Hipotermia y Manejo
Hipotermia y Manejo
Hipotermia y Manejo
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FORMACIN CONTINUADA
Servicio de Anestesiologa, Reanimacin y Teraputica del Dolor, Hospital Universitario Central de Asturias, Oviedo, Asturias,
Espa
na
b
Servicio de Ciruga General, Hospital del Oriente de Asturias, Fundacin Pblica Francisco Grande Covin, Arriondas, Asturias,
Espa
na
Recibido el 19 de octubre de 2011; aceptado el 7 de mayo de 2012
Disponible en Internet el 11 de julio de 2012
PALABRAS CLAVE
Temperatura;
Hipotermia;
Complicaciones
perioperatorias
KEYWORDS
Temperature;
Hypothermia;
Perioperative
complications
Este artculo pertenece al Programa de Formacin Mdica Continuada en Anestesiologa y Reanimacin. La evaluacin de las preguntas
de este artculo se podr realizar a travs de internet accediendo a la siguiente pgina web: www.elsevierfmc.com
Autor para correspondencia.
Correo electrnico: lafmere@yahoo.com (L.A. Fernndez-Mer).
0034-9356/$ see front matter 2011 Sociedad Espaola de Anestesiologa, Reanimacin y Teraputica del Dolor. Publicado por Elsevier Espaa, S.L. Todos los derechos reservados.
http://dx.doi.org/10.1016/j.redar.2012.05.034
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Introduccin
La temperatura corporal (TC) es una constante vital ms,
al igual que la presin arterial o la frecuencia cardaca,
pero sigue siendo infravalorada en el cuidado perioperatorio, incluidos los anestesilogos y los cirujanos1,2 . Segn una
encuesta de 2004 (Thermoregulation in Europe, Monitoring
and Managing patient Temperature [TEEMP]) nicamente se
monitoriz en el 19,4% de los pacientes (25% de anestesia
general y 6% de anestesia regional), aunque el 38,5% fueron
activamente calentados (43% de los de anestesia general y
28% de los de regional)3 . La falta de monitorizacin contribuye a la no deteccin de episodios de hiper- o hipotermia,
as como a la no cuanticacin de los mismos.
Se ha asumido que la hipotermia es un hecho inevitable del anestsico-quirrgico4 . Sin embargo, la ausencia de
normotermia se ha relacionado con un marcado aumento de
la morbimortalidad perioperatoria y, por consiguiente, de la
estancia intrahospitalaria y de los costes1,5,6 , por lo que sera
un estndar su monitorizacin y mantenimiento en la normalidad, como recomienda el National Institute for Clinical
Excellence (NICE)7 del Reino Unido.
Para la adecuada interpretacin de la TC resulta de
importancia tener en cuenta lo siguiente8,9 : hay una variacin diurna siolgica de la temperatura, con valores ms
bajos en la ma
nana y ms altos por la tarde. Asimismo existe
un ritmo estacional de la temperatura. Las mujeres tienen
una TC ligeramente ms elevada que los varones, con una
variabilidad durante la menstruacin. Las personas de edad
avanzada presentan aproximadamente 0,5 C menos que las
jvenes.
El objetivo de esta revisin es que los implicados en el
cuidado de los pacientes quirrgicos, tomen conciencia de la
importancia que tiene el mantenimiento de la temperatura
en el rango de la normalidad como medida de calidad en los
cuidados perioperatorios.
Los pacientes deberan ser informados de las consecuencias negativas de la hipotermia, y educados para que
comuniquen el disconfort trmico.
Para ello se hizo una bsqueda bibliogrca en PubMed
seleccionando los textos que ms aportaban a la revisin, publicados entre enero 1993-enero 2012, utilizando las
palabras clave hypothermia AND anesthesia, perioperative
hypothermia temperature measurement AND anesthesia.
Termorregulacin
Fisiologa
La cantidad de calor en el cuerpo humano determina su
temperatura y, si el calor cambia, la temperatura debe
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381
31
CP
CC
-3
CP
37C
Vasoconstriccion
33
CC
-3
37C
Anestesia
Vasodilatacion
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Radiacin
Conveccin
Conduccin
Evaporacin
65
25
10
10
Medicin de la temperatura
La monitorizacin de la TC es obligatoria en todo paciente
sometido a una intervencin quirrgica que sobrepase de
los 30 min, tanto con anestesia general como locorregional,
para mantener la normotermia y detectar los episodios de
hiper o hipotermia8,11 . La medicin ideal es la continua, pero
en la mayora de los pacientes son sucientes las tomas cada
15 min23 . El mejor sitio para medir la temperatura es aquel
que mejor reeje cualquier cambio producido en la temperatura sangunea, que es la considerada como la verdadera
temperatura central22 .
La medicin de la TC central se puede hacer
de manera directa o indirecta, mediante estimacin20 . De
manera directa se pueden tomar los valores en la membrana
timpnica (reeja la temperatura de la arteria cartida),
en la nasofaringe, en la arteria pulmonar (mediante catter de arteria pulmonar y considerada como el patrn) o
en la parte distal del esfago (reeja la temperatura de la
aorta)8,9,11,12,23 . De manera indirecta se puede tomar la TC
en sitios como la boca, el recto, la axila o la vejiga e incluso
en la supercie cutnea, pero es 1-2 C inferior a la TC central, y cambios extremos pueden no verse reejados y tardan
en equilibrarse con la temperatura central unos 10-15 min.
No deben ser medidas de referencia en la prctica clnica
habitual.
El mejor sitio para realizar la medicin de la temperatura
se elegir en funcin de las caractersticas y la localizacin
de la ciruga que se va a llevar a cabo3 . Las mediciones
ms prcticas son las realizadas en el esfago, en la boca
y en el tmpano, mientras que durante el postoperatorio lo
ms prctico es la temperatura axilar24 . La medicin de la
temperatura a nivel de la supercie cutnea es la menos
deseable debido a los cambios que ocurren en la temperatura ambiental y a los cambios producidos en el ujo
cutneo25 . Las temperaturas ms sensibles son las de la arteria pulmonar, en el esfago (el tercio distal), en la membrana
timpnica, en la nasofaringe o en la orofaringe22,25 . La temperatura en los 2 tercios proximales del esfago puede estar
inuida por los gases anestsicos22 .
En cuanto a los termmetros empleados, los que emplean
sensores infrarrojos se caracterizan por su exactitud y por
no ser caros. Funcionan midiendo la energa infrarroja que
es emitida por una supercie sin necesidad de entrar en
contacto con ella11 .
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Hipotermia
Denicin
El lmite de la hipotermia es arbitrario. Se considera hipotermia cuando la TC central desciende de 36 C6,17,20 , aunque
otros cifran el lmite en 35 C, clasicndola en 3 niveles:
leve (de 32 a 35 C), moderada (de 28 a 32 C) y severa (por
debajo de 28 C)14 .
Se trata de la alteracin de la temperatura ms
frecuente durante el perodo perioperatorio (50-70% de
los pacientes) y se caracteriza por acompa
narse del
aumento de la morbimortalidad y alteraciones a mltiples
niveles1,3,4,6,8,9,11,12,17,18,20,24-29 (incomodidad, alteraciones
cardacas, depresin respiratoria, mayor estancia hospitalaria, infecciones, despertar anestsico prolongado, aumento
del sangrado, balance negativo de nitrgeno, aumento del
catabolismo). Alrededor del 50% de los pacientes llegan
al quirfano con TC por debajo de 36 C y hasta el 33%
de 35 C1 . Al contrario, no hay evidencia de benecio asociado al mantenimiento perioperatorio de temperaturas por
encima de lo normal (38-39 C)12 .
La TMC decrece cuando la prdida de calor excede
la produccin metablica, la cual durante la anestesia est reducida en un 30-50% (aproximadamente de
0,8 kcalkg1 h1 ).
Aspectos generales
Entre los factores predictivos relacionados con la aparicin de hipotermia se encuentran la edad, el peso, la
duracin de la ciruga y las temperaturas corporal
y ambiental1,6,28-30 . El riesgo de desarrollar hipotermia
aumenta con la edad y disminuye con el aumento de peso,
por lo que los ancianos y los ni
nos son los ms proclives
a desarrollarla. La temperatura del quirfano tiene gran
inuencia ya que determina la velocidad a la que se pierde
calor por radiacin y conveccin desde la piel, y por evaporacin desde el campo quirrgico23 .
La alteracin de la termorregulacin, producida por
la induccin anestsica, contribuye ms al desarrollo
de la hipotermia que la baja temperatura ambiental del
quirfano12,15 . El lmite de los umbrales a los que se activan
las respuestas (tanto por calor como por fro) est aumentado, con respecto a un paciente sin anestesiar, casi 10 veces
(2-4 C). La sudoracin es la respuesta mejor conservada,
aumentando poco el umbral que la activa y manteniendo su
intensidad. Sin embargo, el umbral que activa la vasoconstriccin y los temblores est marcadamente reducido y la
efectividad de ambas respuestas es menor11,12 .
Los mecanismos de vasoconstriccin y escalofro estn
deprimidos en el paciente que est sometido a una intervencin quirrgica (se activan con descensos de la TC
de 2-2,5 C), por lo que la autorregulacin de la TC est
alterada12,18,31 . La anestesia general inhibe la actividad del
sistema nervioso simptico, disminuyendo el umbral de la
vasoconstriccin por debajo de la temperatura del CC, adems de producir una vasodilatacin directa de los shunt
arterio-venosos. El resultado nal es una vasodilatacin
generalizada, con el resultante paso de calor del CC al
CP por redistribucin y la consiguiente bajada de la TC,
pero conservando inalterada la TMC y el contenido total
383
de calor15,23,31 . Durante la primera hora de la intervencin
la TC cae 1-1,6 C por la redistribucin (81%) del calor del
CC al CP, lo que origina un calentamiento del CP a expensas del CC, reejado en el aumento de 0,5 C de media
en la temperatura cutnea sobretodo a nivel de pies y
manos4,5,9,11,12,15,23,30,32 . A partir de este momento el enfriamiento se produce principalmente por prdida (43%) de calor
desde la piel al exterior, perdiendo, de manera lenta y progresiva, 1,1 C durante las 2 h siguientes. La causa es la
prdida de calor mayor que la produccin metablica (reducida del 15 al 40%)18 . Este es el perodo durante el cual es
ms efectivo el calentamiento del paciente. A partir de ese
momento se alcanza una meseta hipotrmica, en la que la
temperatura se mantiene constante incluso en intervenciones muy prolongadas. Este perodo meseta es resultado del
calentamiento activo de los pacientes, pero en pacientes
que no son calentados, en un primer momento la fase de
meseta trmica es reejo de un proceso pasivo, cuando la
produccin metablica de calor es igual a la prdida, pero
puede llegar el momento en el que se active la respuesta
termorreguladora de vasoconstriccin, la cual minimiza la
prdida cutnea de calor, aislando el CC del CP y mantiene
la produccin metablica en el CC9,12,15,18 .
Para que se activen las respuestas de termorregulacin
la temperatura central debe alcanzar los 34-35 C. La vasoconstriccin perifrica (shunt arteriovenosos de los dedos)
disminuye poco la prdida de calor, pero tiene gran repercusin en la distribucin del calor, disminuyendo el paso del
CC al CP, consiguiendo una cada muy lenta o incluso un
aumento, de la TC.
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del paciente15 . Al calentar el paciente antes de la induccin
anestsica, aumenta el calor del CP, por lo que se disminuye
el gradiente entre los CC y CP, disminuyendo la redistribucin y aumentando el calor corporal total.
La redistribucin inicial es difcil de tratar por 2 razones: la primera, el territorio donde ocurre el paso del calor
del compartimento central al perifrico es extenso; y la
segunda, el calor aplicado en la supercie cutnea tarda
tiempo en llegar al compartimento central23,30 . Esta transferencia de calor es especialmente lenta en aquellos pacientes
que tengan vasoconstriccin, consecuentemente, incluso los
mejores sistemas de calentamiento no previenen la prdida
de calor durante la primera hora de la anestesia.
La hipotermia se ve potenciada por una serie de factores propios de toda intervencin quirrgica como son la baja
temperatura del quirfano, la desproteccin de la supercie
cutnea, la desinfeccin de la piel por lquidos a temperatura ambiente, la exposicin de cavidades corporales y la
administracin de lquidos endovenosos17 .
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cardaca y la presin arterial media y, por tanto, los requerimientos de oxgeno por parte del miocardio. En pacientes
con una reserva cardiopulmonar limitada, el aporte de oxgeno puede verse comprometido y la saturacin venosa
mixta caer a la vez que aumentar la extraccin perifrica de oxgeno9 . El tratamiento es el calentamiento activo
del paciente o el control farmacolgico, siendo el ms efectivo la meperidina (90% de efectividad en 5 min), debido al
aumento de la actividad en los receptores y 9,22,31 . Aunque los opioides son la primera lnea de tratamiento, hay
otros frmacos tiles en el tratamiento de los temblores,
tales como clonidina (75 g iv), ketanserina (10 mg iv), sulfato de magnesio (30 mgkg1 ) y sostigmina11 . Si se emplea
aire caliente para atenuar los escalofros, es necesario conseguir el aumento de 4 C de temperatura perifrica (medida
en la piel) por cada grado de temperatura central por debajo
de los 36 C.
Alteraciones cardiovasculares3,9,12,31,35
Son consecuencia del aumento de la actividad adrenrgica
(mediada por la noradrenalina y de mayor magnitud en jvenes), y factor predictivo independiente de la aparicin de
complicaciones cardiolgicas, mediadas por un aumento en
las resistencias perifricas, en el trabajo cardaco y en el
consumo de oxgeno. La morbilidad cardiolgica es tpica
del perodo postoperatorio, ya que durante la anestesia
general, esta respuesta est atenuada. En pacientes de alto
riesgo, una temperatura central por debajo de 35 C triplica
la incidencia de isquemia miocrdica en el postoperatorio
inmediato. El calentamiento de los pacientes puede lograr
una reduccin del 55% en el riesgo relativo de aparicin de
complicaciones cardacas durante este perodo. La incidencia de taquicardia ventricular y otros eventos cardiolgicos
es menor en los pacientes normotrmicos, pero solo durante
el perodo postoperatorio y no durante el intraoperatorio.
Esto se explica debido a que en los pacientes anestesiados
la respuesta adrenrgica est bloqueada y se activa durante
la fase de recuperacin22 .
385
Alteraciones respiratorias
La hipotermia produce una disminucin de la sensibilidad del
centro respiratorio al aumento del PaCO2 22 y desplazamiento
hacia la izquierda en la curva de saturacin de hemoglobina.
La relacin entre la produccin de CO2 y el consumo de O2 se
mantiene constante, de este modo la utilizacin de oxgeno
disminuye a la par que el CO2 aumenta (aproximadamente
un 5% por cada C).
Alteraciones de la coagulacin
Debidos a alteracin de la funcin plaquetaria (no del
nmero), de la cascada de la coagulacin y de la brinlisis.
La funcin de las plaquetas est alterada por la reduccin
de la liberacin de tromboxanos A2 y B2 , disminuyendo a su
vez la actividad de los factores de coagulacin (termodependientes). Por su parte, la brinlisis est aumentada,
permitiendo la destruccin del cogulo y facilitando el
sangrado3,9,12,22 . Tal es la magnitud de la alteracin que se
produce, que descensos de 0,5 C en la temperatura central
estn relacionados con un aumento de las prdidas sanguneas y, por tanto, de la morbimortalidad31 .
Cicatrizacin e infeccin
La vasoconstriccin retrasa la cicatrizacin y aumenta la
tasa de infecciones de las heridas quirrgicas (que suponen
entre el 14 y el 16% de las infecciones hospitalarias ----3 en
magnitud---- y directamente relacionadas con la predisposicin a la formacin de las hernias, estancia hospitalaria, tasa
de mortalidad y aumento de costes)24,25,36,37 . Las primeras
horas tras una contaminacin bacteriana son decisivas para
el establecimiento de una infeccin, por lo que los pacientes
en los que persista la hipotermia tienen mayor riesgo. Esta
complicacin tambin se ve favorecida por la disminucin en
el depsito de colgeno en las heridas y por la presencia de
alteraciones inmunolgicas, derivadas de la disminucin del
aporte de oxgeno por la vasoconstriccin cutnea, lo que
favorece la alteracin de la movilizacin de leucocitos y de
la actividad fagoctica de los neutrlos, as como la produccin de anticuerpos mediada por linfocitos T3,9,12,22,27,36 .
Se ha comprobado en pacientes hipotrmicos, adems del
aumento de la tasa de infecciones, un retraso en la retirada
de las suturas de las heridas, ambos hechos relacionados con
un aumento de la estancia hospitalaria prximo al 20%31,36 .
Otras alteraciones
Trombosis venosa profunda, facilitada por la vasoconstriccin y, consecuentemente por el estasis venoso y la hipoxia
manenidos3,31 .
Las modicaciones en la farmacocintica y en la farmacodinmica (prevenibles) son originadas por la disminucin
del metabolismo basal y pueden dar lugar a la prolongacin del efecto. El metabolismo de los frmacos
es termo-dependiente y los enzimas involucrados son
termosensibles34 . Cabe destacar el efecto sobre los bloqueantes neuromusculares. Con descensos de la TC central
de tan solo 2 C se prolonga su efecto (p. ej., en el
caso del vecuronio se dobla la duracin por mecanismos
farmacocinticos)9,31,34 . Se ha demostrado que la amplitud
del primer twich y el TOF-ratio disminuyen un 20% por cada
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solubilidad, sin alterar su potencia, ya que esta depende ms
de la presin parcial que de la concentracin34 . La CAM se
reduce en 5% por cada C de hipotermia. Ambas son causas
del lento despertar de un paciente hipotrmico de la anestesia general y, por consiguiente, responsables del aumento
de los costes3,12,22,31 . Sin embargo, a pesar de ser mayor el
tiempo desde que se termina la intervencin hasta que se
logra la extubacin del paciente en caso de hipotermia, la
estancia en la URPA es similar en pacientes hipotrmicos
y normotrmicos. Con propofol se observa un aumento del
30% en la concentracin cuando la temperatura desciende
aproximadamente 3 C, resultado de la reduccin del aclaramiento entre los compartimentos central y perifrico. Con
fentanilo tambin se observa un aumento de la concentracin, de aproximadamente 5% por C descendido34 .
Efectos adicionales de la hipotermia son moderada hipopotasemia, aumento de la cardiotoxicidad de la bupivacana
o alteracin de los potenciales evocados, pero sin repercusin en el manejo clnico34 .
La recuperacin de la termorregulacin es lenta y gradual en los pacientes que han sido anestesiados, pudiendo
necesitar entre 4 y 5 h para llegar a la normotermia, dependiendo del grado de hipotermia y la edad del paciente. La
vuelta a la normalidad puede verse retrasada por el efecto
residual de los agentes halogenados usados como hipnticos
o por el efecto de los opioides usados como analgsicos15 .
Cabe se
nalar que las respuestas siolgicas a los cambios
de temperatura estn inuenciadas ms por la temperatura
central que por la perifrica (ratio 4:1), mientras que en
la sensacin trmica subjetiva la ratio es 1:1. Esto justica
que, incluso pacientes con una temperatura central adecuada, pueden experimentar disconfort y referir sentir fro,
en caso de tener una temperatura perifrica baja22 .
Prevencin y tratamiento
El mejor mtodo para asegurar la normotermia es la prevencin. El propsito de las medidas de prevencin es minimizar
las prdidas de calor por redistribucin en la induccin
anestsica, por radiacin y conveccin desde la supercie
cutnea y por evaporacin desde las supercies quirrgicas
en exposicin, y mermar el enfriamiento provocado por la
infusin de uidos endovenosos20 .
Redistribucin
Para evitarla durante la induccin anestsica por el paso
de calor desde el compartimento central al perifrico,
la medida ms til y menos costosa es el calentamiento
de los tejidos perifricos mediante conveccin (con aire
forzado caliente) para lograr disminuir el gradiente de
temperatura entre ambos compartimentos3,5,9,31,38,39 . El
precalentamiento activo tambin logra inducir una vasodilatacin perifrica, aumentado la temperatura de este
compartimento y disminuyendo de este modo el paso de
calor desde el central. Esta medida se debera realizar entre
30 a 60 min antes de la induccin, en el antequirfano
y durante la monitorizacin, dado que resulta ms eciente mantener la normotermia que calentar a un paciente
hipotrmico. Aplicada de forma aislada y puntual, mantendra su efecto benecioso durante 40-80 min despus de la
Radiacin
Evitar una gran diferencia entre la TC del paciente y la
temperatura ambiente del quirfano (aumentarla) ya que
aumenta la temperatura perifrica de los pacientes a la vez
que les provoca cierto grado de vasodiltacin3,12,34 . La temperatura en los quirfanos suele oscilar entre los 18 y los
23 C, para que el equipo quirrgico se sienta cmodo con
la ropa y para evitar la proliferacin de microorganismos.
En el rea quirrgica infantil la temperatura del quirfano
debe estar prxima a los 26 C8,23 .
Tambin se logra disminuir la prdida de calor por radiacin mediante el aislamiento trmico pasivo de la piel
(supone el 90% de las prdidas)23,34 . Se debe cubrir la
mayor parte posible de supercie cutnea con cualquier
tipo de material para crear una capa de aire inmvil entre
la piel y la cobertura, que reduce la prdida de calor un
30%3,8,9,12,22,31,38 . En los ni
nos cubrir la cabeza y extremidades, pero en adultos la prdida de calor por la cabeza es
mnima23 .
Es obligado el calentamiento activo intraoperatorio del
paciente, medida limitada por la produccin de sudor que
conduce nuevamente a la prdida de calor. Deben utilizarse sistemas adecuados para calentar la mxima supercie
posible y no provocar el sobrecalentamiento excesivo de ninguna parte corporal. El sistema ms ecaz, sencillo y barato
(estimado en 7,04 D por paciente4 ) para prevenir y tratar
la hipotermia es el que emplea aire caliente en el interior de una manta9,12,28,32,40 . El mejor de estos sistemas es
capaz de transmitir ms de 50 W a travs de la supercie
cutnea, incrementando la TMC (aproximadamenre 0,75 C).
Su ecacia depende de la temperatura y del ujo del aire
administrado (mejor ujos altos prximos a 19 Ls1 ), que
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Conduccin
Implicada en la prdida de calor por la administracin de
cualquier uido a temperatura ambiente. Por cada litro
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de cristaloides o cada unidad de sangre que se infunde,
se requieren unas 16 kcal para calentarlos a TC y la TC
desciende unos 0,25 C3,9,12,31 . Hay que utilizar sistemas de
calentamiento de uidos cuando se vayan a administrar
elevados volmenes de uidos, pero nunca sustituirn al
calentamiento activo del paciente mediante aire caliente
y no aportarn nada si el ritmo de infusin es lento y ya se
est usando el sistema de aire forzado3,22,23,34 . Entre los sistemas de calentamiento estn los de calor seco (utilizan un
sistema metlico con una resistencia para calentar los uidos y solo son tiles a ritmos de infusin muy altos) y los de
calor por circulacin contracorriente de agua (se calienta
el sistema de agua a unos 40 C y son tiles a ritmos lentos y moderados). En cualquier caso los lquidos deben de
ser calentados aproximadamente a 41 C, sin sobrepasar los
43 C en caso de sangre para evitar da
nar los hemates43 .
Con menos de 2 l de uidos no es necesario el calentamiento
de los mismos, si no para administrarlos a gran velocidad o
en gran cantidad12,22,31 . Considerar el ritmo de infusin y
la longitud del sistema. A ritmos bajos, el uido pierde la
temperatura y se iguala con la del ambiente, mientras que
a altos ujos, los lquidos no tienen tiempo de calentarse lo
suciente22 .
Otras medidas
La prdida de calor a travs de la respiracin es mnima
(menos del 5-10%) y es debida al calentamiento y a la humidicacin del aire respirado, por lo que actuar sobre los
gases inspirados en caso de pacientes en ventilacin mecnica carece de sentido, salvo en los ni
nos, en los que la
prdida de calor por la respiracin es mayor debido a la alta
frecuencia de respiraciones por minuto. El calentamiento
y la humidicacin del aire inspirado s resulta de utilidad
para prevenir la aparicin de broncospasmo y para conservar
la funcin ciliar3,8,9,12,22,23,31,34 .
En la RTUP es necesario calentar los lquidos de irrigacin
vesical a unos 38 C mediante calentadores especcos. En
la laparoscopia es necesario el calentamiento y la humidicacin del gas.
El fro es bien tolerado por el cuerpo humano, siendo
necesarias temperaturas muy bajas para provocar lesiones. Sin embargo, la tolerancia al calor es ms baja, con
el consiguiente riesgo de quemadura9,34 , ms importante
cuando se a
naden a estados en los que disminuye la presin de perfusin de los tejidos o al uso de sustancias
que produzcan irritacin cutnea, como las que contienen
iodo, usadas en la desinfeccin quirrgica. Los pacientes de
edad avanzada suelen tener la piel ms delgada y delicada,
hacindola ms susceptible al da
no por calor. Utilizar los
dispositivos de calentamiento de acuerdo con las instrucciones del fabricante, no usndolos sin las mantas apropiadas
para evitar las quemaduras accidentales ni reutilizando
las mantas de un solo uso8 . Con los sistemas de calentamiento mediante aire forzado se han descrito pocos casos
de quemaduras38 , y son ms seguros frente a otras formas
de calentamiento ms artesanales (responsables de quemaduras, por ejemplo en el trabajo de Cheney et al.44 bolsas
con agua caliente fueron causa del 64% de las quemaduras
registradas).
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Conclusiones y recomendaciones
La hipotermia es el trastorno de la temperatura ms frecuente en pacientes quirrgicos y, aunque aceptada durante
a
nos como algo ineludible, debe ser evitada, como medida
de reduccin de la morbimortalidad operatoria y de los costes derivados, as como de incremento de la satisfaccin
percibida por el paciente.
Para ello, la temperatura debe ser considerada como una
constante vital ms y todo el personal implicado en el cuidado del paciente quirrgico debe estar concienciado con el
mantenimiento de la misma dentro de la normalidad.
Se puede recomendar:
--- Precalentamiento de todos los pacientes mediante aire
forzado para minimizar la cada de temperatura producida por la induccin anestsica.
--- Monitorizacin de la temperatura en todas las intervenciones con duracin superior a 30 min (con anestesia
general o locorregional).
--- Calentamiento de uidos en caso de administracin de
volmenes elevados, as como en caso de necesitar transfusiones.
--- Calentamiento activo intraoperatorio con aire forzado.
--- Cubrimiento en la medida de lo posible de la supercie
del paciente para evitar la prdida de calor por radiacin
y conveccin.
--- Tratamiento activo farmacolgico, y mediante calentamiento si hay temblor en el postoperatorio.
Conicto de intereses
Los autores declaran no tener ningn conicto de intereses.
Bibliografa
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