Antologia de Sociologia
Antologia de Sociologia
Antologia de Sociologia
ANTOLOGÍA DE
SOCIOLOGÍA
YESSICA ESPINOSA LÓPEZ
2° I
SOCIOLOGÍA
2014-2015
Sociología y vida cotidiana
Joseph Vincent Marques - Cap 1: Casi todo podría ser de otra manera
“Las cosas no son necesariamente, naturalmente, como son ahora y aquí. Todo podría
ser de otra manera, pero ésta es la que le ha correspondido, ya que vive aquí, son
costumbres. El día del señor Timoneda, podría haber sido, pues, muy distinto, y
también el de las personas que lo rodean. Sería un error pensar que sólo podría haber
sido distinto de haber nacido en otra época, con el nivel tecnológico actual son posibles
diferentes formas de vida. Las cosas podrían ser, para bien y para mal, distintas, no
podemos entender como trabajamos, consumimos, amamos, nos divertimos, nos
frustramos, hacemos amistades, crecemos o envejecemos, si no partimos de la base
de que podríamos hacer todo eso de muchas formas. Muy pocas cosas están
programadas por la biología, cómo se concreta todo depende de las circunstancias
sociales en las que somos educados, maleducados, hechos y deshechos. La sociedad
nos marca no sólo un grado concreto de satisfacción de las necesidades sino una
forma de sentir esas necesidades y de canalizar nuestros deseos.”
La mayor parte de las necesidades y situaciones que experimentan los hombres no son
naturales. Desde la perspectiva de las Ciencias Sociales se señala que sólo en la
esfera del conocimiento del sentido común se produce la “naturalización”, fenómeno
que lleva a los hombres a considerar sus acciones y sus creencias como naturales.
Es una actitud previa a la sociología, como una condición para poder hacer sociología.
Pensar que todo podría ser de otra manera. ¿Cuál sería el sinónimo de pensar que
todo podría ser de otra manera? Desnaturalizar. Pensar que todo podría ser de otra
manera es una primera forma, muy rudimentaria, muy básica de desnaturalizar lo
social. Naturalizar es atribuirles a los fenómenos sociales un carácter invariable.
¿Cómo varían los fenómenos sociales? Varían según el tipo de sociedad en que nos
encontremos y según el momento histórico en que nos encontremos. En cambio, los
fenómenos naturales no varían según la sociedad en que nos encontremos ni el
momento histórico. Un árbol crece del mismo modo acá y en la China, hoy o a principio
de siglo. Los planetas se mueven del mismo modo, el organismo del ser humano
funciona del mismo modo. Entonces, los fenómenos naturales (sean físicos, biológicos,
orgánicos), ocurren siempre del mismo modo, independientemente del tipo de sociedad
en que nos encontremos y del momento histórico en que nos encontremos. La cuestión
aquí es que para pensar sociológicamente es preciso desnaturalizar los fenómenos que
nos rodean. ¿Qué quiere decir desnaturalizar? Quiere decir considerar que esos
fenómenos pueden variar según el tipo de sociedad en que nos encontremos y el
momento histórico dentro de esa sociedad. Ahora bien, ¿eso quiere decir que NO hay
fenómenos naturales? Sí, hay, obvio que hay. E incluso algunos de esos fenómenos
tienen que ver con los humanos. Por ejemplo, el caso de la comida. Preguntarse si
comer es un hecho social o es un hecho natural es una pregunta tramposa. Porque lo
natural tiene que ver con el acto de comer: hay una cierta composición biológica de un
organismo humano que hace que comer sea una necesidad. Pero comer también tiene
una dimensión social. Y yo iría más lejos que Marqués, no diría que sólo en la manera
en que comemos, incluso en la forma en la "sentimos" la comida": no hay nada
biológico que diga que la comida tiene que ser "rica". El cuerpo humano necesita
ciertos elementos químicos, no necesita que sea rico. Entonces, dice Marqués, una
ayuda para lograr desnaturalizar lo social,
3. ¿Cuáles son en nuestro tiempo los mayores problemas para los públicos y las
inquietudes clave de los individuos particulares? Para formular problemas e
inquietudes, debemos preguntarnos qué valores son preferidos, pero amenazados, y
cuáles preferidos y apoyados por las tendencias características de nuestro tiempo. El
nuestro es un tiempo de malestar e indiferencia, pero aún no formulados de manera
que permitan el trabajo de la razón y el juego de la sensibilidad. En lugar de
inquietudes, hay con frecuencia la calamidad de un malestar vago; en vez de
problemas explícitos, muchas veces hay sólo el desalentado sentimiento de que nada
marcha bien.
“El principal peligro” para el hombre reside hoy en las fuerzas ingobernables de la
sociedad contemporánea misma, con sus métodos impersonales de producción, sus
técnicas envolventes de dominación política, su anarquía internacional, en una palabra,
con sus penetrantes transformaciones de la “naturaleza” misma, del hombre y las
condiciones y finalidades de su vida. La primera tarea política e intelectual del científico
social consiste hoy en poner en claro los elementos del malestar y la indiferencia
contemporáneos. Es a causa de esta tarea por lo que las ciencias sociales se están
convirtiendo en el común denominador de nuestro periodo cultural, y la imaginación
sociológica en la cualidad mental más necesaria.
4. En todas las épocas intelectuales tiende a convertirse en común denominador de la
vida cultural determinado estilo de pensamiento. Uno de los significados de la idea de
un común denominador intelectual es que los hombres pueden formular sus
convicciones más poderosas según sus términos. Otros términos y otros estilos de
pensamiento parecen meros vehículos de escape y oscuridad. El que prevalezca
común denominador no significa, naturalmente, que no existan otros estilos de
pensamiento y otros tipos de sensibilidad. Creo yo que la imaginación sociológica se
está convirtiendo en el principal común denominador de nuestra vida cultural y en su
rasgo distintivo. Las cualidades de esta imaginación se han convertido en rasgos
fundamentales de esfuerzo intelectual y de sensibilidad cultural en una gran diversidad
de expresiones. Es una cualidad que parece prometer de la manera más dramática
la comprensión de nuestras propias realidades íntimas en relación con las más
amplias realidades sociales. Es una facultad mental que posibilita a los hombres
evaluar las situaciones desde una perspectiva superadora de los estrictos límites de la
particularidad, tomando en cuenta los procesos históricos y la formación económico-
social en la que están insertos; y también les permite superar el sufrimiento y la
desvalorización de sí mismos, ocasionados por una visión ingenua.
5. Mi propósito en este libro es definir el significado de las ciencias sociales para las
tareas culturales de nuestro tiempo. Deseo especificar las clases de esfuerzo que están
detrás del desarrollo de la imaginación sociológica, indicar lo que ella implica para la
vida política y para la vida cultural, quizá señalar algo de lo que se necesita para
poseerla, y de esta manera, aclarar la naturaleza y los usos de las ciencias sociales en
la actualidad. Precisamente ahora hay entre los cultivadores de las ciencias sociales un
malestar muy generalizado, tanto intelectual como moral por la dirección que parece ir
tomando la disciplina de su elección, que, así como las infortunadas tendencias que
contribuyen a producirlo, forman parte, de un malestar general de la vida intelectual
contemporánea. Dicho con toda franqueza, espero aumentar ese malestar, definir
alguna de sus fuentes, contribuir a transformarlo en un apremio específico para
comprender la promesa de la ciencia social y limpiar el terreno para empezar de nuevo:
en suma, indicar alguna de las tareas que hay que hacer y los medios disponibles para
hacer el trabajo que hay que hacer hoy. Creo que lo que puede llamarse análisis social
clásico es una serie de tradiciones definibles y usables; que su característica esencial
es el interés por las estructuras sociales históricas; y que sus problemas tienen una
relación directa con los urgentes problemas y las insistentes inquietudes humanas. La
atención intelectual y la atención pública están ahora tan manifiestamente fijas sobre
los mundos sociales que se supone que los profesionales de las ciencias sociales
estudian, que hay que reconocer que se encuentra por única vez ante una oportunidad
en la cual se revelan la promesa intelectual de las ciencias sociales, los usos culturales
de la imaginación sociológica y el sentido político de los estudios sobre el hombre y la
sociedad.
6. Todas las infortunadas tendencias que estudiaré en los capítulos siguientes caen
dentro de lo que generalmente se considera “el campo de la sociología”. Una
diversidad de trabajo intelectual verdaderamente notable ha entrado a tomar parte en el
desarrollo de la tradición sociológica, quizás se admita que lo que ahora se reputa
trabajo sociológico ha tendido a moverse en una o más de tres direcciones generales,
cada una de las cuales está expuesta a ciertas deformaciones.
2. Hacia una teoría sistemática de “la naturaleza del hombre y de la sociedad”: en las
obras de los formalistas la sociología trata de conceptos destinados a servir para
clasificar todas las relaciones sociales y penetrar sus características supuestamente
invariables, en suma, se interesa en una visión más bien estática y abstracta de los
componentes de la estructura social en un nivel muy elevado de generalidad.
Bueno, esas son las primeras herramientas. Después de eso, Mills agrega dos
conceptos más que nos pueden servir para ejercer esa capacidad mental de la que
habla: el de inquietudes y el de problemas. Una inquietud es una amenaza a los
valores del individuo, justamente porque la causa de la inquietud se encuentra en la
órbita privada. Volviendo a mi ejemplo, puede ser que a mí me echen del trabajo, y
puede ser que eso sea por razones personales: soy vago, mi jefe es un hijo de puta,
etc. Cosas relacionadas con mis relaciones inmediatas. Un problema, en cambio, es
una amenaza a los valores sociales, justamente porque su causa está en la esfera
pública, es decir en las instituciones sociales: una contradicción o una crisis en las
instituciones es la causa de la amenaza de los valores. O son inquietudes, O son
problemas. Las dos cosas, no.
¿Qué relación encuentran entre los dos textos que vimos hoy?
Diego sayas: los dos marcan una especie de llamado de atención a las conductas que
parecerían naturales de las sociedades, apuntan a mostrar que hay otras maneras de
organización social además de esta
· Los cambios implicados no son sólo cambios a gran escala. Se han producido
modificaciones esenciales también en las características más íntimas y personales de
la vida de las personas. El desarrollo del énfasis en el amor romántico como base del
matrimonio es un ejemplo.
· La sociología tiene vínculos íntimos con otras ciencias sociales. Todas las ciencias
sociales se ocupan de la conducta humana, pero se concentran en aspectos diferentes
de la misma. Los nexos entre la sociología, la antropología, y la historia son
particularmente importantes.
· Los sociólogos intentan ser objetivos en sus estudios del mundo social, abordando su
trabajo sin prejuicios. La objetividad no solo depende de las actitudes del investigador,
sino también de la evaluación pública de la investigación y de la teoría, que forma parte
esencial de la sociología como disciplina académica.
“Antes de investigar cuál es el método que conviene para el estudio de los hechos
sociales, importa saber cuáles son los hechos a los que así se denomina.
Hay tres características que deben tener los fenómenos que observemos para poder
considerarlos hechos sociales: tienen que ser exteriores al individuo, tienen que ejercen
una coerción o presión sobre él, y son generales, porque son independientes y
externos a los individuos. Los hechos sociales nunca tienen causas individuales.
Durkheim no lo dice así, pero en realidad el hecho social, yo te diría que no existe por
sí mismo, sino que es más bien una forma de "mirar la realidad". Veo el suicidio, y en
lugar de preguntarme qué pasa al tipo, me pregunto: ¿hay en el acto de ese tipo algo
que está más allá de él, que lo coerción, etc.?
Durkheim piensa que la herramienta fundamental de la sociología son las encuestas los
estudios de población, y todo eso. Si yo veo un tipo que se suicida, eso no es nada,
pero si te digo que veo que durante un período de diez años hay en tal grupo una tasa
de suicidios del 5%, y en tal otro una tasa de suicidios del 15%, ahí pasa algo.
“Si se quiere entender de qué trata la sociología hay que ponerse previamente en
situación de interpelarse mentalmente a sí mismo y de hacerse cargo de uno como una
persona entre otras.
Elías justamente critica la idea de que pueda pensarse a la sociedad como separada
del individuo. Elías dice, entonces, que esta idea muy propia de las ciencias sociales,
pero también de cualquier persona, de que se piensa a la sociedad como separada del
individuo, viene de lo que él llama el "modelo egocéntrico". ¿Cuál es el principal
problema que él ve en ese modelo egocéntrico? El individuo está en el centro, pero el
problema que tiene Elías con todo eso, es que cuando el individuo queda separado de
la sociedad, la sociedad aparece cosificada. Eso quiere decir, que si pensamos a la
sociedad como algo que está más allá de las personas la pensamos como si fuera una
cosa, la pensamos como si tuviera los mismos atributos que tienen las cosas. Elías
dice que el mundo social no tiene leyes que sean independientes de las personas, y
además tiene un sentido. Las personas interpretan lo que hacen y lo que hacen los
demás, les dan valores, etc. Entonces, justamente por esa diferencia que hay entre el
mundo natural (de las cosas o los objetos) y el mundo social, no podemos pensarlos
del mismo modo. No podemos tratar a la sociedad, o a una institución social, como si
fuera una cosa, como si tuviera una vida propia independiente de las personas que la
forma. Cuando Elías nos dice que no hay que "cosificar" nos está diciendo que no se
puede tratar lo social como hechos naturales. No es que estén diciendo exactamente lo
mismo, pero hay una relación muy fuerte. Entonces, el modelo egocéntrico, que todos
saben qué es, tiene el problema de que produce una mirada codificadora de lo social.
¿Por qué se produce esto? Elías tira tres factores:
1) El primero es que las figuras sociales, efectivamente ejercen una presión sobre los
individuos. Esto es importante, porque les deja ver que Elías se opone a la cosificación,
pero tampoco nos está diciendo que podemos pensar la sociedad como un conjunto de
individuos que hacen lo que quieren, como una sumatoria de individuos. Las
interacciones y las relaciones de poder hacen que efectivamente los individuos sientan
la presión social, y eso hace que el esquema mental más fácil para entender esa
presión sea el egocéntrico, como cuando decimos que la "sociedad nos presiona
para..."
2) El segundo factor es que las ciencias sociales han nacido tomando los modelos de
las ciencias naturales o físicas, que eran las ciencias dominantes y prestigiosas en el
siglo XIX. Un ejemplo clarísimo de eso es Durkheim. En el texto de Durkheim van a
encontrar muchas "palabras" tomadas de las ciencias naturales (como cuando
distingue hechos sociales morfológicos y fisiológicos).
Entonces, les decía que tienen que leer los títulos de las unidades. Y esta unidad que
estamos viendo hoy se llama: "Construcción del objeto de la sociología". Entonces en
Elías vamos a tener un autor que también se pregunta por el objeto de estudio de la
sociología, pero que lo hace mucho tiempo después que Durkheim, y que, en cierta
medida, uno podría decir que se opone precisamente a lo que propone Durkheim.
¿Cuál es el problema que afronta el texto de Elías, de qué problema parte? El
problema que plantea Elías, básicamente, es que las ciencias sociales, o si quieren con
más precisión la sociología, tienen serios problemas para encontrar un modelo de
pensamiento y conceptos que sean adecuados al objeto que estudian. Elías dice: el
objeto de estudio de la sociología, finalmente son los hombres. Las acciones humanas,
los pensamientos, las relaciones que establecen los hombres. Pero los hombres, a
diferencia de los objetos del mundo natural, sean animados o inanimados, le dan
sentido a las acciones que hacen, le dan sentido a las acciones de los demás, tienen
intenciones, etc. Entonces el objeto de las ciencias sociales no tiene nada que ver con
el de las ciencias naturales. Si queremos hacer sociología de la misma manera que un
físico estudia la ley de gravedad, o que un biólogo estudia un árbol, es un desastre. No
vamos a entender nada, y nos vamos a hacer finalmente representaciones fantasiosas,
es decir, que no coincide con la realidad de ese objeto. Elías reclama un cambio
importante en el lenguaje y los modelos de pensamiento de las ciencias sociales. Dice,
las ciencias sociales tienen que conseguir un modelo propio, tal como hicieron las
ciencias exactas o naturales en su momento.
¿Cuál es ese modelo inadecuado, que nombre le da Elías? Elías resume todo eso que
quiere criticar en lo que llama el modelo egocéntrico. Ese modelo es el modelo con el
que el "hombre de la calle" piensa la sociedad, pero también, dice Elías,
lamentablemente es el modelo de la sociología. Lo fundamental de ese modelo es que
piensa al individuo y a la sociedad como realidades separadas, como entes distintos.
Piensen un segundo en el hecho social... ¿Ven la crítica a Durkheim?
José M.--> dice: si, el hecho social como algo externo fuera del hombre
Para Durkheim eso era el punto de partida, lo mismo que Elías critica. Durkheim nos
dice: si no separamos la sociedad del individuo, no hay sociología. Y Elías nos dice que
no, que eso es un modelo fantasioso. ¿Cuál es el efecto que produce el modelo
egocéntrico (¡palabra clave!)? La cosificación, pero no de los conceptos, sino de la
sociedad, de las instituciones. Si concibo a la sociedad como separada del individuo,
como algo que vive independientemente del individuo, que tiene leyes que están más
allá de los individuos, que tiene una realidad propia (como hacía Durkheim) entonces
estoy tratando a la sociedad como si fuera un planeta, como si fuera un árbol, la ley de
gravedad, etc. En definitiva, como si fuera una cosa, como si fuera un objeto. Tratar a
un árbol como algo que es independiente de los individuos, está muy bien, pero tratar a
la sociedad así, ¡NO! Es un desastre. ¿Por qué es un desastre? Porque la sociedad no
es más que la interacción de distintos individuos. El problema es que cuando decimos
"sociedad", en última instancia nos estamos refiriendo a las interacciones que
establecen los individuos. Bueno, entonces imaginen alguien que nos dice: "No, lo que
pasa es que el sistema te corrompe". Y Elías le diría: "¿El sistema? ¿Qué sistema? Lo
que vos llamas "sistema" somos nosotros mismos interactuando, no hay algo que tenga
vida propia por encima de nosotros. Elías encuentra dos factores que pueden explicar
la vigencia y la fuerza que tiene el modelo egocéntrico: uno es el lenguaje, el lenguaje
con el que contamos no nos permite expresar esas relaciones adecuadamente, el
lenguaje con el que contamos cosifica. El segundo es que, a pesar de que decimos que
la sociedad es un entramado de interrelaciones, etc., también es cierto que esas
interrelaciones en las que nos encontramos nos presionan de cierto modo. Entonces,
para expresar esa presión, usamos esas figuras cosificadas. Yo puedo decirte:
, la universidad no es una cosa, no es algo separado de vos, que está por encima tuyo,
la universidad finalmente son las interrelaciones que sostenemos nosotros diariamente,
nosotros y todos los demás. Pero que vos formes parte de esas interrelaciones, no
quiere decir que seas libre, que hagas lo que quieras, y que puedas hacer con esas
interrelaciones (con la universidad), lo que se te antoja. Las interrelaciones ejercen
cierta presión sobre vos. La idea de Elías es abandonar un modelo (el egocéntrico) y
tomar otro. El de las interacciones, interdependencia, con relaciones de poder
inestables.
· La definición de los hechos sociales como “externos”: Durkheim reconoce que hay
una clase distinta de determinantes específicamente sociales de la conducta. Su
característica específica es su carácter externo desde el punto de vista de un individuo
que participa del sistema social. Un hecho social, nos dice, es “toda manera de actuar
que sea general en una sociedad dada y que, al mismo tiempo, exista por derecho
propio, independientemente de sus manifestaciones individuales.
“Sin dudas, esta distinción (entre los hechos sociales existentes independientemente y
sus manifestaciones) no siempre se manifiesta con igual claridad, pero sus existencia
obvia en casos importantes y numerosos ya citados basta para probar que el hecho
social es una cosa distinta de sus manifestaciones individuales. Además, aun cuando
esta disociación no aparezca inmediatamente, a menudo se la puede descubrir
mediante ciertos recursos metodológicos. Tal disociación es indispensable, si se
quieren separar los hechos sociales de sus aleaciones, para observarlos en estado de
pureza. Con una intensidad que varía según el tiempo y el lugar, las corrientes de
opinión impelen a ciertos grupos, por ejemplo, el aumento de los matrimonios o de los
suicidios, o provocan un ascenso o una disminución del índice de natalidad, etc. Estas
corrientes son, evidentemente, hechos sociales, A primera vista pueden parecer
inseparables de las formas que adoptan en casos individuales, pero la estadística nos
brinda los medios de aislarlas. De hecho, están representadas con considerable
exactitud por los índices de natalidad, de matrimonios y de suicidios…”
Las corrientes sociales son variables teóricas introducidas por el sociólogo y los
índices estadísticos son el medio para verificar las proposiciones referentes a ellas.
Esas variables teóricas están definidas operacionalmente en términos del conjunto de
estadísticas particulares.
· La ciencia de la cultura y la ciencia de la sociedad: Los hechos sociales típicos son las
leyes y costumbres, el contenido de la educación y las corrientes de opinión. Uno de
los hilos del pensamiento de Durkheim lo llevaba continuamente a la idea de que hay
una “sociedad” total, con autoridad moral sobre el individuo, y que aceptamos como
obligatorios las leyes, costumbres y otros aspectos normativos de nuestra herencia
social porque son las reglas de la sociedad. Si decimos que nuestro objeto es el
estudio y la comparación de sociedades humanas, debemos estar en condiciones de
decir qué son las entidades básicas de las que nos ocupamos. Otro hecho fundamental
de la sociología de Durkheim es que su énfasis en el carácter externo de los hechos
sociales le impidió analizar el concepto elemental de relación social.
Henry Medras
1. Los valores: Toda sociedad define lo que está bien y lo que está mal. Al implicar,
trascendencia y superioridad, un valor se impone al individuo como evidencia y
absoluto, matizable, si se quiere, pero nunca puesto en entredicho. Por supuesto, los
valores varían con las civilizaciones e incluso, en el interior de una misma civilización,
con los grupos y categorías sociales. Los valores se organizan en un “ideal”, propuesto
por la sociedad a sus miembros, ideal que es algo más que un simple futuro al que se
aspira. En una sociedad dada, los valores se organizan en un sistema o es cala de
valores que tienen que guardar cierta coherencia, aun cuando implique alguna
contradicción. Si el sistema de valores, en especial la moral teórica, tiene que ser
congruente con la ideología, los mitos y creencias de un grupo social tienen que ser
también congruentes, en forma de moral práctica, con la organización y el
funcionamiento de la vida social y económica. El hecho de que la transformación de
estructuras sociales coincida con transformaciones morales no quiere decir,
evidentemente que unas sean causa de otras.
La vida cotidiana es la vida de todo hombre. En ella se “ponen en obra” todos sus
sentidos, todas sus capacidades intelectuales, sus habilidades manipulativas, sus
sentimientos, pasiones, ideas, ideologías. La vida cotidiana es en gran medida
heterogénea. Son partes orgánicas de la vida cotidiana la organización del trabajo y de
la vida privada, las distracciones y el descanso, la actividad social sistematizada, el
tráfico y la purificación. La vida cotidiana también es jerárquica, y su forma concreta no
es eterna e inmutable, sino que se modifica de modo específico según las diferentes
estructuras económico-sociales. La heterogeneidad y el orden jerárquico (la condición
de organicidad) de la vida cotidiana coinciden en posibilitar un despliegue “liso” de la
producción y la reproducción, no sólo en el “campo de la producción” en sentido
estricto, sino también en lo que respecta a las formas del tráfico. El hombre nace ya
inserto en su cotidianeidad. La maduración del hombre significa en toda sociedad que
el individuo se hace con todas las habilidades imprescindibles para la vida cotidiana de
la sociedad (capa social) dada. El adulto ha de dominar ante todo la manipulación de
las cosas. La vida cotidiana es la verdadera “esencia” de la sustancia social. La vida
cotidiana es la vida del individuo. El individuo es siempre y al mismo tiempo ser
particular y ser específico. Eso no le distingue de ningún otro ser vivo si se considera
en sentido naturalista. Un hombre no puedo representar ni expresar jamás la esencia
de la humanidad. Lo que caracteriza esa particularidad social es la unicidad, la
irrepetibilidad que son hechos ontológicos fundamentales. Las necesidades humanas
se hacen siempre conscientes en el individuo como necesidades del Yo. Todo
conocimiento del mundo y toda pregunta referente al mundo que se motiven
directamente por ese “Yo” único, por sus necesidades y sus pasiones, es una cuestión
de la particularidad. También lo específico, está “contenido” en todo hombre, y
precisamente en toda actividad que sea específica aunque sus motivos sean
particulares. Es posible considerar humano-específicos en su mayoría los sentimientos
y las pasiones, pues su existencia y su contenido pueden ser útiles para expresar y
transmitir la sustancia humana. El individuo (la individualidad) contiene tanto la
particularidad cuanto lo específico que funciona consciente e inconscientemente en el
hombre. El desarrollo del individuo es ante todo función de su libertad fáctica o de sus
posibilidades de libertad. La ética como motivo (lo que llamamos moral) es algo
individual, pero no una motivación particular: es individual en el sentido de actitud
libremente adoptada (con libertad relativa) por nosotros ante la vida, la sociedad y los
hombres. La vida cotidiana está cargada de alternativas, de elecciones. Cuanto mayor
es la importancia de la moralidad, el compromiso personal, la individualidad y el riesgo
(que siempre van juntos) en la decisión sobre una alternativa dada, tanto más
fácilmente se yergue ésta por encima de la cotidianeidad y tanto menos es posible
hablar de una decisión cotidiana. Ningún hombre es en realidad capaz de obrar de tal
modo que su acto se convierta en ejemplo universal, porque todo hombre actúa
siempre como individuo concreto y en una situación concreta. Los conflictos extremos y
puramente morales se producen en los casos en que la motivación moral se hace
determinante y su impulso, su finalidad y su objeto se han de entender como servicio a
la elevación hasta lo específico. La cima de la elevación moral por encima de la
cotidianeidad es la catarsis. En la catarsis el hombre se hace consciente de lo humano
específico de su individualidad.
Las formas de elevación por encima de la vida cotidiana que producen objetivaciones
duraderas son el arte y la ciencia. El medio de la abolición-superación parcial o total de
la particularidad, de su arranque de la cotidianeidad y su ascenso a los específico, es la
homogenización, que significa, por una parte, que concentramos toda nuestra atención
sobre una sola cuestión y “suspendemos” cualquier otra actividad durante la
satisfacción de la anterior tarea; y por otra parte, que aplicamos nuestra entera
individualidad humana a la resolución de esa tarea.
• Precedentes: son indicadores “útiles” para definir nuestras actitudes. Si sabemos cuál
fue la actuación de otro en tal situación, nos manejamos teniendo en cuenta tal actitud.
Puede considerárselo como un fenómeno “positivo” en la mediad en que no imposibilite
la percepción de lo nuevo y único de una situación.
Hoy tenemos que ver uno de los textos más difíciles del primer examen, el texto de
Heller. Es en realidad la introducción a un libro, entonces tiene la ventaja de ser corto, y
la desventaja de que hay mucho contenido apiñado, sin demasiado desarrollo. ¿Cuál
dirían que es el problema que aborda el texto? El problema es la vida cotidiana, y eso
es un problema porque las ciencias sociales no habían tomado, hasta un tiempo
relativamente reciente, la vida cotidiana como objeto de estudio. Siempre se pensaron
los "grandes problemas sociales" pero no se había hecho una sociología de la vida
cotidiana. Lo primero entonces que nos va a dar Heller es una definición muy precisa
de qué es la vida cotidiana. Hasta este momento trabajábamos con una definición de
"sentido común". Entendíamos como vida cotidiana aquello que una persona hace con
frecuencia, todos los días. Pero como definición es muy insuficiente, porque no todos
hacemos lo mismo, y además hay cosas que no hacemos todos los días y que uno
puede considerar como cotidianas. Heller dice que la vida cotidiana es el ámbito de la
vida social en que se reproduce la persona y se produce la reproducción social. ¿Qué
sería la reproducción social? En general, creo que es claro para todos que una
sociedad debe producir para subsistir. Producir bienes, por ejemplo. Pero además,
debe producir las condiciones que permiten producir esos bienes: podemos hablar de
aspectos económicos, como el mantenimiento de máquinas, edificios, calles, etc., pero
también de aspectos culturales o simbólicos, como las normas sociales. Entonces,
decimos que una sociedad debe PRODUCIR, pero al mismo tiempo REPRODUCIR las
condiciones a partir de las cuales puede producir. Es toda la primera página estoy
intentando darle una forma más entendible y esquemática. Por ahora, lo que estamos
diciendo corre para la sociedad capitalista como para cualquier otra: toda sociedad
debe reproducir las condiciones en las cuales produce y distribuye los bienes que
produce. Por eso Heller va a decir que la vida cotidiana es una realidad que existe en
cualquier tipo de sociedad, que toda sociedad tiene una vida cotidiana. Entonces,
reproducción social sería producir las condiciones en las cuales se producen los
bienes. La vida cotidiana es el ámbito de la sociedad en el cual se produce la
reproducción. Eso quiere decir que se generan las condiciones para que la sociedad
siga existiendo tal como existe. Pero es también el ámbito en que las personas se
reproducen, "los particulares", como dice Heller. Yo estoy acá dando clase, y al tiempo
que reproduzco mis condiciones de vida, estoy reproduciendo el sistema educativo, en
este caso, el universitario. Justamente por eso, es que la vida cotidiana es entonces
HETEROGÉNEA, porque las actividades que son necesarias para la reproducción
social y la propia son muy diversas: tengo que hacer limpieza, comer, cocinar, cuidar
de mis hijos o abuelos, trabajar, en mi caso leer y estudiar, distraerme, etc. La
heterogeneidad refiere al carácter completamente diverso de las actividades que
conforman la vida cotidiana. Ahora bien, podría uno preguntar: ¿cómo es posible que
una sociedad se reproduzca en semejante caos? Entonces, si la vida social puede
desarrollarse, a pesar de la heterogeneidad (si puede haber un "liso despliegue", dice
Heller) es porque ese conjunto de actividades está ordenado según una jerarquía. Por
eso la vida cotidiana es jerárquica, además de heterogénea. Por ejemplo, si ustedes
toman las actividades que hace una persona en su vida, en una sociedad como la
nuestra, capitalista, la actividad de mayor importancia es el trabajo. Esto se modifica
según las diferentes estructuras económico-sociales. Esa jerarquía no es subjetiva,
está impuesta por la estructura socioeconómica de la sociedad en la que nos
encontremos, y el grupo social al que pertenezcamos. Por ejemplo, para un señor
feudal, su actividad cotidiana más importante era la guerra. Por eso Heller dice
"jerarquía espontánea", con eso quiere decir que se nos impone de un modo irreflexivo,
sin que siquiera tomemos una decisión consiente
(¡Parece un piropo!), sus específica porque ese ser particular nació de la forma en que
incorporaste o te formaste como ser social, aprendiendo normas, aprendiendo a hablar,
a relacionarte con los demás, etc. Bueno, entonces tiene que quedar bien claro que ser
particular y ser específico no son dos personas distintas, ni siquiera dos tipos de
personas, sino que son dimensiones que componen el ser de cada hombre, lo que
cada hombre es, todos somos al mismo tiempo seres particulares y seres específicos.
Ahora bien, aquí pasamos al problema siguiente, que es el de la relación entre el ser
particular y el ser específico en la vida cotidiana. Si, como dijimos, todo hombre es
particular y específico al mismo tiempo, lo que puede cambiar es el grado en que
seamos conscientes de ello. Por eso es que Heller dirá que hay, en la vida cotidiana,
una tendencia a que ser particular y específico coexistan "en muda comparecencia".
Quiere decir que ambos (obvio, por lo que ya dijimos) se encuentran presentes, pero
están sin comunicación, como "mudos". La tendencia de la vida cotidiana en las
sociedades capitalistas es a que la conciencia del ser particular oculte la conciencia del
ser específico. Es decir, soy consciente de que soy un ser único e irrepetible, distinto
de los demás, con necesidades propias, pero eso me oculta el hecho de que soy un ser
social, que incluso mi yo y mis propias necesidades son construidas o fueron
construidas socialmente. En algo se parece a Durkheim, pero eso es muy general, es lo
que diría cualquier sociólogo. En un sentido, Heller está tomando el mismo problema
que todos los autores que vimos hasta ahora: ¿cómo pensar la relación entre individuo
y sociedad? Sólo que la toma de un modo muy compleja, porque no nos dice que el
individuo es una cosa y la sociedad otra, como hacía Durkheim, o incluso Mills, nos
dice que EN el individuo mismo, como si dijéramos dentro de él, está la sociedad. El
individuo es un ser social. Bueno, si esta tendencia al ocultamiento del ser específico
llega a cristalizar, es decir, a volverse tan sólida que ya no permite en absoluto esa
conciencia, se produce el fenómeno de la extrañación. Cuando no soy consciente de
que estoy formado socialmente, de que mis propias necesidades son necesidades
sociales, ocurre que la sociedad se me aparece como algo EXTRAÑO a mí mismo,
como algo ajeno, como algo independiente de mi propio ser, como algo, que tiene vida
propia y se me impone desde fuera. Un ejemplo muy facilito de pensar es lo que ocurre
con la economía. Uno siempre siente que la economía del país se mueve sola, que
tiene sus propias leyes, que no podemos manejarla y se nos impone. Pero la economía
es, en definitiva, todos nosotros haciendo y llevando nuestra vida cotidiana, la
economía somos todos nosotros cuando vamos a trabajar, cuando compramos, cuando
vendemos, etc. Aparece cosificada como dice Elías.
La sociología no tendría por qué dar salidas, pero Heller la da, o al menos nos da
conceptos para pensar esa "salida". Es lo que, al final del texto, llama "regimiento de
la vida". El regimiento de la vida sería el proceso opuesto al de la extrañación y estaría
indicando un proceso por el cual el hombre es consiente
¿Cómo se distribuyen los bienes en una sociedad como la nuestra? Los bienes se
distribuyen a través del mercado, a través del dinero. En otras sociedades el dinero no
existía, la distribución se hacía de otro modo, pero una sociedad siempre distribuye lo
que produce. Esas son las condiciones básicas para que haya reproducción social.
Pero lo importante es que tiene que haber bienes. Por eso hay un párrafo de Heller
medio difícil que habla del "liso despliegue" de la producción y del "tráfico". Ahí Heller
está hablando de eso. Lo que nos intenta explicar es que si la vida cotidiana fuera sólo
heterogénea, la producción social y el intercambio sería un caos. Infinidad de
actividades, completamente distintas... la sociedad no podría producir y distribuir bajo
esas condiciones. Entonces, dice Heller, la vida cotidiana no es sólo heterogénea,
también es JERÁRQUICA. ¿Qué es la JERARQUÍA de la que habla Heller? Poner
cierta prioridad en las actividades a realizar. Importante es que Heller no habla de
jerarquía entre personas, habla de la escala de importancia que tienen las actividades
de la vida cotidiana. Y dice que la jerarquía, entonces, es lo que da "organicidad" a la
vida cotidiana: es decir, que organiza ese conjunto heterogéneo de actividades. ¿Cuál
sería en nuestras sociedades la actividad más importante en esa escala jerárquica? El
trabajo. En la Edad Media no había dinero. La relación social fundamental era entre el
señor feudal y el siervo. El señor le daba tierra y protección, el campesino le daba parte
de lo que producía. No hay mercado, ni dinero. En una estructura social como esa, la
actividad más importante para el campesino era el trabajo, pero para el señor feudal
era la guerra: su poder y riqueza dependía del territorio que conquiste, porque de eso
dependía cuántos campesinos trabajaran para él. Con ese ejemplo ya podemos
contestar a la pregunta que sigue: ¿la jerarquía de la vida cotidiana es subjetiva, es
algo que decide cada sujeto? No. ¿De qué depende? depende de la ESTRUCTURA
SOCIOECONÓMICA. El estado es otra cosa, y la "sociedad" es un poco imprecisa. La
estructura socioeconómica hace referencia al tipo fundamental de relación social: amo-
esclavo, señor feudal-siervo, burgués-proletario. Por eso Heller le llama a esta jerarquía
de la vida cotidiana, JERARQUÍA ESPONTÁNEA. Dice "espontánea" en un sentido no
literal. Acabamos de ver que no tiene nada de "espontánea", pero a las personas en la
vida cotidiana se les aparece como ya dada, como impuesta, como una jerarquía que
ellos no deciden, por lo tanto, como "espontánea". Bueno, vimos: VIDA COTIDIANA,
HETEROGENEIDAD, JERARQUÍA. Y nos faltaría, pare terminar de cerrar esta primera
parte, la categoría de HOMBRE ENTERO. ¿Por qué Heller llama así al hombre tal
como vive su vida cotidiana? Lo importante que retengan de esto, es que el hombre
entero en realidad es lo contrario de lo que suena. Heller dice "entero", porque yo esto
enteramente absorbido por mi cotidianeidad, pero justamente como mi cotidianeidad es
heterogénea, el hombre entero es un hombre totalmente fragmentado: sus
capacidades, sus habilidades, facultades, sentimientos, se ponen en distintas
actividades, de distinto modo, sin poder desarrollarse del todo. Al final de la primera
página, empieza la cuestión de la MADURACIÓN. Y eso, es difícil seguir la conexión,
pero se conecta directamente con lo de la diferencia entre el hombre y los demás seres
vivos, lo de la hoja del árbol, y eso... Bien, Heller nos dice ahí lo siguiente: a diferencia
de otros seres vivos, un hombre se vuelve hombre, a través de una mediación social.
Es decir, entre el nacimiento y el hombre maduro, sucede todo el proceso de
socialización, es decir, el aprendizaje de la manipulación de objetos, y a través de los
objetos, de las normas y reglas de la sociedad en la que vivimos. Un perro ya nace
perro, un árbol nace árbol, tiene las mismas características, y su crecimiento está ya
dado biológicamente. En cambio el hombre se vuelve hombre en la medida en que
incorpora o internaliza las modos de vida y la organización social en que vive. Si
entienden eso, están preparados para entender lo que se deduce de eso: el concepto
de ser particular y ser específico. Cada hombre, al igual que cualquier ser vivo, es
único e irrepetible. Eso quiere decir que cada hombre es un SER PARTICULAR. Pero
como vimos, cada hombre se vuelve único e irrepetible en el modo en que incorpora las
formas de vida y los modos de organización social. Entonces, cada hombre es también
al mismo tiempo un SER ESPECÍFICO. Es decir, tiene en sí mismo, está formado a
partir de las formas de organización social de la ESPECIE (por eso específico). La
particularidad se refiere a que somos únicos e irrepetibles. Especificidad se refiere a
que estamos formados socialmente, a que somos seres "fabricados" en sociedad.
Paren que ejemplifico: Yo soy trabajador, doy clases. Soy docente. Eso un rol definido
socialmente, y en la tarea docente, están incorporadas las formas en que se organiza
la educación en una sociedad como la nuestra, en este mismo chat estamos
incorporando, o asimilando años y años de avances tecnológicos. Ahora bien, el modo
en que yo desarrollo esa tarea, el modo en que soy docente es único e irrepetible. (Lo
cual no quiere decir bueno)
Ontológico quiere decir relativo al ser: es lo mismo que decir que el ser, por definición,
es único e irrepetible.
Ontología: Parte de la metafísica que trata del ser en general y de sus propiedades
trascendentales.
Todos somos socializados, en una sociedad, más o menos del mismo modo. Eso es lo
que construye nuestro "ser específico". Pero el modo en que nosotros incorporamos
esa socialización es único e irrepetible. Por eso no van a encontrar dos personas que
sean iguales. Todo hombre es entonces particular y específico, al mismo tiempo
SIEMPRE el hombre, como ser social, tiene esas dos dimensiones. Ahora bien, otro
problema distinto es si todo hombre es consiente o no de que las tiene... Heller dice
que la conciencia del ser particular se nos aparece como conciencia del yo: cuando
digo, pienso, siento; yo necesito tal cosa, quiero hacer tal cosa, etc. eso es la
conciencia de que soy único e irrepetible. Y la conciencia de que soy un ser social, es
lo que se aparece como conciencia del nosotros: tendríamos que organizarnos de otra
forma, tendríamos que vivir de otra manera, etc. Ahí aparece la conciencia de que soy
un ser específico. ¿Qué es lo que ocurre? Que con las CARACTERÍSTICAS QUE
TIENEN LA ACCIÓN Y EL PENSAMIENTO PROPIO DE LA VIDA COTIDIANA (léase:
economicismo, probabilidad, juicios provisionales, etc.) en la vida cotidiana la tendencia
es que predomine la conciencia del ser particular. Ahora, el predominio de la conciencia
del ser particular puede llegar a ocultar o a impedir completamente la conciencia del ser
específico. ¿Cuando? Bueno, dice Heller, cuando las características del pensamiento y
la acción en la vida cotidiana se absolutizan o se cristalizan. Cuando el "economicismo,
la probabilidad, etc." se "endurecen" demasiado, ya no hay margen para la conciencia
del ser específico. Ahí se produce el fenómeno de la EXTRAÑACIÓN.
3) Si esas características se cristalizan sólo queda conciencia del ser particular, no soy
consiente más que de mí mismo como ser único e irrepetible.
Todos estos autores están pensado, de modo distinto, con distintos conceptos, el
mismo problema: ¿cómo pensar la relación individuo-sociedad?
En la vida cotidiana, la unidad vital (propia de la vida de los hombres) entre ser
particular y específico siempre está, pero muchas veces la relación entre esos dos ser
es no consiente, como si "no hablaran", no se "comunicaran", por eso es "muda".
Único e irrepetible no son lo mismo: único es que no hay otro igual, irrepetible es que
no sólo no hay otro igual, sino que nunca lo habrá. No son lo mismo que singular, en
Para el pensamiento griego clásico sólo superando el mundo de las necesidades, y por
ende, de la dominación y la desigualdad los hombres pueden llegar a realizarse como
individuos libres e iguales. Para el cristianismo, la vida cotidiana representa pues a la
vez el peligro de la perdición y el camino de la salvación del alma.
La vida cotidiana adquiere un nuevo sentido por cuanto representa el ámbito concreto
en que se define el modo de vida. El conflicto por definir qué y cómo es la vida
cotidiana es un aspecto por determinar en el ordenamiento de la sociedad. Presumo
que el interés por la vida cotidiana se debe a un descontento con la vida cotidiana.
También cabe vincular el interés por la vida cotidiana al descontento con las formas
habituales de hacer política.
Todo orden social distingue y jerarquiza los tiempos, estableciendo un límite entre lo
cotidiano/banal/insignificante y lo extraordinario/único/significativo. La cuestión no es si
puede hablarse de una vida cotidiana en las diferentes sociedades y en las diferentes
épocas, sino de reconstruir los ejes de la clasificación simbólica que elabora
determinada sociedad para estructurar la vida social. Aunque el significado concreto de
la vida diaria sea una definición singular vivencia de un hombre particular) ésta siempre
participa de una significación colectiva. Cada grupo social concibe su vida diaria en
referencia, tácita o explícita, a otros grupos, asimilando o modificando, aspirando o
rechazando lo que entiende por vida cotidiana de aquellos.
. Agnes Heller entiende por vida cotidiana “el conjunto de actividades que caracterizan
la reproducción de los hombres particulares, los cuales, a su vez, crean la posibilidad
de la reproducción social”. Hay que situar la vida cotidiana en el cruce de dos
relaciones. Por un lado, la relación entre procesos macro y
. La vida cotidiana se ofrece como un lugar privilegiado para estudiar, según una feliz
expresión de Sartre, lo que el hombre hace con lo que han hecho de é