Ciclónicas N°12-Nohelia Menjivar
Ciclónicas N°12-Nohelia Menjivar
Ciclónicas N°12-Nohelia Menjivar
Ciclónicas
Encuentro de escritoras hondureñas
P O E S Í A
Nohelia Menjivar
(Tegucigalpa, Honduras. 2000). Poeta. Encargada de proyectos de
autogestión, pasante universitaria de la licenciatura en letras en la
Universidad Nacional Autónoma de Honduras.
Ciclónicas
Encuentro de escritoras hondureñas
P O E S Í A
Ciclónicas N°12.
(poesía)
CICLÓNICAS:
Encuentro de escritoras hondureñas
Primera edición
septiembre 2020
© de los poemas: Nohelia Menjivar
Edición bajo el cuidado de Armando Maldonado
Corrección de textos: Iveth Vega
Publicado por Ediciones MALPASO, propiedad
de Inversiones Culturales Honduras: ICH.
Tegucigalpa, MDC. Honduras.
Septiembre de 2020
Esta breve publicación es de libre circulación, no se permite su
comercialización. Se permite citar los textos para fines académicos, de
investigación o de enseñanza, siempre y cuando se den los créditos de
autoría y de la casa editora.
Un abanico de viento golpea el rostro
vuelan bofetadas de odio y de palabras afiladas.
El individuo da vida y la destruye.
La divida esencia es profanada por aquellos seres sumergidos en la ira.
Llueve benevolencia pero deciden abrir los paraguas.
Se vive en guerra con los pensamientos y se ataca al ciudadano,
se imparte paz, se obtiene lucha.
Duele más el concreto quemado que el alma dañada.
Las lenguas que desechan veneno en la cabeza de los ingenuos reciben
elogios y aquel que alza la verdad, un disparo.
-5-
Suenan las metrallas
-6-
Orquídeas
-7-
En mi ciudad el cielo es una ilusión
Los pájaros ya no arrullan las mañanas.
Huyen despavoridos.
La basura se volvió sagrada.
Las flores son de humo.
La niebla dirige la vida.
Y la vida es la maleza
en llamas hundida en este fagal autoritario.
-8-
En los barrios las almas cuelgan de los alambres
La fragilidad del cerebro conduce al infortunio.
Se acumula el hastío.
Las armas se vuelven atractivas,
los corazones ebúrneos.
El tiempo una cinta de ficción y de sonrisas efímeras con la esperanza
congelada de aquellos que aún no la pierden.
En los barrios trasciende un monólogo de vida en el que gobiernan las
mismas respuestas y melodías.
Evades el desastre.
La inspiración llega y el arte convierte el asfalto en Edén.
-9-
Hay quienes les aterra la realidad
Comen el pan de indiferencia,
devoran su ansiedad,
reparten sonrisas de odio.
Las lecciones vienen en bandada.
Se cierran las persianas.
El corazón amortajado.
Hay quienes les aterra la realidad.
Se condenan al silencio.
Se hunden en trastornos con el trauma en el pecho.
Realidad lluvia de navajas que inserta temor en cada corte.
Permanece inerte contemplando;
cada grito
cada lágrima
y cada muerte.
-10-
En mi habitación he aprendido de armas
He aprendido que a falta de conciencia la vida se ahorca.
He aprendido a escuchar y callar.
Los felinos rondan y descuartizan a los que gritan.
La esencia se arruga de esnifar desgracia.
He aprendido que en un hálito se marchita la importancia de los problemas,
no se busca solución, se huye de ella.
Las persianas son vigilantes cuando la autoridad descansa sobre sus culpas.
He aprendido que la sangre no es más que líquido
y que el amor
no nace, se crea.
Aprendo
y temo que este concreto no sea lo suficiente para protegerme de las balas.
-11-
Tu piel deslumbra mi reflejo
Tu contorno se hunde en este mar de carne maciza.
Tus labios son sutileza que arrompan mi alegría,
tu fragancia pedestal de mi cuello que almacena los momentos en
este vacío oscuro y descompuesto en donde el amor se volvió un
sacrilegio.
-12-
Muhammad y Joe
aquella noche del 75
-13-
Aborde del místico
-14-
Óbito de un amigo
En memoria
a Jonatan Loaisiga
-15-
Nacimiento de una poeta
Soy fruto del asfalto quebrantado,
envuelta en esencia de cigarro y aguardiente.
Sobresalí en la tierra; piel maciza y líneas que conforman la belleza.
Un instrumento prodigioso me fue otorgado.
Senos portadores de alimento,
curvas carmesí en mi rostro.
Manos, piernas y poemas.
Soy luz en lo más recóndito de Tegucigalpa
me extiendo en el aire
convertida en poesía.
-16-
Cariño, tú también eres poesía
Tu piel emprende al templo árido de caricias.
Como navegante deambulas en mi océano,
océano que espera tus turbulencias.
Vibración emerge por el rose de nuestras
narices al escudriñar el rostro;
almacén de tus besos.
En el silencio surgió el suave crecimiento de mi fe
por tu especie de diversas sinfonías
ser divino y exclusivo.
Brillas como los versos
dejando atónita
el alma, la vida.
-17-
Mi memoria persiste en renombrar tu mirada
que a través de las constelaciones arrulla mis noches
y me hunde en un mar de pensamientos por un amor que no merezco o no
/me merece.
Envuelta en lazos de engaño mi memoria persiste en renombrar tu mirada,
dulce como las falacias que atraviesan tus labios
y seducen mi espíritu de tal forma que anulan todos los males.
Mi memoria persiste y persiste en renombrar tu mirada.
No la deja, la venera
como el desahuciado a la brisa que trae paz,
cual colibrí a la flor,
como mis labios a tus labios.
-18-
Índice
5 Un abanico de viento golpea el rostro
7 Orquídeas
15 Óbito de un amigo
Ciclónicas
Encuentro de escritoras hondureñas
P O E S Í A