh Madre!, atado con cordeles, llevado al suplicio, como inocente cordero; presentado ante Anás, Caifás, Pilato y Herodes; escupido y acusado con que te acuerdas de ellas, aplícales por los méritos y de los santos, y así falsos testigos; abofeteado, cargado de oprobios, desgarrado con azotes, como encontrara saludable, el refrigerio. coronado de espinas, golpeado con la caña, cubierto el rostro con una 3.- ¡Oh María reina del purgatorio! Te rogamos, de la manera más púrpura por burla; desnudado afrentosamente, clavado en la cruz y especial, por aquellas almas que han de estar más tiempo padeciendo y levantado en ella, puesto entre ladrones, como uno de ellos, dándote a satisfaciendo a la divina justicia. Ten compasión de ellas, ya que no beber hiel y vinagres y herido el costado con la lanza. pueden merecer, abrevia sus penas y derrama sobre ellas el bálsamo de Libra, Señor, por tantos y tan crueles dolores como has padecido por tus consuelos. nosotros, a las almas del Purgatorio de las penas en que están; llévalas a descansar a tu santísima Gloria, y sálvanos, por los méritos de tu 4.- ¡Oh María, reina del purgatorio! Te rogamos, por las almas que han sagrada Pasión y por tu muerte de cruz, de las penas del infierno para de salir más pronto de ese lugar de penas y expiación para que cuanto que seamos dignos de entrar en la posesión de aquel Reino, adonde antes vayan a cantar en tu compañía las eternas misericordias del Señor. llevaste al buen ladrón, que fue crucificado contigo, que vives y reinas con el Padre y el Espíritu Santo por los siglos de los siglos. 5.- ¡Oh María reina del purgatorio! Te rogamos, finalmente, de una manera muy particular, por las almas que más padecen. Es verdad que Amén. todas sufren con resignación, pero sus penas son atroces que no podemos ni siquiera imaginarlas. Intercede por ellas, que Dios escuche tus maternales plegarias. Virgen Santísima, te pido que, así como me acuerdo de las benditas ánimas del purgatorio, se acuerden de mí los demás, si he de ir allá a