El Marco de Programación de País 2022-2026 (MPP 2022-2026), preparado por la FAO en conjunto con el Gobierno de El Salvador, integra la experiencia de FAO en el país y a nivel global con los nuevos desafíos emergentes.
Las áreas de trabajo del MPP 2022-2026 son coincidentes con el Marco Estratégico de la FAO (2022-2031) y retoman las prioridades identificadas en el Marco de Cooperación de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible en El Salvador 2022-2026 (UNSDCF) firmado por el Gobierno y el Sistema de las Naciones Unidas (SNU).
Mejor nutrición: Sistemas agroalimentarios sostenibles para proporcionar dietas saludables
Se ha estimado que la demanda de alimentos aumentará un 50% al 2050, en relación con la demanda de inicios de siglo. El contexto plantea, como desafío, garantizar la seguridad alimentaria sin dejar a nadie atrás, y demanda focalizar acciones para todas las personas. Asimismo, persisten problemas de malnutrición que generan un incremento en las enfermedades crónicas no transmisibles, afectando el desarrollo físico y provocando pérdidas por ausentismo laboral, con altos costos al Estado en términos de servicios de salud, educación y productividad.
Los esfuerzos a realizar responden a soluciones innovadoras que conduzcan a la reducción de las brechas entre hombres y mujeres, principalmente de los sectores rurales, y que impliquen el fortalecimiento de políticas, programas y mecanismos de protección social en un marco de diálogo y participación que permitan integrar la inclusión de servicios universales de calidad en materia de salud, nutrición, educación, así como estrategias de desarrollo rural inclusivo para que las personas en edad de trabajar y que viven en condiciones de pobreza y vulnerabilidad tengan mejores oportunidades de generación de ingresos.
Mejor producción: Sociedades rurales prósperas e inclusivas
Trabajamos de la mano con el Gobierno para reducir las desigualdades y revertir los escenarios de pobreza para ciertos grupos en situación de vulnerabilidad, especialmente en la zona rural, donde el 27% de hogares se encuentra en pobreza: 16.6% en pobreza relativa y 10.4% están en pobreza extrema.
La inclusión productiva de la población en condiciones de vulnerabilidad se realizará a través de estrategias innovadoras, para generar oportunidades de acceder a un trabajo decente y medios de vida sostenibles, en un entorno de transformación económica inclusiva, enfocada en los territorios más rezagados y afectados por el cambio climático.
Mejor medioambiente y una vida mejor: Agricultura sostenible y resiliente
Existe una problemática estructural vinculado a un modelo de producción poco rentable e inclusivo ambiental y socialmente insostenible que incrementa el riesgo y limita la innovación, sumado a una alta vulnerabilidad frente a las amenazas naturales, biológicas y antrópicas en la agricultura.
La FAO facilitará instrumentos regulatorios, políticas y planes para mejorar la resiliencia. Además, promoverá medidas de adaptación y mitigación ante al cambio climático, para favorecer la restauración y la gestión adaptativa de paisajes en sintonía a la multifuncionalidad de la agricultura, de la mano de actores locales.