Ética Como Disciplina Filosofíca
Ética Como Disciplina Filosofíca
Ética Como Disciplina Filosofíca
La palabra ética deriva de ethos que significa costumbre cuya expresión en latín
esmos, y en plural, mores. De este último vocablo derivan las palabras moral y
moralidad. Así, desde el punto de vista etimológico, la ética consiste en el estudio
de las costumbres humanas.
CONCEPTO DE ÉTICA
Rama de la filosofía encargada de reflexionar sobre el sentido de la existencia
humana y de su actuar y DEBER en relación consigo mismo y con los demás
teniendo como punto de partida criterios sobre lo bueno y lo malo, de la virtud y
de la felicidad, así como nociones sobre la libertad y la voluntad. La ética puede
ser una disciplina reflexiva, descriptiva y, a veces prescriptiva (véase deontología),
que se encarga o bien de sacar a la luz lo que una cultura concibe como bueno y
malo, o bien de alcanzar por medio del raciocinio nociones de justicia y de lo
bueno para que los hombres puedan actuar en consecuencia; el “deber ser”.
Definición Etimológica
La palabra ética proviene del griego ethikós ἠθικός, y es un problema de la
existencia humana que se ha abordado teóricamente por la filosofía desde la
antigüedad hasta el presente. Cada época del pensamiento tiene paradigmas
éticos, así como contiene posiciones distintas ( por ejemplo, la de Platón
contrasta con la de Aristóteles) No existe un acuerdo unánime sobre «el deber ser
del hombre», de hecho, con Nietzsche se llegó a cuestionar la existencia de lo
bueno o lo malo como una entidad metafísica (existente per se) y con Freud se
puso en entre dicho la existencia de una libertad tal y como la concebimos.
Entonces la ética será la teoría explicativa de la moral. Como no existe una moral
universalmente aceptada, será la ética quien compare y explique los diferentes
factores sociales o religiosos que dieron lugar a distintos sistemas morales.
Podemos decir que la ética será una teoría objetiva de la moral, mientras que ésta
será un sistema subjetivo de normas. Se dice que la moral es subjetiva, por cuanto
su validez depende de la aceptación que un sujeto haga de ella. Su validez será un
problema de creencia.
Mientras que la moral tiene una base social, normas establecidas en el seno de
una sociedad, la ética surge como tal en la interioridad de una persona, como
resultado de su propia reflexión y su propia elección. Aunque la ética puede
coincidir en su contenido con la moral es decir las normas morales recibidas en la
educación, también puede la ética ofrecer una fuerte diferencia en alguna de sus
normas, creando así una serie de conflictos internos en la mentalidad de una
persona.
Es por esta razón se puede decir que la ética es una teoría de la moral, ya que se
encarga de reflexionar en los problemas y conductas morales que realizan las
personas dentro de una sociedad determinada, desde un punto de vista reflexivo
y no con la intención de realizar un juicio de las acciones realizadas, ni tampoco
para crear reglas que rijan la conducta de las personas en la sociedad.
De tal manera que el carácter teórico nos indica cómo debemos formar y procesar
los pensamientos de la ética, además de cómo deben ser los comportamientos las
formas, sin embargo en el momento de la práctica es la realidad del
comportamiento y el carácter más importante.
Normativizo Ético
Ensayo
El Origen de la Ética como disciplina filosófica. EN LA ÉPOCA HOMÉRICA. La Ética
nació como disciplina filosófica con la reflexión de los sofistas en los siglos V y VI
A.C., en Grecia. Pero para comprender las condiciones de su surgimiento,
debemos remontarnos al estudio de los juicios de su valor de tiempos anteriores .
La etimología es esa ciencia que estudia los origines de la palabra. La palabra
ética tiene dos componentes la primera que es "ethos" la cual es de origen griego
y hace relación a como se hacen las cosas, todos los comportamientos.
Una manera fácil de recordar la diferencia entre moral y ética es que la moral se
aplica a un grupo, como aquellas costumbres que se deben obedecer para el buen
actuar, mientras que la ética proviene de la reflexión del individuo sobre cuáles
acciones son morales y cuáles no.