TEOLOGIA DEL

DIACONADO
PERMANENTE

EL DIACONADO PERMANENTE EN LA ARQUIDIOCESIS DE MEXICO

 Diaconado: Misterio de Comunión Trinitaria
en tensión misionera. (RFIDP n. 4)

El diácono es, en la Iglesia, signo sacramental

específico de Cristo Siervo.

Es intérprete de las necesidades

de las comunidades cristianas

Es animador del servicio, es decir, de la diakonía,

como parte de la misión de la Iglesia.

El ministerio del diácono, aunque diferente

esencialmente del sacerdotal y del episcopal,
es junto a estos, una expresión de la
apostolicidad de la Iglesia.

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 ALGUNAS INTERROGANTES

Si hubiera suficientes sacerdotes...

¿Se necesitarían diáconos permanentes?
Si los sacerdotes no son ordenados
por la escasez de obispos,
los diáconos no son ordenados por la falta de presbíteros

Si muchos ministerios ya las ejercen los laicos...

¿No significa el D.P. un desplazamiento de los laicos
y un freno a su compromiso eclesial?
Si el diácono es fiel a sus funciones,
alimentará la fe de los bautizados que, a su vez,
florecerá en disponibilidad para los ministerios laicales y
para el compromiso pastoral

EL DIACONADO PERMANENTE EN LA ARQUIDIOCESIS DE MEXICO

¿No será que más que diaconado, como institución, la Iglesia
requiere diakonía de parte de los agentes de pastoral, sean
obispos, presbíteros o laicos?
El carisma del diácono,
es ser signo sacramental de Cristo Siervo,
tiene gran eficacia para la realización de una Iglesia servidora
y pobre que ejerce su función misionera
en orden a la liberación integral del hombre

El ser casado ¿no siembra dudas en las comunidades

respecto al celibato o a la santidad del ministro?
“El matrimonio tiene para con el ministerio del diácono,
una afinidad interior más grande que el celibato,
ya que el diácono permanente es,
en su función ministerial específica,
el miembro de ligadura entre el clero y el altar,
por un lado, y el mundo
con su tarea cristiana por otro.” (K. Rahner)
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 EL LUGAR DEL DIACONO
EN LA IGLESIA
El Diácono está en el grado inferior de la jerarquía,
de forma propia y permanente. (LG 29)

Su lugar y su ministerio no hay que buscarlo

en las funciones que realiza...

Su misión y función no se han de medir

por criterios pragmáticos,
ni como solución a la escasez de presbíteros...

El ser y quehacer del diácono

no es el de un suplente del presbítero,
o un presbítero de segunda,
o un laico con estola...

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 El verdadero servicio del diácono
es hacerse siervo de todos

Su ministerio no encuentra su fuente

en el deseo de ser útil a otros, sino que,
se enraíza en la caridad que viene de lo Alto

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 ENTONCES EL DIACONADO...
•No es premio o recompensa para laicos
•No es elección o gusto personal
•No es conquista propia
•No es circunstancial ni ocasional
•No es „en lugar de‟
•No es protagonismo
Es el don de la vocación que conlleva
el carisma necesario para cumplir la misión de ser testimonio
de Cristo Cabeza y Servidor, que por la ordenación imprime
carácter.
El diácono es imprescindible por lo que
ES COMO IGLESIA y no por lo que hace en ella.
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LA DOBLE
SACRAMENTALIDA
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 Tanto el diaconado, como el matrimonio,
son vocaciones que dependen de Dios.

Desde la Eternidad, Dios llama a algunos hombres

a vivir esta doble sacramentalidad.

Por su ser, el casado diácono

busca la santificación en su familia, en su trabajo,
en la educación, en la economía, etc.

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 EL DIACONO Y LA FAMILIA

El casado, ordenado diácono, lo es desde

el matrimonio y no a pesar, ni mucho menos,
en contra del matrimonio.

La esposa del diácono, también debe alimentar

los mismos sentimientos y progresivamente
participar del proceso de formación.

Es en su matrimonio, su hogar y familia,

donde principia su testimonio.

Antes unidos por el amor,

hoy unidos también por la diaconía.
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 El diaconado es un don de Dios,
una nueva dimensión cristiana
de la vida conyugal y familiar.

La gracia envuelve también a la esposa

y la hace partícipe de la diaconía.

La familia cristiana es llamada a santificarse

y a santificar a la comunidad eclesial y al mundo.

La familia del diácono deberá descubrir,

en conjunto, el don de Dios a ella confiado,
a través de la gracia sacramental del diaconado.

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El diaconado significa una nueva postura cristiana
de la familia frente a la cual los hijos
no pueden ser insensibles.

El diácono deberá mantener el equilibrio

entre los compromisos familiares y sociales
y las actividades pastorales,
para que la familia no se sienta marginada
y perjudicada en su estabilidad.

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 SITUACION
EN LA
ARQUIDIOCESIS
DE MEXICO
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 En el 2002 contamos con:

•76 Diáconos Permanentes en 10 generaciones

•34 candidatos en 4 generaciones

•36 aspirantes en el curso propedéutico

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 Los diáconos están distribuidos:

POR VICARIAS EN LA ARQUIDIOCESIS DE MEXICO

SNBG - 5 I - 10
VIII - 5

VII - 7 II - 6

III - 6

IV - 8
VI - 21
V -3

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 Los diáconos están distribuidos:

PROFESIONES PREDOMINANTES DE LOS DIACONOS

Contador

Ingeniero

Maestro

Otras
Derecho
Medicina

No profesionistas: Técnicos, impresores, ventas,

aux. administrativo, comerciantes y jubilados

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 Del total de diáconos permanentes:

10 tienen cargos arquidiocesanos.

5 tienen cargos vicariales.

3 están al frente de una capilla.

21 ejercen su ministerio
de tiempo completo.
La gran mayoría trabaja en sus parroquias.

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 Promedio de edades de los D.P. (2002)
al tiempo de la ordenación y actualmente:

80

70

60

50

40

30

20

10

0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14
Actual 69 58 60 61 66 55 62 52 45 50 54 52 49 52
Orden 55 47 50 53 60 50 58 49 43 49
A–os 14 11 10 8 6 5 4 3 2 1

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 LA REALIDAD INDICA
UN MINISTERIO MAL EJERCIDO:
EN LA CARIDAD:
Poco sensibles a las necesidades de su comunidad.
Poco involucrados en el trabajo social de la Iglesia
y con los organismos arquidiocesanos de caridad.
Descuidan la caridad en el seno de su familia.
Buscan ser servidos en vez de servir.
EN LA PALABRA:
No saben proclamar o explicar la Palabra.
No participan en la Evangelización de su comunidad.
Se ausentan de la formación permanente.
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 EN LA LITURGIA:

No conocen ni viven adecuadamente

su participación en la celebración.
Poco saben de liturgia.
Celebran con complejo de inferioridad.
Confunden al pueblo por la forma de celebrar.
Desacralizan lo sagrado.
“Especialistas” en un solo sacramento
o sacramental.

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 LOS DIACONOS RECONOCEN...
SUS LIMITACIONES:
Desconocimiento de las necesidades de los demás.
Incoherencia entre el ministerio y su ejercicio.
Pecados de omisión, egoísmo, y falta de amor.
Materialismo, deseo de poder.
SUS RETOS ANTE LA IGLESIA:
Rechazo y devaluación de su actividad
por parte de algunos presbíteros.
Soberbia e ignorancia de laicos que no aceptan
la doble sacramentalidad.
Indiferencia por parte del pueblo que no conoce
una Iglesia Ministerial.
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 EL PROCESO
DE FORMACION
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 ETAPAS DE FORMACION
FORMACION
PERMANENTE
SEGUIMIENTO
(1 año)

CANDIDATADO
Formación en las
4 áreas
(4 años)
PROPEDEUTICO
Discernimiento
Vocacional
(1 año)

ORDENACION

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 AREAS DE FORMACION

HUMANA ACADEMICA

ESPIRITUAL PASTORAL

FAMILIAR (ESPOSAS)
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 DIMENSIONES DE LA FORMACION
Y VIDA DESDE LA PARROQUIA

Generosidad y Visión Plan

Disponibilidad Pastoral Pastoral
del Diácono del y
Párroco Comunidad

Diaconía de la Diaconía de la Diaconía de la

Palabra Liturgia Caridad

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 ETAPAS DE FORMACION

Propedˇutico I II III IV
Es piritualidad Familia Palabra Liturgia Caridad
(P. Miguel)
Parroquia de Parroquia de Parroquia Nueva Nueva Posible
apostolado origen de origen parroqui a parroqui a Ministerio
(P. Francisco)
Apostolado Pastoral Pastoral Procesos de Hospitales Caritas
espec’fico parroqui al en Familiar Evang elización y Cárceles
(Maraboto) general
Es posas
(esposas)
Materias CETA Curricula de materias
(Tame)

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 AGENTES DE LA FORMACION
ARZOBISPO DE MEXICO
Emmo. Sr. Norberto Rivera Carrera

VICARIO GENERAL DE AGENTES DE PASTORAL

Mons. Enrique Glennie Graue

SECRETARIO PARA EL MINISTERIO ORDENADO

Mons. Sergio Román y Pbro. Jorge Estrada

ENCARGADO DE FORMACION Y MINISTERIO DE DIACONOS PERMANENTES

Pbro. Francisco R. Espinosa Estrada

ENCARGADO DE LA DIR. ESPIRITUAL ENCARGADO DEL CURSO PROPEDEUTICO

Pbro. Miguel A. Saloma Robles Pbro. Juan Fernando Martínez

PREFECTOS DE GRUPOS TUTORES GENERALES DE AREA

LITURGIA Y ESPIRITUALIDAD
PARROCOS PROMOCION HUMANA, VOC. Y PASTORAL
ACADEMICA
ECONOMIA

ASPIRANTES Y CANDIDATOS AL DIACONADO PERMANENTE

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 REQUISITOS PARA ASPIRAR AL D.P.
Solteros: Obligados a la promesa celibataria;
mínimo 25 años de edad.
Casados: Al menos 12 años de matrimonio;
edad mínima de 35 y máxima de 56;
hijos no menores de cinco años.
Las esposas deberán manifestar su consentimiento,
compromiso y disponibilidad propia para la formación
y colaboración en el ministerio.
No puede ser ordenado quien se encuentre
en el camino del descuido de sus responsabilidades
y deberes conyugales.
Viudos: Hayan provisto o demuestren estar
en condiciones de proveer adecuadamente
del cuidado humano y cristiano de sus hijos.
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 Recta intención, libertad y responsabilidad

Buena salud física y psíquica

Buena fama, costumbres intachables y virtudes probadas

Estudios mínimos de preparatoria

Con desarrollo de vida espiritual activa

Desempeño actual de algún apostolado

Disponibilidad de tiempo suficiente para su formación

académica, espiritual y apostólica

Con solvencia económica comprobable

para no depender del ejercicio de su ministerio
como medio de subsistencia
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DESAFIOS

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 FALTA MUCHO POR LOGRAR

“Queremos reconocer a nuestros diáconos

más por lo que son que por lo que hacen” (DNDP 11)

“Queremos ayudar a los diáconos casados

para que sean fieles a su doble sacramentalidad
y para que sus esposas e hijos vivan
y participen con ellos en la diaconia” (DNDP 11)

Queremos acompañar a nuestros diáconos en el

discernimiento para que logren una formación inicial
y permanente adecuada a su condición

PERO... SOLOS NO PODEMOS

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 LA IMPORTANCIA DEL PARROCO

La formación del diácono incluye a toda la Iglesia

Las personas que, bajo la dependencia del obispo…

tienen una responsabilidad especial
en la formación de los candidatos al diaconado permanente
son: el director para la formación,
el tutor, el director espiritual y el párroco (NB 20)

La misión del párroco es

“...ofrecer a quien le ha sido confiado,
una viva comunión ministerial,
e iniciarlo y acompañarlo en las actividades
pastorales que juzgue idóneas para él...” (NB 24)

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 El párroco “...se preocupará de analizar
periódicamente el trabajo realizado
con el candidato, y de informar
sobre el desarrollo de su práctica pastoral
al director para la formación” (NB 24)

El discernimiento de la Iglesia
es decisivo para la ratificación de la vocación

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 EN SUMA: FALTA MUCHO POR HACER
Se requiere profundizar en la
Teología del Diaconado para situar su
especificidad en el contexto de la
comunidad eclesial y en particular en la relación del diácono
con el obispo, los presbíteros y los laicos

Esta profundización contribuirá a

evitar los errores que llevaron a su decadencia
y a ordenar diáconos sólo
para suplir la falta de presbíteros

Es necesaria una prudente selección de candidatos

y ayudar a los diáconos a manifestar su
doble sacramentalidad de una manera integral,
buscando el equilibrio entre la
familia, el ministerio y la profesión
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