Análisis de La UA 10 Orientaciones y Otros 2019
Análisis de La UA 10 Orientaciones y Otros 2019
Análisis de La UA 10 Orientaciones y Otros 2019
UNIDAD DE APRENDIZAJE
Aspectos a tomar Como se observa este aspecto en la Cómo se observa este aspecto en la
en cuenta para el Planificación Mediación
desarrollo de
competencias
Situación Cuando se describe la coherencia entre Cuando se declara el propósito de la
Significativa Competencia, capacidades, sesión de aprendizaje a fin de que el
desempeños, competencias estudiante comprenda la importancia,
transversales, enfoques transversales, a el sentido y utilidad de lo que va a
partir de las necesidades de los aprender.
estudiantes.
Propósitos de Cuando se describe el contexto, retos o Cuando entiende la dimensión de la
Aprendizaje desafíos. situación y su significatividad para
Cuando se expresa situaciones reales o plantear soluciones pertinentes y
simuladas que pueden ser problemas, sostenibles.
oportunidades, potencialidades.
Secuencias de Cuando se describen situaciones para el Cuando el estudiante se dispone, se
sesiones inicio, desarrollo y cierre de la unidad de, sitúa, se posiciona y se realiza a través
que aseguran una secuencia lógica para del desarrollo progresivo de las
el desarrollo de competencias en competencias y diferentes estrategias
coherencia con los propósitos de de aprendizaje.
aprendizaje y la situación significativa,
para obtener evidencias aceptables.
Evaluación Cuando se describe con claridad los Cuando se evidencia que los
Formativa criterios, evidencias de aprendizaje, e estudiantes son atendidos en su
instrumentos de evaluación a partir de diversidad y se apoya su aprendizaje de
una situación de evaluación o tarea manera permanente a través de la
auténtica. retroalimentación.
Cuando se consideran los errores como
oportunidades de aprendizaje.
Recursos Cuando contribuyen a alcanzar los Cuando el estudiante utiliza recursos y
propósitos de aprendizaje, considerando materiales de acuerdo a su edad y son
su significatividad lógica y psicológica pertinentes al contexto,
dentro de un contexto específico. permitiéndoles alcanzar los propósitos
de aprendizaje.
10 ORIENTACIONES PEDAGÓGICAS PARA ELABORAR
UNA SESIÓN DE APRENDIZAJE
El desarrollo de competencias plantea el desafío pedagógico de cómo enseñar para que los estudiantes
aprendan a actuar de manera competente. En ese sentido, se han definido orientaciones para aplicar el enfoque
pedagógico del Currículo Nacional de la Educación Básica, las cuales se enmarcan en las corrientes
socioconstructivistas del aprendizaje.
Estas orientaciones deben ser tomadas en cuenta por los docentes en la planificación, ejecución y
evaluación de los procesos de enseñanza y aprendizaje en los espacios educativos.
4. PARTIR DE LOS SABERES PREVIOS. Consiste en recuperar y activar, a través de preguntas o tareas, los
conocimientos, concepciones, representaciones, vivencias, creencias, emociones y habilidades adquiridos
previamente por el estudiante, con respecto a lo que se propone aprender al enfrentar la situación significativa.
Estos saberes previos no solo permiten poner al estudiante en contacto con el nuevo conocimiento, sino que
además son determinantes y se constituyen en la base del aprendizaje, pues el docente puede hacerse una idea
sobre cuánto ya sabe o domina de lo que él quiere enseñarle. El aprendizaje será más significativo cuantas más
relaciones con sentido sea capaz de establecer el estudiante entre sus saberes previos y el nuevo aprendizaje.
6. APRENDER DEL ERROR O EL ERROR CONSTRUCTIVO. El error suele ser considerado solo como
síntoma de que el proceso de aprendizaje no va bien y que el estudiante presenta deficiencias. Desde la didáctica,
en cambio, el error puede ser empleado más bien de forma constructiva, como una oportunidad de aprendizaje,
propiciando la reflexión y revisión de los diversos productos o tareas, tanto del profesor como del estudiante. El
error requiere diálogo, análisis, una revisión cuidadosa de los factores y decisiones que llevaron a él. Esta forma
de abordarlo debe ser considerada tanto en la metodología como en la interacción continua profesor-estudiante.
9. PROMOVER EL TRABAJO COOPERATIVO. Esto significa ayudar a los estudiantes a pasar del trabajo
grupal espontáneo a un trabajo en equipo, caracterizado por la cooperación, la complementariedad y la
autorregulación. Se trata de un aprendizaje vital hoy en día para el desarrollo de competencias. Desde este
enfoque, se busca que los estudiantes hagan frente a una situación retadora en la que complementen sus diversos
conocimientos, habilidades, destrezas, etc. Así el trabajo cooperativo y colaborativo les permite realizar ciertas
tareas a través de la interacción social, aprendiendo unos de otros, independientemente de las que les corresponda
realizar de manera individual.
Tutoría individual: es una forma de orientación en la cual los tutores brindan acompañamiento socio-afectivo
individualizado, lo que posibilita que los estudiantes reconozcan que cuentan con una persona que es un soporte
para ellos. El tutor planifica para su atención un tiempo y espacio dentro de la institución educativa para abordar
aspectos de índole personal que no pueden ser atendidos grupalmente o que van más allá de las necesidades de
orientación del grupo. Sin embargo, este acompañamiento puede ser de manera espontánea, a solicitud del
estudiante, preventiva o ante una necesidad inmediata. Es fundamental que los tutores realicen un
acompañamiento personalizado a todos sus estudiantes, procurando empatía, capacidad de escucha, interés y
otras características que favorezcan la construcción de vínculos afectivos con sus estudiantes. Trabajo con las
familias La labor tutorial implica trabajar de manera coordinada con las familias para realizar una labor conjunta
entre padres y madres de familia - o tutor. Esta acción contribuye a mejorar la convivencia en los diferentes
espacios de los estudiantes, así como a generar un compromiso activo de las familias en el proceso de aprendizaje
de sus hijos e hijas. Asimismo, el diálogo y trabajo permanente con la familia respecto a los avances de sus hijas
e hijos, contribuye a disminuir la probabilidad de que se generen situaciones que ponen en riesgo el desarrollo
de las y los estudiantes respecto de sus aprendizajes y, si la situación lo amerita, orientarlas con la información
correspondiente para una atención especializada.
A partir de la política pedagógica de nuestro país, expresada en el Reglamento de la Ley General de Educación,
la evaluación es un proceso permanente de comunicación y reflexión sobre los resultados de los aprendizajes de
los estudiantes. Este proceso se considera formativo, integral y continuo, y busca identificar los avances,
dificultades y logros de los estudiantes con el fin de brindarles el apoyo pedagógico que necesiten para mejorar.
Asimismo, en base al Reglamento el objeto de evaluación son las competencias del Currículo Nacional de la
Educación Básica, que se evalúan mediante criterios, niveles de logro, así como técnicas e instrumentos que
recogen información para tomar decisiones que retroalimenten al estudiante y a los propios procesos
pedagógicos. Así, la evaluación cumple un papel no solo para certificar qué sabe un estudiante, sino también
para impulsar la mejora de los resultados educativos y de la práctica docente. Este enfoque es válido para todas
las modalidades y niveles de la Educación Básica.
El Currículo Nacional de la Educación Básica brinda orientaciones generales respecto de la evaluación de los
aprendizajes, sus propósitos, sus procedimientos básicos, así como las técnicas e instrumentos que permitan
obtener información acerca del nivel de progreso de las competencias. Asimismo, establece la relación existente
entre la evaluación de aula y la evaluación nacional.
Las orientaciones más específicas se ofrecen en disposiciones normativas. ¿Qué enfoque sustenta la evaluación
de los aprendizajes? En el Currículo Nacional de la Educación Básica se plantea para la evaluación de los
aprendizajes el enfoque formativo. Desde este enfoque, la evaluación es un proceso sistemático en el que se
recoge y valora información relevante acerca del nivel de desarrollo de las competencias en cada estudiante, con
el fin de contribuir oportunamente a mejorar su aprendizaje.
Una evaluación formativa enfocada en competencias busca, en diversos tramos del proceso:
• Valorar el desempeño de los estudiantes al resolver situaciones o problemas que signifiquen retos genuinos
para ellos y que les permitan poner en juego, integrar y combinar diversas capacidades.
• Identificar el nivel actual en el que se encuentran los estudiantes respecto de las competencias con el fin
de ayudarlos a avanzar hacia niveles más altos.
• Crear oportunidades continuas para que el estudiante demuestre hasta dónde es capaz de combinar de manera
pertinente las diversas capacidades que integran una competencia, antes que verificar la adquisición aislada de
contenidos o habilidades o distinguir entre los que aprueban y no aprueban. ¿Qué se evalúa? Desde un enfoque
formativo, se evalúan las competencias, es decir, los niveles cada vez más complejos de uso pertinente y
combinado de las capacidades, tomando como referente los estándares de aprendizaje porque describen el
desarrollo de una competencia y definen qué se espera logren todos los estudiantes al finalizar un ciclo en la
Educación Básica. En ese sentido, los estándares de aprendizaje constituyen criterios precisos y comunes para
comunicar no solo si se ha alcanzado el estándar, sino para señalar cuán lejos o cerca está cada estudiante de
alcanzarlo.
A nivel de docente:
• Atender a la diversidad de necesidades de aprendizaje de los estudiantes brindando oportunidades diferenciadas
en función de los niveles alcanzados por cada uno, a fin de acortar brechas y evitar el rezago, la deserción o la
exclusión.
• Retroalimentar permanentemente la enseñanza en función de las diferentes necesidades de los estudiantes. Esto
supone modificar las prácticas de enseñanza para hacerlas más efectivas y eficientes, usar una amplia variedad
de métodos y formas de enseñar con miras al desarrollo y logro de las competencias.
La escala de calificación común a todas las modalidades y niveles de la Educación Básica es la siguiente:
• Las conclusiones descriptivas son el resultado de un juicio docente realizado basado en el desempeño
demostrado por el estudiante, en las diversas situaciones significativas planteadas por el docente. Dichas
conclusiones deben explicar el progreso del estudiante en un período determinado con respecto al nivel esperado
de la competencia (estándares de aprendizaje), señalando avances, dificultades y recomendaciones para
superarlos. En ese sentido, no son notas aisladas, ni promedios, ni frases sueltas, ni un adjetivo calificativo.
• Es importante que estas conclusiones se hagan a través de docentes con base a evidencia variada y relevante
del desempeño del estudiante recopilado durante el periodo de aprendizaje a evaluar. Este análisis debe centrarse
en los progresos del aprendizaje de cada estudiante en relación al nivel esperado.
• Basado en las conclusiones y a la calificación obtenida se elabora un informe de progreso del aprendizaje48 de
los estudiantes, dirigido a ellos y a los padres de familia. Este será entregado de manera personal (al estudiante
y a los padres de familia) con el fin de explicar con mayor detalle el nivel actual del aprendizaje del estudiante
respecto del nivel esperado de las competencias (estándares de aprendizaje). Así también debe brindar
sugerencias que contribuyan a progresar a niveles más complejos.
• La información de los informes de progreso debe servir a los docentes y directivos de la institución educativa
para decidir las mejoras de las condiciones o estrategias que permitan que los estudiantes progresen a niveles
más complejos. Esto contribuye con los compromisos de gestión escolar, asumidos por el director de la
institución educativa.
• Tanto las calificaciones como las conclusiones descriptivas son registradas en el SIAGIE. Relación entre
evaluación de aula y evaluación nacional Tanto la evaluación de aula como la evaluación nacional, sean censales
o muestrales, evalúan las competencias del Currículo Nacional de la Educación Básica tomando como referencia
a los estándares de aprendizaje. Además, tienen como propósito principal brindar información útil para la toma
de decisiones a nivel de aula, de escuela y de sistema educativo. En ese sentido, ambas evaluaciones son
complementarias, pero tienen también características distintas que deben ser tomadas en cuenta para que la
información que brindan sea usada e interpretada de manera adecuada. Veamos en la siguiente tabla estas
diferencias AD Logro destacado Cuando el estudiante evidencia un nivel superior a lo esperado respecto a la
competencia. Esto quiere decir que demuestra aprendizajes que van más allá del nivel esperado. A Logro
esperado Cuando el estudiante evidencia el nivel esperado respecto a la competencia, demostrando manejo
satisfactorio en todas las tareas propuestas y en el tiempo programado. B En proceso Cuando el estudiante está
próximo o cerca al nivel esperado respecto a la competencia, para lo cual requiere acompañamiento durante un
tiempo razonable para lograrlo. C En inicio Cuando el estudiante muestra un progreso mínimo en una
competencia de acuerdo al nivel esperado. Evidencia con frecuencia dificultades en el desarrollo de las tareas,
por lo que necesita mayor tiempo de acompañamiento e intervención del docente.
Los formatos de los instrumentos de la evaluación nacional no deben ser usados para reemplazar las
evaluaciones de aula ni preparar a los estudiantes para rendir dichas evaluaciones. Más bien, los informes de los
resultados de estas evaluaciones deben servir para la reflexión y planificación de las actividades de aprendizaje.
Finalmente es importante señalar que la evaluación de los estudiantes debe tener un carácter comprehensivo e
integral, ello quiere decir que el juicio sobre el progreso de los estudiantes será más adecuado y pertinente si se
basa en varios tipos de fuentes de evidencia recolectada en diversas situaciones a lo largo del tiempo.
En el caso de estudiantes con necesidades educativas especiales, el informe se complementa con un reporte de
las adecuaciones curriculares efectuadas. Llamadas también "evaluaciones de sistema" Evaluación de aula
Evaluación nacional Evalúa toda la competencia y, si se realiza adecuadamente, puede ser mucho más rica en la
apreciación de procesos de aprendizaje, dificultades y logros. Evalúa algunos desempeños de las competencias,
pero no puede ni pretende dar cuenta de toda la competencia. Permite hacer seguimiento al progreso individual
y la retroalimentación oportuna para producir cambios en el aprendizaje de los estudiantes y mejorar la
enseñanza. Permite reportar resultados a nivel de aula, de institución educativa, a nivel local y regional en
relación al promedio nacional (una vez y al final del año en caso de evaluaciones censales) con la finalidad de
retroalimentar al sistema educativo y definir políticas para el mejoramiento. Ofrece información a nivel de aula,
pero no un panorama de lo que ocurre a nivel del conjunto del sistema educativo. Ofrece un panorama de lo que
ocurre a nivel del conjunto del sistema educativo. Usa una diversidad de técnicas e instrumentos de evaluación
adaptables a las necesidades de los estudiantes. Utiliza por lo general instrumentos estandarizados que puedan
ser aplicados de manera masiva, por ejemplo pruebas de lápiz y papel.
Según las normas vigentes del Perú, el Currículo Nacional de la Educación Básica tiene las siguientes
características:
- Flexible, porque ofrece un margen de libertad que permite la adaptación a la diversidad de estudiantes y a las
necesidades y demandas de cada región;
- Abierto, ya que en él pueden incorporarse competencias de acuerdo al diagnóstico de las potencialidades
naturales, culturales y económico-productivas de cada región, así como sus demandas sociales y las
características específicas de los estudiantes;
- Diversificado, pues es en él cada región ofrece a las instancias locales los lineamientos de diversificación, los
cuales orientan a las instituciones educativas en la adecuación del currículo a las características y demandas
socioeconómicas, lingüísticas, geográficas y culturales de cada región mediante un trabajo colegiado.
- Integrador, porque el Perfil de egreso, competencias, capacidades, estándares de aprendizaje y áreas
curriculares conforman un sistema que promueve su implementación en las escuelas.
- Valorativo, en tanto responde al desarrollo armonioso e integral del estudiante y promueve actitudes positivas
de convivencia social, democratización de la sociedad y ejercicio responsable de la ciudadanía.
- Significativo, ya que toma en cuenta las experiencias, conocimientos previos y necesidades de los estudiantes.
- Participativo, porque lo elabora la comunidad educativa junto a otros actores de la sociedad; por tanto, está
abierto a enriquecerse permanentemente y respeta la pluralidad metodológica.
Desde este marco legal las regiones del país deben construir currículos regionales con base al Currículo Nacional
de la Educación Básica, adecuando los aprendizajes que este demanda a las características de los estudiantes, así
como a sus entornos socioculturales, lingüísticos, económicos, productivos y geográficos.
Los elementos del Currículo Nacional de la Educación Básica que son la premisa necesaria del proceso de
diversificación, se definen a continuación:
• El enfoque curricular por competencias, que aspira a formar personas capaces de actuar en su sociedad
modificando realidades y poniendo en práctica conocimientos, habilidades, valores y actitudes a fin de influir
sobre el entorno, resolver problemas y lograr metas en contextos diversos y desafiantes.
• El Perfil de egreso, entendido como la visión común e integral de lo que deben lograr todos los estudiantes
del país al término de la Educación Básica, que orienta al sistema educativo a desarrollar su potencial humano
en esa dirección, tanto en el nivel personal, social y cultural como laboral, dotándolos de las competencias
necesarias para desempeñar un papel activo y ético en la sociedad y seguir aprendiendo a lo largo de la vida.
• Las competencias, entendidas como la facultad que tiene una persona de combinar un conjunto de capacidades
de un modo específico y con sentido ético, a fin de lograr un propósito en una situación determinada. Las
competencias son dinámicas, es decir, se desarrollan a lo largo de toda la vida en niveles progresivamente más
complejos.
• Los estándares de aprendizaje son descripciones del desarrollo de la competencia en niveles de creciente
complejidad desde el inicio hasta el fin de la Educación Básica, que definen niveles de logro esperado al final
de cada ciclo escolar.
CONSIDERACIONES PARA LA DIVERSIFICACIÓN DEL CURRÍCULO NACIONAL DE LA
EDUCACIÓN BÁSICA A NIVEL REGIONAL:
A. Incluir necesariamente las competencias del Currículo Nacional de la Educación Básica para garantizar que
el estudiante logre los aprendizajes esperados del Perfil de egreso de la Educación Básica.
B. Contextualizar las competencias, es decir, aportar información pertinente sobre la realidad regional con base
a estudios previos, según las características de los estudiantes y de sus entornos geográficos, económicos y
socioculturales en cada realidad regional y local.
C. Incluir cuando sea necesario nuevas competencias pertinentes a las características específicas, necesidades y
demandas de los estudiantes, en función de sus entornos socioculturales, lingüísticos, económico - productivos
y geográficos, considerando los siguiente criterios:
• Responder a necesidades y demandas de los estudiantes de una región a las que el Currículo Nacional de la
Educación Básica no responda.
• Basarse en el enfoque por competencias del Currículo Nacional de la Educación Básica.
• Articularse al Perfil de egreso de la Educación Básica
Construir estándares de aprendizajes que permitan evaluar la competencia y describir desempeños por grado
D. Evidenciar el respeto a la diversidad y a la persona con discapacidad, talento y superdotación, considerando
lineamientos generales sobre la inclusión, la interculturalidad y el bilingüismo. Art. 28.° del Reglamento de la
Ley General de Educación.
En síntesis, el Currículo Regional se construye a partir del Currículo Nacional de la Educación Básica
tomando como premisas los elementos que lo sustentan pedagógicamente (enfoque por competencias, Perfil de
egreso, competencias, estándares de aprendizaje nacionales), contextualizando los aprendizajes o incorporando
aquellos que se consideren pertinentes con las características de sus estudiantes, en relación a sus contextos
socioculturales, lingüísticos, económicos, productivos y geográficos propios a cada región.
Para ello es necesario conformar un equipo curricular regional integrado por profesionales con los conocimientos
curriculares requeridos, que representen a los niveles y modalidades educativas. Este equipo es responsable de
la construcción curricular y, en términos generales51 , debe seguir las siguientes pautas:
1. Elaborar un plan de trabajo.
2. Formular un diagnóstico que recoja y actualice los estudios realizados sobre las potencialidades, demandas
del contexto y desafíos de la región, las demandas que de allí se desprenden para la educación y las características
e intereses de los estudiantes.
3. Incorporar el diagnóstico de las poblaciones educativas que requieren de una Educación Intercultural Bilingüe
en base a la normativa vigente.
4. Incorporar el diagnóstico de las poblaciones educativas con discapacidad, talento y superdotación, en
seguimiento de las políticas nacionales de inclusión educativa.
5. Incorporar y actualizar las recomendaciones del Proyecto Educativo Regional, así como las evaluaciones
nacionales y regionales del desempeño de los estudiantes.
6. Identificar, a partir los puntos anteriores, las competencias y capacidades del Currículo Nacional de la
Educación Básica que se esperan diversificar.
7. Elaborar un plan de consultas y espacios participativos, involucrando a los Consejos Participativos Regionales
y las instancias públicas y privadas de la región. Para la aprobación del currículo regional se requiere:
• Preparar una versión preliminar que permita la revisión por parte del Ministerio de Educación.
• Contar con la opinión favorable del Ministerio de Educación. Este conjunto de orientaciones y criterios se
desarrollan y precisan en una norma específica. La metodología de determinados procesos clave aquí
mencionados es objeto de una guía de diversificación curricular. Las instituciones educativas EIB utilizarán las
orientaciones pedagógicas establecidas en el Marco de modelo de servicio EIB y sus formas de atención que
responden a los diferentes escenarios sociolingüísticos identificados.
Las regiones que cuentan con currículos regionales o proyectos curriculares de la región, construidos o en
proceso de elaboración, de acuerdo al Reglamento de la Ley General de Educación deben actualizarlos en
relación a los ajustes realizados al Currículo Nacional de la Educación Básica. Luego de lo cual, deben solicitar
la opinión favorable del Ministerio de Educación. No obstante, en aquellas regiones donde en un tiempo
relativamente corto se han producido tendencias o cambios significativos a nivel social, económico, financiero,
demográfico, cultural, entre otros, que tienen la capacidad de limitar o por el contrario abrir nuevas
oportunidades en la región, deben realizar una actualización del Currículo Regional que responda a esas
demandas o necesidades de la región.