Orange Cream Act11 Spa
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Orang am
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Act.1
ntonces, os estis adaptando? Qu pensis hacer esta tarde? pregunt Ritsuko mientras coma su arroz al curry.
Me gir hacia Rei que estaba sentada a mi lado y finga no escuchar a
su madre.
Oh, bueno todava no le pensado respond intentando mantener
mi mirada en la mujer. Sin embargo, cada vez que la miraba me vena a la
cabeza solo una cosa: ella y Misato juntas.
Ya que ests un poco ms despierta que mi hija, Miyuki-chan, te
dejo la carta con los servicios ofrecidos por el hotel. Podis elegir lo que
queris me sonri.
Cog de su mano el cartn y comenc a leer.
Masaje relajante cuerpo, cara, Ayurveda, masaje con piedras sala relax,
sauna, hidromasaje, piscina termal gir entre las manos la carta Dira
que es difcil elegir coment Lo pensaremos con calma, verdad, Rei?
S, despus le echar un vistazo respondi distradamente Pero creo
que acabar de leer el libro que me he trado de casa
Ritsuko, quizs no deberamos preocuparnos por ellas. Harn lo que
quieran, dejmoslas libres intervino mi madre.
Cierto, faltara ms. Era solo por hablar le dirigi una mirada cmplice. Pos mi mirada, un momento, sobre ellas y un pensamiento audaz
cruz mi mente: acaso Ritsuko habra tenido alguna vez a mi madre en
su punto de mira?
Sacud la cabeza al sentir mis mejillas enrojecerse.
Eh, qu ests haciendo? dijo Rei mirndome de reojo.
No nada, pensaba en qu masaje darme ment echndome a rer
ruidosamente. Ritsuko y mi madre me miraron perplejas: como de costumbre, saba hacerme notar cuando no quera.
No deberas pensar ciertas cosas, sabes? solt de repente Rei mientras pasebamos por el amplio jardn del hotel No te hace bien
Hey, no digas estupideces. No se ha visto nada la golpe con mi bolso.
Pero si lo tenas escrito en la frente!
Qu? Venga ya!
Tu madre y mi madre juntas mientras
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sonrisa que me estaba dando mientras sus cabellos eran movidos por la ligera brisa estival. Ella, como si fuera un espejo, me devolvi la misma mirada.
Nos quedamos as, suspendidas, por un tiempo indefinible. Ninguna
de las dos pareca tener la intencin de hacer el primer movimiento, ambas bloqueadas en nuestras incertidumbres. Despus de todo lo que haba
pasado, despus de todos los esfuerzos por rechazarla, me encontraba en
el punto de partida.
El libro que sostena se me escap de las manos y cay al verde prado
haciendo un ruido sordo, capturando con l nuestra atencin. Rei se inclin
hacia delante para recogerlo por m, y me lo devolvi con suavidad, y repentinamente se hundi en su lectura: el instante mgico haba acabado.
Abr tambin yo mi libro, intentando concentrarme en la historia, pero
con escassimo resultado: es posible que yo fuera tan cobarde? Qu
quera de verdad?
La respuesta no tard en llegar. Cuando a las seis regresamos para
meternos en la maravillosa piscina termal, todo se me apareci perfectamente claro: Rei, bellsima, con su piel blanca y aterciopelada, los cabellos
recogidos, las mejillas ligeramente sonrojadas a causa de la temperatura
del agua
Me senta atrada por ella y mi corazn la deseaba con mpetu.
Fue realmente un esfuerzo lograr estar a su lado y esconder mi verdadero estado de nimo. Quizs tambin yo, como la protagonista de su novela, tena que mantener sujeta aquella mscara que me haba construido.
Qu formidable sensacin! Verdad? dijo con su voz persuasiva,
mientras apoyaba su cabeza en la roca a nuestra espalda, despus cerr
los ojos.
Segu su ejemplo en el intento de alejar la tentacin, pero sin realmente
darme cuenta comenc a fantasear: las manos de Rei que se insinuaban
bajo el agua para tocarme, su suave boca que se cerraba sobre mi cuello y
descenda hacia mi pecho
La respiracin se me bloque en la garganta.
Miyuki
Abr los ojos y me encontr el rostro de Rei muy cerca.
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nesta con mis sentimientos confes mientras los latidos del corazn aceleraban su comps.
Rei se sobresalt. Nos detuvimos en el mismo momento y fuegos artificiales explotaron repentinamente sobre nuestras cabezas, iluminando
toda la pista de baile. La gente a nuestro alrededor emiti grititos de estupor y aplausos, pero nuestros ojos no se desviaron los unos de los otros
hasta que nuestras madres nos llamaron.
Chicas, todo bien? me puso mi madre una mano sobre el hombro.
S, todo bien, Eriko-san respondi amablemente Rei girndose hacia ella.
Ah, menos mal. Estbamos preocupadas, os vimos quedaros paradas
de pronto y tenais una cara tan seria se puso a un lado dejando sitio a
Ritsuko.
Has logrado hacer bailar a mi hija, Miyuki-chan. Increble me mir
la mujer.
Bueno, nos estbamos divirtiendo un poco sostuve ms mal que
bien su cansada mirada, despus otros fuegos se encendieron en el cielo y
finalmente lograron capturar la atencin de Ritsuko.
Rei, a mi lado, tena la nariz empinada y an una adorable sonrisa en
sus labios.
Qu bella es!, la observ sin que se diera cuenta, y en ese momento
sent su mano rozar la ma.
Puedo? pregunt con una dulce mirada. Yo me qued atnita hasta
que sent sus dedos entrelazarse con los mos Esta noche ests bellsima Miyuki dijo en un susurro acercndose a mi odo.
Cuntas veces se haba parado mi corazn en ese da?
Mi madre y Ritsuko entraron en su habitacin un poco bamboleantes.
Despus de los fuegos artificiales se haban bebido otra botella de champn con la excusa de brindar por cada pequea tontera. Ritsuko ya no me
pareca sospechosa, as que no le di ms importancia a sus miras puestas
en mi madre. Lo nico en lo que pensaba en ese momento era en poder
quedarme finalmente a solas con Rei.
Cuando entramos en nuestra suite, ya eran casi las dos de la madrugada. Estbamos destrozadas y al mismo tiempo alegres.
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Orange Cream
CONTINUA...
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